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2do. Congreso Internacional Turismo y Economía

Amealco de Bonfil, Querétaro, México 24 al 26 de mayo 2012

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Estrategias para la tecnología electrónica y el turismo sustentable

Concepción Pardo Lizárraga1

María Aída Santillán Núñez2 RESUMEN Con el avance de la tecnología y la baja de sus costos, se han desarrollado aparatos electrónicos, que es muy común encontrarlos en diferentes organizaciones, permitiendo que sus labores se realicen de manera sencilla. Sin embargo, estos equipos contienen residuos tóxicos, que al ser desechados de manera inadecuada, contaminan el medio ambiente. Las organizaciones turísticas, utilizan para su operación muchos dispositivos electrónicos, pero carecen de conocimientos adecuados para su correcta eliminación. La tecnología verde permite crear productos que minimizan el daño a la naturaleza desde su producción, uso y eliminación. El turismo sustentable utiliza tecnologías verdes Palabras clave: Tecnología electrónica, tecnología verde, basura electrónica y turismo sustentable. INTRODUCCIÓN Con el avance de la tecnología y la disminución de sus costos, cada vez es más frecuente la utilización de dispositivos electrónicos en los hogares y empresas. Las diferentes labores se realizan de manera más sencilla, confiable y rápida. Sin embargo, la tecnología evoluciona a pasos agigantados y lo que hoy es moderno, en poco tiempo ya está obsoleto, lo que ocasiona que el equipo electrónico tenga que ser sustituido por otro

1 Doctora en Administración con acentuación en Gestión Escolar por el IMAP. Maestría en Estudios

Organizacionales por la UAM, Iztapalapa. Especialidad en Competencia Docentes de nivel medio superior por la UPN. Profesora en la Licenciatura de Sistemas Computacional en la Universidad de Occidente. [email protected]

2 Doctora en Educación por la Escuela Normal de Sinaloa. Maestría en Sistemas de Información Administrativa. Profesora de tiempo completo en la Licenciatura de Sistemas Computacionales en la Universidad de Occidente. aidasantillannuñ[email protected]



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nuevo. Entonces, ¿Qué pasa con los aparatos anticuados o dañados?, muchas organizaciones los tiran a la basura, sin considerar el gran daño que ocasionan al entorno, por los elementos dañinos con que fueron manufacturados. Casi ningún negocio cuenta con un programa para deshacerse de sus equipos electrónicos, que permita minimizar el impacto que tienen con el entorno. Este es el caso de las empresas del sector turístico, que muchas se dicen sustentables, pero no llevan procesos que permitan una relación amigable con el entorno. En consecuencia, las organizaciones turísticas, deben tener estrategias para reducir el daño que provocan las tecnologías electrónicas en el entorno, especialmente en su proceso de eliminación, no solo de este tipo de empresas, sino de todas las de la comunidad y sus alrededores. El problema es que muchas de ellas no saben cuáles, porque desconocen. Asimismo, en el noroeste del país, muchos empresarios del sector turístico, están conscientes de los beneficios de preservar la naturaleza y ser amigables con ella, por eso están diseñando cada vez más servicios turísticos sustentables, pero aún les falta mucho por hacer, en especial en lo referente a las tecnologías digitales y la cultura de la sustentabilidad, siéndoles de gran utilidad una investigación, que les permita establecer estrategias en estos rubros. En consecuencia este trabajo de investigación se realizará en una empresa turística del noroeste del país. La pregunta principal de investigación que se desprende de todo lo anterior es: ¿Cuáles son las estrategias que pueden utilizar las organizaciones del sector turístico para disminuir el daño que provocan las tecnologías electrónicas en el entorno, especialmente en su proceso de eliminación? Por lo tanto, las preguntas secundarias son: ¿Qué nivel de cultura sustentable presentan los participantes del proceso turístico?, ¿Cuál tipo de tecnología electrónica compran las organizaciones turísticas?, ¿Qué políticas siguen para la adquisición de tecnología electrónica?, ¿Cuáles normas tienen para el uso de la tecnología electrónica,?, ¿Qué proceso llevan a cabo para la eliminación de los aparatos electrónicos?, y ¿Cuáles



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son los convenios que tienen las organizaciones turísticas entre ellas y otro tipo de organizaciones, con respecto a disminuir la contaminación electrónica? Consecuentemente, el objetivo general de esta investigación es: Diseñar estrategias que pueden utilizar las organizaciones del sector turístico para disminuir el daño que provocan las tecnologías electrónicas en el entorno, especialmente en su proceso de eliminación. De esta manera, la metodología que se utilizó fue, el paradigma cualitativo, con el método de estudio de caso, a una empresa de la localidad del sector turístico, y las técnicas fueron: a) Entrevista al encargado: para conocer el proceso que sigue la organización en cuanto compra, uso y eliminación de residuos electrónicos, y b) Encuestas a estudiantes de maestría en turismo, para encontrar el nivel de cultura sustentable que tienen, los futuros empresarios y empleados de esta área. Por último, el trabajo se dividió en 4 apartados. El primero, se llamó Tecnología electrónica, donde se explica lo que significa y su importancia en las organizaciones. El segundo apartado, se denominó Basura electrónica, aquí se conceptualiza y se indica los efectos que tiene en el entorno cuando no se elimina adecuadamente. El tercer bloque, se rotuló como Tecnología verde y turismo sustentable, donde se explicó como el turismo puede ser sustentable con las tecnologías verdes. El cuarto segmento, se tituló como Estudio de caso, aquí se presentan los resultados y el análisis de los mismos, de acuerdo a la organización investigada. Por último, se presentan las conclusiones finales. TECNOLOGÍA ELECTRÓNICA La globalización permitió la apertura de mercados y con esto se incrementó la competitividad entre las empresas, siendo las más afectadas las pequeñas y medianas (PYMEs), que buscando nuevas estrategias, encontraron una de sus grandes aliadas, para poder sobrevivir y continuar vigentes en el mercado: la innovación tecnológica, cuya base es la tecnología y a través de la misma, estas organizaciones han tratado de lograr la diferenciación de sus productos y servicios ante la competencia



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(Pardo, 2001). Las PYMEs, al intentar ser más competitivas han incrementado el uso de sus tecnologías, en todos sus departamentos y procesos. Entendiéndose por tecnología, no solo a la utilización de aparatos o dispositivos, sino a un concepto más general, de acuerdo al enfoque de la teoría moderna de la organización, que la define como la búsqueda de una meta o un rendimiento, a través del desarrollo o manejo de un producto o un servicio y el conocimiento que se tiene para lograrlo. De esta manera, la tecnología implica tres aspectos: a) Aparatos, dispositivos, artefactos o herramientas, que se necesitan para producir los productos o servicios; b) Actividades o procesos, que se ejecutan para generarlos; y c) El conocimiento requerido, para utilizar el equipo y llevar a cabo las actividades, que generen las salidas esperadas (Jo, 1997). En cuanto a los aparatos, que manejan las empresas, muchos de ellos son electrónicos, como los equipos computacionales. Asimismo, Bustamante (2008), menciona que hace solo unas décadas era impensable imaginar que una PYME pudiera utilizar ordenadores, por lo complejo de su manejo y sus altos costos. Sin embargo, en 1975 dos jóvenes, Steve Jobs y Steve Wozniak, construyen una computadora para uso personal, que posteriormente fue bautizada como Apple I, en 1977 presentan Apple II y en 1979 dan a conocer Apple III. En 1980, IBM en un intento por competir contra Apple, presenta su primera computadora personal (PC). Los costos de los ordenadores bajan drásticamente y su manejo se vuelve más sencillo. Desde entonces, las computadoras empiezan a tener un papel preponderante no solo en las empresas, sino también en las escuelas y en los hogares. Incrementándose su utilización, con la llegada de Internet. En 1969, nace ARPANET, la red antecesora de Internet, pero hasta los años 90`s, se logra que se vuelva accesible, para el público en general, gracias a la creación de la World Wide Web (WWW), aunado con la creación de servicios como el correo electrónico y los chats. Logrando cada día un mayor número de adeptos, con la incorporación de nuevas formas de comunicarse, como las redes sociales.



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La gran evolución, que ha tenido la tecnología digital, en tan pocos años, ha cambiado la manera de vivir de los seres humanos. Actualmente, indica Romero (2010), hay muchos aparatos y dispositivos tecnológicos que les hacen su vida más sencilla y les permiten mantenerse comunicado y enterarse de lo que pasa, no solo en su comunidad, sino en todo el mundo. Estas tecnologías se llaman, Tecnologías de Información y Comunicación (TIC). Algunos ejemplos de las mismas son: televisión, celulares e Internet. Por lo tanto, con la llegada de la era digital se ha acelerado el avance de la tecnología, y se ha disminuido sus costos, siendo cada vez más accesibles los dispositivos electrónicos, por lo que es muy frecuente verlos en los hogares, instituciones educativas, en las empresas y en cualquier otro tipo de organización. Permitiéndoles, que sus actividades las realicen de manera más fácil, confiable y rápida. Sin embargo, no todo lo relacionado con la tecnología es positivo, ya que al evolucionar tan rápido, provoca que se vuelva obsoleta en muy poco tiempo, lo que ocasiona que los aparatos electrónicos tenga que ser sustituidos por otros nuevos. El mismo caso se presenta cuando los dispositivos se descomponen y no pueden ser reparados. Entonces, ¿Qué pasa con los aparatos anticuados o dañados?, muchas organizaciones literalmente los tiran a la basura, sin considerar el gran daño que ocasionan al entorno, por los elementos dañinos con que fueron manufacturados. BASURA ELECTRÓNICA El Ministerio de ambiente, vivienda y desarrollo territorial (2010), aclara que la basura electrónica, son aparatos eléctricos y electrónicos que son desechados por sus usuarios, porque son obsoletos o están dañados o ya terminaron su vida útil. También se consideran a todos los dispositivos eléctricos y electrónicos, que se convierten en residuos, abarcando esta definición al componente en sí, a todas sus partes y sus consumibles. E-waste, es el vocablo en inglés de basura o chatarra electrónica. Sin embargo, el nombre reconocido en la Unión Europea es WEEE (Waste Electrical and Electronic Equipment), que es equivalente en español a



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RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos). Este término es el oficial en las naciones que hablan el español. Los residuos electrónicos abarcan muchos dispositivos, algunos de ellos son: refrigeradores, planchas, televisores, aires acondicionados, equipos de sonido, celulares y computadoras. Todos al ser desechados inadecuadamente, pueden ocasionar contaminación a su entorno, por los residuos tóxicos que contienen. Por ejemplo en las computadoras y los electrodomésticos se utilizan comúnmente dos tipos de sustancias que son nocivas para la salud y el ambiente: a) Compuestos orgánicos policromos, utilizados como aditivos en los plásticos; y b) Metales pesados o tóxicos: plomo, mercurio, cadmio, arsénico, entre otros. Estos metales contaminan el aire, el suelo y el agua; provocando la destrucción de ecosistemas y afectando la salud de las personas de comunidades, que son víctimas del depósito de tales residuos (Benítez, Rísquez y Lara, 2010). Asimismo, de acuerdo a la Unión Europea sobre RAEE (Ministerio de ambiente, vivienda y desarrollo territorial, 2010), los aparatos que al concluir su vida útil, pueden convertirse en residuos electrónicos tóxicos, se clasifican en 10 categorías: 1) Grandes electrodomésticos: Refrigeradores, lavadoras, entre otras; 2) Pequeños electrodomésticos: Planchas, secadores de pelo, entre otros; 3) Equipos de informática y telecomunicaciones: computadoras, impresoras, copiadoras, teléfonos, entre otros; 4) Aparatos electrónicos de consumo: Televisiones, cámaras de vídeo, entre otras; 5) Aparatos de alumbrado: tubos fluorescentes, lámparas de descarga de alta intensidad, entre otros; 6) Herramientas eléctricas y electrónicas: Taladros, sierras y máquinas de coser; 7 Juguetes, equipos deportivos y de tiempo libre: Trenes y carros eléctricos, consolas de vídeo y juegos de vídeo; 8) Aparatos médicos: Aparatos de radioterapia, cardiología, entre otros; 9) Instrumentos de medida y control: Termostatos, detectores de humo o reguladores de calor; y 10) Máquinas expendedoras: De bebidas calientes, botellas, latas o productos sólidos. Son muchos los aparatos que pueden convertirse en residuos peligrosos. El problema es grave, ya que una gran cantidad de organizaciones no cuentan con un programa, para deshacerse de sus equipos electrónicos,



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que permita minimizar el impacto que tienen con el entorno. Greenpeace (2012), indica que los electrónicos son una tecnología tóxica, que se incrementa cada día, provocando mucha contaminación y enfermedades, especialmente en niños de países subdesarrollados, por ser estas naciones donde generalmente van a parar los desechos electrónicos de naciones poderosas, que mandan sus aparatos viejos o descompuestos, para que jovencitos extraigan de los mismos, los componentes más valiosos, y estos empresarios puedan obtener ganancias a costa de la salud y vida de un pequeño ser humano. Al no proporcionarles ninguna medida de seguridad para el manejo de metales peligrosos. También algunos equipos son incinerados, provocando el gas que desprenden, enfermedades mortales a la población, como lo es el cáncer. Muchos organismos, especialmente internacionales están alzando la voz y buscando solución al problema, como PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente) y el propio Greenpeace. Sin embargo, en México, no hay un gran avance con respecto a la problemática explicada en el párrafo anterior, aún son temas pendientes, las leyes que la supervisen y la implementación de programas que logren por lo menos disminuirla. De esta manera, parece que este país no tiene prisa en buscar solución al problema de la contaminación de residuos, siendo que cada año se generan alrededor de 40 millones de toneladas de este tipo de desechos, de las cuales alrededor de 35.3 millones son de residuos sólidos urbanos (RSU) y aproximadamente entre 5 y 6 millones son desechos peligrosos (RP), que han provocado cientos de sitios contaminados (Presidencia de la República Mexicana, 2007). A pesar de la insuficiencia o poca aplicación de leyes en el manejo y eliminación de residuos tóxico, SEMARNAT (2007) señala, que en México si hay un marco legal para legislarlo, empezando por la constitución del país, donde se incluye la ley general para el equilibrio ecológico y la protección al ambiente, la ley general para la prevención y gestión integral de los residuos, los reglamentos correspondientes y las normas oficiales que se aplican en toda la nación. En cuanto a las entidades federativas el marco legal está modificándose. También cuenta, para legislar los residuos tóxicos, los diferentes tratados internacionales que representantes del país



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han firmado, como el Convenio de Basilea, el Convenio de Estocolmo, el protocolo de Kyoto y el protocolo de Montreal. Por último, urgen soluciones al problema de los residuos electrónicos peligrosos, que permitan procesos de creación, utilización y eliminación de aparatos electrónicos, que sean más amistosos con la naturaleza. Varios países ya están trabajando con programas efectivos. En México apenas se está empezando. TECNOLOGIA VERDE Y TURISMO SUSTENTABLE Wenzel, Kiring y Rauch (2009), consideran que se está viviendo la era verde, en cuanto a que las personas se preocupan más por el cuidado de su entorno. El pensamiento verde tiene como base la ecología, la cual se está infiltrando en todas las ramas de la sociedad. Actualmente el pensar verde, no es una moda, sino todo un estilo de vida, que se ve reflejado en muchas organizaciones, que se dedican a diferentes áreas: restaurantes, fabricantes de automóviles, hoteles, supermercados, tiendas de ropa, entre otras. Por lo tanto, la era verde ya llegó a las empresas, que han innovado en productos y servicios, para satisfacer a una clientela con pensamiento verde. Pero, las empresas necesitan utilizar dispositivos electrónicos, para sus operaciones diarias. Las organizaciones turísticas no son la excepción, ellas requieren el uso de muchos aparatos, como computadoras, celulares, televisiones, estufas, refrigeradores, hornos de microondas, entre otros. Por ejemplo en un hotel, en recepción se necesitan ordenadores y teléfonos; en los cuartos hay televisiones, algunas veces secadoras de cabello, planchas y hornos de microondas; en la cocina se tienen estufas, refrigeradores, entre otros; en los demás departamentos de un hotel también se cuenta con dispositivos electrónicos. Todos estos aparatos permiten ofrecer a las empresas turísticas el servicio que requieren sus clientes, pero estos dispositivos tienen un periodo de vida, y en algún momento se tendrán que reemplazar, pero si no se cuenta con un programa adecuado contaminarán. Así mismo, las tecnologías



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están evolucionando, buscando desarrollar características que contaminen menos y sean más amigables con su entorno. Así surge la informática verde, que hace investigación sobre las tecnologías de información (TI), su utilización eficiente y su impacto en el entorno, buscando minimizarlo, considerando lo anterior desde su proceso de fabricación, uso y eliminación. Por lo tanto, se deben seguir lineamientos ecológicos desde la creación de las TI, su manejo y desecho (Hirtz, 2009). Igualmente cualquier tipo de tecnología debe ser verde. La ecotecnología, usa los avances de la tecnología, para mejorar el medio ambiente, con la mínima contaminación y la más alta sustentabilidad. Empresas líderes de tecnología, utilizan una gran parte de sus recursos para la investigación del desarrollo de tecnologías verdes (Martínez, 2009). Adicionalmente, la sustentabilidad ambiental es la administración eficiente y racional de los recursos naturales, incrementando el bienestar de la población actual, sin llegar a comprometer el de las generaciones que vendrán (Presidencia de la República Mexicana, 2007). Por lo tanto, una sociedad será sustentable en la medida en que sus habitantes perduren a través de generaciones, con una calidad de vida satisfactoria, sin dañar los sistemas naturales, ni sociales que tienen (Zamorano, 2002). México tiene como reto, fomentar la cultura ambiental en su población en general, empezando con sus niños, para poder lograr un desarrollo sustentable, y por ende, obtener un elemento de competitividad, que permita mayor desarrollo social y económico entre sus habitantes (Presidencia de la República Mexicana, 2007). Los países latinoamericanos en general tienen problemas económicos, pero cuentan con grandes recursos naturales, culturas y tradiciones, que pueden ser la clave para su recuperación, siendo el turismo la esperanza para lograr una economía sólida, porque se abren las posibilidades de atraer turistas en nuevos nichos, donde el turismo sustentable debe estar presente, para lograr armonizar los intereses y expectativas de todos los involucrados en el proceso, cuidando la naturaleza y logrando en general una mejor calidad de vida en el presente y futuro (Guevara y Campos, 2009).



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En consecuencia, el turismo sustentable, permite incrementar los beneficios económicos de las comunidades que lo practica, dañando lo menos que se pueda el entorno. Sin embargo, no todas las organizaciones turísticas son sustentables, y si bien algunas se autodenominan así, es muy difícil que lo sean en un 100%; en ellas está presente el uso de la tecnología, especialmente la tecnología electrónica3, que causa contaminación desde su fabricación, uso y desecho. Principalmente, en esta última etapa, donde los residuos que contienen se exponen al medio ambiente, contaminando agua, aire y suelo. Aunque cada vez más los fabricantes de la tecnología electrónica se han preocupado que sea verde, y reduzca el daño que genera, sigue siendo altamente contaminante, especialmente por la gran cantidad de unidades que se compran y desechan en el año, acumulándose toneladas de ellas. De esta manera, las organizaciones turísticas, deben tener estrategias para reducir el daño que provocan las tecnologías electrónicas en el entorno, especialmente en su proceso de eliminación, no solo de este tipo de empresas, sino de todas las de la comunidad y sus alrededores. También, deben de aprender de otras organizaciones nacionales o extranjeras, que han implementado programas de residuos electrónicos tóxicos, con buenos resultados. En 1990, Suiza fue el primer país que desarrolló un sistema de gestión de desechos electrónicos. EMPA4, desde 2003, está apoyándose en las experiencias de Suiza, para ayudar a otros países, para crear su propio sistema. EMPA ha participado en muchos proyectos de residuos electrónicos, en África, Asia, América Latina y América del Sur. El objetivo que se busca es de apoyar a estas naciones, para que mejoren el nivel de vida de sus habitantes, a través de un adecuado y seguro manejo de los dispositivos electrónicos, que disminuya los riesgos de enfermedades y

3 Las organizaciones turísticas ocupan los teléfonos para comunicarse con sus clientes y

proveedores. También utilizan las computadoras para registrar a sus huéspedes o comensales y llevar el control de sus operaciones.

4 El Instituto Federal Suizo de Ciencia de los Materiales y Tecnología o Empa, por sus siglas en alemán (Eidgenössische Materialprüfungs-und Forschungsanstalt), es un instituto de investigación, sobre los materiales y la tecnología, para un futuro sostenible.



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pueda incrementar su situación económica EMPA (2012). El modelo suizo ha comprobado ser un sistema eficaz y sostenible de gestión de la basura electrónica, del cual algunas naciones se han basado. Este modelo tiene varios pilares que se necesitan crear paralelamente: 1) Normatividad; 2) Infraestructura de recolección; 3) Infraestructura de reciclaje; 4) Asumir responsabilidades: el gobierno, los ciudadanos y las empresas productoras (REP: Responsabilidad extendida del Productor), el gobierno con apoyos, incentivos y aplicando leyes que regularicen y controlen el proceso; los ciudadanos minimizando el consumo de aparatos, donándolos o entregándolos a organismos calificados cuando ya no los usen, y los productores haciéndose responsables de los dispositivos que fabrican, hasta que son desechados; 5) Financiamiento; 6) Monitoreo y control; y 7) Cantidades de basura electrónica: para que el sistema de gestión funcione, se necesita tener un inventario de cuanta chatarra electrónica se genera cada cierto tiempo, para poder pedir el financiamiento requerido y tener la infraestructura que soporte la recolección y el reciclado de estos aparatos. No puede subir demasiado el peso de estos desechos, tiene que tender más bien a la baja o por lo menos tener cierta constancia (Ott, 2008). En México, no se tiene un sistema de gestión nacional de eliminación de electrónicos, pero existen algunas organizaciones que están trabajando en el reciclado de los mismos, tres de ellas son: REMSA, Ecorecikla y Fundación Ret. 1) REMSA (Recicla Electrónicos México): Es una empresa, totalmente mexicana, que nace en Querétaro y es considerada líder en el reciclado profesional de residuos tecnológicos, porque tiene a su personal bien capacitado, procesos patentados y una infraestructura para llevar a cabo la captación, recolección, separación y reciclaje de materiales que se producen, tales como el vidrio de las pantallas, plásticos, tarjetas electrónicas, entre otros. REMSA promueve el empleo verde, al contar con trabajadores con las prestaciones de ley, equipo de seguridad y muy buenas condiciones de trabajo (REMSA, 2012). 2) Ecorecikla: Es una empresa mexicana, situada en Chihuahua, que



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ayuda a diferentes entidades, como al propio gobierno federal, estatal y municipal. Así como a instituciones educativas, bancarias, empresas privadas y a todos los que quieran que los apoye con la recolección de sus aparatos electrónicos en todo el país, con el objetivo de cuidar en entorno (Ecorecikla, 2012). 3) Fundación Ret (Reutilización y reciclaje de desechos electrónicos a favor de la educación): Es una organización mexicana, que muestra una propuesta sustentable y que busca generar también un bien social, a través de concientizar y educar a la población (Fundación Ret, 2012). Esta fundación trabaja de acuerdo a la pirámide del tratamiento de los materiales (Figura 1), dándole prioridad a la prevención (evitar producir desechos) y minimización (disminuir los volúmenes), por ser las opciones más ecológicas. Posteriormente, busca la reutilización, al seleccionar, verificar y reutilizar equipo de cómputo, para ser usados en proyectos educativos, principalmente para el estado de México. Los aparatos que no pueden ser reutilizados se reciclan, al separar todos sus elementos, que vuelven a ser usados como materia prima. A los dos últimos niveles no se recomienda llegar, pero si no se pueden reciclar los componentes, se pueden convertir en combustible y a los que no puedan transformar, se les va a dar el tratamiento que menos dañe el entorno, para deshacerse de ellos. También las empresas REMSA y Ecorecikla, realizan actividades que promueven la educación y la consciencia ecológica, en el caso de la primera, lleva a cabo el programa de educación ambiental: Escuadrón verde, con actividades como el reciclón y los puntos verdes. El reciclón es el recibir en una ciudad, en un día y hora específica, dispositivos electrónicos, con el fin de reciclarlos de manera apropiada. Los puntos verdes, son centros de acopio permanente que reciben estos aparatos (REMSA, 2012).



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Fig. 1. Pirámide de la jerarquía del tratamiento de los materiales

Fuente: Fundación Ret (2012). Asimismo, deben de proliferar en México organizaciones como REMSA, Ecorecikla y la fundación Ret, que apoyen, para eliminar de manera segura los dispositivos electrónicos, fomentando la conciencia ecológica y mejorando su país. Sin embargo hay que tener cuidado con recolectores de chatarra electrónica, que no son formales y no llevan a cabo procesos que garanticen el manejo adecuado de los materiales tóxicos, poniendo en riesgo su salud y la de los demás (Fundación Ret, 2012). Para evitar caer con este tipo de personas, se les debe pedir, que estén certificadas en el desecho de residuos electrónicos tóxicos, con un organismo de prestigio, como e-Stewards. Existen otros organismos que certifican el reciclado, pero no ofrecen lo que el estándar e-Stewards (e-Stewards, 2012): 1) Incluye una certificación ISO 14001 del sistema de gestión ambiental, y el R2 de prácticas de reciclaje responsable; 2) Prohíbe que los residuos tóxicos sean eliminados en vertederos e incinerados; 3) Obliga el pleno cumplimiento de los tratados internacionales de residuos peligrosos para las exportaciones e importaciones, de productos electrónicos, y específicamente prohíbe la exportación de productos peligros de países desarrollados a países en desarrollo; 4) Prohíbe el trabajo de penitenciarios en el reciclaje de productos electrónicos tóxicos, que pueden tener datos confidenciales; 5) Brinda una amplía protección como base, para la vigilancia del reciclaje de los empleados en todos los países, incluso los desarrollados, para evitar la contaminación con tóxicos; y 6) Es internacional.

Prevenir

Minimizar

Reutilizar Reciclar

Recuperar energía Disposición y gestión

final



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Por lo tanto, las organizaciones turísticas mexicanas, pueden estar acordes con la era verde, en cuanto a sus aparatos electrónicos, tanto en su compra, utilización y en especial en su eliminación. Cuando los individuos deciden comprar un dispositivo electrónico, pocos son los que se preguntan la cantidad de residuos generados, para crear esa unidad, es decir, ¿Cuál fue la carga ecológica?. También pocas son las personas que se cuestionan sobre lo que van a hacer con su aparato antiguo, mucho menos inquieren sobre la tecnología que utiliza el nuevo, en cuanto al consumo de recursos y su vida útil (REMSA, 2012). Entonces las empresas, deben cuestionarse cuando van a comprar un aparato electrónico, si realmente lo necesitan, y si es así, investigar para adquirir aquel que mejor se adapte a las tecnologías verdes. En relación al dispositivo antiguo, si se puede reparar hay que donarlo, para su reutilización, en caso contrario, hay que llevarlo a un centro de acopio, de una organización seria que tenga reconocimientos o certificaciones que la avalen en cuanto al reciclaje. Todo lo anterior, tomando en cuenta la pirámide de jerarquía del manejo de los materiales (Figura 1). Adicionalmente, Wenzel, Kiring y Rauch (2009), cuestionan, el por qué casi todas las organizaciones actuales, se autodenominan sustentables, cuando en realidad muy pocas lo son. El ser verdes, lo toman como una estrategia de negocios, que les puede redituar mucho dinero, por atraer cierto tipo de clientes, pero pocas son las empresas que realmente se comprometen con ser amigables con el entorno. A la larga, el adoptar la ideología verde, trae grandes beneficios económicos a las compañías, porque les permite ahorrar dinero en recursos, como son el agua y la luz. Sin contar, que pueden mejorar la salud de todos sus miembros. Las organizaciones turísticas tienen la oportunidad de ser empresas verdes con todo y la infraestructura, al poder construir eco-edificios o edificios verdes, que permitan disminuir el consumo de energía y agua, en un entorno más natural. De esta manera, hasta se pueden ahorrar comprar dispositivos electrónicos o eléctricos. Al sustituir algunos de ellos por celdas solares o ventanales o cubos de luz. El consumo de electricidad constituye



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el 72% del gasto fijo de un edificio. Entonces, el desarrollar edificios sustentables, permite ahorros significativos, por ejemplo: reduce del 50% a 24% el uso de energía, de 39 % a 33% las emisiones contaminantes, 40% el uso de agua y 70% la emisión de desechos sólidos (Arzate, 2011). Por último, existen empresas del sector turístico, que han logrado ser verdaderamente sustentables, como es el caso de NH Hoteles en España, que en su programa de Plan Medioambiental 2008-2012, logro cumplir sus objetivos casi en dos años menos del plazo que tenían previsto. Redujeron el consumo de energía, agua, emisiones de CO2 y de generación de residuos. Esta firma ofrece la habitación verde, un cuarto con todas las comodidades, pero con tecnologías verdes, como por ejemplo con lámparas de led, y televisión, minibar y aire acondicionado de alta eficiencia energética (clase A++), también tiene cortinas automáticas (cuando el cliente abandona la habitación, se cierran solas para conservar la temperatura), el agua del W. C. es reciclada de duchas o de lluvia, entre otras tecnologías verdes que tiene este cuarto (Ortega, 2011). Entonces es posible que las organizaciones del ramo turístico puedan ser sustentables, con la utilización de tecnologías electrónicas, adoptando estrategias correctas, logrando también incrementar sus utilidades y contribuir con la conservación del medio ambiente. ESTUDIO DE CASO La empresa que se investigó es un hotel de 4 estrellas, localizado en el noroeste del país. Esta organización tiene más de tres décadas y cuenta con 85 trabajadores. El hotel tiene 43 suites con cocineta, 61 estudios con cocineta y 15 cuartos estándar. Con Internet inalámbrico gratuito. Tecnología electrónica Los aparatos electrónicos que tienen los diferentes departamentos de este hotel son: 1) Oficinas: Computadoras, impresoras, scanners, máquinas de escribir, teléfonos, copiadora, fax, radios, sacapuntas eléctrico, aire acondicionado, abanicos de techo y reloj checador; 2) Cuartos: Aire acondicionado, abanicos de techo, refrigeradores, estufas, televisores,



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tostadoras, cafeteras, licuadoras, secadora, despertador, plancha, video, reproductor de ipod y jacuzzi; 3)Recepción: Conmutador, computadora, impresora, calculadora, radio y abanico de techo; 4) Lavandería: Abanicos de techo, radios, secadora, lavadora y plancha industrial; 5) Restaurante y Bar: Aire acondicionado, cafetera industrial, refrigeradores, mezcladora de bebidas, televisores, computadora, impresora y computadora para capturar comandas; 6) Cocina: Congeladores, tostadora, cafetera industrial, refrigeradores, estufas, hornos, freidoras y salamandras (para tostar el pan); y 7) Mantenimiento: Bombas de agua, filtros para alberca, taladros, lijadoras eléctricas, sierras y compresores. Cultura sustentable En la entrevista realizada al gerente del hotel, comentó que existe mucho compromiso por parte de los directivos, por tratar de cuidar el medio ambiente, en la medida que les es posible. Por lo cual, en la organización se llevan a cabo las siguientes actividades, para disminuir la contaminación y ser más sustentable: 1) Los residuos orgánicos se separan de los inorgánicos y se entregan a una persona que los utiliza para alimento de ganado; 2) En temporada baja se ubica a todos los huéspedes en una sola torre y se deja fuera de servicio la segunda; 3) Se utilizan focos ahorradores en todas las áreas que se pueden; 4) Hay un horario específico para apagar las fuentes del hotel; 5) Se reutiliza el papel en las oficinas y se cuidan todos los insumos; 6) En la lavandería se busca el uso adecuado de los productos; y 7) En las habitaciones se colocan notificaciones a los huéspedes, para que al salir de la habitación, apaguen todos los aparatos electrónicos, y se haga un uso adecuado de los servicios. En lo que respecta a como se involucra a todos los miembros del hotel, para desarrollarles la conciencia ecológica, a ellos en todas las juntas o reuniones se les pide que cuiden todos los recursos y que hagan un uso adecuado, para mantener los costos y cuidar el medio ambiente.



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Compra de aparatos electrónicos El responsable de adquirir los dispositivos electrónicos es el departamento de compras en Contabilidad. El proceso que se sigue es: Se piden tres cotizaciones a diferentes empresas y se consideran ciertas características, como precio, calidad y crédito. Si el producto tiene la opción de ser un artículo que ahorra energía, es un plus que se toma en cuenta. En cuanto a cómo influye para el hotel cuándo se compra un equipo electrónico, el nivel en que el mismo puede dañar el entorno, en su uso o eliminación. No tienen el conocimiento necesario, sobre estas cuestiones, pero cuando lo consideran apropiado, se asesoran con el departamento de mantenimiento, donde el encargado es un ingeniero. Por otro lado en la zona no hay mucha variedad en cuanto a los artículos, que se utilizan para la hotelería. Pero, si se tiene que elegir entre una opción que dañe menos el entorno, seguramente es la que van a elegir. No se cuenta con normas escritas para comprar dispositivos electrónicos. Manejo y eliminación de aparatos electrónicos Actualmente, esta organización turística, no cuenta con ninguna norma, para disminuir el impacto ecológico, que puede ocasionar el uso de las tecnologías electrónicas. El gerente reconoce, que no han recibido ninguna orientación en ese sentido por parte de alguna asociación ecologista o del ramo, pero si les ofrecieran capacitación, con gusto la recibirían, para que hasta donde puedan, puedan ayudar al cuidado del entorno. En relación al proceso que lleva a cabo el hotel, cuando un dispositivo electrónico deja de funcionar y no tiene reparación: 1) Algunos aparatos se venden como fierro viejo; 2) Las baterías de los artículos electrónicos se entregan a una organización que recoge ese tipo de desechos; 3) Muchos de los artículos se les obsequian a los empleados que así lo soliciten, ya que por lo general reutilizan algunas partes; y 4) El resto se desecha en la basura.



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Por otro lado, el proceso que sigue esta empresa turística, cuando un equipo está obsoleto, pero aún funciona es: Se ofrece al personal de manera gratuita y se le da prioridad a los empleados de ese departamento. Además se toma en cuenta la antigüedad en el mismo, el orden en que lo solicitaron y sus necesidades. Aunque se lleven a cabo procesos ya establecidos para deshacerse de equipo tecnológico, no hay nada escrito en las políticas de la organización. Convenios con otras organizaciones Hasta el momento no cuentan con ningún convenio relacionado con la contaminación de los artículos electrónicos, pero si llevan a cabo diversas acciones, apoyados por grupos ecologistas de la entidad, en otro tipo de contaminación. Cultura sustentable de los futuros empresarios de turismo Se aplicaron encuestas a una muestra de jóvenes estudiantes de maestría de turismo, sobre tecnologías verdes. El 67% fueron mujeres y el 33% hombres. El 56% no pasaban de los 25 años, el resto de edades que fluctuaban de más de 25 hasta los 47. El 100% está muy bien informado de las tecnologías verdes. El 78% conoce bien lo que es la sustentabilidad y el 22% tiene una idea general de la misma. El 34% domina lo que es la basura electrónica, el 33% posee una idea general, 11% más o menos, 11% una idea vaga y 11% no sabe nada del tema. El 56% tiene una idea general de cómo se contamina el entorno con el uso inadecuado de las tecnologías, el 22% tiene una idea vaga de los mismos, solo el 11% si conoce bien el tema, y el 11% no tiene la menor idea. El 56% tiene un conocimiento general del grado de contaminación que puede ocasionar la eliminación inapropiada de aparatos electrónicos, solo el 22% domina este tema, y el 22% restante lo sabe de manera regular. El 67% conocen de manera general al proceso adecuado, para comprar equipo electrónico, que permita disminuir la contaminación, el 22% no tienen la menor idea, y el 11% que queda, tienen una idea vaga.



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El 56% saben de forma general las políticas que debe tener una empresa turística para utilizar aparatos electrónicos, el 33% lo desconocen, y el 11% tiene una idea remota. El 34% tiene conocimientos generales de cómo eliminar los equipos electrónicos, el 33% desconoce el tema, el 22% más o menos lo conoce y el 11% tiene nociones. El 34% tiene una idea general del impacto que la contaminación de dispositivos electrónicos tiene en el sector turístico, 33% lo desconoce, el 22% tiene una idea confusa, y el 11% más o menos lo relaciona. Por último, el 45% indica que en algunas materias de la maestría se le han impartido conocimientos, con respecto a la contaminación que ocasionan los aparatos eléctricos, 33% señalan en casi ninguna, 11% en algunas y 11% en muchas. Análisis El hotel investigado tiene equipo electrónico en todos sus departamentos, de hecho, casi posee aparatos de las diez categorías, con que los clasifica la Unión Europea sobre RAEE, de que al término de su vida útil se convertirán en residuos tóxicos. Por lo tanto, frecuentemente, esta empresa tiene chatarra electrónica, que contamina el entorno. El problema es: el hotel realiza acciones para eliminar esta basura, pero lo hace sin tener el conocimiento apropiado, para dimensionar el peligro que corre el medio ambiente y todos sus empleados. En la empresa solo existe una persona, que tiene un dominio más profundo de este tema, que es el Ingeniero de mantenimiento, que por su formación académica, debe saber las sustancias tóxicas que contienen los aparatos electrónicos y el riesgo que se corre si se exponen al entorno. Pero, que pasa con todos los demás, especialmente los individuos claves, en la compra, uso y eliminación de los equipos electrónicos. Asimismo, esta empresa turística, adquiere equipos, considerando factores como precio, calidad y bajo consumo de energía, pero que pasa con el tiempo de vida del producto, la toxicidad de sus componentes, su facilidad para repararlo, donarlo y reciclarlo. Igualmente, este hotel no tiene un proceso para utilizar adecuadamente, sus equipos.



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En cuanto a las acciones que se llevan a cabo cuando un articulo electrónico es obsoleto o está dañado, varias son apropiadas, de acuerdo a la pirámide de jerarquías del manejo de materiales, como es el caso de donarlos, pero lo que es inadecuado es regalarlos a personas que no se sabe que harán con los mismos y donde los van a depositar, ni tampoco está correcto tirarlos directamente a la basura, para eso existen organizaciones como REMSA, Ecorecikla y la fundación Ret. También se pueden buscar en la localidad centros de acopio apropiados. Igualmente, a la organización estudiada le faltan convenios con organismos, para que lo ayuden con su basura electrónica, tanto para que eduquen a todos sus trabajadores en este problema tan grave, como para que juntos realicen acciones que favorezcan a su hotel, como a todos los que vivimos en esta comunidad. También es bueno recalcar, que esta empresa tiene consciencia ecológica, que se refleja en el interés que tienen por el cuidado de ciertos recursos como son el agua y la luz. Ahora lo que falta es que ponga en su agenda el manejo de chatarra electrónica. Por último, resultan interesantes los resultados de las encuestas de los estudiantes de la maestría de turismo, todos manifiestan dominar el tema de las tecnologías verdes, pero a medida que se van haciendo preguntas de contenidos relacionados con estas tecnologías, no todos manejan el mismo grado de dominio, de hecho hay varios que de plano señalan que no tienen ni la menor idea, como fue en el caso de la basura electrónica, las acciones que se deben seguir para eliminar un aparato electrónico en una organización turística, entre otras más. De hecho en esta última pregunta, el 33% indicó que no tenían ningún indicio. El conflicto de estos resultados, es que ellos se están preparando para ser los dirigentes de los negocios turísticos, de hecho algunos ya laboran en este sector. Entonces, si ellos no dominan estos temas, ¿Cómo pueden implementar estrategias para solucionar el problema? Estrategias para que el hotel, disminuya la contaminación por E-waste 1) Empezar a concientizar a todos los trabajadores del hotel sobre la



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importancia de evitar la contaminación de basura electrónica. Por ejemplo, en las reuniones llevar artículos bajados de Internet, sobre el tema, y darse un espacio para comentarlo. 2) Contactarse con organizaciones que tienen certificaciones o reconocimientos por realizar procesos de reciclado de equipo electrónico, de acuerdo a estándares internacionales, que cuidan el medio ambiente. Para solicitar sus servicios. 3) Educar a todos los miembros de la empresa, en el tema de la basura electrónica, a través de cursos con especialistas en el área. 4) Hacer un inventario de los diferentes productos electrónicos, que tienen cada uno de los departamentos del hotel, donde se indiquen formas correctas de uso, datos sobre su periodo de vida útil, grado de toxicidad, mencionar cuando ya no se utilicen, si se puede donar a quién o si se va reciclar, a dónde se va a mandar, entre otros datos. Posteriormente cada vez que se compre o se deseche un artículo, se puede actualizar el inventario. En los manuales de los dispositivos electrónicos, hay información útil, para llenar este inventario. 5) Escribir un manual de políticas, sobre procesos generales de compra, uso y eliminación de equipos electrónicos, que permitan generar el mínimo impacto en el entorno, basándose en la pirámide de la jerarquía del manejo de materiales (Fig. 1). 6) Buscar alianzas con otras organizaciones turísticas o de otro giro, incluyendo de gobierno, para formar una asociación, donde se apoyen en el manejo de la basura electrónica. 7) Propiciar actividades o eventos, que promuevan la consciencia ecológica, con respecto a la chatarra electrónica. Por ejemplo, un día a la semana la empresa puede ser un centro de acopio de pilas. 8) Involucrar a las familias de los empleados y a toda la comunidad en los eventos y actividades. Correspondiendo con la responsabilidad que tienen las empresas con la sociedad. Por ejemplo, donar equipo que ya no se utiliza a familias de los trabajadores, escuelas y hospitales. CONCLUSIONES Los aparatos electrónicos facilitan la realización de muchas actividades en cualquier organización, pero cuando se acaba su vida útil (E-waste o



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RAEE), no se pueden tirar a la basura, por el nivel de residuos tóxicos que contienen y el daño que pueden ocasionar al entorno. Las empresas en general desconocen el proceso adecuado que deben seguir cuando tienen que deshacerse de un equipo. Este problema también se presenta en los negocios del giro turístico. La era verde, que actualmente estamos viviendo, es un estilo de vida amigable con el medio ambiente, que se ha filtrado en las organizaciones, surgiendo infinidad de servicios y bienes verdes. De esta manera, las tecnologías verdes son artículos que tratan de dañar lo menos posible al entorno desde su fabricación, uso y eliminación. Entonces, las empresas al tratar de ser sustentables, usan y desarrollan productos o servicios verdes. El turismo sustentable, por lo tanto, utiliza y crea tecnologías verdes, que atrae nuevos clientes y por ende mis ingresos. De esta manera, la sustentabilidad, es más vista por los empresarios, como una estrategia de negocios, que una responsabilidad social. En relación a las preguntas de investigación, existe cierto nivel de consciencia ecológica en las organizaciones turísticas, ya realizan acciones sustentables, a veces por estar más cerca de su bolsillo, que por el deber, pero les falta más conocimientos relacionados con la basura electrónica y su correcta eliminación. Por ello, muchas no llevan a cabo procesos adecuados, para disminuir la contaminación de los aparatos electrónicos, en cuanto a su compra, uso y desecho. Especialmente, en esta última etapa, que es cuando más contaminan. Los negocios del giro turístico emplean muchos tipos de equipos electrónicos, desde refrigeradores hasta planchas o secadores de pelo, que al concluir su vida útil, deben ser eliminados, teniendo estas empresas constantemente residuos electrónicos tóxicos que deben desechar de una forma amigable con el entorno, y pocos son los que conocen como hacerlo. Una de las estrategias que se proponen en este trabajo de investigación es contactar a organismos certificados en el proceso de reciclaje de equipo electrónico. Ellos se harán cargos de los residuos de las empresas, siguiendo estándares de desechos, que minimicen el impacto en el entorno.



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