EL DIBUJO DEL DESPLIEGUE DE LO INTENSO A LO TENUE

Cuando nos referimos a algo apetitoso estamos de una u otra forma aludiendo al acto de comer, y son nuestras sensaciones o lo que percibimos al momento de comenzar a comer algo, lo que nos dice lo ape-titoso que resulta algo. Son los sentidos los que nos guían en el camino de lo apetecible y son estas per-cepciones visuales, olfativas, gustativas, táctiles y au-ditivas, las que finalmente nos motivan a probar algo. Es en este contexto en que surge el discurso que se expondrá continuación y que nos lleva a la elaboración de un bocado frutoso que posee singularidades (de la fruta) que le aportan lo apetitoso.

LO OBSERVADO

Se comienza por observar la fruta para encontrar las singularidades de esta, lo que en esencia la hace fruta. De lo observado de las frutas se recogen los valo-res que resultan similares en ellas, como su textura (ya sea la exterior o interior), sus dimensiones casi geométricas y los dibujos que esta traza tanto en su superficie como los que realizan desde su interior y que se puede apreciar al cortar la fruta.

En frutas como el durazno, peras, kiwis y frutillas se puede observar cómo estas se van extendiendo desde su interior, donde la intensidad de la fruta está en su mayor punto, sus colores y texturas se tornan más intensos y van fraguando hasta un punto donde se vuelven a intensificar hasta llegar a su cascara.

DESARROLLO DE IDEA

Las primeras experimentaciones que se hacen del bo-cado, son con la intensión de hacer aparecer una nueva fruta con lo observado y rescatado anterior-mente, y mientras se elabora se van recabando valores que hacen del bocado apetitoso, pero esto ocurre al percatarse de las falencias del propio bocado. Valores como lo consistente y estable, y también el juego de colores en el bocado son elementos donde se percibe situaciones de apetencia.

La propuesta va avanzando con la idea de mostrar lo apetecible en lo visual del bocado, usando lo observado

de las frutas y de las faenas realizadas en estas.

El bocado se elabora pensando en que es lo intenso y lo atenuado lo que nos trae esto apetecible de las frutas, además el cambio en el formato de la es-tructura nos brinda la estabilidad visual para invitar a manipular el bocado.

El bocado se va adecuando a las distintas conclusio-nes que nos llevan a lo apetente, el formato cambia en razón de la búsqueda de una trama en el bocado, ya que parece que esta es fundamental para nuestra percepción visual de lo apetecible.

La trama se va conformando dando importancia a los colores, ya que estos nos hacen percibir cosas funda-mentales en la apetencia como lo son la frescura y lo

cálido, valores que nos estimulan hacia lo apetecible.

Este bocado solo se centra en percepción visual a la hora de buscar lo apetitoso, dejando todos los otros sentidos, para conforme ir avanzando poder ir haciéndolos surgir.

La trama va apareciendo a medida que se comienza a dibujar nuevamente la fruta, esta vez centrándose en los colores de estas, las que se observa que se intensifican y se van atenuando. Los dibujos de la trama tratan de centrar lo intenso para ir aligerando y cambiando su color mientras se dirigen a los extremos.

Parece ser que la geometría no es fundamental cuando buscamos lo apetitoso, no es propio de la fruta ya que se termina por forzar una forma que termina por no ser apetitoso y no trae los rasgos fundamentales

de la fruta.

¿ENTONCES CUALES SON ESTOS RASGOS FUNDAMENTALES?

Cuando se observa la fruta, desde el comienzo de este proceso, se tiene en consideración el dibujo que este despliega con sus colores y trazos; y que es formado por el crecimiento de las frutas. Este dibujo natural es el que quiere encontrar, y se propone una forma de poder ordenar esta trama or-denando fracciones de fruta. La trama resultante se observa más provocativa, donde las partes exteriores y más tenues son la primera capa, luego por enci-ma se coloca una segunda más intensa, y se finaliza con la capa más intensa en el centro. En esta trama la geometría aún resulta poco natural y resta valor al bocado por lo cual se sigue en la obtención de lo fundamental de los rasgos de la fruta.

Para lograr llegar a estos rasgos fundamentales que se han estado trabajando, se va hacia el dibujo mismo de la fruta, y de los trazos que dan forma al desplegarse de la fruta. Este trazo del despliegue comienza desde su interior y se va abriendo hacia el exterior como se puede notar en lo antes dibujado de las frutas.

Con estos trazos es que se proyecta la trama del bocado, que se construirá con los mismos colores que nos proporciona cada fruta, moviéndose desde lo intenso a lo tenue como ha sido continuamente pro-puesto.

Los trazos se superpondrán y formaran la trama ape-

titosa de la fruta.

Javier Zambra Taller Acto y Celebración 11.04.2016

DIBUJO DEL DESPLIEGUE DE LA FRUTA DESDE SU INTERIOR,

LA FRUTA SE EXTIENDE HA-CIA EL EXTERIOR Y ESTE QUEDA PLASMADO EN EL DIBUJO QUE ESTE FORMA EN SU INTERIOR.

PROPUESTA DE BOCADO, DE ESTRUCTURARA GELATINOSA Y ARMADA EN CAPAS, DONDE EN EL INTERIOR APARECE LO IN-TENSO QUE SE VA ATENUANDO HACIA SU EXTERIOR.

PRIMEROS ESBOZOS DE LA TRAMA PARA EL BOCADO, DONDE SE BUSCA ENCON-TRAR EL ORDEN CORRECTO QUE NOS TRAIGA LO APETI-TOSO DE LA FRUTA.

PROPUESTA DE BOCADO, DON-DE LA FRUTA SE TOMA CON SU FORMA NATURA, SE INTERVIE-NE CON CORTES Y SE ORDENA PARA LLEGAR A UNA ESTRUC-TURA APETITOSA.

LA TRAMA CONTIENE PI-LARES DESDE DONDE LO INTENSO VA ATENUANDO HACIA EL EXTERIOR.

DIBUJO DEL DESPLIEGUE DEL INETERIOR DE LA NARANJA, DONDE SE OBSERVAN LOS TRA-ZOS DE E¿DE ESTA.

SE VUELVE A OBSERVAR LO ESENCIALES DE LA FRUTA, EL DIBUJO Y LA TONALIDAD, ¿DONDE ESTA LO APETITOSO DE LA FRUTA?

TRAZOS DE LA FRUTA, QUE SE CONSIDERA ES LO SINGULAR QUE NOS TRAE LO APETITOSO DE LA FRUTA.

PROPUESTA DE BOCADO, DONDE TRES TRAZOS DE FRUTA CON-FORMAN UNA UNIDAD NUEVA DE FRUTA.

TOTALIDAD DE LA FIGURA DEL BOCADO, DONDE LAS REPETI-CIONES CONFORMAN LA IMAGEN FINAL DEL BOCADO.

PARA CONSTRUIR LA TRAMA EN 3 DIMENSIONES, SE ELABORA UN CONTRA-MOLDE DE PASTA PARA MOLDEAR, CON EL QUE SE CONSTRUYE LOS TRAZOS DE LA FRUTA.

POR MEDIO DEL TERMO-LAMINA-DO, SE OBTIENE LA PIEZA CON LA QUE SE MOLDEARAN LOS TRAZOS DEL BOCADO QUE VAN TANTO INTERNA COMO SUPERFI-CIALMENTE

LA PROPUESTA DE BOCADO SE FINALIZA, LOS TRAZOS QUE-DAN INSERTOS DENTRO DE LAS CAPAS DE LA GELATINA Y AL PASAR LA LUZ POR EL BOCA-DO O AL CORTARLO SE PUEDE OBSERVAR ESTA SUPERPOSICIÓN DE TRAZOS.

FIGURA FINAL DEL BOCA-DO, EL BOCADO SE REPITE Y FORMA UN TOTAL DONDE LA FIGURA SE EXPANDE AL IGUAL QUE EN SU FIGURA INDIVIDUAL.