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_______ fi»rf!?fj_:>---e------ Tomás Morales Pasión por los diablos rojos del México Diablos Rojos del México S.A. De C.V., México, 2003, 240 págs. F. García Marañón Gracias a que la industria editorial de este país poco fomento ha dado a la bibliografía deportiva, los libros sobre la materia tienen que ser editados por otros organismos. Tal es el caso de la publicación conmemorativa de los campeonatos del club de béisbol Diablos Rojos del México. Prologado por el cadueño del equipo, Alfredo Harp Helú, Pasión por los Diablos Ro;os del México no circula en todas las librerías. Con un tiro de 3 mil ejemplares, esta obra diseñada por Bernardo Recamier resulta un reto fácil de aceptar, aunque el razonamiento obligado pueda ser contundente: si en este país al béisbol nadie lo pela, menos van a pelar un librito con fotos y números inentendibles. Sin embargo, el hecho de que la pelota no sea mayormente difundida en los medios no quiere decir que carezca de afición. Es probable que un libro con porcentajes de bateo o pitcheo, envuelto en la trama numérica del juego, exprese poco al lector convencional. De qué podrá servir a la cultura general saber que Arana tuvo un récord de carreras limpias de 2.60 en la temporada del '68 o que Becerril Fernández bateó 11 triples en 1963. Este libro no está dirigido al lector convencional, sino a los aficionados al béisbol que son más de tres mil. A quienes gustan del alguna vez llamado con certeza rey de los deportes, Pasión por los diablos ro;os significará un suculento testimonio gráfico, el cual supera con creces lo expuesto en letras porque, simplemente, revisar la foto del 18 Príncipe de Belén estrechando la mano sin muñeca del legendario Panchillo Ramírez, tras haber conquistado el campeonato del' 56, aventaja cualquier decir. Trece capítulos dividen el libro, cada uno reseña un campeonato escarlata. Ahí se encuentran los héroes de cada temporada, desde Perry y Ramírez, hasta Kelly, Félix José y el Metralleta. Si bien aparecen todos, a algunos grandes de los años setenta se sigue señalando a causa de la Anabe, el movimiento que sacudió a la pelota mexicana hace más de 20 años. Resulta increíble que después de tanto tiempo, las cicatrices sigan abiertas y el odio hacia emblemáticos diablos como René Chávez o Ramón Hernández, el famoso abulón, se reflejen en una simple y llana foto por cabeza. Por supuesto que el que organiza la fiesta decide a quién invitar. Otro desliz notorio en Pasión por los diablos tiene que ver con su estructura: al recabar únicamente los campeonatos conquistados, quedan ausentes grandes peloteros, desde el nacimiento del club hasta 1956; apenas una foto al final del trabajo o dolorosas omisiones sobre los grandes Raymond Mamerto Dandrigde, Tomás de la Cruz, Theolic Smith, La Tuza Ramírez, el Gua;iro de Camagüey Roberto Ortiz o el mismo Basilio Bru;o Rosel a quien se debe, nada menos, que el patronímico -estos rojos juegan como diablos- después de un rally temerario. Sin embargo, a pesar de las minucias que puedan detectarse, Pasión por los diablos demuestra que la pelota en México, abrumada y todo por la maquinaria futbolística, aún con asignaturas pendientes -como dejarle al pasado lo que le pertenece- y cargando a cuestas el estigma del Distrito Federal como plaza ingrata, mantiene los pabilos al rojo vivo en espera de nuevos fanáticos que encuentren el sabor y la esencia de poner a trabajar la inteligencia deportiva, antes que dejarse llevar por las redes de lo superfluo. Qué tan grande será el béisbol que abre los brazos sin rencores y con calidez incluso a sus conversos.• Alain Finkielkraut Una voz viene de la otra orilla trad., Valeria Castelló-Joubert, Paidós (Espacios del saber, núm. 28), Buenos Aires, Argentina, 2002, 128 págs. Isaac García Venegas Nuestro presente es cuna del olvido. Su suceder sin perspectiva necesariamente obliga a sucumbir ante la inercia. Tanto más cuanto que el desarrollo de los medios de comunicación han sustituido el comentario y la descripción por el testimonio del acontecer. Allí está la realidad al alcance de todos: basta con ver y escuchar para saber. Tal es la proclama de la mediación enmascarada que demanda lo actual. Si en algo hay igualdad es en este olvido hipnótico: en el cesto de la basura quedan las historias y las genealogías del presente. Que cada quien viva en su suceder, sin mayor contexto que la igualdad abstracta -dado que se gesta en el vacío- que ofrece el discurso democrático imperante. Mientras tanto que los muertos mueran una vez más por sordera de los vivos. Precisamente por lo anterior la memoria -la voz que viene de la otra orilla del Aqueronte- es hoy más que nunca un deber. "Los muertos oran -afirma Finkielkraut-, hay que responderles: deber de la memoria es el nombre hoy dado a esta extravagante conminación". De eso se trata, de responderles. Pareciera sencillo, mas no lo es. No lo es

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_______,~.~;-.fi»rf!?fj_:>---e------Tomás Morales

Pasión por los diablosrojos del MéxicoDiablos Rojos del México S.A. De C.V.,

México, 2003, 240 págs.

F. García MarañónGracias a que la industria editorial deeste país poco fomento ha dado a labibliografía deportiva, los libros sobrela materia tienen que ser editados porotros organismos. Tal es el caso de lapublicación conmemorativade los campeonatos del club debéisbol Diablos Rojos del México.

Prologado por el cadueño delequipo, Alfredo Harp Helú, Pasión

por los Diablos Ro;os del México nocircula en todas las librerías. Conun tiro de 3 mil ejemplares, esta obradiseñada por Bernardo Recamierresulta un reto fácil de aceptar,aunque el razonamiento obligadopueda ser contundente: si en este paísal béisbol nadie lo pela, menos van apelar un librito con fotos y númerosinentendibles. Sin embargo, el hecho deque la pelota no sea mayormentedifundida en los medios no quieredecir que carezca de afición.

Es probable que un libro conporcentajes de bateo o pitcheo,envuelto en la trama numérica deljuego, exprese poco al lectorconvencional. De qué podrá servir ala cultura general saber que Aranatuvo un récord de carreras limpias de2.60 en la temporada del '68 o queBecerril Fernández bateó 11 triples en1963. Este libro no está dirigido allector convencional, sino a los

aficionados al béisbol que son más detres mil.

A quienes gustan del alguna vezllamado con certeza rey de los

deportes, Pasión por los diablos ro;os

significará un suculento testimoniográfico, el cual supera con creces loexpuesto en letras porque,simplemente, revisar la foto del

18 Príncipe de Belén estrechando la

mano sin muñeca del legendarioPanchillo Ramírez, tras haberconquistado el campeonato del'56,aventaja cualquier decir.

Trece capítulos dividen el libro,cada uno reseña un campeonatoescarlata. Ahí se encuentran loshéroes de cada temporada, desdePerry y Ramírez, hasta Kelly, Félix

José y el Metralleta. Si bien aparecentodos, a algunos grandes de los añossetenta se sigue señalando a causa dela Anabe, el movimiento que sacudióa la pelota mexicana hace más de 20años. Resulta increíble que despuésde tanto tiempo, las cicatrices siganabiertas y el odio hacia emblemáticosdiablos como René Chávez o RamónHernández, el famoso abulón, sereflejen en una simple y llana fotopor cabeza. Por supuesto que el queorganiza la fiesta decide a quiéninvitar.

Otro desliz notorio en Pasión por

los diablos tiene que ver con suestructura: al recabar únicamente loscampeonatos conquistados, quedanausentes grandes peloteros, desde elnacimiento del club hasta 1956;apenas una foto al final del trabajo odolorosas omisiones sobre losgrandes Raymond Mamerto

Dandrigde, Tomás de la Cruz,Theolic Smith, La Tuza Ramírez, elGua;iro de Camagüey Roberto Ortizo el mismo Basilio Bru;o Rosel aquien se debe, nada menos, que elpatronímico -estos rojos juegan comodiablos- después de un rally

temerario.Sin embargo, a pesar de las

minucias que puedan detectarse,Pasión por los diablos demuestra que

la pelota en México, abrumada ytodo por la maquinaria futbolística,

aún con asignaturas pendientes-como dejarle al pasado lo quele pertenece- y cargando a cuestas elestigma del Distrito Federal comoplaza ingrata, mantiene los pabilos al

rojo vivo en espera de nuevosfanáticos que encuentren el sabor y laesencia de poner a trabajar lainteligencia deportiva, antes quedejarse llevar por las redes de losuperfluo. Qué tan grande será elbéisbol que abre los brazos sinrencores y con calidez incluso a susconversos.•

Alain Finkielkraut

Una voz vienede la otra orillatrad., Valeria Castelló-Joubert, Paidós

(Espacios del saber, núm. 28), Buenos

Aires, Argentina, 2002, 128 págs.

Isaac García VenegasNuestro presente es cuna del olvido.Su suceder sin perspectivanecesariamente obliga a sucumbirante la inercia. Tanto más cuanto queel desarrollo de los medios decomunicación han sustituidoel comentario y la descripción por eltestimonio del acontecer. Allí está larealidad al alcance de todos: bastacon ver y escuchar para saber. Tal esla proclama de la mediaciónenmascarada que demanda lo actual.Si en algo hay igualdad es en esteolvido hipnótico: en el cesto dela basura quedan las historias y lasgenealogías del presente. Que cadaquien viva en su suceder, sin mayorcontexto que la igualdad abstracta-dado que se gesta en el vacío- queofrece el discurso democráticoimperante. Mientras tanto que losmuertos mueran una vez más porsordera de los vivos.

Precisamente por lo anteriorla memoria -la voz que viene de la otraorilla del Aqueronte- es hoy más quenunca un deber. "Los muertos oran-afirma Finkielkraut-, hay queresponderles: deber de la memoria esel nombre hoy dado a estaextravagante conminación". De esose trata, de responderles. Parecierasencillo, mas no lo es. No lo es

-porque para responder hay queescuchar y, además, entender lo quese escucha: ardua tarea que una yotra vez cae en trampas. El olvido esobstinado y cuenta con sus aliadosaun entre quienes creen que con sóloejercitar la memoria le combaten.Escuchar no lo es todo; percibir elrumor no es suficiente. Creer locontrario es dar de bruces con unametamorfosis del olvido.

Allí están los de la memoriaanquilosada, ocupada tan sólo de símisma, de la singularidad comoabsoluto, incapaz de ir más allá de supropia cárcel deliberadamenteconfeccionada. Todo es imposible:cualquier enseñanza, comparación oprevisión. Todos los horizontes seagotan en su propia descripción y portanto cada uno es válido en sí mismo.Pero también están los otros, los que,por el contrario, ignoran lassingularidades. La memoria que en labúsqueda de lo general dotado desentido sacrifica la trascendenciade las historias particulares de todoslos muertos. Una memoria que tejesobre el vacío, o mejor dicho, que seteje de "ninguneos" para obtener unresultado optimista de un movimientogeneral armónico.

Contra unos y otros se argumentaFinkielkraut en este libro. Sobre todoporque hacen de Auschwitz -temaque gravita recurrentemente en lasreflexiones de este ensayista francés­lo incomparable por definición, auncuando se hayan dado situaciones tanterribles como las de Kosovo; o bien,porque incluyen a las víctimas judíasen las cuentas alegres del triunfosobre el fascismo. Finkielkraut parecehaber escrito este libro para decir:memoria sí, pero no una memoriareduccionista ni crispada ni vacua,a fin de cuentas hermanas del olvido,la amnesia y la indiferencia. Sí a esamemoria que escucha y, adem:i's,entiende la oración de los muertos. Sí

a esa memoria que al fabricar surespuesta nunca pierda de vista que"los muertos nos necesitan paraellos".•

PaulJ.VandenNoodDel púlpito a latrinchera. Ellevantamiento religiosode TomochicTaurus, México, 2003. 539 págs.

Javier Bañuelos RenteríaPocas regiones del país tienen unahistoria de rebeldía como la sierrachihuahuense. En el valle al queda nombre el río Papigochi, en la zonaoeste del estado, se han registrado almenos tres rebeliones que tuvieronrepercusiones a nivel nacional. En1891 la mayoría de los habitantes delpequeño pueblo mestizo de Tomochicse rebeló contra las autoridadesciviles con la firme intenciónde restablecer el reino de Dios en latierra, fueron brutalmente reprimidospor el ejército porfiriano. En 1910mientras Francisco 1. Maderofracasaba en sus primerasescaramuzas revolucionarias, PascualOrozco, reconocido arriero de laregión, logró encender en la sierra deChihuahua la flama revolucionariaque luego se extendió por todo elpaís. Finalmente el 23 de septiembrede 1965 un reducido grupo deestudiantes, profesores y campesinos .intentó tomar el cuartel militaraledaño al pueblo de Madera.Aunque la mayor parte del comandomurió en el ataque, su ejemplo sirvióde inspiración a muchos hombres ymujeres que consideraron la guerrillacomo la única vía de transformaciónsocial.

Estos acontecimientos sugierenla existencia de un carácter, tal vez deuna mentalidad, en la que muchotiene que ver el accidentado procesode mestizaje que tuvo lugar en esastierras. La lucha coatra los apaches

moldeó la cultura de ese mundo, perotambién lo hizo el aislamiento y laausencia de instituciones fuertes yafueran religiosas o civiles. Estascondiciones contribuyeron a laformación de una manera de ser, unaforma especial de vivir esa doblecondición de serrano norteño. Laindagación sobre este carácter es unode los aciertos del nuevo libro de PaulVanderwood, Del púlpito a latrinchera. El levantamiento religiosode Tomochic.

Paul J. Vanderwood forma partedel grupo de historiadores de hablainglesa ,que en los últimos treinta añosha enriquecido y renovado elconocimiento sobre la historiacontemporánea de México. Doctor enhistoria de México por la Universidadde Austin, 'Vanderwood es autor detres libros considerados clásicos enesta materia: Los rurales mexicanos,editado en 1982 por el FCE,Desordeny progreso: los bandidos, la policía y

el desarrollo mexicano editado porSiglo Veintiuno en 1986 y Los rostros

de la batalla: furía en la fronteraMéxico-Estados Unidos, 1910-1917publicado en 1993. Ahora presenta elresultado de una larga y minuciosainvestigación sobre losacontecimientos ocurridos enTomochic en 1891.

Interesado por el estudio delimpacto de las fuerzasmodernizadoras en las comunidadestradicionales, el autor nos presentaeste acto colectivo de rebeldía como"la crónica de un pueblo que trata deentender a un mundo que cambiarápidamente y lo seduce y repele almismo tiempo, forzándolo a valorarsus creencias y formas de vidatradicionales vigentes durante tantotiempo contra las fuerzas novedosas,excesivamente dinámicas y atractivasllamadas modernas".•

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