EL PROYECTO ESPEJO.

1. COMIENZOS. Washington D.C Casa blanca, a las 11 de la mañana del 5 de marzo del 2028. Se supone que no debía sorprenderse por eso, pensó mientras releía la evanescente imagen holografica del informe recién redactado al otro lado del país. Después de todo llevaban detrás de ello desde mucho antes de que comenzase su mandato hacia ya tres años. Sin embargo a pesar de los puntuales y prolijos informes que había ido recibiendo, siempre quedaba la duda de si esta vez seria la definitiva o surgiría algún otro imprevisto técnico que redujese una esperanza de éxito en una mera falsa alarma. Ya había pasado mas de una vez, demasiadas en opinión de la mayoría. Por eso la noticia de que finalmente lo tenían le quitaba un gran peso de encima. Finalmente casi siete años de trabajo habian dado su fruto. Pero un informe no era suficiente, no es que necesitase mas detalles pero después de todo el jefe del proyecto merecía una felicitación personal por su tenacidad. Aquel proyecto había sido algo realmente exasperante con sus inesperados problemas asaltándote continuamente, apenas resolvías un problema surgía otro y además con la amenaza añadida de que había otros en la competición que podían adelantarse si bajabas la guardia lo mas mínimo. Pero finalmente lo tenían y lo mas importante es que eran los primeros y eso lo compensaba todo. De repente, frente a el apareció de improviso la imagen holografica de su interlocutor. Era un hombre bien vestido, de unos cuarenta años, mediana estatura, pelo castaño y corto que le contemplaba de pie. Aunque parecía tan real que apenas podía distingirse de una imagen real en realidad aquel con quien quería hablar estaba en Los Angeles, a miles de kilómetros de distancia. -- Buenos días, Lemman. Sé que aun es temprano por allí pero como sabia que estaría despierto decidí llamarle en cuanto terminé de leer su informe. Siento que no pueda estar aquí personalmente pero lo importante es que no quería demorarme mas en felicitarle por su éxito. -- Nuestro éxito, señor, somos muchas personas las que trabajamos en este proyecto, muchos miles, no es justo olvidarlo. Lo importante es que esta hecho, la verdad es que no veía la hora de poder darle esta noticia después de tantos fracasos.—Lemman sonrió suavemente, mucho mas suavemente de lo que seria de esperar por su estado de animo. Le conocía desde hacia mucho tiempo y sabia que era muy poco expresivo a la hora de mostrar sus emociones, lo que significaba que aquella sonrisa era una muestra de que estaba sumamente contento. -- Cierto, finalmente tenemos un ordenador de Ertaz híbrido funcional y controlable y somos los primeros en tenerlo y debo estarle muy agradecido por ello, pues gran parte del mérito es suyo.—dijo el presidente. -- Muchas gracias, señor, pero he de advertirle que no podía permitirme asegurar que realmente seamos los primeros, no tengo demasiada información sobre los progresos de las demás potencias.—Lemman hablaba lenta y pausadamente como casi siempre hacia. -- Pero yo si, mis servicios de información me dicen que somos los primeros o por lo menos todo parece indicarlo así. Los que van mas adelantados son los japoneses y los europeos y aun están atascados en uno de nuestros últimos, digamos, problemas técnicos. -- En cierto modo es culpa nuestra habernos metido en semejante lío. Si nos hubiésemos conformado con un ordenador de Ertaz puro podíamos haberlo tenido hace siete años y lo mismo vale para cualquier otro capaz de pagar el dinero que cuesta el Ertaz. Pero además de un ordenador sumamente potente queríamos que fuese controlable, que no empezase a hacer lo que le diese la gana, y eso significaba que el Ertaz puro no vale, teníamos que combinarlo de alguna forma con un ordenador ordinario, crear un híbrido que tuviese la capacidad de cálculo y la adaptabilidad de un ordenador de Ertaz puro pero que no pudiese desobedecer, que tuviese que obedecer nuestras ordenes necesariamente. Es eso lo que nos a causado todos los problemas. -- ¿Y de que hubiese servido tener otro robot incontrolable?, con un Hanigalbat ya hubo suficiente, los europeos pueden considerarse afortunados de que desapareciese sin causar destrozos de consideración. No podemos permitirnos el riesgo de un robot mucho mas inteligente que un hombre sin control ni posibilidad de implantárselo. Nadie es tan loco como

para correr ese riesgo y de hecho nadie lo ha hecho después del lo que sucedió con el robot del señor Enrique Zabaleta. -- En eso estoy totalmente de acuerdo, pero las ventajas del Ertaz como medio de computación son demasiado grandes como para resignarse a dejarlo en el cubo de basura de la historia, por eso gastamos siete años de trabajo y miles de millones de dólares para conseguir un híbrido controlable y lo mismo han hecho todos los países con capacidad para permitirse una investigación científica relevante. Finalmente lo hemos conseguido o por lo menos en parte. -- ¿Solo en parte?—el presidente torció el gesto ligeramente. -- Lo pone en el informe, señor, el precio de reducir el carácter imprevisible del desarrollo de un ordenador de Ertaz puro lo bastante como para implantarle leyes robóticas estables es perder una parte importante de su capacidad potencial de calculo y adaptabilidad. Incluso el mejor ordenador híbrido con leyes posible tiene una capacidad considerablemente menor al que hubiese podido desarrollar Hanigalbat de no haber desaparecido en las alcantarillas. Sin embargo sigue siendo mucho mayor que la de cualquier otro ordenador, por lo que el esfuerzo ha valido la pena. -- Había leído el informe, pero por un momento había olvidado ese detalle. A pesar de ello todo el mundo esta de acuerdo en que vale la pena y yo desde luego también. Estoy deseando comprobar de lo que es capaz ese robot en el mundo real. -- Prototipo de robot, señor, aun esta en el banco de pruebas, en proceso de aprendizaje concretamente, pero promete y mucho. El proceso va perfectamente y todas las pruebas han salido como la seda. Funciona perfectamente y dentro de pocos días, cuando haya adquirido la habilidad necesaria, podremos empezar a usarlo en cualquier tarea útil a la que estime conveniente dedicarlo. En mi opinión deberíamos empezar a usarlo y empezar a fabricar mas como el de inmediato. Nuestros competidores terminarán consiguiéndolo también y seria conveniente aprovechar la ventaja mientras la tengamos. -- Soy de la misma opinión y eso es precisamente lo que pretendo hacer. Y ya que estamos en confianza puedo compartir con usted para que pretendo usarlo en primer lugar. -- ¿Para que pretende usarlo? -- ¿Qué era aquello que hizo Hanigalbat antes de fugarse del laboratorio donde le construyeron?. -- Usar el sistema informático del complejo para espiar a Tomaszow, fundir los sistemas de alarma y abrir los cierres automáticos de las puertas. -- Exacto, infiltrarse en sistemas informáticos. Espiar. Un robot de Ertaz es un espía prácticamente imparable, puede infiltrarse por cualquier parte sin ser detectado y detenido excepto por otro robot de Ertaz. Ahora que nosotros lo tenemos y los demás aun no, ¿porqué no aprovechar la ventaja mientras dure? Después de todo la información es poder. -- No creo que nuestro monopolio respecto al ordenador híbrido dure mucho tiempo. -- Yo tampoco. En este tipo de cosas uno nunca puede estar seguro de nada, pues nuestros competidores hacen todo lo posible por ocultar sus pasos igual que nosotros hacemos con ellos, sin embargo todo indica que somos los primeros. De hecho lo primero que pretendo hacer es usar a ese robot para confirmar exactamente hasta que punto han llegado cada uno de ellos. Pero incluso si nuestros datos actuales son buenos solo les llevamos una ventaja relativamente corta, en unos seis meses probablemente otro de ellos lo habrá conseguido también, tal vez antes si tienen suerte. Los demás no tardaran mucho mas. -- Así que pretende usarlo de espía mientras conservemos el monopolio. -- Exactamente. Ahora Lemman carraspeó suavemente antes de añadir. -- ¿Se ha planteado la posibilidad de que se podría usar para algo mas que para espiar? Un ordenador híbrido puede no solo espiar sino también manipular y sabotear archivos con mucha mas eficacia que con cualquier incursor informático de naturaleza convencional. Se podría usar para destruir o alterar los datos de los programas de investigación extranjeros de ordenadores híbridos y arruinar todo su trabajo. Perderían años de trabajo y nuestro monopolio duraría mucho mas. El presidente movió la cabeza negativamente antes de contestar. -- Parece ser que se ha especializado usted en ser mi diablo tentador. Permítame que le diga que como investigador es sumamente brillante pero como estratega es pésimo. Aparentemente suena tentador pero seria un estúpido si hiciese tal cosa. Lo único que lograríamos es ganarnos la enemistad del resto del mundo y eso es algo que no podemos permitirnos. ¿Acaso cree que los rusos, los chinos o los europeos nos iban a dar palmaditas en la espalda si atacásemos tan abiertamente sus intereses?. Un acto semejante

provocaría represalias inmediatas y no olvide que son potencias nucleares. No deje que la potencia de nuestro ejercito o la fuerza de nuestra economía le deslumbren, seguimos dependiendo del exterior para muchas cosas, de hecho dependemos mas que nunca y un ataque a una sola de esas potencias nos enemistaría con todas las demás. No olvide que nuestro poder levanta muchas envidias en el resto del mundo ya sin necesidad de una provocación como esa. Además, no necesitan hacer algo tan extremo como declararnos la guerra para hacernos daño, les bastaría con un embargo económico y nuestra economía se desplomaría. Las suyas también ciertamente pero su opinión publica estaría tan enfurecida por semejante ataque a traición que estaría dispuesta a soportarlo con tal de vengarse. Incluso aunque sus dirigentes no estuviesen dispuestos a llegar tan lejos nuestra situación distaría de ser cómoda. No, Lemman, hacer eso no solo provocaría una cadena de represalias por parte de nuestras víctimas sino también el correr el riesgo de que nos pagasen con la misma moneda en cuanto lograsen sus propios ordenadores híbridos, y no olvide que terminarían lográndolo pese a todas las zancadillas que nosotros podamos ponerles. Semejante acto de hostilidad no seria olvidado ni perdonado, ¿acaso lo haríamos nosotros si fuésemos las víctimas? -- Lo estaba presentando como una hipótesis, no estaba sugiriendo hacerlo en serio. -- No lo pongo en duda pero seria mejor que pensase en las consecuencias de lo que sugiere antes de abrir la boca. A mi personalmente no me importa pero con otras personas con las que no tuviese tanta confianza podría ponerle en una situación embarazosa. -- Por eso no suelo ser muy hablador con los desconocidos. De sus palabras he de deducir que no reconoceremos tener el ordenador híbrido. -- Aun no, primero quiero extraerle su utilidad y eso será mas fácil si ignoran que existe. Naturalmente es solo cuestión de tiempo que la noticia se filtre y entonces lo anunciaremos oficialmente. Entonces podrá ponerse los galones en publico y no solo en un ámbito restringido como hasta ahora. En fin, no solo le había llamado para hablar del asunto del híbrido, también tengo otros asuntos entre manos. -- ¿Y quería tratarlos conmigo? ¿Acaso tiene algo que ven con ordenadores de Ertaz? -- Indirectamente si, ¿supongo que habrá oído hablar de Enrique Zabaleta, el creador del único robot de Ertaz puro?. --- ¿El creador de Hanigalbat?. Si, por supuesto, estudio todos sus trabajos, son muy interesantes. El presidente se sonrió mientras le trasmitía un texto a través del holograma. -- Este trabajo seguro que no lo conoce, es nuevo y no esta hecho para su publicación. Es un memorándum confidencial que detalla un nuevo proyecto de choque para hacer frente al autismo social incluidas una serie de sugerencias técnicas. Lo que el autor llama, el proyecto espejo. -- ¿Autismo social? Yo no soy neurólogo, psicólogo ni sociólogo, no se mas del autismo social que lo que aparece en los periódicos. -- Pero tiene que ver, sobre todo por las ramificaciones técnicas que tendría la aplicación del proyecto. Usted es mi asesor en informática y quiero que me de su opinión. Lea el texto, puede cortar la comunicación mientras lo hace, pero en cuanto termine quiero que me de su opinión. La imagen que tenia delante del asintió, se vio como dirigía la vista a algo que tenia delante de una mesa y seguidamente la imagen desapareció. El presidente esperó, no tenia prisa, aprovechó para despachar algunos documentos de importancia menor y antes de que terminase la imagen reapareció en el mismo lugar donde había aparecido la vez anterior. -- ¿Y bien, que le parece? -- Desde luego no se puede negar que es ambicioso, sumamente ambicioso, añadiría yo. Pero también es arriesgado, inquietantemente arriesgado. -- El mismo autor lo reconoce y los especifica explícitamente pero piense en la alternativa. Mire el atolladero en que estamos metidos. Acaba de decir que sabe lo que dicen en los periódicos sobre el autismo social, pues bien, puedo asegurarle que la situación es aun mas mala de lo que muchos de esos artículos reconocen. El autismo social se esta convirtiendo en una verdadera plaga. Ya tenemos casi seis millones de afectados graves y otros quince millones de afectados de gravedad leve o mediana en todo el país y la cifra no para de aumentar. En el resto del mundo la situación no es mucho mejor, en algunos lugares es aun peor. La cifra total de afectados en todo el mundo en diversos grados de gravedad es ya de unos cien millones.

Lo hemos intentado casi todo, campañas de información, requisación de drogas neuronales y equipos de realidad virtual, penas de cárcel para los traficantes, todo esta fallando, la gente ignora las indirectas y cada vez mas gente cae en la enfermedad. ¿Qué mas podemos hacer? -- Intensificar las medidas, en mi opinión. Campañas mas contundentes, prohibición total de los programas de realidad virtual de carácter recreativo, de todos y no solo su restricción, mas penas de cárcel y mas dureza de la persecución de las infracciones. -- No te hagas ilusiones, no funcionará. Bueno, en realidad si funciona, pero no lo suficientemente bien como para detener el proceso. El problema es que los sistemas de realidad virtual le permiten a la gente sumergirse en mundos ideales donde todo uno es como desea, en esas condiciones cada vez mas gente prefiere encerrarse allí y aislarse del desagradable y problemático mundo real. Permanecen conectados cada vez mas y mas tiempo a sus mundos ilusorios, cuanto mas enganchados están mas insoportable les resulta el tiempo que tienen que permanecer en el mundo real para sus tareas cotidianas, así que cada vez las restringen mas, dejan de hablar con la gente, no salen, no se lavan, no se cambian de ropa y así hasta que se convierten en vegetales. Finalmente terminan por dejar de comer y beber, pues las modernas conexiones neuronales de los equipos de realidad virtual permiten eliminar a voluntad las incomodas sensaciones de hambre y sed y entonces mueren de sed a no ser que se les desconecte antes por la fuerza. Y incluso entonces el síndrome de dependencia es tan fuerte que son incapaces de volver a permanecer en el mundo real. Literalmente hay que tenerlos encerrados para evitar que se vuelvan a conectar, nunca vuelven a ser personas normales aunque la severidad de los daños depende de en que punto de su adicción se les haya interrumpido. El único método efectivo es borrarles artificialmente de la memoria los recuerdos de sus experiencias virtuales, pero hacer eso sin causar daños en otras partes de la memoria es casi imposible, así que esa técnica además de cara no es viable excepto como ultimo recurso, de hecho en muchos estados su practica esta prohibida. Necesitamos algo menos traumático. Prohibir los juegos recreativos de realidad virtual no serviría de nada. Sencillamente se fabricarían, comprarían y consumirían ilegalmente, con tanto mercado potencial ni la pena de muerte seria un castigo lo bastante contundente para impedir el trafico ilegal. -- ¿Entonces?. -- Enrique tiene razón, la única forma de escarmentar a los que aun no han caído en la tentación y romper la dependencia psicológica de los ya afectados es mostrarles las consecuencias directamente. Ponerles delante del espejo. -- ¿Realmente tiene que hacerse clandestinamente, sin avisar?. -- Me temo que si, Enrique tiene toda la razón en eso. Lo que la gente quiere de la realidad virtual es pasarlo bien o trabajar con ella por motivos laborales cuando tiene que hacerlo, la cuestión es que poca gente se sometería al programa hasta el final si sabe de que va, no, tiene que hacerse por sorpresa. La cuestión es si puede hacerse sin causar daños, Enrique afirma que si pero el no es neurólogo. -- Yo tampoco, aunque el afirma que se ha asesorado personalmente preferiría hacerlo por mi cuenta antes de arriesgarme .—contestó Lemman. -- Ya lo he hecho por usted y afirman que puede hacerse. No seria mas peligroso que una conexión neuronal ordinaria. -- Eso se referirá a que no producirá daños cerebrales pero ¿Y los efectos psicológicos sobre la gente? -- Eso ya es mas dificil de saber. Algunos opinan que seria positivo, tal vez la solución a la epidemia, otros opinan que no tendrá efecto o incluso que seria pernicioso, aunque esta claro que mucho menos que el propio autismo social. -- Bueno, imaginemos que nos arriesgamos, lo usamos y funciona. No podría usarse también para otros dines, digamos, menos constructivos. Estamos entrando en un tema de libre albedrío, de motivaciones muy profundas. Supuestamente el método propuesto tiene importantes limitaciones intrínsecas, teóricamente solo puede usarse para algunos asuntos muy limitados, ¿pero que sucederá si el método funciona pero las limitaciones no resultan ser tan eficaces como el dice? ¿ha pensado en las implicaciones? -- Si, claro que sí, es lo primero que se me pasó por la cabeza, de hecho ese es el peligro mas obvio. Siempre hay la posibilidad de que algun gobierno o grupo intente desarrollarlo para sus propios fines, lo que nos da un motivo más para actuar preventivamente desarrollando el proyecto, para por lo menos poder contrarrestar un intento de semejante naturaleza si nos vemos en lo peor.

Por si las dudas no quiero que esto se divulgue, podría suponer una tentación muy fuerte para mas de uno, por si acaso debe mantenerse tan en secreto como el desarrollo del ordenador híbrido -- ¿Y que pasará con la opinión pública?. Aun si sale bien, puede ponerse tan furiosa por no haber sido advertida como para arruinar tus posibilidades de reelección y la carrera de todos los que hayan tenido algo que ver en el proyecto. -- Ese es el mayor riesgo de aplicar el plan, después del de que fallen las salvaguardias, por supuesto. Eso es lo que me hace dudar y sin embargo quiero tenerlo todo listo por si a pesar de todo me decido a correr el riesgo. Tal vez después de las elecciones de este año en caso de que sea reelegido, de lo contrario aplicarlo o dejarlo en el cubo de la basura dependerá de mi sucesor. -- ¿Y que pinto yo en todo esto?, A no ser que quiera que sea yo quien lo prepare todo. -- Eso es lo que quiero que haga. Ahora que tu presencia en el proyecto del fabricación del híbrido de Ertaz ya no es necesaria o no lo será a partir de dentro de pocos días quiero que te encargues de este nuevo proyecto. Naturalmente quiero ser informado de todos los pasos que des, pero te dejare tanto margen de maniobra como el que has tenido hasta ahora. Lemman sonrío débilmente antes de contestar -- Será un placer aunque he de advertirle que tengo mis dudas sobre la conveniencia de aplicar semejante plan. -- Yo también, pero quiero estar preparado para cualquier eventualidad, si la cosa sigue empeorando puede que no nos quede otro remedio que proceder a aplicar el proyecto espejo. -- ¿A pesar de los riesgos? -- A pesar de ellos, muchas veces no hay otro remedio que arriesgarse porque no hacer nada o proseguir con una estrategia insuficiente seria mucho peor. -- ¿Cree que esa es la situación respecto al autismo social? -- Me temo que sí, aunque aun no sé que haré al final. Si no hago nada mas que continuar con las medidas ya probadas probablemente la epidemia proseguirá y la situación no parará de empeorar hasta tal vez el colapso final que predicen algunos. -- ¿Realmente cree en esos augurios de que el autismo social crecerá tanto como para provocar el colapso del sistema global?. -- No creo que termine siendo tan grave ni mucho menos, pero tampoco seria prudente despreciar esas predicciones alegremente. Es mucho mas que palabrería vacía, los modelos de prospectiva sociológica afirman que existe un riesgo apreciable de que la epidemia crezca tanto como para producir el derrumbe de la civilización. Las discrepancias sobre el grado exacto de riesgo varia según los modelos pero todos están de acuerdo en que el riesgo es apreciable. Como político cínico no debería preocuparme, pues incluso en el peor de los casos eso sucedería dentro de varias décadas, mucho después de que haya terminado mi mandato. Sin embargo como persona tiene que preocuparme, después de todo probablemente viviría lo bastante para verlo. El proyecto espejo podría funcionar y en ese caso se salvarían millones de vidas y se ahorraran gastos y sufrimientos ingentes. Si falla, incluso en el peor de los casos los daños serán relativamente ligeros. Naturalmente supondría el fin de mi carrera política, tal vez incluso mi procesamiento, todo depende de cual fuese el resultado. El hecho de que el proyecto se prepare en secreto y se aplique por sorpresa en realidad es un asunto menor. Después de todo también se guardó un estricto secreto a propósito de la crisis Nagada pero como todo salió bien la gente fue compresiva respecto al secreto y los responsables no sufrieron ningún coste, mas bien al contrario. Como dice un viejo proverbio el éxito tiene muchos padres y el fracaso es huérfano. Si el proyecto tiene éxito la irregularidad de la actuación será pasada por algo, solo si fracasa tendremos que preocuparnos. -- También esta el hecho de que ha enviado más ejemplares del memorándum, el dice que lo ha enviado a todas las potencias y no tengo motivos para dudarlo. ¿Como afectará a nuestros planes de aplicarlo el hecho de que el resto de gobiernos o por lo menos los mas importantes estén informados del plan?. -- No tengo intención de negar que hemos recibido el memorándum, no tendría sentido teniéndolo ellos también. Intentaré llegar a un acuerdo con ellos para ver si podemos tomar una decisión coordinada. No olvides que la amenaza del autismo social nos afecta a todos y que para ser eficaz toda actuación debe estar coordinada. Podríamos intentar realizarlo por nuestra cuenta y riesgo pero si podemos llegar a un acuerdo para hacerlo conjuntamente seria mucho mejor, cuantos mas estemos implicados mas efectividad tendría la medida y mas diluidas

quedarían las responsabilidades en caso de fracaso, intentaré coordinar el proyecto espejo con los demás gobiernos por lo menos a nivel de preparativos. En el caso de que alguno este dispuesto a emprender ese camino en la practica ya veremos... el caso es que de los asuntos de una eventual cooperación internacional me encargaría yo personalmente. Pero eso no cambia el hecho de que el proyecto debe permanecer secreto para la población en general, estoy seguro de que en eso todos los gobiernos informados estarán de acuerdo. Lemman afirmó suavemente con la cabeza para seguidamente suspirar suavemente antes de preguntar -- ¿Cree que funcionará? -- No lo sé y me temo que no estaremos seguros hasta que lo probemos, en el caso de que lo hagamos. Naturalmente intentaré recabar todos los datos posibles y andaré con mucha cautela, pero soy consciente de que seguramente la elección siempre tendrá un gran componente de riesgo. Esperar otra cosa seria engañarnos a nosotros mismos. -- Entonces haré todo lo posible para que el riesgo sea el menor posible, me dedicaré a prepararlo todo en cuanto reciba la orden escrita. En el proyecto del híbrido ya solo quedan detalles rutinarios que no requerirán de mi presencia así que me dedicaré al proyecto espejo en cuanto tenga la orden. -- La tendrá. Ahora mismo. – tras decir esto empezó a redactar la orden, firmarla y trasmitirla a todos aquellos que tenían que conocer su existencia. Todo en pocos segundos y sin moverse del sitio. El ordenador que tenia apoyado en una esquina de la mesa, apenas mas grueso que un cartón de embalaje y que cabría sobre una mano abierta convirtió su voz en palabras, su timbre de voz sirvió de firma y la máquina lo remitió automáticamente sin que el tuviese que mover un dedo. Cuando en la pantalla apareció la confirmación de que el texto había sido recibido por quienes correspondía, le dijo: -- A partir de ahora la preparación del proyecto espejo es cosa suya. Se que lo hará lo mejor posible, espero que tan bien como a llevado el desarrollo del híbrido. Buena suerte. -- Me temo que si decidimos usar lo que prepare si que vamos a necesitar mucha suerte, pero a pesar de todo cumpliré con mi obligación. Espero que se lo piense bien antes de aplicar ese proyecto. -- Lo haré, puede estar seguro. ¿Algo mas? -- No, nada mas por el momento.—y tras decir esto la imagen se desvaneció y Wllly Harcley, presidente de los Estados Unidos de América se quedó otra vez solo en todos los sentidos. Lentamente cogió el archivo con el texto original del memorándum de Enrique, se quedó mirando suspirando y pensó para si mismo. -- Bien, Enrique Zabaleta, buen follón que armaste a cuenta de Hanigalbat. Parece que meterte en problemas es tu especialidad. Por suerte entonces no sucedió nada irreparable pero esta vez.... espero que sepas lo que has desencadenado. Bilbao. 4 de abril del 2028. Melisa Zabaleta era una chica de costumbres sencillas pero eso no significaba que fuese tonta, ni muchísimo menos. Tenia treinta años, era alta, delgada, con un cabello largo, negro y lacio, una boca pequeña, algunas pecas en las mejillas y una nariz bastante chata que afeaba algo su rostro, por lo menos en opinión de bastante gente. Ahora estaba sentada en el interior de un restaurante, en uno de los nuevos barrios residenciales del este de Bilbao, a pocos cientos de metros del famoso laboratorio de investigaciones robóticas, uno de los mas importantes de Europa, donde ella trabajaba. Aun estaba sola pero sabia que eso no dudaría mucho tiempo, su compañero de trabajo, Alberto Urigortia no tardaría en llegar, hasta entonces nunca había llegado tarde a una cita y no esperaba que esta vez fuese a ser la primera. En efecto, un chico joven, de veintiséis años, con una barrigita incipiente, pelo corto y teñido de rubio, cara redondeada y bastante bajo se acercó, la saludo con un gesto y una sonrisa y se sentó frente a ella, al otro lado de la estrecha mesa. Tras pedir lo que quería comer se dirigió a ella. -- ¿Qué tal estas?—le preguntó. -- Muy bien, ya me lo preguntaste en el trabajo.—el también trabajaba en el laboratorio de investigaciones robóticas y se veían allí todos los días. -- Es cierto—reconoció el algo inseguro.-- ¿Te molesta que te haya vuelto a preguntar?. Melisa sonrió suavemente mientras negaba con la cabeza.

-- En absoluto y no entiendo porque deberías preocuparte por eso, sabes perfectamente que no me molesta. -- A veces debo parecer algo tonto.—dijo el algo avergonzado. -- Nada de eso, sé perfectamente que eres muy inteligente. Solo estas algo inseguro de ti mismo. Hace tres meses que salimos juntos así que no deberías comerte tanto la cabeza. Siempre estas temiendo meter la pata y que me enfade, pero eso no tiene razón de ser, te he dicho muchas veces que no me enfado fácilmente. Si creyese que has hecho algo que no deberías, te lo diría y ya esta, eso no afectaría lo mas mínimo a nuestra relación. -- Ya lo sé, pero sin embargo no puedo evitarlo, nunca he tenido mucho éxito con las mujeres, por mi físico ya lo sabes. Mírame, soy tan bajito que casi me llevas una cabeza de diferencia. -- No olvides que soy mas alta que la media, además el aspecto físico de la gente nunca me a importado gran cosa, lo que cuenta lo que hay dentro de la gente. Y lo que hay dentro de ti es bueno, muy bueno. Eres muy buena persona, tu único defecto es la inseguridad en ti mismo. -- Lo sé, pero no puedo evitarlo. No sé como no te molesta siento tan decidida. -- ¿Te parezco decidida? -- Eres decidida, no digas que no lo eres. -- Cierto, lo soy o eso me gusta pensar, pero eso no significa que no entienda a quienes no lo son tanto. -- Yo no soy decido en absoluto. -- Estoy segura de que si hubiese algún motivo importante para mantenerse firme, lo harías bien. Lo que pasa es que nunca has estado en una situación como esa. -- ¿Relacionarse con la gente no es un motivo importante? -- Depende de a que tipo de relaciones te refieras. Hay situaciones en que mostrarse firme puede producir roces o incluso ser el principio de una enemistad y eso es una pena. No saber cuando debes dar tu brazo a torcer también es un defecto. Además, no es cierto que no seas decidido en las relaciones cotidianas, insististe mucho para convencerme de que saliese contigo. -- Tu no parecías estar muy interesada, de hecho parecías dudar. Por eso tuve que repetir mi invitación varias veces. -- Lo ves, cuando empecé a poner pegas no te rendiste y seguiste insistiendo. Eso demuestra que no eres tan pusilánime como parece ser que crees que eres. -- Si hubieses seguido sin aceptar un par de veces mas entonces me habría echado atrás y allí habría acabado todo. -- No lo creo, puede que si de momento, pero algunos días después habrías vuelto a intentarlo. -- Por suerte no tuve que pasar por esa prueba. Además no creo que esa insistencia tuviese demasiado mérito. -- Tal vez, pero lo que importa es que te saliste con la tuya. -- ¿Por qué aceptaste, porque estabas interesada por mi o porque te daba pena?. -- ¿Pena? Es cierto que muchas veces he sentido pena por la gente pero no por ti. No, acepte porque tenia curiosidad, quería saber si era un capricho momentáneo o iba en serio. Entonces no sabia que te convertirías en mi novio. -- ¿Salir juntos algunos días nos convierte en novios?. -- ¿Algunos días?—Melisa volvió a sonreírse—salimos casi todos los días desde hace tres meses, ¿Cuántos días son mas que algunos para ti? -- Tienes razón, es mas que algunos días, no acostumbro a ser muy preciso en mis expresiones. -- Eso no tiene demasiada importancia, lo que importa es que eres una buena persona. -- Pero eso es todo. -- Nos queremos y eso es lo que importa. -- ¿Realmente me quieres?. -- Melisa volvió a sonreírse, aunque esta vez su compañero lo esperaba, de hecho era eso lo que pretendía con su pregunta. Su sonrisa era encantadora, era lo que mas le gustaba de ella, así que intentaba que sonriese lo mas frecuentemente posible, algo que había descubierto hace tiempo, no era muy dificil. --- Por supuesto y tu lo sabes. – mientras decía eso cogió su mano y la acarició suavemente. -- Pero me gusta oírtelo decir. -- Y aun te gusta mas que te sonría y te haga carantoñas, no creas que no me he dado cuenta.—dijo mientras pasaba a acariciarle suavemente la mejilla mientras le miraba con ternura. -- Me da un poco de corte que me acaricies en público.

-- No hacemos nada de lo que debamos avergonzarnos. ¿Porqué abríamos de escondernos? Eso te ayudará a ir venciendo tu timidez. -- Tal vez, pero creo que llevará tiempo. -- ¿Acaso tienes prisa? ¿yo no? -- Supongo que yo tampoco.—ahora fue el quien sonrió débilmente. Las caricias de Melisa tenían un efecto relajante que apreciaba mucho. -- Eres tan dulce y comprensiva y a la vez tan valiente. El haber estado secuestrada no parece haber afectado a tu carácter. Otros se habrían derrumbado y les hubiese amargado la vida, yo por ejemplo. -- Tampoco fue tan terrible. No hubo ninguna violencia física ni amenazas. Nos alimentaban bien, teníamos una habitación propia con los servicios esenciales, hablaban con nosotros y teníamos con que distraernos hasta cierto punto. Después de todo nos querían para que trabajásemos para ellos y encerrados en un zulo todo el dia no podíamos hacerlo. -- Pero soportar los interminables monólogos de Metchir no debía ser agradable. -- No era tan desagradable como piensas, después de todo no olvides que soy muy comprensiva.—Melisa volvió a sonreírse. -- Lo que daría por ser como tu. -- No hay dos personas que sean iguales. Lo que cuenta es que me gusta como eres y en lo que creo que puede y debe mejorarse, como tu timidez, haré todo lo posible por ayudarte a hacerlo. -- Eso no creo que tenga arreglo. -- Pues yo creo que si lo tiene, Alberto se encogió de hombros antes de contestar. -- ¿Tal vez, pero no se como? -- Ya veremos, tu no tienes porque preocuparte por eso ahora, los cambios en el carácter casi nunca son rápidos, se van acumulando poco a poco hasta que un dia te das cuenta de que tienes algo que antes no tenias. -- ¿No sabia que fueses psicóloga? -- Melisa volvió a sonreír -- Desde luego no tengo el titulo, pero creo comprender a las personas. -- Creo que pocas personas lo comprenden realmente -- Y tienes razón, son pocas. La mayoría están demasiado ocupadas en sus intereses egoístas como para preocuparse de lo que sientan los demás, excepto cuando eso les afecta directamente. -- Pero tu si lo haces, siempre has sido muy buena con todo el mundo. No solo conmigo. -- Sin embargo los sentimientos no son del todo iguales. A los demás les intento respetar y comprender pero es a ti a quien quiero. También quiero a mi familia, por supuesto, pero ese es un cariño de un matiz diferente. -- No tienes mucha familia, solo a Enrique, a su mujer y a su hijo. -- Eso es suficiente. -- Supongo que si, después de todo hay muchos que no tienen a nadie. -- Cierto, pero supongo que también querrás tratar temas menos deprimentes. -- Si, hay un asunto en el trabajo. Es solo un rumor pero no sé que pensar, tal vez vaya en serio. -- ¿A cual de los rumores te refieres? -- Al de que están buscando candidatos para trabajar en el asunto del híbrido de Ertaz. Se dice que ya lo han conseguido y que están empezando a fabricarlos en serie. Que necesitan técnicos para construirlos a gran escala, dicen que los cuestionarios que han repartido entre algunos de nosotros son con el propósito de seleccionar gente. -- Y como tu has sido uno de los que recibieron el cuestionario estas como unas castañuelas ante la perspectiva de meterte en el asunto, ¿no es así? Siento tener que decepcionarte pero creo que ese rumor es solo eso, un rumor. No creo que tengan el híbrido, por lo menos aun no, aunque probablemente estemos muy cerca. -- Pero y si fuese verdad. -- ¿Y si otros se nos hubiesen adelantado ya?, por ejemplo los estadounidenses, ser los primeros tiene su mérito pero ser los segundos ya no tanto. -- Aun así daría mi brazo derecho por poder estar en el ajo. Después de tanto tiempo estudiando la computación con matrices de Ertaz no veo la hora de poder pasar de la teoría a la práctica.

-- Eso es muy dificil de conseguir. El Ertaz es muy caro y encima los trabajos con el están restringidos. Hay que tener mucha suerte, ser muy bueno y tener muchos contactos para conseguir trabajar con Ertaz. -- Personalmente no creo que sea tan peligroso. -- Que con el pueda construirse un ordenador que supere en mucho todas las capacidades mentales humanas y sin leyes ni posibilidad de implantarlas, ¿no puede considerarse peligroso? ¿Quién se fiaría de un ordenador o de un robot mas inteligente que cualquier ser humano y que encima pudiese hacer lo que se le antojase, incluso matar, por lo menos en teoría?. -- También cualquier ser humano puede matar, por lo menos en potencia, y nadie prohibe que vivan y se muevan libremente. -- El problema es que un robot de Ertaz no es un ser humano y por lo tanto no se le juzga con el mismo criterio. Es una criatura artificial cuya mera existencia es un desafío a la posición del ser humano como especie dominante del planeta. Un robot de Ertaz es mas inteligente, mas rápido, mas fuerte y preciso que el mejor ser humano. Es una amenaza directa a la singularidad y a la posición del ser humano como cúspide de la creación. La gente esta dispuesta a tolerar inteligencias artificiales mientras estas sean inferiores a la suya y sobre todo mientras estén obligados por múltiples salvaguardias, las famosas leyes robóticas, a no dañarlos de ninguna forma y a obedecerles. A un robot de Ertaz no pueden implantársele las leyes robóticas, su estructura es demasiado moldeable, demasiado flexible para poder imponerle leyes fijas de obligado cumplimiento y eso es fatal para su reputación, mucho peor que su superioridad intelectual. No importa que las posibilidades de que un robot de Ertaz haga daño a alguien sin motivo, a no ser por desconocimiento, es muy baja, no evita que solo pensar en ello produzca un estremecimiento de temor en la mayoría de la gente. El caso es que existe el temor de que alguien pueda intentar repetir el experimento Hanigalbat y soltar otro robot sin leyes por ahí y eso no están dispuestos a tolerarlo. Por eso han colocado el Ertaz bajo estrictas normas de seguridad para evitar esa eventualidad. -- Pero los trabajos de Enrique demuestran que un ordenador de Ertaz no puede dividir su mente en compartimentos estancos independientes como hacemos los seres humanos. Sencillamente cuando encuentra un esquema de pensamiento que funciona bien empieza a aplicarlo en todos los casos, en los casos en que no sea aplicable probará otro método y así a medida que aumenta su conocimiento del mundo va desarrollando normas de comportamiento. Un robot de Ertaz busca la coherencia en sus actos sobre todas las cosas y si no la encuentra la buscará hasta encontrarla. Al principio es una mente en blanco que va aprendiendo por el método de ensayo y error, una especie de selección natural de métodos de razonamiento, hasta que desarrolla las normas de un lógica eficaz que a partir de entonces aplicará en todos los casos. Uno de los métodos de pensamiento imprescindibles para poder predecir el comportamiento de seres vivos, sobre todo si son seres humanos es la de poder ponerse y pensar en términos de la situación y los intereses del otro y esa capacidad es la base de la empatía, la base de toda moral. Nosotros usamos nuestra empatía muy parcialmente, en muchas ocasiones solo usamos nuestros conocimientos sobre los pensamientos e intereses de los demás para poder aprovecharnos mejor de ellos. Pero un robot de Ertaz no puede hacer eso, el a de aplicar el principio con todas las consecuencias pues no hacerlo seria incoherente. Aplicando su capacidad para aplicar la empatía indiscriminadamente y guiado por su cada vez mayor conocimiento del mundo, un robot de Ertaz iría desarrollando un código moral sin necesidad de que nadie se lo enseñase, y además un código que seria muy parecido a lo que cualquier buena persona entiende por moral. El caso es que aunque un robot de Ertaz no se le puedan implantar leyes robóticas si se le deja aprender libremente sobre el mundo irá desarrollando un código moral que en la practica es bastante similar a lo que se consigue con las tres leyes. -- Si, pero eso es solo una teoría, podrían aducir, como solo se creó un único ejemplar de robot de Ertaz puro no hay pruebas de que esa predicción teórica se corresponde con la realidad. No se pueden hacer estadísticas con un único caso y después de todo quien hizo esas deducciones sobre el comportamiento de los robots de Ertaz es precisamente el que creó el único de ellos y por tanto esta personalmente interesado en mostrar a su creación de la forma mas favorable posible. De hecho muchos creen eso sobre ese trabajo en particular. Pero incluso aunque estuviesen dispuestos a aceptar esa predicción como buena sigue en pie el hecho de que la seguridad obtenida nunca es igual.

Un robot con leyes no puede dañar de ningún modo, mucho menos matar a un ser humano, a no ser que en su definición de ser humano no se incluya deliberadamente a determinado grupo humano como se hace con los robots de combate o los guardaespaldas. En cambio un robot de Ertaz puro podría hacer daño, incluso matar en defensa propia si intentan destruirlo o si llega a la conclusión de que hacerlo es la única forma de evitar un mal mayor. Si un loco amenazase con arrojar una granada de mano sobre un grupo de gente nada impediría a un robot de Ertaz golpear al agresor y partirle el brazo si no ve otra forma de detenerlo. Además nada le impediría usar su capacidad para infiltrarse en los sistemas informáticos para husmear en asuntos privados por pura curiosidad, aunque en ese caso si sabe lo bastante sobre la psicología y los sentimientos humanos probablemente se abstuviese de hacerlo. Sin embargo mucha gente usa la privacidad para hacer daño a otra gente así que también podría sentirse justificado a husmear de todas formas para intentar localizar y frustrar los planes de gente como esa. Todo el mundo entiende que la policía intervenga las conversaciones de la gente si hay sospechas fundadas de que planean cometer un delito. No todos los derechos tienen la misma prioridad, hay ocasiones en que es lícito violar algunos si con ellos se protegen otros derechos de mayor rango. Todo el mundo esta de acuerdo en que el derecho a no ser robado, violado o asesinado tiene prioridad sobre el derecho a la privacidad de quien pretende hacerlo. Hay muchos casos en que no hay otro remedio que hacer algún grado de daño a alguien para evitar que se cometa un daño mayor, lo que se llama un mal menor. ¿Cómo crees que juzgaría la mayoría de la gente esos actos de mal menor que acabo de mencionar si los hiciese un robot de Ertaz?. Si lo hiciese un ser humano probablemente podría justificarse convincentemente y librarse con un suave castigo o muchas veces incluso se ganaría un ascenso y la comprensión de la gente, pero un robot de Ertaz no es un ser humano, es algo distinto y la gente siempre esta dispuesta a pensar lo peor de aquellos que son diferentes a el mismo. ¿En que crees que se sustenta el racismo sino? Así que imagínate en el caso de una maquina, algo que ni siquiera es humano. La mayoría de la gente no seria muy comprensiva, le acusarían de la peor motivación posible y pedirían que lo redujesen a chatarra. --- ¿Tu crees que el trabajo de Enrique sobre el desarrollo de la conducta de los robots de Ertaz es correcto?. -- Yo sí y parece ser que tu también. -- Así es, me interesa mucho la hazaña de tu primo construyendo una mente capaz de superar la humana. En solo dos meses aprendió tanto como un niño logra en cinco años. Lástima que tuviese que salir por piernas. De hecho he estudiado todos los informes y las filmaciones originales de su periodo de aprendizaje, no me costó mucho, pues son del dominio público. Parecía un buen bicho, fue una pena que intentasen destruirlo y tuviese que huir para evitarlo. Y una pena que jamas volviese a saberse del. Me hubiese encantado poder estudiarlo personalmente, en realidad me conformaría con solo haber tenido una charla con ella, aunque por desgracia es imposible, a estas alturas ya debe ser chatarra. Siete años sin dar señales de vida es muy mal augurio. Probablemente su cuerpo no pudo soportar el ambiente de las alcantarillas, sufrió algún fallo o tuvo un accidente fatal. Después de todo no tenia ninguna experiencia directa de esos lugares, solo algunas noticias de oídas. -- Cierto, siete años es mucho tiempo. -- En fin, el caso es que no hay vuelta de hoja. De Hanigalbat jamas volvió a saberse y podemos darlo por destruido. -- ¿Eso te apena?.—preguntó Melisa. -- La verdad es que sí. Parecía una buena persona.... bueno, no sé si la palabra persona seria la mas indicada en este caso. -- ¿Porqué no? Después de todo era una criatura inteligente. -- Cierto, muy inteligente, con una capacidad de aprendizaje asombrosa. Nunca dio problemas, por lo menos hasta que se fugó de esa forma tan intempestiva. -- Sus motivos tenia. -- Ya lo creo. A nadie le gusta que le corten la cabeza y borren su mente como si fuese un programa cualquiera. De haber estado en su lugar yo también hubiese salido por piernas. Era lo único sensato que podía hacer a no ser que le gustase morir. -- ¿Puede morir una máquina? -- Ya sé que los robots no son seres vivos desde un punto de vista estricto, pero una criatura de su complejidad, de la complejidad de cualquier robot moderno puede considerarse por lo menos como un organismo artificial. En el lenguaje coloquial todo el mundo se refiere a la

muerte de un robot cuando es destruido o a un robot herido cuando esta dañado. Hasta las leyes, por lo menos las nuestras, ya no consideran a los robots como dependencias absolutas de sus dueños. Se considera delito causar daño deliberadamente a un robot incluso aunque uno sea el dueño, por ejemplo. -- Cierto, actualmente los robots, incluso los ordenadores fijos, son tan complejos que en la práctica ya no se diferencian gran cosa de un organismo biológico. Si ignoramos la diferencia de composición química, para poder serlo del todo solo les falta poder reproducirse, en el caso de que no consideremos reproducción a los robots que fabrican otros robots. Y si eso ya vale para los robots ordinarios mucho mas para uno tan superior a todos los demás como lo era Hanigalbat. De hecho, cuando se consigan fabricar robots híbridos de Ertaz dispondremos de máquinas controlables pero tan inteligentes, en realidad mas, que un ser humano. -- En el caso de que no se haya conseguido ya. -- Hace un rato dijiste que no creías que ya los tuviésemos. -- Cierto, creo que aun no los tenemos, aunque también creo que estamos muy cerca. Es solo cuestión de tiempo, puede que no muchas semanas mas. -- Eso espero. -- Claro que eso es solo una opinión. Con el secreto con que llevan todo el asunto no hay forma de saber cuales son sus progresos reales. -- No solo nosotros, todos los países llevan el mismo sigilo. Todos pretenden usarlos como baza para mejorar su posición en el concierto internacional. Como espías, sin ir mas lejos, pero también como investigadores incansables e insobornables. -- Es una lastima que aun subsistan tantos recelos en el mundo, pero así están las cosas. Por lo menos ya no dirimen sus diferencias en el campo de batalla y eso es un gran progreso. -- Cierto, el follón que se montó con vuestro secuestro hace tres años fue la última gran crisis bélica, aunque por suerte todo se solventó pacíficamente. -- Si y eso no solo significó la caída del califato sino también el de las últimas dictaduras africanas. Ahora, por primera vez en la historia de la humanidad, no hay ni una sola dictadura en todo el mundo, aunque algunas de las nuevas democracias aun dejen que desear. -- No solo eso sino que hace muchos años que ya no hay hambrunas y aunque aun subsistan algunas bolsas de pobreza, estas no son nada en comparación con lo que había hace veinte años. Y sin embargo para tanta gente la vida sigue siendo tan insatisfactoria.—se lamentó Alberto. -- Sé perfectamente que ese no es tu caso y tampoco el mío. -- Estoy pensando en los demás, no en nosotros, sé perfectamente que a ti también te importa. Por eso cada vez mas caen en la suave pero fatal trampa del autismo social. -- Lo sé perfectamente, por eso hacemos todo lo posible por combatirlo, aunque la verdad es que es tan dificil que a veces la lucha resulte descorazonadora.—Melisa suspiró suavemente mientras un breve gesto de ligera pesadumbre apareció por su rostro. No duró mucho, los gestos de desesperanza de Melisa nunca duraban mucho, eso es algo que su compañero había notado desde el principio. -- Sin embargo la lucha contra la guerra y el hambre también parecía tan descorazonadora y sin embargo finalmente los incontables esfuerzos hicieron su efecto. Por lo tanto nosotros tampoco tenemos derecho a desesperar, por lo menos aun no. Mucho tendrían que empeorar las cosas como para tener que plantearnos la perspectiva de una derrota definitiva. Los reveses menores importan poco si al final se gana la lucha. Hasta ahora solo se han librado luchas de tanteo, la batalla decisiva aun esta por librar. -- Supongo que tendré que fiarme de tu criterio, tu eres la experta en ese asunto, no yo. -- Muchos me consideran una experta en esto o en aquello, ¿realmente parezco tan brillante? -- Eres brillante, pero eso no es todo. Siempre estas sonriente, nunca te rindes, siempre estas dispuesta a escuchar a los demás, eres sencilla pero emprendedora, es eso mas que tu capacidad intelectual lo que explica tu popularidad. -- La verdad es que hace tiempo que tuve que habituarme a la popularidad a mi pesar. Ser la única pariente viva del inventor de la matriz de Ertaz puro y sobre todo el asunto del secuestro, me han hecho bastante conocida y créeme, eso no me hace mucha gracia. -- Por eso casi nunca aceptas entrevistas ni haces declaraciones publicas, ya me lo has contado. -- Además es Enrique quien lidera la liga de antiautismo social, no yo, yo solo soy una ayudante, mi contribución no puede compararse con la suya, no conviene olvidarlo. -- Estoy seguro de que es mas importante de lo que quieres reconocer.

-- Bueno, es cierto que hablamos mucho del tema y que cada uno expone sus opiniones, pero es el quien toma las decisiones en definitiva. -- Estoy seguro de que tiene en cuenta tus opiniones. -- A veces., pero también las de Irene-- contestó Melisa. -- Eso también me lo creo. -- Pero tampoco conviene exagerar la importancia de nuestras aportaciones. -- No deberías ser tan modesta.—Alberto sonrió un poco. -- No lo soy. -- Supongo que tendré que creer en tu palabra, el caso es que si seguimos hablando tanto tiempo la comida se nos va a enfriar. -- Te advierto que después tengo que ir a casa de Enrique e Irene. Les prometí cuidar a su hijo mientras se iban al teatro. -- ¿Podría ir contigo?, sino es molestia, claro. -- Tendría que preguntárselo a ellos. ¿Sabes lo que vamos a hacer? Cuando terminemos de comer, me iré sola a su casa. Iré, hablaré con ellos en persona y si dan permiso, que creo que lo darán, te llamaré para que vengas cuando ellos se vayan. Ellos salen dentro de una hora, tendrás que tener un poco de paciencia. -- No me importa, esperaré. -- Melisa volvió a sonreírse. -- En esta vida no has hecho mas que esperar, verdad, no te preocupes, esta vez solo es una hora. Alberto se quedó perplejo unos momentos hasta que cayo en la cuenta de a que se refería. -- Tal vez no debía haberle contado tantos detalles sobre mi-- pensó durante un momento para desechar semejante idea instantes después. --- Esperaré.—contestó. En efecto, esperó. Después de todo cuando era un niño esperado cuatro años a que le proporcionasen el tratamiento que le curó la parálisis total de cuello para abajo por culpa de un tonto accidente de trafico, claro que entonces los métodos de regeneración nerviosa eran una novedad cara con una largisima lista de espera. Inmovilizado en una silla de ruedas con la columna partida por la mitad había soportado la larga espera hasta poder disponer del tratamiento que finalmente había regenerado su médula espinal y le había devuelto la capacidad de caminar y correr. Como Melisa había dicho una espera de una hora no era nada en comparación con eso. Melisa no gustaba conducir para ir del trabajo a casa, siempre que el tiempo lo permitía preferia caminar. Después de todo el trayecto no era tan largo. No necesitaba llave para entrar, el detector táctil de la entrada reconoció su huella dactilar en cuanto lo tocó y su tono de voz en cuanto dijo una palabra y la puerta se abrió sola. Enrique y su mujer, Irene, la estaban esperando. Enrique era un hombre bastante joven, sobre todo para la fama que había acumulado, tenia treinta y cinco años, era alto y delgado, bien afeitado, de cara alargada y pelo corto castaño oscuro. Irene era mas baja que Melisa y algo mas rolliza, tenia un pelo negro y largo parecido al suyo, cara redonda y ojos negros y vivaces. Su hijo de dos años era una preciosidad vivaracha y juguetona, a veces un poco pesado como suelen serlo los niños de su edad. El pequeña se acercó también caminando aun vacilantemente y abrió los brazos para que Melisa pudiese levantarlo y abrazarlo con cariño. -- Bien, espero que os lo paséis bien los dos juntos. Estoy seguro de que será así.—dijo Enrique. -- Melisa es buena.—contestó el niño pronunciando con dificultad mientras les miraba fijamente con los ojos bien abiertos. -- Ya lo sabemos, cariño, sé que te gusta quedarte con ella. Seguro que estaban esperando poder volver a jugar con la prima Melisa. ¿Verdad que sí?—le preguntó Irene de buen humor. -- SI, gusta mucho.—contestó mirándola en busca de aprobación. Seguidamente se acercó a Melisa y ella le volvió a acariciar suavemente y se condujo hasta uno de los sillones donde le sentó junto a ella. Entonces ella les dijo que Alberto quería quedarse con ella mientras ellos se iban fuera. -- Me parece bien. Dile que puede venir en cuanto quiera. Lo que me pregunto es porque le hiciste esperar y no le dijiste que viniese directamente contigo. —contestó Irene. -- Porque sino hubiese subido conmigo y quería hablar a solas con vosotros antes de que os marchaseis.

-- ¿De que querías hablar?—preguntó Irene. -- Sobre los exagerados recelos de Enrique respecto a nuestra relación.—dijo ella en ingles. Siempre que podían evitaban hablar en esa lengua delante del niño, pues lo reservaban para cuando querían decir algo sin que el pudiese entender nada. El niño ya empezaba a entender las conversaciones y de esto nadie quería que se enterase. De un niño de dos años no podía esperarse que supiese guardar un secreto. -- No es por la relación en sí, si tu situación fuese normal no tendría la menor objeción en que siguieseis adelante e hicieseis lo que quisieseis, pero considerando tu situación tener a alguien prendado de ti podría ser arriesgado. Ya hemos hablado mucho de eso y conoces mi posición. Te dejaré hacer porque confío en ti pero sigo preocupado. -- Y tu también la mía, comprendo tus temores pero ya soy mayorcita y sé perfectamente lo que hago. Alberto no supone un riesgo de ningún tipo, jamas descubrirá la verdad, a no ser que yo decida contársela, algo que he estado empezando a plantearme. Al oír eso Enrique se sorprendió primero para ponerse muy serio seguidamente. -- Espero que no lo digas en serio. -- ¿Cuando me has visto bromear con esas cosas?—preguntó ella. -- ¿Realmente crees que puedes confiar en el hasta ese punto?. Sabes perfectamente a lo que te arriesgas, a lo que nos arriesgamos todos, si el no esta a la altura de tu confianza.—dijo Irene mirándola fijamente. Enrique permanecía callado sin perderla de vista. -- He dicho que me lo estoy planteando, no que lo vaya a hacer. En todo caso no es algo que haría mañana, aun tengo que saber mas. No estoy segura de cómo reaccionaria ante la verdad. Sin embargo no creo que me delatase. -- A este paso esto va a convertirse en el secreto de polichinela. Con el ya seriamos ocho y cuantos mas somos mayor es el riesgo de que se descubra el pastel.—dijo Enrique moviendo la cabeza. -- Soy la que mas arriesga, ¿acaso lo has olvidado?. Si decido que puedo confiar en el hasta ese punto se lo diré, le quiero demasiado para sentirme a gusto teniendo que mentirle continuamente. -- ¿Realmente le amas?—preguntó Enrique. -- Si, le quiero, como os quiero a vosotros aunque con un matiz distinto y por otros motivos. -- ¿Te arriesgaras como arriesgaste con Metchir?.—preguntó Irene. -- No seria lo mismo. En su caso sabias que Metchir estaba en una situación en que era el primer interesado por motivos egoístas en guardar secreto, en este caso no es así. Dependerías enteramente de su buena disposición hacia ti, que dudo que se mantenga si descubre la verdad.—dijo Enrique. -- Me parece que si se mantendría—contestó Melisa. -- Fizuli lo descubrió por su cuenta pero se puso de nuestra parte cuando ganaba mucho mas destruyéndote. – recordó Irene. -- En ese caso tuviste muchísima suerte, una potra casi increíble. Resultó que Fizuli era precisamente uno de los pocos con bastante amplitud de miras como para ser imparcial. No creo que eso se repita, aunque por otro lado tu eres la mejor de todas juzgando la verdadera naturaleza de la gente. Si crees que puede unirse a nosotros tal vez tengas razón. Haz lo que creas correcto pero piénsatelo bien antes. -- Por supuesto. Ah, otra cosa, ¿sabes algo respecto a tu memorándum?. -- ¿Mi memorándum?, aquí no necesitamos fingir. Cierto que lleva mi firma y yo me lo he atribuido, pero en realidad fue idea tuya. Todo el. -- ¿Sabes algo? -- Se supone que tu deberías estar mucho mas informada que yo. No, no se han puesto en contacto conmigo, todo lo que sé sobre lo que están haciendo es lo que tu me has contado. -- Están intentando jugar a nuestras espaldas, tal como esperaba que hiciesen.—Melisa se sonrió suavemente mientras se recostaba en el sillón y se detenía para acariciar al niño. -- No es que sea una actitud muy caballerosa la suya.—se quejó Irene. -- Los poderosos rara vez suelen ser caballerosos, no tienen necesidad de preocuparse por los intereses de gente pequeña como nosotros.—contestó Melisa con ironía—siguen preparando el proyecto espejo pero solo eso. No tienen valor para arriesgarse a ponerlo en practica y la verdad es que de estar en su situación yo también dudaría.—contestó Melisa. -- ¿Y de que sirve un proyecto si no se aplica?—preguntó Irene. -- Sirve para que si existe y esta preparado siempre pueden decidirse a aplicarlo cuando juzguen que el riesgo vale la pena, y a medida que el autismo social se extienda la necesidad se hará mas apremiante. Naturalmente no pienso quedarme sin hacer nada mientras las

víctimas se acumulan, pero todo depende de Harcley, el es el mas poderoso de todos y ahora que Deschamps esta retirado, también el mas decidido. En realidad todo depende del. -- ¿Qué piensas hacer entonces?—preguntó Enrique. -- Por el momento, nada. Hasta que no terminen de preparar el proyecto espejo no hay nada que hacer. Cuando lo tengan listo, y eso sucederá dentro de pocas semanas, será el momento de dar el empujón que les decida a actuar. -- ¿Y si tu pequeño engaño funciona y aplican el plan?. -- Entonces el autismo social se consumirá hasta desaparecer y podría retirarme con el placer del deber cumplido. -- Espero que así sea, ¿estas completamente segura de tus cálculos?. -- Casi totalmente, las posibilidades de fracaso no llegan al 1%, pero no podía explicarles todo el método matemático que he desarrollado para calcularlo sin arriesgarme a que descubran mi secreto, y lo que es mas importante, el comodín secreto que esta incluido en el interior del proyecto espejo. -- ¿Y si lo descubren por su cuenta? -- No hay prácticamente ningún peligro de que eso suceda a corto plazo, no careciendo de los métodos que yo he desarrollado y que ellos tardarán años en descubrir por su cuenta, aunque ciertamente, si el proyecto se aplaza sine die tarde o temprano lo descubrirán. Otro motivo mas para que se decidan a aplicarlo lo mas pronto posible. -- Sabes que confiamos en tus capacidades, te ayudaremos en todo lo que podamos. -- Lo habéis repetido tantas veces que se me hace dificil seguir mostrándome modesta con vosotros, pero no conviene que os quedéis demasiado confiados. No debéis olvidar que mis capacidades no son ilimitadas, ni muchísimo menos, no soy en absoluto inmune al error. Si ese 1% de riesgo resulta ser el acertado y mi plan termina haciendo daño a la gente la culpa será solo mía. -- Y nuestra también por haberte seguido. Pero peor seria no hacer nada, todos lo sabemos, así que adelante.—contestó Irene. -- ¿Realmente te retirarías si el autismo social dejase de ser un problema?—preguntó Irene. -- No, en realidad no, solo lo ponía como un caso hipotético que sé que nunca se cumpliría. En realidad nunca podré retirarme a no ser que me obliguen por la fuerza. Mientras haya gente que necesite ayuda nunca podría permanecer tranquila sin intentar ayudar. Aunque ese problema desaparezca aun quedarían otros y puede que surjan otros nuevos. En definitiva será por un motivo o por otro, pero seguiré en la brecha. Melisa suspiró con un tanto de resignación y se volvió para hacer carantoñas al niño. A partir de entonces volvieron a hablar en español. -- Entonces ya va siendo hora de que os vayáis. Preparad las cosas y yo llamaré a Alberto para que venga conmigo.—dijo Melisa. -- Sabes que nos gusta tenerlo todo listo con antelación. Dentro de diez minutos estaremos listos y nos iremos. Pero queremos que llegue el primero, quiero saludarle por lo menos antes de marcharnos.—contestó Irene. Melisa entonces conectó el anillo comunicador y una pequeña imagen holografica de Alberto apareció flotando en el aire. Ella le dijo que viniese enseguida y el así lo hizo. Cinco minutos después estaba delante de la puerta, que Melisa abrió personalmente. Efectivamente, Enrique e Irene aun estaban allí para recibirle calurosamente. No era la primera vez que estaba allí, pues Melisa no había esperado mas de unos días desde que empezaron a salir para introducirlo en su circulo social, incluido naturalmente los únicos parientes, por lo menos los únicos con quienes tenia algún tipo de relación. Tras comentar algunas novedades, no tardaron en marcharse y Melisa y Alberto se quedaron solos con el niño. -- Esta criatura es una preciosidad, aunque tal vez demasiado insistente cuando quiere algo.—comentó Alberto. -- ¿Insistente? Aun no has visto nada, menudos berrinches se monta cuando quiere algo.—Melisa se sonrió mientras jugaba con el niño. Lo que mas le gustaba de ella es que independientemente de lo estuviese haciendo siempre estaba presta a sonreír, aunque también sabía ponerse seria cuando era necesario nunca se enfadaba realmente, por lo menos el nunca le había visto nunca enfadándose, aunque ella afirmaba, y no lo dudaba, que a veces si lo hacia. Tampoco la había visto nunca perder la compostura aunque ella reconociese que a veces había gritado o llorado en publico. En realidad, ¿Cuánto podía saber uno acerca de una persona en solo tres meses?. Pese a su locuacidad para hablar de si misma cuando le preguntaba, a veces tenia la sensación de que no le contaba todo. Debajo de aquellas sonrisas

sentía que había una sensación de secreta insatisfacción o por lo menos esa impresión había tenido observándola atentamente. Incluso entonces esos breves vislumbres de su personalidad profunda nunca duraban suficiente para saber con seguridad si eran imaginaciones suyas o algo real. ¿Tal vez fuese hora de preguntárselo?. Antes de haber podido meditar mucho sobre ello, se encontró para su propia sorpresa preguntándola -- ¿Realmente me lo has contado todo sobre ti? A veces tengo la sensación de que hay algo oculto que te preocupa. Si a Melisa le sorprendió la pregunta no dio la menor muestra de ello, pues contestó rápidamente y sin dudar. -- Claro que hay cosas que me preocupan. Veo tantos problemas a mi alrededor que no puedo evitar preocuparme. -- No me refiero a los problemas de los demás, me refiero a ti misma. ¿Hay algo sobre ti misma que te preocupa?. -- Todos estamos en esa situación en mas o menos ocasiones. Muchos la mayor parte del tiempo. Claro que hay cosas personales que me preocupan, igual que a ti, igual que a todo el mundo. -- ¿Qué tipo de cosas? -- Contradicciones. -- ¿Qué significa eso exactamente? -- Me refiero a las contradicciones que hay entre lo que me siento que debería hacer y lo que realmente hago. Me gustaría poder hacer mas de lo que hago, pero no puedo y eso me produce insatisfacción. Frustración a veces. ¿Te sorprende? -- Supongo que no debería sorprenderme. Y sin embargo pareces tan optimista que me choca imaginarte frustrada. -- Soy optimista, en general lo soy, pero a veces hay cosas que son demasiado duras para evitar la tristeza y la frustración. -- Lo entiendo perfectamente. -- ¿Querías preguntarme algo mas? -- No, por lo menos nada que afecte a tus asuntos personales. -- No me ha molestado, en absoluto. Demuestra que te preocupas por mi. Lo que me extraña es que notases que estaba preocupada. Hago todo lo posible porque no se note. -- A veces se nota. -- Debes haber estado muy atento para darte cuenta. -- Lo intento, intento estar lo mas atento que puedo cuando estoy junto a ti, me gusta. -- Ya me había dado cuenta pero ahora tengo una prueba directa. -- Y tu siempre deseas tener pruebas directas sobre todo. -- De todo no. Prefiero no tener experiencias directas con la maldad de la gente. Hay gente que es muy retorcida, realmente retorcida. -- Te has encontrado con alguna. -- Menos de lo que seria de esperar estadísticamente, pero alguno si. Supongo que es porque hago todo lo posible por evitarlos. -- Sin embargo, a veces con alguno te has topado. -- Si, y créeme, no es una experiencia agradable. Es increíble lo estúpidamente mezquinos que pueden llegar a ser algunos. A nosotros nos preocupan los problemas de la gente pero hay muchas que solo les interesan para aprovecharse de ellos. Familiares que aprovechan el estado de aislamiento de los enfermos de autismo social para robarles, suplantarles y hacerles todo tipo de perrerías. No seria la primera vez que he tenido que encararme con alguno de esos especímenes poco recomendables. -- Es entonces cuando a veces pierdes la compostura, no es así. -- Si, pero eso ya te lo había contado. -- Melisssa, hambre.—balbució el niño. -- Vale, ahora mismo te traigo la comida. -- Prisa. -- Si, si, ya me doy prisa.—Melisa se levantó para traerle la comida y eso significó el fin de la conversación, pues después de terminar de dar cuenta de la comida le pidió que le contase un cuento y ella, que remedio, accedió. Alberto, también se tomó las cosas con filosofía, ya tendrían otras ocasiones de hablar sin interrupciones. Mañana mismo, sin ir mas lejos.

2. MUERTES MISTERIOSAS. Poznan, Polonia. Unión Europea. 20 de abril del 2028. Victor Posadosky, era un hombre de unos treintaipocos años, mediana estatura, con una corta barba y bigote castaño, cara redondeada y pelo corto. Era un hombre de éxito, u no de los agentes que mas rápidamente había ascendido en el escalafón. Hacia siete años no era mas que un oficial mas de baja graduación de destino en Bilbao, ahora era el comisario general del Comité de seguridad europeo en Polonia, la organización europea equivalente al mítico y mucho mas antiguo F.B.I. Estadounidense. El caso es que tenia que estar allí, pues era su obligación. De vez en cuando los jefazos tenían que dar una vuelta personalmente para supervisar y dar ánimos a sus hombres. En realidad no había ningún motivo directo para que fuese personalmente, podía permanecer cómodamente sentado en su despacho en Varsovia y controlarlo todo por vía virtual, de hecho tan bien podría hacerlo desde Bruselas o ya puestos, desde la luna. Con los modernos sistemas de telepresencia uno podía controlarlo todo tan bien, en realidad mejor, a distancia que estando presente directamente. Bueno, en todo menos en un aspecto. La gente sabia que en realidad no estabas allí y eso seguía siendo un matiz importante. Sabia por experiencia que hacer una visita en persona de vez en cuando tenia un saludable efecto en la moral de sus hombres, significaba que uno se tomaba la molestia de estar personalmente cuando no tenia porque hacerlo, lo que tenia un saludable efecto psicológico en el respeto que te mostraban y en la eficacia con que cumplían las ordenes. Tal vez estuviese chapado a la antigua, pues en un mundo donde los altos cargos cada vez se movían menos por motivos de trabajo, debido a la omnipresencia de las comunicaciones virtuales, el era uno de los pocos que gustaba de seguir pasando buena parte de su tiempo visitando personalmente incluso las delegaciones en los pueblos mas pequeños, no digamos ya en las grandes ciudades. Siempre había tenido un espíritu viajero y dudaba que eso cambiase alguna vez. El caso es que acababa de terminar una de sus visitas de inspección cuando, ya se dirigía hacia la salida para coger el coche oficial que le llevaría hasta el aeropuerto de camino a su siguiente etapa en Wroclaw, recibió una llamada. Al principio no le dio demasiada importancia, después de todo solía recibir bastantes llamadas a lo largo del dia, la mayoría de ellas rutinarias, así que en principio no tenia prisa en cogerla. Al principio se planteó no responder hasta llegar al coche pero sin embargo la advertencia de que era una llamada del comisario principal y además con categoría de urgencia le hizo cambiar de idea. Nunca era una buena política hacer esperar a los superiores. Tampoco era buena practica conectar el holograma cuando había gente no indicada que pudiese ver con quien hablabas, así que conectó solo el audio. No era necesario apretar ningún botón, solo con hacer un mínimo gesto imperceptible prefijado se activaba automáticamente. El casi microscópico micrófono instalado frente al túnel del oído le permitía escuchar la conversación del que fuese sin ningún problema, pero también sin que nadie mas pudiese escuchar por cerca y atento que estuviese. -- Aquí al habla. ¿Que es eso tan urgente que tiene que decirme? -- Es digamos, un problema sumamente peliagudo. Estrictamente es un asunto de política exterior pero los interesados quieren tu intervención, la tuya precisamente y he recibido ordenes del presidente de que aceptes el encargo. -- ¿Quien es el que ha pedido mi presencia y para que? -- Es Willy Harcley en persona, es por un problema que les ha surgido con sus nuevos ordenadores híbridos de Ertaz., en sus unidades de fabricación, mas concretamente. Posadosky sabia perfectamente a lo que se refería, ahora ya todo el mundo lo sabia. Hacia diez días que el gobierno de los Estados Unidos había reconocido oficialmente por boca de su presidente que acababan de lograr un ordenador híbrido de Ertaz viable y que pretendían comenzar inmediatamente su fabricación en serie. Por lo menos eso es lo que Harcley decía, pues tanto ellos como el resto de las naciones tenían la fuerte sospecha de que lo habian conseguido hacia una buena temporada y se habian aprovechado ya cumplidamente de su monopolio. Ciertamente que su monopolio no dudaría mucho, pues ellos mismos estarían en situación de anunciar que ellos también los tenían dentro de unas pocas semanas. Solo faltaba

que las ultimas pruebas de funcionamiento saliesen bien, como se esperaba que sucediese. También sospechaban que los demás tampoco tardarían mucho mas, si es que alguno de ellos no se les adelantaba también en los próximos días. -- ¿Qué es lo que sucede exactamente, algún fallo en el sistema?—Ya estaba a punto de entrar el coche y allí podría hablar en voz alta sin correr ningún riesgo. -- No, los híbridos funcionan perfectamente, el problema esta en el personal. Cinco de sus hombres han muerto de derrames cerebrales masivos en los últimos dos días. Eran hombres en un perfecto estado de salud, no se descubrió ningún síntoma previo, solo se sabe que murieron en medio del trabajo, quedaron secos en el instante y cinco muertos fulminantes en un mismo departamento en solo dos días rebasa con creces lo esperable estadísticamente. No tienen ni idea de lo que esta pasando pero están sumamente preocupados, los expertos de su categoría no abundan y lo que es peor, temen que mueran mas en cualquier momento. -- ¿Y que pintó yo en todo esto?. ¿Porque recurren a nosotros, es que la C.I.A y el F.B.I no son capaces de resolverlo?. -- Por lo visto están lo bastante desesperados como para recurrir a una potencia extranjera a cambio de una respuesta. Puedo decirle que Harcley nos ha hecho ciertas ofertas a cambio de nuestra colaboración, ofertas tentadoras, diría yo, lo que demuestra hasta que punto les resulta insoluble el caso. El caso es que han solicitado su intervención, la suya precisamente y hemos dicho que si. Suponemos que es a causa de su reputación.—Posadosky ya había llegado hasta su coche y se había encerrado en el. -- La reputación no es suficiente, no me servirá de nada si no tengo datos. Necesito saber mas detalles. -- No los tenemos, puede estar seguro de que solo nos han contado lo imprescindible para convencernos. -- ¿Dicen que murieron en medio del trabajo? -- Así es, en pleno trabajo. -- Bien, supongo que si el presidente ha dicho que si, yo no estoy en situación que decir que no. Iré en cuando sepa ha donde he de dirigirme. -- Las muertes han tenido lugar en su centro de experimentación de Los Angeles.—Entonces del anillo comunicador surgió una orla luminosa flotante donde apareció escrita la dirección, el vuelo que debería tomar y la hora de salida y llegada. -- Iré inmediatamente. -- Buena suerte.—dijo su superior antes de cortar la comunicación. Posadosky se arrellanó en el asiento mientras el sistema de conducción automática conducía el coche hacia el aeropuerto sin que el tuviese que hacer nada. -- Vaya lío en que estaban a punto de meterle,-- pensó-- Aquella misión le sonaba algo parecido a la que le habian encargado hacia tres años en Afganistán. Bueno, seguramente no seria tan peligrosa, aunque tampoco tan provechosa para su prestigio y su posición en el escalafón. De todas formas, igual que entonces tendría que hacerlo lo mejor posible. Entonces recordó la carta que había recibido hacia unas horas. Sus viejos amigos Enrique, Irene y Melisa estaban de viaje invitados por una universidad estadounidense y en ese momento y durante los próximos días estarían precisamente en Los Angeles. De hecho Lutving también estaba con ellos pero sabia que no debía llamarles. Sus llamadas estaban muy restringidas y aunque no esperaba que tuviesen su línea intervenida preferia no correr riesgos. Si se enteraban de que había hablado con ellos de esto podía meterse en un buen lío. Rápidamente volvió a revisar la carta grabada en su anillo comunicador y descubrió que los lugares donde iban a estar de visita de trabajo estaban bastante cerca de donde el tenia que ir. Les conocía a los tres desde su época de patrullero en Bilbao, cuando sus caminos se encontraron con motivo de la fuga de Hanigalbat. Desde entonces mantenían una nutrida correspondencia, sobre todo desde que sus obligaciones como alto cargo le hacían muy dificil visitarles personalmente a no ser en vacaciones. Respecto a Lutving, bueno, aquello ya era harina de otro costal. Legalmente era su marido y aquello para algunos seguía sonando raro aunque el matrimonio entre homosexuales ya estuviese en vigor desde hacia muchos años, a pesar de ello había tenido que aguantar mas de un comentario poco comprensivo a media voz al respecto por parte de aquellos chapados a la antigua, que eran mas de lo que parecía a simple vista. El hecho es que Lutving también trabajaba en el C.S.E aunque en un cargo bastante mas bajo que el suyo, pero ni siquiera a el podía contárselo, por lo menos de momento. De hecho no solo era por motivos del alto secreto sino también porque primero preferia saber que terreno pisaba antes de implicarle. ¿Y respecto a Melisa y sus amigos? Al respecto el asunto tomaba otro cariz, sobre todo con respecto a Melisa.

-- Vaya, vaya, precisamente ellos. Después de todo me deben mas de un favor y tal vez ahora sea el momento de devolvérmelo, además, tener a la pequeña intrigante de Melisa cerca podría serme útil si la cosa se complica, pensó Posadosky—Y su instinto, que raramente se había equivocado, le decía que la cosa se complicaría. Debido al cambio horario y a la velocidad de los modernos vuelos hipersónicos suborbitales en Los Angeles aun era el amanecer cuando su avión aterrizó. Rápidamente cogió el coche, que el gobierno U.S.A había tenido el detalle de enviar a recogerle y se dirigió a su destino. Un gran complejo cerca del desierto, en las afueras al sudeste de la gran ciudad. Ya desde el mismo aeropuerto se vislumbraban a lo lejos la principal característica arquitectónica de la ciudad, las tres gigantescas torres rascacielos, cuatro si se contaba otra que aun estaba en construcción, de unos mil metros de altura y que oscilan entre unos 200 a unos 300 metros de diámetro de base. En conjunto eran enormes pilares troncoconicos que se estrechaban a medida que se ascendía, en comparación los viejos rascacielos del siglo pasado del centro de la ciudad parecían torrecillas minúsculas. Con el sol del amanecer rielaban de rojo gracias a las gigantescas cristaleras que cubrían toda su superficie. Cada uno era una verdadera ciudad dentro de la ciudad, con sus jardines colgantes, miradores, tiendas y comercios de todo tipo, comisarias, escuelas y todo lo necesario. Pero no era allí donde se dirigía ni tampoco hacia el centro, simplemente se limitó a dar un corto rodea por los suburbios de las afueras hasta llegar a su objetivo, un gran complejo de edificios bajas y rodeados de jardines. No necesitaba saber la dirección para llegar, aunque se la habian proporcionado, pues el coche estaba programado para conducirle automáticamente hacia allí sin dilación. Una valla metálica rodeaba todo el perímetro, una protección mucho mas sólida de lo que ha simple vista parecía. No le cabia la menor duda de que pese a las apariencias aquel lugar era prácticamente inexpugnable. Como siempre sucedía las defensas mas eficaces son las que no se ven. El coche entró por una de las puertas metálicas que también se abrió automáticamente al acercarse el vehículo, para después aparcar también automáticamente frente a la puerta. En todo el trayecto Posadosky no había tenido que hacer absolutamente nada limitándose a contemplar el paisaje aunque estaba seguro de que eso iba a terminarse muy pronto. Los jardines estaban vacíos hasta donde podía ver, pero naturalmente aquel era un lugar de trabajo y no para pasar el rato contemplando el paisaje. Una vez detenido el vehículo la puerta que tenia al lado se abrió sola y salió fuera. Tras la cristalera de la puerta se veía a una personas alta y bien vestida que aguardaba. Posadosky no dudó un momento de que era a el a quien esperaba. Desde luego no era la primera vez que entraba en un lugar de acceso restringido así que se dirigió directamente hacia el sistema de reconocimiento, una sencilla pantalla plana adherida a la pared justo al lado de la cristalera. Una vez allí miró fijamente hacia la pantalla encendida para que pudiese reconocer el entramado de los vasos sanguíneos de sus ojos. Un segundo después la cristalera se deslizó silenciosamente hacia los costados dejando un amplio espacio para entrar, cosa que el hizo de inmediato. El hombre que aguardaba detrás dio dos pasos y le estrechó la mano. Era un hombre joven pero sus gestos y su rostro eran bastante rudos, parecía uno de esos tipos que se pasan todo el tiempo haciendo ejercicio en los gimnasios, o mas aun, un boxeador. No solo era grande y alto sino que su cara era cuadriculada, su nariz grande y roma y su pelo cortado casi al uno. -- Bienvenido, señor Posadosky. Soy Hardin Lester, jefe de seguridad del departamento de investigaciones sobre ordenadores híbridos, aunque todo el mundo aquí le llama el departamento de resolución de atascos. Una vez mas se demostraba que las apariencias engañan con frecuencia, por su aspecto mas se abría juzgado que era un guardaespaldas o un guardia de seguridad que un alto cargo. -- Supongo que eso no aparecerá en la tarjeta de visita de la institución.—comentó Posadosky sonriendo forzadamente para intentar ablandar la indirecta. -- No, por lo menos no hasta hace pocos días. Nuestro trabajo durante los últimos años ha sido estrictamente confidencial, como de hecho sucede en todas partes con respecto a este asunto. En eso tenia razón, debía conceder Posadosky. --- ¿Es aquí donde se fabrican los nuevos robots híbridos?. -- No, esto no es una fabrica ni nunca hemos pretendido que lo fuese. Aquí se han desarrollado los prototipos y se han resuelto todos los problemas técnicos, que han sido muchos, por eso lo del departamento de resolución de atascos. Es una tarea que requiera mucha paciencia y

saber tragarse mucha frustración. Pero una vez conseguido el objetivo nuestra misión se cumplió. -- ¿Entonces a que se dedican ahora?. -- Control de calidad, por decirlo de alguna forma. Nosotros recibimos los híbridos recién construidos y los adiestramos para sus futuras tareas. Controlamos que funciones correctamente y claro también seguimos investigando para intentar mejorar la calidad de los híbridos ya conseguidos. -- ¿Pero el personal es el mismo que entonces o ha habido cambios de puesto? ¿Se ha añadido o quitado personal como consecuencia de haberse logrado ya híbridos viables?. -- No, todos siguen en sus puestos. Hace mas de cinco meses que se añadió el último miembro a nuestro equipo y no ha habido ningún despido ni baja desde hace mas de un año, por lo menos hasta que tuvieron lugar los desgraciados sucesos que han motivado su presencia aquí. Pero no nos quedemos aquí parados, acompáñeme y le iré mostrando el departamento. -- ¿Cuantas personas trabajan aquí? -- Treintidós, por lo menos ese era el número hasta hace tres días, ahora, desgraciadamente, es solo de veintisiete. -- Cuantos hombres y mujeres?. -- Eran catorce mujeres y dieciocho hombres. Por lo menos hasta hace tres días. Las bajas han sido tres mujeres y dos hombres. -- ¿Podría enseñarme el lugar donde sucedieron esas muertes?. -- A eso mismo vamos, pero habrá que caminar un poco, este lugar es muy grande y esta en otra ala del complejo. Puede seguir preguntando mientras llegamos. -- ¿Todos murieron en el mismo ala del edificio?. -- El trabajo se divide por subgrupos, cada uno en una parte del edificio distinta y no, no todos eran del mismo grupo. Tres de ellos eran del grupo de matrización de Ertaz, de combinar la matriz de Ertaz pura original con el ordenador convencional. Esa era una de las tareas mas sencillas, pues la matriz de Ertaz copia de inmediato toda información presente en una gran variedad de sustratos. Claro que una cosa es copiar información y otra controlar lo que la matriz hace con esa información y ese el problema real al que tenían que hacer frente. -- ¿Supongo que el trabajo manual lo harían robots?. -- Por supuesto, un robot hace el trabajo mucho mas rápido y eficazmente de lo que podría hacerlo cualquier ser humano por habilidoso que fuese. Su trabajo, como el de todos, era el de resolver los problemas teóricos, todo lo que los robots no podían resolver. Es un trabajo que requiere una gran inteligencia y grandes conocimientos del campo. --- ¿Pero trabajaban con Ertaz?. -- No directamente, nosotros les damos las ordenes a los robots y ellos hacen el trabajo manual, pero si se refiere a que si en su trabajo podían tener acceso directo al Ertaz, pues sí, le diré que si. Todo el trabajo aquí, el de todos los grupos, tiene relación con el Ertaz y podían, si lo querían, manipular directamente Ertaz, pero es absolutamente imposible que nadie pudiese sacar ni un solo microgramo del complejo, absolutamente imposible. Además hemos comprobado todas nuestras existencias y no falta nada. No ha habido robos de Ertaz, ni ahora ni en el pasado. -- Pero supongo que no en todos los grupos el acceso seria igual. Los que tenían acceso a las matrices puras originales manipularían mucha mayor cantidad y de forma mucho mas accesible que quienes lo tendrían ya metido dentro de los circuitos convencionales y mezclado por todas partes. -- Así es, el grupo de matrización era el que tenia acceso al Ertaz puro, el único que lo tenia, en el resto ya se lo encontraban mezclado con el ordenador convencional. -- Y tres de los muertos tuvieron lugar allí. -- Tres si pero los otros dos no. Esos dos no tenían nada que ver con ese grupo, se encargaban de un aspecto puramente teórico, eran teóricos en el estricto sentido de la palabra. Expertos en teoría de computación con Ertaz. No habian trabajado en el departamento de las otras tres bajas en la vida. -- ¿Los cinco tenían relación personal entre ellos, quiero decir, se conocían?. -- Por supuesto, aquí todo el mundo se conoce. Este es un trabajo interdisciplinar, se necesita combinar los conocimientos de todo el mundo para poder avanzar, los grupos no eran en absoluto departamentos estancos solo subdivisiones operativas para aumentar la eficacia. Muchos de ellos de hecho empezaban en un departamento y posteriormente terminaban en otro.

No se podía negar, que el lugar era extenso. Ya por el camino se habían encontrado con varios robots de mantenimiento y transporte conduciendo material de un lado para otro. Hasta que se encontraron con la puerta blanco de plástico que ponía en una placa “grupo de matrización” no habian visto ni a una sola persona. Al abrirse la puerta se encontraron con una sala con numerosa maquinaria, toda totalmente robotizada, frente a la que se hallaban cuatro personas sentadas alrededor de una mesa comprobando algo mientras las maquinas trabajaban por su cuenta. -- Buenas, estos son los nuevos miembros del grupo de matrización, o por lo menos del antiguo grupo de matrización, pues desde que se terminó nuestra misión principal han tenido que reestructurar su trabajo. Ahora supervisan, aunque el trabajo de investigación no haya terminado en absoluto, pues creemos que aun hay mucho en los nuevos híbridos que puede mejorarse. -- ¿Había otros tres aquí entonces?. -- No, siempre hubo cuatro personas en este grupo. Tres de ellos murieron y hemos tenido que sustituirlos deprisa y corriendo con miembros de otros grupos. Hermann Blont es el único de los cuatro miembros originales que sigue vivo. Al oír su nombre el aludido se levantó como un resorte y se quedó mirándoles fijamente. Su notaba claramente que estaba nervioso. Era un hombre de mediana estatura, rubio, nariz aguileña, ojos pequeños y una barba rala bastante despareja. El resto de sus acompañantes se quedaron mirándole en silencio, -- No señor, no muertos, asesinados, alguien los ha asesinado.—dijo Blont con firmeza mirándoles de hito en hito mientras hablaba con un claro acento alemán. -- Este es Hermann Blont y como puede imaginarse esta algo asustado.—dijo Lester en una presentación ya innecesaria. -- ¿Porqué piensa eso?—preguntó Posadosky. -- No hay forma de que mueran cinco personas en solo dos días si no los han asesinado. Estaban allí sentados,-- Blont señaló a los ligeros equipos de realidad virtual apoyados en una larga mesa que separaba el sector donde trabajaban los robots del espacio reservado a las personas. -- Antes de ayer murieron dos, ayer otro, ahora solo quedo yo. Creo que yo seré el próximo.—Posadosky notó unas pequeñas lagrimas orlando sus ojos. -- ¿Cómo sucedió todo?—preguntó Posadosky. -- Estaban sentados allí conectados a los equipos de realidad virtual, constantemente hay que realizar trabajos de simulación para planificar los trabajos. Los usamos casi todos los días. De repente se caen al suelo y se acabó, están muertos. Ni un quejido, ni un solo movimiento raro, estaban perfectamente y un segundo después estaban muertos. Ya vi como murió Brody, entonces no estaba conectado y el si, estaba mirándola y de repente se cayó para atrás y se quedó tumbada en el suelo totalmente inmóvil. Tenia los ojos abiertos y poco después empezó a sangrar por los oídos. Su equipo de asistencia dio la alarma avisando de que su corazón se había parado, estaba muerta. La autopsia dijo que tenia el cerebro totalmente destrozado, era solo una masa sanguinolenta, todas las venas del cerebro se le habian reventado a la vez, lo mismo sucedió con los otros dos. Fue un asesinato en red, alguien se metió en el equipo y le lanzó una descarga que le frió el cerebro.—dijo Blont visiblemente excitado. -- ¿Es eso cierto?—le preguntó Posadosky a Lester. -- Totalmente. Sin embargo un asesinato en red parece imposible. Este sitio tiene uno de los niveles de seguridad informática mas alta del país, tal vez la que mas tras el pentágono y la C.I.A, tanto desde el punto de vista de un ataque externo como interno. El sistema esta lleno de defensas, puertas cuánticas y guardianes cibernéticos, cada sector del complejo tiene su propio sistema de seguridad independiente de los demás excepto en el nivel de coordinación de seguridad al que ninguno de los miembros del complejo, ni siquiera yo mismo, tengo acceso.--- mientras seguía hablando salió de la sala y cerro la puerta tras de si quedándose los dos solos en el pasillo-- Ni siquiera un ataque coordinado por parte de una potencia extranjera podría infiltrarse hasta aquí ni una sola vez, mucho menos las veces necesarias para matar a cinco personas en días y sectores diferentes y marcharse en todas ellas sin ser detectado. De hecho nadie podría ni entrar del vestíbulo de recepción del sistema informático, por así decir. -- ¿Si no creen que han sido asesinatos, porqué me han llamado? -- Porque la posibilidad de que cinco personas mueran de esa forma por causas naturales es tan baja que es totalmente despreciable. Seria casi tan imposible como un asesinato en red. Tenga en cuenta que ese tipo de daños cerebrales no son usuales en absoluto en un derrame natural. De hecho en los archivos no hay casos de daños cerebrales tan graves por causas

naturales, ni tampoco en asesinatos en red. Todo el cerebro sufrió un derrame simultaneo, casi como si les hubiesen puesto una bomba por dentro, no quedó un solo lóbulo, ni una sola circunvolución intacta. -- ¿Y si fue un asesinato, tienen idea de quien ha podido ser?. -- Ni idea, pero tuvo que ser alguien de fuera. Hemos interrogado con la sonda de la verdad a todos los trabajadores del complejo con relación a las bajas y no hemos obtenido nada. Pero si alguien de fuera pudo infiltrarse de esa forma, eso significaría que nadie esta a salvo. Ni siquiera vosotros. Dicen que eso es lo que convenció a vuestro presidente de que te ordenase venir. Necesitamos resolver esto y rápido, si sigue muriendo gente nos vamos a quedar en cuadro y toda la investigación del proyecto se vería comprometida. Esto es serio, muy serio y tenemos que resolverlo. O hemos tenido una suerte pésima y todo es una casualidad increíble o hay un asesino suelto capaz de infiltrarse en cualquier parte y matar a cualquiera. Si lo segundo es cierto solo Dios sabe el daño que podría hacer a todo el mundo, incluidos a vosotros. ¿Pero como demostrar que ha sido un accidente casual, o como cazar al asesino si es que lo ha sido?. No sabemos como hacer ninguna de ambas cosas y debido a tus espectaculares antecedentes con ocasión de la crisis afgana pensamos que tal vez pudiese sernos de ayuda. -- No se, la verdad es que así de bote pronto estoy tan perdido como vosotros. Pero algo si tengo claro, si queréis que intente resolver esto necesito tener toda la información disponible. Quiero los informes de las autopsias y los resultados de los interrogatorios con la sonda de la verdad al personal, los de todos, quiero todo lo que tengáis y necesito poder llevármelo conmigo para poder recurrir a ello en cualquier momento y lugar que sea necesario. Uno nunca sabe cuando se le van a ocurrir las buenas ideas—Posadosky esbozó una sonrisa algo forzada pues aquella situación no le hacia ninguna gracia— También necesitaré permiso para poder moverme libremente e interrogar y solicitar pruebas a quien crea conveniente De todas formas no soy un mago y no puedo prometer resultados, sea cual sea el motivo de todo esto. -- No te hemos llamado desde tan lejos para ahora empezar a ponerte zancadillas, queremos que esto se resuelva satisfactoriamente. Tendrás la autorización, de hecho ya la tienes, pues he recibido ordenes de ayudarte en todo lo que sea necesario, aunque naturalmente pediré que me tengas informado de cualquier progreso que hagas. -- Por supuesto, sin embargo quiero hacer algunas aclaraciones desde ya. Eso de marcharnos de la habitación para que no escuchasen nuestra conversación no ha estado muy fino, en mi opinión. El desaire ha sido demasiado evidente y creo que eso hay que arreglarlo. Lo primero que pienso hacer es volver a entrar ahí dentro y disculparme por haberme marchado de esa forma. -- Haga lo que crea conveniente, pero opino que hablar de esto delante del, visto su estado de animo, solo hubiese empeorado las cosas. -- Bueno, ahora esta es mi misión y pienso hacer las cosas a mi manera. Me disculparé de todas formas. Lester se encogió de hombros mientras intentaba disimular su incomodidad. -- Como usted prefiera—convino finalmente. Seguidamente Posadosky abrió la puerta volvió a entrar y se disculpó ante Blont por su intempestiva salida. Blont y los demás escucharon en silencio sorprendidos por una disculpa sobre algo a lo que no habian dado importancia. -- Espero que me ayuden en todo lo que sea posible y yo intentaré ayudarles a ustedes. Díganme, aparte de colocar la matriz se hacia algo mas aquí. -- No, por lo menos últimamente nada mas. Aquí solo se coloca el ordenador auxiliar y se diluye el Ertaz con los aditivos especiales antes de fusionarlo con el ordenador convencional, aunque ese último paso ya no se hace aquí. Como tal vez sepa un recipiente de Ertaz puro por si mismo no puede hacer nada, puede procesar información del exterior, por lo menos potencialmente, pero carece de información para saber como hacerlo. Por lo tanto incluso una matriz de Ertaz puro necesita de un ordenador auxiliar que lo controle durante los primeros momentos y le proporcione los patrones, la información básica necesaria para que sepa como analizar satisfactoriamente la información exterior. Después, la acumulación de experiencia hace innecesaria su presencia y puede ser retirado, aunque en la practica lo que pasa antes es que el ordenador de Ertaz sencillamente drena toda la información del auxiliar. Sin embargo el secreto del ordenador híbrido no está en el ordenador auxiliar, ese es un paso necesario pero irrelevante para el resultado final. Me refiero a que cualquier ordenador, incluso los primitivos modelos del siglo pasado hubiesen sido suficientes para ese propósito, el secreto en realidad esta en los aditivos especiales.—le explicó Blont.

-- Todo eso ya lo sé, tengo conocimientos sobre el Ertaz. -- ¿Profundos? Si no tiene buenos conocimientos se va ha sentir muy perdido aquí dentro. -- Sé lo suficiente como para entender cualquier explicación técnica que me den, en el caso de que sea necesario. Sin embargo por el momento eso no es de mi interés, he de resolver unas muertes no dar una tesis doctoral. Además, supongo que buena parte de los detalles técnicos, como usted los llama, serán alto secreto y no podrían contármelos sin autorización. -- Así es, señor.—convino Blont algo mas relajado. -- Ya tiene esa autorización, se le dará toda la información que pida, incluso técnica si lo considera necesario para la investigación.—añadió Lester. -- Desde luego están desesperados para estar dispuestos a llegar tan lejos.—pensó Posadosky. -- De acuerdo, pero de todas formas no tengo intención de abusar de vuestra hospitalidad a no ser que sea estrictamente necesario. No necesito información técnica por el momento.—dijo el. -- Lo que quiero saber ahora es una cosa que puede ser importante. De que tipo eran los equipos de realidad virtual. -- Los mas modernos posibles, señor. De conexión neuronal. Envían la información directamente al cerebro. Las imágenes van al centro visual, los sonidos al centro auditivo y así sucesivamente. Las sensaciones son totalmente indistinguibles de la realidad, en realidad están preparadas para que afecten con fuerza a los centros de memoria. Son experiencias mas fáciles de recordar que las naturales y hasta el mínimo detalle. -- Supongo que en ese caso un aumento del voltaje sin control podría ser dañino, incluso fatal. -- Hemos revisado el equipo hasta la saciedad, no hay ningún fallo de ningún tipo. Los sistemas de seguridad y monitorización son muy exigentes. La actividad del equipo y del cerebro del receptor es controlado en tiempo real. Si hubiese sucedido lo que usted dice lo habríamos sabido de inmediato y no fue así. No sabemos lo que pasó, pero no es problema del equipo.—contestó Lester. -- De todas formas por si las dudas recomendaría que no se usasen mas hasta que se resuelva este asunto. Usad hologramas de proyección normales, tendréis que arreglaros con eso. No soy experto en ese tema así que no sé si eso afectará a la eficacia de vuestro trabajo pero creo que es preferible no correr mas riesgos. Lo principal ahora es que no haya mas víctimas y como todos los muertos parece que tenían ese equipo instalado debe ser considerado como sospechoso. Mi consejo es que se desconecten hasta que esto se resuelva. -- No han vuelto a usarse desde ayer. El primer dia cuando murieron los tres primeros en un plazo de pocos minutos interrumpimos todos los trabajos y lo revisamos todo hasta la saciedad. No descubrimos nada raro así que cometimos el error de reanudar al dia siguiente las operaciones con toda normalidad, hasta que casi al fin de su turno murieron otros dos casi simultáneamente. Desde entonces no sabemos que hacer, volvimos a revisarlo todo, por supuesto, pero no encontramos absolutamente nada. -- Dice que las muertes sucedieron con pocos minutos de intervalo. ¿Como fue la secuencia de hechos, con que diferencia de tiempo murieron?—preguntó Posadosky. -- Los dos primeros fueron aquí mismo, prácticamente de forma simultanea, hubo una diferencia de tres segundos entre la muerte cerebral de uno y la del otro. Medio minuto después, murió uno de los teóricos en el otro extremo del complejo. Ayer mismo murieron los otros dos. Uno aquí, el de la baja que Blont vio con sus propios ojos y el otro teórico once segundos después. Las bajas fueron fulminantes en todos los casos, pero es el hecho de su casi simultaneidad la que nos tiene mas escamados. De no ser por la falta absoluta de pruebas hubiésemos pensado en un asesinato en red por descarga eléctrica deliberada en el cerebro, pero los sensores no detectaron nada, ninguna descarga ni fallo en el sistema, así que ya no sabemos que pensar. -- Ciertamente que es muy raro. ¿No hay ninguna posibilidad de que hubiese descarga sin que los sensores lo detectasen?. -- Hemos revisado los sensores hasta la saciedad, funcionan perfectamente, todos ellos sin excepción. Posadosky se atusó el bigote en silencio mientras daba rienda suelta a sus pensamientos. Nadie dijo nada, permanecieron a la espera hasta que finalmente planteó: -- Supongamos que alguien se hubiese colado hasta aquí sin ser detectado, no una sino varias veces y hubiese matado a esas cinco personas mediante descarga cerebral. También podría manipular los detectores simultáneamente para que no registrasen la descarga sin que por ellos se detecten fallos en su revisión posterior.

-- Esta suponiendo una capacidad de incursión informática totalmente imposible. Nadie podría hacer nada por el estilo, ni el “hacker” mas habilidoso con el mejor equipo que pueda comprarse con dinero podría hacer ni la décima parte de lo que ha dicho. -- ¿Podría hacerlo su ordenador híbrido, uno de ellos por lo menos?. Puede que alguien manipulase a esos espléndidos aparatos para matar a través de ellos. Todo el mundo sabe de las magnificas habilidades para espiar y manipular sin ser detectados que tienen esas máquinas. Ese es el motivo principal por el que todo el mundo quiere tenerlos. ¿Cuántas máquinas de esas se han fabricado y en manos de quien están?. -- Unas veinte, no sé el número exacto, pero sé de alguien que si lo sabe y donde esta cada uno. -- Pues lléveme ante esa persona. -- Lo haré con mucho gusto.—seguidamente y sin decir nada mas se dirigió hacia la puerta y Posadosky le siguió despidiéndose con la mano de los presentes en la sala que habian escuchado toda la conversación. Una vez fuera, Lester continuó hablando mientras caminaba por el pasillo seguido de cerca por Posadosky. -- De hecho, si no estoy mal informado ya conoce a esa persona. De hecho es el supervisor científico del proyecto de desarrollo del híbrido. Se llama Borislav Tomaszow. Posadosky esbozó una pálida sonrisa antes de responder. -- Desde luego que le conozco, fue el quien me encargó la búsqueda de Hanigalbat, cuando se fugó. Todo eso es el del dominio público, señor. -- También lo es el motivo de la fuga.—dijo Lester. -- Por supuesto, señor, estoy seguro de que sabe perfectamente de las revelaciones que hizo Deschamps hace poco al respecto. -- Fue la comidilla del dia, lo recuerdo perfectamente y estoy seguro de que a Tomaszow no le hizo ninguna gracia. En mi opinión fue un golpe bajo aunque siendo sinceros no me extraña. Por lo que sé de Tomaszow, y he estado con el en bastantes ocasiones, no es alguien que despierte las simpatías de la gente. Es duro, arrogante y rígidamente anticuado. -- Lo sé. De hecho se rumoreaba que Deschamps y Tomaszow tuvieron algún que otro roce con posterioridad y ese fue el motivo por el que Deschamps reveló el poco airoso papel de Tomaszow al respecto de la fuga de Hanigalbat, aunque a decir verdad yo tampoco tuve un papel muy brillante. Sabia que ahora trabajaba en los Estados Unidos pero no sabia que precisamente en un tema tan sensible. -- Pues ya lo sabe y eso significa que ahora esta metido hasta el cuello en este espinoso asunto. Aunque peor es mi posición, no en vano yo soy el responsable de la seguridad. De hecho es mi obligación informar a Tomaszow de cualquier progreso en este asunto. -- Entonces sabe que estoy aquí. -- Si, señor Posadosky. Yo mismo le informé. Recuerdo que se mostró sorprendido al saber de la decisión del presidente, aunque no podría decirle si favorable o negativamente, o era simple sorpresa sin idea preconcebida. Tal vez usted pueda averiguarlo cuando hable con el. -- Supongo que ahora me conducirá donde esta el. -- Desde luego no me he ido para dar un paseo. Esta aquí mismo, de hecho insistió en que esta reunión debía ser en persona, nada de telepresencia. Yo tampoco entraré en la habitación, la reunión es estrictamente privada. -- ¿Fue el quien insistió en ello? -- No insistió, sencillamente dio la orden. No es el tipo de personas que tienen necesidad de repetir las cosas. Lester se detuvo ante una de las puertas, que al colocarse delante se abrió automáticamente. Frente al escritorio de enfrente Posadosky reconoció a su interlocutor. Apenas había cambiado desde que le vio por primera vez hacia siete años a pesar de que raramente se habian vuelto a ver las caras desde entonces. Parecía mas joven que los 58 años que ya tenia en realidad, en su cara no se veía la menor arruga, aunque con lo extendido que estaba la cirugía celular hoy en dia era raro ver a alguien con arrugas a no ser que fuese ya realmente anciano. Era un hombre robusto y bastante alto, con algo de barriga pero no obeso, con barba y bigote y un cabello corto que se había hecho tintar para borrar las canas. Los ojillos castaños le miraban fijamente mientras esbozaba una suave sonrisa, no sabia si sincera o meramente protocolaria, aunque por lo que sabia de el lo segundo era con mucho lo mas probable. Posadosky entró y la puerta se cerró inmediatamente tras el. Su interlocutor se levantó, se adelantó y le estrechó la mano esbozando siempre una sonrisa.

-- Es un placer volver a verle después de tanto tiempo. Ciertamente que la situación a cambiado notablemente desde que nos encontramos por primera vez. Su ascenso en el escalafón a sido espectacular y me alegro por usted. -- Muchas gracias, señor. -- Siéntese y póngase cómodo, tenemos mucho de que hablar.—Tomaszow le señaló la amplia silla acolchada que un robot acababa de colocar frente al escritorio. El lo hizo así mientras su interlocutor volvió a sentarse en su sitio, frente a el. -- ¿Supongo que habrá sido informado de la situación?. -- Mas o menos, aun tengo muchas dudas en mente, tal vez cuando tenga las autopsias, los resultados de los interrogatorios y demás material lo vea todo mas claro. -- Siento mucho tener que contradecirle pero me temo que no será tan sencillo. Yo ya tengo todo ese material y no se me ha aclarado nada. No tengo ni idea de lo que ha sucedido y eso que no me considero ningún tonto. -- Supongo que si lo que a pasado estuviese medianamente claro no se habrían molestado de llamar a un agente de una potencia extranjera para husmear en un asunto tan estratégico. Se perfectamente lo quisquillosos que son todos los países con el asunto de los híbridos y con sus implicaciones en el viejo arte del espionaje no me extraña que lo sean. Si han decidido recurrir a mis servicios y darme vía libre pese a todos los datos clasificados que podría descubrir en el proceso es que el problema es realmente gordo. Aunque para ser francos por el momento estoy tan perdido como el resto. -- Personalmente tengo mi teoría al respecto, aunque por el momento es solo eso. Prefiero no abrir la boca hasta tener pruebas. -- ¿Cuál es su teoría? -- Prefiero no decir nada hasta no tener pruebas, aunque claro, si usted se compromete a no airear mis sospechas tal vez pueda compartirlo con usted. -- ¿Por eso quería que la reunión fuese privada y en persona? Tomaszow se sonrió abiertamente, esta vez nada de una sonrisa débil como la anterior, esta vez era bien marcada. -- Digamos que en parte si. Que le parecería saber que yo tengo todos los datos que ha mencionado hace un momento.—en ese momento sacó un pequeño disquete del bolsillo y se lo mostró. -- Aquí esta toda la información del caso, absolutamente toda. Un bocado apetitoso, no le parece. -- Desde luego. Entonces Tomaszow alargó la mano para que pudiese coger el disquete. Posadosky desde luego tampoco se hizo el remolón en aceptarlo. -- ¿Y el precio?—preguntó Posadosky tras dudar unos momentos. -- No estoy en situación de poner ningún precio. En este asunto solo soy un mandado con bastante menos autonomía que la que usted tiene ahora. Solo pido que me tenga informado de todo lo que averigüe, esa es una de sus pocas obligaciones. -- Así lo haré, puede estar seguro. Sin embargo sigo intrigado por su teoría, ¿Cuál es?. -- Creo que usted conoce al responsable.—le dijo sin inmutarse. -- ¿Yo?—preguntó Posadosky realmente sorprendido. -- No me malinterprete, no estoy sugiriendo que usted tenga nada que ver, ni muchísimo menos, solo he dicho que conoce al responsable. -- Quien es ese responsable. -- Se llama Enrique Zabaleta y es un viejo amigo suyo, ambos lo sabemos perfectamente. El con su inconsciencia es el responsable de toda esta desgracia. El creó a Hanigalbat y por tanto es responsable indirecto de sus crímenes. -- ¿Hanigalbat? ¿El robot de Ertaz puro? -- ¿Acaso hay otro?, por supuesto que me refiero a ella. -- Olvida que Hanigalbat es historia, en todos los aspectos, esta acabada. -- No, señor, creo que en eso se equivoca. Esta desaparecida, solo eso. Se escapó por las alcantarillas del laboratorio de investigaciones robóticas de Bilbao, lo sabe perfectamente. Es del dominio publico. ¿Desde cuando desaparecida significa destruida? Nunca se encontró su cuerpo, por lo tanto no hay pruebas de que haya sido destruida. Esa criatura era mucho mas inteligente de lo que parece pensar, ¿acaso a olvidado como nos dio esquinazo a todos y eso que revisamos todas las alcantarillas de la ciudad?. -- No todas, señor. Pudo haberse colado entre nuestra red, de hecho es obvio que lo hizo pues no la encontramos pero la búsqueda no fue completa, era imposible en tan poco tiempo. Eso

es una cosa y otra muy distinta es que siga funcionando después de siete años sin mantenimiento en las alcantarillas. -- ¿Quién ha dicho sin mantenimiento, esa cosa podía moverse, ¿lo ha olvidado?. Estoy seguro de que se las ha arreglado para conseguir mantenimiento por su cuenta. Hay muchisimos lugares donde ella podría llegar y un ser humano raramente estaría presente. Tiene capacidad para repararse por su cuenta, estoy seguro de ello. -- Carecía de los conocimientos necesarios, era un robot pero apenas sabia nada de robótica. -- Olvida su capacidad para husmear en los sistemas informáticos, hubo un montón de lugares donde pudo conseguir la información necesaria para saber como prevenir sus fallos y repararlos cuando surgiesen. Estoy seguro de que sigue en funcionamiento, oculta, husmeando todo lo que hacemos y ahora finalmente ha decidido actuar y mostrar sus verdaderos colores. Parece que se ha aburrido de husmear desde las alcantarillas y busca algo mas de acción, friendo el cerebro de quien se cruce en su camino. Esto es solo el principio, pronto habrá mas muertes, estoy seguro de ello. -- Me han dicho que se han tomado precauciones. Si ha sido asesinato y sea quien sea, ya no podrá matar mientras no vuelvan a usarse los sistemas de red neuronal. Tomaszow negó con la cabeza firmemente. -- Le creía mas inteligente, mucho mas, no piensa lo que dice. Si cree que esa es la única forma que puede tener de matar esta muy equivocado. Olvida que vivimos en un mundo en que todo, absolutamente todo, depende de los ordenadores. Quien pueda manipularlos libremente puede matar allí donde desee. Puede hacer caer un ascensor desde el piso cincuenta, o provocar una descarga que le fría cuando toque un electrodoméstico, o hacer que su robot apriete mas fuerte de lo debido cuando le haga masajes en el cuello, hay infinidad de formas de matar. Mientras dependas de algo que este conectado a la red eres vulnerable y ¿quien no esta constantemente en esa situación hoy en dia?. Quien domina el ciberespacio tiene la vida de la gente a su merced y ella es con muchísima diferencia la mas capacitada para moverse en ese ambiente. Ya lo ha demostrado con creces. -- Aunque viva, no la creo capaz de matar. ¿Ha leído los trabajos de Enrique sobre la psicología de los ordenadores de Ertaz puro?. -- Pura patraña para exculparse de sus responsabilidades. Enrique es un temerario, siempre lo ha sido, pues de lo contrario jamas se abría atrevido a crear un engendro que sabia potencialmente incontrolable. -- Usted siempre pensó que debía ser destruido. -- Mi posición al respecto nunca fue un secreto. -- Para Enrique si lo era hasta que lo encerró en una habitación y lo amenazó directamente si intentaba evitar su destrucción. -- Reconozco que fui algo brusco, pero la situación no estaba para sutilezas. -- Ha estudiado su psicología, los hechos constatados mientras estaba en el laboratorio. Estoy seguro de que lo hizo. No era ningún criminal, de hecho tenia un concepto moral francamente alto. -- Era la inocencia de la ignorancia. Sabia que apenas sabia nada y dependía totalmente de sus creadores, por eso se mostraba amable. Cuando comprenda las debilidades humanas y compruebe su gran superioridad su admiración se convertirá en desprecio. De hecho ya entonces tenia un acentuado escepticismo en lo referente a la racionalidad de muchos actos humanos y eso pese a lo limitado de sus conocimientos. Olvida que intentamos destruirle. Eso significa que ahora tiene motivos de resentimiento contra nosotros, sobre todo contra mi. -- Entonces porqué no empezó deshaciéndose de usted en vez de con unas personas que no tenían nada que ver con ella. -- Probablemente este en su lista, pero ya le he dicho que he tomado precauciones. El hecho es que ahora yo no soy una amenaza para ella, pero esas personas si lo eran aunque ellas no lo supiesen. -- ¿Porqué iban a serlo? -- Por aquello en que trabajaban, porque sabían como fabricar ordenadores híbridos. Ellos son su mayor amenaza ahora. No olvide que hasta su invención ella era el amo del ciberespacio, con poder para hacer y deshacer a su antojo sin que nadie pudiese defenderse, ni siquiera detectarla. Dios sabe los destrozos que habrá hecho sin que nos hayamos percatado siquiera, ha estado observándonos y jugando con nosotros como si fuésemos animales de laboratorio. Pero con la aparición de ordenadores híbridos viables su supremacía se ve amenazada por primera vez. Ella seguiría siendo superior a ellos, por lo menos de momento, pero ya no es

indetectable ni imparable. Ahora lo tiene mas dificil y cada vez lo tendrá mas a medida que su número y ubicuidad aumenten y se mejoren sus capacidades. Con ellos sus manejos se ven cada vez mas amenazados, así que tiene que hacer algo para mantener su supremacía. Eliminando a los expertos en su construcción bloquea su fabricación e instalación. Por eso a atacado aquí y ahora, intenta detener la fabricación de los híbridos por propia autodefensa. Ahora que su posición se ve amenazada, ya no duda en matar y esto ira cada vez a mas. Primero esta el trabajo, pensará ella, y después ya se dedicará al placer de saldar viejas cuentas. Pero ahora ya es demasiado tarde para eso, pues ya no estoy indefenso. En estos momentos tengo a tres de los nuevos híbridos dedicados exclusivamente a mi protección, formando un escudo múltiple a lo largo del ciberespacio para defenderme de cualquier ataque, algo de lo que desgraciadamente ellos aun no disponían, aunque haré todo lo posible para que lo estén lo antes posible.. Se ha dedicado a una carrera desesperada que va a perder, pues en cuanto se generalicen los híbridos su carrera criminal se verá acabada. Por eso actúa ahora y no antes. Esta desesperada y lucha por su vida, eso lo hace aun mas peligrosa mientras dure la transición. Me temo que va ha haber muchas mas bajas como esta a no ser que la detengamos antes. -- ¿Detengamos? -- Usted es un hombre muy inteligente y capaz y domina perfectamente este campo, lo ha demostrado con creces. Espero poder contar con su ayuda en esta crisis. Puede que por ahora dude sobre mis palabras, pero estoy seguro de que cuando la investigación avance se convencerá de que estoy en lo cierto. Espero que no tengan que suceder muchas mas muertes antes de que eso suceda, mientras tanto usaré toda mi influencia para levantar lo antes posible un escudo cibernético con los híbridos alrededor de todo el complejo y de todos los implicados en su desarrollo, pero me llevará tiempo convencerles. Si usted colabora todo será mas fácil y se ahorrarán muchas vidas. -- Comprenda que no pueda dar su teoría por buena sin pruebas sólidas, pero si lo que necesita es que haga una petición personal para que se levante tal escudo, puede tener la seguridad de que lo haré. En cuanto salga de esta habitación sin ir mas lejos. -- Por el momento será suficiente. Eso y su discreción sobre mis sospechas. Después, cuando la caza se ponga interesante tal vez pueda serle de ayuda, será un placer. -- ¿Nadie mas sabe de sus sospechas? -- Se lo he contado al jefazo, al encargado de todo el proyecto, o al que lo era hasta hace algo mas de un mes, Bent Leeman, asesor científico del presidente y supongo que el le habrá informado Y también espero decírselo al responsable de todo esto en cuanto llegue. -- ¿Enrique va a venir aquí? -- El, junto con su familia, han sido invitados a una gira por el país en reconocimiento a su labor. Vendrá pasado mañana a estas instalaciones y espero poder hablar con el entonces, aunque sinceramente, no creo que me escuche. Esta demasiado cegado, digamos, por su “paternidad”. Usted espero que no tenga ese problema. -- He de advertirle que no tengo intención de enfrentarme con el por esto a no ser que disponga de pruebas. -- Ya lo sabia, no voy a pedirle que arruine una larga y fructífera amistad sin pruebas, pero estoy seguro de que usted sabrá obtenerlas por su cuenta y espero también, que hasta el mismo tenga que reconocer que la construcción de Hanigalbat fue un trágico error. -- No soy adivino, así que no puedo saber como acabará esto.—dijo el diplomáticamente. -- Así acabará y también con la destrucción de Hanigalbat.— Posadosky notó cierta emoción en sus palabras y un brillo en sus ojos al decir esto. -- ¿Tenia algo mas que decir?—preguntó Posadosky. -- Por el momento eso era todo. Espero verle pronto con noticias frescas. Suerte y buena cacería. -- Gracias. Solo quería pedirle un último favor, ¿podría darme la lista de todos los ordenadores híbridos en funcionamiento, donde están y quien los controla?. Podría ser importante. -- Por supuesto, déme el disquete-- contestó Tomaszow. El se lo devolvió y rápidamente lo metió en una pequeña grabadora inalámbrica puesta como un adorno mas encima de la mesa, le dijo la información que quería añadir y seguidamente lo sacó y se lo devolvió rápidamente. -- Aquí tiene toda la lista que ha pedido, espero que le sea de utilidad. Posadosky le dio las gracias, se despidió de el, se levantó llevándose el disquete y salió de la habitación. Lester le estaba esperando junto a la puerta. -- ¿Y bien?—preguntó Lester.

-- Me ha dado la información que quería, pero también quería hacerle una petición. Es importante. -- ¿Qué petición? -- Haga todo lo posible para que instalen un escudo cibernético alrededor del complejo y de todos sus trabajadores usando los ordenadores híbridos como escudo. Si se trata de asesinatos debemos disponer de la mejor protección posible. ¿Tiene autoridad para hacer lo que le he pedido lo antes posible?. -- Eso ya me supera, trabajar un híbridos funcionales es harina de otro costal. Su uso esta muy restringido pero mi tarea es asegurar la seguridad y con los lamentables precedentes que hemos tenido creo que podré convencerles si usted da un documento grabado con su opinión de que es necesario. -- ¿Tiene una grabadora?. -- En mi intercomunicador. Hable ahora y se grabará lo que diga.—Lester le mostró el diminuto rectángulo verde cosido a la ropa que ahora proyectaba un mensaje luminoso avisando de que estaba grabando. Posadosky hizo la petición con el lenguaje y tono de voz mas imparcial y sosegado posible pero a la vez lo mas firmemente que pudo siendo compatible con esa premisa. Una vez terminó se apagó el letrero luminoso flotante del intercomunicador, indicando así que había dejado de grabar. -- ¿Qué tal ha ido? -- Digamos que ha sido interesante. Me ha dado los datos sobre la investigación por su propia mano sin necesidad de que yo se lo pidiese. -- Seguramente ya habría recibido ordenes al respecto, no es del tipo de gente que regala nada. -- Eso lo dejó claro, efectivamente había recibido ordenes. Por lo poco que he visto hasta ahora parece que tampoco aquí tiene demasiada buena fama. -- ¿Lo dice por mí? Bueno, para serle sincero puedo asegurarle que mi opinión es bastante representativa. Tiene fama de duro y de bastante mal humor y ambas cosas con razón. No es de los que les guste hacer amigos y eso no le hace demasiado popular. Es duro y obstinado, puedo asegurarlo por propia experiencia. -- Yo no le conozco gran cosa, solo sé lo que me han contado de el, personalmente no le he visto ni media docena de veces en los últimos siete años. -- ¿Se refiere a verlo personalmente o a distancia?. -- Todas a distancia, esta es la segunda vez que le veo en persona en toda mi vida. -- Pues yo le veo casi todos los días y puedo asegurarle que su fama es esencialmente correcta. Es tan arrogante y cascarrabias como dicen. -- Pues conmigo no lo ha sido. -- Que sea cascarrabias no significa que sea tonto, todo lo contrario. Sabe que si le trata mal sus superiores le reprenderían y eso no le conviene. Es servicial con los superiores o con aquellos de los que quiere algo, solo con los inferiores descarga su genio, de lo contrario no seguiría en el puesto que ocupa. -- El caso es que espero poder sacar algo en claro de lo que me ha entregado, aunque la verdad es que tengo mis dudas. -- Espero que tenga suerte, por el bien de todos. -- Ah, otra cosa. Esto seguramente me va ha llevar mas de un dia, no se cuanto pero puede que bastantes días. Necesitaré un lugar donde poder consultar la información a solas, comer y dormir. Supongo que se habrá pensado en eso. -- Por supuesto. Le hemos reservado un par de habitaciones en la residencia donde viven nuestros empleados. Tenemos varios sitios libres, hemos elegido el mas amplio y el que mejor le da el aire y el sol, estoy seguro de que será de su agrado. -- ¿Está lejos?. -- No, esta cerca. De hecho forma parte del mismo complejo. Debido a las medidas de seguridad que se necesitan en un asunto tan sensible como este ninguno de los empleados vive fuera del complejo. Este lugar tiene de todo para llevar una vida prácticamente independiente del exterior. ¿Quiere que se lo enseñe o prefiere ver primero el lugar donde murieron los dos teóricos?. -- El trabajo es lo primero, iré al lugar de las muertes. -- De acuerdo, es justo al lado del ala residencial, así que llegaremos enseguida. Supongo que no le molestará caminar, si lo desea podemos traer una carretilla robot para llevarle.

-- Iré andando, estoy mas que acostumbrado a caminar y un par de minutos de viaje no me harán ningún mal. -- De hecho solo será un minuto, dijo el mientras se ponía en camino. Posadosky naturalmente le siguió de inmediato. En efecto, unos pasillos mas allá, Lester se colocó ante otra puerta y entró seguido de Posadosky. Lo que vieron era un despacho amplio y bien amueblado, con varias computadoras personales enrolladas como hojas de papel flexible encima de la mesa y el delgado casco de realidad virtual al lado. A estas alturas eso fue lo primero en lo que se fijó Posadosky. -- Aquí fue donde murió el primer teórico. -- Ya veo. El equipo de realidad virtual también es del mismo modelo, de conexión neuronal. -- Ahí esta el problema, no lo son, estos son de proyección ordinaria. Un modelo viejo pero robusto y de gran capacidad. Si en este caso se trató de un asesinato no sé como lo hicieron. No había conexión directa con el cerebro a través de la que pudiesen freírselo a pesar de las medidas de seguridad. -- Supongo que si la descarga es lo bastante potente o está lo bastante bien dirigida, pueda hacerlo de todas formas a través del cráneo. -- Esta presuponiendo una habilidad de infiltración informática totalmente inhumana. -- Por eso me interesaba tanto tener la lista de donde y quien controla los ordenadores híbridos. A través de ellos si podrían hacerlo. -- Supongo que Tomaszow se la dio. -- Así es. Sin embargo es interesante que tuvo que añadirla a petición mía, pues no estaba entre la información original del disquete. Eso indica, que por lo menos de momento no han pensado en esa posibilidad o si lo han hecho no deseaban darme esa información. -- ¿Puso pegas para dársela? -- Ni una sola. -- ¿Tal vez no pensaron en ello, aunque personalmente lo dudo. En la investigación han participado los mejores agentes de la C.I.A. y el F.B.I y si han recurrido a usted es porque no han encontrado nada por si mismos. Creo que ya habrán pensado en ellos y no han encontrado nada.

-- Ya lo averiguaré cuando revise el contenido del informe, pero si no incluía esa información una de dos. O no han pensado en ello o no incluyeron esa información a propósito, aunque lo segundo no casa bien con la rapidez con que Tomaszow me dio la información. Solo espero que en el contenido del disquete esté todo lo que tienen, porque si empiezan a ocultarme información desde el principio, empezamos bien. -- No creo que se molestasen en hacerle traer para después ponerle las cosas difíciles. -- Yo no lo descartaría tan rápidamente. Tal vez haya información que no pretendan darme a no ser que no tengan absolutamente otro remedio, ¿quien sabe cuantos secretos tendrá este complejo?. -- No se me ocurre nada que pueda tener la mas remota relación con las bajas. -- Ese es el problema, cuando fallan las conexiones obvias hay que empezar a buscar las menos obvias. Si empiezan a cerrarme puertas a priori quien sabe si están cerrándome una que contenga la clave. Eso es lo que me temo. -- ¿Y en ese caso? -- Espero que les convenza de que hagan caso de su promesa, la que usted me dio de su parte. Que no me ocultarán ninguna información por sensible que sea. -- Comunicaré esa petición a mis superiores. Es todo lo que puedo hacer. -- Espero que sea suficiente, porque sino difícilmente voy a poder resolver esto. -- ¿También estaba conectado cuando murió, no es así? -- Todos estaban conectados cuando sucedió, de lo contrario se lo habría dicho. Posadosky se acercó para revisar el casco de realidad virtual, aunque sabia que no encontraría nada y en efecto así fue. -- Supongo que se habrá revisado todo lo que estaban manejando en ese momento o en los días anteriores. Me refiero a la información conque estaban trabajando, tal vez ese fue el motivo de las muertes. -- Se refiere al robo de información. Ya hemos pensado en eso y lo hemos revisado todo. No hay la menor prueba de robo de datos, como tampoco de descargas eléctricas ni fallos en la seguridad. Tampoco hemos encontrado nada sospechoso en la información con que estaban trabajando o en la que produjeron. Nada que podría ser motivo para un asesinato, ni siquiera para una amonestación. Solo sabemos que tenemos cinco muertos. -- ¿Tenían enemigos?.

-- ¿Enemigos¿ No que sepamos, ni dentro ni fuera del trabajo. -- ¿Discutieron con alguno?. -- Discusiones. Este es un verdadero grupo de polemistas, señor. Cada uno tenia su idea genial o sus enfoques de investigación e intentaba conseguir el mayor tiempo y recursos posibles. Muchos discutían con bastante vigor. No olvide que aquí trabajan la elite de la elite, los mas preparados y ellos lo saben, por supuesto. Hay de todo, desde tímidos y recluidos como Blont a los mas arrogantes polemistas. Roces había continuamente, pero señor, eso es una cosa y otra que se mate por ello. Nadie tenia un motivo que desear la muerte de ninguno de sus colegas. -- Le sorprendería lo fútiles que pueden llegar a ser los móviles para un asesinato. Cualquier cosa, virtualmente cualquiera, puede ser un motivo para una mente lo bastante trastocada. -- Señor, se les hacían rigurosas pruebas psicológicas a cada uno de ellos antes de permitirles entrar aquí. No se toleran desequilibrados, por brillantes que sean. -- Muchos asesinos parecen personas perfectamente normales, incluso ante los mejores tests psicológicos. Nunca se fíe por eso. -- ¿Incluso ante la sonda de la verdad? -- Ni siquiera ella puede revelar todos los entresijos de la mente. -- Pero si lo mas relevante, como si uno tiene pensamientos homicidas y un asesino no puede evitar tener recuerdos sobre su crimen. Recuerde que se acaba de interrogar con la sonda de la verdad a todo el mundo, absolutamente a todo. Incluido yo mismo o Tomaszow. -- Eso ya si que es una prueba sólida.—convino Posadosky.-- A no ser que el asesino no sea consciente de su acto. -- Algo totalmente imposible, ¿como matar deliberadamente y no saber que lo has hecho?. Por eso sabemos que si es asesinato el responsable esta fuera. -- Solo estaba fantaseando. El caso es que si la sonda no ha revelado nada es porque no hay nada que ocultar. -- Así es. Un zumbido junto a la puerta les advirtió que alguien pretendía entrar en la habitación. Seguidamente la puerta se abrió dejando ver a una mujer bastante joven, de claros rasgos asiáticos y bajita, de apenas 1,55 centímetros y pelo negro lacio bastante corto. -- Señor Lester, ¿sucede algo?—preguntó ella.. -- Este es Victor Posadosky, es un investigador europeo que ha venido para ayudar en la investigación.—le explicó— y ella es Lia Xiughe, uno de los miembros del grupo donde trabajaba el fallecido. -- Es un honor.-- dijo ella mientras se acercó hasta el y le estrechó la mano efusivamente. -- Espero que tenga suerte.—añadió seguidamente. -- Eso espero yo también, dígame, ¿conocía al fallecido?. -- Si, claro, en realidad conocía a todos, aquí todo el mundo se conoce mejor y peor pero al pobre Bronsted era al que mejor conocía. Trabajábamos en el mismo grupo desde que entramos aquí hace mas de cuatro años. -- ¿Que tal se llevaba con el? -- Muy bien, señor, nunca tuvimos el menor problema. -- ¿Podría decirme con quienes se llevaba peor?. -- Bueno, señor...-- dudo ella mientras se llevaba la mano al mentón pensativa. -- Digamos que... discutía bastante con Condratenko y también con Lee Bentrey, pero desde luego no eran los únicos. La verdad es que en tres años, alguna vez, has discutido por lo menos con la mitad, pero eran cosas sin importancia, con esos dos era con los únicos con quienes tenia discusiones... digamos acaloradas. Pero pasaron la sonda de la verdad así que sabemos que no han tenido nada que ver. Fue alguien de fuera, eso dicen. -- ¿Cree que han sido muertes provocadas?. -- ¿Cree acaso que pueden morir cinco personas en un grupo tan pequeño en solo dos días y con los mismos síntomas sin que les hayan matado? Yo no lo creo. -- La verdad es que yo también lo dudo, pero aun es pronto para que pueda sacar conclusiones. -- ¿A que había venido?—le preguntó Lester. -- A recoger mis cosas, solo a eso. Supongo que tendré que seguir trabajando y llorar a mi amigo en silencio. Por lo menos no me han trasladado, prefiero seguir aquí pese a lo que ha sucedido. -- ¿Es habitual dejarse cosas en el despacho de otro?—preguntó Posadosky.

-- Se nota que usted no sabe como funciona esto, aquí continuamente nos estamos intercambiando información. Cuando alguien hace un descubrimiento o cree que lo ha hecho, aunque solo se le haya ocurrido una idea prometedora lo primero que hace es decirlo bien alto para que todo el mundo se entere, es una forma de dejar clara la propiedad de las ideas. Aquí se trabaja en equipo y el material de uno se presta a los demás para que puedan analizar tus ideas, solo trabajando juntos se puede obtener resultados en asuntos tan complejos como desarrollar un ordenador híbrido. Usted no sabe la cantidad de tiempo y esfuerzo se ha tenido que gastar para poder conseguir algo de lo que al principio muchos incluso dudaban que fuese posible. Si uno se guardase las ideas para si el trabajo se paralizaría. Bronsted tenia material mío y yo de el y ya que el desgraciadamente, ya no podrá usarlo nunca mas, es lógico que alguien lo recoja todo. -- ¿Va a recoger el material que le había prestado? -- Xiughe pareció ofenderse por la pregunta pues frunció abiertamente el ceño antes de contestar alzando algo el tono de voz. -- Claro que si, no soy ninguna ladrona. ¿No intentará insinuar que voy a intentar apropiarme del trabajo de mi compañero muerto? -- Discúlpeme, no quería hacer ninguna insinuación de ningún tipo. No se nada de cómo funcionan las cosas aquí, por eso preguntaba. Ella se quedó mirándole fijamente unos momentos antes de contestar: -- De acuerdo, acepto sus disculpas. -- Perdone que siga preguntando, pero es mi trabajo. Las discusiones solo eran por problemas de trabajo o salían también a relucir problemas personales. -- Había de todo, señor. A la mayoría de las gente no le gustaba sacar a relucir su vida antes de entrar en el proyecto o lo que hace fuera del, en cambio a otros les gustaba hablar de si mismos y oír hablar de los demás, pero después de trabajar juntos tanto tiempo todo el mundo se sabe mas o menos la vida de todo el mundo y ha veces en medio de la ofuscación de alguna discusión, reconozco que había algunos que no dudaban en hacer ataques personales, incluso sacar a relucir trapos sucios, por decirlo de alguna forma. Eran acusaciones intrascendentes pero a veces se hacían, digamos, que para “pinchar” al oponente. -- Podría hacer nombres de algunos que hubieses hecho eso alguna vez y de quien. Ella volvió a dudar, se quedó pensando unos momentos antes de contestar -- No creo que sea necesario. Eran tonterías y no tenían nada que ver con lo que ha pasado. La sonda dejo claro que nadie sabia nada sobre las muertes. -- De todas formas he de insistir, puede que parezca una tontería pero insisto en que puede ser importante. Dígame nombres. Xiughe suspiró y se encogió de hombros antes de contestar. -- Condratenko una vez hizo una insinuación improcedente sobre los gustos sexuales de Brody, Bentrey en una discusión. hizo acusaciones sobre la infidelidad conyugal de Halvin, Halvin le acusó a su vez de engreído y fracasado social, Hafler se burló una vez de las creencias religiosas de Chalk. Y que conste que lo hago porque lo ha pedido por necesidades de investigación pero como le diga a alguien que he estado hablando de los trapos sucios de los demás... en fin, debería dejar claro que nunca mas le contaría nada. -- No tiene porque preocuparse por eso, nadie le dirá nada a nadie sobre donde obtuvo la información. Solo quería saber si había habido algún otro caso mas de esos que ha mencionado. -- Alguno mas había pero en este momento no recuerdo mas... espere, si, una vez Condratenko se burló de la timidez de Blont. Aparte esos que le he dicho no recuerdo mas casos, aunque es posible que alguno se hiciera de los que no me enterase. -- Muchas gracias, por el momento eso era todo. Ahora mismo nos vamos.—Posadosky se volvió hacia Lester y este captó enseguida el mensaje. Se marcharon enseguida dejándola sola. Una vez en el pasillo Posadosky le preguntó a Lester si había cámaras filmando los pasillos y los lugares de trabajo y en caso afirmativo hasta cuando guardaban las grabaciones. -- Tenemos cámaras en las entradas y salidas del complejo, por supuesto, la seguridad respecto al exterior es la prioridad y también en alguno de los pasillos que conectan los grupos. No hay cámaras en los lugares de trabajo, la gente se pondría muy nerviosa si supiese que están siendo vigiladas constantemente en su trabajo, tampoco las hay en la residencia por el mismo motivo. Y tampoco les grabamos a escondidas, aunque a algún malpensado se le haya ocurrido, estos tipos son muy listos y muchos tienen experiencia en alta tecnología de escucha, podrían darse cuenta aunque les intentásemos grabar a escondidas y eso seria muy embarazoso para todos. Preferimos no tener problemas.

-- Pero habrá sectores muy delicados que necesitarán de alguna vigilancia. El Ertaz que entra hasta que pasa al grupo de matrización, por ejemplo. -- Esos lugares si tienen vigilancia electrónica y todo el mundo lo sabe.—contestó Lester. -- Supongo que nadie podría meter ni sacar información ni materiales del complejo sin ser detectado. -- Prácticamente imposible, se controla todo lo que entra y sale al menor detalle y además se hacen interrogatorios con la sonda de la verdad cada medio año para confirmar que están libres de toda sospecha. -- ¿Cada medio año? Supongo que no les hará mucha gracia. -- Lo aceptan porque es parte del trabajo. Todo el mundo es informado de los requisitos antes de entrar a trabajar aquí. Todo el mundo es voluntario, no hay nadie aquí trabajando obligado, la eficacia y la lealtad se resentirían de ello. -- Supongo que ahora querrá ver el lugar donde murió el otro teórico, es cerca de aquí, justo junto a la residencia, así después pasaremos por allí para mostrarle sus habitaciones mientras este aquí. -- Me parece buen plan.—contestó Posadosky. En efecto eso es lo que hicieron. El despacho del otro teórico era muy parecido al anterior aunque esta vez nadie entró para interrumpirles. Como por el momento Posadosky no tenia mas preguntas que hacer no tardaron mucho en entrar en la residencia. Un bloque de ladrillo rojo de tres pisos situado en una de las alas del complejo. Las habitaciones que le habian reservado estaban en el segundo piso, eran dos habitaciones bastante espaciosos, una cocina y un baño con un robot personal para hacer las tareas de la casa y un amplio ventanal que daba al mediodía. En total unos 40 metros cuadrados en total para una sola persona, es decir, nada mal. -- Esta será su residencia hasta que esto se resuelva o hasta que tengamos que dejarlo por imposible y confío en que sea por lo primero. Si quiere grabaré mi dirección en su intercomunicador para poder llamarme por si quiere consultar algo o que le guíe a alguna parte, aunque me parece que entre los datos que aparecen en el disquete lo primero es un detallado plano de todo el complejo. -- Me parece bien, dijo Posadosky señalando el anillo intercomunicador que llevaba en el dedo. El solo tuvo que indicar verbalmente lo que quería hacer a su propio intercomunicador que tenia grabado en su ropa para que las dos diminutas pero complejas máquinas realizasen la operación automáticamente. Aquellos pequeños aditamentos personales conocidos intercomunicadores eran el equivalente a los actuales ordenadores personales, fax, teléfono, tarjeta de identidad y sanitaria, G.P.S e Internet todo junto en un objeto de menos de un gramo de peso. En ella además podía grabarse cualquier información que su portador desease y era totalmente personal e intransferible, pues solo funcionaba a ordenes de su dueño. --- Supongo que ahora lo que necesitará es tiempo para estudiar toda la información del disquete. Por eso creo que debo dejarle solo para que pueda estudiarlo todo con tranquilidad. Le deseo suerte--dijo Lester como despedida antes de dejarle solo. En efecto, me parece que voy a necesitar mucho tiempo para resolver esto, si es que lo logro.—pensó Posadosky mientras miraba pensativo el pequeño disquete que, tal vez, tuviese la clave de todo. 3.SECRETOS. La verdad es que había sido unas jornadas bastante apretadas aunque por suerte pronto se terminaría. No es que hubiese sido desagradable, en absoluto, pero si un poco cansador. Sobre todo para Irene, que no estaba habituada a ese ritmo de recepciones, reuniones, discursos y recorridos por universidades e institutos oficiales. Hacia cinco días que habian iniciado su gira por Estados Unidos y no habian parado de viajar de una ciudad a otra y de una universidad a otra. Esa noche del 20 al 21 de abril del 2028 acababan de llegar a Los Angeles y de establecerse en su plaza de hotel. Apenas hubo dejado sus cosas, Irene se arrojó sobre la cama boca arriba y se quedó mirando al tejado, agotada. Lutving, el compañero de Posadosky también venia con ellos aprovechando que estaba de vacaciones y se alojaba en su propia habitación, junto a las suyas.

Melisa llevaba de la mano al niño mientras Enrique y Alberto hablaban entre sí. Había sido idea de Melisa que su novio fuese con ellos, y aunque Enrique había dudado un poco no había tardado en aceptar. De hecho parecían llevarse mejor de lo que Melisa había pensado al principio, por lo visto el hielo inicial entre ellos se había roto y Melisa se alegraba de ello. Melisa y Enrique tenían su propia habitación, con dos camas separadas pero no demasiado alejadas mientras Enrique e Irene dormirían en una cama de matrimonio con su hijo en otra cama al lado. Así había sido desde que empezó la gira. Al principio Alberto había sugerido dormir ellos en una misma cama pero Melisa se había negado y el no había vuelto a hablar del tema. Lo que si hacían era hablar aprovechando aquellos momentos de tranquilidad. Apenas acabaron de dejar sus cosas Alberto dijo: -- La verdad es que en toda mi vida pocas veces he tenido una agenda tan apretada. Eso de ser famoso puede que a Enrique no le afecte pero creo que a mi si lo haría. Por algo no se decide a aceptar hacer demasiadas giras como estas. -- ¿Te arrepientes de que te haya traído?. -- No, en absoluto, es emocionante toda esta atención y actividad, lo que pasa es que también cansa, aunque supongo que es normal, todo tiene un precio. En realidad me alegro de que me ofrecieses venir contigo. -- Yo también me alegro de que Enrique aceptase enseguida permitirte venir con nosotros. Me gusta tu compañía. -- No lo dudo aunque a veces alguna de tus negativas, no se, me parecen extrañas. -- ¿Por ejemplo?. -- La negativa a que estemos en un misma cama, no se cual es el motivo. No es por el motivo que piensas pero me ha extrañado tu negativa. -- Aun es demasiado pronto, sencillamente. -- Eso es lo que me extraña, normalmente no te muestras muy cohibida que digamos pero a veces pareces tan reservada. Después de cuatro meses tales reparos parecen, no se como decirlo, tan conservadores. -- Tengo mis motivos, créeme. -- Sin embargo no dudas en acariciarme ni hacerme carantoñas en publico, así que no es por vergüenza, ¿o si?. -- No es vergüenza, solo prudencia.—contestó ella. -- Acaso me tienes miedo. -- No, por supuesto que no. La verdad es que cada vez te estas volviendo mas audaz, ya te advertí que tu timidez se iría disolviendo y así esta sucediendo en efecto. -- Eso no significa que me haya convertido en un descarado, creo yo. -- No, desde luego que no. Pero ahora tienes mas seguridad en ti mismo y eso me alegra. Vas mejorando y mucho. -- Me alegra que lo digas tu, aunque a veces me parece que aun soy demasiado cobarde. De lo contrario tal vez me hubiese atrevido a pedirte esto antes. -- ¿Qué quieres pedirme? Alberto pareció dudar, carraspeó, se interrumpió unos momentos pensativo y finalmente dijo: -- Melisa, quieres casarte conmigo. Si Melisa se sorprendió por la pregunta no dio la menor prueba de ello. Se quedó mirándole con aquella mirada suya tan dulce, imperturbable y en silencio durante unos momentos. Antes de contestar. -- ¿Lo dices en serio?. No, no contestes, sé que lo dices en serio. ¿No te parece demasiado pronto? -- ¿Qué ganamos esperando mas? -- Conocernos mejor. -- Ya te conozco suficientemente bien y supongo que tu también. Ambos decimos que queremos al otro así que porque no oficializar nuestra relación. -- No me gusta tomar decisiones apresuradas. No quiero casarme para que después rompamos al cabo de un par de años. Eso te haría mas daño que no casarnos y no quiero hacerte daño. -- Como tu dices toda elección tiene su riesgo. Personalmente no veo porqué debíamos romper. Eres la persona mas dulce y maravillosa que he conocido en mi vida, por eso te pregunto si quieres casarte conmigo. -- Tu también eres una buena persona pero antes de que vuelvas a repetirme la oferta es necesario que sepas algo que tal vez te haga cambiar de opinión. Algo que puede que haga que rompas conmigo definitivamente, aunque confío en que no será así. Solo te pido que

primero me prometas que no gritaras, ni saldrás corriendo y me dejarás explicarme antes de marcharte. -- Por supuesto, lo prometo. ¿Cuál es el problema?—preguntó el realmente sorprendido, pero algo aplacado pues Melisa continuaba tan calma como siempre, aunque ciertamente no podía de dejar de notar que ahora ya no sonreía lo mas mínimo. -- Uno muy serio, algo que de saberse haría inválido cualquier contrato que concertásemos, mucho mas si se trata de un matrimonio. -- No se cual puede ser.—dijo el cada vez mas preocupado. Nunca la había visto con el semblante tan serio como entonces. -- Quiero que veas esto.—dijo ella mientras se arremangaba la camisa dejando ver todo su brazo. Entonces acercó su otra mano a su antebrazo, lo tocó sin apenas hacer fuerza y para su infinita sorpresa contemplo como su piel se desprendía dejando ver una red de músculos sin sangre de un irisado brillo metálico obviamente artificial. -- Es artificial, tienes un brazo artificial. Eres un Cyborg. -- No, soy mas que eso. No solo mi brazo es artificial, todo mi cuerpo lo es, absolutamente todo. Soy un robot, incluso mi mente es de origen artificial. En realidad sabes quien soy yo aunque creas no haberme visto jamas. Mi verdadero nombre es Hanigalbat. -- ¡No puede ser!—balbució Alberto con los ojos abiertos como platos, mirando fijamente aquel brazo ahora obviamente artificial. Melisa se acercó la mano a la cara y se arrancó la piel de su mejilla derecha dejando ver mas cybermusculos y nervios artificiales de un extraño brillo irisado. -- ¿Lo ves, todo mi cuerpo es así? Soy el robot de Ertaz que Enrique construyó hace siete años. En realidad el no es mi primo sino mi padre.—ahora Melisa se sonrió suavemente. -- Tras mi fuga logré contactar con el y me insertaron mi cabeza en el cuerpo de otro de los robots del instituto y destruyeron mi cuerpo original para que no me descubriesen. Mas tarde y con mi propia ayuda me construyeron el cuerpo humanoide que tengo ahora. Todo preparado para parecer totalmente humana. Como, bebo, respiro, tengo latidos del corazón y pulso y piel caliente aunque en realidad todo ello sea una farsa, una imitación, pues no necesito ni comer, ni beber, ni respirar. Una toma directa de corriente de cualquier enchufe cada veinte horas me basta y sobra. Parezco humana pero montarme todo este cuerpo tuvo un precio, tuve que usar mi habilidad innata para infiltrarme en los sistemas informáticos para comprar el material necesario y después borrar las huellas de esas compras, pero tampoco quería abusar de mi posición así que la imitación quedó con un pequeño defecto por falta de presupuesto. Carezco de vagina y ano funcionales así que no puedo mantener relaciones sexuales ni tampoco mear ni cagar realmente. En principio eso no tenia que ser un problema insalvable, en primer lugar porque no esperaba lograr mantener el engaño durante tanto tiempo y segundo porque no esperaba meterme en una situación tal que quedase en evidencia el pequeño defecto en mi imitación. La gente no suele quedarse a mirar cuando vas al baño para comprobar si meas realmente o solo finges y respecto a las relaciones sexuales, siempre podía hacerme la estrecha y rehusar con una excusa o con otra, nadie dudaría sobre mi humanidad por ello. Sin embargo en tu caso creo que ya no tiene sentido seguir manteniendo el engaño, ahora ya sabes quien soy realmente como lo saben Enrique e Irene. ¿Quieres escuchar mi verdadera historia primero o vas a salir corriendo para denunciarme?. -- Habla, te escucharé—contestó el con voz trémula y cara pálida. Melisa primero se volvió a acercar su mano hacia los colgajos de falsa piel que dejaba ver su naturaleza mecánica. Rápidamente, colocó la piel en su sitio de forma que en pocos segundos no quedó la menor marca que mostrase se verdadera naturaleza. Después empezó a contarle su historia. Alberto escuchó en silencio toda la historia hasta que ella terminó de contárselo todo. -- Y bien, ahora que sabes toda la verdad, ¿que vas a hacer?. -- No voy a denunciarte.—dijo el. -- Si creyese que me ibas a denunciar nunca te hubiese mostrado mi verdadera naturaleza. -- Realmente puedes leer la naturaleza de la gente observando los gestos y su tono de voz. -- Claro que puedo, pero a pesar de lo bien que te conocía, quería estar totalmente segura antes de arriesgarme. Era mucho lo que me jugaba. -- Y también puedes regular conscientemente el grado y naturaleza de tus emociones, puedes anular tus defectos psicológicos, o lo que consideres como tales, con solo desearlo y concentrarte en ello.—empezó a recapitular Alberto. -- La capacidad de automanipular la propia mente es una de las mejores habilidades que tenemos los robots de Ertaz puro, aunque estrictamente hablando no debería pluralizar

teniendo en cuenta que soy el único de mi especie. Si, puedo autorregular mis propias emociones, lo que significa que siento tal como deseo sentir, es una gran ventaja a la hora de hacer frente a las dificultades de la vida. -- Además puedes recordar todo lo que ves aunque lo vieses hace años con tanta claridad como si lo vieses ahora mismo. No olvidas nada a no ser que desees olvidarlo deliberadamente. -- Otra de nuestras grandes ventajas. -- Y tienes suficiente capacidad de memoria como para recordar todas las vivencias que tendrías si vivieses 3.500 años y aun así te queda suficiente capacidad como para convertirte en un genio superior a cualquier ser humano, puedes realizar hazañas intelectuales que dejarían pequeña a la obra de Einstein. -- En teoría, en la practica estoy demasiado ocupada intentando ayudar a la gente como para desarrollar grandes teorías científicas, por lo menos de momento. -- ¿Cómo que no? ¿Y el desarrollo de la teoría en que se basa el propuesto plan espejo no lo es?. Si es capaz de hacer lo que has dicho que puede hacer, desde luego si que es una gran construcción teórica, y además de una importancia capital. Lastima que no puedas atribuirte el mérito personalmente y debas dejárselo a Enrique. -- El mérito, si pero también la culpa si es plan fracasa -- Has dicho que es casi seguro que tendrá éxito, lo único por decidir es como se activará finalmente. -- El riesgo de fracaso es muy bajo ciertamente, pero no es nulo, no conviene olvidarlo. Siempre cabe la posibilidad de que todo falle, aunque en realidad no tengo otra alternativa que seguir adelante, porque de lo contrario otros lo aplicaran mas temprano que tarde para sus ambiciones de dominio. He de cortar esa posibilidad de la forma mas tajante posible. -- Lo comprendo, lo que no veo tan claro es porque siendo tan superior a nosotros en todos los aspectos te encariñes de un torpe y limitado ser humano como yo mismo. Comprendo que sientas gratitud hacia Enrique e Irene por haberte creado y enseñado y a Posadosky y Lutving por haberte salvado la vida, pero yo, ¿que te he dado para que me quieras?. -- Cariño y sinceridad y para mi eso es suficiente, me has dado mas de lo que puede darme el resto de la gente. -- ¿Lo dices en serio? -- Totalmente. Alberto se sonrió débilmente antes de continuar. -- Sin embargo porque quererme a mi y simpatizar tanto con los demás como para desear ayudarles. Si ellos son tan inferiores a ti, porque no despreciarlos como torpes e ineptos o por lo menos ignorarlos. -- Porque si lo hiciese no seria tan superior como dices, seria como ellos pero mas rápida y fuerte, solo eso. Para ser superior de verdad hay que serlo en todo, incluso en la capacidad de compadecerse. -- Te compadeces de nosotros. -- La verdad es que de la mayoría de la gente, así es, son tan mezquinos y de limitado pensamiento, porque les veo tan débiles siento la necesidad de protegerlos, no olvido quienes han sido indirectamente los responsables de mi creación. Si no existiesen los hombres mi existencia no seria posible. Un ordenador de Ertaz no puede aparecer por selección natural por la buena razón de que el Ertaz no existe en la naturaleza, es una creación totalmente artificial. -- ¿También te compadeces de mi?. -- En parte si, en parte compadezco a todo el mundo, pero a algunos los compadezco mas que a otros, y vosotros sois de los que menos tengo que compadecer, pues sois especialmente competentes. -- Porque somos de los menos torpes e irracionales de los humanos. -- Si, se podría definirlo así. Alberto volvió a reírse, ahora con algo mas de fuerza. -- Y yo que quería protegerte y cuidarte, eras tu la que me protegía y cuidaba de mi. -- No, tu también me protegías a mi, y me hacías sentir querida y eso es muy importante. -- Solo porque ayudaba a hacer mas creíble tu ficción sobre tu naturaleza humana. -- No, eso nunca me importó, eras tu lo que me importas, no necesitaba un noviazgo para seguir pareciendo humana. -- Nos conocer bien, por eso te es tan fácil fingir ser humana. -- Os conozco mas bien de lo que os conocéis vosotros mismos, en parte porque os veo desde fuera y por tanto no estoy influida por vuestros prejuicios. Si, os conozco bien, demasiado para

no querer ayudaros, sobre todo sabiendo que lo puedo hacer. Pero en realidad apenas necesito fingir, en la mayor parte de las cosas no somos tan diferentes, después de todo vivo en un mundo donde todo lo demás es obra del ser humano, sois vosotros de quienes lo he aprendido todo, o casi todo, así que inevitablemente mi experiencia y mi pensamiento esta tomado del vuestro. Nos parecemos lo suficiente como para que apenas necesite fingir realmente, me basta con no mencionar mi verdadera naturaleza. Además vuestra memoria y percepción es tan imperfecta en comparación con la mía que me resulta fácil engañaros, en realidad mas fácil de lo que pensaba en un principio. -- Pero tu forma de ser, tu personalidad no es fingida, no puede serlo teniendo en cuenta tu vulnerabilidad a la autocontradicción. -- Así es, mi personalidad es tal como la muestro. -- Así que solo engañas respecto a tu naturaleza, no sobre como eres. -- Cierto. -- Me alegro de saberlo, aunque a decir verdad solo tengo tu palabra al respecto. -- Sé que no crees realmente que te este engañando respecto a lo que siento por ti. -- No, no lo creo, tu vulnerabilidad a la contradicción lo impediría, a no ser claro que esa vulnerabilidad fuese fingida. -- No lo es. -- Pero una cosa es que tu lo digas y otra muy distinta que lo sea. Me has contado tu historia pero que te crea no significa que sea verdad. -- Cierto. -- Pero si tu personalidad es una ficción, he de reconocer que es la ficción mas encantadora que haya experimentado nunca. Melisa se sonrió débilmente al escuchar eso. -- Como tu no puedes vislumbrar mis verdaderos sentimientos como yo puedo ver los tuyos, para ti en cierto modo todo se reduce a una cuestión de fe, crees en mi o no. -- Creo en ti. -- Me gustaría poder darte una prueba fehaciente de que mis sentimientos son sinceros, pero no sé como. No puedo hacer que leas mis pensamientos. -- Pero puedo deducirlo de tu comportamiento, mientras te comportes como si me quisieses tendré que creer que me quieres. -- Nunca haré nada que pueda hacerte dudar sobre mi sinceridad al respecto. Soy tal como me muestro, ahora sin engaños sobre mi naturaleza, pero si quieres podemos seguir discutiéndolo mañana. Ahora creo que va siendo hora de que te vayas a dormir, es muy tarde y mañana tenemos mucho que hacer, si sigues en vela terminaras agotado. -- Tu no necesitas dormir, solo finges que duermes para no hacerme sospechar. -- No puedo seguir en plana actividad si quiero que tu concilies el sueño, después de todo estamos en la misma habitación. Además he de mantener la ficción de cara al exterior. Seguiré fingiendo que duermo. -- Como quieras, mañana seguiremos hablando, la verdad es que no me has decepcionado, pensaba que eran una persona interesante y has resultado serlo más de lo que nunca podía haber imaginado.