CONCLUSIONES:

Sabemos que la diferencia entre sustancias orgánicas e inorgánicas surge en que las primeras casi siempre contienen al menos un átomo de carbono; se hace entonces conveniente denominar orgánica cualquier sustancia que lo contiene, e inorgánica a cualquiera que no lo contiene. En este sentido, el mundo de la química orgánica es identificado con el mundo del carbono.

Se logró comprobar la presencia del carbono al obtener residuos como ceniza (conocido como el método de residuos de ignición); así también sus bajos puntos de ebullición.

Observamos la presencia de vapor de agua y de compuestos orgánicos como el C, H, O y N; este último por su olor característico (pelo quemado).

Se identificó la formación de fases y pigmentación al calentar las sustancias trabajadas.

Quimica General

Frederick Longo

Libros McGraw-Hill

p. 296