Aristoteles Saber Práctico

download Aristoteles Saber Práctico

of 28

Transcript of Aristoteles Saber Práctico

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    1/28

    31

    PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍASY PRÁCTICAS DE LA PAZ

    FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ LÓPEZY JUAN MANUEL JIMÉNEZ ARENAS

     Instituto de la Paz y los Conflictos de la Universidad de Granada

    Todo arte y toda investigación, y del mismo modo, toda acción y elección parece tender a algún bien; por esto se ha dicho con razón que el Bien esaquello a que todas las cosas tienden (Aristóteles, Ética a Nicómaco, …)

    La práctica es una exigencia constante de todos aquellos foros yámbitos donde existe una cierta preocupación por las condiciones devida de los seres humanos de una u otra sociedad. Ello es muy lógico,

     pues lo realmente importante es mejorar las condiciones reales de vida

    de las personas y esto sólo puede alcanzarse con prácticas coherentes para tales fines. Pero, en muchas ocasiones, esta demanda se presentacomo negación de la teoría, hasta terminar en convertirse en una nuevateoría: obviar la teoría es la mejor manera de cambiar la realidad, lo quelleva implícito que la teoría no es práctica y que ésta no tiene ningunarelación con la primera.

    En todo ello hay un problema epistémico, pero también ontológico,que afecta a nuestra manera de estar en el mundo, porque versa sobre

    el discurrir del conocimiento y sobre la manera de ser de los humanos.Este debate epistémico se encuentra soterrado en las acciones del paci-fismo, el feminismo, los defensores de los Derechos Humanos, las ONGsde desarrollo, la política o la filosofía, y, a nuestro juicio, debe de sersacado a la luz. Sin embargo, podríamos decir que, desde un punto de

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    2/28

    32 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    vista evolutivo, en los seres humanos no existe este problema de cen-

    sura entre los niveles teórico y práctico, porque la racionalidad sucede,convive e interacciona con algunos rasgos filogenéticos tales como losinstintos y las emociones.

    Fue en el mundo griego antiguo, que tengamos conocimiento, cuan-do comenzó a plantearse esta cuestión en relación con la actividad delos ciudadanos de la polis, siendo Aristóteles quién mejor recogió esta

     polémica a través de las ideas de  phrónesis, la sabiduría práctica , y la  praxis (que tiene traducción al castellano, al inglés, francés, italiano, portugués, etc.).

    En este trabajo, tras acometer una reflexión sobre la imposibilidadde separar la teoría de la práctica, nos detenemos en el análisis del sig-nificado histórico de la  phrónesis, su traducción como  prudentia en laRoma antigua y su uso en las Edades Media y Moderna para, finalmente,centrarnos en la  praxis.

    1. LA INEFICIENTE SEPARACIÓN TEORÍA-PRÁCTICA

     Nuestra incapacidad, como seres humanos, para abordar la comple- jidad, nos ha llevado, en la adaptación al medio que habitamos, a darcontinuadas explicaciones parciales sobre el entorno, quizás las mejores

     posibles. La racionalidad apoya la filogenia y las emociones e intentamejorar la toma decisiones en algunos aspectos ante nuevos escenarioso desafíos. Aunque el objetivo de la racionalidad no era dar respuestaa todas las incertidumbres sentidas o vividas por los seres humanos,

    tampoco podría hacerlo aunque lo intentara, por eso sus respuestasson en muchas ocasiones fragmentadas e incoherentes. Contrariamente

     podríamos decir que los seres humanos han buscado continuamente quesus acciones y reflexiones alcancen el máximo de coherencia y armonía,que sus niveles de esquizofrenia cognitiva sean los menores posibles. 1

    El Homo sapiens es ante todo Homo habilis. Este último es un homí-nido que vivió en África entre los 2,5 y 1,6 millones de años. Su nombresignifica «hombre habilidoso» y hace referencia a los instrumentos líticos

    1. Cf. MUÑOZ, Francisco A. y MOLINA RUEDA, Beatriz (2009) «Una paz complejae imperfecta», en MUÑOZ, Francisco A. y MOLINA RUEDA, Beatriz, (eds.) Una pazcompleja e imperfecta, Granada, pp. 15-53.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    3/28

    33PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    con él asociados, aunque algunos de sus antepasados también tenían

    «habilidad» para elaborar utensilios de piedra y de otros materiales. Aestos instrumentos se le ha llamado «cultura» material, con lo que seestá haciendo evidente la necesidad de la existencia y transmisión deunos «conocimientos». En cualquier caso la mayoría de las decisiones del Homo sapiens no son racionales, por tanto, la corporeidad, los instintosy las emociones contribuyen a que la toma casi automática de decisionesafecte a muchas circunstancias vitales para las entidades humanas. Esmás, cuando interviene la razón también está condicionada directamente

     por las emociones, el cuerpo y toda la filogenia, sin ninguna duda. Sinembargo, esta no es la línea fundamental que queremos seguir en estetrabajo, sino más bien todo lo contrario, aunque tendremos que unir lasdos realidades. Ahora en lo que queremos hacer hincapié es que en el Homo sapiens, independientemente de los porcentajes de inteligencia,la cultura y los conocimientos llegan a condicionar la propia evolución.La importancia de la filogenia no desliga la íntima relación entre ra-cionalización (teoría) y acción (práctica). Y, si a prácticas sociales nosreferimos, podríamos decir que cualquiera de ellas lleva implícita un

    sustrato teórico.  Práctica y teoría están indisolublemente unidas, in-dependientemente de la carga -si es que se pudiera separar- que cadauna de ellas tienen.

    De otro lado, podríamos afirmar que la mejor práctica es una buenateoría.  Es decir, la buena práctica es aquella que tiene unos objetivosalcanzables en la medida en que existe una reflexión teórica de los pasosa seguir. Por tanto, no basta con las buenas intenciones y la intuición,las que sin duda son un buen impulso, pero un ordenamiento racional

    de las condiciones del punto de partida, de los actores involucrados,los cambios previsibles y probables y finalmente la estrategia a seguirresultan fundamentales para la consecución de los objetivos deseados deforma no aleatoria. Sin una reflexión sistemática es difícil alcanzar losobjetivos deseados. No olvidemos que el marco general es la complejidady una de las características de ella es la incertidumbre, que será mayorsi no tenemos una preocupación permanente hacia los aspectos teóricos.2

      2. No hay mejor teoría que una buena práctica, DEWEY, John (1964) Ciencia de la Educación, Buenos Aires.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    4/28

    34 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    Bien es verdad que muchas veces cuando los activistas reniegan de

    la teoría en realidad lo están haciendo de aquellas teorías que apoyan prácticas «equivocadas», o dicho de otra forma de malas teorías. Esta preocupación es compartida si los objetivos son poco claros o perniciosos,si la evaluación de las condiciones de partida son equivocadas, si lasestrategias están mal elaboradas, si los resultados no son los esperados. Sinuestro objetivo es alcanzar mayor paz, mayor igualdad, mayor desarrollode los Derechos Humanos habrá que cambiar las teorías que nos alejande estas metas.* Justamente por esto estamos escribiendo este trabajo.

    Es necesario, por tanto, tener buenas teorías sobre la Paz, los con-flictos, la violencia y las mediaciones, saber de su carácter procesual einacabado y promover epistemologías y ontologías pacíficas. El objetivo

     principal de nuestro discurso es conseguir la paz, gestionar, transformar,resolver y regular los conflictos por vías pacíficas, y para ello es nece-sario abordar el problema de la toma de decisiones, tanto teóricas como

     prácticas. Dicho de otra manera, la paz y la regulación de los conflictosno pueden ser sólo una solución de parcheo, que sólo actúan cuando seestima que las situaciones son críticas,* sino que también lo deben hacer

    durante el proceso general de toma de decisiones y en el diseño globalde las sociedades y su futuro.

    A nuestro entender esta  praxis, absolutamente necesaria, sólo puedeser abordada desde el horizonte del poder, puesto en escena por losactores implicados, en un proceso de empoderamiento, emanado delos habitus  y las virtudes  de paz.3  No son pocas las ocasiones en lasque nos conformamos y autocomplacemos con la sola referencia a estedesideratum: cambiar la realidad. Pero, a pesar de que la mayoría de

    los problemas a los que nos enfrentamos residen en nuestras mentes, talcomo dice el Preámbulo de la Constitución de la Unesco (Que, puesto

    *. Nota de los Editores. Sobre cuestiones relacionadas, véase en este mismo volumenSIERRA, Francisco y MORAL, Lucía del. «Cultura de paz y biopolítica. Pensar los De-rechos Humanos desde un nuevo pensamiento antagonista de lo procomún»; PRONER,Carol. Derecho Internacional: El Polifemo y el ejercicio de humanidad.  *. Nota de los Editores (N. E. en adelante). Véase en este mismo volumen VÁZQUEZLIÑAN, Miguel. «La guerra es la paz. La propaganda como producto cultural».  3. MUÑOZ, Francisco A. y MARTÍNEZ LÓPEZ, Cándida (2011) «Los habitus de la

     paz imperfecta», en MUÑOZ, Francisco A y BOLAÑOS CARMONA, Jorge (2011) LosHabitus de la paz. Teorías y prácticas de la paz imperfecta, Granada., pp. 37-64; «Virtudesclásicas para la paz», ...

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    5/28

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    6/28

    36 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    De otro lado, una consecuencia de la falta de profundización en este

    debate es la ausencia de teorías elaboradas y coherentes de la toma pacífica, pacifista, del cambio, del poder establecido. La causa de estasdificultades también estriba en la falta de atención intelectual y políti-ca a la noviolencia, a pesar de sus importantes aportaciones tácticas yestratégicas, sociales y políticas, en las que sus presupuestos de acciónestán guiados por la búsqueda recta —no instrumental— de la paz.6 Esta

     pobreza teórico-estratégica deja un vacío que, en la mayoría de los casos,es ocupado por las propuestas «revolucionarias» y violentas que de estaforma se convierten en la única y visible propuesta de cambio, y lo quees más grave, los actores de los cambios quedan diluidos y aislados.Algunas de estas prácticas han tenido ciertas consecuencias trágicas, alconvertirse el uso de la «fuerza» en un argumento central de la vertebra-ción social. Puede que el modelo de la Revolución Francesa, justamente

     por sus maravillosas propuestas de «libertad, igualdad y fraternidad»haya justificado y sobredimensionado el uso de la violencia. El momento

     presentado como fundamental fue la toma de la Bastilla, igual que enla Revolución Rusa lo fue la toma del Palacio de Invierno, con el valor

    simbólico que representaba el derrumbamiento del poder absolutista de lamonarquía francesa, a pesar de que realmente tuvo poca relevancia políticay estratégica. Así, tanto en el modelo burgués del cambio social comoen el propuesto posteriormente desde la óptica comunista, el uso de lasarmas, la violencia, aparece como esencial en el imaginario. El papel delos movimientos de masas termina siendo reducido a su reconocimientocomo los creadores de la inercia violenta. Sinceramente creemos que hayque continuar profundizando en la reinterpretación de estos hitos histó-

    ricos, en los que la teoría de una sociedad más justa queda subsumida ala práctica violenta de la toma del poder y sus desarrollos posteriores.7 

    6. Entre los principios de la noviolencia destacaremos: el máximo respeto por las personas; la utilización de la persuasión antes que la coerción; utilizar como principiosde acción política algunas virtudes tradicionalmente relegadas al campo de lo privadotales como la amistad, bondad y el amor (que como acabamos de ver forman parte de ladescripción dada por Kenneth Boulding para el poder integrativo); así como la prácticacontinuada y la profundización de sus acciones.  7. MUÑOZ, Francisco A., HERRERA FLORES, Joaquín, MOLINA RUEDA, Beatrizy SÁNCHEZ FERNÁNDEZ, Sebastián (2005) Investigación de la Paz y los Derechos Hu-manos desde Andalucia, Granada, Algunos de los presupuestos, ideas e, incluso, palabras,aquí planteados están presentes en este volumen que arduamente trabajamos con JoaquínHerrera.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    7/28

    37PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    En cualquier caso las «teorías revolucionarias del cambio social»

    simplifican el problema de los objetivos a alcanzar, ya que la sociedaddebe de ser mas libre, fraterna e igualitaria, pero también más pacíficay, por tanto, la violencia debe ser puesta en cuarentena desde el inicio.Bien es cierto que existen muchísimas experiencias noviolentas de cam-

     bios sociales —comenzando por Gandhi— pero también lo es que paralos «revolucionarios» luchadores por la justicia y una nueva sociedad,muchos de ellos amparados en el marxismo, el paradigma de la «luchaarmada» ha sido su guía. Por tanto con similares objetivos de justicia y deigualdad hay que reconocer y proponer nuevas vías del cambio social. A

     partir de todo ello, hemos hecho continuas llamadas a la reflexión sobrelos presupuestos teóricos sobre los que sustentamos nuestros anhelos de

     paz. Ahora queremos apelar también a la práctica, una práctica que haga posible que estos cambios operen en la realidad. Ambos axiomas —teo-ría y práctica— van siempre unidos, cualquier teoría es a la vez accióny cualquier práctica lleva implícita una «carga teórica». Sin embargo,no siempre la teoría representa bien a la práctica y a la inversa, o loque es lo mismo, la relación teoría-práctica no siempre es armónica,

    independientemente de la voluntad o de la conciencia de los actores.Quizás por todas estas razones deberíamos de revitalizar los conceptos

    de  phrónesis, prudentia y  praxis, defendidos por muchos pensadoresdesde la Antigüedad,* en los que se hace especial hincapié en la ligazónde la teoría como una consecuencia lógica e inseparable de la práctica yviceversa. Éste puede ser un camino para eliminar las falsas dicotomíaso las simplificaciones superfluas.

    2. LA  PHRÓNESIS O SABIDURÍA PRÁCTICA

    Al abordar el concepto de phrónesis desde su origen griego sabemosque aludimos a tiempos históricos diferentes, con  ethos  distintos y aveces encontrados, y que la historicidad de los mismos es componentefundamental para su comprensión. Hay una cierta distancia entre los

    *. N. E. Sobre otras cuestiones relacionadas con el pensamiento de los clásicos véaseen este mismo volumen GÁNDARA CARBALLIDO, Manuel E. La reinvención de lasdemocracias; y RUIZ CASTELLANOS, Antonio. «Orientalismo, xenofobia y racismo:Púnicos y Norte-Africanos ante los clásicos».

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    8/28

    38 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    «imprudentes» pretendientes de Penélope en la Odisea —uno de los

     primeros textos griegos donde figura este concepto— y el phrónimosaristotélico del siglo IV ateniense, como la hay entre la visión de dichanoción en Tomás de Aquino o Kant. Pero también observamos la necesidadde las distintas sociedades de adoptar y repensar ese potente conceptogriego tan decisivo para comprender y ordenar la acción humana en lassociedades históricas.

    De entre los filósofos griegos que tratan la phrónesis, fue Aristótelesquien la dotó de un contenido que ha sido objeto de debate, inspiración ycontroversia a lo largo del tiempo. Para este filósofo existían dos virtudesintelectuales:  sophia y  phrónesis  (φρόνησις), la sabiduría práctica.8 La

     primera es la capacidad de pensar acertadamente sobre la naturaleza delmundo, para discernir por qué el mundo es como es, lo que podríamosidentificar con el conocimiento científico, implica el razonamiento sobrelas verdades universales. Por contra phrónesis es la capacidad de consi-derar la relación con el medio y alcanzar cambios tendentes a mejorar lacalidad de vida. Desde Aristóteles, para muchos pensadores la ejecuciónde las virtudes está sustentada en esta condición:

     Por eso, algunos afirman que toda virtud es una especie de phrónesis y Sócrates, en parte, indagaba bien y, en parte, se equivocaba, pues seequivocaba al considerar que toda virtud es phrónesis. Una señal deello es lo siguiente: todos los hombres que ahora dan una definiciónde virtud, después de indicar el objeto a que tiende, añaden: «segúnla recta razón», y es recta la que está de acuerdo con la phrónesis …no es posible ser bueno en sentido estricto sin phrónesis, ni phrónimos

     sin virtud moral.9 

    La  phrónesis  basa su juicio en la deliberación (βουλοσισ) que notendría un carácter ético sino, ante todo, técnico y político.10

      8. Como vamos a ver más adelante en latín fue traducida por prudentia, de donde procede la prudencia en castellano. Cf. AUBENQUE, P. (1999) La prudencia en Aristóteles,Barcelona.  9. 1144b. Todo arte y toda investigación, y del mismo modo toda acción y elección,

     parecen tender a algún bien, comienzo del libro I de la Ética a Nicómaco (1094a 1).  10. El elemento deliberativo tiene autoridad sobre la guerra y la paz, las alianzas y sudisolución, la pena de muerte, de destierro, y de confiscación, el nombramiento de lasmagistraturas y la rendición de cuentas (Política 1298a).

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    9/28

    39PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

     La phrónesis, en cambio, se refiere a cosas humanas y a lo que es objeto

    de deliberación. En efecto, decidimos que la función de phrónimos con- siste, sobre todo en deliberar rectamente, y nadie deliberar sobre lo queno puede ser de otra manera ni sobre lo que tiene fin, y esto es un bien

     práctico. El que delibera rectamente, hablando en sentido absoluto, esel que es capaz de poner la mira razonablemente en lo práctico y mejor

     para el hombre. Tampoco la phrónesis está limitada sólo a lo universal, sino que debe conocer también lo particular, porque es práctica y laacción tiene que ver con lo particular … La phrónesis es práctica, demodo que se deben poseer ambos conocimientos o preferentemente elde las cosas particulares. Sin embargo, también en este caso debería dehaber una fundamentación.11 

    La  phrónesis se refiere a cómo actuar en situaciones particulares, yaque la conflictividad de cada sociedad, en cada momento histórico esdiferente. El actor aprende los principios de acción, pero su aplicacióndebe de ser en el mundo real, en situaciones particulares. Cualquier vir-tud tiene como objetivo promocionar el placer o la felicidad, evitar las

    causas del dolor o la violencia, pero en su aplicación, en una situaciónconcreta, debe de saber las variables de las que depende su eficiencia,debe manejar los equilibrios, teniendo en cuenta otras consideraciones yen contextos específicos. Equilibrios que llamamos dinámicos porque lascondiciones del medio cambian continuamente —entre otras razones porestar insertos en la complejidad.12 Finalmente digamos que la  phrónesis

     precisa también de una cierta experiencia de vida en el mundo real, porlo que se necesitan unas orientaciones virtuosas, una cierta experiencia

    y saber valorar como realizar la acción en cada momento concreto. DiceAristóteles... la phrónesis tiene también por objeto lo particular, que

    11. Ética a Nicómaco 1141b. La traducción que utilizamos (PALLÍ BONET, Julio,traducción y notas, 1993,  Ética Nicomáquea. Ética Eudemia, Madrid) utiliza las palabra«prudencia» y «prudente» que nosotros sustituimos por «phrónesis» y «phrónimos», puescomo veremos más adelante, a pesar de que la palabra phrónesis será traducida al latíncomo prudentia este cambio no es solo morfológico sino, también, de contenidos. Cf.RICOUER, Paul (2006) Sí mismo como otro, México, especialmente el séptimo estudio«El sí y la intencionalidad ética», pp. 173 ss.  12. Cf. MUÑOZ, Francisco A. y MOLINA RUEDA, Beatriz (2010) «Una Cultura de Pazcompleja y conflictiva. La búsqueda de equilibrios dinámicos», Revista de Paz y conflictos3, pp. 44-61.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    10/28

    40 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    llega a ser familiar por la experiencia, y el joven no tiene experiencia,

     pues la experiencia requiere mucho tiempo.13

    Aristóteles sostiene que tener  phrónesis  es a la vez una condiciónnecesaria y suficiente para ser virtuoso...  saber discernir lo que es ser phrónimos radica el ser inteligente, buen entendedor o comprensivo, porque la equidad es común a todos los hombres en sus relaciones conlos demás.14  De hecho la importancia que le concedió este filósofo yotros pensadores posteriores se ve reflejada en su reconocimiento comouna de las virtudes cardinales, tal como se fija en el pensamiento cris-tiano y medieval.15 Volveremos sobre este asunto cuando abordemos la prudentia y las propuestas de Cicerón y Tomás de Aquino.

    Podemos constatar que un adulto virtuoso no es, por supuesto, infa-lible y puede también, en ocasiones, no hacer lo que pretende por faltade conocimiento, y sus acciones podrían terminar siendo perjudiciales a

     pesar de que pretendiesen promover beneficios, ya sea porque no sabencómo hacerlo lo más correctamente o, todavía más importante, porquesu comprensión de lo que es beneficioso y perjudicial es limitado y equi-vocado a menudo. Pero podríamos decir que en ambos casos no es una

    ignorancia culpable. Serían culpables por ser desconsiderados, insensibles,irresponsables, miopes o impulsivos sin la mediación de la inteligencia

     práctica, también lo serían si su comprensión de lo que es beneficioso y perjudicial es equivocada. La sabiduría práctica puede reportar, asimismo, beneficios para los que la poseen y practican, porque le permiten tenerunas relaciones sociales de mayor calidad. Al depender de la experiencia,

     podríamos decir que es una habilidad adquirida con la edad.16 Las buenas intenciones son aquellas que pretenden actuar bien o «hacer

    lo correcto», podemos decir que la sabiduría práctica es el conocimientoo entendimiento que permite a su poseedor, persona virtuosa, alcanzar sus

    13.  Ética a Nicómaco 1142a.  14.  Ibídem 1143a.  15. Como veremos más adelante Tomás de Aquino incorpora la eubulía (buen consejo),la synesis (buen juicio) y la gnóme (capacidad de obrar conforme a principios más altos)que cualifican mejor a la prudencia. Cf. MUÑOZ, Francisco A. y MARTÍNEZ LÓPEZ,Cándida, Op. Cit.  16. Néstor (un legendario rey en el sur de Grecia señaló por su sabiduría, y el más antiguo

     jefe en el sitio de Troya, donde fue constantemente solicitado su asesoramiento) suele sercitado como el parangón. Y Dante observó que phrónesis (conocido alternativamente comola virtud aristotélica consilium - “buen juicio” o “buenos consejos”, “Buoni Consigli”) fue

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    11/28

    41PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    objetivos en diversos contextos. Incluso muchos deontologistas aceptan que

    las normas que guían una acción para hacerlo de manera fiable debería serasesorada por la sabiduría práctica, ya que la aplicación correcta requierela apreciación de la situación —la capacidad de reconocer, en cualquiersituación particular, las características de lo que son moralmente relevan-tes—. Esto pone de manifiesto que entre las características moralmenterelevantes de una situación pueden estimarse las posibles consecuencias

     para las personas involucradas en la acción. Cabe demandarle a los acto-res virtuosos que sean conscientes de las consecuencias de sus posiblesacciones. Estas no pueden ser imprudentes, irreflexivas o miopes, sinosensibles e inteligentes para reconocer que algunas circunstancias pudie-ran ser más importantes que otras. El sabio no ven las cosas de la mismamanera que el resto, sus virtudes, aunque imperfectas, tienden a ver en sumedio las posibilidades del desarrollo de la honestidad, la benevolencia ola justicia. La phrónesis desarrolla la humanidad del ser humano, ademástiene un carácter estrictamente antropogenético, en el que la animalidaddel hombre ( zoon) se articula en lógos, que se representa en la  pólis.17 

    Desde otro punto de vista, tal como lo considera Aristóteles, se le rela-

    ciona con la retórica, ya que es un arte que puede mejorarse y cultivarsea través de la práctica de esta, como podría ser en argumentaciones ydeliberaciones llevadas a cabo en espacios públicos. Se piensa que hayinferencias entre la retórica y la phrónesis; estas se basan en la creenciade que la phrónesis y la bondad son más que el conocimiento. Pericles,el estratega de unos de los momentos más brillantes de la Atenas es,

     para el propio Aristóteles, un buen ejemplo de un actor que combinaambas cualidades, tanto por su habilidad, sus estrategias de persuasión

    y su eficacia.18 Como retórico posee una sabiduría práctica que le per-mite discernir entre los medios más eficaces de persuasión en cualquiersituación específica. El phrónimos como el término medio (el justo) entrelos extremos, completando así el silogismo de la universalidad de la

    el don que Salomón pidió a Dios cuando se llamados a gobernar y se sentía demasiado joven (véase I III Reyes, 5 ss). El individuo que posee la virtud de la phrónesis , agregóDante, que emana de regalo como la rosa emana su perfume.  17. BOLTON, Rodrigo Karmy (2006) «Sobre la ‘Decisión’ en la Prudencia de Aristóte-les (Una introducción al problema de lo animal y lo humano)»,  A Parte Rei. Revista de

     filosofía 46.18. Por eso pensamos que Pericles y los que son como él son prudentes porque pueden

    ver lo que es bueno para ellos y para los hombres ... (E.N. 1140b)

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    12/28

    42 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    ley, phrónimos, contingencia. Por ello, el phrónimos, en cuanto término

    medio, surge precisamente, en una zona de contingencia para articular louniversal con lo singular. Todas estas inferencias quizás también pudieranser abordadas desde la perspectiva de la performatividad.

    Alasdair MacIntyre, en tiempos contemporáneos, hace una llamadasimilar para una ciencia social de la  phrónesis, que merece la pena ver:

     Por ‘práctica’ entenderemos cualquier forma coherente y compleja deactividad humana cooperativa, establecida socialmente, mediante lacual se realizan los bienes inherentes a la misma mientras se intentalograr los modelos de excelencia que le son apropiados a esa forma deactividad y la definen parcialmente, con el resultado de que la capacidadhumana de lograr la excelencia y los conceptos humanos de los fines ybienes que conlleva se extienden sistemáticamente.19 

    Una práctica compleja, porque como hemos dicho depende de laconflictividad generada por las variables de la complejidad que esabordada por la cooperación, la solidaridad o el altruismo, para alcanzar

    regulaciones pacíficas, desarrollar las potencialidades humanas, la pazo lo que es lo mismo, ciertos equilibrios dinámicos.

    Como estamos viendo la phrónesis contribuye a clarificar los valores,intereses y relaciones de poder que adquieren su sentido en procesos

     práxicos. Por esta razón forman parte del empoderamiento pacifistaaquellos procesos en los que las acciones de paz ocupan mayor espacio

     público y político. Muchos autores, especialmente anglosajones, han prestado atención a lo inspirado por la  phrónesis aristotélica, obviando

    en gran medida su «traducción» como  prudentia en el mundo latino ycristiano. Son análisis reflexivos desde las ciencias humanas y socialessobre los valores que representa una original perspectiva de las cienciassociales, que buscan intencionalmente su imbricación con la práctica. 20

    Ello lleva a considerar que la finalidad de la habilidad ética ( phrónesis)es la rectitud ética en la vida, y en consecuencia tanto de los fines comode los medios que se utilizan deben ser sopesados en cada ocasión,

    19. Cf. MacINTYRE, A. (1987) Tras la virtud, Barcelona, pp. 248ss.  20. Cf. FARRELL, Thomas B. (1996) «Phronēsis» Encyclopedia of Rhetoric and Com-

     position: Communication from Ancient Times to the Information Age,  ENOS, Theresa(ed.) Routledge; Steven MAILLOUX (2004) «Rhetorical Hermeneutics Still Again: or,On the Track of Phronēsis», JOST, Walter and OLMSTED, Wendy (ed.)  A Companion

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    13/28

    43PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

     para cada situación particular. Como hemos expresado en la  phrónesis 

    hay una mediación entre lo universal y lo particular en la cual ambosse determinan mutuamente y se convierten en parte integral del propioser. El prudente ( phrónimos) como ser humano práctico, con disposiciónracional a la acción, vive la contingencia del mundo, su incertidumbre,su contingencia, por ello busca la habilidad de actuar en el momento

     justo (kairós), queriendo ser equitativo. La  phrónesis es, por tanto, laforma de razonamiento apropiada para la  praxis, y condensa, a su vez,la experiencia y la acción ( praxis).21 

    Finalmente, nos llama la atención como, asimismo, en los últimosaños, hay numerosas aportaciones de diversos campos del conocimiento,lo que no hace sino certificar su validez.22 

    3. LA  PRUDENTIA

    La phrónesis griega tuvo su traducción latina como prudentia, aunquesin las definiciones tan precisas y los debates tan ricos habidos en el mundo

    griego. Al fin, el debate filosófico en el mundo griego era acorde con lascontroversias y desarrollos de modelos conceptuales y políticos propiosde esa civilización. La configuración de la sociedad romana, tanto en laRepública como en el Imperio, obedece a otros parámetros y condiciones

    to Rhetoric and Rhetorical Criticism, Wiley-Blackwell,  2004; Daniel L. SMITH (2003)«Intensifying phrónesis: Heidegger, Aristotle, and Rhetorical Culture»,  Philosophy and

     Rhetoric, Vol. 36, No. 1, 2003., pp. 77-102; FLYVBJERG, Bent LANDMAN, Todd andSCHRAM, Sanford (ed.) (2012)  Real Social Science: Applied phrónesis, Cambridge.  21. Desde otro punto de vista algunos autores, especialmente Gadamer, han consideradoque la phrónesis aristotélica pudiera ser un modelo para el abordaje de la hermeútica. Cf.GADAMER, Hans-Georg (1975) «Hermeneutics and Social Science”,  Philosophy andSocial Criticism 2 (4), pp. 307-316; BERNSTEIN, Richard J. (1991)  Perfiles filosóficos:ensayos a la manera pragmática, México.  22. PETERSON, Douglas (2010) «Paradigms Found: phrónesis and Pragmatic Humanismfor International and Domestic NGOs»,  International Business Research, Oct., Vol. 3 Is-sue 4, p36-43; GUNDER, Michael (2010) «Making Planning Theory Matter: A LacanianEncounter with phrónesis»,  International Planning Studies;   Feb. 2010, Vol. 15 Issue 1,

     p37-51; TAYLOR, Charles (2011) «phrónesis, and Medicine: Ethics and Interpretation»en MED PHILOS, J.  Illness Narrative jhr032 first, published online September 7, 2011.Para algunos pedagogos existen paralelismos entre phrónesis y educación cooperativa,«aprender actuando», aprender a través de la experiencia, alcanzar la sabiduría tomandodecisiones adecuadas.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    14/28

    44 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    sociales y políticas. Es significativo que la prudentia no aparezca entre las

    virtudes imperiales, dado el elenco tan amplio de las mismas, aunque sífigura la providentia, asociada en ciertos aspectos con la prudencia, comocapacidad de prever, de ver lo que puede suceder, y como virtud impe-rial a la capacidad del emperador de salvaguardar y proteger el ImperioRomano, tanto de sus enemigos externos como internos. No obstante lafuerza conceptual de la  phrónesis y la necesidad social de disponer deuna categoría similar para la comprensión y ordenamiento de la acciónvirtuosa del ciudadano hizo que fuese considerada, de forma particular,en el mundo romano. Fue Cicerón quien, principalmente, tradujo sucontenido y la adaptó a las peculiaridades de la sociedad romana.

     Prudentia aparece en Cicerón dentro del esquema general de las virtu-des de tradición socrático-platónica ligadas a la condición del ciudadano.Unida a la justicia, la fortaleza y la templanza, tiene como fin principalla búsqueda de la verdad y la honestidad como propio de los hombres.El esquema general de las virtudes lo toma de la tradición socrático-

     platónica, sin diferenciar con claridad entre sabiduría y phrónesis y elalcance de ambas.23 Para Cicerón el hombre sabio y prudente es el que

     busca la verdad, luego establece un íntima relación entre prudencia ysabiduría,24 no diferenciando de forma nítida ambos conceptos como síse hacía entre los griegos:

    Todo lo honesto ha de proceder de alguna de estas cuatro partes, dependien-tes entre sí... de la primera en que colocamos la prudencia y la sabiduría,nace la indagación y el conocimiento de la verdad; y este es el oficio propiode la virtud. Porque el hombre que con más claridad percibe la pura e

    ingenua verdad de cada objeto, el que penetra y explica con más agudeza y prontitud las razones es el que se reputa por más sabio y prudente...25

    Permanece en estos textos ciceronianos la idea de hombre prudente,capaz de actuar sin precipitarse, porque conoce las diversas circunstanciasque hay que tener en cuenta y sabe como hacerles frente. Esta manera de

    23. Cf. BELMONTE, Miguel Angel (2005) «Aproximación a una genealogía de la pru-dencia», e-aquinas, 3, pp. 2-15  24. MOTTE, André (1985) «Cicerón et Aristote: A propos de la distinction entre la sophiaet la phronèsis». In Aristotelica: Mélanges offerts à Marcel de Corte, MOTTE, André andRUTTEN, Christian (eds.), pp. 263–303. Brussels.  25. Ciceron,  Los Oficios,  IV

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    15/28

    45PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    interpretar a los filósofos griegos tendrá una honda repercusión en siglos

     posteriores, a pesar de que autores contemporáneos como H. Arendt oA. MacIntyre han destacado la pérdida del sentido original griego enesta adaptación romana. Pero es una evolución acorde con las propiascircunstancias del pensamiento y la práctica romanos, más preocupadoscon la verdad y la honestidad que con dirimir las posibles diferenciasconceptuales entre sapienta y prudentia. Por ello Cicerón afirma que elobjeto de la  prudentia  y la materia, digámoslo así, que ha de tratar enejercitarse, es la verdad.26

    La doctrina sobre la  prudentia  se mantiene con escasa variableshasta el final del mundo antiguo y a lo largo de la alta Edad Media,

     particularmente en el cristianismo donde aparece como una propiedadde Dios, aunque el ser humano debe utilizar la razón y poner los medios

     para conseguirla, llegándose a confundir con la sabiduría.27  Es Tomásde Aquino quien retoma con fuerza esta noción desde su propio pen-samiento, considerándola la madre de las virtudes morales. Para él la

     prudencia radica en la razón, cuya función propia es regir y gobernar.Por eso la prudencia no es virtud del siervo ni del súbdito en cuanto

    tales, aunque dado que todo hombre, por ser racional, participa algodel gobierno según el juicio de la razón, en esa medida le correspondetener prudencia. Tomás de Aquino distingue las partes de la prudenciade un modo claro y sistemático, yendo a menudo más allá de la letrade Aristóteles, incluyendo también en su obra la tradición agustiniana,

    26.  Ibidem.  27. En la Biblia la prudencia aparece como una propiedad de Dios: «Yo, la Sabiduría,habito con la prudencia, yo he inventado la ciencia de la reflexión. Míos son el consejo yla habilidad, mía la inteligencia, mía la fuerza» (Prov. 8, 12-14); «Yahvéh es el que da lasabiduría, de su boca nacen la ciencia y la prudencia» (Prov. 2, 6); «Más sabio me hacesque mis enemigos, por tu mandamiento que por siempre es mío. Tengo más prudenciaque todos mis maestros, porque mi meditación son tus dictámenes. Poseo más corduraque los viejos, porque guardo tus ordenanzas» (Sal. 119 (118) 98-99); «Por eso pedí yse me concedió la prudencia; supliqué y me vino el espíritu de Sabiduría» (Sab. 7, 7);«Pero, comprendiendo que no podría poseer la Sabiduría si Dios no me la daba —y yaera un fruto de la prudencia saber de quién procedía esta gracia—, me dirigí al Señor yse la pedí» (Sab. 8, 21).Curiosamente el Catecismo de la Iglesia Católica, de 1806, parece retomar los plateamien-tos de la phrónesis: «La prudencia es la virtud que dispone la razón práctica a discerniren toda circunstancia nuestro verdadero bien y a elegir los medios rectos para realizarlo»

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    16/28

    46 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    como bien ha señalado MacIntyre.28 El propone que la prudencia debe

    estar constituida por ocho requisitos imprescindibles: inteligencia, razón,docilidad, providencia, circunspección, precaución, memoria e inteligen-cia. Cinco de ellas pertenecen a la prudencia considerada cognoscitiva:razón, memoria, docilidad.29

    Es evidente que las circunstancias sociales y políticas de la Edad Mediareducen el ejercicio pleno de la prudencia a los gobernantes, es decir, auna reducida capa aristocrática. Desde el mundo griego la prudencia sevenía asimilando con los gobernantes, pero mientras que en el mundogriego y romano los ciudadanos son parte esencial de dicho gobierno, enestos siglos cambia la noción del poder y de la política. Además en élcobra pleno sentido la afirmación aristotélica según la cual la prudenciano puede ser el saber supremo porque el hombre no es el ser supremo,limitando aún más el sentido original de la  phrónesis aristotélica.30 Ellolleva a algunos autores, como R. Gauthier a hacer responsable a Tomás deAquino y a la escolástica de la proscripción de la prudencia en el cursomoderno de la filosofía moral y política al privarla del conocimiento delfin y relegarla a un saber secundario acerca de los medios, pues el don

    de la sabiduría, que forma parte de la fe, es el que conoce los fines. 31La prudencia como virtud propia del gobernante, que arranca desde

    la filosofía de Platón,32  tiene derivaciones importantes en la Edad Mo-derna, con una tendencia mucho más mundana que moral, unida a unaacentuación de su carácter práctico. Tal es la asociación de la misma alPríncipe, en la conocida obra de Maquiavelo, Lo que aconsejaba Ma-quiavelo era su uso según el momento, pues la supervivencia del Estadose convierte en el bien superior:

    ... un príncipe prudente debe preferir un tercer modo: rodearse de loshombres de buen juicio de su Estado, únicos a los que dará libertad para

    28. MacINTYRE; A (1992) Tres versiones rivales de la Ética, Madrid.  29. Las cinco primeras retomados de Macrobio, y las de Tulio, Boecio y Aristóteles.Cf. Summa Theologiae, II-II ps, q. 48, a. 1, co. Cf. SELLÉS, Juan Fernando (1999) «Lavirtud de la prudencia según Tomás de Aquino (I)», Cuadernos de Anuario Filosófico, nº90.

    30. Cf. In IV Sententiarum , q. 2, a. 1-5; q. 3, a. 1; Summa Theologiae II-II ps., qq. 47-56; q. 182.

    31. GAUTHIER, R.A. (1970) Aristote. L’éthique à Nicomaque,  Louvain.  32. PLATON,  Las Leyes,  IV, 428 y ss

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    17/28

    47PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    decirle la verdad, aunque en las cosas sobre las cuales sean interrogados

     y sólo en ellas.....es conveniente que los buenos consejos, vengan dequien vinieren, nazcan de la prudencia del príncipe, y no la prudenciadel príncipe de los buenos consejos...33

    Lo importante no es asumir comportamientos individuales ejemplares,sino hacer lo posible para cumplir los objetivos. Así, si para Aristótelesla phronesis era una virtud personal que sólo puede desprenderse de laexperiencia o de la conciencia sobre la experiencia, con Maquiaveloesa sabiduría práctica debe de ponerse al servicio de la pervivienciadel Estado.34

    Pero no fue esa la única perspectiva en el pensamiento moderno.Baltasar Gracián en su Oráculo Manual y Elogio de la Prudencia pro-

     porciona un conjunto de normas, máximas y principios de toda índoleque acentúan el carácter práctico y mundano de la prudencia: conocerlas cosas en su punto, en su sazón y saber lograr; tratar con quien se

     pueda aprender; hacer y no parecer, saber usar de los amigos; saberusar del desliz, y así hasta trescientas máximas. Es decir, se trata de

    saber hacer las cosas de tal forma que se consigan los fines propuestos,generalmente el bienestar, por las vías más razonables. La prudencia

     pasa a ser, en definitiva, una sabiduría mundana.El debate sobre el sentido de la prudentia no ha dejado de estar presente

    en las sociedades ilustradas y contemporáneas, retomando así un conceptonecesario socialmente para acometer y justificar la orientación de la praxisindividual y social. Así Kant, en la Fundamentación de la metafísica delas costumbres considera la prudencia como habilidad en la elección de

    medios para alcanzar el máximo bienestar o la propia felicidad, y señalados sentidos de la misma: como conocimiento mundano o habilidad ycomo sagacidad para combinar todos los propósitos para un beneficioduradero. Para Schopenhauer significa exclusivamente el entendimientoa las órdenes de la voluntad, pues lo que constituye específicamente la

     prudencia es una rápida comprensión de las relaciones de acuerdo conlas leyes de la causalidad y la motivación.

      33. MAQUAVELO, Nicolás: El Príncipe, cap. 23  34. GARVER, Eugene (1987) Machiavelli and the History of Prudence, Madison: CHUA-QUI, Tomás (2000) «La ética política de Maquiavelo: Gloria, poder y los usos del mal»,

     Estudios Públicos, 79, pp. 403-435.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    18/28

    48 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    Esta reflexión sobre la prudencia alcanzó a la filosofía contemporánea

    española con aportaciones tan representativas como las de Arangurenque recoge las diversas visiones sobre la prudencia y su relación conla ética. Para él hay una ética de la prudencia en Sócrates, una éticade la buena voluntad en Kant, y una ética de la prudencia y la buenavoluntad en Aristóteles.35 Pero también avanza una noción de prudentia,releyendo a los clásicos, en la que distingue como partes integrales dela misma la memoria en el sentido de la experiencia, el intelecto en elsentido de conseguir una visión clara de la situación, la docilidad paraseguir el buen consejo, la razón en el sentido de ser juicioso o razonable,la provisión y previsión ( providentia), la circunspección que es atentaconsideración de todas las circunstancias, y la precaución o cautela.En esta visión parecen darse la mano la sabiduría práctica, moral y lasabiduría mundana de la sagacidad....36

    4. LA  PRAXIS 

    En Grecia antigua la praxis (πρaξις) definía las actividades en las que participaban los hombres libres, el cuerpo de ciudadanos de la  polis,colectivamente, y a través de ella era posible alcanzar la virtud. ParaAristóteles había tres actividades básicas, theoria, poiesis (producción deartefactos, propia de los artesanos) y praxis, lo que se correspondía conlos tres tipos de conocimiento, teórico. También distingue entre eupraxia (buena praxis) y dyspraxia (mala praxis). Aristóteles entiende la  praxiscomo una actividad voluntaria del hombre libre que define su moral y

    su política y que pretende realizar acciones buenas.37

      35. ARANGUREN, J. L.  Ética..., p. 328; RECASENS, Luis (1971) «Contribucionesespañolas al estudio de la prudencia»,  Dianoia 17, pp. 182-199.  36. HARIMAN, Robert (2003) Prudence: classical virtue, postmodern practice, Penns-ylvania.  37.  Metafísica, 6 ...;  Ética a Nicómaco X, 8, 1178 b 20 . Cf. YARZA, Ignacio (1986)«Sobre la praxis aristotélica», Anuario Filosófico, 1986, (19), 135-153. «… podríamos decirque la palabra praxis en ARISTÓTELES tiene al menos un doble significado. El primerocorresponde a las operaciones cognoscitivas que merecen por su absoluta inmanencia lacalificación de praxis perfectas, que se oponen por esa misma razón a los movimientostransitivos o kínesis. El segundo sentido, el más profusamente utilizado por ARISTÓTE-LES, la praxis sin más especificaciones, hace referencia a las acciones éticas o moralesdel hombre» (p. 153).

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    19/28

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    20/28

    50 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    deconstruir las que generan violencia. Un intelectual comprometido tiene

    la intención práctica de que la teoría desempeñe un papel emancipador para la sociedad, asimismo transforma las acciones de su vida.40 Gramsci dedica parte de sus esfuerzos a la recuperación de la filosofía

    de la praxis, y lo hace de una manera realmente «dialéctica», abierta a lasaportaciones de pensadores de diversos momentos históricos y tendencias:

    Teoría y práctica. Se debe investigar, analizar y criticar las diversas formas en que se ha presentado en la historia de las ideas el conceptode unidad de la teoría y de la práctica, pues parece indudable que todaslas concepciones del mundo y todas las filosofías se han preocupadode este problema. Santo Tomás y la escolástica afirmaban: «Intellectus

     speculativa extensione fit practicus» (la teoría se hace práctica por simpleextensión); es decir, afirmaban la necesaria conexión entre el orden delas ideas y el de la acción. Aforismo de Leibniz, tan repetido por losidealistas italianos: «Quo magis speculativa, magis practica», referidoa la ciencia. La proposición de G. B. Vico, «verum ipsum factum», tandiscutida y diversamente interpretada … Puesto que toda acción es

    resultado de voluntades diversas, con distintos grados de intensidad,de conciencia, de homogeneidad con todo el complejo de la voluntadcolectiva, es evidente que la teoría correspondiente e implícita seráuna combinación de creencias y puntos de vista igualmente separados

     y heterogéneos. Sin embargo, hay una plena adhesión de la teoría a la práctica, dentro de estos límites, y en estos términos. ... La identificaciónde la teoría y la práctica es un acto crítico, con el cual se demuestra quela práctica es racional y necesaria o que la teoría es realista y racional. 41

    Otra idea importante de Gramsci es el reconocimiento de que la filo-sofía de la praxis se ha ido construyendo paulatinamente con el paso delos siglos, hasta llegar a Marx, que para él es el fundador de la misma:

    40. HABERMAS, Jürgen (1973) Theorie and Practice, Boston; LOBKOWICZ, N. (1967)Theory and practice. History of a Concept from Aristotle to Marx, Londres.  41. GRAMSCI, Antonio (1967)  Introducción a la filosofía de la praxis,  selección ytraducción Jordi Solé Tura, Barcelona, p. 30. «Filosofía del acto (praxis, desarrollo) perono del acto ‘puro’, sino del acto ‘impuro’, real, en el sentido más profano y mundano dela palabra», p. 30; Segunda parte. Algunos problemas para el estudio de la filosofía de la

     praxis, pp. 43 ss; La filosofía de la praxis y la cultura moderna, pp. 47 ss. El énfasis enel texto principal son nuestras.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    21/28

    51PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

     La filosofía de la praxis presupone todo este pasado cultural, el Renacimiento

     y la Reforma, la filosofía alemana y la Revolución francesa, el calvinismo y la economía clásica inglesa, el liberalismo laico y el historicismo que se encuentra en la base de toda la concepción moderna de la vida. La filosofía de la praxis es la coronación de todo este movimiento de reformaintelectual y moral, cuya dialéctica es el contraste entre cultura popular yalta cultura. Corresponde al nexo de Reforma protestante más Revolución

     francesa: es una filosofía que es también política y una política que estambién filosofía. … La filosofía de la praxis ha revivido en su fundadortoda esta experiencia de hegelismo, feuerbachismo, materialismo francés,

     para reconstruir la síntesis de la unidad dialéctica: El hombre que caminacon los pies. El desgarramiento sufrido por el hegelismo se ha repetidoen la filosofía de la praxis, es decir, de la unidad dialéctica se ha vuelto

     por un lado al materialismo filosófico mientras la alta cultura idealistaha intentado asimilar los elementos de la filosofía de la praxis que leeran indispensables para encontrar algún nuevo elixir.42

    Para muchos autores posteriores la praxis, de acuerdo con lo plantea-

    do por Aristóteles,  se refiere a una actividad humana buena, excelenteo ideal, en la que se hacen reales las mejores disposiciones latentes yefectivas de las personas. Luego explicar y promover la  praxis suponeidentificar y defender la excelencia de estas disposiciones.43

    La fenomenología propuesta por Edmund Husserl también se relacionadirectamente con la praxis, ya que esta describe lo vivido, la experienciaconcreta, basándose no sólo en habilidades intelectuales sino tambiénen aquellas que facilitan la introspección sobre la experiencia vivida.

    Tanto la visión interna como la externa están sujetas a errores y la únicamanera de evitarlos es a través de la praxis, la autorreflexión, la práctica

    42.  Ibídem, p. 51. En cierto sentido creo que se puede decir que la filosofía de la praxises igual a Hegel más David Ricardo... Ver cómo la filosofía de la praxis ha llegado de lasíntesis de estas tres corrientes vivas a la nueva concepción de la inmanencia, depuradade todos los restos de transcendencia y de teología, pp. 53-54.  43. Existen varios significados, el «inferior», tal como se entiende en la vida común;«superior», como lo entiende, en algunos de sus textos, Aristóteles y Hannah Arendt; unaconcepción neutra, como se podría encontrar en algunos escritos de Marx, Habermas yotros autores; y una concepción epistemológicamente realista, según la cual la praxis esla mediación entre el sujeto y el objeto Cf. CROCKER, David A. (1994), Op. cit., pp. 73ss.; ARENDT, Hannah (1998) The Human condition. Chicago.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    22/28

    52 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    y la experimentación continua. Resarciéndose de algunas críticas en sus

    últimos escritos llega a identificar el «mundo de la vida» con el «mundode la praxis vital», siendo imprescindible tomar conciencia de la realidad práctica y vital que debería ser el supuesto último de cualquier teoríaobjetiva. En la base de cualquier realización objetiva, científica, está uninterés práctico que, progresivamente, se convierte en un interés teórico,

     pasándose de una praxis vital a una praxis científica. A pesar de todo lalógica del método fenomenológico sigue siendo dominante en Husserl

     por encima de estos empeños objetivizantes.44

    Un nuevo impulso lo recibió de la mano de Sartre que en el fondo parece preguntarse sobre la inteligibilidad del ser humano, los motivosde nuestras decisiones, desde una perspectiva epistémica y, complementa-riamente, ética y su contextualización en la historia. Se puede decir quesu estudio va desde una «ontología de la praxis» con objeto de aclarar anivel formal el vínculo entre la praxis y el mundo, a una teoría social queincorpora un marco normativo, pasando por interpretaciones históricasconcretas. Sartre se apoya en dos valores fundamentales: la libertad yla reciprocidad intersubjetiva. Desde esta perspectiva los seres humanos

    son seres libres que se representan en el reconocimiento intersubjetivo.45Buscando el cometido de una educación comprometida con desarrolloreal de las personas en América Latina,* una «pedagogía del oprimido»,Paolo Freire pensaba que la praxis era reflexión y acción de los hombres sobre el mundo para transformarlo. Sin ella es imposible la superaciónde la contradicción opresor-oprimido. Una praxis que implica reflexión,acción, conocimiento y creación.

      44. Cf. REEDER, Harry P. (2011)  La Praxis Fenomenologica De Husserl.  Bogotá.  45. (1960) Critique de la raison dialectique, précédé de Question de méthode, Paris;Cf. KLOCKARS, Kristian (1998) Sartre’s Anthropology as a Hermeneutics of Praxis, Ashgate. En opinión de este último su hermeútica puede ser interpretada como: … to bethe paradigmatic, conceptual key in an ontology of human being-in-the-world, and whichtakes the question ‘how we are to understand what we do’, or the intelligibility of praxis,as the entrance gate to questions concerning the intelligibility of human, social reality. Itthus differs from a hermeneutics that takes linguisticality as paradigm; MÜNSTER, Arno(2005) Sartre et la praxis , Ontologie de la liberté et praxis dans la pensée de Jean-PaulSartre, Paris.  *. N. E. Sobre otras cuestiones relacionadas con la educación para la cultura de paz,véase en este mismo volumen GARCÍA VALLINAS, Eulogio. «Los desafíos formativosdel docente para una cultura de paz en la escuela democrática»; y PUERTAS CRISTO-BAL, Esther y FERNÁNDEZ ALLE, José Joaquín. «Formando la sociedad del futuro.Los derechos de los estudiantes extranjeros».

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    23/28

    53PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

     La concientización implica, pues, que uno trascienda la esfera espontánea

    de la aprehensión de la realidad para llegar a una esfera crítica en lacual la realidad se da como objeto cognoscible y en la cual el hombreasume una posición epistemológica [...] La pedagogía del oprimido,como pedagogía humanista y liberadora tendrá, pues, dos momentosdistintos aunque interrelacionados. El primero, en el cual los oprimidosvan desvelando el mundo de la opresión y se van comprometiendo, en la

     praxis, con su transformación, y, el segundo, en que, una vez transformadala realidad opresora, esta pedagogía deja de ser del oprimido y pasa a

     ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación.… estamos convencidos de que la reflexión, si es verdadera reflexión,conduce a la práctica. Por otro lado, si el momento es ya de la acción,ésta se hará praxis auténtica si el saber que de ella resulte se haceobjeto de reflexión crítica. Es en este sentido que la praxis constituyela razón nueva de la conciencia oprimida y la revolución, que instaurael momento histórico de esta razón, no puede hacerse viable al margende los niveles de la conciencia oprimida.46

     

    El hombre sólo puede alejarse del objeto para admirarlo. Objetivando,los hombres son capaces de actuar conscientemente sobre la realidadobjetiva.  Es precisamente esto la praxis humana. La reflexión y accióndeben actuar como una unidad indisoluble, como par constitutivo de lamisma acción y por lo tanto mutuamente imprescindibles. La negaciónde estos elementos desvirtúa la praxis, transformándola en activismoo un subjetivismo, siendo cualquiera de los dos una forma errónea decaptar la realidad. La tensión entre este par dialéctico es una cuestión

    que constantemente se debe repetir en toda práctica social.47

    Toda la preocupación sobre la praxis en los últimos siglos le permitea Richard Bernstein hacer un seguimiento de esta idea a través al menoscuatro movimientos filosóficos, a saber: marxismo, existencialismo,

     pragmatismo y la filosofía analítica. Todos ellos con enfoques bien di-ferenciados pero todos ellos preocupados por las acciones de los seres

    46. FREIRE, Paulo (1972) Pedagogía del oprimido, Buenos Aires, donde habla de una«praxis liberadora »; (1972) El mensaje de Paulo Freire. Teoría y práctica de la liberación,Madrid, p. 36.  47.  Ibídem, p. 35.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    24/28

    54 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

    humanos.48 La proliferación de literatura al respecto no ha hecho sino

    ampliarse en los últimos años.49

    5.  PHRÓNESIS  Y  PRAXIS  IMPURAS E IMPERFECTAS50

    Hemos visto que ya sea bajo la idea de  phrónesis, de  prudentia ode la  praxis, la preocupación por la relación entre teoría y práctica seha mantenido a lo largo de los siglos. La estrecha relación entre teo-ría y práctica queda claramente reflejada en cada una de ellas. Si nos

     preguntamos por qué en cada momento histórico o para cada tendenciareligiosa, de pensamiento o filosófica, tiene mayor importancia una queotra seguramente que encontraríamos algunas explicaciones interesan-tes. Partiendo de Aristóteles, en cuyas obras aparecen unitariamenteunidas, llama la atención como en el mundo latino y, especialmente,cristiano, se va debilitando el significado de la  phrónesis-prudentia.Varias explicaciones iniciales podrían ser tenidas en consideración,de un lado la importancia del monoteísmo, de un dios todopoderoso

    guardián de todas las cosas, y de la jerarquía eclesiástica, de otro la perdida del sentido democrático de la polis en el que los ciudadanos

    48. BERNSTEIN, Richard J. (1971) Praxis and action: contemporary philosophies ofhuman activity, Philadelphia, pp. xiv ss.  49. NIELSEN, Richard (1993) «Organization ethics from a perspective of praxis», Business

     Ethics Quarterly; Apr. 93, Vol. 3 Issue 2, p131-151; SEO, Myeong-Gu - CREED, W. E.(2002) «Douglas Institutional contradictions, praxis, and institutional change: a dialectical

     perspective»,  Academy of Management Review; Apr. 2002, Vol. 27 Issue 2, pp. 222-247;Praxis or performance: does critical marketing have a gender blind-spot?; MACLARAN,Pauline Miller, Caroline PARSONS, Elizabeth SURMAN, Emma (2009)  Journal of

     Marketing Management,  Sep 01, 2009; Vol. 25, No. 7/8, pp. 713-728; HOFFMAN-KIPP,Peter ARTILES, Alfredo J. LOPEZ-TORRES, Laura (2003) «Beyond Reflection: TeacherLearning as Praxis», Theory Into Practice,  Jun 01, 2003; Vol. 42, No. 3, pp. 248-254;SIMON, David (2003) «Dilemmas of development and the environment in a globalizingworld: theory, policy and praxis»,  Progress in Development Studies,  Jan. 01, 2003; Vol.3, No. 1, pp. 5-41.  50. Hemos mantenido muchas conversaciones al respecto con Joaquín Herrera, creoque estábamos, como en casi todo, de acuerdo en la mayor parte de las cosas. El prefe-ría hablar de una aproximación «impura» —lo que quizás tuviera alguna reminiscenciagramsciana— a los Derechos Humanos y nosotros de una Paz «imperfecta», en el fondoestábamos hablando de lo mismo, de procesos inacabados de los que todos debíamos deser protagonistas.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    25/28

    55PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    eran actores principales de la sociedad y su destino. En cierto sentido

    la sociedad aristocrática sólo necesitaba de la  prudentia del monarcao gobernante de turno. Hubo que esperar al marxismo, a la recupera-ción del sujeto histórico para retomar la idea de  praxis, que en ciertosentido mantiene ciertas ideas de la  phrónesis, pero no todas. Será queel sujeto revolucionario no goza de toda la autonomía para discernir sudestino. Aunque en este sentido Gramsci parece ser toda una excepción.Habrá que esperar al subjetivismo, entre otros con Sartre, para darlede nuevo importancia al sujeto y a sus experiencias y a sus habitus.

    Por tanto entendemos que la práctica y la teoría, o viceversa, están rela-cionadas con el mundo real, con el sujeto real —el que tiene preocupación

     por desarrollar sus potencialidades—, con capacidad para mediar entrelo particular y lo universal, lo complejo. Y con unos sujetos (entidadeshumanas) con una fuerte conciencia de su ser, que incluya al individuoy a la colectividad, y por lo tanto con bondad y virtuoso, desde sushabitus, basados en su experiencia y de acuerdo con sus objetivos —siqueremos la búsqueda de la felicidad como preconizaba Aristóteles—.

    En el fondo estamos manteniendo un debate paralelo sobre el sujeto

    de los cambios sociales, sobre el  poder . Y como se sabe una de nuestrashipótesis fuertes es que todas las entidades humanas (personas, grupos,comunidades o especie) tienen poder y lo ejercen; un poder que resideen el desarrollo de sus capacidades51 o potencialidades. Y con esto en-tramos de lleno a hablar del empoderamiento pacifista del que hemoshablado más arriba.

    La Paz y los Derechos Humanos deben ser estudiados y llevados a la práctica, primero desde un saber crítico —una sabiduría práctica como

    hemos visto— que desvele las elecciones y conflictos de intereses quese puedan hallar detrás de todos los debates y acciones, y segundo in-sertándolos en los contextos históricos, sociales, culturales y políticosen los que necesariamente nacen, se reproducen y se transforman. Estanueva visión contextualizada de la Paz y los Derechos Humanos pasa,en primer lugar, por recuperar la acción pública y política, desde teoríascríticas y complejas de los mismos. La Paz y los Derechos Humanos noson categorías normativas que existen en un mundo ideal que espera ser

    51. Quizás por esto algún autor ha relacionado la  phrónesis  con las teorías sobre lashuman capabilities, desarrollada por Amartya Senn y Martha Nussbaum y que se relacionaen gran medida con las posiciones de Manfred Max-Neff 

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    26/28

    56 FRANCISCO A. MUÑOZ, CÁNDIDA MARTÍNEZ y JUAN M. JIMÉNEZ

     puesto en práctica por la acción social, por el contrario se van creando y

    recreando a medida que vamos actuando en el proceso de construcciónsocial de la realidad.Todos los actores (mujeres, hombres, intelectuales, artistas, activistas,

    ongs, religiones, culturas, instituciones, empresas o estados) puedenserlo cotidianamente en acciones personales o colectivas. Y esto ocurreen múltiples ocasiones: cada vez que uno de estos actores quiere a losdemás, muestra su amor, coopera, es solidario, altruista o filántropo, semanifiesta a favor de la paz o los derechos humanos. Así mismo cadavez que una madre, padre, familiares o vecinos, cuidan a sus hijos, cadavez que los voluntarios de las ongs actúan en su localidad, en su paíso en otro lejano. Igualmente cuando unas religiosas dan toda su vida

     por ayudar a gentes necesitadas, cuando un político es honrado con sucometido y dedica su tiempo a servir a su pueblo, o cuando un empre-sario se esfuerza por dar servicio a sus conciudadanos por encima desus intereses. O cuando escuchamos a alguien, dejamos que se exprese,le damos espacio para que lo haga, para que demande, o cuando satis-facemos sus reivindicaciones.

    En este punto, conviene reconocer, y resaltar, esta posibilidad hori-zontal y democrática de participación en los procesos de cambio, en elcumplimiento de la Paz y los Derechos Humanos por parte de todas las

     personas y grupos. Y en este sentido queremos llamar la atención sobrela peligrosa idea de que la responsabilidad de que la Paz o los DerechosHumanos sólo recaiga en las instituciones políticas, en los gobernantes,quedando para la sociedad civil la reivindicación, ante los anteriores,de su cumplimiento, sin ningún tipo de vínculo de corresponsabilidad,

    sin ningún poder, lo que puede ser cuando menos irresponsable, si nohipócrita o perverso.

    En todo este proceso de promover los cambios deseados estamoscontinuamente pensando en la capacidad de los actores de las realida-des sociales para cambiar de manera de pensar, de relacionarse con elmundo y con los demás y de actuar. Apelamos continuamente a lo que

     podríamos llamar un cambio de conciencia, un cambio en la forma deordenar sus habitus  de relación con el mundo.52  Podríamos decir que

    la conciencia moral es un instrumento de evaluación cognitivo-emotivade conductas, y que es el uso de ese instrumento lo que introduce el

    52. Cf. MUÑOZ, Francisco A. y MARTÍNEZ LÓPEZ, Cándida (2011)

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    27/28

    57PHRÓNESIS, PRUDENTIA Y PRAXIS. TEORÍAS Y PRÁCTICAS...

    sentido en las cosas. Como un proceso en el que son reconocidos todos

    los actores, públicos y privados, y sus capacidades para que las accionesde paz se dimensionen el máximo posible, en el que se potencian sus posibilidades de participar al máximo posible en la toma de decisionesimplicadas en el bienestar de las sociedades.

    Evidentemente, si la conciencia simbólica o moral que guía nuestrasactividades está construida por una serie de variables que van desde lofilogenético a lo racional, puede que sea ingenuo intentar ser absoluta-mente coherente en las prácticas-(teorías) que se emprendan. Dicho deotro modo, habrá que asumir de nuevo nuestra «imperfección» en lasacciones de nuestro devenir. Pero esto no quiere decir abandonarse alcurso de los acontecimientos, sino tener una buena dosis de humildad,lejos de la imprudente soberbia ejercida, con más asiduidad de la de-seada, por el homo sapiens.

    Aunque a Joaquín le gustaba hablar de la utopía, a nosotros nosgusta hablar, en su caso, de pensamiento utópico o prospectiva, porquela utopía parece perfecta, pura y cerrada en el tiempo, en el espacio, enla participación de los sujetos-actores. Preferimos hablar de procesos

     práxicos, en los que los actores toman decisiones de acuerdo con suexperiencia, con sus habitus, con sus virtudes, todas sus vicisitudes queles hacen moverse hacia sus objetivos, aquellos que han construido ensu vida real. Creo que en el fondo estábamos de acuerdo.

  • 8/18/2019 Aristoteles Saber Práctico

    28/28

    58