El Comienzo de la Industralización en el Noreste de México

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¡JZCJ'd&K Q 37. EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIÓN EN EL NORESTE DE MÉXICO* Guillermo Beato** y Dominico Síndico*** EN EL contexto latinoamericano hay pocas regiones que desafíen la idea comúnmente aceptada del desarrollo dependiente y el comienzo tardío del proceso de crecimiento industrial después de la gran crisis de 1929. El noreste de México, con su capital industrial en Monterrey, parece ofrecer el mejor ejemplo de un gran impulso industrial inicia- do á fines del siglo xix. Durante los dos decenios de 1890 a 1910 empezaron a operar en esta región importantes complejos industria- les, básicamente fábricas metalúrgicas y siderúrgicas, creando una red impresionante de actividades relacionadas y permitiendo un crecimiento considerable de la demanda local de bienes de consumo y productos semimanufacturados. Las estadísticas de la producción industrial revelan la importancia del proceso: durante los años 1897, 1898 y 1899 el sector metalúrgico de Nuevo León produjo bienes por valor de 50 847 178 pesos. Esto representa el 23.5% del total de la producción mexicana, convirtiendo a Nuevo León en el estado más importante del país. 1 Para 1902 Nuevo León ocupaba también el primer lugar en lo relacionado con el total de la producción industrial, con 13.5% de la producción nacional. 2 La mayor parte de la producción industrial regional se centraba en Nuevo León, básicamente en Monterrey, su capital, pero este análisis se aplica en un contexto más amplio, ya que Monterrey y su industria eran sólo la cabeza visible de una región económica más grande, donde las relaciones comerciales se entrelazaban estrechamente con la minería, el transporte y la fuerza de trabajo. Por lo tanto, convendrá considerar todo el noreste, incluyendo los estados de Tamaulipas, * Este articulo es una edición revisada de un ensayo presentado en la IX Reunion Nacional LASA en Bloomington, Indiana, que se publicó primero en The Americas, vol. 39, num. 4, abril, 1983, pp. 499-518 [traducicn del inglés de Eduardo L. Suárez). ** Instituto Nacional de Antropología e Historia, México. *** Universidad de Nuevo León, Monterrey, México. 1 Mario Cerutti, "Concesiones estatales, industrias y modalidades del capitalismo en Monterrey (1890-1910)", Cathedra, núnis. 12-13 (abril-septiembre de 1979), p. 47. 2 Ibid., p. 46. 180 EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIÓN 181 Coahuila, y partes de Durango y San Luis Potosí, como unidad básica del análisis de este trabajo. Este artículo se ocupará de las peculiaridades, los límites y las posibilidades en la primera etapa del desarrollo industrial de Monte- rrey; también tratará de hacer inteligible este proceso desde la pers- pectiva general del crecimiento industrial internacional a fines del siglo xix. El estudio partirá del supuesto de que todo caso particular tiene su lugar en una estructura más amplia y que, por lo tanto, sin negar las particularidades de cualquier situación, siempre es posi- ble entenderlo como parte de un proceso más general. En el caso estudiado aquí se prestará atención a los elementos que parecen peculiares de la experiencia regiomontana, y también a los ele- mentos que nos permitan relacionar esta peculiaridad con el contexto general del crecimiento industrial y el desarrollo económico inter- nacional. Es muy significativo el periodo escogido para este estudio, 1890- 1902, ya que en éste se encuentra la primera fase del proceso de industrialización. Por lo general se acepta la fecha de 1890 como el punto de partida; 3 en cambio, la fecha final, 1902, requiere más explicación. Una de las hipótesis básicas de este trabajo es que la producción industrial del noreste de México, entre 1890 y 1902, fue absorbida casi por completo por el mercado extemo, destacando el estadunidense y el británico En 1903 la Compañía Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, fundada en 1899 con un capital de 10 millones de pesos, empezó a producir acero destinado en su mayor parte al mercado nacional. Por supuesto en 1903 no ocurrió ninguna conversión inmediata del mercado extemo al mercado nacional, ni puede ligarse un fenómeno de tal magnitud a un sola compañía, pero creemos que la Fundidora rompió un patrón que se había establecido hasta entonces. Por lo tanto, 1902 puede considerarse como el último año de la primera fase del desarrollo industrial. A fin de entender plenamente el proceso de industrialización regional, debemos echar por lo menos una ojeada rápida a la historia anterior de la región. Desde los años de las guerras de independencia, el noreste de México se caracterizó por un proceso de crecimiento económico y demográfico lento pero continuo, debido sobre todo al 3 Véase, entre otros, a Isidro Vizcaya Canales, Los orígenes de la industrialización de Monterrey (1867-1910), Monterrey, Librería Tecnológico, 1971; y Alexander Saragoza, The Formation of a Mexican Elite: The Industrialization of Monterrey, Nuevo León, 1880-1920, tesis doctoral inédita, Universidad de California en San Diego, 1978.

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El Comienzo de la Industralización en el Noreste de México

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  • JZCJ'd&K Q

    37. EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN EN EL NORESTE DE MXICO*

    Guillermo Beato** y Dominico Sndico***

    EN EL contexto latinoamericano hay pocas regiones que desafen la idea comnmente aceptada del desarrollo dependiente y el comienzo tardo del proceso de crecimiento industrial despus de la gran crisis de 1929. El noreste de Mxico, con su capital industrial en Monterrey, parece ofrecer el mejor ejemplo de un gran impulso industrial inicia-do fines del siglo xix. Durante los dos decenios de 1890 a 1910 empezaron a operar en esta regin importantes complejos industria-les, bsicamente fbricas metalrgicas y siderrgicas, creando una red impresionante de actividades relacionadas y permitiendo un crecimiento considerable de la demanda local de bienes de consumo y productos semimanufacturados. Las estadsticas de la produccin industrial revelan la importancia del proceso: durante los aos 1897, 1898 y 1899 el sector metalrgico de Nuevo Len produjo bienes por valor de 50 847 178 pesos. Esto representa el 23.5% del total de la produccin mexicana, convirtiendo a Nuevo Len en el estado ms importante del pas.1 Para 1902 Nuevo Len ocupaba tambin el primer lugar en lo relacionado con el total de la produccin industrial, con 13.5% de la produccin nacional.2

    La mayor parte de la produccin industrial regional se centraba en Nuevo Len, bsicamente en Monterrey, su capital, pero este anlisis se aplica en un contexto ms amplio, ya que Monterrey y su industria eran slo la cabeza visible de una regin econmica ms grande, donde las relaciones comerciales se entrelazaban estrechamente con la minera, el transporte y la fuerza de trabajo. Por lo tanto, convendr considerar todo el noreste, incluyendo los estados de Tamaulipas,

    * Este articulo es una edicin revisada de un ensayo presentado en la IX Reunion Nacional LASA en Bloomington, Indiana, que se public primero en The Americas, vol. 39, num. 4, abril, 1983, pp. 499-518 [traducicn del ingls de Eduardo L. Surez).

    ** Instituto Nacional de Antropologa e Historia, Mxico. *** Universidad de Nuevo Len, Monterrey, Mxico.

    1 Mario Cerutti, "Concesiones estatales, industrias y modalidades del capitalismo en

    Monterrey (1890-1910)", Cathedra, nnis. 12-13 (abril-septiembre de 1979), p. 47. 2 Ibid., p. 46.

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    Coahuila, y partes de Durango y San Luis Potos, como unidad bsica del anlisis de este trabajo.

    Este artculo se ocupar de las peculiaridades, los lmites y las posibilidades en la primera etapa del desarrollo industrial de Monte-rrey; tambin tratar de hacer inteligible este proceso desde la pers-pectiva general del crecimiento industrial internacional a fines del siglo xix. El estudio partir del supuesto de que todo caso particular tiene su lugar en una estructura ms amplia y que, por lo tanto, sin negar las particularidades de cualquier situacin, siempre es posi-ble entenderlo como parte de un proceso ms general. En el caso estudiado aqu se prestar atencin a los elementos que parecen peculiares de la experiencia regiomontana, y tambin a los ele-mentos que nos permitan relacionar esta peculiaridad con el contexto general del crecimiento industrial y el desarrollo econmico inter-nacional.

    Es muy significativo el periodo escogido para este estudio, 1890-1902, ya que en ste se encuentra la primera fase del proceso de industrializacin. Por lo general se acepta la fecha de 1890 como el punto de partida;3 en cambio, la fecha final, 1902, requiere ms explicacin. Una de las hiptesis bsicas de este trabajo es que la produccin industrial del noreste de Mxico, entre 1890 y 1902, fue absorbida casi por completo por el mercado extemo, destacando el estadunidense y el britnico En 1903 la Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, fundada en 1899 con un capital de 10 millones de pesos, empez a producir acero destinado en su mayor parte al mercado nacional. Por supuesto en 1903 no ocurri ninguna conversin inmediata del mercado extemo al mercado nacional, ni puede ligarse un fenmeno de tal magnitud a un sola compaa, pero creemos que la Fundidora rompi un patrn que se haba establecido hasta entonces. Por lo tanto, 1902 puede considerarse como el ltimo ao de la primera fase del desarrollo industrial.

    A fin de entender plenamente el proceso de industrializacin regional, debemos echar por lo menos una ojeada rpida a la historia anterior de la regin. Desde los aos de las guerras de independencia, el noreste de Mxico se caracteriz por un proceso de crecimiento econmico y demogrfico lento pero continuo, debido sobre todo al

    3 Vase, entre otros, a Isidro Vizcaya Canales, Los orgenes de la industrializacin

    de Monterrey (1867-1910), Monterrey, Librera Tecnolgico, 1971; y Alexander Saragoza, The Formation of a Mexican Elite: The Industrialization of Monterrey, Nuevo Len, 1880-1920, tesis doctoral indita, Universidad de California en San Diego, 1978.

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    muy influyente y las polticas econmicas no se supeditan a los intereses extranjeros. La situacin no estaba tan definida a fines del siglo pasado, pero la capacidad de la lite local para manejar las difciles relaciones con el capital nacional (fuera de Monterrey) e internacional es indudable."

    Los empresarios regiomontanos contaban con el apoyo guberna-mental a nivel local, mediante el otorgamiento de generosas exencio-nes fiscales cuando se creaban industrias o se ampliaban las existen-tes, y a nivel nacional, mediante la adaptacin del marco legal en el que habran de operar las empresas. A nivel local, el gobernador de Nuevo Len, Bernardo Reyes, vea con muy buenos ojos el otorga-miento de exenciones fiscales por periodos de cinco, diez e incluso veinte o treinta aos a las empresas industriales consideradas ben-ficas para el progreso del estado; la mayora de las compaas, ya fuesen locales, nacionales o extranjeras disfrutaban de tan generosas exenciones.12 Al mismo tiempo, la poltica se encargaba de reprimir duramente las organizaciones obreras y las huelgas.13 Adems, la modificacin de la legislacin comercial nacional refino de manera considerable a la sociedad annima (corporacin), el instrumento ms importante del proceso de industrializacin. La importancia de tal desarrollo es evidente si consideramos que en slo cuatro aos se elaboraron dos nuevos cdigos de comercio, uno en 1884 y otro en 1887, que se ocupaban del funcionamiento de las sociedades anni-mas, hacindolo ms flexible y facilitando los requerimientos legales de su formacin.

    Era urgente la legislacin de estos temas, ya que la clase de inversiones necesarias para la fundacin y operacin de empresas grandes, tales como las fundiciones, las plantas siderrgicas y los ferrocarriles, superaba la capacidad econmica de las empresas indi-viduales, las aventuras familiares o los grupos pequeos. Era nece-saria entonces la creacin de un instrumento que permitiera la reunin de grandes capitales entre el pblico, as como posibilitar a los grandes empresarios la diversificacin de sus negocios dividiendo sus activos mientras se mantena bajo control el mayor nmero posible de empresas.

    " Alexander Saragoza, "Elite Formation in Porfirian Mexico: Origins of the Grupo Monterrey", ensayo indito presentado en la IX Reunin Nacional LASA, Bloomington, Indiana, octubre de 1980.

    11 Mario Cerutti, "Concesiones estatales...", op. cit.

    13 Alexander Saragoza, The Formation of a Mexican Elite..., op. cit., pginas

    209-226.

    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 185 A fines del siglo xix la legislacin mexicana en lo relativo a las

    sociedades annimas rpflpjak tu t>lu o Inters general del gobierno en el desarrollo industrial del pas sino tambin la influencia econ-mica y poltica de los empresarios tanto nacionales como extranjeros. Se concluye que, por una parte, las clases dominantes podan influir en la legislacin de manera positiva para crear instrumentos legales adecuados a sus actividades econmicas, mientras que por otra parte usaban su influencia para que se implantara una legislacin prohibi-tiva de las actividades contrarias a sus intereses. Puede observarse un ejemplo de este aspecto negativo en las leyes promulgadas en el periodo de Daz contra las huelgas, aplicadas estrictamente por Bernardo Reyes en Monterrey durante la represin de la agitacin poltica d e l 903.M

    Sin embargo, no debe pensarse que las clases dominantes pudieran usar siempre su influencia para aplicar o modificar la legislacin a voluntad; tal manipulacin est siempre limitada por la relacin de fuerza entre clases sociales rivales, y tambin entre los sectores de las clases dominantes. Esta relacin dialctica, que limita el uso arbitrario de la legislacin, es la base de la idea mtica de la impar-cialidad de la ley. Se infiere entonces que la ley desempea, entre otras, por lo menos dos funciones vitales en una sociedad dada: ;') regula las relaciones entre los diversos grupos que integran, en un momento determinado, las clases dominantes que limitan la lucha interna, y //) institucionaliza las relaciones de fuerza en una sociedad dad, en un momento dado, entre clases sociales rivales. Esta concep-cin del papel de la ley implica que, cuando cambian las relaciones en el interior de las clases dominantes o entre diferentes clases, se hacen algunos esfuerzos a menudo exitosos para modificar la legislacin a fin de reflejar el nuevo equilibrio del poder. Por lo tanto, la ley no es una institucin sagrada, fundamentalmente esttica, sino un termmetro sensible al desarrollo de las relaciones sociales en el interior de la sociedad.

    A fines del siglo XIX la legislacin de las sociedades annimas sigui el patrn antes descrito, reflejando as la importancia de los empresarios y los intereses de otros grupos dentro de la clase domi-nante. Entre 1884 y 1887 se redujeron notablemente los requerimien-tos para la formacin de una sociedad annima, pero al mismo tiempo aumentaron considerablemente la extensin y la eficacia del control de los accionistas en la administracin.

    1" Ibid., pp. 222-224.

    1*

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    El aspecto ms importante de una sociedad annima era, y an es, la posibilidad de obtener fondos de un gran nmero de inversionistas mediante la emisin y la venta de acciones, El Cdigo de comercio de 1887 ofreca una alternativa para la formacin de una sociedad annima: la suscripcin pblica del capital social en su totalidad, o la suscripcin de dos o ms inversionistas que tambin deban firmar ante un notario un documento formal que contenia todas las especi-ficaciones requeridas por la ley para el funcionamiento de la socie-dad.15 Esta segunda opcin facilitaba la formacin de una sociedad annima, aunque era necesario que los fundadores de ordinario un pequeo nmero de empresarios ricos demostraran su capacidad para garantizaren su totalidad el capital mencionado en los documen-tos constitutivos. Varias empresas regiomontanas se fundaron de acuerdo con este procedimiento, entre ellas la Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, cuyo capital 10 millones de pesos fue suscrito en su totalidad por slo cuatro inversionistas: Antonio Basagoiti, Len Signoret, Eugenio Kelly y Vicente Ferra-ra.16 Este reducido procedimiento tenia las siguientes ventajas: f) haca innecesaria la publicacin de los estatutos de la sociedad annima, as como el registro notarial del acta de la primera asamblea general que deba contener dichos estatutos; y if) hacia tambin innecesaria la suscripcin pblica de las acciones, dejando asi a los fundadores originales en libertad para vender las acciones que haban suscrito pero no pagado, y manteniendo un control claro de la cantidad de las acciones vendidas y de los accionistas potenciales.

    Tal poltica era posible principalmente porque en el momento del registro de la sociedad annima los fundadores deban aportar, en efectivo, slo 10% del capital estipulado;17 por lo tanto, era posible que slo cuatro inversionistas registraran una sociedad cuyo capital ascenda a 10 millones de pesos aportando slo un milln de pesos todava una cantidad grande y vendiendo luego las acciones a otros inversionistas. Sin embargo, debe decirse que cuando el capital estipulado no eran tan grande, la sociedad annima se registraba a menudo con fondos mayores al 10% requerido. Asi ocurri con la Nuevo Len Smelting Refining and Manufacturing Co., una corpo-racin cuyo capital total ascenda a 500 mil pesos y que se registr

    1S Cdigo de comercio, Mxico, 1887, art. 166.

    , 6 Archivo General del Estado de Nuevo Len, Seccin de Notaras. En adelante

    AOKNI. Pacheco, 1900, folios 392-414. >7 Cdigo de Comercio, 1887, art. 170.

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    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 187 con el 25 % de esa suma como capital inicial; adems, apenas tres das ms tarde se aport otro 25%.18 Otro ejemplo es la Compaa de Fundicin de Plorto y Manufacturera de Monterrey, que present el 100% de su capital 250 mil pesos en el momento de su crea-cin." Por supuesto, entre mayor fuera el capital, menores seran las posibilidades de que se aportara un alto porcentaje del total disponible en el momento del registro.

    El suavizamiento de las formalidades requeridas para la formacin de una sociedad annima permita su uso generalizado para grandes empresas a fines del siglo xix, pero el legislador trat tambin de garantizar los intereses de los inversionistas potenciales mediante un sistema moderno y efectivo de control de las operaciones de los funcionarios y administradores de la corporacin. Este control era importante porque tanto el tener que tomar decisiones rpidas como el aplicar una poltica corporativa general haca necesaria la concentra-cin de un alto grado del poder de decisin en los rganos adminis-trativos, principalmente en manos de la junta directiva y del presi-dente. En el Cdigo de comercio d 1884 las auditoras internas estaban a cargo de una junta de inspeccin, integrada por cinco miembros elegidos por la junta directiva.20 Esta solucin no era satisfactoria porque el control era ejercido por auditores elegidos por el mismo rgano, que deba ser controlado, lo que poda generar sospechas. Esto se modific en el Cdigo de 1887; dejaba la decisin del nmero de auditores a la discrecin de los estatutos de la corpo-racin y otorgaba a la asamblea general la responsabilidad de su eleccin;21 de este modo los accionistas ejercan de manera ms eficaz el control en los administradores.

    Mientras que las auditoras internas garantizaban el control de las operaciones de la corporacin, la ley trataba tambin de crear un mecanismo eficiente para la proteccin de la buena fe de los indivi-duos o las compaas que habran de realizar negocios con la corpo-racin. En el momento de la fundacin deba crearse un fondo de reserva, separando cierto porcentaje de las utilidades anuales de la compaa. El Cdigo de 1884 era algo confuso en este punto, ya que la propia corporacin deba determinar el monto del fondo, aunque se especificaba que tal monto deba ser razonable, considerando su

    8 AGENL, Pacheco, 1890, escritura 164. I Ibid., 16 de abril de 1896. * 20 Cdigo de comercio, Mxico^ 1884, art. 577. 21 Ibid., 1887, art. 198.

    Iff!

  • I

    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 189

    lnea de actividad; adems, se estipulaba que por lo menos 10% de las utilidades se separara cada ao hasta acumular el monto total del fondo,23 F,l Cdigo CIP 1887 ero tuno prct-iou cu cuaiilu a U

  • --T- vrV*^

    -1 a

    Cuadro 2. Participacin en el capital y en la administracin de ciertas familias en la Compaa Minera Fundidora y Afinadora de Monterrey, 1890-1900

    Ao Capital (pesos)

    Familias p*(1900)

    1890 300000 *

    Capital Porcentaje

    1899 600000

    Capital Porcentaje

    J 1900

    3 000000

    Capital Porcentaje

    FERRARA Antonio Miguel Vicente M

    10000 3.3 51000 8.5 255 000 8.5 150 000b 50 50000 8.3 250000 8.3 36000 12 120000 20 600000 20

    MADERO

    MILMO

    Ernesto (Hnos.) Evaristo

    Daniel Patricio (hijo) Patricio V.

    M

    9000

    9000

    3

    3

    13 500

    16000 3000

    2.2

    2.7 0.5

    20000

    40 000

    67 500

    80 000

    0.7

    13

    22

    2.7

    ZAMBRANO

    Adolfo Eduardo Ildefonso

    S y M

    M

    4000 3000

    0.7 0.5

    20 000 0.7

    Onofre

    Total de familias Otros accionistas

    6000

    220 000 80 000

    2

    73.3 36.7

    6000

    311500 288 500

    1

    51.9 48.1

    30000

    1385 000 1615 000

    1

    46.2 53.8

    FUENTE: AOENL, Pacheco, 2 de noviembre, 1899; Pacheco, 1900, Escr. 212. * Posicin en la Compaa: M: miembro del directorio, S: secretario. b Con Vicente Ferrara.

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    LA REFORMA Y EL PORFIRIATO

    nistrativo en los empresarios locales. Debe sealarse que la partici-pacin relativamente baja de los individuos en la Compaa Carbo-nfera de Monterrey (vase cuadro 1) se debe en gran medida al hecho de que la mayora de las acciones de esta compaa eran propiedad de otras compaas, que por lo general estaban controladas por el mismo grupo de familias. El cuadro 3 presenta la lista completa de los accionistas de la citada Compaa Carbonfera.

    Cuadro 3. Accionistas de la Compaa Cabonfera de Monterrey, 1902

    Capital (pesos) Nmero de acciones

    i Valor de cada accin ' -. . -f '*" ": Accionistas

    \ Total de compaas Compaa Mexicana de Carbn y Piedra

    :, Fundidora de Fierro y Acero fj , Cervecera Cuauhtemoc ifer! Minera Fundidora y Afinadora {T Molinos de Ci l indros de Monterrey

    Fbrica de Mantas La Industrial t ! Fbrica de Vidrios y Cristales

    Fbrica de Mantas La Fama j Ladril lera Unin j Total de individuos S Vicente Ferrara

    Toms Mendirichaga Valentn Rivero Samuel Cant Trevio Jos Annendriz Francisco G. Sada Femando Martnez Roman Chavarri

    | Constantino de Famosa Isaac Garza

    ' Femando Izaguirre fj: Adolfo Zambrano

    1 000 000 10000

    100

    Capital (>eso.\)

    772 000 250 000 198 000 100 000 98 000 60 000 23 000 23 000 10000 10000

    228 000 65 000 50 000 30 000 30 000 20 000 10000 10000 5 0 0 0 2 0 0 0 2 0 0 0 2000 2 0 0 0

    l'orcrntaje

    77.2 25 19.8 10 9.8 6 2.3 2.3 1 1

    22.8 6.5 5 3 3 2 1 1 0.5 0.2 0.2 0.2 0.2

    FUEKTE: AGENI.. Prez. 1902, folio 191-213

    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 193

    Tambin se formaron sociedades annimas para las actividades mineras, aunque no con tanta frecuencia como en el caso de las empresas industrales. En realidad, la minera demostr durante largo tiempo una combinacin interesante de diferentes modos de organi-zacin desde la propiedad individual, a menudo ligada con familias de conocidos empresarios locales - t a l e s como los Ferrara, Madero y Zambrano, y a importantes corporaciones nacionales y extranje-ras como la Mexican Lead Co., Compaa Minera Fundidora y Afinadora; Guggenheim y Compaa; Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, entre otras. Estas compaas controlaban decenas y a veces centenares de minas de diferentes niveles de importancia.27 Las posibilidades de integracin vertical de las activi-dades mineras y metalrgicas condujeron al crecimiento de la miner a y contribuyeron al incremento de las oportunidades de empleo en la regin. Ms importante an era el hecho de que la minera realmente era un negocio regional, ya que comprenda operaciones en Durango, Coahuila, Tamaulipas, San Luis Potos, Aguascalientes e incluso Chihuahua. Aunque el presente artculo no se ocupara en detalle de la minera o los ferrocarriles, debe destacarse que la expansion de la red ferroviaria, en direccin norte-sur y este-oeste, hizo de Monterrey un centro de comunicaciones de primera importancia. Al mismo tiempo, la minera condujo en la mayora de los estados antes men-cionados al desarrollo de un amplio mercado regional de materias primas, semimanufacturas y bienes de consumo.2*

    Paradjicamente, el crecimiento de este mercado regional y el vigor de los empresarios locales se deban en gran medida a la importancia que los bienes particulares producidos -mate r i as primas y semimanufacturas tenan en esos aos para el creci-miento econmico de los Estados Unidos y de la Gran Bretaa, donde se venda la mayor parte de la produccin final de Monterrey.

    Debe sealarse que estas caractersticas son validas solo para el periodo estudiado - 1 8 9 0 - 1 9 0 2 - , ya que poco tiempo despus la Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey (fundada en 1899, pero en operacin apenas en 1903) produca bsicamente para el mercado interno, en particular para el desarrollo de los ferrocarriles y la construccin de puertos, aunque indirectamente estas actividades

    27 Memoria presentada por el gobernador del estado de Suevo Leon, Monterrey, Imprenta del Gobierno, 1904. , .

    2 Alexander Saragou, The Formation of a Mexican Elite..., op at, pp. 76-8J.

    m

  • *

    194 LA REFORMA Y EL PORFIRIATO

  • 196 LA REFORMA Y EL PORFIRIATO

    y

    los derechos exclusivos para la distribucin de los metales produci-dos por la Compaa Minera Fundidora y Afinadora de Monterrey.33

    La produccin metalrgica dominaba el campo industrial de la regin, ya que generaba un porcentaje muy grande de su produccin industrial y movilizaba capitales enormes. Esto originaba tambin algunas actividades secundaras. Por lo tanto, debe sealarse que un nmero muy reducido de empresas produca ms de 90% del valor industrial regional, pero la red econmica del perodo inclua tambin muchas actividades que no eran suficientemente importantes para estar representadas en una muestra estadstica y que sin embargo ayudaron a crear una regin desarrollada integrada a largo plazo.

    La mdula industrial de Monterrey se construy durante el decenio de 1890, cuando se establecieron seis fundiciones.34 Su nmero puede reducirse a slo cuatro grandes empresas, de las que slo tres opera-ron efectivamente en el periodo de este estudio, ya que la Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey apenas empez a producir en 1903. Como se mencion antes, ese ao se consider como el punto divisorio entre el periodo inicial de industrializacin y un segundo periodo, ya maduro. Entre las tres compaas restantes, la Gran Fundicin Nacional Mexicana era la ms importante en lo que se refiere al valor de la produccin, seguida de la Compaa Minera Fundidora y Afinadora de Monterrey. En 1902, estas dos compaas produjeron 22 298 254 pesos, o sea 78.3% del valor total de la produccin industrial del estado de Nuevo Len.35 El valor de la produccin de la ltima fundicin considerada, la Compaa Fun-didora de Fierro y Manufacturera de Monterrey, apenas ascendi a 258 mil, pero aunque era mucho menor que las otras dos fundiciones, debemos tomarla en cuenta porque fue la primera industria de Mon-terrey que produjo mquinas y refacciones, una actividad que de-muestra la importancia y el avanzado proceso de industrializacin.36

    Durante el periodo de 1899-1902 crecieron rpidamente las gran-des fundiciones. La Gran Fundicin Nacional Mexicana, propie-dad de la Guggenheim (cambi su nombre al de American Smelting and Refining Company o ASARCO, con el cual sigue operando en la

    Mlbid., 1891, folios 29-35. 3 4

    Tales fueron: la Compaa Minera, Fundidora y Afinadora de Monterrey; la Nuevo Len Smelting Refining and Manufacturing Co. Ltd.; la Monterrey Foundry and Machine Company, la Compaa de Fundicin de Fierro y Manufacturera de Monterrey; la Compaa Fundidora de Fierro y Acero de Monerrey, y la Gran Fundicin Nacional Mexicana.

    3 5 Memoria..., op. cit.

    36 Mario Cerutti, "Concesiones estatales...", op. cit.

    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 197

    actualidad), aument el valor total de su produccin de 10 624 531 a 13 859 914 pesos, lo que implic un incremento de 30.4% en cuatro aos, La Compaa Minera Fundidor y AfinndRrt do Monterrey creci con mayor rapidez an: de 5 817 736 a 8 438 914 pesos durante el mismo periodo, o sea 45%,37 debido sobre todo a la incorporacin del proceso de refinacin, como vimos antes. En 1902 estas dos compaas aportaban 78.3% del valor total de la produccin industrial de Nuevo Len y empleaban a 11.5 % de la fuerza de trabajo industrial del estado. El cuadro 4 presenta los datos detallados de la produccin industrial de Nuevo Len y nos permite entender las caractersticas estructurales de su proceso industrial.

    La ciudad de Monterrey aportaba 91.4% del total de la produccin industrial, aunque slo absorba 32.7% de la fuerza de trabajo. Esto ocurra porque la composicin orgnica del capital era muy diferente en la ciudad y en el resto de la regin; la produccin industrial era intensiva en capital en Monterrey e intensiva en mano de obra en las otras reas. En efecto, puede observarse que todas las fundicio-nes, cerveceras y vidrieras se establecieron en el rea de Monte-rrey, mientras que en el campo con la excepcin de unas cuantas fbricas textiles, que tambin eran intensivas en mano de obra se relacionaban con la agricultura todas las dems actividades indus-triales, siendo en su mayor parte ingenios azucareros o molinos de granos.38 Haba una clara brecha tecnolgica entre las dos zonas, y las pequeas industrias rurales no tenan la capacidad necesaria para modernizarse y, en consecuencia, tenan que utilizar las tcnicas tradicionales.

    Considerando las otras nueve grandes empresas de la zona de Monterrey (vase cuadro 4), se observa fcilmente la diversificacin de las actividades. Particularmente importante era la Cervecera Cuauhtemoc, an hoy da una de las principales empresas de la ciudad, que tambin estimulaba la economa local con su gran de-manda de botellas, corcholatas, empaques y servicios de distribu-cin.39 Debe mencionarse tambin que aunque la Fbrica de Vidrios y Cristales de Monterrey, fundada en 1899, no aparece en nuestras estadsticas debido a su baja produccin en el periodo estudiado, habra de constituir otro pilar del desarrollo industrial contemporneo de Monterrey. En realidad, varias de las principales empresas indus-

    37 Memoria..., op. cil.

    38 bid. 3 9

    Alexander Saragoza, The Formation of a Mexican Elite.. op. cit., pp. 91-92.

    t

    1

  • IS'* ' I4; 198 Jf LA REFORMA Y EL PORFIRIATO

    Cuadro 4. Produccin industrial y fuerza de trabajo en Nuevo Len, 1902

    Total de Nuevo Len Total de Monterrey Total de 16 grandes

    compaas

    Tres fundiciones de Monterrey

    American Smelting Minera Fundidora y

    Afinadora Fundidora de Fierro

    y Manufacturera Otras nuevas compaas

    de Monterrey Cervecera Cuauhtemoc Fbrica Apolo Fbrica de Clavos

    de Alambre Fbrica de Ladrillos

    de J. A. Robertson La Reinera (fbrica

    de jabn) Compaa Industrial de

    Monterrey (textil) Ca. L. E. & F. M.

    (electricidad) Ca. Industrial de Artculos

    de Metal Laminado Compaa Ladrillera Unin

    Cuatro compaas de fuera de Monterrey

    El Porvenir (textil) Molino de Trigo de Valentn Rivero La Fama (textil) La Leona (textil)

    Valor de la produccin industrial

    (pesos) 28 475 025 26 034 413

    26 185 781

    22 556 254 13 859 340

    8 438 914

    258 000

    2 606 975 900 000 444 898

    300 000

    250 000

    226 651

    175 426

    140 000

    98 000 72 000

    1 022 552 480 000

    258 000 145 000 139 552

    Porcentaje

    100 91.4

    91.9

    79.2 48.7

    29.6

    0.9

    9.2 3.2 1.6

    1.1

    0.9

    0.8

    0.6

    0.5

    0.3 0.2

    3.6 1.7

    0.9 0.5 0.5

    Nmero de trabajadores

    12 172 3 983

    3 6 1 5 a 3 655

    1 550 1 000

    400

    150

    1 355 550 200

    35

    250

    17

    130

    53

    60 60

    710 a 750 470

    30 a 40 120

    90a 110

    1'orcentaje

    100 32.7

    29.6 a 30

    12.7 8.2

    3.3

    1.2

    11.1 4.5 1.6

    0.3

    2.1

    0.1

    1.1

    0.4

    0.5 0.5

    5.8 a 6.2 3.9

    0.2 a 0.3 1

    0.7 a 0.9

    FuiiNn;: Memoria presentada por el gobernador del estado de Nuevo Len, Monte-rrey. Imprenta de Gobierno, 1904.

    EL COMIENZO DE LA INDUSTRIALIZACIN 199

    trales que todava continan en actividad se crearon a fines del siglo pasado: la ASARCO, la Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, la Cervecera Cuauhtemoc y la Fbrica de Vidrios y Cristales de Mon-terrey. Por lo tanto, se entiende fcilmente la importancia del periodo estudiado para el desarrollo general de la ciudad.

    La muestra de grandes empresas que aparece en el cuadro 4 incluye tambin cuatro compaas ubicadas fuera de Monterrey; estas eran las nicas cuatro empresas cuya produccin tenia un valor mayor que el de la ltima compaa urbana considerada. La muestra total esco-gida 16 empresas produjo 26 185 781 pesos, o sea 91.9% del total de la produccin industrial del estado, empleando cerca de 30% del total de la fuerza de trabajo industrial. El 9.1% restante de la produccin industrial estatal se llevaba a cabo en su mayor parte en las reas rurales del estado, por el 70% de la fuerza de trabajo industrial restante.

    En el cuadro 4 puede observarse un ltimo aspecto estructural: la escasa importancia de las actividades textiles en el estado, en marca-do contraste con la importancia de esta industria a nivel nacional.40 En efecto, las cuatro compaas textiles incluidas en las 16 grandes empresas estudiadas representaban slo 3.6% del valor total produ-cido por todas estas empresas, mientras que slo empleaban a 22.5% de su fuerza de trabajo, lo que constituye un ndice confiable de la baja capitalizacin y la tecnologa obsoleta.

    Hemos manejado en este trabajo algunas ideas bsicas, tratando de explicar las caractersticas de la primera etapa del desarrollo industrial de Monterrey. Se ha demostrado que este desarrollo fue el resultado de una poltica aplicada con coherencia por el gobierno nacional y local, que favoreca de modo congruente a las grandes empresas y eluda asimismo todas las regulaciones proteccionistas. Los empresarios regiomontanos se encontraban en una posicin particularmente favorable, en trminos geogrficos y econmicos, para aprovechar las oportunidades ofrecidas; por una parte, formaban ya una burguesa local rica, bien establecida; por otra parte, la ausencia de una poltica proteccionista posibilitaba el desarrollo de una economa cuya produccin se destinaba fundamentalmente a los mercados extranjeros, por lo menos durante el periodo estudiado.

    El crecimiento industrial de la regin se debi en gran parte a la concentracin de unas cuantas fundiciones grandes en la zona urbana

    40 Dawn Keremitsis, La industria textil mexicana en el siglo xix, Mxico, SepSetenta,

    1973. En este volumen se incluye el capitulo iv. : M

    .Iff I

  • WiL'-t

    200 LA REFORMA Y EL PORFIRIATO

    de Monterrey, aunque la importancia de este factor disminuy duran-te los aos siguientes. La consiguiente concentracin de riqueza, poblacin e industria en una ciudad capital reproduca, en gran medida, una situacin comn al proceso de industrializacin de toda la Amrica Latina. Por otra parte, uno de los aspectos particulares del desarrollo de Nuevo Len era el hecho de que la produccin agrcola del estado creci suficientemente durante estos aos, experimentan-do un importante proceso de diversificacin.41 Pero no hay duda de que la participacin de la agricultura en el PNB del estado disminuy con gran rapidez cuando se establecieron las industrias en la regin.42

    La importancia del proceso industrial de Monterrey deber consi-derarse en el contexto latinoamericano, sin olvidar que el proceso estaba influido todava en gran medida por las relaciones econmicas internacionales del periodo, ya que se basaba en la produccin de

    Jp materiales primas destinadas a los mercados extranjeros. Este proce-so se centraba en un pequeo nmero de compaas, pero condujo a la creacin de una gran red de empresas locales secundarias, lo que finalmente ayud a reducir la influencia de los mercados externos, al mismo tiempo que fortaleca la economa regional, creando as las bases que contribuyeron a la posterior importancia econmica y poltica del Grupo Monterrey en el Mxico contemporneo.

    41 Domnico Sindico, "Regional Development...", op. cit.

    *- En 1896 el valor de la produccin industrial de Monterrey lleg a 12 900 000 pesos, mientras que la produccin agrcola de Nuevo Len vala 4 300 000 pesos. En 1906 la produccin agrcola lleg a 6 500 000 pesos, mientras que la produccin industrial ascendi en 1908 (no tenemos datos para 1906) a 41 429 000 pesos. Vase Dominico Sindico, "Regional Development...", op. cir., y Mario Cerutti, "Concesiones estatales...", op. cit.

    38. LOS FERROCARRILES, INDISPENSABLES EN UNA ECONOMA ATRASADA:

    EL CASO DE MXICO* * * John H. Coatsworth

    LA CONTRIBUCIN de los ferrocarriles al crecimiento econmico en el siglo xix dependi de dos variables decisivas: el ahorro unitario en los costos de transporte y la cantidad de pasajeros y de carga que este medio atrajo. El ahorro unitario dependi principalmente de las condiciones geogrficas: si antes del ferrocarril exista d no el trans-porte acutico barato y, secundariamente, del valor en tiempo aho-rrado por la transportacin en ferrocarril y de la flexibilidad en la seleccin de rutas, posibilitada por la nueva tecnologa. Las cantida-des de pasajeros y de carga efectivamente transportados dependi de dos factores interrelacionados: el desarrollo previo de la economa y su respuesta ante el abaratamiento del transporte.

    La mayor parte de los estudios recientes acerca del desarrollo ferroviario han encontrado que el ahorro era poco considerable porque las vas acuticas hacan ms barata la transportacin antes de la construccin de los ferrocarriles' El ahorro proveniente de la mayor velocidad y flexibilidad de las rutas constitua la ventaja

    * Este articulo se public anteriormente en Journal of Economic History, vol. XXXIX, rm. 4, diciembre de 1979, The Economic History Association [traduccin del ingls de Eduardo L. Surez].

    ** El autor es profesor asociado de historia en la Universidad de Chicago. Agradece a los siguientes colegas la lectura critica de versiones anteriores de este ensayo: Albert Fishlow, Robert Fogel, Peter Lindert, Donald McCloskey, Morton Rothstein, Jeffrey Williamson, y los participantes en el Seminario de Historia Econmica, Universidad de Chicago. La investigacin se hizo gracias a los donativos de la Fundacin de Henry L. y Grace Doherty, el Programa de Intercambio Lincoln-Jurez y la Universidad de Wisconsin.

    ' Robert William Fogel, Railroads and American Economic Growth: Essays in Econometric History, Baltimore, 1964; Albert Fishlow, Railroads and the Transforma-tion of the Antebellum Economy, Cambridge, Mass., 1965; Gary Hawke, Railways and Economic Growth in England and Wales, 1840-1870, Londres, 1970; Way Vamplew, "Railways and the Transformation of the Scottish Economy", Economic History Review, 2a. serie, 24, febrero de 1971, pp. 37-54; William Paul McGreevey, Economic History of Colombia, 1845-1930, Cambridge, 1971, cap. 10; Jacob Metzer, Some Economic Aspects of Railroad Development in Tsarist Russia, tesis doctoral. Universidad de Chicago, 1972. John Hurd III encontr un ahorro algo mayor en "The Economic Impact of Railways in India, 1853-1947", ensayo presentado en el Seminario de historia econmica. Universidad

    201

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