ENDI Cuenta una historia la olvidada carretera de la Piquiña

download ENDI Cuenta una historia la olvidada carretera de la Piquiña

of 2

description

Mismo artículo que el anterior, con algunos cambios menores, publicado en la versión impresa del periódico el 4 de julio.

Transcript of ENDI Cuenta una historia la olvidada carretera de la Piquiña

04 Julio 2011 Puerto Rico Hoyhttp://www.elnuevodia.com/cuentaunahistorialaolvidadarutadelapiquina-1007423.html

Cuenta una historia la olvidada carretera de La PiquaHay quienes an chinchorrean all

Hay lugares que siguen siendo puntos de encuentro en la ruta zigzagueante de La Piquia, como La Lechonera El Cuao. (Archivo ) Por Joel Ortiz Rivera / [email protected] En esta poca del ao, de paseos familiares, vacaciones y relajacin, los flamboyanes le dan la bienvenida al visitante creando con sus flores su mejor alfombra de color fuego. Cierto es que la uno o la carretera vieja, conocida por algunos por su famoso tramo La Piquia, hace dcadas qued sustituida por el Expreso Luis A. Ferr como la principal va de conexin entre el norte y sur de la Isla, pero la PR-1 an huele a historia: tanto a la oficial como a la de cada conductor que pas o pasa an por all. Fue el proyecto de ingeniera ms ambicioso en Puerto Rico y ya en el siglo XIX era el logro ms importante de los espaoles en trminos de transporte, indic el historiador Rafael Torrech. Se cre un sistema de comercio en torno a ella pero languideci cuando se convirti en una va secundaria. La PR-1 fue parte de la Carretera Central, que el gobierno espaol comenz a planificar en 1859. Inicia en San Juan y cruza por Caguas y Cayey. En ese punto se divide en la

PR-1 y la que hoy se conoce como la PR-14 que entra a Aibonito, Coamo, Juana Daz y termina en la Perla del Sur. Por su topografa, la sabidura popular nombr un tramo de la PR-1 entre Cayey y Salinas como La Piquia. Entre los boricuas de mayor edad todava hay recuerdos e historias de la planificacin que requera un viaje de San Juan a Ponce por all, incluyendo paradas de descanso para lidiar con los mareos y la neblina. Aunque an sirve como una de las vas de acceso a algunos pueblos, el tramo ha adquirido un matiz recreativo que atrae a motociclistas y clubes de jeeps que participan del llamado chinchorreo dominical, que se recrean y relajan con la vista panormica.