ELEMENTOS CULTURALES REV.BOLIVARIANA

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elementos culturales de la revolucin bolivariana

autores: enrique arrieta chourio eduardo ledezmacolectivo de revisin y acompaamiento aismin manaure, antonio giardina, carlos gonzlez, carlos guedes, carlos rodrguez, enrique arrieta, enrique valles, eseario sosa, elim sosa, eve zambrano, henry parucho, herlina colmenares, ingerzon freites, kiramara reyes, luis ortega, magali figuera, marian alvarado, maxiorisol cumare, oscar gonzlez, rogelio lpez, samuel vargas, simn sosa, sorocaima silva, wiliam escalona, yamileth romero, yecuana lvarez zaida surez.

abril 20051

presentacinvenezuela vive momentos estelares. la victoria de agosto de 2004 y la definicin del nuevo mapa estratgico los das 12 y 13 de noviembre de 2004, en el taller de alto nivel, dirigido por la presidencia de la repblica, constituyen el salto adelante para continuar en la construccin de un nuevo pas. dentro de los diez grandes objetivos estratgicos definidos, el tercero plantea: avanzar aceleradamente en la construccin del nuevo modelo democrtico de participacin popular, para lo cual se definen como herramientas las siguientes: programas de formacin sociopoltica dirigidos a facilitadores y participantes de todas las misiones. programas conjuntos de formacin sociopoltica a los funcionarios pblicos y lderes comunitarios. el propsito del componente de formacin sociopoltica de la misin vuelvan caras, est inscrito en la bsqueda de las definiciones necesarias para consolidar la revolucin bolivariana en funcin de una sociedad libre, cooperativa, democrtica, participativa, autodeterminada, consciente, que rompa con las relaciones de dominacin propias del modelo capitalista imperante en esta sociedad. se trata de una educacin liberadora que contribuye a la construccin del poder popular y a la emancipacin social e individual. es una formacin para guiar nuestras acciones y nuestras ideas hacia la afectacin de las relaciones de produccin capitalista: de propiedad, mercantiles y la divisin2

social del trabajo. es un mtodo para un nuevo ciudadano que acte con otra manera de organizarse, de comunicarse, educarse y de abordar la realidad para transformarla en funcin del inters emancipador, y se conoce como mtodo invedecor, siendo una articulacin de 4 estrategias: investigar, educar, comunicar y organizar, originndose su denominacin a partir de la unin de las letras iniciales de cada una de ellas. los ncleos de desarrollo endgeno de la misin vuelvan caras sern uno de los campos de aplicacin del componente de formacin sociopoltica, con sujetos y contextos determinados, enmarcado en el propsito estratgico del cambio del modelo de produccin. por otro lado y bajo la misma lnea de accin el componente de formacin sociopoltica se perfila hacia las comunidades organizadas y las instituciones de la administracin pblica. el componente de la formacin sociopoltica est constituido por los siguientes ejes temticos: valores bolivarianos democracia protagnica: nuevas formas y escenarios de participacin social ejes claves del modelo de desarrollo: economa popular y ncleos de desarrollo endgeno. mtodo invedecor didctica investigativa y estrategias de aprendizaje estrategia comunicativa integral el cooperativismo y otras modalidades de asociaciones productivas. la cogestin y la autogestin en la economa popular. elementos culturales de la revolucin bolivariana3

enfoque de gnero educacin ambiental mtodo de proyecto resistencia al cambio y procesos motivacionales defensa integral del territorio cada eje temtico se aborda en dos cuadernos, uno para facilitadores y otro para lanceros presentndose propsitos, contenidos y el mtodo desde el punto de vista didctico y adems se utiliza recursos audiovisuales de apoyo para complementar la formacin. al tener una concepcin y un mtodo coherentes con el propsito ya definido creemos estar contribuyendo de manera definitiva y humilde con el reto planteado, es decir la construccin de una nueva sociedad.

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elementos fundanteslos elementos que dan origen a la propuesta formativa del eje temtico elementos culturales de la revolucin, estn contenidos en los siguientes materiales: constitucin de la repblica bolivariana de venezuela. las 10 lneas estratgicas: el salto adelante, emanada de la presidencia de la repblica bolivariana de venezuela, fuerte tiuna, caracas noviembre de 2004. ensayo "el desarrollo endgeno y la misin vuelvan caras" de carlos lanz rodrguez. caracas, mayo 2004. plan de formacin permanente del minep. memoria del 1er. taller de formadores de formadores. sistematizacin. aragua, enero 2005. colectivo de

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presentacin del eje temtico elementos culturales de la revolucin bolivarianael presente cuaderno ha sido diseado como parte del material de apoyo del plan de formacin socio poltica, desarrollado por el ministerio para la economa popular (minep), en el marco de la nueva etapa de la revolucin bolivariana. partimos del nfasis que le da el proyecto bolivariano a la cultura, dndole rango constitucional donde reivindica la diversidad tnica y lingstica al igual que el carcter multicultural de nuestro pueblo. adems, se valora el papel de la oralidad como uno de los factores en la construccin de una nueva sociedad. ahora bien el hecho que la constitucin contenga estos principios no es suficiente para desmontar la cultura de dominacin que an impera en nuestra sociedad, la cual ha trado como consecuencia una separacin entre bellas artes para referirse a una elite y cultura popular para referirse al pueblo. toda forma en de dominacin lleva en su seno el germen de las a la misma

contradicciones sociales, la cultura como hecho social no escapa de ello, consecuencia genera diversas formas de resistencia dominacin, las cuales denominamos bolsones de resistencia que necesariamente tenemos que identificar y analizar porque pudieran ser la6

puerta abierta para la construccin de valores y principios para una nueva sociedad. en tal sentido, este cuaderno tiene el propsito de brindar una herramienta a los venezolanos y a las venezolanas que desde diversas trincheras (desde las misiones, los frentes y otras organizaciones del cambio) estn aportando para construir colectivamente un pas multicultural, que se oponga concientemente a la transculturizacin y la alienacin, que enfrente las grandes industrias culturales y se reencuentre con sus propias capacidades.

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contenidoel presente eje temtico, comienza definiendo cultura, pasando posteriormente a tratar lo siguiente: elementos reproductores y transformadores de la cultura en el marco del capitalismo, hegemona y contrahegemona cultural, de la resistencia a la insurgencia cultural, nueva hegemona y su relacin con el mtodo invedecor, concluyendo con el planteamiento de nueva hegemona.DEFINICIONES DE CULTURA:

una nueva cultura poltica como construccin de la

la cultura, ha sido definida de diversas maneras:

la produccin material y espiritual creada por el gnero humano a lo largo de la historia, incluyendo bienes materiales y espirituales (definicin antropolgica tomada del proyecto educativo nacional).

conjunto de los modos de vida y costumbres, as como de los conocimientos y grado de desarrollo artstico, cientfico, industrial, en una determinada poca, grupo social, etc. (tomada de enciclopedia wikipedia).

es un producto histrico que incide sobre: a) la actividad humana, a travs de nuevas necesidades. b) un pensamiento, a travs del conocimiento acumulado.8

c) sus relaciones, a travs de las instituciones. proceso de creacin y los resultados que el hombre y la mujer en su relacin con la naturaleza y sus semejantes producen en un espacio y en un tiempo determinado en el entendido segn el cual somos una sociedad multitnica y multilingstica. conjunto total de los actos humanos en una comunidad dada, ya sean estas prcticas econmicas, artsticas, cientficas o cualesquiera otras. toda prctica humana que supere la naturaleza biolgica es una prctica cultural. (definicin del antroplogo jos lezama lima). como puede notarse en los conceptos citados, la cultura es un conjunto sumamente amplio del quehacer humano que adems de incluir las artes y la literatura abarca las creencias, actividades creadoras, lo moral, modos de produccin, lo poltico caracterizado por el contexto histrico donde ella surge y se desarrolla. por lo tanto, no es esttica vale decir, es dialctica; est en constante movimiento y transformacin lo cual no significa desechar lo viejo, sino producir un constante intercambio entre lo existente y lo naciente. es importante reconocer que el pensamiento y accin de ese hombre o mujer que producen cultura est impregnado por una lgica que tiene que ver con la carga ideolgica que el sistema capitalista ha impuesto para el logro de su hegemona. por eso no podemos analizar el elemento cultural al margen de las relaciones de produccin. en concordancia con lo sealado en este eje temtico asumimos el concepto de enry gmez maz, que define la cultura como:9

un sistema de prcticas, de forma de vida, que constituye y es constituido por una interaccin dialctica entre la conducta de clase, la circunstancia de un grupo social particular y las determinantes ideolgicas de la sociedad misma.

ELEMENTOS REPRODUCTORES Y TRANSFORMADORES DE LA CULTURA EN EL MARCO DEL CAPITALISMO

es preciso hacer notar que para algunos autores, en el desarrollo histrico de las sociedades humanas se han establecido diversos modos de produccin econmica: primitivo, esclavista, feudal, capitalista, socialista y comunista. no se pretende hacer un anlisis de todos los modos de produccin, sino especficamente nos interesa caracterizar el capitalismo ya que en la actualidad es el sistema que impera en nuestra sociedad. el capitalismo no solo hegemoniza a travs de la fuerza que concentra, sino tambin ideolgicamente. el capitalismo es un sistema donde se pierde la posibilidad de gestionar racionalmente la economa, no se basa en las necesidades de la inmensa mayora de la sociedad, sino en la bsqueda frentica de ganancias para una minora que son los empresarios o burgueses. su principal caracterstica es la acumulacin de capitales concentrados en10

pocas manos (dueos de los medios de produccin) y una gran mayora que solo son dueos de sus manos o fuerza de trabajo, la cual es permanentemente explotada por los dueos de los medios de produccin, quienes acumulan riquezas por medio de la divisin social del trabajo. desde el punto de vista cultural en el capitalismo podemos caracterizar algunos rasgos, los cuales se incorporan en nuestras conciencias a travs de la educacin, la religin, la poltica, las artes, los medios de comunicacin social y otros, con los cuales el capitalismo construye toda una cultura para la dominacin. algunos de los rasgos indicados arriba son: el desarraigo: entendido como la falta de amor y valoracin por los acervos culturales propios. el endorracismo: significa el rechazo a si mismo o de su grupo tnico al comparase con un modelo de cultura dominante. la discriminacin: es toda accin que considere inferior a las personas ya sea por su origen racial, de genero, condicin fsica o social. la vergenza tnica: consiste en la desvaloracin del origen racial, que conduce a que el sujeto sienta pena de sus races. la alienacin: perdida del control sobre el proceso productivo que se expresa en la despersonalizacin y la enajenacin de los sujetos con relacin al producto de su trabajo. crisis de participacin e indiferencia ante lo pblico: estas se11

expresan en que los ciudadanos y ciudadanas son ajenos a la poltica, negando el ejercicio de la ciudadana. el consumismo: obsesin de consumir productos innecesariamente, el consumo por si mismo. la competencia: afn por superar a otros a costa de lo que sea. el individualismo: nfasis en el individuo por encima de cualquier cosa. en toda cultura existe elementos reproductores que tienden a mantenerla o a perpetuarla y elementos transformadores que la dinamizan llevando el componente del cambio. las caractersticas arriba sealadas son esos elementos

reproductores que el capitalismo desarrolla y pretende mantener para perpetuar las relaciones de dominacin. al capitalismo pretender mantener su modelo hegemnico de dominacin, esos elementos transformadores que dinamizan su existencia, lo confrontan creando mecanismos de respuestas contrahegemnicas.HEGEMONA Y CONTRAHEGEMONA.

en un reciente trabajo de la ctedra de formacin poltica ernesto che guevara, publicado por la universidad popular madres de la plaza de mayo, conseguimos un concepto de citarlo:12

hegemona que nos parece adecuado

la hegemona es un proceso de direccin poltica de un sector social, sobre otro. se ejerce en el plano poltico pero tambin en el cultural e ideolgico, la hegemona consiste en la combinacin de la fuerza (coercin) y el consenso (no es solamente puro consenso) igualmente agrega la hegemona no se ejerce solamente en lo poltico, entre las clases sociales y en los grandes partidos, sino tambin en una esfera menos visible: la vida cotidiana y la subjetividad. en las sociedades capitalistas, los grupos de poder utilizan los medios masivos (tv, radio, prensa), para trasmitir valores, modos de vidas y productos de consumo que se imponen sobre el comn de la gente y terminan aceptndose en el plano subjetivo y en la vida cotidiana, por lo cual no consiguen resistencia en las mayoras sociales. del mismo modo la hegemona tiene expresin poltica por medio del ejercicio de la representatividad que en condiciones de no conflictividad y paz social, ejercen los grupos de poder sobre la mayora. al contrario, en momentos de conflictos, dicha hegemona se expresa a travs del uso de la fuerza policial y/o militar. slo si existe claridad sobre lo que es la hegemona podemos enfrentarla y superarla, pero esto no es posible aislada e individualmente, si no en colectivo, para develar y superar las relaciones de poder construyendo procesos contrahegemnicos. tal como afirma antonio gramsci: poltico y terico italiano, fundador del partido comunista italiano: no se puede esperar la toma del poder poltico para que las13

clases

populares

comiencen

a

ser

dirigentes

y

crear

contrahegemona. para avanzar hegemnicamente hacia la construccin de una cultura con los nuevos valores del proyecto bolivariano necesitamos hacer contrahegemona o sea acumulacin consciente de fuerzas sociales para consolidar la nueva cultura poltica de la revolucin. a partir de lo anterior, la construccin de contrahegemona nos impone la necesidad de superar en todos los mbitos y en todas las relaciones sociales, las expresiones de dominacin del sistema que le den capitalista, impulsando nuevas formas de organizaciones democrticas, colectivas, participativas, horizontales y transparentes, viabilidad al modelo de sociedad que propone nuestra constitucin de la repblica bolivariana de venezuela, siendo los bolsones de resistencia una representacin histrica de experiencias concretas de grupos de personas, que se oponen conciente o inconscientemente a la dominacin capitalista.

DE LA RESISTENCIA A LA INSURGENCIA CULTURAL

se asume la resistencia cultural como el conjunto de formas organizadas de enfrentar la dominacin hegemnica, preservando la identidad cultural, en una actitud colectiva para defenderse de culturas invasoras, ideologizantes, alienantes y desplazadoras, en fin es la defensa conciente de lo propio.14

en la sociedad existen diversas expresiones de la cultura que tienen carcter transformador: valores y actitudes solidarias, gastronoma popular en sintona con la produccin local, relacin armnica con la naturaleza es decir, que vienen avanzando en la construccin de una nueva cultura y hacia all es preciso enfilar nuestra mirada para generar espacios que permitan el reconocimiento del saber popular. a partir de la resistencia cultural la trascendemos y asumimos a la insurgencia cultural como el salto cualitativo que tiene origen en la rebelin (levantamiento contra lo establecido) del pensamiento y la accin por parte de los grupos sociales que antes fueron vctimas de la hegemona capitalista, y avanza hacia la construccin de una nueva hegemona. los sectores populares logran ejercer contrahegemona al alcanzar niveles de reflexin y problematizacin sometiendo a discusin la realidad impuesta por la sociedad capitalista. este proceso puede ser visto como transitorio hacia la construccin de una nueva hegemona, que supone otros modos de pensar y de organizar el tejido social y a su vez construir los nuevos valores y principios que conducen a una cultura solidaria. vale destacar que la misma causar una posicin reaccionaria por parte de los sectores que atienden a los intereses capitalistas, y en virtud de esa posicin debemos estar preparados parar dar el salto hacia la transformacin definitiva del modelo capitalista que aun subsiste en nuestro pas, y construir el nuevo modelo socialista del siglo xxi propuesto por el presidente chvez.

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la construccin de la nueva hegemona necesita un mtodo, una manera de abordar la realidad a transformar debiendo contribuir a ese proceso de cambio y ser coherente con una filosofa y concepcin revolucionaria, adems debe contener elementos para una nueva cultura poltica, donde lo transformador sea el motor fundamental de ese proceso.

LA CULTURA, NUEVA HEGEMONA Y MTODO INVEDECOR:

definimos invedecor como un mtodo de accin poltica en construccin, que permite articular las estrategias de investigar, educar, comunicar y organizar, a partir del reconocimiento de los saberes previos de los sujetos. implica procesos de investigacin, bajo premisas de una nueva racionalidad comunicativa y socializacin de los procesos investigados para transformar la realidad desde la concepcin del poder popular, lo cual significa afectar las relaciones de produccin capitalistas y la divisin social del trabajo para construir hegemona antiimperialista y antimonoplica contra la divisin social del trabajo, por la unin de la teora y la prctica, del saber y el hacer para vivir en solidaridad, cooperacin y con desarrollo endgeno. desde el mtodo invedecor creemos que la investigacin que impulsamos no cosifica, es decir, no ve como una cosa a las personas ni16

a sus conocimientos, por el contrario define a cada sujeto como un ser con capacidades y potencialidades para construir su propio conocimiento a travs de un proceso en el cual los hombres y mujeres se convierten en investigadores e investigados de sus propios saberes. considerando la importancia que el pensamiento tiene en la forma de actuar de los sujetos es necesaria la educacin para producir una nueva trayectoria intelectual, que apunte a la construccin de otra racionalidad, la cual requiere de un compromiso con la formacin permanente en funcin de alcanzar la autonoma cognitiva que se expresa en altos niveles de comprensin poltica y superacin intelectual. asimismo el respeto y el encuentro - dilogo con otros saberes, evitando as el monopolio del mismo por parte de una lite y dando posibilidades de encuentro con la riqueza cognitiva que existe en los sectores populares, motor este que dinamiza los cambios en nuestra sociedad. la educacin no seria entonces unidireccional, sino un proceso de construccin de aprendizaje colectivo. analizando la relacin entre el mtodo invedecor y la cultura, es preciso sealar que la comunicacin, juega un papel importante en este proceso, pues es el elemento clave para reproducir o transformar la cultura dominante. la comunicacin se convierte en reproductora cuando transmite ideas, valores, informaciones, y como tal influye enormemente en la consolidacin de la cultura dominante, al contrario, en su expresin17

transformadora se vale de acciones conscientes y de cambio, utilizando para ello, las ms diversas alternativas como murales, peridicos, radios y tv comunitarios, teatro de calle y cualquier otra expresin alternativa que democraticen la informacin, la hagan transparente y horizontal, todos somos iguales, todos debemos conocer, es decir desde lo que habermas (filosofo neo-marxista alemn, de la segunda generacin de pensadores de la escuela de franfurkt ) llama la nueva racionalidad comunicativa. la organizacin, como elemento del mtodo procura concretar nuevas formas colectivas de participacin que superen las relaciones de jerarqua y subordinacin, es decir, donde no se imponga el poder de pocas personas sobre la mayora y se propicie la autonoma de los sujetos sociales para enfrentar concientemente las relaciones de poder que se expresan de diversas maneras dentro de cualquier tipo de organizacin social. ahora bien, la organizacin que impulsamos, procura pasar de la resistencia cultural a la insurgencia cultural, o sea que surjan nuevas estructuras democrticas, participativas y protagnicas de hombres y mujeres autodeterminados y autodeterminadas concientemente que no solo preserven la herencia cultural emancipadora. es preciso desarrollar la capacidad de crear a partir de lo existente, nuevas producciones materiales y espirituales que vengan a enriquecer nuestro acervo y patrimonio que abran caminos a la construccin de una nueva cultura poltica que demanda la repblica bolivariana de venezuela.

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NUEVA CULTURA POLTICA COMO CONSTRUCCIN DE LA NUEVA HEGEMONA

el llamado a la refundacin de la repblica expresado en el prembulo de la constitucin de la repblica bolivariana de venezuela, plantea la necesidad de una nueva cultura poltica capaz de permitirnos superar la cultura puntofijista (desarraigo, individualismo competitivo, burocratismo, corrupcin, sectarismo) tal y como lo plantea carlos lanz en el ensayo: LA REVOLUCIN ES CULTURAL O REPRODUCIR LA DOMINACIN estamos planteando que la nueva cultura poltica tiene vinculacin directa con la forma en que las mayoras de los sectores sociales asuman su participacin en los asuntos pblicos de manera protagnica, bajo los principios de la democracia directa los cuales son: a) eleccin directa de todos los cargos: en oposicin a las elecciones indirectas o de segundo grado de los dirigentes y representantes para evitar decisiones arbitrarias, segn la discrecin o juicio de quien designe o asigne el cargo. b) delegacin funcional: ningn representante o dirigente puede tener poder a discrecin para decidir cuestiones que no han sido discutidas o aprobadas en las instancias de base. c) rendicin de cuentas: se hace necesario presentar cuentas peridicas de las ejecutorias, de las acciones y actividades. d) rotacin de cargos: esto evita la especializacin, el enquistamiento, la perpetuacin indefinida de las responsabilidades, ya que cierra las puertas, a la expertocracia y meritocracia. e) libre juego de tendencias: se reconoce la libre confrontacin de19

opiniones divergentes y la discrepancia como normal y natural. adems se requiere de una cultura del debate y el desarrollo de una racionalidad comunicativa. f) revocatoria del mandato: los sectores de base poseen la potestad de cambiar, destituir a quienes no cumplan con el mandato, previa discusin y evaluacin de la gestin de los dirigentes. g) democracia del saber: se trata del libre acceso a la informacin y al conocimiento de los problemas en debate. no solo es decidir, sino hay que participar en la elaboracin y construccin de la decisin, evitndose el monopolio del saber. hay que rescatar el valor del la palabra mas all del discurso, siendo coherentes con lo que se piensa, con lo que se dice y con lo que se hace, es decir predicar con el ejemplo, esto forma parte de la construccin de una nueva cultura poltica impregnada por los siguientes valores y principios: a) transparencia b) solidaridad c) corresponsabilidad d) respeto e) cooperacin f) disciplina revolucionaria (entendida como la autorregulacin dentro de las normas del colectivo) ahora bien, la nueva cultura poltica no se decreta sino que se construye con mtodos coherentes tanto con el enfoque critico20

emancipador, como con el proyecto de sociedad cooperativa, solidaria, participativa, que plantea la constitucin de la republica bolivariana de venezuela. en este sentido consideramos que invedecor es una metodologa de trabajo adecuada para avanzar en la construccin de la nueva cultura poltica y la nueva hegemona.

plan didcticopartiendo de la teora crtica y los postulados constructivistas, se propone un plan didctico para el abordaje de los diferentes ejes temticos a desarrollarse en la puesta en prctica de la propuesta formativa. es tico aclarar que no se est presentando una receta para ser seguida paso a paso y al pie de la letra ya que de ser as se estara reproduciendo lo que ha venido negando. el plan de interaccin didctico se encuentra esbozado en el ensayo memoria del 1er taller de formadores de formadores en cuatro fases:

1.-fase de indagacin:en esta fase de indagacin: se caracteriza a los sujetos y sus contextos, reconocemos de dnde vienen y las actividades que realizan u otros aspectos que surjan al calor de la interaccin didctica.21

se determinan los saberes previos con respecto al tema, los cuales pueden ser reconocidos en base a la experiencia, los estudios realizados, el uso de los sentidos, la oralidad, lo vivido, lo odo, lo soado. mal organizados. se construye un consenso semntico, en torno a palabras, conceptos, con el objeto de comunicarnos y entendernos al coincidir y ponernos de acuerdo en el uso de las mismas reglas semnticas. se puede hacer una clasificacin basada en saberes verdaderos, saberes incompletos, saberes incorrectos o

2.-fase de planificacin:en esta segunda fase: se parte de justificar el porqu y el para qu de la temtica. se detectan nudos crticos, hacindose preguntas

problematizadoras y generando situaciones problemticas. se disea y planifica participativamente el desarrollo del tema partiendo de los saberes incompletos, incorrectos o mal organizados, y elegimos las diferentes tcnicas, recursos y

ambientes, con los cuales se actuar en el espacio didctico. de igual manera proponemos una serie de tcnicas participativas que pueden utilizarse dentro de este enfoque:

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lecturas dirigidas

trabajo grupal lluvias de ideas expediciones pedaggicas trabajo de campo juegos cooperativos

video-foros

consiste en asignar textos o captulos sobre temas que posteriormente se discutirn en colectivo se recomienda subrayar y fichar aquellos aspectos resaltantes o confusos para presentarlos y desarrollarlos durante la discusin. consiste en conformar grupos de trabajo que seleccionan un tema especfico y lo explican al colectivo. posteriormente se hace discusin grupal sobre el mismo. construccin de un tema donde todo el colectivo aporta libremente sus ideas con respecto al mismo. son intercambios entre colectivos que se desplazan de un lugar a otro preferiblemente donde existan experiencias significativas. consiste en el contacto directo con la experiencia, con lo real al margen de las simulaciones o laboratorios. es el desarrollo de procesos ldicos donde se expresan valores como la solidaridad, la cooperacin, la tolerancia y el respeto. consiste en la proyeccin de videos y exposicin de su contenido por una o ms personas, posteriormente se da un ciclo de preguntas y respuestas que fortalecen el debate.

esto no quiere decir que sean las nicas tcnicas, existen otras y adems se pueden combinar entre s al igual que los recursos y los ambientes de aprendizajes de acuerdo a las necesidades metodolgicas, mantenindose el criterio participativo del grupo o el colectivo. por otro lado es importante ratificar que la23

congruencia entre la teora, las tcnicas, los recursos y el ambiente depende de la claridad del enfoque y sus principios.

3.- fase de confrontacin:en esta fase: se confronta el nuevo saber y el viejo, se problematiza y se construyen los nuevos aprendizajes y los nuevos conocimientos utilizndose la sntesis, el anlisis, la interpretacin, la crtica. se origina un nuevo proceso de indagacin o un nuevo ciclo.

4.-fase de evaluacin y sistematizacin:la evaluacin debe ser permanente, sistemtica, procesual, cuali-cuantitativa principalmente a travs de la auto y coevaluacin, en funcin de la mejora y la construccin de criterios compartidos. la sistematizacin entendida como proceso que pretende registrar, reflexionar y confrontar crticamente la experiencia desarrollada, permitiendo generar nuevos saberes. a continuacin, la sistematizacin va a ser tratada de una manera especial ya que, constituye un elemento fundamental para la construccin de la memoria de lo sucedido en los espacios educativos. se dar orientaciones acerca de los registros y su posterior organizacin en funcin de construir los nuevos aprendizajes.

los registrosson el colchn, la base donde reposa la sistematizacin, constituyen la memoria y un momento bsicamente descriptivo y sin ellos difcilmente se puede rescatar el proceso vivido: antes,24

durante y despus de la actividad. los registros pueden ser variados dependiendo de cada actividad. para obtener informacin suficiente y lo mas objetiva posible, podran tomarse en cuenta datos cuantitativos y datos cualitativos que a diferencia de los primeros no estn basados en nmeros y el uso de la estadstica. en cuanto a lo cualitativo, que es nuestra opcin, nos referimos a aquellos que son producto de la participacin de la gente como: testimonios, entrevistas, dibujos, canciones, poesas, opiniones, anotaciones, informes... o que expresan escenas vividas como las fotografas. estos recursos dan vida a la sistematizacin. tambin debemos tomar en cuenta que estos recursos "vivos hablan por s solos, pero deben organizarse e incorporarle elementos de interpretacin, comprensin, explicacin, anlisis, crtica, reflexin, ya que de all surgen los nuevos aprendizajes, en trminos de juicios, conceptos, teoras.

qu debemos tener presente al realizar la sistematizacin?antes de la actividad *planificar en detalle todos los pasos a dar para realizar la actividad. designar una persona o un equipo que registre y posteriormente realice la sistematizacin. *preparar instrumentos de registro (lista de asistencia, libro de anotaciones y otros recursos que se requiera: cmara fotogrfica y rollo, grabadores,) durante la actividad25

*cumplir responsablemente con la tarea de registrar durante toda la actividad. si surge algn imprevisto que imposibilite el cumplimiento de la responsabilidad debe ser comunicado al equipo * estar atento a todos los detalles para que no se quede nada sin registrar: juegos, trabajos en subgrupos, expresiones, participaciones, intervenciones, actividades del facilitador y de los participantes. * recoger y guardar los registros al finalizar la actividad. se sugiere que previamente se asigne un lugar seguro para que no se pierdan o se daen. despus de la actividad *organizar la informacin. transcribir los cassettes, revelar las fotos, revisar los apuntes y tomar los aspectos ms significativos (no solo para el equipo, sino para otras personas dentro y fuera de la comunidad) tomar nota del n de participantes: nios, jvenes y adultos. esta es tarea del equipo responsable de sistematizacin con apoyo de personas que participaron en la actividad. *hacer una reflexin grupal acerca de la actividad y los aprendizajes obtenidos reflexionar sobre los resultados, tomando en cuenta bsicamente los siguientes puntos: logros, dificultades, aspectos a mejorar de la actividad, prximos pasos a dar, acuerdos y compromisos, acerca de los aprendizajes obtenidos se ratifica lo ya indicado en trminos de interpretacin crtica y construccin de saberes

preguntas generadoras para la evaluacin de la didctica investigativa26

a continuacin se presenta, en el marco de la didctica investigativa, algunas preguntas que podran contribuir al proceso de evaluacin permanente del plan de formacin, pudiendo ser realizadas en cualquier momento del desarrollo de los ejes temticos. se espera que estas preguntas sean un vnculo entre los espacios de formacin, los facilitadores y los participantes, constituyendo momento. 1.- el (la) participante hizo explcito el saber previo, su repertorio cognitivo? 2.- la globalizacin de los contenidos, las diversas tcnicas y recursos empleados promovieron la curiosidad, la capacidad exploratoria del (de la) participante o acentuaron el uso de recetas, esquemas de memorizacin repeticin? 3.- hasta dnde la pertinencia y lo significativo de los contenidos, las tcnicas, la metodologa y los recursos para el aprendizaje favorecieron el aprender a aprender? 4.- el (la) participante descubri nuevas relaciones entre hechos y palabras, cosas y smbolos? 5.el (la) participante examin, compar, interpret comprendi, de una manera autnoma la situacin problemtica, de aprendizaje? 6.- el (la) participante est en la capacidad de elaborar por s solo (a) propuestas y ejecutarlas? 7.- se produjo la construccin de nuevos significados, saberes,27

un

aspecto

importante

del

seguimiento

al

componente sociopoltico, pudiendo ser solicitadas en cualquier

aprendizajes a partir de la situacin inicial, ubicada en la fase de indagacin? 8.- hubo posibilidad de detectar errores y dificultades, ubicar progresos, hacer rectificaciones y readecuacin del proceso? 9.- hubo oportunidad para elegir, reelaborar nuevos contenidos y nuevas tcnicas? 10.- se mantiene la vigencia de los principios de procedimiento? se han aplicado? a continuacin se incluyen un grupo de lecturas complementarias con el propsito de facilitar la formacin de los (as) compaeros(as) facilitadores (as) los aportes de gramsci a la construccin de la hegemona (cap. ii de el poder en la escuela) "los comunistas turineses se plantean concretamente la cuestin de hegemona del proletariado, o sea, de la base social de la dictadura proletaria y del estado obrero. el proletario puede convertirse en clase dirigente y dominante en la medida en que consigue crear un sistema de alianzas de clase que le permita movilizar contra el capitalismo y el estado burgus a la mayora de la poblacin trabajadora... el criterio metodolgico en el cual hay que fundar el examen es este: que la supremaca de un grupo social se manifiesta de dos modos, como 'dominio' y como 'direccin intelectual y moral. un grupo social es dominante respecto de los grupos adversarios que tienden a 'liquidar' o someter incluso con la fuerza armada, y es dirigente de los grupos afines o28

aliados. un grupo social puede y hasta tiene que ser dirigente ya antes de conquistar el poder gubernativo (ste es una de las condiciones principales para la conquista del poder): luego, cuando ejerce el poder y aunque lo tenga firmemente en las manos, se hace dominante, pero tiene que seguir siendo dirigente..." l.- la hegemona lleva implcita tanto el "dominio", como la "direccin", y en relacin con la interpretacin reformista que slo concibe la hegemona como consenso expresado en trminos electorales, ("mayora numrica", olvidndose del dominio y de la coercin) consideramos que es una interpretacin acomodaticia hecha por sectores del pci para justificar estrategias como las del "compromiso histrico" o las tcticas simplemente electorales. 2.la direccin no slo est referida a lo poltico, sino tambin a lo

intelectual y moral. por eso en relacin a lenin, gramsci aporta nuevos elementos y nuevos desarrollos en relacin con la hegemona, vinculndola tambin a la "direccin cultural". 3.- ei otro rasgo que tiene una relevancia histrica, se refiere al hecho de que la hegemona, en trminos gramscianos plantea la posibilidad de que las clases subalternas antes de conquistar el poder, e incluso como est subrayado, "deben" ser "dirigente", siendo esta determinacin una de las principales condiciones para la misma conquista del poder. en esto existe una ruptura ideolgica bien importante con la izquierda tradicional inspirada en el marxismo sovitico, para quienes el combate cultural, la lucha en el terreno de la subjetividad y de los valores es algo que viene despus de la29

toma del poder. obviamente es un tipo de anacronismo terico, que ni el propio enemigo sostiene y en tal sentido podemos ver como en el documento de santa fe ii, el departamento de estado de los eeuu seala claramente que la guerra que vendr ser cultural." el movimiento cultural como parte esencial de la construccin hegemnica este es el salto adelante hegemona poltica, moral e intelectual (tipos de hegemona trabajadas por gramsci) esto puede enlazarse con la contrahegemona "(...) las realizaciones de un aparato hegemnico al crear un nuevo terreno ideolgico determina una reforma de la conciencia' de los mtodos de conocimiento, es un hecho del conocimiento, un hecho filosfico..." "...he aqu por qu es necesario poner de relieve que el desarrollo poltico del concepto de hegemona representa un gran progreso filosfico, adems de poltico prctico, porque forzosamente encierra y presupone unidad intelectual y tica conforme a una concepcin de lo real que ha superado al sentido comn, convirtindose en crtica. " "un trabajo como ensayo popular, destinado esencialmente a una comunidad de lectores que no son intelectuales de profesin, habra debido contener los elementos de un anlisis crtico de la filosofa del sentido comn, que es la filosofa de los 'no filsofos', o sea, la concepcin del mundo absorbida acrticamente de los varios ambientes culturales en medio de los cuales se desarrolla la individualidad moral del hombre medio. el sentido comn no es una concepcin nica, idntica en el tiempo y en el espacio: es el folklore' de la filosofa, y como el folklore se presenta en formas innumerables; su rasgo ms fundamental y ms caracterstico es el30

de ser una concepcin (incluso en cada cerebro) disgregada, incoherente, incongruente, conforma a la posicin social y cultural de las multitudes, cuya filosofa es..." "estando demostrado que todos somos filsofos -a nuestra manera, inconscientemente- aunque slo porque en la ms elemental manifestacin de actividad intelectual, en el lenguaje, se halla contenida una determinada concepcin del mundo, pasamos, en segundo lugar, al segundo aspecto de la crtica y de conocimiento: a la cuestin de si es preferible pensar sin poseer conocimiento crtico, de forma dispersa y ocasional; si lo es "participar" en concepto de la vida "impuesta" mecnicamente por el ambiente circundante de uno de tantos grupos sociales en el que automticamente cada quien queda comprendido, en definitiva, al ingresar en el mundo consciente, y que puede ser el propio pueblo o la provincia, u originarse en la parroquia o en la actividad cultural del curato o en la sabidura del viejo patriarca a la que llaman "ley", o en la mozuela que hered la sapiencia de la hechicera o en el intelectual limitado, amargado en propia estupidez e incapacidad de obrar. o si bien es deseable crear un concepto particular de la vida y, crticamente, en conexin con el trabajo cerebral elegir la esfera propia de actividad, participar vivamente en la creacin de la historia del mundo. ser gua de s mismo y no aceptar ya, pasiva e irreflexivamente, la impronta ajena a nuestra propia personalidad." "crear una gran cultura no representa slo hacer descubrimientos individuales "originales", tambin, y especialmente difundir crticamente la verdad descubierta. "socializarla" por as decir, convertirla en fundamento de accin vital, en elemento de coordinacin y de condicin intelectual y31

moral. el que una masa de hombres sea inducida a pensar sobre el presente con cohesin y dentro de una cierta unidad es un hecho filosfico "mas importante y 'original" que la revelacin de una nueva verdad por el "genio filosfico", revelacin que queda como patrimonio de pequeos grupos intelectuales". "de ello se deduce la importancia que tiene la entidad cultural, incluso en la actividad prctica (colectiva). el movimiento histrico no puede ser realizado ms que por el 'hombre colectivo', que presupone el logro de una unidad cultural social en la cual, la multiplicidad de valores dispersos con heterogeneidad defines, se sueldan en idnticos objetivos sobre la base de una misma concepcin del mundo (general o parcial, transitoriedad operante --por medios emotivos o permanentes, y por la cual el fundamento intelectual se entrelaza, se asimila, vive, puede llegar a convertirse en inclinacin). puesto que esto es as, se presenta la importancia de la cuestin lingstica en general, o sea de la comunidad de un mismo "clima cultural". l.- se parte del hecho de que el sentido comn genera en los explotados una conciencia contradictoria, que puede impedir la accin, producir un estado de pasividad moral y poltica. 2.- la lucha por la construccin de la hegemona se produce primero en el campo de la tica, pero saberse miembro de una fuerza hegemnica es la primera fase de tipo poltica que debe conducir a una concepcin superior en el entendimiento de lo real, forma de autoconciencia que unifica la teora y la prctica.

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3.- ei movimiento de reforma intelectual y moral debe aplicar como mtodo didctico la repeticin de sus planteamientos centrales, combinndolos con diferentes estilos y formas de expresin, elevar intelectualmente a los sectores explotados, formar nuevos intelectuales surgidos de su seno. por tal razn, la "formacin", la "educacin" no tiene un carcter enciclopdico, (o como dice paulo freire "bancario"), queriendo indicar que no se trata de "suma de conocimientos generales", "saber de todo", etc., como dice gramsci, se trata de una forma superior de entendimiento, de desarrollar en los explotados y oprimidos una personalidad propia, construir el mismo "clima cultural". 4.- la construccin del mismo "clima cultural", debe permitir coherencia a la multiplicidad de expresiones culturales que estn presentes en el seno de los explotados, aqu cobra importancia aplicar el principio de que el educador debe ser educado, donde la relacin dirigente-dirigido est inscrita en un marco de reciprocidad, evitando que la clase y las masas sean simplemente de "maniobra" y sigan jugando un papel subalterno. "(...) hay que tener presente que en cada regin, especialmente en italia, dada la riqusima variedad de tradiciones locales, existen grupos y grupitos caracterizados por motivos ideolgicos y psicolgicos propios (...) un error muy difundido consiste en pensar que cada estrato social elabora su conciencia y su cultura del mismo modo y con los mismos mtodos de los intelectuales de profesin (...) es ilusorio pensar que una "idea clara" oportunamente difundida se inserta en las distintas conciencias con los mismos efectos organizadores de claridad difusora. es un error "iluminista" multiculturalidad, como la constitucin reconoce la cultura de gnero,33

atareo, reconoce a los nios, ancianos, jvenes, etnias, visin integral, lo rural lo urbano, definicin de cultura es integral de la resistencia cultural a la construccin de la hegemona veamos primeramente, cul era la concepcin que tena gramsci sobre la hegemona. en su trabajo algunos temas sobre la cuestin meridional, dice al respecto: sin embargo, donde el concepto de hegemona adquiere una connotacin mucho ms precisa es en el artculo de gramsci titulado el problema de la direccin poltica en la formacin y el desarrollo de la nacin y del estado moderno en italia donde seala: el concepto de hegemona obviamente no fue descubierto por gramsci. est establecido que fue utilizado por diferentes autores, como stalin, zinoviev, bujarin, lenin, etc. en los primeros, la hegemona era sinnimo de "dominio", "control administrativo", "de alianza de clase". en lenin se subraya el matiz de que concibe la hegemona como direccin poltica. en el seno de los propios gramscianos -quienes periodizan el pensamiento de este autor segn las etapas: orden nuevo, cuadernos de la crcel, etc. han sido existido diversos debates en los cuales se seala la hegemona como alianza de clase, otros enfatizan la direccin poltica y hay quienes postulan solamente la hegemona como dimensin cultural.

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en tal sentido, adoptamos una postura crtica ante esta confrontacin y nuestra interpretacin de esta categora gramsciana posee las siguientes determinaciones: gramsci relaciona la construccin de la hegemona al proceso de reforma intelectual y moral, al desarrollo y difusin de una nueva concepcin del mundo y la construccin de una nueva gnoseologa. en su artculo estructura y superestructura, gramsci sostiene: reiterando el vnculo que posee el concepto de hegemona con la unidad intelectual y tica, gramsci en otro artculo titulado relacin entre la ciencia, religin y sentido comn, dice: esta relacin entre hegemona y reforma intelectual y moral se establece en los siguientes aspectos: en ser una reforma de la conciencia y de los mtodos de 'conocimiento, o sea, una transformacin en el terreno gnoseolgico, tal como lo decimos hoy se trata de construir un nuevo modo de produccin de conocimiento. superacin del sentido comn y la adopcin de actitudes crticas ante la ideologa dominante, que tambin implican la resistencia cultural, el cambio de mentalidad. veamos entonces algunos presupuestos de esta reforma intelectual y moral. en el trabajo notas crticas sobre una tentativa de ensayo popular de sociologa", gramsci define lo que entiende por sentido comn: en otro artculo titulado cuestiones preliminares de filosofa, gramsci propone a partir de la impugnacin al sentido comn, las lneas generales35

en que debe enmarcarse el proceso de reforma intelectual y moral: de estas lneas se desprende que el sentido comn es una concepcin disgregada, incoherente, una especie de filosofa de la cual no se est consciente, pues es una concepcin impuesta mecnicamente por el ambiente circundante, en el pueblo, en la provincia, en la parroquia, en la iglesia, en el seno de la familia, en la fbrica, en la escuela, etc. igualmente el sentido comn no es una concepcin nica, idntica en el tiempo y en el espacio, es decir, al hablar de sentido comn debe ubicarse el contexto histrico donde se ha formado. enfrentando crticamente al sentido comn, es necesario difundir, "socializar", la verdad descubierta, proceso ste que inspira la democratizacin del saber y la implementacin de una metodologa de investigacin participativa, como proceso colectivo, como dilogo de saberes .el hecho de que una masa de hombres a travs de este proceso adquiera cohesin y unidad ideolgica, es un hecho filosfico mas trascendental que la revelacin de un "genio". estas premisas han sido los soportes que orientan nuestra praxis con los talleres de investigacinaccin: ms que difundir un saber elaborado por lites intelectuales, se trata de establecer una estrategia metodolgica que facilite la produccin colectiva de saberes. esta es una exigencia puntual en la lucha contra la razn instrumental, el monopolio y la jerarqua del saber. en el mismo trabajo que venimos reseando, gramsci describe la escisin entre el pensar y el obrar de los explotados que se encuentran bajo el dominio ideolgico burgus:36

"el hombre activo de la masa trabaja prcticamente, pero no tiene una clara conciencia de su operar no obstante ser este obrar un conocimiento del mundo en la medida que lo transforma. de este modo su conciencia terica puede estar en contradiccin histrica con su obra. poco mas o menos se dira que tiene dos conciencias tericas (o una conciencia contradictoria): una implcita en su obrar y que le une una en verdad a sus colaboradores en la transformacin prctica de la realidad, y otra, superficialmente explcita o verbal, que ha heredado del pasado y recogido sin crtica. empero, esta concepcin verbal no deje de tener consecuencias, pues con ms o menos fuerza une a un grupo social determinado, influye sobre su conducta moral, sobre el trazado de su voluntad y puede llegar al punto en que la contradiccin de la conciencia impida cualquier accin, decisin o eleccin de la temtica del "clima cultural", de la hegemona entendida como relacin pedaggica" tambin, en el artculo lenguaje, idioma y sentido comn, gramsci dice: este problema puede ser asemejado al moderno planteamiento de la doctrina y la prctica pedaggica, segn el cual la relacin entre maestro y alumno es activa (recproca), donde el maestro sigue siendo alumno y el escolar maestro. pero la relacin pedaggica no puede quedar limitada a las relaciones especficamente "escolares" mediante las cuales nuevas generaciones entran en contacto con las anteriores, de la que extraen experiencias y valores histricos superiores. estas relaciones existen en todo el complejo social, en los individuos entre s, entre los intelectuales y no intelectuales, gobernantes y gobernados. ncleos selectos y sus37

seguidores, dirigentes y dirigidos, entre vanguardia y cuerpo de ejrcito. toda relacin de 'hegemona' contiene una relacin pedaggica... ". resumiendo estos planteamientos de gramsci sobre la necesidad de erradicar el sentido comn, crear el mismo clima cultural, etc., tenernos: esta concepcin de gramsci de la hegemona como relacin pedaggica - no solamente escolar - tambin conlleva la denuncia del iluminismo, la rigidez y el dogmatismo de los intelectuales, incluyendo por supuesto a los partidos y dems aparatos burocrticos, lo cual conduce al reconocimiento de las diferencias especficas: ubicacin del contexto localregional, la diversidad socio-cultural (clases, etnias, etc.) sin que ello implique un culto al folclor y al localismo provinciano. en tal sentido nos plantea en pasado y presente:

la necesidad de regionalizar las propuestas y proyectos no slo posee un alcance educativo, sino tambin poltico-organizativo, en ambos casos se hace indispensable el estudio de la produccin material y simblica en contextos etnogrficos muy concretos. la regin al ser un "complejo tnico-cultural" requiere de una ptica analtica que deje a un lado las abstracciones vacas o las simples generalizaciones propias de intelectuales que estn separados de las experiencias y el modo de sentir. en la construccin de una nueva hegemona social debemos valorar y reivindicar los bolsones de resistencia cultural donde nuestro pueblo ha38

preservado elementos de identidad poseen carga revolucionaria:

con tradiciones y costumbres que

valores y actitudes solidarias en comunidades campesinas e indgenas. modalidades de trabajo cooperativo como la cayapa y el convite, como expresin del apoyo mutuo. gastronoma popular y patrones de consumo saludables y en correspondencia con la produccin local. relacin armnica con la naturaleza, que respeta el medio ambiente. cultura del ahorro y del trabajo creador formas de comunicacin autntica, centradas en la conversa y el valor de la palabra. formas de ocio y de recreacin donde se dignifica la naturaleza y la persona humana. valoracin de lo pblico como espacio de encuentro ciudadano, como suelen ser las plazas y otros patrimonios arquitectnicos de los pueblos. sueos y esperanzas, animados por la religiosidad popular. fibra patritica que se enraza en las gestas y luchas independentistas la historia local y la tradicin oral nos permiten hoy reconocer las comunidades y mltiples espacios sociales, donde estos valores y las prcticas comunitarias asociadas, han resistido todos los embates de la desnacionalizacin, del desarraigo y la anomia puntofijista, desde la perspectiva de la diversidad tnica y la interculturalidad. en el movimiento revolucionario venezolano han existido antecedentes de este proceso, tal como fue por ejemplo, el congreso cultural de cabimas y el movimiento de39

los poderes creadores del pueblo aquiles nazoa promovidos por el prvruptura. independientemente del itinerario posterior de esta organizacin o las posturas de algunos de sus dirigentes histricos, en trminos de aportes a la resistencia cultural, los referidos eventos fueron cristalizaciones en su momento de una subjetividad que tena entre sus propsitos rearmar ideolgicamente al movimiento popular desde sus races y desde lo propio. en la actual coyuntura histrica, la revolucin bolivariana tiene sabor a pueblo porque enlaz con muchos de estos bolsones de resistencia cultural y los reivindic como parte de la memoria y del imaginario social de los explotados y oprimidos, siendo esta una de las contribuciones del cdte. chvez, quien en su condicin de veguero le ha dado golpes mortales a la vergenza tnica y el desarraigo, en la medida que ha desmitificado la investidura presidencial, la forma de dirigirse al pueblo y reconocer lo propio. sin embargo; las prcticas solidarias no son predominantes, ni la reivindicacin de la idiosincrasia es un todo coherente, si no que se mantiene muchas veces aislada en colectivos especficos o aparece en forma fragmentada en algunas experiencias sociales. en tal sentido, para romper la dispersin de nuestros acervos socioculturales se hace urgente desarrollar una praxis en la siguiente direccin: una de nuestras primeras investigacin y validacin de lneas de trabajo tiene que ver con la estos bolsones de resistencia cultural, impulsar, debe40

potenciando su desarrollo y articulacin. el movimiento cultural revolucionario que hay que

desarrollar

tambin estrategias educativas y comunicacionales que

permitan construir una nueva direccin intelectual y moral (bajo la inspiracin de los aportes gramscianos) pasando de la lnea de resistencia a una praxis de mayor insurgencia en el combate cultural, apoyndonos en el legado bolivariano y martiano: moral y luces son nuestras primeras necesidades , ser cultos para ser libres o tambin como lo indicaba el propio mart en otra direccin ahora la fuerza est en el saber, la fuerza est en saber mucho. existe plena coincidencia entre estas claves bolivarianas y martianas, con nuestro planteamiento de cualificar la soberana poltica con la democracia del saber. el actual malestar de la democracia slo puede resolverse con ms democracia: no hay soberana poltica plena sin soberana congnitiva, es decir, sin pensar con cabeza propia, sin investigar y producir conocimiento, sin crear e inventar, en el sentido que lo demandaba simn rodrguez. otra lnea de trabajo en la construccin de la hegemona, tiene que ver con los intelectuales orgnicos. la revolucin bolivariana demanda de una labor educativa permanente para formar a los explotados y oprimidos como intelectuales. este es uno de los cometidos de las misiones educativas, en funcin de la democratizacin del saber. captacin de sectores intelectuales tradicionales, ganndolos para el proceso de cambio. colectivos revolucionarios que asumen la produccin de conocimiento como intelectual colectivo. estas son tareas urgentes que deben ser asumidas desde el nuevo estado en construccin y desde el movimiento pedaggico, redes socio-culturales,41

emisoras comunitarias y grupos revolucionarios en general.

las anteriores premisas sobre las transformaciones culturales, la construccin de la hegemona y los postulados constitucionales como carta de navegacin en la transicin, permiten plantear la transformacin del actual modelo econmico rentista y parasitario, motivado en el afn de lucro, superando las deformaciones sectoriales y los desequilibrios, con otro enfoque sobre el desarrollo integral. en tal sentido, hemos desarrollado una serie de propuestas en la misin vuelvan caras (el desarrollo endgeno y la misin vuelvan caras. caracas. 2004) las cuales es pertinente reiterar en este trabajo, en funcin de construir un nuevo tejido productivo, superando la economa poltica puntofijista. la referida formulacin posee las siguientes caractersticas: ya no se trata del afn de lucro y la mxima ganancia como mvil, sino la satisfaccin de necesidades colectivas. primaca de los valores de uso sobre los valores de cambio. empleo la economa de escala, superando la subutilizacin de la capacidad instalada y la sobre diversificacin de bienes. construccin de cadenas y redes productivas que ataquen las desproporciones sectoriales. desarrollo econmico humanista, endgeno y autogestionario con estabilidad macroeconmica e internalizacin petrolera para diversificar el aparato productivo, fortaleciendo las microempresa y las cooperativas,42

favoreciendo la democratizacin de la propiedad y la promocin del desarrollo con equidad. estos 5 rasgos pugnan por abrirse paso y tener vigencia en un modelo mixto que posee las siguientes caractersticas: existencia de diversas formas de propiedad: propiedad estatal, propiedad mixta, propiedad privada (monopolista y no monopolista) propiedad colectiva autogestionaria. presencia de un sector regulado y bajo control social que coexiste con el mercado, para ello es indispensable el control de precio y de la moneda. esto demanda la planificacin democrtica y la direccin consciente de la economa, dejando de lado las leyes ciegas del mercado tan caras al neoliberalismo. teniendo la misin vuelvan caras la tarea de fracturar el dominio que ejercen los grupos oligrquicos en la economa, es necesario la alianza estratgica entre las empresas del estado, la economa asociativa, el sector no monopolista del capital nacional, la pequea y mediana empresa del campo y la ciudad. desde el ngulo del sujeto histrico, esta alianza demanda construir un bloque social revolucionario, bajo la direccin de los trabajadores, integrando a los campesinos pobres, medianos y pequeos empresarios del campo y de la ciudad, nuevos movimientos sociales y capas medias, igualmente sectores del capital no monopolista que defienden el inters nacional. en el caso de la misin vuelvan caras, la opcin por los excluidos es explcita: se busca incorporar a la economa social a un milln (1.000.000) de patriotas desempleados.43

por ello,

la economa asociativa no puede ser una caricatura, o la renta petrolera y el gasto del estado. se

mecanismo de compensacin de la pobreza, sino el desarrollo del sistema cooperativo empleando promueve una mayor intervencin de la esfera pblica, como palanca del desarrollo integral de la nacin y no como subsidio de la tasa de ganancia de la oligarqua del dinero. estos son aspectos programticos que permiten dar un salto en el desarrollo econmico y social, articulndolo con el plan de desarrollo econmico social 2002-2007, formulado por el ministerio de planificacin y desarrollo y aprobado por la asamblea nacional, donde se definieron algunas lneas estratgicas para superar las anteriores deformaciones sectoriales que hemos reseado. lineamientos de dicho plan: resumimos a continuacin, algunos

estos son los llamados cinco equilibrios que ahora estn catalizados por la misin vuelvan caras, asumiendo la profundizacin de la crtica al modelo que hemos heredado del puntofijismo: se trata de un nuevo proceso de articulacin con el mercado mundial, sin relaciones de dependencia o tutelas neo-coloniales. de all, la nueva manera de entender la integracin continental, surgiendo la propuesta del alba frente a la poltica neoliberal que se concreta en el alca. la rentabilidad y el lucro individual pierden su hegemona como motivo de la produccin, ya que sta se dirige a alcanzar la mxima felicidad y44

bienestar de la nacin entera. las nuevas relaciones de produccin, estn dirigidas a evitar la centralizacin y la concentracin de la propiedad en pocas manos, cumpliendo con el mandato constitucional que hace punible los monopolios. la adopcin de un nuevo estilo de vida y de consumo, que puede ser una especie de movimiento por los valores de uso, permite superar la sobre diversificacin de bienes y la inflacin estructural. la planificacin democrtica, como direccin consciente de la economa, regula la anarqua del mercado y puede conjurar las deformaciones sectoriales. la desproporcionalidad sectorial que hemos heredado del puntofijismo (industria bsica que se reduce a producir insumos o materia prima, agricultura en ruina, hipertrofia de los servicios y el comercio) hay que superarla colocando las necesidades sociales y los valores cooperativos al mando, acompaado de una concepcin del desarrollo endgeno sustentable. tales determinaciones cobran vida en aspectos tcnicos productivos ms concretos como en el caso de las cadenas productivas, orientando la construccin de conectores e inclusores entre la produccinprocesamiento y transformacin-distribucin-consumo. estos conectores son los que viabilizan el eslabonamiento de las cadenas: tales conectores e inclusores pueden ser de naturaleza cultural, si los45

ubicamos en el terreno del cambio actitudinal, en la formacin en valores, donde se incluyen los patrones de consumo, gustos y necesidades. en el marco del desarrollo integral que ataca el conjunto de deformaciones que hemos reseado, es importante atacar el consumismo que se ha impuesto siguiendo los patrones importados, que son reproducidos en nuestra sociedad por las capas que poseen alto poder adquisitivo, predilectos clientes de la comida chatarra como mc donald's, pepsi-cola, etc. en este caso hay que librar una verdadera batalla cultural para modificar esta demanda alienante, la cual implica tambin un proceso de sustitucin de productos en la dieta diaria (como un ejemplo en ese camino, podemos reivindicar el planteamiento realizado en el proyecto educativo nacional, donde se asume la impugnacin de la cultura de la pepsi-cola y su sustitucin por el guarapo de papeln con limn o frente al modelo mc donald's, impulsar la cultura del maz, lo que implica el desarrollo de las cachaperas donde se puede generalizar la elaboracin de diversos productos derivados: mazorcas sancochadas o asadas, cachapas, hallacas, mazamorra, caratos, etc.) el enfrentamiento en el terreno de los valores y el gusto gastronmico, est asociado ntimamente a la viabilizacin de las cadenas productivas. en el caso de las cachaperas, es indispensable fomentar el apoyo crediticio a las empresas asociativas o cooperativas, apoyar las cadenas productivas entre conuqueros que cultivan maz, la red de transporte, los centros de acopio, los puntos de venta y los locales de elaboracin de los derivados de este producto. de igual forma, es indispensable mejorar la higiene y la atencin a los consumidores, acelerar la permisologa sanitaria y de comercio. del mismo modo, se requiere una estrategia comunicativa que permita hacer del conocimiento pblico las propiedades del producto como valor de uso (sus46

ventajas para la salud, componentes nutricionales, mltiples derivados, etc.). como se observa estn presentes diversos requerimientos que deben ser cubiertos si queremos que sea exitosa la ruta de la cachapa. promoviendo este cambio en los patrones de consumo, podemos impulsar un conjunto de iniciativas referidas a la alimentacin diaria, elaborando mens que valoren adecuadamente la diversidad de productos alimenticios, adaptndolos a los acervos culturales y productivas a las capacidades

de cada regin o localidad: consumir alimentos naturales

como: leche, granos, pescados, carnes blancas y rojas (pollo, conejo, chivo, chigire, ganado, cochin; si son criados en casa mejor) frutas, verduras, legumbres, hortalizas, cereales, semillas (girasol, auyama, pistacho, man, ajonjol, almendras, maz, alfalfa, etc.). sustituir la harina de maz precocida por: maz pilao, avena, afrecho, soya. consumir alimentos ricos en fibra como: casabe, pltano, fororo, yuca, cachapa, hallaquita de maz, carne de soya, lairen, arroz, entre otros. igualmente existen legumbres ricas en protenas, hierro y cido flico que no son comerciales como: la pira o bledo, verdolaga, hoja de ciruela, espinaca, acelgas, chicoria, llantn, hierba buena, etc.). otro eslabn en la construccin de cadenas productivas, est relacionado con los canales de distribucin, donde es vital promover el desarrollo de infraestructura como los sistemas de transporte, centros de acopio, cadenas de fro y experiencias de comercializacin e intercambio como los mercados populares, bodegas comunitarias puntos de ventas, ferias de consumo, tal como lo est impulsando mercal y el plan especial de seguridad alimentaria (pesa), los cuales vienen permitiendo:

47

del mismo modo, otros conectores-inclusores pueden ser de carcter cientfico-tcnico, referido a la plataforma tecnolgica que demanda nuestro desarrollo. impulsar lneas de investigacin, disear y fabricar prototipos de mquinas, equipos, productos y procesos destinados a la solucin de problemas tecnolgicos comunes del conjunto de empresas o unidades productoras de bienes y servicios que conforman las cadenas productivas, operando como red, son tareas fundamentales para eslabonar la produccin-distribucin-consumo en la perspectiva del desarrollo endgeno y sustentable, porque como ya reseamos hemos heredado un conjunto de mquinas-herramientas que responden a un determinado patrn tecnolgico que no tiene correspondencia con nuestra necesidad de desarrollarnos armnicamente, sino que estn ntimamente vinculadas a las deformaciones estructurales que hemos descrito, de igual forma estn asociadas a un determinado esquema de rentabilidad, que persigue la mxima ganancia apropiada individualmente. por ello podemos decir, que nuestros parques industriales poseen una tecnologa heterognea que responde a las tendencias que el capital transnacional impuso a nuestra economa. en consecuencia, no se puede partir de tales activos, sin someterlos a una redefinicin tcnico-productiva. de all surge la necesidad de la reconversin industrial bajo la gida de lo endgeno, la reingeniera bajo la ptica de lo sustentable, la productividad bajo el sello de la justicia social y la solidaridad. en este contexto podemos combinar la tecnologa de punta, con tecnologas blandas y artesanales. proceso este que demanda un inmenso esfuerzo de adaptacin e innovacin cientfico tcnica en cada ncleo endgeno de desarrollo. hemos reseado tres conectores, reconociendo sus desarrollos48

desiguales, si los vinculamos con las mltiples reas de actividad o los relacionamos con las particularidades de los ncleos endgenos, ya que cada uno de estos, tiene su ritmo y tiempo de maduracin, sus demandas especficas: cambio actitudinal, organizacin social, infraestructura, cualificacin laboral, innovacin tecnolgica, apoyo financiero, etc. con esta precisin queremos evidenciar la complejidad que posee la construccin de las cadenas productivas, requiriendo de una visin prospectiva que escalone su desarrollo, que pueda prever los nudos de estrangulamiento o los puntos crticos tanto en la produccin, como en la distribucin y el consumo. una exigencia muy importante est relacionada con la cualificacin laboral, donde se requiere superar la tradicional formacin para el trabajo: en el nuevo modelo de desarrollo se trata de formar en, por y para el trabajo. se busca la dignificacin del trabajo manual, evitando separacin teora-prctica. formacin politcnica que rebasa las limitaciones de la especializacin y del trabajo parcelario. se integra en dicho proceso formativo los aspectos tcnicos productivos con el socio-poltico y culturales. ubicacin en los ncleos graduar desempleados. esta formacin en, por y para el trabajo, requiere impulsar urgentes cambios en el sistema educativo, desde el ince, escuelas tcnicas, hasta49

la

endgenos de desarrollo, de las demandas

formativas y la generacin de oportunidades de empleo, para evitar

los institutos de educacin superior, donde hay que realizar cambios curriculares que apunten a transformaciones profundas en la investigacin, docencia y extensin. en este conjunto de instituciones, existen anacronismos curriculares que hacen que los aprendizajes no tengan pertinencia socio-cultural, es decir, estn divorciados de los sujetos sociales que demandan formacin, de los contextos productivos que requieren mano de obra calificada y de las problemticas que se confronta, tanto a nivel local como nacional. de suyo se comprende por qu la revolucin cultural implica modificaciones en el proceso de enseanza-aprendizaje, tal como fue propuesto en el proyecto educativo nacional (pen).

al lado de los aspectos tcnicos productivos que hacen posible eslabonar las cadenas productivas, en la perspectiva del desarrollo endgeno, tambin apostamos a un proceso de construccin donde las nuevas formas de gestin son uno de sus soportes esenciales. en este marco emerge la necesidad de impulsar la planificacin democrtica como parte de la revolucin cultural en marcha. ya en captulos previos, examinamos como la constitucin de la repblica bolivariana de venezuela, expresa en sus principios el desarrollo de la democracia participativa, cambiando radicalmente los principios de representatividad (intermediarios y gestores de las polticas y acciones), por los principios de participacin ciudadana, corresponsabilidad, concurrencia y cooperacin. el pueblo soberano tiene el derecho y deber50

de asumir la gestin pblica, a travs de la organizacin comunitaria y el diseo, ejecucin y evaluacin de polticas que favorezcan la elevacin de la calidad de vida. como concrecin de la crbv, se han aprobado un conjunto de leyes, entre las que est la ley de los consejos locales de planificacin de polticas pblicas, en cuyo texto aparece la figura del consejo comunal de planificacin, como el espacio institucional que est ms cerca de la comunidad. en tal sentido, creemos que en los consejos comunales de planificacin, se contextualiza otro modelo de gestin, con una ubicacin territorial delimitado por el ncleo endgeno de desarrollo, que se impregna de lo comunitario. en esa direccin, nos referimos al espacio geogrfico, mnimo, donde concurren una serie de organizaciones e individualidades, que caracterizan la dinmica social que en la misma se desarrolla. la comunidad, entendida como el barrio, la urbanizacin, el casero, es responsabilidad de todas y todos aquellos que en ella habitan, dejando de ser simples habitantes para convertirse en ciudadanos (sujetos polticos), quienes de manera organizada definen la comunidad que quieren y trabajan por lograrla, poniendo en prctica valores cooperativos y solidarios (los problemas del vecino, son mis problemas). en la comunidad que se propone se reivindica la callapa, el convite, el sancocho colectivo... y se ponen a su servicio todas las instituciones pblicas existentes en dicho espacio, favoreciendo as su desarrollo de manera integral y sostenible. el consejo comunal de planificacin es una instancia de elaboracin,51

planificacin, ejecucin y evaluacin de polticas pblicas donde participan todas y todos los actores (grupos vecinales, maestros, alumnos, alumnas, jvenes, ancianos, organizaciones culturales, religiosas, deportivas), en fin toda la comunidad organizada (barrio, casero, urbanizacin). como ya indicamos, la participacin comunitaria es bsica para diagnosticar las necesidades sociales, culturales, econmicas, polticas, educativas,... y a partir de dicho diagnstico, planificar las acciones necesarias que permitan superar los mltiples problemas, alcanzando mayores niveles de calidad de vida en forma colectiva. en este contexto social concreto, se lleva a la prctica la constitucin de la repblica bolivariana de venezuela como modelo de pas y sociedad que debemos construir. una sociedad con principios y valores humanistas, donde se promueve la participacin, concretando la verdadera democracia participativa. esto implica, que los asuntos pblicos son responsabilidad del pueblo en general, establecindose su viabilidad en los artculos: 62, 182 y 184, tal como lo reseamos anteriormente. por lo tanto, necesitamos fortalecer la organizacin venimos promoviendo en la revolucin bolivariana, comunitaria que ejercitando la

gobernabilidad a travs de la estructura de base de los consejos comunales que est constituida por la asamblea de ciudadanos; entedida esta como el espacio que la constitucin prevee como organo deliberativo y con decisiones vinculantes en el ejercicio de gobierno. esta democracia asamblearia se vincula a unas estructuras ms moleculares como las redes sociales, los crculos bolivarianos y los colectivos comunitarios.52

este tejido organizativo le da sustentabilidad poltica y social a los ncleos endgenos de desarrollo, articulando gobernaciones y alcaldas permitiendo: planificar acciones que apunten al desarrollo endgeno (econmico, las instancias ministeriales y sus organismos tutelados o adscritos, institutos y corporaciones regionales,

poltico, social, cultural). ejercer la contralora social. promover la formacin ciudadana de la poblacin. propiciar la prctica de los principios de la democracia participativa.

partiendo de los rasgos del estado en construccin, con su insercin social y ejercicio de la contralora del pueblo a travs de espacios como los consejos comunales, se hace urgente desmontar las concepciones, estructuras y procedimientos de la cultura burocrtica en el gobierno, la cual tambin hemos heredado del puntofijismo. la actual administracin pblica es un fiel reflejo de dicha cultura, siendo una camisa de fuerza que va a inutilizar el esfuerzo transformador si no se realizan los cambios planteados. veamos los principales rasgos que encontramos en la gestin pblica:

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una esfera donde esta vieja cultura viene haciendo estrago es en la planificacin y en la gestin presupuestaria del estado, por supuesto, estas conductas poseen una serie de coberturas ideolgicas y justificativos ticos, que en su conjunto estn focalizados en la razn tcnica: es muy comn encontrar la conseja: yo no soy poltico, soy un tcnico. tambin encontramos la frase: hay que cumplir con el reglamento, los pasos, los recaudos, etc. hay que ser eficiente, y mientras ms parcelado y fragmentado es el plan, ms fcil es su evaluacin, control y seguimiento. las estimaciones y asignaciones presupuestarias, se orientan por criterios contables de equilibrios, sin considerar su pertinencia poltico social o su vinculacin con la estrategia de desarrollo. quienes elaboran los planes y estructuran los presupuestos, en la mayora de los casos, no tienen nexos y compromisos orgnicos con los decisores polticos y las organizaciones comunitarias. a la hora de discutir programas y proyectos todo el mundo est de acuerdo, pero cuando se pasa al presupuesto, cada cual saca la bandera insular. bien lejos queda la concurrencia del esfuerzo, la cooperacin, la coordinacin o articulacin de dichos programas. en tal sentido, una de las rectificaciones urgentes est referida a la reestructuracin general de toda la administracin pblica, buscando abaratar la gestin pblica, hacerla ms eficiente, superando la intermediacin burocrtica. al mismo tiempo que se plantea la desburocratizacin de la administracin54

pblica,

hay que trabajar por la salida de los agentes de la

contrarrevolucin que estn en el gobierno. para ello proponemos discutir y aplicar los siguientes criterios rectores: la delegacin y descentralizacin de la capacidad de decisin y de las funciones, concretado en un nuevo modelo de gestin con planificacin democrtica y elaboracin participativa del presupuesto. impulso de la planificacin intersectorial, para alcanzar sinergia y concurrencia en los planes, programas y proyectos, que por ahora siguen duplicando el esfuerzo, solapando funciones, con un alto nivel de ineficiencia y no pertinencia social. articulacin intra e interministerial de la poltica social. la transferencia directa de recursos a las comunidades. simplificacin de trmites, recaudos administrativos y tcnico-legales. colocar el acento en la pertinencia social y la eficiencia ejecutiva en la inversin presupuestaria. la transferencia de recursos a todos los sistemas asociativos de la economa social. llevar adelante estas orientaciones estratgicas requiere poner la poltica al mando, superando la separacin entre la poltica y la tcnica, formando una escuela de gobierno que integre las diversas instituciones existentes (iveplan, fundacin escuela de gerencia social). hemos reconocido el proceso de transicin que tenemos que llevar55

adelante en la revolucin bolivariana, el cual puede ser resumido en la metfora lo viejo no ha muerto y lo nuevo apenas esta naciendo. en esa direccin, estamos conscientes de que los cambios no se decretan, si no que se viabilizan con propuestas, planes, proyectos, en cuyo seno se siguen expresando la puja entre quienes apuntan a las transformaciones y quienes trabajan por mantener el status quo. ya khun cuando examin la problemtica de la crisis de paradigma conceptu este fenmeno como la tension esencial entre conservar e innovar. en todos los programas, planes y proyectos del gobierno revolucionario est presente dicha tensin esencial. en consecuencia, quienes trabajamos en funcin de cambios estructurales tenemos la responsabilidad de construirle viabilidad a las propuestas alternativas, caracterizando los nudos crticos del proceso, los conflictos de intereses, las concepciones equivocadas, las ejecutorias errticas. en tal sentido, consideramos que la caracterizacin que hemos realizado anteriormente de la cultura puntofijista, sigue reproducindose en algunos de sus matices en la accin gubernamental. particularmente vamos a examinar algunas de sus concreciones en la misin vuelvan caras, donde se trasladan los conflictos de intereses y se van a polarizar las contradicciones, dada las caractersticas de los cambios asumidos en la misin. en vuelvan caras tenemos como propsito estratgico cambiar el modelo econmico, modificando las relaciones de produccin, con un enfoque de desarrollo endgeno que parte de las fuerzas propias, desde adentro, por dentro, bajo las premisas de la economa social, centrada en la equidad, solidaridad, cooperacin.

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en los pocos meses que tiene la misin vuelvan caras se han desatado las energas creadoras de un sector importante de la poblacin secularmente excluido; pero al mismo tiempo, se han soltado los demonios de quienes buscan hacer negocios bajo el afn de lucro, lo que en otros momentos hemos denominado cazadores de fortuna que colonizan cuanto proyecto aparezca en el horizonte. igualmente, siguen vigentes algunos criterios en torno al desarrollo que responden a la economa poltica puntofijista e igualmente la razn burocrtica sigue estando presente en el proceso de elaboracin y ejecucin de la propuesta. esto se ha evidenciado en diversos aspectos crticos denunciados pblicamente por el propio cdte. chvez, de igual forma ha estado presente en las evaluaciones internas del equipo que coordina la misin y tambin, en las prcticas concretas que se realizan en torno a los objetivos o ncleos endgenos de desarrollo (ode o ned). una de las caractersticas de este proceso es que son prcticas que en su mayor parte se desarrollan como un currculo oculto, por omisin e irresponsabilidad intelectual, ya que las diferencias o discrepancias no estn explcitamente planteadas. formalmente, estamos en teora de acuerdo con las premisas de la misin vuelvan caras, pero a la hora de llevarla a la prctica aparecen enfoques que no se corresponden con lo discutido y aprobado. esta conducta dicotmica la podemos encontrar tanto en los funcionarios pblicos como en los excluidos y beneficiarios de la misin. en forma sintetizada podemos sealar los principales focos donde se

polarizan algunas de estas situaciones, chocando los residuos de la cultura puntofijista y las nuevas concepciones que pugnan por abrirse paso:

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estas

dicotomas

que

pueden

aparecer

como

simplificadas,

son

focalizaciones mucho ms complejas por supuesto, pero para al objeto de nuestro anlisis concretan actitudes y mentalidades que hay derrotar para que la misin vuelvan caras cumpla con su cometido. los desafos involucrados en la rectificacin de los rumbos equivocados en este caso especfico y en el conjunto de la accin transformadora, justifican la categorizacin con el cual titulamos este trabajo: la revolucin es cultural o reproducir la dominacin.

a) incorporacin de otra racionalidad y otros valores en la produccin de bienes y servicios 1.- el propsito es el de ampliar y profundizar la democracia econmica que enfatice la cultura del trabajo y la produccin, y que elimine progresivamente nuestra dependencia del rentismo petrolero. vamos a diversificar la economa no petrolera y estimular la economa social, equilibrando la heterogeneidad de los intereses econmicos y sociales con la participacin autogestionaria de todos los venezolanos, convergiendo diversas formas de propiedad y de relaciones de produccin y consumo urbano-rural. se apoya toda esta iniciativa autogestionaria en un sistema de micro finanzas y de asistencia tcnica a las comunidades organizadas. 2.- nuestro objetivo es alcanzar la justicia social. esta justicia se manifiesta en ampliar y profundizar la democracia social en todos los campos que conciernen, como la educativa, la de la alimentacin, la de la salud, la de la58

vivienda, la cultural, la recreacional y la de la seguridad. la conquista de la justicia social se fortalece en lo pblico, donde el inters colectivo en su accin poltico-social toma progresivamente las decisiones claves para su desarrollo. as se establece una corresponsabilidad entre el estado y la sociedad en su conjunto como legtimo y efectivo poder ciudadano de participacin y protagonismo. enfatizamos en esta corresponsabilidad, la incorporacin de nuevos actores, destacando la accin comunitaria, para formular, ejecutar y evaluar polticas pblicas y rendicin de cuentas. una clave la constituye el control social de las intervenciones del estado. para tal fin nos planteamos universalizar los derechos sociales con garanta de equidad, disminuir las brechas sociales de riqueza, ingreso y calidad de vida, y apropiarse de lo pblico como espacio de inters y accin ciudadana. 3.la v repblica, ya tiene su fundamento en la constitucin de la la construccin de una venezuela desarrollada

repblica bolivariana de venezuela, que se est aplicando como parte del proceso de transicin. tiene que incorporar en su haber un conjunto considerable de transformaciones institucionales y de relaciones ciudadanas. en tal sentido, estamos estableciendo una democracia social de derecho y de justicia, respetando los derechos humanos y logrando en la prctica una vida colectiva basada en la libertad, la igualdad, la solidaridad y la equidad. por tanto, la transicin en la que estamos comprometidos dirige sus esfuerzos a consolidar la estabilidad poltica y social, desarrollar el nuevo marco jurdico institucional, y contribuir al establecimiento de la democracia participativa y protagnica. todo esto involucra una profunda reestructuracin del aparato del estado para que el pueblo soberano59

disponga de las capacidades de regulacin y control de gestin de ste, para ampliar y profundizar la democracia poltica venezolana. 4.venezuela y todos sus ciudadanos necesitamos conocer todos los

mbitos y particularidades de nuestra diversidad geogrfica. esto no es posible si su poblacin se centraliza y se concentra en una pequea rea. mucho menos si se abandona y se deja desguarnecida a la mayora de la superficie nacional. por esto el objetivo de ocupar y consolidar el territorio es histrico, social, econmico y polticamente determinantes. la bsqueda del equilibrio territorial la vamos a lograr descentralizando, pero tambin desconcentrando. en esa direccin, trabajamos la descentralizacin desconcentrada. para lo cual es necesario modificar el peligroso patrn de poblamiento hasta ahora estimulado, a travs de diversificar y consolidar las actividades econmicas en todos los espacios de la repblica que tengan potencial desarrollo. como apoyo a esta poltica potenciamos las tres fachadas de integracin (amaznica, andina y caribea), los tres ejes de desconcentracin (occidental, orinoco-apure y oriental) y cada dinmica regional de acuerdo a su vocacin y potencial productivo y de servicio. para todo esto hemos formulado tres sub objetivos: incremento de la superficie nacional ocupada, mejorar la infraestructura fsica y social, y aumentar la poblacin y las actividades productivas. 5.nos planteamos como punto de partida indiscutible, el fortalecer la

soberana nacional y promover un mundo multipolar. as trabajamos para conformar bloques diversos que alcancen autonoma poltica favoreciendo el progreso de nuestros pueblos. esto se fundamenta en el desarrollo econmico y social internacional equitativo, erradicacin de la pobreza,60

superacin del nocivo endeudamiento externo y unos justos trminos de intercambio comercial internacional que valoren adecuadamente las materias primas y los bienes de los pases en desarrollo. b) construccin de redes productivas, donde se articule la produccin transformacin distribucin y el consumo, en la perspectiva del desarrollo local sustentable.

* lograr abastecimiento a bajo costo / precio * * debilitar las roscas de abastecimiento y comercializacin de los fortalecer las redes de productores autogestionarios y de economa productos del rubro de alimentos social en las reas de produccin de alimentos, textil, calzado y en los procesos de almacenamiento, transporte, abastecimiento, consumo y servicio. * aportar a la diversificacin de la produccin y consumo de productos alternativos en los rubros de alimentos, textil, calzados, salud. c) el consejo comunal de planificacin de polticas pblicas, como espacio institucional para el impulso del desarrollo endgeno. d) desburocratizacin del estado e impulso de un nuevo modelo de gestin pblica, como soporte del desarrollo endgeno. 1.- las estructuras, las tcnicas y los procedimientos administrativos no estn en correspondencia con los postulados constitucionales, con los planes de desarrollo y en muchos casos estn desfasados de los tiempos polticos, es decir, en muchas ocasiones una orden de pago o transferencia de recursos, un resuelto ministerial o un proyecto social61

elaborados para resolver una problemtica, se quedan engavetados o siguen un curso lento y tedioso, que cuando se van a ejecutar ha perdido pertinencia. 2.- en la actualidad ms all de las excepciones en el estado venezolano carecemos de hombres y mujeres formados en enfoques y prcticas antiburocrcticas. 3.- el gobierno nacional est minado por agentes contrarrevolucionarios que realizan una labor de obstruccin, dilaciones, saboteo, etc. e) confrontacin de las dos culturas en el desarrollo de la misin vuelvan caras 1.- hay quienes integral en la no creen en el desarrollo endgeno - sustentable y actual coyuntura histrica, donde hay defender

quienes creemos que este es el enfoque adecuado para el desarrollo coherentemente la soberana nacional frente al imperio. 2.- hay quienes conciben el desarrollo modulado por la rentabilidad, la productividad, la solidaridad. 3.hay quienes promueven proyectos vinculados a los enclaves sectoriales y quienes sustentables, el desarrollo de cadenas productivas econmicos que perpetan las deformaciones planteamos la competitividad del mercado y quienes colocamos el acento en la satisfaccin de las necesidades colectivas, la equidad social y

materializando tambin la desconcentracin territorial y poblacional. 4.- hay quienes decretan ncleos endgenos sin sujetos, contextos ni planificacin estratgica (verdaderos ned de papeles o potes de humo) y quienes enfatizamos la implicacin del sujeto social en el proceso de62

elaboracin, planificacin, ejecucin y evaluacin de los

ode o ned,

demandando el financiamiento oportuno, la construccin de obras de infraestructura, el apoyo tecnolgico adecuado, la formacin permanente y la organizacin de las asociaciones productivas (cooperativas, banco comunitario, microempresas, etc.). 5.- hay quienes aplican enfoques tecnocrticos de planificacin, ignorando tiempos y ritmos de maduracin de los proyectos, estandarizando formatos e instrumentos, sin articular los diversos componentes de la cadena productiva, y quienes a partir caracterizan los desarrollos concretos de cada ode o ned, evaluamos el impacto del financiamiento, la infraestructura, la tecnologa, la formacin y organizacin, como inclusores y conectores que le construyen viabilidad y sustentabilidad a los ode, anudando las redes productivas. 6.- en ese mismo sentido, hay quienes tienen una visin mecanicista y cortoplacista del desarrollo de los ode o ned, lo que impide ubicar en el terreno concreto, los nudos crticos y como resolverlos, y hay quienes impulsamos un enfoque que articula el corto plazo, el mediano y largo plazo, lo que obliga a la secuenciacin de las acciones, jerarquizando las necesidades: lo que es necesario obtener en trminos de financiamiento, infraestructura, tecnologa, formacin y organizacin, lo indispensable lograr de estos factores productivos, lo que es posible alcanzar en el corto plazo. esto tiene que ver con la construccin de la viabilidad de los ode o ned, colocando al lado de la visin estratgica las mediaciones (tanto financieras, como de infraestructuras, tecnologas, formacin y organizacin) que enlazan los distintos estadios del desarrollo endgeno: situacin inicial - transicin - resultados. dicha secuenciacin se inscribe en la siguiente prospectiva estratgica: del desarrollo real o situacin inicial63

en los ode, al desarrollo prximo como trnsito y de all al desarrollo potencial como red productiva, siendo este camino una especie de aplicacin metodolgica del enfoque sobre el vigostky en pedagoga. 7.- hay quienes ignorando la anterior visin de la secuencia estratgica, no consideran adecuadamente los eslabones de las cadenas productivas, los cuales no se construyen improvisando o con polticas parciales, y quienes hemos puesto el acento en trabajar los detalles del eslabonamiento que hacen posible darle valor agregado a la produccin en el contexto de los ode o ned. un ejemplo que ilustra esta situacin lo encontramos en el terreno agrcola donde podemos alcanza