EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

51
EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN: INTERNET, MÓVIL Y VIDEOJUEGOS Bella Haiat

Transcript of EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Page 1: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN: INTERNET, MÓVIL Y VIDEOJUEGOS

Introducción……………………………………………………………………………………….3

Page 2: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Adolescencia……………………………………………………………………………………….5

Adolescentes y Internet……………….………………………….…………………………7

Adolescentes y Móvil…………………………………………………………………………..8

Adolescentes y Videojuegos…………………………………………………………..…10

Redes Sociales…………………………………………………………………………………..12

Cyberbyllying…………………………………………………………………………………..…13

Prevalencia del Cyberbullying………………………………………………………..….16

Consecuencias del Cyberbulling…………………………………………………………21

Riesgos del uso de la Tecnología……………………………………………………….23

El uso de las redes sociales en adolescentes mexicanos………………….28

16 Puntos sobre usos de internet en los adolescentes mexicanos…..29

Adolescentes mexicanos altamente digitalizados y vinculados a internet…………………………………………………………………………………………………30

Bibliografía……………………………………………………………………………………………32

2

Page 3: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Introducción

La sociedad actual se establece en un mundo cambiante, en una época de transformaciones y enun periodo de transición a la adaptación de la sociedad a las tecnologías. Internet, móviles y videojuegos ocupan un espacio importante en el proceso de socialización, influyendo en comportamientos y actitudes (Levis, 2002); en consecuencia la psicología, como cienciay como practica profesional no puede permanecer ajena a esta transformación (Saldaña, 2001).Así mismo, están emergiendo un nuevo tipo de desadaptaciones conductuales producto de la generalización de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). Si bien estas herramientas fueron creadas como tecnologías para informar y comunicar, su propio diseño es susceptible de afectar a la voluntad de control, lo cual junto con otros factores personales y ambientales, facilita la conducta adictiva (Saldaña, 2001). Ni el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (American Psychiatric Association, 2000) ni la Clasificación Internacional de las Enfermedades (World Health Organization, 1992) reconocen las adicciones conductuales como trastornos mentales, excepto el juego patológico en el epígrafe de trastornosdel control de impulsos. Tampoco ayuda el hecho de que no existe consenso en la nomenclatura sobre el fenómeno. Se conoce como internet addiction (Young,1998), internet addiction disorder (Grohol, 2005; Simkova y Cincera, 2004), compulsive internet use (Black, Belsare y Schlosser, 1999; Meerkerk, Van den Eijnden y Garretsen, 2006), pathological internet use (Davis, 2001), problematic internet use (Shapira y cols., 2000; Shapira y cols. 2003), unregulated internet usage (LaRose, Lin y Eastin, 2003) por citar algunos de los términos más utilizados. No obstante, el uso de las TIC requiere de una mayor atención, sobre todo si causa problemas o interfiere en la vida diaria, especialmente durante la infancia y la adolescencia.Por otro lado, las TIC están presentes en todos los ámbitos de la realidad científica, cultural y social, y constituyen un elemento esencial del funcionamiento de nuestra vidacotidiana. La adolescencia es una etapa que merece una atención especial con respecto a sus

3

Page 4: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

relaciones con las TIC, sobre todo porque es un colectivo muy sensible al momento y al entorno social en el que vive y también porque estas tecnologías están especialmente presentes en su vida.Los adolescentes, fascinados por Internet, el móvil y los videojuegos, han encontrado en estas tecnologías un medio extraordinario de relación, comunicación, aprendizaje, satisfacción de la curiosidad, ocio y diversión. Poco a poco, esto conlleva que las TIC se conviertan en un elementoimportante e imprescindible en sus vidas (Machargo, Luján, León, López y Martín, 2003).Nuestros hijos e hijas han nacido con el ordenador bajo el brazo y para ellos el teclado y elratón son objetos comunes de su infancia. Para nosotros esta realidad es una novedad, puesnos encontramos educando en el uso de unas tecnologías que no conocíamos de niños eincluso, en muchas ocasiones, no dominamos de adultos.El uso de estas tecnologías de la información genera entre padres y madres sensaciones aveces contrapuestas. Por un lado, como progenitores hacemos un esfuerzo para que nuestroshijos e hijas dispongan de esas herramientas informáticas que sentimos importantesen el mundo que les espera. Por otro nos sentimos poco seguros a la hora de tutelarles oeducarles en su uso, porque sentimos que es un mundo propio y distante del nuestro. A lavez, como adultos, somos conscientes de que como otras tantas tecnologías la informáticae Internet conllevan una serie de riesgos y problemas potenciales sobre los que hay queactuar educativamente.Las llamadas Redes Sociales de Internetson aplicaciones que permiten crear páginas personales, que facilitan encontrar otras páginasutilizando un buscador y que proponen activamente que te comuniques con otras personasque tienen algún elemento afín o común contigo.Estas Redes Sociales sirven para ver y ser visto. Se cuenta que Facebook nació originariamentepara permitir que miembros de la misma universidad pudieran localizarse enInternet. Y es básicamente esta su función: mostrar y ver, localizar a otros y comunicarsecon ellos.En ocasiones es preciso ser invitado para entrar en una de estas redes, otras veces es suficientecon darse de alta por iniciativa propia. En todo caso tener una página personal deeste tipo implica una decisión voluntaria, así como también pasa por cada uno la informaciónque se muestra y a quién se permite acceder a ella.Una persona puede tener uno o varios perfiles en cada una de estas redes. En cada perfilse define una identidad y se ofrecen datos diversos: se incluyen fotos, se cuenta la edad,el sexo, las preferencias musicales o los enlaces a otras páginas de interés.Se trata de un recurso confeccionado expresamente para establecer comunicación conotros a través de Internet. Así, cuando una persona introduce datos de sí misma en la aplicación,la página te ofrece “amistad” con otras personas que comparten alguno de los rasgosde tu perfil. El programa facilita activamente el contacto y la conexión entre usuarios.Además, cada red social posee un sistema de búsqueda por el que un usuario puede tratarde localizar a otras personas introduciendo su nombre.Junto a la presentación estática de datos, que pueden ser cambiados o actualizados encualquier momento por el usuario de cada perfil, las redes sociales ofrecen sistemas decomunicación escrita sincrónica (chats) y proponen juegos que estimulan la utilización dela aplicación. Así uno puede participar en juegos policiales o acumular puntos mientras sejuega a cuidar una granja. Pretenden que el usuario tenga abierta la página y la utilice elmayor tiempo posible. Y es que se trata de estimular el consumo de estos sistemas.Desde esta perspectiva una red social es un negocio: cada aplicación es sustentada por una

4

Page 5: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

empresa que cotiza en bolsa y que tiene como objetivo el beneficio. De una manera legal,cada red social utiliza los datos depositados en ella para diseñar campañas de publicidadajustadas a los perfiles de sus usuarios. Así, incluye en su presentación al usuario mensajespublicitarios diversos que responden a las características de los perfiles: se anuncianotras páginas comerciales, se publicitan conciertos o discos, se ofrecen productos bancarios,ofertas de telefonía o de empleo.Y ante esto nos queda en pensar en las leyes del mercado, donde no sólo hay oferta sinotambién demanda. Es importante entender que no todas las redes sociales funcionan igualni tratan la información personal de la misma manera. En el momento de dar de alta unperfil, el usuario asume unas condiciones (un contrato) sobre las que es importante pensary decidir.Como fenómeno en Internet, estas redes sociales se incluyen en lo que se ha denominadola Web 2.0, esto es, los usos y desarrollos informáticos que permiten la comunicaciónentre personas, la constitución de comunidades organizadas por intereses o fines compartidosy la colaboración entre usuarios, grupos e instituciones a través de esta red telemática.Se trata de una evolución de la original Internet, que comenzó siendo un sistema paradifundir y encontrar información a través de páginas en las que se “colgaban” textos, imágenes,vídeos… y que ha evolucionado hacia usos más interactivos.Las redes sociales aparecen en Internet hace apenas diez años. En 2005 aparecen Youtubey Bebo, en 2006 Facebook y Twiter. Tuenti surge un par de años después. En esta décadadel nuevo siglo se dice que estas redes sociales han alcanzado los cien millones de usuariosen todo el mundo. Se trata de un fenómeno global que tiene distintas versiones en distintoslugares del mundo. En todo caso las redes sociales en Internet son un fenómeno quese ha expandido de una manera masiva y veloz entre jóvenes y adolescentes, que son susprincipales usuarios.

Adolescencia

Su raíz latina, adolescere, significa crecer, o desplegar la esencia. Representa la etapa de crecimiento hacia la madurez. También hay quien toma en consideración otra raíz etimológica, que propone que adolescencia viene del verbo adolecer, que significa “estar en carencia de algo” (García & Besteiro, 2004). En este sentido la adolescencia se concibe como un período de transición en el que se abandona la infancia en pos de conseguir cubrir esa carencia madurativa. No obstante, de acuerdo con G. Castillo (2002), la visión de la adolescencia no tiene por qué centrarse exclusivamente en las carencias, las anomalías y los riesgos de esta etapa, sino hacer hincapié en la adquisición de nuevas e importantes capacidades, en la incorporación de nuevas vivencias y experiencias que suponen un salto cualitativo en el desarrollo de la personalidad a esta edad. Se produce entonces durante la adolescencia una desvinculación progresiva con la familia, un proceso de oposición a las normas establecidas y un despertar de la sexualidad, que permiten que se establezcan nuevas relaciones fuera de la familia. Relaciones que cobrarán importancia en el proceso de formación de su identidad.Con el legado del enfoque psicoanalítico pero enfocándolo desde una perspectiva más psicosocial, E.Erikson (1983) exploró acerca de la identidad del yo. Entre las ocho edades del hombre descritas por este autor, hay dos momentos clave que suelen presentarse en la adolescencia: el de la identidad (versus confusión de rol) y el de la intimidad (versus

5

Page 6: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

aislamiento).La etapa de desarrollo que Erikson (1974) identifica como formación de intimidad y la vincula a la edad cronológica de la adolescencia (pero no exclusivamente), se compone de siete conflictosque la persona va sorteando a fin de conseguir una integración que le permita alcanzar unaidentidad individual positiva.Siguiendo con el enfoque psicosocial, K.Lewin (1939) aplicó su Teoría de Campo también aldesarrollo adolescente. De modo que, según uno de los autores pioneros en la psicología delconflicto, para entender la conducta de un/a adolescente se debe tomar en cuenta su personalidady su entorno, pero como factores interdependientes. Es la suma de ambos, es decir, los factorespersonales y ambientales en interacción forman el espacio de vida (o espacio psicológico) y elcomportamiento de la persona está condicionado por la función de su espacio de vida.La interacción con los demás es un elemento esencial en la socialización de los adolescentesy preadolescentes puesto que su desarrollo ocurre dentro de múltiples contextos. Desdela perspectiva ecológica (Bonfenbrenner, 1987), los diferentes contextos de interacción seidentifican en diversos niveles partiendo, como es sabido, del microsistema donde se ubican laspersonas del contexto inmediato del adolescente, pasando por los mesosistemas (reciprocidadentre los diferentes contextos del microsistema), el exosistema, hasta llegar al macrosistema(que engloba la ideología, actitudes, moralidad, costumbres o leyes de una cultura). Según estateoría, los medios de comunicación se ubican en el exosistema, como un contexto en el que el/laadolescente no toma parte activa pero que le influyen. Dentro de este planteamiento, las nuevastecnologías de información y comunicación (TIC) formarían parte del exosistema. Sin embargo,las nuevas tecnologías suponen una participación activa del individuo en tanto en cuanto la Redtransgrede la frontera de la pasividad, exige al internauta que se implique activamente; hablamospor tanto de una nueva dimensión de socialización. Entramos en una transición ecológica1 quedesde el ecosistema atraviesa el mesosistema para llegar al microsistema, es decir, al círculo derelaciones más íntimo de la persona.En las últimas décadas, la incorporación de Internet y las nuevas tecnologías han provocado un cambio sustancial en la forma de entender el mundo; una circunstancia tan significativa que a esta generación se identifica ya con el apellido de generación digital, generación interactiva (Del Río, Sádaba y Bringué, 2010) o la Generación @ (Rubio, 2009).

“Con el símbolo de arroba ha querido expresarse la novedad y el cambio socialque suponen las oportunidades y amenazas con las que las y los jóvenes tienen quemanejarse, pero sobre todo un hecho diferencial que ha convertido la juventud denuestro tiempo en una etapa de la vida peculiar, por su adopción de la red comomedio de expresión y por su hegemonía en el uso de las nuevas tecnologías de la

información.Hablar de los adolescentes y jóvenes en la Red, es hacerlo al mismo tiempo de los

nuevos aspectos definitorios de éste grupo social: con gustos y preferencias globalizadas(en la música, la moda, las subculturas juveniles), acceso a las nuevas tecnologías y undominio de las mismas muy superior al de sus mayores, equiparación entre los sexos,mayor movilidad geográfica, dominio del inglés como lengua común, comunicación y

servicios en “tiempo real”, hegemonía de la imagen y lo audiovisual y las nuevas formasde expresión asociadas, o las nuevas formas de relación”(Rubio, 2009: 5-6).

Según A. Rubio (2009) asistimos a una ‘juvenilización´ de los valores de nuestra sociedad. En dos sentidos: por un lado, los estilos de vida, los grupos de referencia y las expectativas presentes

6

Page 7: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

coinciden con los valores propios de la juventud (y en este sentido se ha producido una asimilación de Internet en nuestras vidas, como símbolo y forma de estar en el mundo y de entender la realidad que nos rodea).Por otro lado, al mismo tiempo, la juventud (y la adolescencia como primera parte de este periodo evolutivo) ha visto prolongada su duración por razones culturales y biológicas: maduración precoz, retraso en la emancipación, en la incorporación al mercado laboral, en la procreación, etc.Ante esta realidad que cambia vertiginosamente, adoptaremos la perspectiva que admite que la realidad se construye socialmente (Berger y Luckman, 1968) ya que nos ayuda a entender que nuestro sujeto de estudio, las etapas preadolescente y adolescente del desarrollo evolutivo humano, se va construyendo a través de la interacción dialógica entre la persona y su entorno. Un entorno ya no es exclusivamente offline sino que se suma también la realidad online de cada persona. Esto implica que el uso que niños, niñas y adolescentes hacen de las nuevas tecnologías tiene consecuencias para sí mismos, pero además transcienden el plano interpersonal y afectan también a toda la sociedad en el modo de entender, interpretar la realidad y las relaciones entre personas. La construcción de nuevos significados compartidos se enmarca así dentro de una lógica de comportamientos que son paulatinamente institucionalizados a partir de las exigencias normativas a los agentes sociales.La adolescencia representa la antesala de la juventud, del mismo modo que para aquella lo es lapre adolescencia. Estamos ante el comienzo de muchas cosas, de nuevas etapas, experiencias, retos, dificultades y limitaciones. Una etapa apasionante para ser estudiada por su valor ontogénico.

Adolescentes y Internet

Internet puede definirse como una red de redes de ordenador para compartir datos y recursos.El abaratamiento de los costos de conexión, las mejoras tecnológicas y la llegada masiva de ordenadores personales a los hogares, provoca un crecimiento exponencial del numero de usuarios; por este motivo, cada vez adquieren mayor importancia las respuestas de los usuarios y conviene valorar algunos efectos que la irrupción de Internet produce en sus conductas (Chamarro y Hernández, 2005).El uso que hace el adolescente de Internet es relevante. Las horas de conexión son distintas según la edad con la tendencia de las chicas a conectarse más que los chicos. Respecto al entorno de conexión, la mayoría se conecta desde sus respectivos hogares (78’4 %), de los cuales la mitad tienen su propio ordenador y línea de Internet personal; el resto se conectan desde la escuela (26 %), biblioteca (8%) o cibercafé (5 %) (Estallo, 2000). A través del Chat, el 32 % de los menores facilitan su teléfono, el 17 % ha quedado físicamente con alguien y se han conocido personalmente a través de una cita y el 34 % se han sentido incómodos en la red en alguna ocasión. Respecto a los motivos que mueven al adolescente a conectarse a la red, se ha venido observando que giran en torno a la posibilidad de estar en contacto y vincularse con su grupo de iguales superando la distancia física, así como expresar y hablar de temas que desde la relación cara a cara les seria difícil o imposible de realizar. El efecto desinhibidor del anonimato y la

7

Page 8: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

ausencia de contacto visual le permite expresar alguna necesidad o emoción desagradable o, en otras ocasiones, ser honesto, abierto y expresar emociones sobre asuntos personales que no podrían ser fácilmente discutidos frente a frente (King, 1996). El adolescente se encuentra en un mundo diferente, sin las limitaciones del mundo “real”, un lugar donde se oculta la vergüenza y surgen las intimidades de su mundo interno (Fiel, 2001).Así mismo, en estas edades el atractivo de Internet aumenta porque incluye la relación virtual con amigos y desconocidos y porque la ausencia de elementos de la comunicación no verbal facilita la interacción y posibilita enmascarar la identidad personal, hecho que puede provocar la vivencia de una experiencia placentera y de excitación aliviando el aburrimiento, la tensión, ladepresión y la ansiedad (Fiel, 2001); también permite la correspondencia con los iguales las veinticuatro horas, contactar con personas que de otra forma no habría conocido, mantener el contacto con amigos al mínimo coste y ser tenido en cuenta (Castellana ,Sánchez-Carbonell,Beranuy y Graner, 2006).El uso que el adolescente hace de Internet puede ser problemático cuando el número de horas de conexión afecta al correcto desarrollo de la vida cotidiana, causándole estados de somnolencia, alteración del estado de ánimo, reducción de las horas dedicadas al estudio o a sus obligaciones. Al igual que en el adulto, puede darse ansiedad o impaciencia por la lentitud de las conexiones, o por no encontrar a quien busca, irritabilidad en el caso de interrupción y dificultad para salir de la pantalla (Echeburúa, 1999). Los adolescentes adictos a Internet entrevistados por Tsai y Lin (2003) tenían síntomas de uso compulsivo y abstinencia, tolerancia y problemas escolares, sanitarios, familiares, económicos y de gestión del tiempo. Así mismo, Internet se asocia a un mayor malestar psicológico donde se limitan las formas de diversión y se reducen las relaciones sociales (Viñas, Juan,Villar y cols., 2002).Conviene tener en cuenta que todas las aplicaciones a Internet no tienen la misma capacidad adictiva. El riesgo de adicción a Internet en la adolescencia esta directamente relacionado con el grado de relación social de cada aplicación, la naturaleza de la relación que el jugador establececon otros internautas, la dimensión para explorar, la incertidumbre y la posibilidad de alcanzar un estatus que le diferencie de los demás Sánchez- Carbonell y cols. (en prensa). Otros factores son la interacción que se establece entre el adolescente y el ordenador (Echeburúa, 1999; Griffits, 2000) y la sincronía de la respuesta (prácticamente en tiempo real). Por ejemplo, los juegos de rol en línea denominados Massively Multiplayer Online Games (MMOG) son altamente adictivos debido al alto grado de comunicación, al tipo de interacción con el ordenador y a la rapidez de la respuesta. El uso excesivo de Internet puede llegar a ser peligroso para el adolescente.

Adolescentes y Móvil

Los adolescentes se han convertido en los principales usuarios de los diferentes servicios que ofrece la telefonía móvil a los que dedican cada vez más tiempo y recursos económicos. Para esta generación, los teléfonos móviles son objetos que siempre han existido, hecho que les convierte

8

Page 9: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

en expertos para poder elegir el medio, lugar y el momento en que hace falta utilizar el móvil.Encontramos dos explicaciones sociológicas sobre el éxito del móvil entre los adolescentes. Por un lado, Ling (2002) lanza un concepto enormemente fértil, en el que la adquisición del teléfono móvil se considera un “ritual de paso”, al igual que el reloj o la pluma en la primera comunión, el móvil puede ser un objeto de iniciación a la adolescencia. Por el otro, Forutnati y Manganelli (2002) hablan de “hermandad virtual”, fenómeno entendido como el sentimiento de fraternidad que surge entre jóvenes por compartir sentimientos, emociones, y pensamientos. Mientras los más jóvenes ven el móvil como consola de juegos y adoptan, ante él, una actitud lúdica (Oksman y Rautiainen, 2002), los mayores utilizan el móvil para organizarse y coordinarse (O’Keefe y Sulanowski, 1995).Todos los usos provocan unos gastos importantes que asumen, en parte o totalmente, los padres.El teléfono móvil tiene varios significados en la vida de los adolescentes. Por un lado, el móvil constituye una parte natural e importante de su cotidianeidad y lo utilizan como medio para organizar las actividades de la vida diaria, también se ha convertido en un medio para construir un vinculo social y para definir el propio espacio de cada cual en relación con los otros (Oksman y Rautianienen,2002). Por otro, el móvil interviene significativamente en la socialización porque permite definir la identidad del adolescente tanto individualmente, a base de personalizar el aparato de varias formas, colores, tonos, etc., como colectivamente creando un lenguaje especial de grupo, mensajes de texto y llamadas perdidas. El móvil se utiliza predominantemente para establecer contactos a corta distancia. Así mismo, el móvil actúa de barrera de seguridad frente a los padres desde el momento en que estos no pueden acceder a su teléfono personal (Lorente, 2002). Paralelamente, hay dos razones por las cuales los padres comprarían un móvil a sus hijos, la primera es la necesidad de control y la segunda asegurar una unión con ellos (Kamibeppu y Siugiura, 2005)Según Sánchez-Carbonell y cols. (en prensa) las razones por las cuales el móvil es tan atractivo para el adolescente son variadas: a) tipología de la comunicación que permite el contacto continuo e inmediato con la redde relaciones sociales y expandirla,b) tiempo y privacidad porque el móvil es atemporal, este hecho permite conectarse con rapidez a cualquier hora del día o de la noche, así como “escapar” del control paterno; c) identidad personal ya que el grado de personalización que permite el móvil facilita el proceso de adquisición de la identidad personal; d) socialización en tanto que el móvil fomenta el proceso de emancipación de los padres yentre los adolescentes es un símbolo de estatus social; e) instrumentalidad referida al uso del aparato como despertador, reloj de bolsillo, grabadora, agenda, plataforma de juegos o radio.La telefonía móvil a esta edad tiene unas características de uso completamente diferentes de las del adulto.Las actividades que forman parte esencial de la cultura del teléfono móvil de los adolescentes son el uso intensivo de SMS, las llamadas perdidas, los juegos (Kasesniemi y Rautiainen, 2001); el

9

Page 10: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

alto porcentaje de conversaciones con los amigos y una fuerte necesidad de personalización (Mante y Piris, 2002).Además, se observan conductas des adaptativas alrededor del uso del móvil que modifican la vida diaria de los adolescentes y son indicadores de riesgo. Según de la Gándara y Álvarez (2004), el riesgo llega cuando no son capaces de desprenderse de su móvil incluso en situaciones técnicamente dificultosas, comprueban rápidamente la batería o la cobertura y además no se caracterizan tanto para la necesidad de llamar sino para sentirse receptores constantes de llamadas. Conviene tener presente, cuando se trata de adolescentes, su vulnerabilidad frente al uso del móvil, debida a que aun no tienen un control completo de sus impulsos, son mas fácilmente influenciables por campañas publicitarias y han aceptado el móvil como unsímbolo de estatus, provocando sentimientos negativos y problemas de autoestima en los que no tienen móvil o que no reciben tantas llamadas o SMS como sus compañeros(Muñoz-Rivas y Agustín, 2005). La Adicción al móvil está muy cuestionada. Aunque no se dispone de literatura científica con datos fiables sobre su prevalencia, sintomatología o casos clínicos, los medios de comunicación insisten en su poder adictivo e informan de centros para su tratamiento (Beranuy ySánchez-Carbonell, en prensa). De hecho, hay mucha menos literatura científica sobre adicción al móvil que sobre adición a Internet (Guardiola, Sánchez-Carbonell, Beranuy y Bellés, 2006). El móvil, no tiene la capacidad reforzante inmediata de Internet. Por tanto, en este casoparece prudente hablar de uso desadaptativo y no de un patrón adictivo. Uso que podría remitir en adultos y adolescentes con las adecuadas pautas educativas.A continuación exponemos algunos síntomas producto de un uso excesivo y desadaptativo del móvil: incapacidad para controlar o interrumpir su uso (Muñoz-Rivas y Agustín, 2005), mantener la conducta a pesar de tener conciencia de los efectos negativos que conlleva, adolescentesy niños pueden llegar a engañar, mentir o robar a los padres para recargar el saldo, siendo éste el signo más evidente y que produce una alerta más intensa en los padres (Criado, 2005), incurrir en infracciones al emplear el móvil en circunstancias indebidas o en los lugares donde está prohibido (Adès y Lejoyeux, 2003; Muñoz-Rivas y Agustín, 2005), efectos secundarios en lasalud, sobre todo efectos en el sueño debidos a las redes nocturnas1 (Muñoz-Rivas y Agustín, 2005) y problemas en el ámbito, social, familiar y escolar como llegar tarde, o contestar un SMS en medio de una clase (Muñoz-Rivas y Agustín, 2005).Muchos adolescentes no pueden evitar desatender una conversación cara a cara por la irrupción de una llamada o de un SMS; este hecho impacta en sus relaciones sociales de forma excesiva (Kamibeppu y Sugiura, 2005; Bianchi y Phillips, 2005) y provoca que estén más pendientes de las relaciones telefónicas que de las personales (Adès y Lejoyeux, 2003). Todo ello tiene influencia en los estilos de comunicación y podría ayudar a explicar por qué con el tiempo los usuarios más jóvenes que hablan mucho por el móvil no saben qué decir cuando se encuentran cara a cara. (Criado, 2005). Así mismo ayuda a comprender las dificultades que se observan en los adolescentes cuando han de conversar cara a cara y poner palabras en lo que sienten y piensan (Castellana, 2005).Por último, el teléfono móvil no es sólo un dispositivo técnico, sino que también es un objeto

10

Page 11: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

personal y social sometido, como ningún otro, a las influencias de la moda y, a esta edad- tan determinante de la identidad individual y grupal - se ha convertido en una auténtica revolución social.

Adolescentes y Videojuegos

Los videojuegos son una forma de entretenimiento que no deja de crecer y hoy en día representa un negocio millonario. Miles de personas (mayoritariamente niños y adolescentes) juegan con los videojuegos en sus distintas formas y tipos (Levis, 2002). Las motivaciones que llevan al adolescente a practicar con los videojuegos son variadas (Castellana, Sánchez Carbonell, Beranuy y Graner, 2006): permiten vivir una aventura en primera persona donde el adolescente pone en practica estrategias en un entorno virtual sin consecuencias en la vida real; infieren en valores como la tecnología, la informática y la novedad; son cómodos, accesibles y económicos y se pueden realizar en grupo o en solitario, en casa o en un cyber; influyen en la autoestima, la confianza en uno mismo y la capacidad de superación y son emocionalmente estimulantes debido a su intensidad y rapidez.Podemos dividir los videojuegos según su temática (Rodríguez, 2002): juegos de plataforma (Supermario BROS), simuladores (GT2, Fly Fortress), deportivos (FIFA), de estrategia deportiva (PCFutbol), de estrategia no deportiva (The Sims), de disparo (Quake), de lucha (Mortal Kombat), de aventura (Tomb Raider) y de rol (Final Fantasy). Los más jóvenes (7-11 años) prefieren juegos de lucha y de aventura, los de más edad (11-18 años) eligen videojuegos tipo simuladores, de rol y deportivos.En cuanto al género, observamos que la inclusión de las chicas en el mundo de los juegos electrónicos no sigue el mismo ritmo ni intensidad que la de los chicos (Pifarré y Rubiés, 1997). Los chicos disponen de videoconsolas con mayor porcentaje en comparación con las chicas. Los chicos parecen muy interesados por este tipo de juego, a través del cual pueden demostrar las habilidades, imaginación y competitividad, mientras que las chicas están más interesadas en otro tipo de tecnologías como el móvil (Malo y cols., 2005) o los chats y el correo electrónico (Figuer y cols., 2005). Por lo que se refiere al tipo de juego, los chicos prefieren simuladores, deportivos, de estrategia deportiva y de lucha, mientras que las chicas muestran preferencia por juegos con una connotación de género no tan marcada, por ejemplo, The Sims (Pifarré y Rubiés, 1997). Según Estallo (1995), el adolescente pasa a utilizar con más frecuencia el videojuego por el efecto de la novedad, y en la mayoría de casos esta conducta remitirá espontáneamente o con la ayuda de la familia. No obstante, muchos jóvenes explican que durante un periodo de su vida los videojuegos perjudicaron su rendimiento escolar, motivaron tensiones familiares y redujeron sus relaciones sociales. Reconocen que escondieron a su familia síntomas como la pérdida de control (jugar más de lo previsto), perder la noción del tiempo y obsesionarse por un juego concreto.Los videojuegos reciben criticas desde su aparición y siguen siendo vistos con la misma desconfianza y inquietud que hace más de veinte años. Según la revisión realizada por Estallo (1995), las criticas más frecuentes en relación a la adolescencia son; en primer lugar, el tiempo de juego es visto en detrimento de tiempo dedicado al estudio o a otras actividades de ocio más

11

Page 12: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

positivas y educativas; en segundo lugar, favorecen una pauta de conducta impulsiva, agresiva y egoísta en los usuarios que más lo utilizan, sobre todo cuando se juega con juegos violentos; y en último término la conducta adictiva de estos jugadores inhibe el desarrollo de pautas de conducta más constructivas.Sin embargo, no deben olvidarse los argumentos favorables a los videojuegos: entretienen y divierten; estimulan la coordinación óculo-manual; promueven procesos cognitivos complejos como atención, percepción visual, memoria y secuenciación de información; se adquieren estrategias para ‘aprender a aprender’ en entornos nuevos; refuerzan el sentido del dominio y control personal, reducción de otras conductas problemáticas, potencian la autoestima y facilitan las relaciones sociales entre jugadores (Estallo, 1995; Gee, 2004; Rodríguez, 2002).

Redes Sociales

Un aspecto que adquiere bastante claridad es que las redes sociales operan como medios para articular relaciones offline, o al menos se orientan con esa expectativa. Niños, niñas y adolescentes parecen motivados al uso de redes sociales digitales para poder coordinar y activar su vida social offline. Si una red social no es compartida por el grupo local, es decir, la escuela, la ciudad, el país, pierde parte del atractivo, puesto que se reducen sustancialmente las posibilidades de interacción en persona.En este sentido es que la mensajería instantánea y las redes sociales son de vital importancia paracoordinar la vida social offline, siendo un medio que asiste a las redes de interacciones donde secomparten intereses y aficiones.Por su parte la mensajería instantánea (principalmente Messenger) es un canal que se comparte con conocidos y amistades, operando como un elemento en el proceso de construcción de la confianza.Sobre este aspecto es que móvil y Messenger entran en una suerte de competencia, adquiriendosignificados distintos dentro de las relaciones.

Mujer: Yo el teléfono.Hombre 1: Primero salir con él, sabes, luego si él te invita pues bien, si yo tambiénlo invito pues bien. Luego si es de confianza le pido el mail o este es mi Messengerpara que me puedas hablar, sabes.Hombre 2: Si tenemos buen rollo pues le daría el Messenger.Hombre 3: Yo primero el teléfono, antes de que el Messenger.(GD: Preadolescentes, entre 11 y 13 años)

Es muy interesante como entonces el Messenger se inserta en estas estrategias de construcción delas relaciones, permitiendo la exploración gradual de la confianza. Queda bastante claro que el poder de este tipo de mensajería se apoya fundamentalmente en las formas de articulación de la identidad, permitiendo que la presentación de las personas entre sí sea experimentada como algo más fluido, produciendo menor ansiedad. Recordemos que el 78.3% de los adolescentes entre 15 y 17 años opina que: “En los chats se supera la vergüenza, la timidez y el miedo al ridículo” (Bernete, 2004:264).Entre las funciones principales que se atribuyen a las redes sociales está la oportunidad de comunicarse con los seres queridos; la familia y las amistades en otras regiones del mundo

12

Page 13: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

constituyen una motivación poderosa para el uso de estos medios.

Chatear, por ejemplo, yo por ejemplo lo uso para…, yo tengo el Messenger para hablar con mi gente de ahí, del Sahara, entonces…(GD: Hombre, adolescente, entre 17 y 19 años)

Cyberbullying

Delimitación del Concepto de Cyberbullying

En la última década estamos observando un rápido desarrollo y utilización de nuevas modalidades de bullying, una de éstas es el cyberbullying (CB) (también denominado ciberacoso, acoso cibernético, electrónico, digital, entre iguales). Este fenómeno es mucho más reciente y desconocido, por lo que a continuación se presentan varias definiciones y categorizaciones realizadas que permiten profundizar en esta nueva forma de violencia entre iguales. Según Smith (2000), el CB es un acto agresivo e intencionado llevado a cabo de manera repetida y constante a lo largo del tiempo, mediante el uso de formas de contacto electrónicas por parte de un grupo o de un individuo contra una víctima que no puede defenderse fácilmente. Willard (2005) define el CB como el envío y acción de colgar (sending y posting) textos o imágenes dañinas o crueles por Internet u otros medios digitales de comunicación. Belsey (2005) conceptúa el CB como el uso vejatorio de algunas tecnologías de la información y la comunicación (TIC), como el correo electrónico, los mensajes del teléfono móvil, la mensajería instantánea, los sitios personales, y/o el comportamiento personal en línea difamatorio, de un individuo o un grupo, que deliberadamente, y de forma repetitiva y hostil, pretende dañar a otra persona.Según el estudio sobre hábitos seguros en el uso de las TIC por los menores, publicado por el Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (INTECO, 2009), el CB es una conducta de acoso entre iguales en el entorno TIC que incluye actuaciones de chantaje, vejaciones e insultos de unos niños a otros niños. El CB supone difusión de información lesiva o difamatoria en formato electrónico a través de medios de comunicación como el correo electrónico, la mensajería instantánea, las redes sociales, la mensajería de texto a través de teléfonos o dispositivos móviles o la publicación de vídeos y fotografías en plataformas electrónicas de difusión de contenidos. Tiene que haber menores en ambos extremos del ataque para que se considere CB: si hay algún adulto, entonces no es CB. Tampoco se trata de adultos que engatusan a menores para encontrarse con ellos fuera de la Red o explotar sus imágenes sexuales.Aftab (2010) considera CB cuando un niño o un adolescente es atormentado, amenazado,

13

Page 14: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

acosado, humillado, avergonzado o se convierte en el blanco de otro niño, niña, o adolescente a través de Internet, tecnologías interactivas y digitales o teléfonos móviles. Tiene que implicar a un menor de edad en ambos lados, o por lo menos la situación tiene que haber sido instigada por un menor contra otro menor. Desde su punto de vista, cuando un adulto está involucrado no es CB, cuando uno o más adultos están tratando de atraer a los niños/as y adolescentes a encuentros fuera de la Red para llevar a cabo abuso o explotación sexual de menores, esto se denomina grooming. El CB implica intencionalidad y deseo de hacer daño al otro. Además, el acosador o acosadora un momento puede convertirse en otro momento en víctima. Los niños/as y adolescentes a menudo cambian los roles, pasando de víctima a acosador y viceversa. En el CB el acosador y la víctima son niños, niñas o adolescentes, habitualmente compañeros de colegio o instituto y se relacionan en la vida física. Esta investigadora diferencia entre formas de acoso directo e indirecto. Define como acoso directo el envío de mensajes directos a otros niños o adolescentes, mientras que el acoso indirecto o por delegación implica utilizar a otras personas para acosar cibernéticamente a la víctima, ya sea con o sin el conocimiento de estos cómplices. El acoso indirecto puede ser más peligroso ya que puede incluir a personas adultas en el hostigamiento. La mayoría de las veces, son cómplices no deliberados y no saben que están siendo utilizados por el/la ciberacosador/a. Por ejemplo, los ciberacosadores tienden trampas a sus víctimas para que reaccionen de forma violenta y el agresor le denuncia al proveedor que anula la cuenta online. El acoso por delegación también se refiere a una situación en la que una persona piratea la cuenta de la víctima y envía mensajes hostigadores, impertinentes a amigos y familiares de la lista de contactos.Las formas que el CB adopta son muy variadas y sólo se encuentran limitadas por la pericia tecnológica y la imaginación de los menores acosadores. Algunos ejemplos concretos podrían ser los siguientes (Flores 2008):1. Colgar en Internet una imagen comprometida (real o efectuada mediante fotomontajes), datos delicados, cosas que pueden perjudicar o avergonzar a la víctima y darlo a conocer en su entorno de relaciones.2. Dar de alta, con foto incluida, a la víctima en una web donde se trata de votar a la persona más fea, a la menos inteligente, y cargarle de “puntos” o “votos” para que aparezca en los primeros lugares.3. Crear un perfil o espacio falso en nombre de la víctima, donde se escriban a modo de confesiones en primera persona determinados acontecimientos personales, demandas explícitas de contactos sexuales, etcétera.4. Dejar comentarios ofensivos en foros o participar agresivamente en chats haciéndose pasar por la víctima de manera que las reacciones vayan posteriormente dirigidas a quien ha sufrido la usurpación de personalidad.5. Dar de alta la dirección de correo electrónico en determinados sitios para que luego sea víctima de spam, de contactos con desconocidos…6. Usurpar su clave de correo electrónico para, además de cambiarla de forma que su legítimo propietario no lo pueda consultar, leer los mensajes que le llegan a su buzón violando su intimidad.

14

Page 15: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

7. Provocar a la víctima en servicios web que cuentan con una persona responsable de vigilar o moderar lo que allí pasa (chats, juegos online, comunidades virtuales…) para conseguir una reacción violenta que, una vez denunciada o evidenciada, suponga la exclusión de quien realmente venía siendo la víctima.8. Hacer circular rumores en los cuales a la víctima se le suponga un comportamiento reprochable, ofensivo o desleal, de forma que sean otros quienes, sin poner en duda lo que leen, ejerzan sus propias formas de represalia o acoso.9. Enviar mensajes amenazantes por e-mail o SMS, perseguir y acechar a la víctima en los lugares de Internet en los que se relaciona de manera habitual provocándole una sensación de completo agobio.Recientemente, Kowalski, Limber y Agatston (2010) han definido el CB en sentido amplio, que incluye el uso de correos electrónicos, mensajerías instantáneas, mensajes de texto e imágenes digitales enviadas a través de teléfonos móviles, páginas web, bitácoras web (blogs), salas de chat o coloquios online, y demás tecnologías asociadas a la comunicación digital. A diferencia de Aftab, estas investigadoras también consideran CB cuando está implicado un adulto, ya sea como víctima o como acosador. Desde su punto de vista, el CB igual que el bullying tradicional, se distribuye a lo largo de un continuum de gravedad. En el extremo menos severo del continuum, el acoso puede ser difícil de identificar, y en el otro extremo ha llevado en ocasiones al asesinato y al suicidio. Entre las modalidades de comunicación elegidas para la práctica del CB, Kowalski et al. (2010), señalan entre otras: mensajería instantánea (Ims), correo electrónico (e-mail), mensajes de texto a través de móviles (SMS), redes sociales online, chats, blogs, páginas webs, tablones de encuentros sociales, juegos por Internet, etc. Además, estas investigadoras identifican 8 tipos de acoso cibernético diferentes:1. Insultos electrónicos: intercambio breve y acalorado entre dos o más personas, que tiene lugar a través de alguna de las nuevas tecnologías. Intercambio de e-mails privados o intercambio en contextos públicos como chats… Intercambio mutuo de insultos entre varias personas implicadas.2. Hostigamiento: mensajes ofensivos reiterados enviados a la persona elegida como blanco por correo electrónico, en foros públicos como salas de chat y foros de debate; envío de cientos o miles de mensajes de texto al teléfono móvil de la persona elegida como blanco. Difiere de los insultos porque el hostigamiento es más a largo plazo, es más unilateral (incluyendo a uno o más ofensores frente a una única víctima).3. Denigración: información despectiva y falsa respecto a otra persona que es colgada en una página web o difundida vía e-mails, mensajes instantáneos…, por ejemplo, fotos de alguien alteradas digitalmente, sobre todo de forma que refleje actitudes sexuales o que puedan perjudicar a la persona en cuestión (foto alterada para que parezca que una adolescente está embarazada, comentarios maliciosos que se escriben en un “cuaderno de opiniones” online en el que se insinúa que una adolescente es sexualmente promiscua…)4. Suplantación: el acosador se hace pasar por la víctima, la mayoría de las veces utilizando la clave de acceso de la víctima para acceder a sus cuentas online y, a continuación, enviando mensajes negativos, agresivos o crueles a otras personas como si hubieran sido enviados por la propia víctima.

15

Page 16: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

5. Desvelamiento y sonsacamiento: Implica revelar información comprometida de la víctima a otras personas, enviada de forma espontánea pero privada por la víctima o que ha sido sonsacada a la víctima y después difundida a otras personas.6. Exclusión: no dejar participar a la persona de una red social específica.7. Ciberpersecución: envío de comunicaciones electrónicas reiteradas hostigadoras y amenazantes.8. Paliza feliz (happy slapping): se realiza una agresión física a una persona a la que se graba en vídeo con el móvil y luego se cuelga en la red para que lo vean miles de personas.El CB es un fenómeno que se ha incrementado mucho en los últimos años por varios factores (Flores, 2008): 1) alta disponibilidad de nuevas tecnologías (Internet, móvil…); 2) importancia progresiva del ciberespacio en la vida de las personas como espacio de socialización complementario al contexto del hogar, la escuela o la comunidad; 3) menor percepción del daño causado que en el bullying, ya que víctima y agresor no están en una situación “cara a cara”; 4) sensación de impunidad del acosador por el anonimato que posibilita y que conlleva que no se enfrente a las represalias de la víctima, de sus compañeros, amigos, padres, responsables escolares, etc.; 5) la ausencia de conciencia que tiene el acosador del daño que ejerce, ya que en ocasiones asocia su conducta a un rol, y atribuye la conducta a un personaje o rol interpretado en la Red; y, 6) las características propias de Internet que estimula el fácil agrupamiento de hostigadores y la cómoda reproducción y difusión de contenidos audiovisuales.En síntesis, el CB consiste en utilizar las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC), Internet (correo electrónico, mensajería instantánea o “chat”, páginas web o blogs), el teléfono móvil y los videojuegos online principalmente, para ejercer el acoso psicológico entre iguales. El rápido desarrollo de esta nueva forma de acoso ha generado la urgente necesidad de su estudio y ha potenciado la realización de numerosas investigaciones en los últimos años. Las vías utilizadas para ejercer el CB son variadas: mensajes de texto (SMS-de móvil), acoso telefónico (llamadas anónimas al móvil), grabaciones de agresiones físicas o vejaciones que son difundidas vía móvil o Internet, acoso a través de fotografías y vídeo que se difunden a través de los móviles o se suben a YouTube, correos electrónicos, mensajería instantánea, en sesiones de chat, en las redes sociales (essenge, tuenti, twiter), páginas web (blogs, fotologs). Se trata pues, de hostigamientos cometidos a través de chats, teléfono móvil, mensajes de texto, correo electrónico, essenger, webs, blogs, fotologs. No obstante, en relación a la conceptualización del cyberbullying cabe resaltar que en cierto modo existe un problema con la definición del constructo, ya que es complejo y difícil de operacionalizar. Este constructo puede ser entendido de forma diferente en distintas poblaciones, y la complejidad y evolución acelerada de las nuevas tecnologías, vuelve cualquier clasificación rápidamente obsoleta.

Prevalencia del Cyberbyllying

16

Page 17: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

La revisión de los estudios realizados sobre el bullying (Cerezo, 2009; Del Rey y Ortega, 2008; Garaigordobil y Oñederra, 2008, 2010; Gutiérrez, Barrios, de Dios, Montero y del Barrio, 2008; Pérez y Gázquez, 2010), pone de relieve que la prevalencia y las características que rodean al bullying no varían mucho de un país a otro. Todos los estudios, sin excepción, evidencian la existencia del acoso escolar entre iguales, por lo que se puede concluir que es una realidad en todos los centros escolares en el mundo. En todos los lugares se constata la incidencia de la violencia escolar sin que haya diferencias notables por el contexto geográfico, cultural o educativo. Los resultados de los estudios nos permiten observar un porcentaje medio aproximado de victimización grave entre el 3% y el 10%, y porcentajes de estudiantes que sufren conductas violentas que oscilan entre un 20% y un 30%. Las conclusiones más comunes suelen ser que la mayoría de los implicados son varones, el tipo de acoso más frecuente es el verbal y el lugar del colegio donde más agresiones se producen es el patio. El rango de edad de las investigaciones abarca desde los 6 hasta los 18 años. En los últimos años, la atención surgida alrededor del CB ha estimulado la realización de estudios acerca de este fenómeno, mostrando como preocupación principal el conocer, sobre todo, la cantidad de alumnos involucrados. Los primeros estudios con los estudios llevados a cabo en otros países (Brugess-Proctor et al, 2009; Dehue et al, 2008; Keith y Martin, 2005; Kowalski y Limber, 2007; Li, 2007; Slonje y Smith, 2008; Ybarra y Mitchell, 2008). Sin embargo, algunas investigaciones no han advertido diferencias en función del sexo (Álvarez García et al, 2011; Beran y Li, 2007; Hinduja y Patchin, 2008; Juvonen y Gross, 2008; Katzer, Fetchenhauer y Belschak, 2009; Topçu et al, 2008; Williams y Guerra, 2007). La inconsistencia en los resultados obtenidos por los estudios sugiere, por lo tanto, la necesidad de una más extensa investigación al respecto, con el fin de delimitar el papel del género en la violencia a través de las TIC.Otra variable de estudio relevante en relación con la violencia a través de las TIC es la edad y/o el nivel educativo en el que este fenómeno es más habitual. Eso permitiría ampliar esfuerzos preventivos en los niveles educativos en los que este tipo de violencia es más frecuente. Tokunaga (2010), una vez revisados los principales estudios sobre el tema, propone la hipótesis de una relación curvilínea entre ambas variables. En un primer momento, el nivel de violencia a través de las TIC aumentaría, en la medida que aumenta el acceso de los estudiantes a esas tecnologías. Posteriormente, el nivel de violencia a través de las TIC decrecería, al igual que sucede con la violencia escolar más tradicional.

Los diferentes estudios realizados varían mucho en cuanto a la edad (10-18 años), a la técnica o instrumento de evaluación empleado, al tipo de conductas de CB estudiadas o al intervalo de tiempo considerado (algunos preguntan en qué medida se ha protagonizado este tipo de hechos desde que comenzó el curso, otros en el último año, otros en los últimos dos o tres meses, otros no establecen ninguna limitación temporal). No obstante, y pese a estas diferencias, la revisión de los estudios llevados a cabo en los últimos 10 años a nivel nacional e internacional, permite concluir que:1. Existe un alto porcentaje de estudiantes afectados por el CB o acoso cibernético, ya sea

17

Page 18: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

moderado (menos de una vez por semana) o severo (más de una vez por semana), y el contenido de los mensajes revelados sugieren que el ciberespacio puede ser un mundo virtual amenazante e inquietante con pocas leyes o normas de comportamiento socialmente aceptable. 2. La prevalencia del CB varía significativamente en los diferentes países. Se han evidenciado porcentajes techo superiores de victimización, tanto ocasional como sistemática, en Estados Unidos y Asia (55%), frente al resto de los países americanos (22%), Canadá (25%), Oceanía (25%), o Europa (30%).3. En general, aproximadamente entre un 40% y un 55% de los escolares están implicados de algún modo (víctimas, agresores, observadores), entre un 20% y un 50% dicen haber sido víctimas aunque al parecer entre un 2% y un 7% lo han sido de forma severa, habiendo variaciones en función de los países, las edades de las muestras utilizadas, y el período de tiempo sobre el que se solicita información.4. En España no hay hasta el momento un volumen de investigaciones suficientemente amplio sobre el CB. Es necesario plantear más estudios que permitan aportar datos más precisos, tanto para identificar la gravedad del fenómeno y para identificar parámetros relevantes de cara a la prevención y la intervención.5. El número de afectados de CB está creciendo, ya que los estudios más recientes encuentran porcentajes cada vez mayores de implicados. El CB es un fenómeno en crecimiento.6. Utilizan con más frecuencia los mensajes de texto insultantes y amenazadores (a través de Internet o el móvil), así como la difusión de imágenes (vídeo o fotos).7. Cuanto mayor es el nivel de uso de las TIC mayor es la probabilidad de ser víctima y también agresor.8. Los resultados de los estudios que analizan las diferencias de género son contradictorios. Algunos confirman que hay más prevalencia en los chicos, como en el acoso tradicional, mientras que otros informan de una mayor prevalencia de acosadoras y víctimas entre las chicas. Más investigación sobre las diferencias de género es necesaria.Como conclusión de los estudios realizados, y teniendo en cuenta la diversidad de instrumentos y métodos utilizados en las investigaciones citadas, se constata la dificultad de realizar un análisis comparativo de la prevalencia, aunque sí se pueden observar tendencias y características generalizadas. La elevada participación en el CB, así como el incremento progresivo de este fenómeno en todos los países del mundo, puede llegar a ser un problema mundial, por lo que se enfatiza la necesidad urgente de prevención e intervención.

18

Page 19: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

19

Page 20: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

20

Page 21: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Consecuencias del Cyberbylling

La violencia entre iguales tiene consecuencias perniciosas para todos los implicados pero con distintos síntomas y niveles de sufrimiento. Aunque los efectos más acusados se muestran en la víctima, los agresores y los observadores también son receptores de aprendizajes y hábitos negativos que influirán en su comportamiento actual y futuro. Todos los implicados en situaciones de maltrato, en cualquiera de los roles, están en mayor situación de riesgo de sufrir desajustes psicosociales y trastornos psicopatológicos en la adolescencia y en la vida adulta, que los chicos y chicas no implicados. No hay duda de que la consecuencia más extrema del bullying y el cyberbullying es el suicidio o la muerte de la víctima y precisamente fue esto lo que impulsó la primera investigación, realizada en Noruega por Olweus (1973). Este tipo de evento dramático ha servido para impulsar la investigación y la intervención institucional en todos los países. Las consecuencias aunque no sean tan extremas sí afectan a la salud, a la calidad de vida, al bienestar y al correcto desarrollo de la persona. El daño emocional como consecuencia del cyberbullying (CB) es muy significativo. Tal y como se ha puesto de relieve las víctimas del bullying “cara a cara” pueden experimentar depresión, ansiedad y fracaso escolar (Garaigordobil y Oñederra, 2010). Las víctimas de CB sufren el mismo o incluso mayor daño psicológico debido a que la información lesiva está disponible para todo el mundo las 24 horas del día, los acosadores con frecuencia son anónimos, el proceso de victimización es continuo e inevitable, la mayoría de las veces es muy difícil eliminar el material publicado y suele estar accesible de forma pública durante largos períodos de tiempo. Los adoles-centes suelen ser reticentes a hablar con los adultos sobre el abuso que están sufriendo debido al trauma emocional, a que piensan que es culpa suya, por miedo a posibles “venganzas”, o la preocupación porque se les restrinja el uso de internet o del teléfono móvil. En su punto más extremo, el CB puede llevar al suicidio y a la violencia juvenil (Feinberg y Robey, 2009).Cada vez que se consideran las consecuencias del bullying y del CB, emergen los episodios más dramáticos, es decir, los que implican amenazas graves contra la integridad de la víctima o los que conducen al suicidio cuando la víctima ya no tiene capacidad para soportar más sufrimiento (Jokin Ceberio, Ryan Patrick Halligan, Alex Teka, Clemente Tyler, entre otros muchos). Sin duda, estas situaciones llegan a alcanzar una gran repercusión mediática y, por tanto, un gran impacto sobre los padres, los educadores y toda la sociedad en general. No obstante, y aunque afortunadamente, la mayoría de los casos no alcanzan este nivel de gravedad, el acoso tiene efectos muy negativos. Igual que el bullying el CB es un fenómeno social perjudicial, no sólo para las víctimas, también afecta a los agresores y a los observadores. Debido a que el CB es un fenómeno reciente, son muy pocas las investigaciones que han explorado los efectos sobre la víctima y sobre el agresor. Los estudios llevados a cabo evidencian que el CB puede afectar a un porcentaje muy alto de adolescentes (25-50% aproximadamente, aunque varía en función de los países), que puede ser tan malo o peor que una agresión física en el colegio, y que es tan implacable y emocionalmente devastador que puede a veces llevar al

21

Page 22: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

suicidio y también al asesinato. En algunos estudios (Smith et al., 2006) donde se ha preguntado a las víctimas sobre los efectos de las formas de maltrato tradicionales y online, las formas electrónicas eran percibidas como más severas sobre todo cuando éstas tenían un carácter más público o amenazante. Los resultados de los estudios permiten concluir que el CB tiene efectos significativos a nivel emocional, psicosocial y académico. La revisión realizada ha puesto de relieve que: 1) las ciber-víctimas tienen sentimientos de ansiedad, depresión, ideación suicida, estrés, miedo, baja autoestima, falta de confianza en sí mismos, sentimientos de ira y frustración, sentimientos de indefensión, nerviosismo, irritabilidad, somatizaciones, trastornos del sueño y dificultades para concentrarse que afectan al rendimiento escolar; y 2) los ciber-agresores tienen mayor probabilidad de desconexión moral, falta de empatía, dificultades de acatamiento de las normas, problemas por su comportamiento agresivo, conducta delictiva, ingesta de alcohol y drogas, dependencia de las tecnologías y absentismo escolar. Además, Chapell et al. (2006) enfatizan que tanto las víctimas como los agresores están en situación de riesgo de tener problemas de desarrollo que pueden persistir en la edad adulta. En general, los investigadores consideran que el CB tiene similares efectos al bullying tradicional tanto en el momento que sucede como a medio y largo plazo, incluso consideran que a largo plazo los efectos pueden ser más negativos.Aunque son pocos los estudios que han analizado las causas de CB, en la investigación de Hoff y Mitchell (2009) los estudiantes que participaron en el estudio señalaron como causas asociadas o relacionadas con el CB: 1) las situaciones de ruptura de relaciones entre personas y especialmente de relaciones de pareja; 2) la envidia y los celos; y3) la intolerancia relacionada con prejuicios raciales y sexuales. En general, el CB se realizaba como un medio de venganza y/o para afrontar la frustración. Además, la situación de anonimato fue considerada como un potenciador de este tipo de conducta. Estos investigadores observan que los adultos, que normalmente se encargan de supervisar las vidas de los adolescentes, se quedan fuera debido a la ausencia de conocimientos tecnológicos o la falta de comprensión del medio, por lo que no pueden ayudar a los jóvenes. Su estudio sugiere que el ciberespacio funciona como el “Salvaje Oeste” hizo una vez, donde todo vale. La gente se toma la ley por su mano ya que no perciben una estructura de gobierno que los proteja de esa situación. Hasta que las escuelas, los tribunales, los padres y los proveedores de Internet no adopten medidas de cara a establecer y hacer cumplir un comportamiento éticamente adecuado en el ciberespacio, la vida de los estudiantes estará afectada negativamente por un mundo virtual incivilizado que es una extensión de su vida real.

22

Page 23: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Riesgos del uso de la Tecnología

El acoso sexual y la amenaza de los pederastas.Cuando a se plantea el tema de los riesgos en el uso de Internet, niños/as y adolescentes asocian estos riesgos directamente con la posibilidad de ser abordados por pederastas. La transferencia de fotografías de sí mismos constituye para algunos de ellos un peligro puesto que esto los expone a personas con esos intereses.Es posible pensar que “el pederasta”, bajo el influjo de las comunicaciones en los medios de masas, las conversaciones con los padres, los pares y los encargados de la educación formal, siendo sin lugar a dudas un peligro real, es además un personaje del imaginario de niños y adolescentes. Cumple en algún sentido el lugar que tenían figuras más ambiguas en el pasado, como “el hombre del saco” al cual se teme en la exploración del mundo fuera de casa. El depredador sexual que utiliza Internet para buscar sus víctimas es la amenaza de la nueva plaza pública, las redes sociales.En la dinámica de role-play se plantearon dos situaciones hipotéticas que podrían comportar riesgos y peligros para los chicos y chicas, con la intención de que el grupo inventara una trama y un desenlace a dicha historia.Una de las historia abordaba el peligro de conocer gente por Internet10. Ante la posibilidad de conocer gente nueva a través de los chats y las redes sociales se les planteó la siguiente situación:Marta tiene un nuevo amigo en Facebook, se llama Julio, nunca se han visto pero llevan varias semanas chateando y tienen muchas cosas en común. Él otro día Julio le propuso que se conocieran en persona.Marta tiene dudas, pero él insiste en verse, le ha propuesto que pueden reunirse cerca su casa.A partir de la situación descrita, el grupo imaginó que ese chico, Julio, no era niño sino un adultopederasta. Lo que representaba una amenaza para Marta, la protagonista de la historia. En primera instancia valoraron que ellos/ellas no acudirían a la cita, salvo que lo hicieran acompañados por un amigo o un adulto (la madre, como propuso una de las participantes). Suponiendo que la situación se complicara y la chica se sintiera intimidada o incómoda recurrirían a la policía para denunciar el caso.En torno a esta historia, destacamos la reflexión que una de las participantes elaboró; una reflexión en voz alta que da muestra de la magnitud del problema que puede suponer este tipo de relaciones y la vulnerabilidad en que se encuentran estas niñas y niños.

Pornografía: lo prohibido, lo deseado y lo temido.La visita de páginas con pornografía es algo que aparece en el discurso de niños y niñas consultadas, aunque de manera marginal, adquiriendo un sentido “flotante” o ambivalente que nunca acaba de plasmarse completamente en la conversación. Unos pocos hombres admiten ingresar a estas páginas, sin embargo la excitación sexual que estas puedan producir aparece relativamente excluida del discurso.El placer parece estar más bien en saber de su existencia y en fantasear con la trasgresión. El lenguaje y la implicación en la discusión, que ante otros temas por momentos puede escasear, se

23

Page 24: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

hace más profusa y animada e impulsiva al tratar este tema.

Hombre 1: O por meterme en páginas desconocidas que me pueden quitar todoel ordenador.(risas)M: Te mandan virus o te quitan… vale… Hombre 2: O conozco a alguien que se puede meter en www.petardas.com (Risas)M: ¿Y eso qué es? Hombre 2: Bueno…(Risas, hablan cOtro: Es una página… Hombre 3: Esa página es una página triple equis esa.Hombre 2: Un amigo se mete.(Risas, hablan todos agitadamente en tropel)M: ¿Y vosotros os metéis a esa página? Hombre 3: Sí, claro, tú le das a entrar y te vas…Hombre 4: Esa es la página de petardas.com(Hablan todos agitadamente en tropel)(Muchas risas)M: ¿Y hay material pornográfico?(Nuevamente risas y hablan todos)Hombre 2: El otro día estaba en esas…Hombre 1: También hay otra página www…(Risas)M: O sea, os metéis habitualmente…Hombre 3: Yo sí me meto.Hombre 1: No, porque el otro día un amigo mío se metió a lo de petarda y ponía:no recomendada para menores de 18 años…y ponía entrar y se metió, por esolo sé.Hombre 3: Yo sí, yo sí…..de risa…con unos amigos, eh eh! vamos…Hombre 1: Vamos a meternos a petardas.(GD: Adolescentes de 14 a 16 años)

Por su parte, algunos de los más pequeños, parecen hacer propio el discurso de rechazo a estoscontenidos, asumiéndolo como algo que puede corromperlos/as y dañarles. Estas fantasías y temores a resultar dañados son la respuesta natural ante contenidos que son comprendidos como experiencias violentas y poco comprensibles.

Hombre 1: Porque si no aprendemos muy rápido. Moderador: ¿Cómo es eso que aprendemos muy rápido?

24

Page 25: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Hombre 1: Por ejemplo, que si está mi hermano pequeño al lado mío, está aprendiendo. Moderador: Y ¿qué decían, que aprenden muy rápido?Hombre 2: Sí, a veces te dejas tonto, un primo mío me dijo que contándoles historias de miedo, cuando tienes hijos, que se quedan tontos.(GD: Preadolescentes, entre 11 y 13 años)

Burlas y ciberbullying.Uno de los riesgos a los cuales parecen temer con mayor intensidad niños, niñas y adolescentes es a la burla y desprestigio al ser expuesta su intimidad, o ser retratados de forma ridícula. Este temor se asocia con la vergüenza que emerge en esta etapa del ciclo vital (Levy, 2001) y la radical importancia de los grupos de pares como evaluadores constantes de la propia identidad social (Tajfel y Turner, 1979).Es por esta razón que la posibilidad del bullying a través del desprestigio y difusión de imágenes es muy relevante. Recordemos que en otros estudios se señala la importancia de las imágenes del propio cuerpo en la construcción de la identidad adolescente y preadolescente, lo que tiene una marcada incidencia en la forma que adoptan las páginas personales en redes sociales y blogs (Burset Burillo & Sánchez Gómez, 2009).En la dinámica de role play, una de las situaciones hipotéticas que se planteó abordaba esta cuestión. A partir del caso de dos amigas, que una cuelga fotos de otra en Internet, el grupo inventó una trama y un desenlace para dicha historia.Ana y María son dos buenas amigas que van a la misma clase. María ha llegado hoy al cole y Ana ni le ha mirado. Cuando se acerca a ella, ésta le dice que le deje en paz que está muy enfadada porque María ha colgado en Facebook unas fotos de ella que no le gustan.Partiendo de esta entrada, el grupo imagina una historia y asume que eran unas fotos en las queAna estaba desnuda. (Esta cuestión no fue inducida, surgió del propio grupo. Los participantes tal vez entendían que una afrenta menor, como por ejemplo salir poco favorecida en la foto, no hubiera sido motivo suficiente para enfadarse con la amiga). La justificación que buscan para explicar lo sucedido es que María le había emborrachado y drogado y le había hecho esas fotos. Ana se siente ultrajada y traicionada por su amiga. A la hora de afrontar el conflicto, entran en escena las dos chicas, sus madres, el profesor y uno de los padres. El grupo pone el acento en la responsabilidad de la víctima, dudan de ella, de sus explicaciones y su padre le acusa de estar mintiendo. Ante esa acusación, Ana reconoce que consintió hacerse las fotos para ligar (existe la posibilidad de conocer a alguien atractivo).

“Bueno, es verdad, ella me dijo que si colgaba las fotos en Internet me iba a salirun chico muy guapo.” (RP: Niña, entre 11 y 13 años)

El desarrollo de la dinámica transcurre así: entran en escena las madres que intentan mediar parasolucionar el asunto, que según ellas la solución sería que las fotos se retirasen; también interviene un padre con un estilo más inquisidor y autoritario; como figura mediadora aparece

25

Page 26: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

también el tutor utilizando un tono más conciliador. (Lógicamente el devenir de la historia tuvo que ver con la singularidad de cada uno de los actores que asumió de forma arbitraria un determinado rol, por lo que se supone que el desenlace hubiera sido otro si los mismos protagonistas hubieran adoptado otro papel).Los hechos que se describen son graves: la chica aparece desnuda, drogada y en actitud comprometida según los propios relatores. Pero obsérvese que lo que se cuestiona de la historia es el papel de la víctima, su grado de responsabilidad en lo sucedido. En ningún momento se cuestiona la actuación de la amiga que viole su intimidad subiendo las fotos y haciéndolas públicas. El peligro o el riesgo lo identifican en el hecho de hacerse las fotos no en el uso que se haga de ellas.Cuando se comparten fotos a través de las redes sociales los y las adolescentes no ven, a priori, que eso pueda representar una dificultad o un peligro para ellos; sino que básicamente lo conciben como un álbum de fotos virtual e interactivo que el usuario comparte con su entorno más cercano.La reflexión que se desprende de esta dinámica es que estos chicos y chicas no han valorado ladimensión de las consecuencias del acto y los riesgos que esto conlleva; no han cuestionado el recorrido que pueden tener esas fotos en Internet. A la hora de asumir riesgos, más que medir las consecuencias, elaboran fantasías e idealizan las oportunidades que les abre ante este medio de comunicación. Se idealiza su función, pensando en que tal vez, si circula por la Red los demás (sus conocidos) hablarán de ella, será popular, podrá hacerse famosa (simular a sus ídolos juveniles), conocer gente interesante, etc. La cuestión cambia cuando esas fotos se utilizan (o manipulan) sin el permiso de la persona que aparecen en ellas.Otra forma de uso de las tecnologías es la exposición y burla de las figuras de autoridad. Comoes habitual, los y las preadolescentes y adolescentes disfrutan desafiando la autoridad, o al menosjugando con la idea de sacar de su lugar a quienes detentan el poder. En este sentido es que con cierta frecuencia, mencionan episodios en que los profesores son ridiculizados en redes sociales a las que sólo los preadolescentes y adolescentes tienen acceso. Una de las formas en que esto sucede es mediante la alteración de fotografías de los profesores, usando programas de edición o dispositivos incorporados en los teléfonos móviles de última generación. Estas historias causan gracia y son en general respuestas normales a las tendencias más rupturistas de la adolescencia, las cuales en sí mismas como hechos aislados no revisten mucho peligro. Sin embargo se encuentran al filo del bullying vertical, donde el hostigamiento y desprestigio se produce hacia figuras de autoridad como los profesores (Barri, 2006).

Moderador: Y ¿Fotos de qué?Hombre: De los profesores.Moderador: Y ¿por qué las publican en Internet?Hombre: No sé. Para hacer gracia.Moderador: Ah, y hacen gracias con las fotos..?Hombre: Sí.Moderador: ¿Qué tipo de bromas? ¿Qué dicen de los profesores?

26

Page 27: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Hombre: Pues… les ponen dibujitos, cuernos y todo eso en internet. (Preadolescentes, entre 11 y 13 años)

Internet permite la construcción de espacios alternativos a la comunicación institucionalizada delcolegio y el instituto, produciendo una forma de “libertad” de las normas establecidas en estos espacios de socialización. Es en este sentido que el desprestigio de Otro, el “enemigo común”, el profesor al que los alumnos no quieren, opera como una forma de construir el propio prestigio.

Hombre: En el instituto no te puedes reír de él, porque te pueden expulsar o tepueden hacer algo, pero fuera puedes; fuera del horario ya puedes hacer lo quequieras, ¿sabes?Otro: Los profesores del instituto son muy exigentes. Son más exigentes que losdel cole.Mujer: No se enteran. (GD: Preadolescentes, entre 11 y 13 años)

El juego de las identidades.Un aspecto muy relevante es la forma como los y las preadolescentes y adolescentes están bastante familiarizados con la posibilidad de amoldar una identidad ad-hoc en Internet. Por una parte las construcciones de estas identidades falsas por parte de niños/as y adolescentes consultados, operan como una forma de proteger la privacidad y no ser detectados por potenciales agentes dañinos. Esto se da sobre todo en las alteraciones deliberadas de la identidad digital, tales como mostrarse como una persona mayor, o bien presentando datos falsos como una ubicación geográfica distinta, o bien utilizando un pseudónimo, todo como una medida de protección ante personas que pueden aprovecharse de la exposición de su intimidad para hostilizarlos. Esto resulta ser característico del manejo de perfiles que hacen los y las adolescentes, quienes parecen tener una mayor preocupación respecto de la imagen que construyen en sus espacios de sociabilidad, es decir, invierten más tiempo y energía en producir una imagen personal deseable e interesante, al tiempo que también se protegen más de los posibles ataques o burlas.

Yo directamente me he puesto un colegio falso. Para que la gente no me busque. (GD: Hombre, adolescente, entre 14 y 16 años)

Por otra parte, construyen identidades especiales para ser mostradas como una credencial del sí mismo. En otras palabras, presentan un perfil que les permite “personificar” una identidad funcional en el medio social en el que se desenvuelven. Podemos comentar que esto está en consonancia con lo que parece ser una permanente negociación de la frontera entre lo público y lo privado; entre la identidad personal y la identidad social; entre el “yo” y los “otros”. En esta línea es que se puede adoptar la estrategia de tener muchas cuentas de mensajería o bien diferentes perfiles en redes sociales, departamentalizando las relaciones, es decir, creando diversos ambientes o espacios de interacción para mostrar diferentes presentaciones (o versiones)

27

Page 28: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

del sí mismo y acceder a redes de contactos diferentes.

…la cosa es que yo tengo cuatro Messenger… (GD: Mujer, adolescente, entre 14 y 16 años)

Complementariamente, niños/as y adolescentes parecen tener claridad acerca del riesgo que supone la existencia de personas con perfiles falsos. Los perfiles falsos de adultos que se hacen pasar por niños son una amenaza a la que se siente expuestos, asociada a la posibilidad de abuso sexual.

M: Oye, hablado de esto. ¿Hay riesgos en internet?(Todos/as asienten y responden si)M: ¿Qué tipos de riesgos hay?Mujer: Pues, por ejemplo, te vayas por ejemplo al tuenti, imagínatelo y ves a unseñor que tú no conoces, un señor muy mayor…y tú estés hablando con él sinsaber que es muy mayor y te puede hacer un engaño.M: ¿Y qué puede pasar?Mujer: Pues que imagínate que te enamoras de ese señor o piensas que es unniño…algo así. (GD: Preadolescentes, entre 11 y 13 años)

El fragmento anterior nos permite además comentar nuevamente la ambivalencia entre ser niños/as, con un claro sentimiento de vulnerabilidad, y ser adultos independientes, evidenciando que en las interacciones mediadas por ordenador las fantasías amorosas existen, lo que en el caso de las niñas parece más claro como la posibilidad de ser engañadas. Esto no es un tema menor, puesto que hemos visto cómo se ha comprobado que la forma de abuso sexual más habitual utilizando Internet como medio de contacto es el estupro, frente a las violaciones forzadas. En este sentido es que el amor y las promesas relativas a éste permiten la cercanía con las víctimas (Wolak, et al. 2008).

El uso de las redes sociales en adolescentes mexicanos

En 2011 el número de internautas a nivel mundial llegó a la cifra de 1,374 millones lo que significó un crecimiento de 10% respecto del año anterior. De esa cifra, Latinoamérica participa con 118 millones de internautas, de los cuales casi el 60% se ubican en Brasil (con alrededor de 70 millones) y 30% en México donde hay aproximadamente 35 millones de usuarios. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI)1, el 37% de esos 35 millones tienen entre 6 y 17 años y el 60% entre 6 y 24 años. Esto indica que son los jóvenes quienes concentran el uso de las redes y por lo mismo quienes están más expuestos a sufrir algún perjuicio. Pero lo paradójico

28

Page 29: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

es que niños y jóvenes no perciben ningún peligro. Y por desgracia los adultos nos desentendemos del tema dejando a los menores navegar a sus anchas en esos mares llenos de tormentas, tiburones con múltiples hileras de dientes y pulpos con grandes tentáculos. En efecto, según un estudio 45% de los niños y adolescentes tienen la computadora en su habitación, lo que significa que navegan sin supervisión de padres o tutores.En la Conferencia Internacional de Protección de Datos celebrada en México en 2011, Korina Velázquez destacó que un pederasta desde la primera vez que contacta a un niño tiende a fotografiarlo o videograbarlo por Internet en un plazo de aproximadamente 15 días; esto si no es que el propio niño(a) ya subió imágenes a la red. En efecto, dado que, como hemos dicho, prácticamente la mitad de los menores tienen la computadora en su habitación, 37% de ellos aprovecha esta situación para usar la webcam para “conocer” y que lo “conozcan”. Asimismo 36% de adolescentes entre 12 a 18 años reconoce que ha publicado imágenes suyas (fotos o videos) en poses “provocativas”.

Cabe resaltar que México ocupa el tercer lugar en delitos cibernéticos; la mitad de ellos están relacionados con la pornografía infantil. Entre abril del 2008 y noviembre del 2011 se han atendido por parte de la policía cibernética al menos 5 mil 582 denuncias de pornografía infantil, y en muchos de estos casos los menores que se han visto involucrados ni siquiera tienen conocimiento de ello. De acuerdo con una nota publicada por la revista de derecho informático Alfa-Redi el 19 de octubre de 2009, “el boom de las redes sociales en Internet ha contribuido al incremento de la desaparición de menores de edad en Lima, muchos de los cuales caen en manos de trata de personas”.

16 Puntos sobre usos de internet en los adolescentes mexicanos

Los adolescentes representan el segmento de internautas más grande en México al ocupar el 30 por ciento del total de usuarios de internet en el país.

IAB México y Millward Brown publicaron su más reciente informe donde arrojan datos relevantes sobre la manera en que los teens mexicanos oucpan la red de redes. A continuación detallamos 16 de ellos.

Los teens ven más videos y series en internet que en la televisión.Es el grupo de internautas que más juega, descarga música y ve películas o videos en línea.▪ La mayoría pasa entre dos y cinco horas navegando en internet, aunque el 33 por ciento pasa

más de cinco horas utilizando el medio de forma activa.▪ Las consolas de videojuegos son un dispositivo característico de este segmento. Uno de cada

cinco adolescentes que usan internet más de cinco horas al día posee uno de estos aparatos.

29

Page 30: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

▪ En 2010 las páginas de correo electrónico fueron las más visitadas por los adolescentes (62 por ciento. En 2011 las redes sociales son los sitios más visitados con el mismo porcentaje.

▪ 50 por ciento realiza compras / pagos en línea.▪ 44 por ciento lee contenidos en línea.▪ En 2010 la actividad más importante era chatear. En 2011 la principal actividad fue la

búsqueda de información.▪ La mayor parte de la información que obtienen online es en enciclopedias en línea, redes

sociales y buscadores.▪ El 76 por ciento busca interactuar con las marcas a través de las redes sociales.▪ La cantidad de compras online que realizan se duplicó de 14 por ciento en 2010 a 28 por ciento

en 2011.▪ Nueve de cada diez teens están registrados en alguna red social. El 94 por ciento está inscrito

en Facebook, el 45 por ciento en Twitter, un 11 por ciento en Blogger y un 5 por ciento en LinkedIn. Redes sociales como Hi5, MySpace, Sonico y Metroflog disminuyeron el número de registros.

▪ En redes sociales, siete de cada diez usuarios ven fotos de sus contactos y les envían mensajes, cinco de cada diez revisan la información de sus contactos y cuatro de cada diez suben fotos y buscan personas.

▪ En redes sociales, el 27 por ciento escribe sobre alguna marca o servicio, el 40 por ciento pertenece a una fan page, el 83 por ciento ve anuncios publicitarios y el 57 por ciento lee lo que los otros usuarios hablan sobre una marca o servicio.

▪ En 2011 tuvieron una mayor disposición para ver publicidad por internet (75 por ciento) que en 2010 (67 por ciento).

Para obtener estos datos se levantaron mil 129 entrevistas durante julio y agosto de 2011 a través de un panel de internautas. El 42 por ciento de los adolescentes participantes fueron mujeres y el 58 por ciento hombres.

Adolescentes mexicanos altamente digitalizados y vinculados a internet

Recientemente el IAB México, Millward Brown y Televisa Interactive Media, presentaron la cuarta entrega del tercer Estudio de Consumo de Medios Digitales. En el estudio se detallan los hábitos de navegación de los adolescentes internautas mexicanos de 12 a 18 años de edad, además es especificar como utilizan internet y los dispositivos móviles.De acuerdo al estudio y a lo expresado por Bianca Loew, Directora General de IAB México; los adolecentes o “teens” navegan en promedio 4 horas al día y le dedican más tiempo a navegar en internet que a ver la televisión”, además de que un 28% de ellos pasan entre 5 y 12 horas en la red”Por su parte Ricardo Barrueta, Director General de Millward Brown México, declaró que este segmento de la población representa un enorme reto para los publicistas y especialistas de la

30

Page 31: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

industria digital, ya que alrededor del 80% de los adolescentes mexicanos, es decir;  8 de cada 10, se encuentran altamente vinculados con Internet, mucho más que con otros medios.Algunos de los datos más relevantes que aporta este estudio a la industria digital son:El incremento en el uso de celulares y smartphones como vía de conexión entre los adolecentes de 12 a 18 años, fue bastante significativo en el último año; convirtiéndolos en el grupo con un mayor acercamiento a Internet a través  dispositivos móviles que el resto de la población.En el presente aproximadamente el 50% (5 de cada 10 adolecentes), poseen una consola de videojuegos, aunque solo 2 de cada 10 lo usan como medio de conexión a internet.Por otro lado, en cuanto a su conducta el estudio mostro también algunos datos interesantes como por ejemplo:Los adolecentes disfrutan mucho del contenido multimedia, siendo las páginas de juegos y TV o videos en línea las más visitadas.Las actividades que mas realizaron durante el año fueron: Chatear, usar las redes sociales, revisar su correo electrónico, jugar en línea y bajar música.Cabe destacar – aunque no es algo inesperado -, que este grupo social destaca por utilizar de manera más intensa las redes sociales, siendo Facebook, Twitter y Metroflog las redes con mas usuarios registrados en su rango de edad.  De todas las redes sociales, Facebook es la página que visitan con mayor frecuencia, aunque también usan MySpace, Hi5 y Sónico.De sus actividades más destacadas en sus redes sociales, ver fotografías, chatear y publicar mensajes personales son las que están en primer lugar y a diferencia de los demás internautas, los adolecentes son el grupo que sube más contenido en video a internet.Los Adolecentes se mantienen como el grupo más cercano al medio digital. Forma parte de su vida cotidiana, les gusta tener el control de sus actividades en Internet y disfrutan utilizarlo.Tal como se mencionó en la presentación del estudio: Lograr captar su atención de este grupo social no será tarea fácil y representa un reto importante para los mercadólogos y publicistas, sobre todo debido a su actitud indiferente ante los anuncios digitales, ya que solo hacen caso a los contenidos publicitarios que ubican como “interesantes” y “llamativos”.Adicionalmente son un grupo que continuará ejerciendo el poder que les da el internet, al poder acceder a una gran cantidad de información y  de decidir lo que quieren ver, leer o escuchar.Recordemos que – tal como lo mencionamos en alguna ocasión en otro post-, son una sociedad muy voluble, cambiando de gustos y decisión constantemente por lo que cualquier cosa que no produzca satisfacción instantánea puede resultar aburrido. Ante este reto, las marcas tendrán que esforzarme mucho si quieren conseguir su atención, trabajando no solo en la creatividad de sus anuncios o campañas, sino también en sus mensajes, buscando que sean relevantes e interesantes para ellos.

31

Page 32: EL ADOLESCENTE ANTE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Bibliografía

(Estudio Redes Sociales en México y Latinoamérica 2011. AMIPCI) (http://www.iabmexico.com)(Garaigordobil, 2011; Villanueva, 2010)(Montserrat Castellana Rosell, 2007)(Patricio Cabello Cádiz, 2010)(Campos, 2009)

32