En Brasil se instauro la monarquíaPor daniel travez

El caso de Brasil es muy curioso, ya que es el único país de Sudamérica que se independizó sin derramar una sola gota de sangre. Además, Brasil optó por instaurar un sistema monárquico contrario a las repúblicas que Bolívar y San Martín liberaron.

Cuando Bonaparte invadió Portugal, toda la familia real portuguesa se trasladó a Río de Janeiro. Esto marcó un cambio radical en el Imperio Portugués, ya que si bien Lisboa ya no era el centro político y administrativo del imperio, la autoridad del emperador Juan VI no disminuyó como en el caso de España.

Al convertirse Río de Janeiro en el centro de poder, la ciudad se convirtió en la más desarrollada del continente. Además de la infraestructura de museos, catedrales, universidades y academias, su región se estableció como un país casi a la par que Portugal.

Cuando Bonaparte fue derrotado, la familia real portuguesa regresó a Portugal, excepto el príncipe heredero, don Pedro de Braganca. Brasil se había convertido en un reinado casi similar a Portugal. Ante la presión de los nobles portugueses para que volviera a su carácter colonial, Pedro I la proclamó independiente con el Grito de Ipiranga en 1822, así continuó su carácter imperia hasta 1888.

La independencia de Brasil probó algunas conclusiones sobre cómo debía llevarse un proceso de autonomía en el Nuevo Mundo y los demás territorios europeos. Primero que una élite educada era la mejor opción para que gobierne los nuevo territorios, segundo que un proceso independentista sí podía darse de manera pacífica sin tener que recurrir a las arma y, finalmente, que el convertirse en nación libre no significaba deje de comerciar y mantener relaciones amistosas con la madre patria.

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