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la adaPtación digestiva del lechón recién destetado: un reto extraordinario para el nutrólogo La producción porcina moderna se caracteri za por realizar el de te te del lechón de manera muy temprana, habitualmente en tre antes de la 3" y la 4" semana de vi da. E n esas condiciones, el destete representa para el lechón un desafio extraordin ario.
Rafael Gustavo Hermes y José Francisco Pérez. Grup de Nutrieló, Manelg i Beneslar Animal. Departament de Ciencia Ammal ¡deis Aliments. Faculta! de Veterinana. Unlversltal Autonoma de Barcelona. Grupo de Investigación en Nutrición. Manejo y Bienestar Animal . UnlverSltat Autónoma de Barcelona.
~\ separacion brusca de la madre, el
transporte y el cambio en las con¡clOnes ambientales son factores
c..¡ue incide n so bre el stress de los ani males. Por otra parte, el cambio a la ración sc>lida y la necesidad de aprender a heber agua en los bebederos conrri buyen a I.lue los animales reduzcan su consumo de alimcnlO. y presenten un periodo ,-ariable de anorexia durante los pnn1croc:¡ días tras el destete. Durante este periodo la e~trllctllra y fun ción de la mucosa intestinal se encucn tra comprometida y el riesgo de sufrir
patolObrías digcsLivas se incrementa. Tradicionalmente. el nutrólogo ha
enfrentado el problema del destete mediante la IIlcorporaciün de anumicrobianos en el picnso, entre ellos los antibióticos. aditi, os o el óxido de Zn. Sin embargo. 1ft compll.:jiuad de factores que intervienen en el destete aconseja tomar en considcraci('>n numerosos aspectoc:¡, como son el manejo y la allmcnraclún. 1:.1 ub¡cm'o de este capitulo será informar sohre la fisiología y microbiología dcllcchún. E.n este sentido, inrcnraremos buscar c"idcncias
que relacionen la presencia de al!-,runos ingredientes en el pienso y sus efectos sobre la estructura y función dig:esth'a, c:¡obrc la salud del animal) sobre sus rendimientos productivos.
El destete vla Iuncl6n digestiva l .a primera consecuencia c1am del destete es su efectO depresor sobre la ingestión de alimento (Figura 1) . Hasta un 10" /0 de los lechones no realiza su primera ingestión transcurridas 40h [ras el destete. I.a consecuencia es el deterioro en la integridad y la función
dlg:esm-a, con malabsorClón, y posible di:lrn::1 dc .. hidr:lt;lcic')n \. d l"hin"is in -, . te"tinal. Tres días tras el destete, el reducido consumo enlentece el \Taci:1.do J..,~srrico y el trán"lto digcstlH) en mrcslino delgado. El dcstete produce también un descenso en la altura de las \'eIlosidades ~ acti\·id:1.d de los enzimas, que termina comprometiendo la digestiún de la raciún. En estas condicioncs, se considera prioritario facilitar el inicio al consumo de alimento. I ~n
este periodo son Importantes los aspectos de manejo, como el facil acceso a toh as \. bebederos, y la adecuada h.: llqH:r,tlura ambiental (.) tamaño oc grupo animal.
I,a Incorporación de nuevos ingredie mes en el pienso, en su mayor parte yegetalcs, conlle\ a el aporte t!t: cantidades crecientes ele almidón, polisacáridos no amiláceos y proteínas vegetales de menor digestibilidad. 1.1 presencia en el contenido digestho de estos sustratos facilita la colonización en el intest ino de nuc"as especies micrubianas, la generación de nue\os ambientes digestiHls, r lo (Iue es más importante, un reto añadido para el sislema inmunitario del animal. El diseño de una ración ad<.:cuada para cIlcchón trata de estimular en los animale~ su COI1-
~U1110 y proporcion.\r las condiciones ambientales del tracto (lIgesti,'o que mantienen el e(IUllibrio entre el hospedador y sus microorganismos, previniendo el deterioro de la funciún dige"i\'a (Fig. 2).
la colonización microbiana La colonizaciún microbiana describe el proceso por el que la población bacteriana dd tracto digestiw) se establece en ramaño a lo largo del tiempo sin necesidad de una rcintroducciún periódica (Gaskins, 20(1 ) . Para ello, las bacterias necesitan alcanzar una capacidad de replicaCión igualo superior a su rirmo de e\'¡lCuación o la\'ado por tránsito di~esti\'o; () en su defecto adherirse de alguna manera a la mucosa IIltc.:stinal. Otros factores que condiCIOnan la colonización son: la reacci()n Inmunitaria local, la presencia de receptores de adhesión, la dis ponihilidad de susrr:HO, el flujo digestivo o el p l l (Slc\\arr \' col., 1993; Kclly amI King, 200 1).
Fig 1 - Curva media típica de Lngestlón de alimentos de los lechones alredeor del destete. Adaptado de Brunmx et al
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I,a co}uni7ación microbiana comien7a en el mismo momento del parto. Durante ese episodio el lechón se expone a un c1e\'ado número de bacterias, entre las (Iue destacan E. coli y StreplOcoccUS spp. Durante la lactación, Iacrobacilli r Srreptococci se convienen l!n la proulació n mayurita ria, junto con algunas poblaciones de Clostridium, l3actcroides y Bifidobacteria. En concreto, durante este periodo inicial el consumo de las heces de la cerda cs la principal vía de entrada de microorgani~mos en el kchón; por lo (¡UC resulta prometedor mejorar el equilibrio microbiano de la cerda como medidn para reducir la llegada de patóg-enos a los lechones. Tras el des-
tete se: ob~cf\Ta un brusco descenso en la pohlaciún microbiana, una reducción en la biodi\cr~idad de los Lactobacillus, ~ su sustitución progresiva por poblaciones más caractensricas de los animales adullo~, como Bactnoi des y Emerobacterias.
la actividad microbiana: un equilibrio dificil de mantener I.a población microbiana influye de manera c:\traordinaria sobre la estructura y la función digestiva. En experimentos en los que se ha prescn"ado a los animales sin microorganimos en su tracto digesth'o, la lont-,ritud y el grosor de la pared digestiva se estrechan, la inmunidad local se deprimc, y el trán-
la colonización microbiana describe el proceso por el que la población bacteriana del tracto digestivo se establece en tamaño a lo largo del tiempo sin necesidad de una reintroducción periódica IGasklns. 20011
~ Fig" 2 - Representación esquemática del ecosistema intestinal. I~mado "Salud Intesllnal" (modificado de Conway, 1994). cada elemento mteracclona con los otros para mantener el
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;) sito dige~ti\'o se cnlcmece X'osrmann, 1996; Falk y col., 1998; Van Kesscl y col., 2(XI4). 1_, presencia de una población microbiana estable genera también condiciones inhibitorias para el estab lecimiento de nuevas especies, e 111 re las t..¡uc puedcn cncontrarse.; po~i
bies patógenos (Rol fe, 1996; Hooper y col.,2(XIl ).
En su conjullw, la actividad microbiana facilita la fermentación de susrratos, libera ácidos g rasos voláti les, y posibilita con ellos una pe<'lueña absorción de energía. in embargo, algunas hacterias producen enzimas mucolíti cos que alteran la compusición de las mucinas de la pared intestinal, comprometen su función como barrera digcsriva. y pueden facilitar la translocació o (in\'asión) bacteriana hacia la lámina propia de la mucosa intestinal (Deplancke and Gaskins, 200 1; Kclly and King, 20(1 ). E l crecimiento de alguno de estoS patógenos, cuma puede ser el caso de Eschcrichia coli enterotoxigénico, puede desencadenar la aparición de procesos diarreicos que comprometen la función digesr.i\'a y la salud general del animal.
Estrategias de a"menl8CIOn del lechón tras el deSlele Las raciones administ radas aJ lechón son generalmeme complejas y con una e1e\'ada presencia de ingredientes de o rigen animal Oácteos, pescado, O plasmáticos) , concentrados proteicos, o aditi\,os. I.a literatura científica r de di\·ulgaciún ha presentado en los ú lti mos años una atención mayoritaria al LISO de aditivos en la alimentación del Icch{)n. Destacan los nd ilivos co n características antin1icrobianas, pOlcnciadoras de la función digestiva, del consumo de pienso O de la actividad inmunitaria. Entre estos aditi\,os en contramos los propios antibióticos, ácidos orh7fÍ.nicos, extracros de plantas, enzimas, prebióticos, probióticos o minerale~ a elevadas dosis. En el presente capítulo centraremos nuestra atención en la elección de los ingredientes que suministran la mayor parte de la cnerbría Y proteína al animal; fun damentalmente cereales, concentrados proteicos e ingredientes fibrosos, a) Los sueros y los cereales I.os lechones recién destetados pre-
Sentan una limitada actividad amilasa y de \'ida los niveles de lactosa recomen-disacaridasa, lo que representa un limite en su capacidad digestiva confronte a los cereales como principal fuente de energía (1\ laxwdl and Carter, 2001). L, incorporación de lactosa en el pienso prestaner facilita el proceso de adaptación de la leche a la alimentación sólida. Entre los ingredientes que contienen lactosa, destacan e l suero ácido, dulce o rceng rasado, la b ClOS:l cristalina )' el permearo de lactosa. La incorporación de lactosa hasta ni"eles del 30-4011/ 0 permite alcanzar elevados rendimientoli. Sin embargo la mayor dimensiún de la respuesta se ohsen·a en el tramo de contenido en lactosa del O al 30% . Generalmente se recomienda que las raciones de primera edad contengan entre un 10 Y un 15% de lactosa, J\ lás allaallá de la 5~ semana
dados se reducen al 0-5% (Bauccls, F, Comunicación personal).
Los principales cereales uciLzados en las raciones prestaner son el maíz, trigo, cebada, arroz y a\'ena. En general, los cereales se caracterizan por contener diferentes proporciones de almidón y polisacáridos no amiláceos, Las diferencias provienen de la presencia u no ele cascaril la en tre cereales vestidos y desnudos, de la proporción de aJmidún en la semilJa, y de la configuración de este ;Ihnidón (vítreo o harinoso). El arroz, ya sea cocido o crudo, ha cobrado un elevado interés en los t'lI timos años C01110 cereal mayori tario en las primeras edades. ¡\ su e1e,·ada apetecibilidad y digestibilidad se aiiade el menor riesgo de promover en los animales cuadros diarreicos (plus-
las raciones administradas al lechón son generalmente complejas v con una elevada presencia de Ingredientes de origen animal [lácteos, pescado, o plasmáticos), concentrados proteicos, o aditivos
Algunos autores sugieren que el arroz cocido contiene factores que pueden inhibir las secreciones de electrolitos en el intestino delgado, v en consecuencia reducir la magnitud del proceso diarreico
kc )' col., 2002, I\lateos )' col., 2006). Algunos au(Ores sugieren que el arroz cocido contiene factOres que pueden inhibir las secreciones de c1ec([oliros en el intestino delgado, y en consecuencia reducir la magnitud del proceso diarreico J f.the",s )' col., 1999) . Entre los diferemes cereales, destaca también la rápida djgestión del .Imidón de la avena, que hace de éste un ce real de elecció n en In alimentación dcl lechón.
Durante los últimos años se ha estucliado con interés la posible influencia del cereal utilizado sobre el riesgo de los animales a su frir colibaci losis. I\IcDonald)' col. (200 1) observó mediante infecciones experimentales con E. coli 08; K87; K88, como la incorporación de cebada desnuda sobre una ración base de arroz cocido incrcmcn"ba la proliferación de E. coli cnterotoxigénico y compromcúa los resulta-
dos productivos ( r abla 1). Los lechones alimentados con arroz crecieron más)' mostraron un menor peso digesti,·o. Los resultados sugieren que la presencia de PN¡\ solubles (fl glucanos) en la cebada puede estimu lar la proliferación de E. colj en el intestino delgado. La presencia de estos polis.cáridos solubles se ha relacionado con un incremenro de la \-isc sldad digestiva, (Iue puede co mpromerer la digestión, enlentecer el tránsito digestivo, y con ello faci litar la proliferación de las cnrerobacterias (H opwood and I lampson, 2003). Ver Tabla 1.
En contraste con los resultados an-. . . tenores, Otros autores sUgieren incor-porar PI 1\ en las dictas prestarter como estrategia para mejorar la salud intestinal )' reducir las patologías digestivas tras el destete (Bertschinger )' col., 1978). r\umaitre y col. ( 1995) sugi rió que la incorporación de ingredientes
fibrosos puede promO\·er la fermentación de carbohidratos, reducir la fermentación de proteína y la incidencia y gravedad de la colibacilosis (Pluske y col, 2(02). En este sentido, la pulpa de remolacha se ha propuesto como un ingrediente :Hr~("fivo po r su fcrmen tescibilidad. Otros ingredientes como la cascarilla de avena o cebada, )' el sal,rada de trigo han presenmdo resultados interesantes sobre la colibacilosis; posiblemente asociados a sus efectos sobre el transito digestivo. Carnciro r col. (2007) presenta resultados en los que la incorporación de salvado de trigo incrementa la producci6n de butirato en el contenido digesu\'o. Su presencia en la digesta resulta interesante como principal nutriente de la mucosa intestinal del colon. La incorporación de salvado en un 4% en ensayos similares realizados en nuestro laboratorio, nos permitió o bservar similares incrementos en la concentración de butiraW, asociados con un marcado descenso en las poblaciones de cntcrobacterias durante los primeros 10 días tras el destete (r abia 2). Recientemente, Bikker )' col. (2006) evaluaron el efecto del nivel de prOteína)' de los carbohidra- :)
Tabla 1. Crecimiento, peso de intestino grueso, concentración de AGV y viscosidad digestiva en lechones no infectados e infectados alimentados con una dieta ase de arroz o de cebada desnuda McDonald col. 2001
No infectados Infectados P-valor Arroz1 Cebada2 Arrozf Cebada2 SEM Dieta Enfermedad
Ganancia Canal (g/d) 74 26 -28 -56 363 • Intestino Grueso (% peso vivo) 27 38 26 3,2 062 .. AGV en el Colon Distal (mM) 84 114 60 78 204 .. DH en el Colon Distal 6,8 61 68 65 037 .. Escherichia coli en el Y~uno3 O O 09 42 244 • Escherichia coli en el Colon3 O O 32 6,2 189 .. Viscosidad en ellleonjcP) 21 28 16 2,~ 113 • · P<O,05. · · P<0,01. "·P<0,001. IOleta basada en Arroz (aI1<:g de dieta): arroz blanco COCido, 702; PSA soluble, 4; protemas de origen animal, 197. ~Oleta basada en Cebada (g/kg de dieta): Cebada perlada, 500; PSA soluble, 25; arroz, 275; proteínas de origen animal. 200. ~Expresado como log10 de unidades formadoras de colonia de E. coll hemolitica/g de raspado de mucosa.
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'Oiets: Cl, control diet; we, wheat bran diet; sep, sugar beet pulp diel: and We-SBP, wheat bran and sugar beel pulp dieto ~L : E , ratio lactobacilli :enterobacteria . • y Dlfferent superscripts in Ihe same row lar diel means denotes significant diflerence (P < 0.05).
toS fermentables sobre el rendimiento de lo, lechones! los perfiles de fer mentación en el tracto digesth·o. El incremento en el aporle de fibra promovió un incremento en el número de I.actobacil lus y un descenso en los con tajes de coliformes, as í como "3-riaciones en los pcrtiles de fermentación asociados a una menor fermentación de proteína en el tracto digestivo.
Podemos conclui r (Iu e 1" inco rporación de ingredientes con un destacado contenido en PN \ ejerce efectos variables en función de las características de composición y fisico-<-Iuímicas de los componentes de la libra. En término~ generales, la fibta soluble retarda el transito digesti,·o y el , 'aciado gástrico, reduce los ritmos de absorciún Je nutrienles c incrementa la sccreci{m pancreática, 1 ,.os P 1,\ solubles pueden ser faclOres predisponen tes de la co libacilosis, fundamentalmente si su p resencia conllc,'a el in cremen lO de la viscosidad. Po r su parle, la fibra insoluble red uce los tiempos de transito, e incrementa la capacidad de retenciún de ag-ua de la d igesta; lo q ue puede ayudar a limitar la g ra\'edad de la colibaci losis en condiciones experimentales (,\ fomagne y col. , 2003). b) Los concentrados pro teicos Los lechones recién destetados son especialmente sensibles a la protc1na de la ración. J\ lgunas de estas proteínas pueden pro\'ocar una reacci6n inflamato ria en el tracto digestivo, red ucir el crecimiento e incrementar la mortalidad de 1m animales (Li r col., 1990). Entre los ingred ientes di sponibles destaca el interés de la leche. No en vano, h leche es e l ingrediente de consumo casi exclusivo duran te la lactación por parte de los lc.::chol1es. La p roteína de la leche se considera una excelente fuente proteica; ~u dig-esribilidad es muy alta y el balancc de aminoácidos esenciaIcs excelen te. in emba rgo, su precio es elevado, Como alternati"a a la leche podenlos disponer de diferentes concentrados proteicos obtenidos del suero, con rendllnientos <-Iue son semejantes a los obtenidos con la leche (Tokaeh y col., 2(03).
En los últimos años se han incorporado nuevos ingredientes de origen animal en la ali mentación del lechó n, como es el caso de las proteínas plas-
máticas. De una forma consistente, se acepta que la incorporación de plasma estimula el consumo de los animales y sus rCndll111CnrOS (.:\ Iax,,"cll and Carter, 10(1 ) . La mayor dimenSIón de los efectos genera lmente se obsen'a con el primer 5'1//1 de inclusión de plasma en la ración (ll amen! col., 1993). Sin embargo, como ocurría en el caso de la leche, el c1e,'ado precio limüa su incorporaciün en el pienso a los 7-10 primeros días lras el destete. Entre las ,rirtudes que se han ,eñalado sobre el plas-11171, dc.::StaGl la mejora de la palatabilidad del pienso ("rmer y col., 199-1), la protección inmunitaria (Coffe)' and Crom",e ll , 1995) o el b loclueo a la adhesión microbiana a la mucosa intestinal (:-:ollet y col., 1999). Lo respuesta al plasma con frecuencia dependc del estado sanitario del grupo, siendo ma\'orcs los efectos en las condiciones ;nenos sa ludables (Cofre)' and Crom\\'ell, 1995, Tokaeh y col., 2lm).
O tros ingredientes de origen ani mal util izados en la :.l li mcntación del Icch6n son la harina de pescado o los hidro li 7ados de mucosa intesti nal. La incorporación de harina de pescado de buena calidad es habitual en la alimcntación de las pnmc.::ras edades. I.os ni,'eles de inclusión recomendados oscilan entre el .¡ r el 8°10 (;'\ Iax,,"ell and Ca rre r, 200 1) . Por su parte, el hidroli-7ado de mucosa intestinal es un ingrediente apetecible, rico en aminoácidos, y con caracte rísticas competitivas con Otros ingrniientes de elc,'ado coste y ,'alor como es el plasma porcino (:\ Iartincz- Pui¡.: y col. 2007).
Satisfacer las necesidades proteicas en las raciones prestaner generalmente im plica también el incorpora r difercntcs concentrados p roteicos de ori gen \'egetaL A su mejor precio se une la necesidad de adaprar progresi"amente al lechón al consumo de ingredientes ,e~etales. ' r ras el periodo inicial de prestaner, los concentrados proteicos vegctales proporcionan la mayoría de los aminoácidos en las raciones prácticas ( Iokaeh y col. , 20(3).
Entre es lOS ingredientes destaca, la harina de soja, los concentrados proteicos de la soja (mác.; común y disponible), el gluten de trigo (por su ni,·eI de glutámico) • la proteína de patata (por su nh'e1 de triptófano), últimamente la proteína de arroz o en menor medida las semillas de leguminosas. La proteína de soja es un ingrediente excelente. Sin embargo, presenta di,'ersos inconvcnientes, como es la presencia de factores antitrípsicos de la soja no procesada, la presencia de ol.igosacariuos, y la aJergenicidad de la p roteína. l ·] tratamiento térmico dc la torta de soja elimina los factorc~ antitrípsicos, mientras tlue los dife rentes p rocesos de extracción) concentración de la proteína pueden reducir los ni,-eles de oligosaciridos, Las características alerg-énicas de la soja determinan un ma yor Arado de incertidumbre sob re el ingrediente, especialmente durante la
Los lechones recién destetados son especialmente sensibles a la proteína de la raciólL Algunas de estas proteínas pueden provocar una reacción inftamatoria en el tracto digestivo, reducir el crecimiento e incrementar la monalidad
primera Semana tras el destete. Algunos autores sugieren (ILIC la soj::l no debería incorporarse en la primera diera tras el destete, y su incorporación debería se r p rog resi,'a para facilitar la adaptación del animal al ingrediente. Otros autores sugieren <.Jue c1mejor momento de con taC[o con la soja es durante la lactación (creep feeding).
in embargo, el consumo dc pienso en lactación es generalmente muy bajo como para permitir una iomunotoleraeia oral (Tokaeh y col., 2(03). La hidróli",is parcial de la proteína de soja es otra estrategia (IUC ha sido probada en condiciones experimentales con resultados muy prometedores (Ferrini ) col.,20()4) e ) Ing redientes g rasos I:ntrc las limitaciones digestivas dcllechón los siguientes días al uestete destaca su limitada capacidad para digerir la grasa. Cera) col. (1990) obsenaron un descenso de hasta un 60u,o en la ¡ipasa pancreática tn1.S el destete. Por este moti, 0, la respuesta productiva de los animales al consumo de mayores po rcentajes de grasa en la rílción tras el destete es muy baja o incluso neg:ati,·a.
Pertigrew) ;\ Ioser (1991) reSllmen los resul tados de 92 com paracio nes de g-rasa íl liadida en el pienso consumido por lechones de 5 a 20 kg de peso. I.a incorporación de grasa red ujo el consumo y los rendimitntus, aUI'}(lue in crementó la eficiencia el" utilización del pienso. El nümero de respuestas po,io"as (37) y negativas (38) fue similar. En condiciones práClicas, el contenido de grasa en ni\'eles de hasta un I ()l!líl pre tende favo recer el gra nulado de raciones con ele\'ados porcentajes de ingredientes lácteos (fokach y col., 20(3). Los ingredientes graso, a utili zar son generalmente aceites "egeL'llcs ins:llUrados, los aceites de pe~cado, así como la manteca de cerdo (de alta calidad) baja acidez). Dentro de las grasas vegetales son preferibles la poliinsaturadas (soja, ¡.,';rasol, linaza) () de cadena cona (coco). También puede ser de interés el uso de sueros rcengrasados en la <.Jue la grasa se encuentra emulsionada con una matriz de lactosa r proteína, está opcicJn facilita el manejo) uso de combinaciones de grasas e~peciales
En conclusión, la bibliografía presenta una amplia información sobre
interacciones entre los ingredientes del pienso) la adaptación de los lechones al destete, su estado d" salud y rendi mientos productivos. Sin embargo, con frecuencia la respuesta depende del estado sanitario de los animales; por lo que no es lo mi smo alimenTar lechones en granjas bien manejadas y con un status sanitario c1e\'ado tluC en granjas con sanidad limitada o manejo deticientc. En términos generales, es posible utilizar los piensos más digestibles y concentrados en energ-ía y proteína en aquellas granjas de ele"ada sanidad; mientras que, cuando la seguridad prima sobre la producti"idad con"icne utilizar niveles alTOS de fibra r meno res concentraciones de energía y proteína en el pienso (Fedna, 2006)
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