Entrevista a Korta en DV. 11.09.2012 (II)

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«A Etxabe le digo que, comiendo en su casa , entre su tripulación y la mía hay medio minuto» José Luis Korta piensa que los amarillos tenían equipo para estar en La Concha y duda de si al entrenador le han dejado trabajar :: G.L. En uno de sus repentinos cambios de juego, cuando la conversación versa sobre el papel del entrena- dor en una plantilla de remeros contrastados, el de Ortzaika pone encima de la mesa la situación de Orio. De repente, pasa de entrevis- tado a entrevistador. «¿Crees que Orio se hubiera quedado fuera si soy yo el entrenador?». De paso, tiramos de la cuerda. – ¿Usted cree que sí? – Yo creo que sí. Tenía tripulación para ello. – Entonces, ¿ha fallado el entre- nador? – O el entrenador o que hay dema- siada gente mandando. Me que- da la duda de si el entrenador ha mandado algo. Si le han dejado. Ahí hay mucho veterano. Han llegado muchas figuras: Paorra, Millares, Polo, Txato... de muchos quilates y ganadores de La Concha. Y si las cosas no funcionan... demasiada fi- gura. Ahora, también es verdad que si hubiera remado en la ACT, igual hubiera llegado mejor. Para mí no ha andado lo que tenía que haber andado. – ¿Volverá algún día a Orio? – ¿Por qué no? A quién no le gus- taría entrenar a Orio. Es triunfo se- guro. Es ir a un Real Madrid. – ¿Qué haría falta para que llega- ra ese momento? – Que les haga falta y que se pon- gan en contacto conmigo. En Orio me llamarán cuando estén bajo tie- rra, como estuvieron antes. Hay gente que me llevaría ahora mis- mo pero hay otros que me odian. Se creen que son más oriotarras que yo por llevar la camiseta ama- rilla. – Usted siempre en clubes de di- nero... – Sí, cuando fuí a Kaiku no tenían luz, ni trainera, ni nada. ¿Y cuan- do volví a Orio? No tenían ni agua caliente, ni embarcaciones... – Pero sí para usted. – Claro. Pero a mí me trajeron a Orio porque un señor dijo que si me llevaban tenían patrocinio para cinco años. Mi nombre también vende algo. Además, yo he ahorra- do mucho dinero a Orio. Arregla- ba desperfectos, pintaba, hacía de chófer, masajista, entrenador y pa- trón. – Alguien ha insinuado por la re- dacción que venga a Donostiarra. – Sería bonito ganar con la traine- ra Donostiarra. ¿Por qué no? Ten- go que hablar con Mendi a ver si ha hecho lo que le dije. Le dí algún consejo y han hecho la regata del año. ¿Dinero? Ya sacaríamos has- ta de los bares para poner propa- ganda en las palas. ¿Remeros? Ya tienen. 19:54 no lo hace cualquie- ra. Con tres o cuatro cambios, es- tán para disputar La Concha. «¿Crees que Orio se habría quedado fuera si soy el entrenador?» todo. Tuvimos mala suerte. Si tie- nes veinte remeros buenos, ¿para qué? Al final el resultado me ha dado la razón. Hemos arriesgado pero ha salido bien. – ¿La clave de La Concha? – Que al hacer tantos cambios he- mos llegado frescos. Con las leyes de hoy no se puede pinchar para re- cuperar y hay que dar descanso a la gente. Mira lo que le ha pasado a Hondarribia. Ha llegado un poco justo. En la Liga ha habido mucha pelea. Llegar bien y que tengo la mejor tripulación. – ¿Y qué pinta el entrenador? – El entrenador tiene que sacar el cien por cien a sus remeros, como la madre al hijo. He hecho mil prue- bas. Hemos utilizado tres juegos de remos la última semana y he cam- biado alguna medida todos los días. No soy el mejor, sino el menos malo. He ido en la trainera reman- do algunos días para dar instruccio- nes, y otras veces de patrón. He es- tado encima, aunque a veces no sa- bes qué es mejor. – ¿...? – Con los pesos por ejemplo. Les he tenido con la báscula todos los días y cuando he pasado diez días sin pe- sarles me han bajado a lo que tenían que estar. Los veteranos saben cuándo tienen que dar el callo. Hay que andar como la madre, riñendo, pero buscando lo mejor para todos. – ¿Cómo se acierta en los fichajes para hacer la mejor tripulación? – Mira los que tengo. Si la gente su- piera de dónde vienen. No los he traído yo. Entre alguno que dice el presidente y otros que me ofrecen por ahí... . A Javi Pérez lo he dejado fuera en Castro porque estaba gor- do. A Benito San Martín lo repes- camos de Zierbena, donde me iba con él a por chipirones. Los urugua- yos andaban en Pontejos perdidos... no es sólo que sean buenos reme- ros sino hacerles que trabajen bien. ¿Cómo no voy a llorar luego por esta gente cuando ganan? El único fi- chaje que he hecho en mi carrera es el de Iker Zabala y ahora lo ten- go en contra. –Veinte remeros, pero lleva dos años a piñón fijo con el mismo trece. – Porque no tengo oportunidad de probar otras combinaciones en Liga y tengo que ir a lo seguro. Ahora que tengo un montón de propios hace falta canteranos. Las leyes siempre se hacen por intereses. Otra, ¿por qué tengo que tener veintidós fi- chas y un club con filial no tiene ese límite. El remero que no entra en la plantilla es apartado y se pier- de. ¿Eso es por el bien del remo? – ¿Por qué se queja de los proyec- tos canteranos? – No me quejo. Sólo digo que hay que decir la verdad. ¿Quién ha ga- nado banderas? ¿Con cuántos can- teranos a bordo? – Hondarribia les ha ganado con ocho en la alineación titular... – Si los contara yo no me saldrían ocho. – ¿Qué remo quiere usted? – Para empezar, el que no tenga que necesitar un médico para ganar. Yo tengo uno, pero de los que gana mil euros. De los que no oculta nada. Hay otros que se hacen millonarios matando gente. Sé que hay quien anda con trampas, no sólo con mé- dicos, también con el peso de las traineras. Pesando con palcas. ¿A quién quieren engañar? – Juan Mari Etxabe (entrenador de Urdaibai) le pregungó a ver cómo se gana a una tripulación que va supuestamente dopada. – Mejor que no hable. Que se acuer- de de cómo salió de Koxtape. – Pero, ¿qué le responde? – Que entre su tripulación y la mía, comiendo en su casa, hay medio minuto de diferencia. Con todo el respeto a sus remeros, que les ten- go aprecio a muchos de ellos, pero comiendo en su casa o en la mía, donde elija, llegan a medio minu- to nuestro. – ¿Cuándo va a descansar con esa cruzada? – Cuando los jueces digan algo. Es- tán pillados. Te asustarías con to- dos los informes que hay. Tenía pensado dejar el remo de competi- ción en 2010. Había comprado la trainera negra para mí pensando en coger un remolque y viajar por toda España alquilándola y dando cursi- llos. Pero ahora tengo que seguir, si no, sería un cobarde. Estoy en la regata más importante de mi vida. – ¿Si los jueces dijeran lo que quie- re escuchar, lo dejaría? – A mí me quitan el remo y me cai- go muerto. Por otra parte, me inte- resa seguir cotizando. Pero tengo ganas de disfrutar de mi familia tranquilo. – ¿En qué quedamos? ¿Dónde está Korta el año que viene? – No sé nada. No me han dicho nada así que sigo en la empresa. Lo úni- co que sé es que estoy en nómina. Mi prioridad sigue siendo Kaiku. Tengo confianza en los remeros y ellos en mí. Me he enterado por fue- ra de que Monje les dijo a los reme- ros el domingo en el autobús que cuenta con ellos. Alguno, en plena celebración, cuando estaba ‘xele- bre’ ya me dijo que si no sigo yo, no sigue. Supongo que hablaremos en los próximos días. – ¿Cómo le gustaría disfrutar los próximos días? – Quiero dedicar más tiempo a mi mujer, pero no tengo tiempo. Ojo a los padres que creen que pierden un hijo o hija porque se van de casa. Luego te vienen tres, y no los pue- des echar. Los nietos han pasado el verano en casa, en Castro. Un Llo- rente y un Messí. – ¿Su próximo reto, show o aven- tura? – Hice una apuesta en Arantzazu de que si ganaba La Concha subiría descalzo. Ya me estoy entrenando para que no se me salgan callos en los pies. Anduve descalzo ayer en Donostia. Me imagino que lo haré los próximos días. Hay que prepa- rarse. «Viendo que me pasaron por encima los dos últimos años, no tenía ninguna garantía» «Mi primera opción para el futuro sigue siendo Kaiku, confío en los remeros y ellos en mí» José Luis Korta. Entrenador de Kaiku «Para Oliden, Sarasua, Altxerri, Aita Manuel y, sobre todo, Estrobo» En el capítulo de dedicatorias explota la vena nostálgica de Korta. «Esta Bandera es para to- dos los que aman el deporte del remo», señala en genérico para pasar después a enumerar varios nombres propios. «Primero se lo quiero dedicar a Estrobo –el cro- nista de remo del diario El Co- rreo Xabier Lauzurika, fallecido en diciembre del año pasado–, que fue quien me sacó un palma- rés con todas las regatas ganadas. Y luego me quiero acordar de los grandes de La Concha, los que la han ganado muchas veces en la trainera: grandes como Batista Oliden, Inaxio Sarasua, Juan Li- zarralde Altxerri, Aita Manuel y no sé si me olvido de alguno. Ésos sí que han hecho historia». Esta vez, la fiebre arraunlari pudo con la familiar. Su mujer ya tiene otras quince. REMO 49 Martes 11.09.12 EL DIARIO VASCO DEPORTES

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Entrevista a Korta en DV. 11.09.2012 (II)

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«A Etxabe le digoque, comiendo ensu casa, entre sutripulación y la míahay medio minuto»

José Luis Korta piensaque los amarillos teníanequipo para estar enLa Concha y duda desi al entrenador lehan dejado trabajar:: G.L.En uno de sus repentinos cambiosde juego, cuando la conversaciónversa sobre el papel del entrena-dor en una plantilla de remeros

contrastados, el de Ortzaika poneencima de la mesa la situación deOrio. De repente, pasa de entrevis-tado a entrevistador. «¿Crees queOrio se hubiera quedado fuera sisoy yo el entrenador?». De paso,tiramos de la cuerda.– ¿Usted cree que sí?– Yo creo que sí. Tenía tripulaciónpara ello.– Entonces, ¿ha fallado el entre-nador?– O el entrenador o que hay dema-siada gente mandando. Me que-

da la duda de si el entrenador hamandado algo. Si le han dejado. Ahíhay mucho veterano. Han llegadomuchas figuras: Paorra, Millares,Polo, Txato... de muchos quilatesy ganadores de La Concha. Y si lascosas no funcionan... demasiada fi-gura. Ahora, también es verdad quesi hubiera remado en la ACT, igualhubiera llegado mejor. Para mí noha andado lo que tenía que haberandado.– ¿Volverá algún día a Orio?– ¿Por qué no? A quién no le gus-

taría entrenar a Orio. Es triunfo se-guro. Es ir a un Real Madrid.– ¿Qué haría falta para que llega-ra ese momento?– Que les haga falta y que se pon-gan en contacto conmigo. En Oriome llamarán cuando estén bajo tie-rra, como estuvieron antes. Haygente que me llevaría ahora mis-mo pero hay otros que me odian.Se creen que son más oriotarrasque yo por llevar la camiseta ama-rilla.– Usted siempre en clubes de di-nero...– Sí, cuando fuí a Kaiku no teníanluz, ni trainera, ni nada. ¿Y cuan-do volví a Orio? No tenían ni aguacaliente, ni embarcaciones...– Pero sí para usted.– Claro. Pero a mí me trajeron a

Orio porque un señor dijo que sime llevaban tenían patrocinio paracinco años. Mi nombre tambiénvende algo. Además, yo he ahorra-do mucho dinero a Orio. Arregla-ba desperfectos, pintaba, hacía dechófer, masajista, entrenador y pa-trón.– Alguien ha insinuado por la re-dacción que venga a Donostiarra.– Sería bonito ganar con la traine-ra Donostiarra. ¿Por qué no? Ten-go que hablar con Mendi a ver si hahecho lo que le dije. Le dí algúnconsejo y han hecho la regata delaño. ¿Dinero? Ya sacaríamos has-ta de los bares para poner propa-ganda en las palas. ¿Remeros? Yatienen. 19:54 no lo hace cualquie-ra. Con tres o cuatro cambios, es-tán para disputar La Concha.

«¿Crees que Orio se habría quedadofuera si soy el entrenador?»

todo. Tuvimos mala suerte. Si tie-nes veinte remeros buenos, ¿paraqué? Al final el resultado me hadado la razón. Hemos arriesgadopero ha salido bien.– ¿La clave de La Concha?– Que al hacer tantos cambios he-mos llegado frescos. Con las leyesde hoy no se puede pinchar para re-cuperar y hay que dar descanso a lagente. Mira lo que le ha pasado aHondarribia. Ha llegado un pocojusto. En la Liga ha habido muchapelea. Llegar bien y que tengo lamejor tripulación.– ¿Y qué pinta el entrenador?– El entrenador tiene que sacar elcien por cien a sus remeros, comola madre al hijo. He hecho mil prue-bas. Hemos utilizado tres juegos deremos la última semana y he cam-biado alguna medida todos los días.No soy el mejor, sino el menosmalo. He ido en la trainera reman-do algunos días para dar instruccio-nes, y otras veces de patrón. He es-tado encima, aunque a veces no sa-bes qué es mejor.– ¿...?– Con los pesos por ejemplo. Les hetenido con la báscula todos los díasy cuando he pasado diez días sin pe-sarles me han bajado a lo que tenían

que estar. Los veteranos sabencuándo tienen que dar el callo. Hayque andar como la madre, riñendo,pero buscando lo mejor para todos.– ¿Cómo se acierta en los fichajespara hacer la mejor tripulación?– Mira los que tengo. Si la gente su-piera de dónde vienen. No los hetraído yo. Entre alguno que dice elpresidente y otros que me ofrecenpor ahí... . A Javi Pérez lo he dejadofuera en Castro porque estaba gor-do. A Benito San Martín lo repes-camos de Zierbena, donde me ibacon él a por chipirones. Los urugua-yos andaban en Pontejos perdidos...no es sólo que sean buenos reme-ros sino hacerles que trabajen bien.¿Cómo no voy a llorar luego por estagente cuando ganan? El único fi-chaje que he hecho en mi carreraes el de Iker Zabala y ahora lo ten-go en contra.–Veinteremeros,perollevadosañosa piñón fijo con el mismo trece.– Porque no tengo oportunidad deprobar otras combinaciones en Ligay tengo que ir a lo seguro. Ahora quetengo un montón de propios hacefalta canteranos. Las leyes siemprese hacen por intereses. Otra, ¿porqué tengo que tener veintidós fi-chas y un club con filial no tiene

ese límite. El remero que no entraen la plantilla es apartado y se pier-de. ¿Eso es por el bien del remo?– ¿Por qué se queja de los proyec-tos canteranos?– No me quejo. Sólo digo que hayque decir la verdad. ¿Quién ha ga-nado banderas? ¿Con cuántos can-teranos a bordo?– Hondarribia les ha ganado conocho en la alineación titular...– Si los contara yo no me saldríanocho.– ¿Qué remo quiere usted?– Para empezar, el que no tenga quenecesitar un médico para ganar. Yo

tengo uno, pero de los que gana mileuros. De los que no oculta nada.Hay otros que se hacen millonariosmatando gente. Sé que hay quienanda con trampas, no sólo con mé-dicos, también con el peso de lastraineras. Pesando con palcas. ¿Aquién quieren engañar?– Juan Mari Etxabe (entrenador deUrdaibai) le pregungó a ver cómose gana a una tripulación que vasupuestamente dopada.– Mejor que no hable. Que se acuer-de de cómo salió de Koxtape.– Pero, ¿qué le responde?– Que entre su tripulación y la mía,comiendo en su casa, hay mediominuto de diferencia. Con todo elrespeto a sus remeros, que les ten-go aprecio a muchos de ellos, perocomiendo en su casa o en la mía,donde elija, llegan a medio minu-to nuestro.– ¿Cuándo va a descansar con esacruzada?– Cuando los jueces digan algo. Es-tán pillados. Te asustarías con to-dos los informes que hay. Teníapensado dejar el remo de competi-ción en 2010. Había comprado latrainera negra para mí pensando encoger un remolque y viajar por todaEspaña alquilándola y dando cursi-llos. Pero ahora tengo que seguir,si no, sería un cobarde. Estoy en laregata más importante de mi vida.– ¿Si los jueces dijeran lo que quie-re escuchar, lo dejaría?– A mí me quitan el remo y me cai-go muerto. Por otra parte, me inte-resa seguir cotizando. Pero tengoganas de disfrutar de mi familiatranquilo.– ¿En qué quedamos? ¿Dónde estáKorta el año que viene?– No sé nada. No me han dicho nadaasí que sigo en la empresa. Lo úni-co que sé es que estoy en nómina.Mi prioridad sigue siendo Kaiku.Tengo confianza en los remeros yellos en mí. Me he enterado por fue-ra de que Monje les dijo a los reme-ros el domingo en el autobús quecuenta con ellos. Alguno, en plenacelebración, cuando estaba ‘xele-

bre’ ya me dijo que si no sigo yo, nosigue. Supongo que hablaremos enlos próximos días.– ¿Cómo le gustaría disfrutar lospróximos días?– Quiero dedicar más tiempo a mimujer, pero no tengo tiempo. Ojoa los padres que creen que pierdenun hijo o hija porque se van de casa.Luego te vienen tres, y no los pue-des echar. Los nietos han pasado elverano en casa, en Castro. Un Llo-rente y un Messí.– ¿Su próximo reto, show o aven-tura?– Hice una apuesta en Arantzazude que si ganaba La Concha subiríadescalzo. Ya me estoy entrenandopara que no se me salgan callos enlos pies. Anduve descalzo ayer enDonostia. Me imagino que lo harélos próximos días. Hay que prepa-rarse.

«Viendo que me pasaronpor encima los dosúltimos años, no teníaninguna garantía»

«Mi primera opción parael futuro sigue siendoKaiku, confío en losremeros y ellos en mí»

José Luis Korta. Entrenador de Kaiku

«Para Oliden, Sarasua,Altxerri, Aita Manuel y,sobre todo, Estrobo»

En el capítulo de dedicatoriasexplota la vena nostálgica deKorta. «Esta Bandera es para to-dos los que aman el deporte delremo», señala en genérico parapasar después a enumerar variosnombres propios. «Primero se loquiero dedicar a Estrobo –el cro-nista de remo del diario El Co-rreo Xabier Lauzurika, fallecidoen diciembre del año pasado–,que fue quien me sacó un palma-rés con todas las regatas ganadas.Y luego me quiero acordar de losgrandes de La Concha, los que lahan ganado muchas veces en latrainera: grandes como BatistaOliden, Inaxio Sarasua, Juan Li-zarralde Altxerri, Aita Manuel yno sé si me olvido de alguno.Ésos sí que han hecho historia».Esta vez, la fiebre arraunlaripudo con la familiar. Su mujerya tiene otras quince.

REMO 49Martes 11.09.12EL DIARIO VASCO DEPORTES