No hablars contra tu prjimo falso testimonio. (xodo 20:16)El noveno mandamiento prohbe hablar palabras mentirosas que daen o perjudiquen a nuestros semejantes. En el siglo XXI este es uno de los mandamientos ms pisoteados, en mundo postmoderno los paparazis descuartizan el honor de los famosos como si un da no fueran a dar cuenta de ello. Falso testimonioEl noveno mandamiento protege la integridad y el honor de nuestros semejantes. Pero tambin protege a la sociedad, que con el avance de este tipo de emisiones se ve cada vez ms enferma y perjudicada. Hasta incluso los famosos pareciera ser que pierden muchas veces el respeto por sus propias esferas de intimidad y se sumergen en todo tipo de conflicto del cual rara vez salen ilesos.En el antiguo Israel, cuando a un juez o sacerdote le traan algn asunto respecto de alguna persona, este deba indagar bien sobre el asunto, escuchando tanto al acusador cmo al acusado. No se permitan las calumnias livianas y Dios mandaba a que se investigara bien para que no se perjudicara a nadie por un juicio liviano e infundadoPocas personas rechazan un chisme cuando toca las puertas de su corazn simplemente porque se est hablando de otro y no de ellos mismos. Sucede que muchas veces escuchar acerca de los problemas y fracasos ajenos pareciera hacer menos dolorosos y difciles nuestros propios problemas y fracasos. Pero lamentablemente ver los errores ajenos hace que no afrontemos nuestros propios pecados para resolverlos.El salmista escribi;Escndeme del consejo secreto de los malignos,De la conspiracin de los que hacen iniquidad,Que afilan como espada su lengua;Lanzan cual saeta suya, palabra amarga,Para asaetear a escondidas al ntegro;De repente lo asaetean, y no temen. (Salmos 64:3-4)

Ciertas personas afilan sus lenguas como espadas para daar a su prjimo. Es decir, investigan acerca del error ajeno slo para destruir a su presa, premeditan la iniquidad en contra del ntegro y en su corazn maquinan cmo mancharn el buen nombre ajeno.Hoy en da el pblico no solamente est vido por escuchar cmo se destrozan vidas ajenas en los programas de televisin y radio, sino adems, si va acompaado con fotografas e imgenes mejor. Estos periodistas se alimentan de la vida de los famosos como si fueran una especie de parsito que vive de lo ajeno.Todo periodista debiera tener como objetivo principal informar y edificar a la sociedad, pero estos falsos comunicadores, slo desinforman y distraen a las masas de la misma forma en que el coliseo romano pona en escena las ms horribles matanzas de cristianos que eran arrojados a las fieras y el populacho se deleitaban viendo las masacres, de la misma forma estos comerciantes del dolor ajeno montan todo en espectculo atroz a costa de la integridad de sus semejantes.Sin duda alguna, Dios considera el honor como un bien muy preciado de sus hijos, tan importante como para incorporarlo entre los diez mandamientos que rigen la vida de los seres humanos. Pasar por alto y menospreciar este importante precepto, es un error muy comn que contribuye a la decadencia moral y a la falta de amor, como lo gangrena todo pecado social se expande con rapidez hasta producir la muerte del cuerpo.