La vida de un enfermo mental puede ser destructiva y tormentosa por todo lo que conlleva tanto su diagnóstico, la lucha diaria y su tratamiento. Los pudimos constatar con las películas que analizamos. Además de conocer más a fondo los trastornos en teorías, pudimos apreciarlos en la praxis: la vida tormentosa de cada paciente.

Si bien, aun no es seguro si la locura es un grado superior de la inteligencia, lo que sí podemos saber es que este tipo de trastornos afectan la vida de los pacientes y los conllevan a hacer diferentes actos que pueden ser beneficiosos para la humanidad, indiferentes o caóticos para la misma (creación artística, algún suicidio o asesinatos masivos, respectivamente).

Lo necesario es hacer campañas para la eliminación de prejuicios a personas así. Reconocer que tienen un fuerte problema y que necesitan un apoyo colectivo, no sólo un apoyo que se quede dentro de un consultorio o un sanatorio.