Entran Able s

7/24/2019 Entran Able s

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www.dramaturgiauruguaya.gub.uy

Entraables

Monlogo para un solo acto

Ignacio Martnez

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Personaje:hombre de mediana edad, alrededor de 50 o 55 aos.

Escenografa:en un extremo del escenario una mesita de bar con dos sillas. En el centro

una ventana. En el otro extremo un sof. Algunos libros, algunos diarios, posillos de caf.

Tres mscaras blanca, negra, ro!a"

Msica# Tangoen piano". Recuerdos Imelod$a en piano". Recuerdos IImelod$a en

viol$n", Milongaen guitarra", Meloda I y Meloda II. Todas las composiciones musicales

son creadas e interpretadas por el autor en disco compacto. %e sugieren tambin sonidosde sirenas, disparos de armas de fuego, corridas de personas & un celular con tono de

telfono com'n.

Sntesis de la obra:(n hombre, poeta l, de mediana edad hace una consulta con una

psic)loga *ue le recomend) un amigo. Ella lo invita a conversar. +l accede & busca en esa

conversaci)n una suerte de terapia por la muerte reciente de un ser *uerido, pero lo *ue

hace es ir reconstru&endo toda su vida & descubriendo *ue tiene un mont)n de muertes

*ue han ido ocupando su alma, llenndola por momentos de dolor, pero al mismo tiempo

reconociendo en esas personas desaparecidas una enorme ri*uea *ue ellas le han

de!ado a lo largo de sus vidas & de su propia vida. Esto le permite recordar momentos con

una mecla de dolor & de alegr$a, revalorando todo lo *ue significaron para l- intensidades

*ue lo llevarn a redimensionarse & pensar lo *ue l puede significar ahora para los otros.

a obra es un momento de recuerdos llenos de estremecimientos, con momentos de sutil

humor, pero sobre todo, redescubrimientos de la vida a travs de la su&a.




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COMIE!O "E #$ O%&$

El hombre entra lentamente. Se oye Recuerdos.

/on permiso1 2racias.

Se sienta en el sof. Se dirige a una persona imaginaria, la psicloga. Termina la msica.

/3o, el gusto es m$o. Es bueno tener amigos en com'n. %$, l me di!o *ue viniera, *ue usted es una

persona mu& abierta1 3o, al contrario, no se moleste, esto& bien a*u$. o *ue pasa es *ue nunca

consult a una 4sic)loga & bueno1 3o, nervioso6... no, bueno, un poco.

!ueda en silencio unos instantes mirando a la le"ana.

/%$, mi hermana falleci) hace die d$as & desde entonces ando perdido. 3o s1

El hombre se acomoda una y otra #e$ en el sof.

/)mo dice6 %$, escribo1 &, de todo1 libros para nios, para adultos, teatro, un mont)n de

poemas1 no, poeta no s si puedo llamarme, no me atrevo. Escritor s$, tal ve, & es suficiente.

7ueno, como le dec$a, la muerte de mi hermana me ha derrumbado & &a no escribo, de! de

escribir1 3o s, por eso nuestro amigo en com'n me dio su nombre. 8ivo de lo *ue escribo. Es un

privilegio, pero me gusta ms decir *ue vivo para lo *ue escribo & como en estos d$as me detuve &

no hice nada, todos han *uedado un poco preocupados19icen *ue no me puedo abandonar as$.

:;u va a ser de m$e cuesta tanto decir *ue has muerto1




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ada ve *ue lo digo se me parte la tierra.

El cielo se derrumba detrs de mis pupilas

& mi boca se calla en ahogado silencio.

>e cuesta tanto decir *ue es cierto1

>e duelen las entraas como ruido de guerra.

En el pulso me laten abe!as asesinas

& la maana clara se me nubla por dentro.

4or *u tu melod$a se ha truncado temprano

si eres buena & tu cara es de manos abiertas6

En tu cora)n llevas los coraones pr)!imos

& te entregas a ellos en resueltas ofrendas.

?as entrado en el mundo de la eterna presencia

intangible, serena, sutil en cada poro.

4or eso s)lo digo hasta luego 2raciela,

nos vemos en los pasos de todas las veredas.

En tu cora)n llevas los coraones pr)!imos

& nuestros coraones estn llenos de vos1

El hombre #uel#e a sof

'%$, tuveun cuadro de1 3o, no fue nada. Entr con dolor en el pecho & me dieron pase al

4si*uiatra. Estn locos1 %$, ellos estn locos, mira al pblicopero no fue nada1 %$, a usted la




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banco1 =o no esto& enfermo me entiende6 = menos de la cabea. 4or favor. 7ueno, s$, todos

tenemos algo pero1 3o, est bien, usted tiene ra)n. )mo6 %i recuerdo otras muertes. laro,

tengo tantos recuerdos. 4ero es ah$ donde est el *uid de la cuesti)n. >e estn pesando tanto los

muertos, *ue parece *ue vivieran plenamente en alg'n lugar de mi alma & no me de!aran en pa ni

se dignaran a marcharse al lugar *ue se les ha asignado1 3o, el del olvido no :por favorientras tanto

vivo lleno de ustedes.

Se dirige a la mesa del bar. Se sienta. Se oye Tango.

/Est bien, si vos dec$s. >aana sin falta vo& al consultorio. )mo di!iste *ue se llama la

4sic)loga6 7ueno, hablar con tu amiga 8ioleta, pero espero *ue no me rompa mucho.

4uede ser. 3o s. Tal ve tengas ra)n & me a&ude. ?o& hace aniversario de ?ugo & son

tantas cosas. o *ue pasa es *ue todos los d$as son aniversarios a*u$ adentro Se toca el

pecho& me parece *ue lo vo& a ver en la otra es*uina. %er por eso6

El hombre toma un libro y hace &ue lee.

(Literatura ma'

>e refugio en vos,

sana locura.

>e refugio en vos




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literatura.

>e refugio en vos

locura m$a.

>e prote!o en vos

sana poes$a

El hombre se le#anta y #a hacia el pblico. Se oye Meloda I.

/a poes$a parecer$a ser el 'nico territorio *ue me salva & *ue los puede evocar tal cualfueron. All los veo, los toco, converso con ellos. En la poes$a mis entraables son

inmortales.

Mira a algn espacio como si hablara con (ugo

(Para Hugo)

Te veo misterioso, como si constru&eras

un mundo paralelo, un manantial de ideas,

un vido ateneo de p'blicas polmicas,

un cabildo poblado de muchos cabildantes

*ue te habitan & andan entre tus pensamientos

como un fresno fecundo de historias & de verbos.

@irme como ese rbol, llano como sus ho!as,

duro de tronco duro & como el tallo, tierno,

me falta tu sonrisa casi de nio eterno

de eternas !uventudes *ue no machuc) el tiempo.

Te nombro ahora & vuelves cual poema de dea#

Bn'til decir ms. 3ombrar alcanaC. Es cierto.




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4ero a pesar de todo me urge hablar contigo.

a muerte de un amigo es siempre prematura,

la partida al recuerdo es a horas tempranas

& la tu&a me tra!o dolor en las entraas,

puntadas en el pecho, sudor de presi)n ba!a,

sensaci)n de vac$o, derogaci)n del alba.

?ombre de pensamiento, reflexi)n en vo alta,

no est en las conclusiones la virtud de la idea

sino en el empedrado camino *ue la gesta,

lleno de otros caminos *ue forman la comarca

por donde va la gente *ue se crua & *ue piensa,

*ue reconoce en otros los sueos *ue se crean.

Tu academia no tuvo pulcritud de academia.

%upo de compromisos, de opci)n de barricadas,

de pasos por veredas, por calles & por plaas.

Tus ideas no saben de neutrales ni asepsias,

son contagiosas, manchan, crecen & desperean

la modorra del mundo *ue contigo despierta.

Tantas cosas *uedaron pendientes de esta charla

*ue espero *ue me llames con tu vo apurada

& vengas a mi casa lleno de frases breves




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o en medio de la idea tomes todas las pausas

& luego te levantes, te despidas, te va&as

con un bueno, nos #emos, con un hasta ma)ana.

3o puedo resignarme a no verte en la calle.

Tendr *ue resolver la forma de encontrarte

en un libro, un peri)dico, detrs de un estandarte,

en el vuelo de ideas, de olas & de aveso entre las multitudes o entre las soledades

o en la sombra del fresno o en la lu de la tarde.

3o me alcana nombrarte & sin embargo es cierto,

tal ve las cuatro letras de tu nombre me basten

para escribir el r*uiem o la vasta eleg$a.

;ui tu nombre sea la s$ntesis de todo

& &a no tenga heridas tu cora)n abierto

& vuelvas con nosotros a ocupar tus espacios.

/%on tantos los nombres. ;ue lo pari) con ese poema de dea# Bn'til decir ms. 3ombrar

alcanaC. Es la me!or declaraci)n de amor !ams escrita en cinco palabras. %i ella tuviera

cincuenta aos menos1 si tuviera1 si todo empeara de nuevo, antes del 'ltimo d$a.

)mo puedo hacer para nombrarlos a todos & nada ms6

El hombre se pone la primera mscara. Se oyen sirenas, tiros, corridas. El hombre se

le#anta y corre para un lado y para otro.




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/:9!enla en pa, !odidos< :orr Elena< :orr< :>etete en la Emba!ada< :?acete fuerte,

cara!o< :3o te de!s agarrar< 9)nde ests6 Eras vos al final6 re$amos *ue era otra,

*ue vos no pod$as caer nunca. 8ol, haceme el favor. 3o te *ueds ah$, suspendida en la

duda.

El hombre #a de un lado a otro del escenario en medio de ruidos y luces intermitentes.

Silencio abrupto. Se oye Milonga. El hombre #uel#e a mirar al pblico sin &uitarse la

mscara.

(Para Elena)

Treinta aos buscndote1

te hallamos tantas veces

te vimos en pretiles

o detrs de los rboles

entre t'nicas blancas

o saltando los pramos.

Treinta aos buscndote1

mil veces te perdimos

pero tu vo estuvo

detrs de nuestras voces

igual *ue tu mirada

deba!o de mis o!os.

9espus de treinta aos

todos enve!ecimos

menos vos siempre !oven




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siempre con tu sonrisa

de tonos renovados

para llegar al alma.

unto tiempo ha pasado

*ui s)lo un instante.

Empecinadamente

vuelves cada maanapor*ue tu invierno tiene

la tibiea del alba.

El hombre #uel#e al sof sin la mscara. Est nue#amente en el consultorio.

/3o, no fue la 'nica, pero ella cal) hondo, sabe. %i, tal ve por su vie!a, la Tota *uerida. Es *ue a

veces me parec$a *ue Elena se encarnaba en su madre & le !uro *ue no s si es delirio de escritor,

pero ms de una ve sent$ *ue la madre nac$a del vientre de su hi!a. 3o. 4or supuesto. Esto es una

metfora. 3o me mande al 4si*uiatra. 3o me lleve a un psi*uitrico. Esto& bastante bien. @ue una

broma. @ue una metfora. 4ero eso es lo *ue siento tambin con tantos otros# amigos & amigas *ue

parieron a sus padres. En serio. = s$, *u *uiere *ue le diga, a veces tambin pienso *ue hablan a

travs de mis palabras. 3o *uiero hablar por ellos, no. Es ms, a veces sus silencios son tan

fuertes, & lloro como un marrano. Ellos son mis entraables, entiende6 8an ms all del raciocinio,

aun*ue todos sab$amos *u hac$amos. 3o fueron delirios de !uventud ni aventuras de idealistas

ut)picos. Aun*ue algo de utop$as me *uedan todav$a.

Suena Meloda II. El hombre #uel#e a pararse, #a a la mesa del bar y habla con *alguien+. Se pone

la segunda mscara.

(Para un desaparecido)

=o eli!o mi vida




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&o eli!o mi muerte

no sos vos, homicida,

el *ue me muere.

>uero con el olvido,

con los ausentes,

con los *ue no caminan

sobre los puentes.

3ac$ dos veces#

el d$a de mi arribo

& el de mi muerte.

uando me encuentren

me morir de veras

& tercamente

vo& a nacer de nuevo

eternamente.

As$ *ue no me mates

por*ue no muere

el *ue vive en los pasos

& entre los dientes

de los *ue a'n caminan




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de los *ue cantan

los *ue mil veces caen

& se levantan

El hombre se &uita la mscara y reacciona como si recibiera la llegada de alguien a su mesa.

Sonre. Se pone de pie, saluda y se #uel#e a sentar.

/(bagsner, casi no te reconoco. 8en$, sentate a*u$, tomate una. :>oo, sirva al amigo< o de

siempre6 :%$, medio & medio, gracias< Decin saliste de la fbrica6 =o6 =o ando en una consulta

con la amiga de un amigo. %$, es 4sic)loga. Tens ra)n, a veces ha& *ue hablar con otros para nohablar solo con el espe!o... o con un muro ;u dec$s6 3o. 3o se termina nunca. omo la vida.

(na ve *ue nacs es para siempre. laro, despus de la muerte cambis de forma, pero algo sos#

osamenta, recuerdo, cenias, poes$a, nostalgia, dolor, alegr$a, hi!os, nietos, amigos *ue te evocan,

homena!es, placas de bronce, nombre de calle, aorana de unos, puteadas de otros1 pero si no

sos olvido, algo sos.

El hombre mira al pblico y #uel#e a or Tango. Recita como hablndole a bag-sner, poni-ndose

de pie y dando #ueltas alrededor de la silla #aca donde se supone &ue est su interlocutor.

(Para Ubagsner)

;u fechas se pondrn sobre tu tumba6

;u texto escribirn en tu epitafio6

3aciste con tu arribo a la existencia

& cuando te tragaron los demonios, naciste

& a&er, cuando volviste a la penumbra, naciste.

Tres nacimientos luminosos...

>oriste, como todos morimos un po*uito,

el d$a *ue comen) tu vida#

el via!e de regreso hacia la nada.




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4ero hace treinta aos te moriste tambin

& a&er te volviste a morir a plena lu

o ms bien te regresamos la muerte

*ue te robaron hace treinta aos.

Tres tiempos tan distintos & distantes...

;u fechas se pondrn en tu epitafio6

;u texto escribirn sobre tu tumba6

Tres fechas *ue te dan el nacimiento.Tres fechas de tres formas de morir.

ul de todas escribir en tu lpida6

=o *uiero poner s)lo tu nombre,

s$ntesis de todo lo ocurrido,

para escribir maana con un hueso chi*uito,

los epitafios *ue me *uedan

en mi memoria & en la tu&a

*ue guarda tantos nombres, todav$a...

El hombre de"a la mscara. uel#e al sof.

/= s$, fueron aos mu& bravos. =o era un muchacho, pero todo lo *ue hicimos no fue un

delirio !uvenil. suena el celular con tono de tel-fono comn.

/9isculpe. 3o lo apagu cuando entr a la consulta. El hombre saca su celular y lo mira.

/Est apagado. El celular sigue sonando. :Est apagado & sigue sonando< ;u me

calme6 Este es el sonido *ue siento a cada rato & me censuro & me censuran & me trato

de refugiar en la poes$a para ver si me alivio, pero tambin asoman por all$ mis muertos

*ueridos, mis entraables, & vuelven a sonar como admirable alarma contra los olvidos &

las colas de pa!a & los homena!es hip)critas & los recuerdos pegotines o remeras o gorros.




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= tanta mierda1 :4or supuesto *ue ha& gente formidable *ue *uiero tanto< 4ero ha&

formas & formas para el punto final. (na, la peor, es el olvido o la resignaci)n de *ue no

ha& nada para hacer o *ue las cosas son as$ & no pueden ser de otra manera. a peor

forma de morir es terminar pensando de la misma manera *ue el *ue nos mata entiende6

El celular de"a de sonar. Se oye Tango.El hombre toma la tercera mscara y comien$a a

recitar le#antndose del sof y ad&uiriendo cada #e$ ms fuer$a, como marchando, hasta

terminar el poema subido en la silla como si fuera una tribuna. Recita como si estu#iera en

un acto, en una trinchera, con enardecida pasin. /os espectadores hacen como el pblico

de ese mitin imaginario.

(Para mis hermanos comunistas)

=a los asesinaron una ve

*uin *uiere volverlos a matar6

*uin *uiere resarcir tanto dolor6

*uin puede reparar el sufrimiento6

no sern las monedas del olvido6

no ser la desmemoria & el silencio6

3o ha& dinero ni metal en el planeta

*ue nos pueda *uebrar este recuerdo.

%)lo con la verdad & la !usticia

encontraremos pa en nuestro pueblo

*ue se muri) una ve en cada muerto

& en cada muerto se levant) de nuevo

para seguir andando como ho&

por*ue el punto final nunca fue cierto,

por*ue se puede morir s)lo una ve




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& por*ue nadie mata por decreto

& por*ue ho&, a treinta & ocho aos,

tenemos un debe & un anhelo#

el mundo esplendoroso para todos

por el *ue se murieron nuestros muertos.

0on cierto pudor, #ol#iendo a la realidad, descubri-ndose sobre la silla, en una posicin

absurda, se nota e1puesto ante la gente.

/4erd)n. Mirando al pblico. 4erdone. Mirando a la psicloga. Esto creo *ue lo escrib$hace poco. /o dice subido an en la silla, mirando al sof, con una pose incmoda y casi

ridcula. 2a"a y #uel#e al consultorio. %e acuerda de los comunistas *ue fusilaron en el

4aso >olino6 3o &o no los conoc$1 4ero *u digo si estn dentro de m$ & ocupan un

inmenso territorio de mi esp$ritu cansado & hace treinta & ocho aos *ue coexisten con mis

desventuras.

El hombre #a #ol#iendo a cierta perple"idad, agobio, derrota. Mira la mscara. Se hace

silencio.

/= s$, doctora, le puedo llamar doctora6 Ah, no6 8ioleta, noms6 7ueno. BEl tiempo

pasaC. %$, como la canci)n. B3os vamos volviendo vie!osC & muchos *ue lograron

sobrevivir, tambin se mueren, como ?ugo, como D'ben, como oel all le!os, como

tantos. 8uelvo el viernes6 4ierda cuidado, est todo bien. a verdad es *ue creo *ue me

siento bien charlando con usted. ?asta la pr)xima.

El hombre se le#anta y camina como sin rumbo por el escenario, mirando a&u y all.

Suena Recuerdos I. Se detiene frente al pblico y recita el poema como contndoselo a la

gente, mirando a cada espectador incisi#amente. Tiene mscaras en sus manos y mira

una y otra como si tambi-n les hablara a ellas.

(Para Rben Prieto)




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?a muerto un anar*uista.

;ue nadie ba!e las banderas.

as utop$as lloran de pie

como el internacionalismo.


ual*uier lugar del mundo es bueno

para vivir como las plantas,para morir como las aves.


a libertad de luto mira

c)mo se va el hombre solo,

c)mo eternamente se *ueda.


%e abre paso entre las sotanas,

derrumba los templos de ideas

*ue ven el sol a la intemperie.


%u cuerpo no dar ms sombra,

se olvidar su vo & un d$a

ser la lu del d$a nuevo.




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Anduvo con su casa a cuestas

=a no ser ms l, andando,

a partir de ahora me habita.

El hombre sale apurado. a con las tres mscaras. /a msica termina. 0omo si entrara al

consultorio, se sienta en el sof, pone las tres mscaras a su lado, bien #isibles. 0uando

*entra la 3sicloga+ se pone de pie y la saluda.

/9isculpe, pens *ue no llegaba. 3o, no se mi hio tarde por ninguna ra)n. Anduve vagando por lacalle. = s$, pensando, ando siempre pensando. 3o, no ando me!or. ?e descubierto *ue me ocupan

otros entraables *ue ni si*uiera conoco. :laro *ue so& un tipo mu& sensible< (sted no6 1 3o

lo puedo evitar. Es as$. Esto& a*u$ para *ue me a&ude a superarlo. 7ueno, no s si *uiero

superarlo. En realidad dir$a soportarlo, por*ue me llega la noticia & &a es suficiente. %$, desde el otro

d$a escribo como loco, a& perd)n, como loco no, como lo *ue hago todos los d$as sin contar ese

parntesis *ue tuve. 4ero, bueno, me llega hondo & encuentro en la escritura como un escudo. 3o,

no es un desahogo. Al contrario, me resulta un campo de batalla & cuando termino el texto siento

*ue he vencido pero termino como si me hubieran dado una palia. omo en la guerra *uin

puede hablar de victoriosos6 ;uienes son esos otros entraables6 7ueno, le digo.

El hombre alterna una y otra mscara sobre su rostro. Se oye Recuerdos II.

/os vie!os solos, los *ue nadie visita, los *ue nadie atiende por*ue estn ms all & se cagan & se

mean1 perd)n, pero bueno, es as$. os vie!os *ue se mueren estirando sus braos, como dice

2aleano, sin *ue esos braos encuentren a nadie ni ha&a nadie *ue los to*ue o los abrace. Eso me

pega fuerte.

:Ah & los nios< 9anan alrededor m$o & no separan sus o!os de mis o!os. Es una mecla rara de

infinito amor & de dolor. 3o ha visto las fotos6 %e publicaron por todo el mundo. 3o s, me da lo




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mismo si son de 2aa o de 3igeria o de Duanda o de la ndia o 4aFistn. 3o puedo definirlo. %$,

8ioleta, por eso escribo.

/a msica Meloda II contina. El hombre se le#anta y comien$a a dar #ueltas, a girar, a

hacer como &ue "uega a la escondida. Se detiene, pone las tres mscaras en el piso y

recita el poema mirndolas.

(Los nios de Ga!a)

4arece *ue durmieran

pero no duermen

ni suean

ni pueden despertarse.

Estn all$,

envueltos

como recin nacidos

pero no nacen.

4arece *ue miraran

*ue rieran

*ue esperaran

pero no miran

no r$en

no esperan.

%)lo pueden morir

& mueren.

Tienen la esperana de vivir

si no los matan

pero los matan




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& aun*ue pareca *ue duermen

estn muertos.

/8engan, levntense, vengan conmigo, no se *ueden ah$ como troncos ca$dos, mutilados

por las sierras asesinas :venganir, te esto&

tuteando. Est bien *ue nos tuteemos o eso te involucra demasiado6 8olviendo a los

nios, vos misma deber$as dedicar una parte de vos para ellos.

uel#e a mirara la mesa y las mscaras. Se oye Tango.

/(stedes son parte de m$, no cabe duda. Mira al pblico. (stedes son parte de m$. Se

le#anta y se acerca al proscenio.a verdad es *ue no hubiera *uerido tenerlos en mi

alma, pero all$ estn. Todos nacen siempre & es as$. 8an naciendo siempre, llenndome

de recuerdos, pero al mismo tiempo consumindome. Es bueno, saben, por*ue adentro

m$o cobran vida. )mo6 4irigi-ndose a la 3sicloga. %$, te agradeco. >e siento bien.

>e siento vivo & a ellos tambin los siento vivos desde alg'n rinc)n de mi universo. 8o& a

llamar a nuestro amigo para agradecerle. 3o s si termin mi luto, pero siento *ue llevo

me!or esta carga, *ue &a no pesa tanto o *ue pesa pero de otra manera. >e ped$s un

balance ahora6 o escribo & te lo mando en una ho!a. En el inmenso territorio de la

escritura es donde creo *ue me expreso me!or. 2racias por todo.




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El hombre se #a a la mesa de bar, toma un papel y un lpi$. a diciendo el poema como si

lo estu#iera escribiendo miando una a una cada mscara. El hombre #a leyendo cada

#erso lentamente, en tiempo de escritura.

("rbol)

%in ellos vo& *uedndome sin ho!as.

>is ramas son de inviernos permanentes.

4ero de alguna de ellas nacen brotes

& todav$a ha& p!aros *ue anidan,

todav$a dan sombra mis ra$ces.

/Se detiene, mira al pblico y les habla.9esde el principio hasta el final es mientras tanto.

%iempre ha& un mientras tanto para todo. ;uiero ocupar espacios con mi poes$a

mostrando por el mundo a cada ausente *ue llevo entre mis manos & mis o!os, como los

o!os de ellos & sus manos.

5hora el hombre dice el poema.

%in ellos vo& *uedndome sin ho!as.

>is ramas son de inviernos permanentes.

4ero de alguna de ellas nacen brotes

& todav$a ha& p!aros *ue anidan,

todav$a dan sombra mis ra$ces.

El hombre toma las mscaras, se da #uelta, se dirige fuera del escenario. Se apagan las

luces menos un foco. /a msica sigue. El hombre #uel#e a entrar apurado.

/3o firm mi balance. A ver. =a est. 8o& a firmar as$# B>is entraablesC. (abla con algn

portero. %$, disculpe, es para la psic)loga. 3o, no importa. 3o la moleste. Ella no me

espera. Est esperando estos papeles. %e los puede alcanar6 >uchas gracias. %$,

d$gales *ue son de parte del poeta, ella va a entender.




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El hombre muestra su papel al pblico. /a msica contina. El hombre se retira. Se apaga

todo el escenario.

(in de la obra)

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