Pasión de Jesús
Según San Lucas
Jerusalén se convierte en el centro de la vida
de Jesús: todo su itinerario tiende a ella.
Templo
Jerusalén hoy, ciudad de las tres religiones.
Mezquita de la Roca, donde
estuvo ubicado el Templo.
Cuánto he deseado comer
con vosotros esta víctima
pascual, antes de mi pasión.
La última cena
El mayor
entre
vosotros, q
ue sea
servidor de
todos.
«Su único poder
es SERVIR»
Simón, yo he rogado por
ti, para que no desfallezca tu
fe.
Y tú, una vez
convertido, confirma a tus
hermanos.«No temáis a
la bondad ni a
la ternura.»
Amad a los enemigos.
Mirad, la mano del que me
entrega está conmigo a la
mesa.
Este es mi cuerpo...
Quiere estar con nosotros para siempre.
Padre, si quieres, aparta
de mí este cáliz...
La voluntad de Dios y la libertad humana se unen.
El huerto de los olivos, hoy
Lugar de oración
Sudó gotas de sangre, que
corrían hasta la tierra.
Iglesia de Getsemaní
Levantaos y orad para no caer en tentación.
La traición del amigo
¿Con un beso entregas al
hijo del hombre?
La negación de Pedro
Señor, ¡te seguiré
hasta la muerte!
Y Pedro lo negó
tres veces
Restos de la casa del sumo sacerdote.
Ante el Sanedrín
¿Qué necesidad tenemos ya de testigos?
No aceptaron que era Hijo de Dios
¿Lo aceptamos
nosotros, hoy?
Lugar del Sanedrín
Dejó libre al preso amotinado y a Jesús lo entregó
a su arbitrio.
No encuentro culpa alguna en
este hombre.
¿Cuántas veces “nos lavamos las
manos” ante la injusticia?
Casa de Pilatos
Herodes quería ver
milagros. Se burló.
Jesús callaba.
Palacio de Herodes
Camino del Calvario, Simón de
Cirene ayuda a llevar la cruz
Todos podemos ser cireneos...
Se hizo débil e
indefenso
Dios
sufre con
los que
sufren.
Vía Dolorosa
Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí...
¿Dónde está Dios?
Madre, aquí
tienes a tu hijo.
El ladrón que
murió a su lado
fue el primer
hijo pródigo que
regresó al
Padre.
Tú estarás conmigo en el paraíso.
Padre, perdóna
les porque no
saben lo que
hacen.
Muere el justo.
Padre, en tus manos
encomiendo mi espíritu.
Luz en el Santo
Sepulcro
Su último
aliento, la
última
ofrenda
El centurión, primero en dar
gloria a Dios:
Realmente este hombre era
inocente.
Descienden a
Jesús de la cruz
Las mujeres y
Juan, fieles hasta
la muerte.
Un hombre justo y
honrado le cedió
su sepulcro.
La multitud se dispersó, dándose
golpes de pecho.
Monte Calvario
Las mujeres
fueron para
observar el
sepulcro y
cómo habían
colocado el
cadáver.
Se volvieron, prepararon aromas y el
sábado guardaron el descanso.
Previsoras, atentas y amando hasta
después de la muerte.
«Quien ama mucho, piensa mucho.»
Santa Teresa.