Los colores de Burano

La isla de Burano, cercana a Murano, es una de las más pintorescas islas de la laguna

veneciana. La separan de Venecia 7 Km., unos cuarenta

minutos de viaje en vaporetto.Es famosa por la fabricación de artísticos

encajes de hilo, pero lo que más sorprende en la isla es el brillante y variado colorido de sus

casas, y los reflejos que se producen en el agua de sus canales.

Se cuenta que, desde muy antiguo, los

pescadores que habitaban la isla,

pintaban de diferentes colores

sus casas para distinguirlas en la

lejanía cuando volvían de la mar.Esta tradición se ha convertido en

motivo de atracción turística.

Burano es una isla de

intenso sabor marinero.

Las barcas de los

pescadores están

amarradas a lo largo de los canales

que cruzan la isla.

Burano es un paraíso para el fotógrafo.

Los llamativos colores de las fachadas de

sus viviendas unifamiliares son un placer para la vista.

La gente tiende su ropa al sol en

patios, plazas y calles.

Estos tenderetes añaden aún más

colorido a Burano.

La sencillez de sus habitantes,

pescadores ellos y

bordadoras ellas, y el múltiple

colorido de las casas,

convierten a Burano en una apacible isla

llena de alegría,

luminosidad y encanto.