Doc. 3 Perspectiva histórica del sistema monetario internacional

Desde hace miles de años, tanto el oro como la plata fueron obteniendo el estatus de dinero, lo cual quiere decir que son generalmente aceptados como medio de cambio o de pago de deudas.

Supón que tú tienes una carga de trigo y la quieres vender, puedes optar por intercambiarla por otra carga de tu interés, una carga de especias, o de seda o de porcelana, a esto se le llama trueque, sin embargo no todo mundo estaría siempre dispuesto a recibir esas mercancías. La otra opción es recibir algo, que consideras que más adelante casi todo mundo estaría dispuesto a recibir, entonces a esa mercancía o instrumento se le denomina dinero. Aunque muchas mercancías han funcionado como dinero, históricamente el oro y la plata han tenido el papel más relevante. A este tipo de dinero se le denomina dinero mercancía o dinero commodity, porque está elaborado con algo que tiene valor en todas partes.

Una vez que el oro y la plata adquirieron el estatus de dinero, hubo que resolver el problema de cómo medir la cantidad y la calidad de ambos. No existe oro o plata 100% puros, una pureza de 99.9% se puede considerar alta. Históricamente se han utilizado muchos niveles de pureza diferentes (también se les llama ley). Para resolver el problema se crearon las barras o lingotes, que muchas veces incluyen el sello de quien autentifica el metal. La otra presentación usual es la de monedas. La acuñación de monedas se volvió una actividad muy importante de los gobiernos, que establecieron casas de moneda. Durante la época colonial la casa de moneda de la Nueva España era una de las más importantes del mundo.

Un problema importante del oro y la plata es que son costosos de transportar y relativamente fáciles de robar, especialmente durante su traslado. De esta manera las personas no querían mantener todo su oro en su persona o en su casa, y prefirieron mantener una parte en alguna institución donde lo pudieran depositar, con el tiempo a este tipo de instituciones se les denominó la banca. A cambio de su oro, obtenían un vale de depósito, que no es otra cosa que un contrato donde el banco reconocía haber recibido el oro y estar dispuesto a entregarlo al dueño. Algunos de estos vales de depósito se convirtieron en vales al portador y se empezaron a intercambiar directamente, en lugar de intercambiar el oro. Si alguien quería su oro, simplemente acudía al banco, presentaba su vale y recibía el oro comprometido. Con el tiempo a estos vales se les denominó billetes y eran emitidos por bancos privados, denominados bancos de emisión. A este tipo de dinero se le denomina dinero convertible. El dinero por sí mismo no tiene valor, es sólo un pedazo de papel, pero representa una obligación de la entidad emisora, mientras las personas confíen en el respaldo de la entidad emisora, el billete tiene el valor como si fuera oro. Además del riesgo de robo de los billetes, entonces existía el riesgo de que si el banco de emisión quebraba, dejaba de cumplir la obligación de entregar el oro y entonces el billete perdía su valor.

Con el tiempo los gobiernos decidieron que la emisión de billetes era una actividad demasiado importante para dejarla en manos de bancos privados, por lo que cada gobierno se hizo cargo de la emisión de su propia moneda para lo cual se crearon los bancos de emisión estatal, lo que ahora se denomina banco central.

El banco central de los Estados Unidos es la Federal Reserve, comúnmente conocida como Fed. Se considera la institución financiera más importante del mundo. El banco central de México es el Banco de México, también conocido como Banxico y es la institución financiera más importante de México. Puedes consultar la página de la Fed en www.federalreserve.gov y la página de Banxico en www.banxico.gob.mx

Durante buena parte del siglo XIX imperó el bimetalismo, los billetes eran convertibles ya fuera en oro o en plata con una relación de intercambio de 15 onzas de plata por 1 onza de oro. Sin embargo hubo descubrimientos de plata muy importantes, lo que generó un intenso debate político, los agricultores y comerciantes querían que se pudiera seguir pagando en plata, mientras que los inversionistas querían que sólo se pudiera pagar las deudas con oro. Las grandes economías de la época, dentro de las que destacaba el Impero Inglés, adoptaron el patrón oro.

La Primera Guerra Mundial obligó a los gobiernos a suspender la convertibilidad de los billetes en oro, misma que intentaron retomar, pero sólo por periodos breves. Se empezó a desarrollar el dinero fiduciario, en este caso el gobierno y el banco de emisión no tienen la obligación de entregar oro a quien lo solicite. El dinero deja de estar respaldado por oro. El dinero tiene valor por la confianza de las personas en la institución emisora, y porque el gobierno recibe ese dinero para el pago de impuestos.

Hacia el final de la segunda guerra mundial (1944), representantes de los principales países industriales se reunieron en Bretton Woods, Estados Unidos, para diseñar el nuevo sistema financiero internacional. Se estableció el patrón dólar, en el cual todas las monedas tendrían un tipo de cambio fijo con respecto al dólar, también se estableció la convertibilidad del dólar al oro, donde los países podían convertir sus reservas en dólares en reservas en oro (Ver Doc-2). Además, se creó el Fondo Monetario Internacional (FMI) para ayudar a las economías que tuvieran problemas en su balanza de pagos.

En 1971, los Estados Unidos cancelaron la convertibilidad del dólar al oro, el dólar se convirtió en una moneda fiduciaria y los principales tipos de cambio se convirtieron en flotantes, es decir que su valor se determina por la oferta y la demanda en los mercados financieros. Quiero recalcar que a partir de 1971 (hace más de 40 años) se rompió la última liga que tenían la mayoría de las monedas al metal dorado. En la actualidad no hay ninguna moneda que sea convertible o cuyo valor esté respaldado por oro. Vivimos en un mundo de dinero fiduciario.

Ilustraciones

Algunas monedas históricas utilizadas en comercio internacional

Pepita de Oro Moneda PersaSiglo V AC

Mancus Inglés Real EspañolSiglo VIII DC Siglo XVIII DC

Sede de la Reserva Federal, Washington, D.C.

Sede del Banco de México, Centro Histórico, Ciudad de México

En el lado derecho, se alcanza a ver una parte de Bellas Artes