Escuela de Padres Curso 2011-2012

CÓMO MEJORAR LA ATENCIÓN Y LA REFLEXIVIDAD DE NUEST ROS NIÑOS

Nuestros chicos viven rodeados de estímulos que nos les permite mantener la atención. La televisión, el ordenador, los móviles, las video consolas, un mundo visual que acapara la concentración de nuestros niños.

¿Qué debemos hacer?

Por eso en esta cuarta sesión de Escuela de padres estuvimos intentamos reflexionar sobre los hábitos de nuestra vida diaria relacionados con la atención, la relajación y buscamos estrategias para desarrollar y prevenir las dificultades en la atención de nuestros niños.

Todos llegamos a la conclusión de que algunas de las situaciones que se dan en nuestros hogares y en nuestras aulas y que provocan la falta de atención en nuestros chicos son:

— Repetir excesivamente las instrucciones.

— Perder los nervios.

— No estar bien establecidas las normas.

— Dan muchas órdenes a la vez.

— La existencia de demasiados elementos distractores (la televisión, la radio, el ordenador, el teléfono…).

— Hablar siempre gritando.

— No tener responsabilidades en casa.

— Ejercitar sólo el sentido del oído gritando o repitiendo las cosas veinte veces para que nos presten atención o nos hagan caso.

Por eso, será fundamental trabajar con nuestros niños la mejora de la atención y de la concentración tanto en la escuela como en la familia. Desde casa podemos ayudar a nuestros chicos a que siempre se fijen en los objetos y las imágenes que les rodean, contarles cuentos, tanto leídos como inventados, y pedir

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que luego nos los cuenten, jugar al veo-veo, aprender canciones tanto la música como la letra, taparles los ojos con un pañuelo y preguntarles qué ruidos oyen y de dónde provienen, acostumbrar a los niños a no darles instrucciones en voz alta y desde el otro extremo de la casa…

“Si quieres ser sabio, aprende a interrogar razonablemente, a escuchar con atención, a responder serenamente y a callar cuando no tengas nada que decir”

Johann Kaspar Lavater La sesión se nos quedó corta y nos faltó tiempo suficiente para tratar el tema de la autonomía, aprendimos la necesidad de hacer a nuestros hijos autónomos no sólo físicamente sino emocionalmente.

Maica Baíllo Orientadora del centro