Vivir en sociedad significa compartir vivencias y

bienes con otras personas. Al hablar de sociedad

también nos referimos a comunidades.

El Colegio Salvadoreño Inglés por ser una comunidad

educativa se basa en tres pilares fundamentales que

son: Moral, Conocimiento y Disciplina.

La moral fundamentada principalmente en las normas

o reglas que rigen la conducta humana. El conoci-

miento como virtud humana que lleva al éxito. La dis-

ciplina cuyo propósito es amoldar el carácter y com-

portamiento de los estudiantes e involucra tanto al

hogar como al colegio, con lo cual se pretende formar

estudiantes éxitosos con principios y valores morales.

Lo anterior es un reto colectivo que involucre a cada

miembro de la comunidad: padres, alumnos/as y docen-

tes.

Toda sociedad debe estar fundamentada en valores y

en pilares sólidos como: la familia, la disciplina, la

verdad y el amor, que contribuyan al desarrollo de una

salud mental adecuada de sus miembros y favorezca el

alcance de una convivencia Pacifica, lo cual es tarea

de todos/as.

Contenido:

Principios para vivir

en sociedad.

1

Valores y principios.

El primer principio

es la Familia

2

El segundo principio

es la disciplina.

El tercer principio es

la verdad.

3

El cuarto principio es

el amor.

4

¿Sabías que? 5

Colegio Salvadoreño InglésColegio Salvadoreño Inglés

PRINCIPIOS PARA VIVIR EN SOCIEDAD

AGOSTO –OCTUBRE DE 2011

BOLETÍN DE VALORES

I BIMESTRE

CUADRO DE EJES TRANSVERSALES Y

VALORES

EDUCACION MORAL Y

CIVICA

MORAL

CONOCIMIENTO

DISCIPLINA

EXCELENCIA

CIVISMO

IDENTIDAD

CULTURAL

TRABAJO

EDUCACION EN DERECHOS

HUMANOS:

AUTENTICIDAD

TOLERANCIA

OPTIMISMO

HONESTIDAD

Las gotas de agua La primera gota de agua Que cayó sobre la roca

Se deslizó y fue a perderse Silenciosa.

Siguiendo el mismo camino Cayó la segunda gota…

Y vino otra y otra…; y, lentas, Las gotas resbalaban en la roca.

El surco es ya una caverna

Que ardua roca devora. ¿Cuál ha sido la mas fuerte

Y potente de las gotas? No ha sido, no, la primera, Ni la segunda, ni la otra:

Fueron todas. Apeles Mestre ( poeta catalán)

VALORES Y PRINCIPIOS

1. EL PRIMER PRINCIPIO ES EL CUIDADO

DE LA FAMILIA

Familias sanas, son la base de la sociedad. Si las familias son disfuncionales, la socie-

dad es disfuncional. La desintegración familiar es una de las principales causales

del mantenimiento de problemas de tipo psicológico en los niños y niñas. Por lo

tanto debemos iniciar por aprender a resolver problemas que se presenten en el

entorno familiar, por medio de ser honesto e íntegros al admitir nuestros errores

y enmendarlos. Además practicar una adecuada comunicación que contribuya al

fortalecimiento de la misma. También es importante que toda familia se base en

limites bien establecidos por medio de reglas claras, lo que abone al orden y desa-

rrollo oportuno de las sociedades.

En la familia se deben buscar las mejores maneras para resolver los problemas,

pueden hacerlo por medio del diálogo; aprender a escuchar, guardar silencio, evi-

tar los pleitos, dedicar tiempo para la convivencia familiar con los hijos y cónyu-

ge; con ello contribuiremos al alcance de la convivencia pacifica.

Los padres debemos dedicar tiempo para hablar con nuestros/as hijos e hijas y

enseñarle lo que es bueno, para mostrarles afecto y transmitir conocimientos y va-

lores. Al no hacerlo, adquirirán patrones negativos fuera del hogar y en el futuro

estarán propensos al consumo de drogas, malos hábitos y adiciones psicológicas,

malas amistades y por ende tomaran malas decisiones que afectaran no solo su

persona sino a quienes les rodean..

Existe una serie de valores universales que debemos practicar para tener

una convivencia armónica y pacifica donde nos encontremos. Al poner

por obra los valores estos se convierten en principios que regirán la con-

ducta humana. Es por ello que se vuelve de suma importancia fomentar-

los en la familia, contribuyendo así a que los niños y niñas los tomen en

cuenta y logren saber como actuar en los diversos entornos donde se desen-

vuelven.

La práctica de valores como: la moral, el conocimiento, la disciplina, la exce-

lencia, el civismo, la identidad cultural, el trabajo, la autencidad, tolerancia y

optimismo ayudan al mantenimiento adecuado de la sociedad. Si no se practi-

can la salud mental de sus miembros esta en riesgo porque es fácil el sur-

gimiento de tensiones internas y conflictos con su realidad, ansiedades e

inseguridades, dificultades para adaptarse a normas sociales y por conse-

cuencia el desarrollo y mantenimiento de enfermedades psicológicas.

Recuerde que el fomento de dichos valores es tarea fundamental del ho-

gar con apoyo de la escuela.

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Si hay luz en el alma, Habrá belleza en la persona. Si hay belleza en la persona, Habrá armonía en el hogar. Si hay armonía en el hogar, Habrá orden en la nación. Si hay orden en la nación Habrá paz en el mundo.

Proverbio Chino

EL SEGUNDO PRINCIPIO ES LA DISCIPLINA

EL TERCER PRINCIPIO ES LA VERDAD

El significado de la palabra verdad abarca desde la honestidad, la buena fe y la sinceridad humana en general.

Así mismo involucra el ser auténticos con nuestro proceder evitando tener una doble moral, es ser real-

mente uno mismo del todo en cada situación. Por otro lado implica aceptar nuestros orígenes y cultura,

sintiéndonos orgullosos de nuestra identidad cultural.

Para poder relacionarnos sanamente con los demás debemos evitar la falsedad, la mentira ya que esto daña

grandemente las relaciones entre personas y es causa de violencia en las familias, comunidades y socieda-

des.

Por lo tanto la verdad ,debe ser el principio que nos conduzca a poner en practica valores como la auten-

ticidad y honestidad, lo que abone al alcance de una sociedad pacifica y sana.

Página 3

BOLETÍN DE VALORES

I BIMESTRE

La disciplina es algo bueno, es algo que tenemos que hacer todos los padres. Hoy en día hay muy pocos padres que saben disciplinar bien; más bien abusan de sus hijos en lugar de disciplinarlos, o los dejan sin ningún control ni límite. ¿Por qué será así? porque no hemos aprendido a vivir bajo discipli-na, y si no lo hemos logrado nosotros mismos ¿cómo podemos esperar que lo hagamos nuestros hijos?.

Parce difícil en ocasiones acomodarse a las reglas y normas que se establecen, ya que no nos gusta que nos digan que hacer, pero cuando aprendamos a vivir en disciplina lograremos vivir adecuadamente en sociedad. Para ello es primordial trabajar por tener claras las reglas familiares y las consecuencias que habrán por el incumplimiento de las mismas.

Todo padre que ama a su hijo lo disciplina, para que sepa la diferencia entre el bien y el mal y para que pueda controlar sus impulsos. La disciplina crea respeto. Aunque a nadie le gusta ser disciplinado, sin embargo, nosotros respetamos a nuestros padres cuando nos discipli-nan. El padre que no sabe disciplinar a sus hijos/as pronto pierde su respeto. De hecho, los niños suelen probar a sus padres, para ver si les harán respetar los límites que han puesto.

Entre más temprano les enseñe-mos a nuestros hijos/as disciplina y límites, más fácil va a ser que las respeten y adopten. Esto se logra más fácilmente mediante:

La formación de hábitos.

El aprendizaje de las reglas de la familia y la sociedad.

Asumiendo la responsabili-dad de nuestras acciones.

EL CUARTO PRINCIPIO ES EL AMOR.

A pesar de ser el último principio en ser men-

cionado, no deja de ser el primero en tener

que ser aplicado. Las normas de convivencia

en la familia y la escuela la disciplina y la

verdad no tendría sentido si la intención no

fuese el querer transformar las cosas para el

bien común, cuidando los bienes personales y

patrimoniales, por que; lo que le sucede a los

demás nos afecta individualmente.

La falta de afectividad entre las personas es

una de las principales causas de problemas psi-

cológicos.

El niño/a no se siente querido, amado, la es-

posa y el esposo han perdido la tolerancia, el

respeto, la comunicación se ha dejado a un

lado al igual que el cultivo del amor, por lo cual

no hay paz en el hogar.

La vivencia del afecto y el amor en la familia

es sumamente importante ya que definirá en

gran medida, junto con otras experiencias per-

sonales, la forma en que cada persona enfrenta-

rás la existencia y evalué cada experiencia de

su vida y su autoestima. Así la vivencia del

amor en la infancia permite que los niños y

niñas valoren la vida y a los demás.

Si las personas practicaran el principio del

amor, la convivencia en sociedad sería diferen-

te ya que estaríamos consiente de que la falta

de respeto al prójimo, la deshonestidad, infide-

lidad y falsedad dañan a la familia, la comu-

nidad y las relaciones interpersonales que se

establecen entre sus miembros.

Por lo tanto reflexionemos en nuestro proceder

y crezcamos como personas construyendo so-

ciedades sanas.

Desde los afectos ¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?

Que uno tiene que buscarlo y dárselo… Que nadie establece normas, salvo la vida…

Que la vida sin ciertas normas pierde formas… Que la forma no se pierde con abrirnos…

Que abrirnos no es amar indiscriminadamente… Que no está prohibido amar… Que también se puede odiar…

Que la agresión porque sí, hiere mucho… Que las heridas se cierran…

Que las puertas no deben cerrarse… Que la mayor puerta es el afecto…

Que los afectos, nos definen… Que definirse no es remar contra la corriente…

Que no cuanto más fuerte se hace el trazo, más se dibuja… Que negar palabras, es abrir distancias…

Que encontrarse es muy hermoso… Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida…

Que la vida parte del sexo… Que el por qué de los niños, tiene su por qué…

Que querer saber de alguien, no es sólo curiosidad… Que saber todo de todos, es curiosidad malsana…

Que nunca está de más agradecer… Que autodeterminación no es hacer las cosas solo…

Que nadie quiere estar solo… Que para no estar solo hay que dar…

Que para dar, debemos recibir antes… Que para que nos den también hay que saber pedir…

Que saber pedir no es regalarse… Que regalarse en definitiva no es quererse…

Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos… Que para que alguien sea, hay que ayudarlo…

Que ayudar es poder alentar y apoyar… Que adular no es apoyar…

Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara… Que las cosas cara a cara son honestas… Que nadie es honesto porque no robe…

Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo… Que para sentir la vida hay que olvidarse que existe la muerte…

Que se puede estar muerto en vida.. Que se siente con el cuerpo y la mente…

Que con los oídos se escucha… Que cuesta ser sensible y no herirse…

Que herirse no es desangrarse… Que para no ser heridos levantamos muros…

Que sería mejor construir puentes… Que sobre ellos se van a la otra orilla y nadie vuelve…

Que volver no implica retroceder… Que retroceder también puede ser avanzar…

Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol…¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas, salvo la vida?

Mario Benedetti

La resilencia parental es la capacidad de ciertas perso-

nas para seguir construyendo su futuro de forma

equilibrada y sana pese a las experiencias difíciles,

los traumas vividos y las carencias afectivas tempra-

nas. Es decir aprender de las malas experiencias pa-

ra construir estrategias alternativas que le permitan

funcionar mejor en todos los ámbitos, incluido el fa-

miliar, pese a circunstancias adversas.

La resilencia es, por tanto, una de las habilidades básicas fundamentales,

deseables y esperables en los padres.

Estos padres, en definitiva, tienen la capacidad de tomar el timón de sus vi-

das, saben identificar y analizar las situaciones problemáticas que afectan a la

familia y tomar las decisiones oportunas con solicitud de ayuda si lo conside-

ran necesario. Esto es hecho con voluntad e iniciativa de cambiar las cosas

por el bien de la familia y la sociedad.

Programa de valores elaborado por:

Lic. Evelyn Anaya

Revisión Técnica:

Lic. Concepción Paz de Arias,

Dr. José Mario Arias y Equipo

Multidisciplinario

Contenido de la revista para Infants y

Juniors

Lic. Francisca Idalia Ríos.

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