CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas...

50
CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al viejo, cuando Él abrió sus ojos por la mañana.....La mirada del Viejo siguió lentamente los rayos dominicales del sol, que se deslizaban opacos a través de las gruesas cortinas.Se reflejaron en el enorme tablero sobre-dimensional de madera, que le habían regalado sus compañeros de equipo con ocasión

Transcript of CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas...

Page 1: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

CURSO DE AJEDREZ“ Las piezas sobre la mesa “

El gato ajedrez

Un cuento de ajedrez por

Andreas Keil

¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al viejo, cuando Él abrió sus ojos por la mañana.....La mirada del Viejo siguió lentamente los rayos dominicales del sol, que se deslizaban opacos a través de

las gruesas cortinas.Se reflejaron en el enorme tablero sobre-dimensional de madera, que le habían regalado sus compañeros de

equipo con ocasión de su 90 aniversario.

Page 2: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

Ciertamente, ya había pasado hacía mucho la época en que era respetado

como un adversario temible allá en su

tierra natal, pero no había disminuido en nada su entusiasmo

por el juego y su afán de estar a

disposición de su club de ajedrez.Para hoy estaba

fijado un encuentro importante.

 El Viejo no se hizo de rogar demasiado, cuando el equipo le pidió que volviera a sentarse frente al tablero.

Pero también sabía que se lo habían pedido tan sólo como acto de respeto frente a Él. No solamente apenas había

jugado en los últimos años, sino que le costaba cada vez más concentrarse ante el tablero durante horas.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Las casillas blancas cegaron sus viejos párpados, mientras las negras le parecían más nítidas que nunca.

Su mirada se deslizó casilla por casilla a lo largo de la diagonal

negra, desde h8, donde solía montar con éxito una barricada para su rey, pasando por g7, su casilla preferida para el fianchetto, a f6 y c3, donde Él planteaba a veces un sacrificio,

hasta la esquina distanciada de a1, donde Él, con frecuencia, había

podido hostigar peligrosamente a los reyes blancos cobijados en su

enroque largo.

Page 3: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

Por supuesto, nadie tenía que presentarle. Todos conocían sobradamente su nombre y su historial. La mayoría de los

presentes habían sido sus discípulos en ajedrez.Ahora Él estaba dispuesto a jugar, como siempre, con la

máxima concentración.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Además, hoy habría de enfrentarse con Joven, un jugador agresivo y ascendente, que le había vencido con cierta facilidad, hacía algunos

años.Sí, era consciente de la dificultad de

su tarea, pero Él no temía una posible derrota. Hacía años que esto

no le inquietaba.Cuando el capitán del equipo leyó

los emparejamientos con una sonrisa pícara –bajo la mirada divertida de

los otros jugadores – anunció: “tablero 8: Joven contra Viejo”, el

Viejo sintió un hormigueo desafiante en las puntas de sus dedos.

Page 12: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Variantes tranquilas, tipo dragón o erizo, que no produjesen dificultades a las negras como podría ser un avance c4 de la blancas. Seguramente debía haber permanecido ya durante

varios minutos con los ojos fijos en el tablero, cuando se acercó el capitán, un caballero de pelo gris, de algo más de

sesentas años.

Joven jugaba muy rápido, con una

sonrisa algo impertinente en su rostro. Una siciliana abierta con 5. f3; el

Viejo respiró profundamente. En realidad, siempre

prefería desarrollarse

tranquilamente, enrocar, y después, poco a poco, desde

una posición segura, pero activa, ir

buscando huecos en el campo contrario.

Page 13: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Cuando Él era joven, siempre había

preferido hundirse con las banderas

enhiestas frente al viento, antes que dejarse arrastrara

una posición que no se aviniese con su estilo de juego.

Page 17: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Esto ya empieza a tener buen aspecto’, pensó el Viejo, una vez que se decidió por esta serie de jugadas. Pero no las

tenía todas consigo si el adversario jugaba la lógica 8. exd5, que recomienda la teoría. Sin embargo, su agresivo

adversario había preparado otra cosa.

Page 18: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

El Viejo trató de calcular algunas variantes, pero ya no lo consiguió. Finalmente, Él hubo de resignarse a la evidencia:

aquella no sería una tranquila partida posicional. Su adversario sacó una manzana de su bolsa y sorbió varios

tragos de una botella abigarrada, que llevaba la misteriosa inscripción “Energy Drink”.

Tras ejecutar este largo

desplazamiento sobre el tablero, el dinámico Joven, se levantó, se estiró y, divertido, empezó a atar con agujetas el nudo de su bolsa de

comida. El Viejo percibió, que su adversario había

conseguido lo que quería:

¡Complicaciones!

Page 24: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Los brazos tranquilamente cruzados del contrincante, reforzaron su impresión. Sus dos tan apreciados caballos estaban clavados, y mientras que Él no podía ni soñar en

enrocarse, las blancas se disponían a colocar una torre en la columna “d” mediante el enroque largo.

En principio, el Viejo estaba ahora

contento consigo mismo por haber aceptado el reto y ganado un caballo por dos peones.Pero cuanto más

fijaba sus ojos sobre la dama blanca situada sobre la

gran diagonal negra, más peligrosa le

parecía.

Page 25: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

O después de De5+ encontrar un sitio seguro en f8 para su rey. O bien entrar en un final con un peón blanco doblado y aislado en la columna “c”?! Ahora, Joven se inclinó sobre el

tablero y olvidó su manzana. El Viejo presentía que su adversario cavilaría ahora prolongadamente.

Él temía el avance “e5”, y ya le parecía

escuchar un amenazador “¡Jaque

con perdida de la dama!” de su contrincante

después de Ae7 y Axd7+.

Esta vez, el Viejo ya no intentó calcular variantes, sino que

se basó en su intuición.

Tal vez sería posible eliminar el Cc3 y el

Ab5.

Page 26: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Vertió la bebida humeante de una olla metálica tuerta, sobre la cual hacía decenios que se gastaban bromas, pero que

nadie se decidía a tirar a la basura.Cuando el Viejo colocó prudentemente la olla al lado del

tablero, su adversario ejecutó un nuevo jaque.

¡ Jaque !

Page 34: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Hasta ahora, el Viejo se había limitado a jugar a la contra. En este momento temía

a la dama blanca, plena de vigor.

¿Cómo era posible que le hubiese

engañado del tal modo su sentido de

ajedrez, desarrollado durante cientos de partidas y

a lo largo de decenios?

¿No había hecho Él todo lo que había predicado a sus discípulos: un juego activo, mover cada pieza una sola vez

durante la apertura y cambiar rápidamente la piezas adversarias peligrosas?

Page 35: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Y ahora presentía que esa dama

blanca le impediría enrocar y le

arrebataría al menos una torre mediante

Dxh8+ ; o bien mediante Txd5, si Él intentaba apoyar la huída del monarca

negro.Por unos instantes,

el Viejo se sintió humillado.

Pero había llegado el momento de demostrar que Él seguía siendo alguien. Todo el entorno del tablero parecía envuelto en una neblina tenue. De pronto, su mano derecha se movió

temblorosa, como si no le perteneciese, en dirección a su dama negra que avanzó paso a paso.

Page 36: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

El Viejo sujetó firmemente en su mano el peón capturado y no se movió ni un milímetro.

Se dio cuenta de que los ojos de su adversario paseaban intranquilos de “h8” a “a1”, en una y otra dirección.

Joven puso su manzana al lado de la olla del Viejo; luego golpeó.

¡ Jaque !

¡Ganancia de la torre y jaque!

Page 37: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Sin ninguna inquietud, Él empujó su rey hacia delante tan solo con la punta de un dedo. El cuerpo del Viejo estaba en

máxima tensión. No prestó ninguna atención a su única torre superviviente en “a8”, dispuesta a sacrificarse a la voracidad

de la dama blanca.Él sólo tenía ojos para la casilla “a1”.

Page 38: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

¡ Jaque !

“¡Jaque!” Por supuesto, Joven había visto el mate negro con Da1, que le obligaba a perdonar a la segunda torre negra, y empezaba a moverse sin cesar nerviosamente en su silla.

Page 40: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

¡ Jaque !

Por quinta vez “jaque”, pero ya solo en voz baja. Joven había calculado, que 19. Dg5+ no le podía servir, porque después de 19...f6! 20. Dg7+ Af7 fracasarían todos los trucos a base de Td7+, ya que la dama negra desde “a2” cubría el Af7.

Mientras tanto, el Viejo fijó cautelosamente su mirada en el monarca blanco.

Page 41: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Nuevamente y solo con las puntas de sus dedos retiró el Viejo el rey a su

casilla nativa, con la impresión de que

destruía la esperanza de las blancas en Rf8?

Td8+.

Page 42: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

Casi sin moverse, el Viejo efectuó ahora otra jugada corta,

que habría de obligar a la señora blanca a regresar a la diagonal negra como por arte de

magia.

Page 44: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

¡De repente el Viejo estalló, quebrando su tensa postura de acecho! Él cogió su

torre y – seguramente con el

movimiento más rápido desde hacía muchos años – la

impulsó hacia delante....

Page 45: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

La segunda torre del Viejo era nuevamente sacrificada! Joven se hundió sobre el tablero. El cerebro del Viejo volvió a

funcionar como en los viejos tiempos. Con gran satisfacción Él vio, que tanto la desesperante 22. Rd2 (después de Dxb2+ 23. Re1 Tc1+) como la resignada 22. Dxc3 (después de Axc3 23. bxc3 Ab3!) ofrecería a las blancas un final inmediato de

mate.

¡ Jaque !

Estallido – “¡Jaque al rey blanco!”

Page 47: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

¡ Jaque Mate !

Joven dio rápidamente la mano al Viejo. Se levantó y retrocedió un paso. Sólo ahora y muy lentamente se disipó la neblina que envolvía el tablero para el Viejo. La manzana y el

té seguían intactos. Él no estaba solo: sin que lo hubiese advertido, todos los jugadores de su equipo y del otro

estaban agrupados en torno a su tablero y rompieron en un aplauso unánime. 

Page 48: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

 Le estrechaban la mano, le daban

afectuosas palmadas en el

hombro e incluso alguien le puso el rey blanco como

trofeo en el bolsillo de la camisa.

Cuando el Viejo, aquella noche,

estuvo acostado, vio el tablero grande de

madera a la luz mortecina de las

faroles de la calle.

Ya no sabía, si realmente se había levantado en el día de hoy o si Él había soñado durante todo el día. Cuando el Viejo cerró finalmente los ojos, Él presintió, que dormiría durante mucho, mucho tiempo... Sin embargo, Él no tenía ningún miedo y su

sonrisa resplandecía de felicidad.

Page 49: CURSO DE AJEDREZ “ Las piezas sobre la mesa “ El gato ajedrez Un cuento de ajedrez por Andreas Keil ¡Hoy le necesitan otra vez! Esta idea estimuló al.

Nota:

Mi entrenador juvenil de ajedrez Erich Uebe (1906-

2002) habría celebrado el 22 de

julio de 2006 su 100 aniversario. Fue

ajedrecista en activo hasta su último año de vida y socio del club de ajedrez de Bitterfeld desde

1914.

La partida en la que se basa este cuento, Paul Robson contra Andreas Keil, se jugó en la 1ª ronda de la final nacional de los

campeonatos de los Servicios Públicos de Gran Bretaña en Leeds, Inglaterra, el 26 de julio de 2006.