DIÓCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS MISIÓN DIOCESANA …acompañamiento de los sacerdotes y el equipo...

DIÓCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS

MISIÓN DIOCESANA CON PROFESIONALES,

EMPLEADOS PÚBICOS E INSTITUCIONES EDUCATIVAS ¿CUÁL ES TU COMPROMISO COMO IGLESIA?

AGOSTO 10 – 14 DEL 2015

1. Meta

Al finalizar la semana fuerte de trabajo en el marco de la misión 2015 con

profesionales, empleados públicos e instituciones educativas, los sacerdotes y los

destinatarios de la misión de la Diócesis de Santa Rosa de Osos, en ambiente de

comunión y la participación,

Han vivido la experiencia del encuentro y del compartir

Han renovado su compromiso cristiano, que conlleva a la responsabilidad en

la construcción de ciudadanía desde el ser profesional

Han recibido la invitación de sus sacerdotes para integrarse a los distintos

procesos pastorales de sus parroquias

Mediante la lectura orante de la Palabra de Dios, la formación, la integración y el

acompañamiento de los sacerdotes y el equipo parroquial de animación pastoral

(EPAP); para que asuman el compromiso evangelizador como Iglesia y den

testimonio como discípulos misioneros de Jesucristo en la sociedad

2. Metodología de trabajo para la semana

Lunes 10 de agosto

Se propone un visita a la los lugares

de trabajo de los destinatarios de la

misión (colegios, escuelas, alcaldía,

juzgados, comando de policía, etc),

con el fin de saludarlos e invitarlos a

participar en los días

correspondientes. Además, se les

deja una tarjeta que contiene una

oración como recuerdo de la misión.

Ver anexo 1

Martes 11 de agosto

Acción pastoral con los educadores,

personeros, contralores,

representantes de grupos académicos

Ver anexo 2




Miércoles 12 de agosto

Acción pastoral con la Administración

Municipal, contraloría, personería,

juzgados, etc.

Ver anexo 3

Jueves 13 de agosto

Acción pastoral con los profesionales

de la salud y la fuerza pública

Ver anexo 4

Viernes 14 de agosto

Ágape con todos los profesionales,

empleados públicos, educadores,

personeros estudiantiles, fuerza

pública, rama judicial, profesionales

de la salud, etc.

Ver anexo 5




Anexo N° 1

Estas tarjetas se enviarán a las parroquias en el transcurso de esta semana. Es

para entregarla el día lunes en la visita que se haga a los diferentes lugares de

trabajo de los profesionales, de las instituciones educativas y de los empleados

públicos




Anexo N° 2

ACCIÓN PASTORAL CON LOS EDUCADORES, PERSONEROS,

CONTRALORES, REPRESENTANTES DE GRUPOS ACADÉMICOS

LA CREATIVIDAD EN EL MAESTRO

EDUCADOR DE LA COMUNIDAD EDUCATIVA - FE VIVIDA EN COMUNIDAD (Mensaje del cardenal Jorge Mario Bergoglio).

TEXTO BÍBLICO “Medita estas cosas y fíjate en ellas. Así progresarás de tal manera que todos podrán darse cuenta. Cuídate de ti y de cómo enseñas; persevera en ello. Si así obras te salvarás tú y los que te escuchan…” (1Timoteo 4, 15) Oración: ORACIÓN DEL MAESTRO

Señor: Gracias por mi vocación a la enseñanza.

Concédeme ejercerla con amor, prudencia, sabiduría y paciencia.

Ayúdame a ver a mis alumnos con Tu mirada de misericordia

para sólo captar el bien en cada uno, conocer sus cualidades,

alentar sus sueños y proyectos, y enseñarlos con dulzura y firmeza

a corregir sus faltas y tropiezos. Que sepa compartir sus alegrías,

comprender sus inquietudes y consolar sus tristezas.

Maestro Bueno: Haz que logre enseñarles a ser

constructores de justicia y de paz, honestidad, fraternidad y perdón, defensores de la vida y la verdad.

Que sepa compartirles la fe, comunicarles esperanza,

animar su perseverancia y valentía, alentar su caridad y alegría

y sembrar en su corazón la voluntad de caminar Contigo y hacia Ti

dedicando sus dones y talentos




al servicio y al bien de los demás. Amén

Alejandra María Sosa Elízaga http://www.ediciones72.com/

INDICACIONES GENERALES Y SUGERENCIAS: El Comité Parroquial de Pastoral Educativa, los sacerdotes y el Equipo Parroquial de Animación Pastoral (EDAP), en articulación con las directivas educativas, preparan, organizan y motivan con anterioridad la participación del personal docente en la actividad de formación. Sensibilizar a todos los participantes, maestros, para que se sientan sector especial de la Pastoral de la Iglesia. (Ver Niveles de la Pastoral – Pastoral Sectorial). Los lugares para la o las actividades son concertadas por los organizadores. Se propone a continuación una actividad de formación para desarrollar con los maestros, quedando a libre decisión de los comités parroquiales de Pastoral Educativa si se aplica este tema u otro afín, de acuerdo con la realidad parroquial. Mensaje del cardenal Jorge Mario Bergoglio, S. J.

La reflexión versa sobre la esperanza, pero muy en particular sobre un componente esencial de su dimensión activa: la creatividad. Porque si estamos en un momento de creación histórica y colectiva nuestra tarea como educadores ya no puede limitarse a “seguir haciendo lo de siempre”, ni siquiera a “resistir” ante una realidad sumamente adversa: se trata de crear, de comenzar a poner los ladrillos para un nuevo edificio en medio de la historia; es decir, ubicados en un presente que tiene un pasado y —eso deseamos— también un futuro.

Nosotros, a la hora de ejercer nuestra creatividad, debemos aprender a movernos dentro de la tensión entre la novedad y la continuidad. Es decir, debemos dar lugar a lo nuevo a partir de lo ya conocido. Para la creatividad humana no hay ni “creación de la nada” ni “idéntica repetición de lo mismo”. Actuar creativamente implica hacerse seriamente cargo de lo que hay, en toda su densidad, y encontrar el camino por el cual a partir de allí se manifieste algo nuevo.

Ser creativos, en cambio, es afirmar que siempre hay algún horizonte abierto. Y no se trata solamente de un optimismo idiota que intentamos copiar de un prócer de hace dos siglos. La afirmación de que “lo que ves no es todo lo que hay” se deriva directamente de la fe en Cristo resucitado, novedad definitiva, que declara




provisoria e incompleta toda otra realización, novedad que mide la distancia entre lo actual y la manifestación del cielo nuevo y la nueva tierra. Distancia que solo salva la esperanza y su brazo activo: la creatividad que desmiente toda falsa consumación y abre nuevos horizontes y alternativas.

¿Cuántas veces podemos cerrar los caminos de renovación y crecimiento de una persona o de una institución educativa cuando declaramos resignadamente que “las cosas son así”, “funcionan así”, o que “con fulano no hay nada que hacer”? De todas las instituciones posibles, justamente las escuelas animadas por la fe cristiana son aquellas que menos deberían resignarse y quedarse con lo “ya conocido”. Nuestras escuelas están llamadas a ser signos reales, vivientes, de que “lo que ves no es todo lo que hay”, que otro mundo, otro país, otra sociedad, otra escuela, otra familia es posible. Llamadas a ser instituciones donde se ensayen formas nuevas de relación, nuevos caminos de fraternidad, un nuevo respeto a lo inédito de cada ser humano, una mayor apertura y sinceridad, un ambiente laboral signado por la colaboración, la justicia y la valoración de cada uno, donde queden afuera relaciones de manipulación, competencia, manejos “por detrás”, autoritarismos y favoritismos interesados.

Todo discurso cerrado, definitivo, encubre siempre muchos engaños; esconde lo que no debe ser visto. Trata de amordazar la verdad que siempre está abierta a lo auténticamente definitivo, lo cual no es nada de este mundo. Pensamos en una escuela abierta a lo nuevo, capaz de sorprenderse y ella misma aprender de todo y de todos. Una escuela arraigada en la verdad, que es siempre sorpresa. Escuela que es semilla, en el sentido de la palabra evangélica, de un mundo nuevo, transfigurado.

Les hago una propuesta: en una sociedad donde la mentira, el encubrimiento y la hipocresía han hecho perder la confianza básica que permite el vínculo social, ¿qué novedad más revolucionaria que la verdad? Hablar con verdad, decir la verdad, exponer nuestros criterios, nuestros valores, nuestros pareceres. Si ya mismo nos prohibimos seguir con cualquier clase de mentira o disimulo seremos también, como efecto sobreabundante, más responsables y hasta más caritativos. La mentira todo lo diluye, la verdad pone de manifiesto lo que hay en los corazones. Primera propuesta: digamos siempre la verdad en y desde nuestras escuelas. Les aseguro que el cambio será notorio: algo nuevo se hará presente en medio de nuestra comunidad.

Para enfrentar creativamente el momento actual debemos desarrollar más y más nuestras capacidades, afinar nuestras herramientas, profundizar nuestros conocimientos. Reconstruir nuestro alicaído sistema educativo, desde el reducido o prominente lugar que nos haya tocado ocupar, implica capacitación, responsabilidad, profesionalismo. Nada se hace sin los recursos necesarios, y no solo los económicos, sino también los talentos humanos. La creatividad no




es cosa de mediocres, pero tampoco de “iluminados” o “genios”: aunque siempre hacen falta los soñadores y los profetas, su palabra cae en el vacío sin constructores que conozcan su oficio.

La escuela que se juegue por responder a estos desafíos deberá entrar en una dinámica de diálogo y participación para resolver los nuevos problemas de modos nuevos, sabiendo que nadie tiene la suma del saber o de la inspiración, y que el aporte responsable y competente de cada uno es imprescindible. La exclusión socioeconómica, la crisis de sentido y valores, son una realidad que toca a todos, pero de un modo especial afecta a nuestros niños y adolescentes. Se hace necesario buscar formas eficaces de acompañarlos y fortalecerlos ante los riesgos que los acechan.

Preocupémonos para que nuestros maestros, nuestros directivos, nuestros capellanes, nuestros administrativos, sean realmente buenos y serios en lo suyo. El espíritu es importante, pero también lo es la competencia profesional. No para caer en el mito de la “excelencia” en el sentido competitivo e insolidario en que a veces se presenta, sino para ofrecer a nuestra comunidad y a nuestra patria lo mejor de nosotros, poniendo en juego a fondo nuestros talentos.

Si como educadores queremos sembrar verdaderamente las semillas de una sociedad más justa, más libre y más fraterna, debemos aprender a reconocer los logros históricos de nuestros fundadores, de nuestros artistas, pensadores, políticos, educadores, pastores... Quizás ahora nos estemos dando cuenta de que en la época “de las vacas gordas” nos habíamos dejado deslumbrar por algunos “espejitos de colores”, modas intelectuales y de las otras, y habíamos olvidado algunas certezas muy dolorosamente aprendidas por generaciones anteriores: el valor de la justicia social, la hospitalidad, la solidaridad entre las generaciones, el trabajo como dignificación de la persona, la familia como base de la sociedad...

DINÁMICA DE GRUPOS Oído el comentario anterior los educadores se reúnen en grupos para reflexionar en común estos puntos de vista:

1. ¿Qué enseñanzas podemos sacar de la lectura? 2. ¿Qué aplicación tiene esta lectura en el campo pedagógico? 3. ¿El medio social ayuda a formar en los jóvenes y en nosotros esas

características de comunidad? ¿Por qué sí? ¿Por qué no? 4. ¿Cómo evaluamos nuestro espíritu creativo dentro y fuera del aula?




Anexo 3

Acción pastoral con la Administración Municipal, contraloría,

personería, juzgados, etc.

“¿Tú tienes fe?; pues yo tengo obras. Pruébame tu fe sin obras y yo te probaré por las obras mi fe”. (Santiago 2,18)

TALLER VIVIENDO NUESTRA FE EN LA CONSTRUCCÓN DE COMUNIDAD Y

CIUDADANÍA

En una mesa estará una veladora encendida, la Sagrada Escritura abierta y algunas velas pequeñas apagadas. Todos reunidos en un mismo lugar realizan la oración y se lee el texto bíblico. Se saluda a los presentes y se les agradece por hacer aceptado la invitación. Se les hace una ubicación sobre el año de misión 2015. A modo de oración: Proclamemos todos, el salmo 15: Señor, ¿quién morará en tu tienda?, ¿quién habitará en tu santo monte? El que ando sin tacha, y obra la justicia; que dice la verdad de corazón, y no calumnia con su lengua; que no daña a su hermano, ni hace agravio a su prójimo; con menosprecio mira al réprobo, más honra a los que temen al Señor; que jura en su perjuicio y no retracta, no presta a usura su dinero, ni acepta soborno en daño del inocente. Quien obra así jamás vacilará. Dios permanece fiel en la vida de cada hombre y en su vida de comunidad Estamos llamados a crecer como personas y, por esto mismo, como comunidades en las que la gracia de la vida valga la pena y la alegría de ser vivida, respondiendo a los constantes cambios de nuestro entorno, como reflejo humano del amor y presencia de Dios que nos da origen y que nos convoca desde nuestra libertad a ser parte de ella eternamente, construyendo su reino en la ayuda mutua en cada comunidad.




Leamos y compartamos la palabra de Dios (Romanos 13,1-7): Cada uno en esta vida debe someterse a las autoridades. Pues no hay autoridad que no venga de Dios, y los cargos públicos existen por voluntad de Dios. Por lo tanto, el que se opone a la autoridad se rebela contra un decreto de Dios, y tendrá que responder por esa rebeldía. No hay por qué temer a las autoridades cuando se obra bien, pero sí cuando se obra mal. ¿Quieres vivir sin tener miedo a las autoridades? Pórtate bien y te felicitarán. Han recibido de Dios la misión de llevarte al bien, y si te portas mal, témelas, pues no tienen las armas sin razón. También tienen misión de Dios para castigar a los malhechores. Así, pues, hay que obedecer, pero no solamente por miedo al castigo, sino por deber de conciencia. Por la misma razón pagan los impuestos, y deben considerar a quienes los cobran como funcionarios de Dios. Den, pues, a cada uno lo que le corresponde: el impuesto, si se le debe impuesto; las tasas, si se le deben tasas; obediencia, si corresponde obedecer; respeto si se le debe respeto. Respondamos: ¿El cristiano como debe entender la autoridad? ¿Cuáles actitudes se oponen a la autoridad? ¿Cuál es deber de los gobernantes? ¿Qué sentido tiene obedecer a la autoridad? ¿Qué actitudes deben evitar los gobernantes para dirigir según el querer de Dios? Por subgrupos se leen las lecturas que colocamos a continuación Realicemos las siguientes lecturas, por subgrupos (cada grupo comparte y comenta entre sí) después de cada lectura, sacar 5 mínimos normativos importantes para regir la mentalidad y el obrar de la autoridad civil. Los cinco mínimos se escriben en un cartel y se exhibe a todos los participantes a manera de socialización.

1. La autoridad como fuerza moral La autoridad debe dejarse guiar por la ley moral: toda su dignidad deriva de ejercitarla en el ámbito del orden moral, « que tiene a Dios como primer principio y último fin ».En razón de la necesaria referencia a este orden, que la precede y la funda, de sus finalidades y destinatarios, la autoridad no puede ser entendida como una fuerza determinada por criterios de carácter puramente sociológico e histórico: « Hay, en efecto, quienes osan negar la existencia de una ley moral objetiva, superior a la realidad externa y al hombre mismo, absolutamente necesaria y universal y, por último, igual para todos. Por esto, al no reconocer los hombres una única ley de justicia con valor universal, no pueden llegar en nada a un acuerdo pleno y seguro ». En este orden, « si se niega la idea de Dios, esos preceptos necesariamente se desintegran por completo ». Precisamente de este orden proceden la fuerza que la autoridad tiene para obligar y su legitimidad moral; no




del arbitrio o de la voluntad de poder, y tiene el deber de traducir este orden en acciones concretas para alcanzar el bien común. La autoridad debe reconocer, respetar y promover los valores humanos y morales esenciales. Estos son innatos, « derivan de la verdad misma del ser humano y expresan y tutelan la dignidad de la persona. Son valores, por tanto, que ningún individuo, ninguna mayoría y ningún Estado nunca pueden crear, modificar o destruir ». Estos valores no se fundan en « mayorías » de opinión, provisionales y mudables, sino que deben ser simplemente reconocidos, respetados y promovidos como elementos de una ley moral objetiva, ley natural inscrita en el corazón del hombre (cf. Rm 2,15), y punto de referencia normativo de la misma ley civil. Si, a causa de un trágico oscurecimiento de la conciencia colectiva, el escepticismo lograse poner en duda los principios fundamentales de la ley moral, el mismo ordenamiento estatal quedaría desprovisto de sus fundamentos, reduciéndose a un puro mecanismo de regulación pragmática de los diversos y contrapuestos intereses (Compendio de la doctrina social de la Iglesia N° 396 y 397)

2. El valor de la sociedad civil

La comunidad política se constituye para servir a la sociedad civil, de la cual deriva. La Iglesia ha contribuido a establecer la distinción entre comunidad política y sociedad civil, sobre todo con su visión del hombre, entendido como ser autónomo, relacional, abierto a la Trascendencia: esta visión contrasta tanto con las ideologías políticas de carácter individualista, cuanto con las totalitarias que tienden a absorber la sociedad civil en la esfera del Estado. El empeño de la Iglesia en favor del pluralismo social se propone conseguir una realización más adecuada del bien común y de la misma democracia, según los principios de la solidaridad, la subsidiaridad y la justicia. La sociedad civil es un conjunto de relaciones y de recursos, culturales y asociativos, relativamente autónomos del ámbito político y del económico: « El fin establecido para la sociedad civil alcanza a todos, en cuanto persigue el bien común, del cual es justo que participen todos y cada uno según la proporción debida» Se caracteriza por su capacidad de iniciativa, orientada a favorecer una convivencia social más libre y justa, en la que los diversos grupos de ciudadanos se asocian y se movilizan para elaborar y expresar sus orientaciones, para hacer frente a sus necesidades fundamentales y para defender sus legítimos intereses. (Compendio de la doctrina social de la Iglesia N° 417)

3. El primado de la sociedad civil La comunidad política y la sociedad civil, aun cuando estén recíprocamente vinculadas y sean interdependientes, no son iguales en la jerarquía de los fines. La comunidad política está esencialmente al servicio de la sociedad civil y, en último análisis, de las personas y de los grupos que la componen. La sociedad civil, por




tanto, no puede considerarse un mero apéndice o una variable de la comunidad política: al contrario, ella tiene la preeminencia, ya que es precisamente la sociedad civil la que justifica la existencia de la comunidad política. El Estado debe aportar un marco jurídico adecuado para el libre ejercicio de la actividades de los sujetos sociales y estar preparado a intervenir, cuando sea necesario y respetando el principio de subsidiaridad, para orientar al bien común la dialéctica entre las libres asociaciones activas en la vida democrática. La sociedad civil es heterogénea y fragmentaria, no carente de ambigüedades y contradicciones: es también lugar de enfrentamiento entre intereses diversos, con el riesgo de que el más fuerte prevalezca sobre el más indefenso (Compendio de la doctrina social de la Iglesia N° 418)

4. LA AUTORIDAD COMO SERVICIO (Papa Francisco): El Papa Francisco, en primera Homilía en la Solemnidad de San José, ha recordado que "el verdadero poder es el servicio, y que también el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz". Además, señala que "debe poner sus ojos en el servicio humilde, concreto, rico de fe, de san José y, como él, abrir los brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente los más pobres, los más débiles, los más pequeños". Jesús de Nazaret nos recuerda a menudo que la vida es un don que ha sido entregado para ser ofrecido y que la vida no merece vivirse si no es desde el servicio. En cierta ocasión, cuando los hijos del Zebedeo le pidieron sentarse en su gloria uno a su derecha y el otro a su izquierda, Jesús les dijo unas palabras mágicas, que han sido el palpitar y el fundamento de millones de hombres y mujeres cristianos durante siglos: "Sabéis que los que son tenidos como jefes de las naciones, las dominan como señores absolutos y sus grandes las oprimen con su poder. Pero no ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, será esclavo de todos, que tampoco el Hijo del Hombre ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos" (Mc 1, 42-45). Estas palabras han marcado el sentido último de la autoridad en la Iglesia y deben ser para ti unas palabras determinantes que te harán descubrir si vas por el buen camino o debes de cambiar tu ruta casi 180 grados.

COMPROMISO: Para finalizar el encuentro, se pide a los participantes que a manera de oración, elaboren un compromiso para vivir la autoridad como servicio en su trabajo profesional. Aquel que desea orar su compromiso, se coloca de pie, enciende una vela, la sostiene mientras su oración y la coloca nuevamente encendida en la mesa




Anexo 4

TALLER CON PROFESIONALES DE LA SALUD

Y FUERZA PÚBLICA.

Para tener en cuenta:

Tener la hoja con la pregunta y el texto bíblico de Mateo 19, 16-22 para cada

participante luego del hecho de vida.

Tener la silueta del templo y los lemas del año en su reverso.

Motivar a que cada participante de este taller lleve la Biblia.

1. Oración.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

Canto: Iglesia soy.

Iglesia soy, y tú también, en el bautismo renacimos a una vida singular, y al

confirmar, hoy nuestra fe, lo proclamamos compartiendo el mismo pan.

No vayas triste en soledad ven con nosotros y veras a los hermanos

caminando en el amor, ven con nosotros y serás en la familia un hijo más

iremos junto caminando en el amor.

Yo le veré, envejecer, pero a mi madre aun con arrugas y defectos la querré, la

quiero más, pues sé muy bien, que ha envejecido sin dejarme de querer.

A continuación se lee el texto de Santiago 2, 18 y de manera espontánea compartir

los puntos de vista desde el texto en relación con su ser de profesionales. El

animador invita a los presentes a realizar súplicas, a las que respondemos Haznos

Señor discípulos tuyos.

2. Hecho de vida

Mi nombre es Lucía, soy enfermera hace 18 años en el hospital Pablo Tobón Uribe

de la ciudad de Medellín. Soy ama de casa y tengo dos hermosos hijos: Paulina y

Luis. Mi esposo se llama Roberto y es profesor. Somos una familia de sólidas bases

cristianas y estamos muy convencidos de nuestra misión como profesionales. Hoy

quiero compartir un hecho que marcó mi vida para siempre. Ocurrió el pasado 27

de junio de este año cuando realizaba mi turno en la unidad de maternidad. A eso




de las 7:30 pm llegó una mujer que presentaba dolores de parto; la conocía, pues

varias veces había venido a sus controles prenatales y sabía que este embarazo

presentaba altos riesgos. Algo me sorprendió: ella reflejaba en medio de su angustia

gran tranquilidad y se notaba en sus ojos alegría. La mujer fue internada y llevada

a la sala de partos; las contracciones aumentaban pero el diagnóstico no era

favorable. Iniciamos la intervención con gran cuidado. Fueron 30 minutos, los más

eternos y angustiantes de mi vida. Finalmente nación un varón, Andrés Felipe. En

la sala se sentía una alegría enorme que no sé cómo expresarla, pero… una

inesperada noticia embargó el recinto: el niño presentaba signos vitales débiles, su

corazón no respondía de manera eficiente. ¿Qué hacer? Las posibilidades eran

mínimas. Aunque la tristeza inundaba el rostro de aquella madre, de manera

tranquila nos pidió que buscáramos a un sacerdote para que bautizara el niño, pero

sería una tarea difícil salir a buscarlo, ya que el tiempo apremiaba. En ese momento

vinieron a mi mente mis dos bellos hijos y el momento de su bautismo, más

exactamente la charla que el sacerdote nos dirigió y en ella nos dijo algo muy valioso

que recordé con alegría: “Cualquier cristiano puede bautizar en peligro de muerte”.

Tomé de inmediato un recipiente con agua y con la ayuda de mis compañeras y el

padre de la criatura, efectuamos el sacramento. Aún tengo en mi mente aquellas

palabras que con esperanza, aun en medio de la tristeza expresé en ese momento:

“Andrés Felipe, yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.

Reflexionemos…

¿Cómo crees que terminó la historia?

¿Sabías que tú como profesional puedes ser cristiano en cada momento, a

ejemplo de Lucía?

¿Qué suscita en ti esta historia?

En este momento el facilitador entrega a los participantes una hoja con la siguiente

pregunta y la respectiva cita bíblica:

Si encuentras a una persona que nunca ha escuchado hablar de Jesús, ¿Qué

sería lo primero que le dirías?




Después de responder la pregunta, reflexiona con este texto:

San Mateo 19, 16-22

Oración

Señor, me acerco a Ti como el ese joven que se creía muy bueno. Quiero confirmar

qué he de hacer para ganar la vida eterna, qué tengo que cambiar, qué tengo que

hacer… Dame la gracia de saber escucharte y tener el valor de ser desprendido de

los bienes materiales, pero sobre todo, de mí mismo, para poder entregarme a tu

amor y vivir la caridad.

Petición

Jesús, no permitas nunca que me convierta en otro triste «joven rico».

Se comparten algunas experiencias del trabajo

3. CATEQUESIS

Para este momento se dan unas preguntas con unas ideas claves para dar el tema.

Lo esencial para dar a conocer es la triple misión que recibimos en el bautismo:

sacerdotal, profética y real. Los participantes descubren que pertenecer a la Iglesia

tiene unos deberes.

a. EL BAUTISMO TE HACE CRISTIANO Y TE COMPROMETE CON

LOS DEMÁS.

Todos ustedes saben el día en que nacieron. De verdad, ¿no es así? Celebran los

cumpleaños, todos. Todos celebramos el cumpleaños. Pero voy a hacerles una

pregunta que hice otra vez, y que voy a repetir otra vez: ¿quién de ustedes se

acuerda de la fecha de su bautismo? Levanten la mano. ¿Quién de ustedes? Hay

pocos, ¿eh? No muchos. Y no lo pediré a los obispos, para que pasen vergüenza,

¿eh? Hay pocos, ¿eh? Pero hagamos una cosa, hoy cuando regresen a casa,

pregunten: "¿En qué día fui bautizado?" Busquen. Éste es el segundo cumpleaños.

(Catequesis del Papa Francisco)

Nuestra triple misión.

Somos sacerdotes cada vez que nos dirigimos a Dios y le presentamos

nuestras inquietudes, ilusiones, dudas, preocupaciones, dificultades,




alegrías... nuestras necesidades y las de todo el mundo. Cuando nuestra

oración es universal y no nos centramos en nosotros mismos, estamos

ejerciendo el sacerdocio que hemos recibido por el Bautismo.

Somos profetas cuando anunciamos, con nuestra vida, a la persona de

Jesucristo, cuando somos consecuentes con nuestra condición de creyentes

y vivimos en verdad, sin querer esconder ante los otros nuestra fe.

Somos reyes cuando sabemos dominar y acallar todo aquello que nos aparta

de Dios, cuando somos dueños de nosotros mismos y de las circunstancias

que nos rodean.

Jesús fue sacerdote, profeta y rey, hacia Él tenemos que mirar si de verdad

queremos ser coherentes con el Bautismo que recibimos. Tomar conciencia

de nuestro compromiso bautismal es todo un programa de vida. Intentemos

profundizar en este sacramento y valorar el don que Dios nos ha hecho y nos

hace por medio del Bautismo.

Para responder en plenaria:

¿Recuerdas la fecha de tu bautismo?

¿Sabes qué misión te regala este sacramento?

¿Has desempeñado tu misión?

b. ¿A QUÉ TE INVITA LA IGLESIA DESDE TU SER DE

PROFESIONAL?

¿Eres cristiano y/o profesional?

¿Cómo une el bautismo estas dos realidades?

Previamente, el facilitador tendrá la silueta de un templo, la cual recortará en cuatro

partes. Se organiza el grupo de participantes en cuatro subgrupos. A estos se les

dará una parte de la silueta que en el reverso tendrá cada uno de los lemas de este

año. Cada grupo leerá el lema y dialogarán sobre él. Luego se comparte con los

demás y se va armando la silueta.

El moderador hará una corta catequesis donde se tenga claro que cada uno aporta

a la Iglesia desde su ser como cristiano y ciudadano. Finalmente terminará el taller

con la lectura del texto bíblico:




1 Co 12, 27-30

27 Vosotros sois cuerpo de Cristo, y cada uno un miembro de él. 28 Y Dios los

dispuso así en la Iglesia: primero apóstoles, segundo profetas, tercero doctores,

luego el poder de obrar milagros, después el don de curaciones, de asistencia a los

necesitados, de gobierno, de diversidad de lenguas. 29 ¿Son todos apóstoles? ¿O

todos profetas? ¿O todos doctores? ¿O todos tienen poder de obrar milagros? 30

¿Tienen todos don de curación? ¿O hablan todos lenguas? ¿O todos tienen don de

interpretación?

Palabra de Dios

4. Conclusión.

¿A qué me compromete este encuentro?

Cibergrafía.

http://es.catholic.net/op/articulos/5129/el-joven-rico.html

http://clarisasreus.blogspot.com/2014/02/sacerdotes-profetas-y-reyes.html

https://www.aciprensa.com/noticias/texto-completo-catequesis-del-papa-sobre-el-

bautismo-21020/

http://es.catholic.net/op/articulos/5129/el-joven-rico.html

http://clarisasreus.blogspot.com/2014/02/sacerdotes-profetas-y-reyes.html

https://www.aciprensa.com/noticias/texto-completo-catequesis-del-papa-sobre-el-bautismo-21020/

https://www.aciprensa.com/noticias/texto-completo-catequesis-del-papa-sobre-el-bautismo-21020/




Anexo 5

ÁGAPE

Para tener en cuenta:

Tener las suficientes copias para el primer momento en la que deben reunir

las firmas de los otros participantes y para la oración conclusiva del ágape.

Elegir con antelación a quienes organizarán los elementos del ágape y

quienes van a leer los distintos comentarios.

Tener dispuestos un lugar separado de donde se hará el ágape, los

recipientes para el lavatorio.

1. Ambientación y saludo:

¿QUÉ ES ÁGAPE?

El moderador comparte unas ideas claras de lo qué es el término ágape.

Agápe, es un término griego para describir un tipo de amor incondicional y reflexivo,

donde el que ama, sólo tiene en cuenta el bien del ser amado. Algunos filósofos

griegos del tiempo de Platón emplearon el término para designar con esta palabra

el amor universal, entendido como amor a la verdad o a la humanidad.

Los primeros cristianos emplearon la palabra ágape para referirse al amor especial

por Dios, al amor de Dios para con el hombre, e incluso a un amor que incluye el

sacrifico que cada ser humano debía sentir hacia los demás, es así, como nos lo

dice san Juan; “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que

todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna”. (Juan 3,16)

Por otra parte, en los primeros tiempos del cristianismo, “ágape”, era una palabra

utilizada para hablar de una comida en común, hoy es un banquete, pero el sentido

era una manifestación de amor, de dar algo con caridad, entregando algo sin

esperar recibir nada a cambio.

Dios es ágape, porque Dios es amor, Dios es caridad plena y total, como lo dice

San Juan: “Dios es Amor y quien permanece en el amor permanece en Dios y Dios

en él” (1 Juan 4,16b) y nosotros, hemos conocido ese ágape, por eso como

cristianos podemos decir: “Y nosotros hemos conocido el amor que Dios nos tiene,

y hemos creído en él. (1 Juan 4, 16a).




LECTURA: ¿Qué dice el texto? Del santo Evangelio según Mateo 14,13-21 Al oírlo Jesús, se retiró de allí en una barca, aparte, a un lugar solitario. En cuanto lo supieron las gentes, le siguieron a pie de las ciudades. Al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos y curó a sus enfermos. Al atardecer se le acercaron los discípulos diciendo: «El lugar está deshabitado, y la hora es ya pasada. Despide, pues, a la gente, para que vayan a los pueblos y se compren comida.» Mas Jesús les dijo: «No tienen por qué marcharse; dadles vosotros de comer.» Dícenle ellos: «No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces.» Él dijo: «Traédmelos acá.» Y ordenó a la gente reclinarse sobre la hierba; tomó luego los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, pronunció la bendición y, partiéndolos, dio los panes a los discípulos y los discípulos a la gente. Comieron todos y se saciaron, y recogieron de los trozos sobrantes doce canastos llenos. Y los que habían comido eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños. Palabra del Señor! UN MOMENTO DE SILENCIO ORANTE: para que la Palabra de Dios pueda entrar en nosotros e iluminar nuestra vida. ALGUNAS PREGUNTAS: para ayudarnos en la meditación y en la oración. ¿Qué personas actúan en el texto? ¿Desde dónde habló Jesús? ¿Qué sintió al bajar de la barca? ¿Qué le pidieron los discípulos que hiciera respecto a las gentes que lo escuchaban? ¿Qué les respondió Jesús? ¿Qué diferencia hay entre la actitud de Jesús y la de los discípulos? ¿Qué alimentos tenían en ese momento los discípulos para ofrecer? ¿Qué hizo Jesús con esos alimentos? ¿Cuándo hizo algo parecido? ¿Alcanzaban para todos? ¿En qué hora del día y en qué lugar Jesús multiplicó los panes? ¿Después de repartirlos alcanzaron, faltaron o sobraron? ¿Cuánto?




MEDITACION: ¿qué me dice? ¿Qué nos dice?

- ¿Cómo veo la realidad de mi pueblo y particularmente de mi comunidad hoy? ¿Cuáles son sus necesidades?

- ¿Te esfuerzas por realizar gestos de solidaridad hacia los que están cerca de tí compartiendo el camino de la vida? Ante los problemas concretos de tus amigos o parientes, ¿sabes ofrecer tu ayuda y tu disponibilidad a colaborar para encontrar vías de solución?

- ¿Cómo es mi mirada hacia la gente que muestra cualquier tipo de necesidad a mi alrededor?

- ¿Soy capaz de desprenderme de mis panes y mis peces, para compartirlos con los demás?

- ¿Soy capaz de multiplicar los dones que Dios me ha dado, para ponerlos al servicio de los demás?

- ¿Es la palabra de Dios el alimento que deja satisfecha mi alma? - ¿Es la Eucaristía la fuente de mi compromiso cristiano? - ¿Qué relación hay entre la multiplicación de los panes y el ejercicio del

pastoreo en una familia o en una comunidad? - ¿Qué me enseña el relato de la multiplicación de los panes para que mi

compromiso como discípulo de Jesús sea real y efectivo? ¿Qué valor tiene el compromiso solidario –desde una vida de fe- con el hermano en nuestro país?

- Jesús, antes de partir el pan, eleva los ojos al cielo: ¿sabes tú dar gracias al Señor por el don diario del pan? ¿Sabes compartir tus bienes con los demás, especialmente con los pobres?

Comentario del texto: Un periodista compró un pan de un kilo y medio y se paró en las esquinas de las calles muy concurridas de diferentes ciudades. En Hamburgo se rieron de él. En Nueva York fue detenido por la policía. En Nigeria varias personas estaban dispuestas a trabajar tres horas por ese pan. En Nueva Delhi, en un abrir y cerrar de ojos, se juntaron un sinnúmero de personas que querían trabajar todo un día por ganarse ese pan. Hay una clase de hambre que se puede saciar con un pan de kilo y medio. Hay otra que no se puede satisfacer ni con un pan de cinco kilos. Digo: pan común, y me




refiero al hambre de amar y ser amado, de comprensión, de ser escuchado, de paz y de justicia, de cariño y felicidad. Hay millones que sufren esta clase de hambre, física y espiritual, inmensamente grande. Entre los relatos de los milagros de Jesús, la multiplicación de los panes es el único que se encuentra en los cuatro Evangelios. Mateo y marcos lo traen cada uno en dos versiones un poco diferentes. Esta insistencia nos indica que para los primeros cristianos la multiplicación de los panes por Jesús tenía una importancia excepcional, y que estos relatos se usaban con mucha frecuencia en la predicación y las catequesis. La imagen de una multitud que se encuentra en el desierto y no tiene alimentos, nos recuerda al pueblo de Dios después de salir de la esclavitud en Egipto. Encontrarse en el desierto es lo mismo que decir: encontrarse en peligro de muerte. En el tiempo de Moisés, Dios no permitió que su pueblo muriera de hambre en el desierto, sino les dio el maná, el agua y las codornices. Los libros de los Reyes que nos cuentan que el pan o la harina se multiplicó también en tiempos del profeta Elías (1 Re 17,9-16), e igualmente en tiempos de Eliseo (2 Re 4,42 ss.), gracias a la palabra de Dios que dice: “comerán y sobrará”. En tiempos de la Antigua Alianza se hizo común la idea de que Dios dará a su Pueblo un alimento abundante y gratuito. Hubo fe en que el Mesías repetiría el milagro del maná. La multiplicación de los panes realizada por Jesús pone de manifiesto que Él supera a los grandes personajes del AT, que Él es el Mesías y que en Él se cumplen plenamente las promesas de Dios. Jesús es el pan verdadero que satisface todas las necesidades humanas. El relato de la multiplicación de los panes recuerda en muchos detalles la “Fracción del pan”. Con este nombre los primeros cristianos llamaban a la Eucaristía, la Santa Misa. Jesús satisface el hambre de la multitud, reunida alrededor de Él, a la hora de la tarde, la misma hora que la de la Última Cena, o aquella en que Jesús se quedó con los discípulos de Emaús para la “Fracción del pan”. Llama la atención el que el evangelista ha pasado por alto la explicación del modo en que Jesús realizó el milagro, pero sí se detiene en todos los gestos y palabras de Jesús al pronunciar la bendición y el partir el pan. Son los mismos gestos y palabras con los que Jesús instituyó la Eucaristía. Además, Jesús no quiere hacer nada sin participar de sus discípulos. Pide nuestra colaboración. “No es necesario que se vayan; denles de comer ustedes mismos”. Aunque los comensales sean muchos y el alimento poco, va a alcanzar para todos, y, sobrará, si se comparte lo que se tiene. Jesús encarga a sus discípulos distribuir el pan bendecido entre la gente. El Señor quiere que compartamos la fe y la vida. Que todos se puedan sentar y sentir cómodos. Aunque sea muy poco lo que




podamos aportar, el Señor transformará ese poquito, dado con generosidad, en algo maravillosamente grande.

ORACIÓN: ¿qué le digo? ¿Qué le decimos?

Oraciones espontáneas. ACCIÓN: ¿A qué me comprometo? ¿A qué nos comprometemos?

PREPARÉMONOS PARA VIVIR ESTA EXPERIENCIA DE AMOR Y COMUNIÓN.

1. ¿QUIÉN ES EL QUE ESTÁ A MI LADO?

Se le entrega a cada participante la hoja impresa correspondiente. Cada participante

trata de encontrar a alguien que reúna los requisitos de las preguntas. La persona

que reúna el requisito pondrá su nombre en la línea, junto a la pregunta. Todas las

firmas deben ser de personas diferentes.

1. Alguien que tenga el mismo color de ojos que tú_____________________ 2. Alguien que le guste cantar cuando se está bañando_________________ 3. Alguien que haya nacido en el mismo mes que tú____________________ 4. Alguien que vea más de 5 horas la televisión al día___________________ 5. Alguien que le guste mucho reír__________________________________ 6. Alguien que pueda hacer bizcos__________________________________ 7. Alguien que tenga una familia con más de 4 hermanos________________ 8. Alguien que sea el menor de su familia_____________________________ 9. Alguien que le guste amar a Dios y a María_________________________ 10. Alguien que le guste cantar música moderna________________________ 11. Alguien que le guste cocinar_____________________________________ 12. Alguien que haya visto la misma película 3 veces____________________ 13. Alguien que tenga un animal en su casa___________________________ 14. Alguien que le guste leer y estudiar_______________________________ 15. Alguien que tenga más de 6 letras en su primer nombre_______________ 16. Alguien que le guste hacer deporte_______________________________ 17. Alguien que sea el mayor de su familia ____________________________ 18. Alguien que tenga el mismo color de zapatos________________________ 19. Alguien cuyo nombre empieza por la “A”___________________________ 20. Alguien que te gustaría conocer mejor_____________________________




2. LA AYUDA MUTUA CREA BUENAS RELACIONES

Llegados al lugar para este momento, se lee el texto de Juan 13, 3-10 luego se

leerá el comentario e inmediatamente los participantes se lavan las manos

mutuamente. Se debe tener agua y toalla

Es ahora cuando Jesús nos enseña que amar no es un estado emotivo, ni un sentimiento para con algunos o una idea hermosa en la cabeza. Es donarse efectivamente. De este modo, el lavatorio equivale a vivir en el amor, sirviendo uno al otro con total desinterés. Cristo se dará como Alimento en la Eucaristía y como Víctima por nuestros pecados en la cruz. Si para alguien el amor es una palabra hueca, que mire a Cristo. Allí comprenderá qué signifique amar de verdad. Agua. Lavarse las manos mutuamente. Canto: Amémonos de Corazón o uno apropiado

3. SENTADOS A LA MESA PARA COMPARTIR EL PAN

A continuación los participantes llegan al lugar donde se encuentra la mesa sólo con

el mantel. Si se desea que los participantes se sienten en el suelo, se tiene entonces

el tapete o los cojines para cada uno.

Alguno de los participantes realiza el siguiente comentario:

Queridos amigos, congregados todos alrededor de la mesa, recogemos los frutos

obtenidos durante este encuentro. Hacemos el gesto de Jesús con sus apóstoles

que compartieron en amor y unidad el alimento. Hoy salimos como cristianos

profesionales comprometidos con nuestra labor y nuestro ser de Iglesia. Vivamos

con alegría este signo de comunión.

Al moderador hace caer en la cuenta a los participantes de que aun en la mesa no

hay nada para compartir por ello, se van a traer y ofrecer a Dios todo aquello que,

a bien, hay para esta acción significativa. Previamente el moderador elige a unos

cuantos para presentar los elementos esenciales para el ágape.

Pan: al Señor presentamos este pan que hoy nos une. Oremos por tantos que sol

a sol labran la tierra para hacerlo posible en nuestras mesas.

Vino: (u otra bebida que se tenga para el momento). Esta bebida cura nuestra sed

y renueva nuestras fuerzas para continuar el trasegar de la vida. Pero hoy le




pedimos a Dios que aumente nuestra sed espiritual, para sentiros siempre como

creaturas necesitadas de su mano poderosa.

Luz: la oscuridad como ausencia de luz, hace que nos sintamos inseguros,

incapaces de caminar o de poder palpar los colores de la naturaleza e incluso no

podemos ver a quien está a nuestro lado. Que Dios nos de la gracia de ser hijos de

la luz y caminar siempre de su lado.

El siguiente elemento es la Palabra, para este momento se le pide a los presentes

ponerse de pies y recibirla con alegría, entonando la canción “Tu Palabra me da

vida”. Al llegar el participante que lleva la Biblia, la entrega a otro participante que la

irá pasando al que está a su lado. Finalmente el moderador la recibe y pronuncia el

texto de Hechos de los Apóstoles 2, 42-47

Moderador: hermanos, el Señor Jesús nos ha dado el privilegio de encontrarnos

con su Palabra, nos ha señalado su camino, nos ha interpelado con su enseñanza

es hora de manifestar que le amamos reconociendo la importancia del prójimo.

Cada uno tomará de la mesa un pan y lo entregará a uno de los que está en el

ágape y dirá: Amigo profesional: recuerda tu compromiso como cristiano.

LA ORACIÓN NOS COMPROMETE

Una vez terminado el compartir el moderador invitará a los presentes a orar la

plegaria para la misión con los profesionales, empleados públicos e instituciones

educativas:

Señor, ábrenos los ojos para ver la realidad como Tú nos enseñas a verla. Que nuestra mirada, ancha y amorosa como la tuya, llegue a las personas y a los hechos de la vida. Haznos valorar todo el bien que hacemos y el que podríamos hacer. Pon en nuestras manos acciones que liberen, que curen, que transformen. Pon en nuestra boca las palabras que iluminen y fortalezcan. Ayúdanos a vivir permanentemente nuestro compromiso cristiano y nuestro compromiso ciudadano de construir un mundo más justo y en paz. Te lo pedimos, Jesús, que eres camino, verdad y vida. Amén. Moderador: hermanos conscientes del amor de Dios, oremos juntos con las

Palabras que Jesús nos enseñó. Padre Nuestro…

DIÓCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS MISIÓN DIOCESANA …acompañamiento de los sacerdotes y el equipo...

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