ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas,...

35
ACTA DE LA SEGUNDA REUNIÓN DEL CONSEJO UNIVERSITARIO (I SESIÓN SOLEMNE), DE FECHA 12 DE FEBRERO DEL AÑO DOS MIL TRES. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - En la Heroica Puebla de Zaragoza, siendo las trece horas del día doce de febrero del año dos mil tres, se reunió el Consejo Universitario en el Salón barroco del Edificio Carolino, para llevar a cabo su primera sesión solemne bajo la presidencia del Dr. Enrique Doger Guerrero, Rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y fungiendo como secretario el Mtro. Guillermo Nares Rodríguez, Secretario General de la Institución. Acto seguido y en uso de la palabra el Mtro. Guillermo Nares Rodríguez, en su carácter de Secretario del Consejo Universitario, manifiesta: “Conforme lo establecido en los artículos: 14º, fracción XII de la Ley de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla; 38, fracción I; 48, inciso c); 50, fracción III del Estatuto Orgánico; 9, inciso c) y 12, fracción III del Reglamento del Honorable Consejo Universitario. Asimismo, en los artículos 2, fracción I; 5 y 9 del Reglamento de Otorgamiento de Distinciones y Grados Honoríficos y conforme al acuerdo de este máximo órgano de gobierno, tomado en sesión ordinaria el día 20 de julio de 2001, damos inicio a la primera sesión solemne del Consejo Universitario, teniendo como único punto del orden del día: La entrega del Doctorado Honoris Causa al escritor Carlos Fuentes”. Acto seguido y en uso de la palabra, la Dra. María Teresa Colchero Garrido, procede a presentar la semblanza del homenajeado con las siguientes palabras: “Carlos Fuentes Macías. Escritor mexicano. Nació el 11 de noviembre de 1928.Su padre formaba parte de la cancillería mexicana, por ese motivo la familia Fuentes se trasladó a vivir a Washington y a Sudamérica. Cuando el General Lázaro Cárdenas emitió el decreto de la expropiación petrolera, Carlos Fuentes vivía en Washington y sintió en carne propia el rechazo de los niños norteamericanos en el colegio. Pero al mismo tiempo tomó conciencia de su ser mexicano y de su lengua castellana. La juventud del escritor coincide con la época florida de las artes mexicanas donde se desarrollaron las pinturas-

Transcript of ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas,...

Page 1: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

ACTA DE LA SEGUNDA REUNIÓN DEL CONSEJO

UNIVERSITARIO (I SESIÓN SOLEMNE), DE FECHA 12 DE

FEBRERO DEL AÑO DOS MIL TRES. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

En la Heroica Puebla de Zaragoza, siendo las trece horas del día doce de

febrero del año dos mil tres, se reunió el Consejo Universitario en el Salón

barroco del Edificio Carolino, para llevar a cabo su primera sesión solemne

bajo la presidencia del Dr. Enrique Doger Guerrero, Rector de la Benemérita

Universidad Autónoma de Puebla y fungiendo como secretario el Mtro.

Guillermo Nares Rodríguez, Secretario General de la Institución.

Acto seguido y en uso de la palabra el Mtro. Guillermo Nares Rodríguez, en

su carácter de Secretario del Consejo Universitario, manifiesta: “Conforme lo

establecido en los artículos: 14º, fracción XII de la Ley de la Benemérita

Universidad Autónoma de Puebla; 38, fracción I; 48, inciso c); 50, fracción III

del Estatuto Orgánico; 9, inciso c) y 12, fracción III del Reglamento del

Honorable Consejo Universitario. Asimismo, en los artículos 2, fracción I; 5 y

9 del Reglamento de Otorgamiento de Distinciones y Grados Honoríficos y

conforme al acuerdo de este máximo órgano de gobierno, tomado en sesión

ordinaria el día 20 de julio de 2001, damos inicio a la primera sesión solemne

del Consejo Universitario, teniendo como único punto del orden del día: La

entrega del Doctorado Honoris Causa al escritor Carlos Fuentes”.

Acto seguido y en uso de la palabra, la Dra. María Teresa Colchero Garrido,

procede a presentar la semblanza del homenajeado con las siguientes palabras:

“Carlos Fuentes Macías. Escritor mexicano. Nació el 11 de noviembre de

1928.Su padre formaba parte de la cancillería mexicana, por ese motivo la

familia Fuentes se trasladó a vivir a Washington y a Sudamérica. Cuando el

General Lázaro Cárdenas emitió el decreto de la expropiación petrolera,

Carlos Fuentes vivía en Washington y sintió en carne propia el rechazo de los

niños norteamericanos en el colegio. Pero al mismo tiempo tomó conciencia

de su ser mexicano y de su lengua castellana. La juventud del escritor coincide

con la época florida de las artes mexicanas donde se desarrollaron las pinturas-

Page 2: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

2

de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las

importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo de

Juan Rulfo, también la publicación de El laberinto de la soledad de Octavio

Paz. Años de bonanza, creatividad y prosperidad en México. En este escenario

rico y abastecido de un amplio desarrollo cultural, Carlos Fuentes estudiaba su

carrera de derecho en la UNAM. Un joven inquieto, lleno de energía y pleno

de imaginación y una gran destreza según ha dicho Elena Poniatowska.

Un estudiante que recibe una gran influencia de su maestro Manuel Pedroso,

quien en su cátedra de Derecho Internacional les pedía que leyeran La

Comedia Humana de Balzac. Aunque desde niño había mostrado una fuerte

inclinación por la literatura y había escrito una novela e incluso, parte de ésta

se la había leído a Alfonso Reyes. Sin embargo, fue cuando estudiaba leyes

que se interesó en el arte literario. A partir de ese momento comienzan sus

primeras publicaciones. De ahí pues, podemos señalar 1954 como el año parte

aguas y a partir de entonces la biografía del autor se transforma en una

biografía literaria.

La pluma de Fuentes ha versado en cuatro géneros literarios: el cuento, la

novela, el ensayo y el teatro. En cuanto a corriente literaria podemos señalar

que el escritor ha quedado circunscrito entre la vertiente fantástica y la del

realismo simbólico. Es menester destacar la impronta original dada por el

laborioso trabajo del lenguaje con el que ha ido construyendo un discurso

literario que podemos calificar de moderno, revolucionario, innovador, neo-

barroco y siempre tendiendo a la vanguardia. Las líneas temáticas que

predominan en el enunciado fuentiano son: la búsqueda de la identidad, el

mito, la historia, la política, la literatura, la pintura, la música. Todos los temas

ligados a un contexto histórico-político-social fundamentados en diversas

teorías filosóficas conformando así varios discursos en un mismo enunciado.

De ahí pues que el estilo literario del autor es totalizante; ya que el enunciado

es una especie de palimpsesto que hay que ir desmontando para alcanzar todos

los niveles propuestos.

También las estructuras de sus discursos literarios son desafiantes,

innovadoras, construidas a base de técnicas fotográficas o cinematográficas y

algunas veces utilizando la técnica del teatro de la memoria.

Page 3: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

3

Los autores que probablemente hayan influido en el discurso literario de

Fuentes son: Miguel de Cervantes con Don Quijote de la Mancha y el resto de

los clásicos españoles pertenecientes al Siglo de Oro. Los escritores

hispanoamericanos contemporáneos como son Borges, Cortázar, García

Márquez, Rulfo, Carpentier. Existe una gran reminiscencia de varios

exponentes de la literatura inglesa, que por solo citar a algunos de ellos:

Shakespeare, Milton, Faulkner, Henry James, Joyce, Edgar Allan Poe, muchos

más. De la literatura francesa es visible la transtextualidad con Balzac,

Flaubert, Mauppassant, Zola, Marcel Proust, Jean Paul Sartre y otros más. Lo

más relevante es el reconocimiento de un vasto archivo literario manejado por

el escritor mexicano, estas inmensurables lecturas han enriquecido su discurso

y le han dado un carácter universal. Significativo es la especial huella

cosmopolita que hallamos en el discurso de Carlos Fuentes.

No menos importante es reconocer la presencia de historiadores, filósofos,

sociólogos, lingüistas y analistas en general de la literatura. Así podemos citar

a Frances Yates y su importante libro El arte de la memoria, a Norman Cohn

En pos del milenio, a Michel Foucault y Las palabras y las cosas, R.G.

Collingwood Idea de la Historia, José Ortega y Gasset Meditaciones sobre el

Quijote, José Antonio Maravall y sus diversas obras, Claudio Sánchez

Albornoz y la otra cara de la Historia de España, Miguel León Portilla y sus

diversos ensayos históricos, Gianni Vattimo El fin de la modernidad, Hegel y

sus reflexiones estéticas, George Lucakcs y su teoría de la novela, Humberto

Eco y su Obra Abierta, Mijail Bajtin y su cronotopía, Octavio Paz El laberinto

de la soledad y El arco y la lira, entre otros. En el ámbito científico el escritor

ha abundado en el conocimiento de Copérnico, Newton y Einstein, por sólo

citar a algunos.

En el discurso de Fuentes encontramos una constante búsqueda por la

identidad. Este tema ha sido desarrollado desde uno de sus primeros relatos

Chac Mool de Los días enmascarados hasta obras más recientes como La

frontera de Cristal, El espejo enterrado, tocando desde luego a una de sus

obras magnas Terra Nostra. La búsqueda de la identidad de los mexicanos

tratada desde distintas percepciones y contrastada de varias maneras. En Chac

Mool, el pasado indígena brota del subsuelo de la moderna ciudad de México-

Page 4: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

4

y conviven en un mismo espacio sostenido por una línea de tiempo insertada

en el mito. La pregunta es ¿Qué hacemos cuando aparece el pasado en el

presente? ¿Cómo reaccionamos ante la voluntad del dios de la lluvia maya?

Felisberto Hernández, nuestro representante, perece. Chac Mool le gana la

partida. Y qué decir del enunciado Terra Nostra cuya complejidad arrastra

más de diez niveles de lectura esencial. El nivel histórico permite la reflexión

retrospectiva de nuestras raíces, así pues en este discurso Fuentes llega a

rastrear nuestro origen romano, árabe, judío, indígena, castellano, explicando

así el carácter sincrético de nuestro ser mexicano. Al detenernos en lo holístico

de Terra Nostra observamos que en la confrontación México-España, el

escritor libera una anquilosada concepción sobre los conquistadores señalando

la importancia del discurso literario el cual se sobrepone a la propia historia.

De ahí pues que Terra Nostra es un homenaje a la primera novela moderna: El

ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha. En La frontera de cristal nos

detenemos en el relato La pena donde encontramos la problemática de la

identidad, esta vez en contraste con Estados Unidos. El protagonista muestra

su inhibición ante la cultura norteamericana y queda frustrado para toda la

vida por razones culturales y de falta de personalidad asertiva que le haya

permitido remontar su autoestima.

El espejo enterrado un ensayo con datos históricos precisos donde aparece

de nuevo el tema de la identidad: Mi yo y el otro, ‘en las tumbas de las

Américas se encontraron cantidad de espejos enterrados’. En este sentido el

espejo nos permite analizar la otredad y aplicar la autocrítica.

El discurso histórico va entreverado al discurso literario en el mayor número

de las obras de Carlos Fuentes. Dentro de este discurso destaca el espacio

dedicado al análisis de la Revolución Mexicana. Grandes obras de Fuentes se

detienen es este punto, a saber: La región más transparente, La muerte de

Artemio Cruz, Gringo Viejo, Agua Quemada, Nuevo tiempo mexicano y Los

años con Laura Díaz.

En La región más transparente, primera novela del autor que rápidamente

alcanzó presencia internacional gracias a su pronta traducción a otras lenguas.

La estructura innovadora de este enunciado sumada a la temática del

asentamiento de la sociedad en la ciudad de México a dos décadas--------------

Page 5: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

5

aproximadas del fin de la Revolución. El marco es la fiesta y el espíritu festivo

domina todo el discurso. Gran parte de los personajes están aprendiendo a

vivir como flamantes burgueses privilegiados, otros, por el contrario, sólo

conservan su ‘Buen nombre’. Así las cosas vemos la lucha de todos estos

entes ficticios, trepadores, sin escrúpulos, dispuestos a todo con tal de poseer

un lugar destacado en aquella sociedad de los años cincuenta. El personaje

Ixca Cienfuegos dotado de ese poder omnipotente corresponde a una de las

creaciones más brillantes del escritor. A través de Ixca y de Teódula

Moctezuma el tiempo mediante un viraje mítico nuevamente enlaza al pasado

con el presente. La arqueología y lo humano, la búsqueda de la identidad

recorriendo el pasado histórico y contrastando con el México de los cincuenta.

Insistiendo en la reminiscencia indígena que por la vía de la cultura se hace

presente. En Nuevo tiempo mexicano encontramos problematizado este mismo

asunto a través de un evento histórico reciente: Chiapas. Y la pregunta

hipotética es ¿Qué hacer con las secuelas indígenas que no se han integrado ni

pueden integrarse al proceso de globalización? La respuesta del escritor

advierte la necesidad de integrar a los marginados a nuestra sociedad, pues de

no ser así nosotros mismos les pondríamos el modelo castrante a los otros.

La novela La muerte de Artemio Cruz aborda el tema del héroe

revolucionario, quien haciendo un acto de contrición recuerda toda su vida en

un flash-back narrativo. Artemio Cruz corresponde al hijo de la Malinche del

ensayo crítico de Octavio Paz en El laberinto de la soledad. Cuando es

abandonado por Mulato Lunero, se enrola en el ejército revolucionario y

cuando llega a la ciudad de Puebla traiciona sus ideales revolucionarios.

Acabada la Revolución, Artemio posee poder y dinero y se establece en la

ciudad de México donde actúa como un ser prepotente y desalmado el resto de

sus días.

Agua Quemada un discurso narrativo conformado por cuatro relatos que

pueden ser leídos juntos o independientes. Esta vez el escenario de la ciudad

de México presenta novedades, las ciudades perdidas, cinturones de miseria

donde se aglutinan los marginados. Lo interesante es que dos relatos

representan a la ‘alta sociedad’ y los otros dos a la ‘baja sociedad’. Los de la

‘alta’ vuelven a ser los viejos ex revolucionarios y algunos residuos de---------

Page 6: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

6

porfirianos. Ambos poseen propiedades y así viven de sus rentas, lo

significativo es que los relatos se conectan a través de personajes pobres como

Manuela, que viven en las viejas casonas de vecindad del centro de la ciudad

de México. Estos fueron los palacios uno de los relatos más completos a nivel

simbólico y humano de Carlos Fuentes.

Los años con Laura Díaz espléndida narración donde de nuevo se entreveran

varios temas acostumbrados por Fuentes. La búsqueda de la identidad, el

acopio histórico de México del siglo XX, la Revolución Mexicana y la pérdida

de los ideales a través del marido de Laura Díaz. La llegada de los exiliados

republicanos españoles y su presencia en la novela a través de Jorge Maura y

la reconstrucción de su vida, digna de ser analizada detenidamente. Otros

momentos de la historia contemporánea de México fluyen en este discurso: el

movimiento de 68. Un recuento histórico-crítico donde nuevamente el autor

demuestra su destreza en el manejo de las letras y esta vez podemos conocer la

historia a través del discurso literario, lo cual llega a ser fascinante.

Todos los discursos citados anteriormente se enmarcan dentro de la corriente

realista-simbólica, exceptuando Chac Mool que pertenece a la literatura

fantástica. En este tenor las obras más destacadas de corte fantástico del autor

son: Tlactocatzine en el jardín de Flandes, Aura, Constancia, Instinto de Inez.

Estas piezas son verdaderas joyas literarias donde el escritor da buena cuenta

de su destreza en el manejo de la literatura fantástica.

Dos mujeres en una, es el sesgo distintivo de todas estas mujeres-personajes.

La joven y la vieja como en el caso de Aura-Consuelo o Constancia y su doble

vida, Tlactoctocatzine-Carlota. Los escenarios donde el tiempo se detiene y

así se desarrollan acciones increíbles, situaciones que pueden circunscribirse

dentro y fuera de la realidad. Crisoles literarios son todos los enunciados

fantásticos de Carlos Fuentes.

Las obras donde aparecen referencias biográficas del autor son, de manera

indirecta, Cambio de piel, aunque la diégesis de la novela tiene poco que ver

con la vida de su autor, el título sí alude a una nueva vida del escritor, se

divorcia de Rita Macedo, obtiene el Premio Rómulo Gallegos y sale de

México hacia París donde escribe el ensayo de La Francia Revolucionaria.

Myself with others es el primer recuento explícito de sus vivencias. Después---

Page 7: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

7

apareció el enunciado Diana o la cazadora solitaria, canto a la post-

modernidad, una revelación del yo interno del narrador personaje, autor

implícito. Un enunciado que se destaca por la mediación entre la estructura y

su lenguaje. Gracias a esta novela podemos conocer algunos secretos

recónditos de la vida del escritor.

En esto creo uno de los últimos ensayos del autor son plenamente

recaudadores del pensamiento del escritor en cuanto a diversos temas: su

mujer, dedicado a su actual esposa Silvia Lemus, la amistad, la religiosidad,

etc. La lectura de estos ensayos ayuda mucho a dilucidar el perfil del escritor.

Los ensayos de corte literario son sumamente valiosos. Escritos con precisión

y transparencia tocan temas relevantes de la literatura universal como en Casa

con dos puertas, de la hispanoamericana como La nueva literatura

hispanoamericana, Valiente Mundo Nuevo, Geografía de la novela y

Cervantes o la crítica de la lectura dedicado al análisis del proceso anterior;

es decir, la literatura medieval que a través de la novela picaresca arrojan el

resultado de la primera novela moderna: Don Quijote de la Mancha. El

escritor hace una brillante selección de aquellas obras medievales castellanas,

que por sólo citar algunas, mencionaremos El libro de buen amor, El collar de

la paloma y La Celestina. El ensayista aplica una técnica de análisis al

enunciado: Don Quijote con el objetivo de demostrar como Cervantes trazó un

proyecto crítico. Una crítica literaria dentro del propio ente o enunciado

literario. También nos hace palpable la influencia de la primera novela en

todos los escritores hispanoamericanos y así nos dice, cito: los hijos de

Erasmo en España y la América española, en los hijos de la Mancha, los hijos

de un mundo sincrético, barroco, corrupto, animados por el deseo de

manchar con tal de ser, de contagiar con tal de asimilar, de multiplicar las

apariencias y las realidades, de duplicar las verdades e impedir que se instale

un mundo ortodoxo, de la fe o de la razón, o armas de la ironía, el humor y la

imaginación fueron, son y serán las del erasmismo en el contrapunto al

mundo mítico, épico y utópico de la tradición hispanoamericana. (Valiente

mundo nuevo).

Page 8: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

8

Carlos Fuentes en este momento es el escritor mexicano más destacado por

su gran claridad de pensamiento, por su constante renovación de lenguaje, por

su atinada visión del mundo; y sobre todo, nos ha dado una vasta obra literaria

que será orgullo para los mexicanos de hoy y de todos los tiempos, por eso

digo: Gracias”.

A continuación se concede el uso de la palabra al Secretario de Cultura del

Gobierno del Estado, Dr. Pedro Ángel Palou García, quien se dirige a los

presentes con las siguientes palabras: “Señor Gobernador; señores presidentes

del Tribunal Superior de Justicia y del Congreso del Estado; señor Rector de

la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla; muy querida amiga Sari

Bermúdez, Presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; señora

Socorro Alfaro de Morales; Carlos, Silvia. ‘Escribir una novela es aprender a

leer’, decía Faulkner en su no publicado prólogo a El sonido y la furia. Una

frase que, seguramente, suscribe Carlos Fuentes, nuestro más arriesgado - y

airoso novelista-; quien ha sabido transfigurarse una y otra vez para ir

dibujando esa curiosa forma de Comedia Humana Mexicana que él llama La

edad del tiempo y que reúne ya - e incluirá en los próximos años - la más

vasta y ambiciosa obra narrativa de nuestro país. Como Pessoa, que a falta de

una literatura inventó él sólo la literatura a portugués a través de sus

heterónimos, Fuentes, a falta de una novelística mexicana, ha escrito todas las

novelas de esa tradición.

No se me mal entienda. En México había novelas – y sólo se escribe, aún

con el ojo estrábico puesto en la literatura universal, desde la literatura

nacional –, pero no había novelística. Al filo del agua, está antes de La región

más transparente, como La sombra del caudillo, está antes que la La muerte

de Artemio Cruz, y a ellas responden, es cierto. Pero más allá de los

programas literarios que presuponen Acto preparatorio y el parágrafo inicial

de La región, algo se ha trastocado para siempre – la alegoría se ha vuelto

símbolo – en la literatura mexicana con la aparición de Carlos Fuentes.

Como el Ishmael de Moby Dick, el personaje dice: ‘Mi nombre es Ixca

Cienfuegos. Nací y vivo en México, D. F. Esto no es grave. En México no

hay tragedia: todo se vuelve afrenta. Afrenta, esta sangre que me punza como

filo de maguey. Afrenta mi parálisis desenfrenada que todas auroras tiñe de ---

Page 9: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

9

coágulos’. Del pueblo de mujeres enlutadas hemos dado un eterno salto mortal

hacia mañana, quien no lo vio estaba ciego, quien no lo ve ahora, es idiota o

un resentido (o quizás un resentido justamente por su estrechez de miras, por

eso siempre he dicho que cada quien tiene al Carlos Fuentes que se merece).

‘Yo no creo, dice Fuentes, en la Literatura o en el arte que, bajo el signo de lo

que sea, se fundan en la asimilación sentimental, en la cosquilla emotiva.

Creo, por el contrario, en la Literatura y en el arte que se oponen a la realidad,

que la agreden, la transforman y, al hacerlo, la revelan, la afirman’. Supremo

acto de conocimiento y por ende de descubrimiento, la novela es el género que

mejor dibuja esa pulsión. ‘La literatura es una fiesta y un laboratorio de lo

posible’, decía Ernest Bloch. La novela habla, por ende, desde el presente,

siempre del futuro. Por ello la novela no refleja nada, hace otra cosa más

profunda: En secreta tensión con las maquinaciones del poder las reproduce y

desnuda.

A la pregunta que encabezaba conversación en la Catedral ‘¿En que

momento se jodió el Perú, Zavalita?’ que podría abrirse a toda América

Latina, Carlos Fuentes, desde mucho antes había contestado con la Palinodia

del polvo de Reyes, su maestro: ‘¿Es esta la región más transparente del aire?

¿Qué puede decir la novela que no pueda decirse de otra manera?, es la

pregunta reiterada de Fuentes en sus libros ensayísticos: particularmente en

Casa con dos puertas o en la nueva novela hispanoamericana, Fuentes

concluye entonces que ha muerto la novela, es cierto, pero la novela burguesa

realista tal y como la practicó Jane Austen. La realidad novelesca no ha

muerto, al contrario, ha llegado el advenimiento de una realidad literaria más

poderosa que se expresa en su ‘capacidad para encontrar y levantar sobre un

lenguaje los mitos y las profecías de una época’. Se trataba, hoy como ayer,

sin más, de regresar a las raíces poéticas de la Literatura, a través del lenguaje

y de la estructura, no de la intriga y la sociología, para crear, he ahí el meollo

de toda la obra de Carlos Fuentes, ‘una convención representativa de la

realidad que pretende ser totatilizante en cuanto inventa una segunda

realidad… a través de un mito en el que se puede reconocer tanto la mitad

oculta, como el significado y la unidad del tiempo disperso’.

De allí el predominio del mito como eje estructurador y fuente del lenguaje--

Page 10: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

10

en la obra de Carlos Fuentes: reto de la cronología al unir el pasado y el futuro

en un eterno y reiterativo presente, como el de su novela favorita de Balzac,

Louis Lambert, en tantas ocasiones punto de partida y vuelta a casa de sus

reflexiones y su producción literaria. ‘No existen –escribe San Agustín en sus

confesiones - tres tiempos, el pasado, el presente y el futuro, sino sólo tres

presentes: el presente del pasado, el presente del presente y el presente del

futuro’.

Y es que la novela, nace del discurso notarial de la España del siglo XVI. Lo

que descubre el genial y anónimo escritor del Lazarillo - genial hasta en

permanecer anónimo para darle el cuerpo jurídico a la primera novela de la

que se tenga noticia- es que en literatura, por vez primera, puede hablar el

hombre sin atributos, el hombre común y corriente, el desposeído, el sin voz.

Al hablarle a ‘Vuestra merced’ y relatarle en forma de confesión judicial su

vida, ha nacido la novela. No sólo por la voz -el lenguaje- sino por la

estructura que, a pesar o gracias a su polimorfismo, es prácticamente siempre

la suplantación discursiva en forma de ficción de una forma escrita (la carta, la

confesión, el diario) de la que toma su cuerpo.

‘La certeza heroica, - escribe Fuentes- se convierte en ambigüedad crítica, la

fatalidad natural en acción contradictoria, el idealismo romántico en dialéctica

ironía’. Acto siempre de lectura - legislar es leer-, la novela, como prueba

Carlos Fuentes en su magistral libro sobre Cervantes o la crítica de la lectura,

es una reinterpretación absolutamente novedosa de la realidad. En El Escorial

de Terra Nostra están los documentos y los cadáveres de Felipe Segundo.

Doble mausoleo, la novela es la escritura- archivo de nuestra realidad, acaso la

más ambiciosa y la más totalizante de las novelas que se hayan escrito en

nuestra homérica latina: ‘Caen las máscaras, permanece la luz nacida de las

miradas enmascaradas’.

‘Se inicia un tránsito, - dice Fuentes- ‘del simplismo épico a la complejidad

dialéctica, de la seguridad de las respuestas a la impugnación de las

preguntas’. La novela nace de la duda y su territorio es el de la ambigüedad.

Una familia lejana en ese sentido es conspicua, donde el propio autor es

interpelado. Novela dialógica en la que el narrador cuenta la relación de su

amigo Branly con la familia Heredia desde una vieja visita a las ruinas de -----

Page 11: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

11

Xochicalco. ‘Mañana es el 11 de noviembre, Fuentes. Es su cumpleaños. Vea

cómo aún no estoy senil; recuerdo las fechas de nacimiento y muerte de mis

amigos. No se preocupe. Ahora estamos aquí en una de las posibilidades

infinitas de una vida y una narración. Usted teme ser el narrador de esta novela

sobre los Heredia porque teme la venganza de un vulgar demonio contra el

último hombre que la conozca. Toda novela es algo inconcluso pero también

es algo contiguo’. Y más adelante: ‘Por su otra vida, Fuentes, por su vida

adyacente. Piense en lo que pudo ser y celebre conmigo su aniversario’. Hoy

celebramos aquí este Doctorado Honoris Causa, precisamente por esa vida

adyacente que es la escritura de novelas.

Dice William Faulkner que la novela es ese oscuro hermano gemelo de un

hombre, y la vida secreta de un escritor. Hoy celebramos esa doble vida, y al

Mr. Hyde que se oculta y luego aflora en cada uno de sus libros.

No ha habido un héroe para empezar a hablar de la vida, de la reflexión de

Fuentes sobre México: ‘No ha habido un héroe con éxito pues han debido

perecer: Cuauhtémoc, Hidalgo, Madero, Zapata’, se dice en La región más

transparente. Existe una visión muy particular del pasado mexicano - de los

Tiempos Mexicanos- y de su supervivencia en el presente que podrían

representar Ixca Cienfuegos y Teódula Moctezuma, pero que toca y cimbra

toda la obra de Carlos Fuentes. Gloso de una participación muy juvenil en

‘Narradores Frente al Público’, en Bellas Artes (1965). Allí Fuentes dice: ‘El

mito mexicano reposa sobre varias leyendas, del mito de Quetzacóatl - el de la

promesa rota- pasamos al triple mito de Moctezuma-Malinche-Cortés: la

promesa es violada, Cortés es el falso Quetzacoatl, la mujer genera la traición

y la corrupción, y Moctezuma, ingenuo y derrotado, es el padre de la sospecha

y de nuestro complejo defensivo’.

Enseguida, dice Fuentes, ‘la feminidad corrupta y violada debe redimirse: el

mito de la Virgen de Guadalupe, indígena como la Malinche, y otra vez

ambigua mujer-diosa en cuya piedad hay un toque ligeramente incestuoso y

por fin. El mito de la reconquista: Los aztecas, las víctimas, han de maniobrar

en silencio’- Espejo de silencios, ha llamado también Fuentes a la Colonia.

Este sustrato mítico, aquí resumido, se traduce, racionalmente, en palabras de-

Page 12: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

12

Fuentes: ‘al diagrama de una nación en desarrollo donde la Revolución de

1910 por vez primera en América destruyó el poder feudal de la Iglesia y de

los terratenientes y creó las condiciones para la circulación de una riqueza

dirigida y apropiada por la burguesía nacional que salió de las Lomas de

Tingambato y desembocó en las Lomas de Chapultepec’.

En La muerte de Artemio Cruz oímos decir: ‘Deseamos el mayor bien para

la patria, mientras sea compatible con nuestro bienestar personal: Seamos

inteligentes, podemos llegar lejos’. Es un diagrama de país que puede ser

engañoso porque no funciona naturalmente, sino con la fachada y el sustrato

del mito, dice Fuentes: ‘Moctezuma ya no es un autócrata divino, es el señor

Presidente, que se sienta en el trono de oro de los aztecas sólo por seis años y

sólo es respetado si gobierna con toda la malicia y la energía del conquistador,

y también con los ropajes físicos del Emperador’. Y termina esa visión que se

ha repetido, ampliado y hecho más sutil y más penetrante con estas palabras:

‘En México la paradoja se complicó con un dilema: La clase emergente de

industriales, burócratas y comerciantes no sólo se identificó con la retórica de

la democracia y la particularidad del progreso: también se envolvió en los

estandartes de la nacionalidad, la revolución permanente y todos los valores

míticos de Quetzacoatl a Zapata, hasta llegar a esa nueva diosa de la pirámide

de de luz neón: nuestra señora la Pepsicoatl’.

La pregunta sobre qué es México una pregunta que él se hacía en esa misma

conferencia -¿Cómo hacerme partícipe de las grandes mentiras y las grandes

verdades de este país y, al mismo tiempo mantener la distancia? ¿Qué actitud

tomar en su vida y en su escritura, frente a las contradicciones del desorden

básico en el que México es, crea y muere?- Se convierten en imperativo

estético: ¿Cómo darle la palabra a todo esto? Y escribe: ‘Palabras mías en un

medio donde el lenguaje popular es la máscara defensiva de las violencias

sofocadas, un lenguaje de emboscadas permanentes, que quema la lengua, que

exige su amortiguador, su diminutivo, su albur, para mantener un equilibrio

entre el mutismo verbal y la violencia física, y el lenguaje culto que es otra

máscara, la de un medio tono, una elegancia pegada con saliva, un falso pudor

y una expresión anémica que pretende, una vez más, disfrazar y ordenar la

muda violencia circundante’.

Page 13: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

13

Todas sus novelas, desde La región más transparente a Los años con Laura

Día,z pasando por La muerte de Artemio Cruz, por Cambio de piel, Aura,

Terra Nostra, La campaña y Cristóbal Nonato han nacido de esa aguda toma

de posición frente a la realidad y al mito y han construido una realidad

paralela en la que nos reconocemos con estupefacción y con humor, pero la

risa -como quería Chesterton- donde la mejor ironía literaria se nos congela en

mueca reflexiva.

Las musas son la tradición, decía el crítico ruso Schlovsky. La pretendida

universalidad pasa por el filtro de lo nacional, -desde allí leo, y veo, es mi

divisadero, como diría don Luis González- , así también podríamos afirmar sin

duda que esta vasta novelística es una respuesta a la incipiente tradición del

género en México, sobre todo al Yáñez de Al filo del agua, al Revueltas del

Luto humano y al Rulfo de Pedro Páramo, aunque esta novela sea

contemporánea de la región. A Emir Rodríguez Monegal, en una vieja

entrevista le decía, - pensando que existe siempre un falso juicio para quien

cree que la novela refleja la realidad: ‘¿Qué es Balzac para la crítica

tradicional? Un señor que describe las costumbres de la burguesía francesa

postrevolucionaria del siglo XIX. Ahora, -sigue Fuentes todos sabemos que

eso no es sino el armazón que utiliza Balzac para hablar de todo un fondo,

toda una carga, en la que los verdaderos protagonistas son la fuerza, la

energía, la voluntad, la resistencia de la realidad al ser captada por la literatura

y, finalmente, la búsqueda de lo absoluto’.

Esa misma búsqueda de lo absoluto, de la literatura total, le ha movido por

todos esos libros, empresa única, La edad del tiempo, en que están todas sus

preocupaciones, su Aleph Literatario. Revisa el pasado remoto - Ixca,

Teódula- y el pasado inmediato desde el presente del collage que es la región,

mediante los recursos más variados -la incursión de la estructura y el lenguaje

del que hablaba en la novela-, se lo hace en la Bildungsroman de Jaime

Ceballos y su fracaso vital en Las buenas conciencias, se ahonda en los doce

días decisivos de la excepcional La muerte de Artemio Cruz, a través de la

conciencia múltiple que dan las personas del verbo. Agonía y resurrección que

pasa también por todos los tiempos a través de la mirada unificadora de la

muerte. Felipe Montero no sólo rescribe el relato de un general ------------------

Page 14: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

14

intervencionista, sino su propia identidad y la de todos. De allí el uso

magistral de la segunda persona del singular en Aura. Pero también,

indudablemente, se indaga sobre esa herida en Zona sagrada, a través del

triángulo amoroso y del mito occidental -Guillermo, Guillermito, Mito,

enamorado de su madre que lo secuestra, la actriz Claudia Nervo.-, y en

Cambio de piel, complejísima elaboración sobre una anécdota simple: la

historia de dos parejas -Elizabeth y Javier e Isabel y Franz- y el narrador

enigmático Freddy Lambert, recluso en el hospital psiquiátrico de Cholula.

Pero también allí está Cumpleaños y el sueño-despertar de George, un

arquitecto inglés, al pasado de Siller de Bramante, un ermitaño, recurso que

volverá en Instinto de Inez. Y, por supuesto, Terra Nostra, el proyecto más

ambicioso de escritor mexicano alguno, summa total, de búsquedas y de

resultados, inclusión ya no sólo de la estructura y el lenguaje sino sobre todo

de la historia en la novela: Allí están todos, el viejo y el nuevo mundo y el

universo hispánico en su totalidad. Reflexión desde nuestra bastardía, y

nuestra condición de Eneas. Y en Cristóbal Nonato -nuestro Tristam Shandi-

donde la figura central es quien lee, llamado el lector y el narrador, -el propio

Cristóbal Palomar- (Homenaje a Calvino) también al Ulises criollo o un

Ulises criollo al revés que cuenta los nueve meses de su gestación-, la labor de

la novela es también, a diferencia de la tragedia griega, transformar la vida en

un destino que es necesariamente una intriga. Desde antes de que su

compañero de ruta en el llamado boom, Vargas Llosa, escribiera el inicio de

Conversación al que me he referido antes, en La región Fuentes ya sabía que

esa era la cuestión esencial, no retórica, cuando Rodrigo Pola dice: ‘Por el

amor de Dios, Ixca, ¿qué es este país? ¿Adónde va? ¿Qué podemos hacer con

él?’ Y en la novela hay otra pregunta que contrasta con la historia del fracaso,

- la historia patria, de hecho, se nos enseña asimilando las derrotas, todo gran

momento, como sucede con los Niños Héroes, que ni fueron héroes ni fueron

niños, es en realidad un fracaso, ¿Se aceptaría México? Escribe esa pregunta

sustancial ¿se aceptaría México así mismo en la Victoria?, una pregunta cuyos

ecos suenan hoy con fuerza en nuestros oídos. Allí radica la verdad novelesca

que ha ido escribiendo con una pasión y una tenacidad que sobrecogen. A

Carlos Fuentes hay que leerlo con fe, como recomendaba Faulkner para -------

Page 15: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

15

entender a Joyce. Conocedor magistral de las formas, es, que duda cabe,

nuestro miglior fabbro, nuestro mejor artífice, aquél que mejor conoce la

técnica. Fuentes ha contribuido como pocos a destruir el pernicioso mito de la

espontaneidad y la inocencia del escritor. Carlos Fuentes es el que conoce

mejor - como ninguno- las posibilidades de su arte, y de esa conciencia

estética se nutre una y otra vez. Leerlo -y leerlo bien-, con ese supremo arte de

la atención que él mismo afirma que se ha perdido- es una de las experiencias

más intensas que conozco. Él nos ha enseñado, mejor que nadie en este país,

qué quiere decir ser escritor, qué quiere decir dedicar la vida a la literatura. Y

eso es siempre peligroso. Hay que volver a colocar a la literatura -y al debate

intelectual de los escritores, como con Rodó, con Reyes, con Martínez

Estrada, con el propio Fuentes-, en el lugar central del que la han sacado la

propia sociedad y los medios masivos. Eso sólo puede volver a hacerlo la

novela, máquina utópica y negativa que trabaja con la esperanza, que

construye enigmas con sus únicos materiales desde el Lazarillo, los

ideológicos y los políticos, los disfraza, los transforma y los pone en otro

lugar. Los vuelve centrales. La obra de Carlos Fuentes es una apuesta, la más

radical en nuestro país, por construir una nueva realidad, la novelesca,

conjunto de espejos que igual nos reflejan que nos transforman. Y hay que leer

en ella lo que no está narrado - como nos enseñó quien escribió ¡Absalón,

Absalón!-, lo que sostiene secretamente la intriga, esa otra carga más allá de la

trama que sólo el lector puede descubrir con suprema libertad. El escritor de

cepa, el genuino, se ha respondido ya a la pregunta de Rilke -¿morirías de no

poder escribir?- y sabe que descubre e inventa el mundo a medida que escribe,

por lo que vivir y escribir son la misma cosa, de allí que sus palabras suenen

nuevas y, a la vez, se las reconozca como si hubiesen estado allí siempre, con

la secreta idea de que eso - lo que leemos- también se nos ocurrió a nosotros,

pero no sabíamos cómo decirlo.

Igual que su admirado José Lezama Lima, Carlos Fuentes es ese excepcional

tipo de escritor que amanece todos los días como un recién nacido y se va a

dormir con la carga de todas las edades del tiempo, que gusta del sabor de la

guayaba que come todos los días y de la fruta que no ha probado nunca. En ---

Page 16: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

16

esa travesía literaria y vital diaria ha realizado, además, un supremo milagro:

el de, al ser sus fieles lectores, hacernos mucho mejores seres humanos.

Muchas gracias Carlos”.

A continuación y en uso de la palabra el Dr. Enrique Doger Guerrero, se

dirige a los presentes con el siguiente discurso: “Señor Lic. Melquíades

Morales Flores, Gobernador Constitucional del Estado de Puebla; muy

estimado Doctor Carlos Fuentes; estimada Sari Bermúdez, Presidenta del

Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; señor Lic. y Magistrado

Guillermo Pacheco Pulido, presidente del Tribunal Superior de Justicia; Lic.

Víctor Manuel Giorgana, presidente de la Gran Comisión del Congreso del

Estado; Dr. Pedro Ángel Palou; estimada doña Silvia Lemus de Fuentes; doña

Socorro Alfaro de Morales; Patricia Mercado, Presidenta del Partido México

Posible; estimado don Carlos Payán Velver; estimada Amalia García, ex

Presidenta Nacional del Partido de la Revolución Democrática; saludo a

nuestros Doctores Honoris Causa que hoy nos acompañan, al Doctor

Guillermo Ruiz Reyes; al Doctor Enrique Semo Calev; al Doctor Alfred Zehe;

al señor Rector de la Universidad Veracruzana, Dr. Víctor Arredondo; al

Embajador José María Pérez Gay; a don Enrique González Pedrero; a los

señores Senadores y Diputados que hoy nos acompañan; a las señoras y

señores de los medios de comunicación; a los apreciados familiares y amigos

de Carlos Fuentes.

Señoras y señores, compañeras y compañeros universitarios; Honorable

Consejo Universitario: Permítanme iniciar mi intervención con una cita: ‘Una

revolución empieza a hacerse desde los campos de batalla, pero una vez que se

corrompe, aunque siga ganando batallas militares ya está perdida. Todos

somos responsables. Nos hemos dejado dividir y dirigir por los

concupiscentes, los ambiciosos, los mediocres, los que quieren una revolución

de verdad, radical, intransigente, son por desgracia hombres ignorantes y

sangrientos. Y los letrados sólo quieren una revolución a medias, compatible

con lo único que les interesa: medrar, vivir bien, sustituir a la élite de don

Porfirio. Allí está el drama de México’. Escrito en La muerte de Artemio Cruz

por Carlos Fuentes en 1962.

Desde su lecho de muerte, Artemio Cruz recrea la época cuando luchó en la-

Page 17: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

17

Revolución Mexicana. Recuerda cómo fue perdiendo sus ideales a partir de la

muerte de la única mujer que de verdad lo amó. Su historia es prueba de que la

situación social del país no cambió mucho al finalizar la Revolución. Cuarenta

años después de su publicación La muerte de Artemio Cruz muestra las etapas

por las que la historia mexicana pasó durante las primeras décadas del siglo

veinte. Representa las paradojas de la historia reciente de México, que Carlos

Fuentes señaló con visión.

Honorable Consejo Universitario; señoras y señores: Es para mí como

Rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, un gran honor y

motivo de satisfacción dar la bienvenida a este recinto al estimado escritor e

intelectual mexicano Carlos Fuentes, a quien reconocemos como una de las

personalidades más destacadas de la literatura y a un hombre profundamente

comprometido con el desarrollo cultural y social del país y de América Latina.

En nombre propio y en el de la comunidad universitaria agradezco a Carlos

Fuentes su generosidad al aceptar nuestra invitación para formar parte del

claustro de Doctores Honoris Causa de esta centenaria Institución. En la

Benemérita Universidad Autónoma de Puebla somos herederos de una

prestigiosa galería de escritores que influyeron con su pensamiento en el

desarrollo de nuestra historia. Me refiero a Carlos de Sigüenza y Góngora; a

Francisco Javier Clavijero; a Ignacio Manuel Altamirano; a Guillermo Prieto;

a José María Lafragua, todos en su momento, integrantes de esta prestigiada

Institución.

Al otorgar a Carlos Fuentes el Doctorado Honoris Causa nuestra

Universidad rinde tributo a un escritor contemporáneo excepcional, que desde

el dominio inigualable de nuestra lengua ha ingresado en la literatura universal

de todos los tiempos; este es también un homenaje a la inteligencia, al trabajo

intelectual y al compromiso de un hombre que ha sabido cultivar su talento y

ponerlo al servicio de la humanidad.

Relatar los méritos de Carlos Fuentes no es tarea sencilla, por lo amplio y

valioso de sus aportaciones. Implica ante todo, honrar su calidad como

mexicano universal, como autor de ensayos, novelas, cuentos, guiones

cinematográficos y artículos periodísticos y también a quien con talento hace

de la innovación literaria la fuente exquisita e inigualable de sus creaciones.

Page 18: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

18

Carlos Fuentes quien en su libro El naranjo…nos dice que sólo se descubre

lo que primero se imagina, es también un buscador de los espejos enterrados

en toda nuestra historia. Sus obras son libros espejo, no sólo de México sino

también de toda América Latina, como lo señalara atinadamente el Premio

Nobel de la Paz, Oscar Arias. Es una personalidad de nuestro tiempo, el

tiempo mexicano, su determinación de plasmar la realidad social, sin

eufemismos, le ha valido algunas críticas o francas adhesiones, en tanto, su

narrativa es plenamente reconocida y motivo de variadas reacciones en

contables análisis.

Hemos de decir, además que aunado a su extraordinario valor literario, en

cada una de sus obras encontramos el reflejo de sus hondas convicciones en

torno a la libertad, a la justicia, a la democracia, al respeto entre hombres y

naciones. De Carlos Fuentes se ha dicho y con razón, ‘que navega en las aguas

de la novela con la misma soltura y la misma seguridad con que responde a los

grandes enigmas de la política internacional’.

Sin duda alguna, es el intelectual más respetado en todo el mundo como

intérprete del acontecer, particularmente de América Latina. Es claro que

nuestro homenajeado nunca ha sido un hombre indiferente a los sucesos

nacionales e internacionales, por el contrario, mantiene sobre ellos una mirada

atenta y no duda en levantar la voz para denunciar injusticias y desigualdades.

Hoy expresa su rechazo a la anunciada guerra de Estados Unidos contra

Irak, condena a la que los universitarios nos unimos a favor de la paz y en

contra de la violencia y la barbarie.

A través de su trabajo crítico, Fuentes reivindica el valor libertario de la

palabra y ubica a la cultura como eje conductor del desarrollo. Por eso entre

otros muchos motivos, su presencia hoy en la Universidad es un orgullo,

porque compartimos con Carlos Fuentes la convicción en torno al valor de la

educación como factor esencial para alcanzar el progreso y el bienestar social;

como motor estratégico para combatir los rezagos e inequidades, al tiempo de

formar ciudadanos responsables y capaces de conducir al país en su futuro.

Su presencia en Puebla, subraya la necesaria defensa de la universidad

pública que requiere la puesta en marcha desde el Estado Mexicano de

políticas y acciones que garanticen respeto a su autonomía, que garanticen

recursos, que garanticen apoyo.

Page 19: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

19

El futuro del país, requiere una educación de calidad y requiere de

universidades fuertes. De manera magistral Carlos Fuentes define con claridad

la vocación y los valores de la universidad del siglo veintiuno que a los

universitarios poblanos nos unen e identifican. Esto que lo vemos en el siglo

veintiuno no es casual, en 1961, el año del movimiento de Reforma

Universitaria, nuestro Doctor Honoris Causa se solidarizaba con los

estudiantes poblanos en su célebre artículo ‘Puebla de los Ángeles contra

Puebla de Zaragoza’. En aquella publicación, Fuentes se preguntaba:

‘¿resistirán los heroicos estudiantes de Puebla de Zaragoza el embate

combinado de las fuerzas más poderosas y mejor organizadas de México?’ Y

se respondía ‘sí, resistirán hasta el fin. Cuánto más segura sería la lucha si

detrás de ellos estuviera una gran organización popular mexicana, capaz de

alertar a toda la nación contra el peligro de esta nueva insurrección de las

mismas fuerzas que asesinaron a Hidalgo, coronaron a Maximiliano y

sacrificaron a Madero. Cuatro décadas después Fuentes sigue vigente y sigue

certero. Rasgos invaluables de su obra son su permanente interés por México

y su cultura; así como su capacidad para explorar sus motivaciones y para

adentrarse al país en toda su complejidad.

En este tiempo mexicano nuestro resulta indispensable recuperar el valor de

la palabra, como Fuentes lo ha hecho. La alternancia en el poder hasta ahora

sólo un Cambio de piel ha provocado la emergencia de los múltiples tiempos

en la historia mexicana. Las diversas interpretaciones, liberales,

conservadoras, oficialistas, demócratas, socialistas, se entrecruzan en el

espacio de un Estado que hace tiempo no logra encauzar la energía social

hacia metas comunes de desarrollo.

Nos hace falta la reforma del gobierno y de las instituciones del Estado para

un mejor desarrollo social y humano de nuestro país. He aquí el problema

fundamental de México, el de la política, que con la palabra sincera y precisa

construya los acuerdos para que podamos decir algo muy sencillo: los

mexicanos aspiramos a vivir en un país digno, justo, libre y democrático.

Quien mejor que el gran pensador de los tiempos y el gran oficiante de la

palabra, para aportar con su sabiduría y su experiencia al espacio mexicano

actual que tanto necesita del acuerdo entre sus mujeres y sus hombres.

Page 20: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

20

Lo fundamental en Fuentes es entonces valorar la influencia de su trabajo

literario y su aportación cultural a favor de nuestro país y del mundo. Además

no podemos negar la magia que se hace presente en su obra, consecuencia del

imperio de las raíces mexicanas del hombre cosmopolita. Ese es el legado de

Aura, obra maestra del erotismo entendido como la respuesta del amor ante la

muerte. Igual sucede en La muerte de Artemio Cruz obra que consolidara a

Carlos Fuentes como una de las figuras más relevantes de la literatura

latinoamericana. La región más transparente ha sido una de las novelas más

leídas durante décadas por nuestros estudiantes y profesores.

En cada uno de sus libros Carlos Fuentes demuestra su genialidad, su vasta

cultura, su instinto literario y una gran sensibilidad.

Como señala la escritora española Soledad Puértolas: ‘Cuando leemos una

novela todo un mundo no descrito pero sugerido llena nuestra realidad. Quien

escribe una novela está de nuevo interpretando ese mundo y concibe, sugiere,

o persigue con más o menos solemnidad o ironía una nueva forma de ver la

realidad. Por eso, a pesar de todo lo que se ha escrito y se ha leído, la pregunta

se hace una y otra vez’. Esto ha sido parte fundamental del legado literario de

Carlos Fuentes, resultado de tales capacidades son obras como Terra Nostra

que presenta un inquietante y complejo diálogo entre España y el nuevo

mundo y El espejo enterrado con todo su esplendor.

Sería difícil pretender referirme a toda la obra de nuestro homenajeado, por

vasta y por valiosa. Sólo quiero recordar Cambio de piel, la novela que Carlos

Fuentes ubicó y empezó a escribir en Puebla, más precisamente en Cholula, y

en la cual los muros ancestrales de la pirámide contienen la historia de cuatro

viajeros.

En sus más recientes libros Los años con Laura Díaz; Instinto de Inez,

presenta una profunda introspección de sí mismo, de su familia, sus

antepasados, al tiempo que indaga en el tiempo y la herencia cultural

mexicana.

Importante es su libro En esto creo, en el que nos revela sus más caros

afectos, sus más profundas convicciones, sus más dolorosas inquietudes y

donde reivindica su fe en los valores del hombre, quizá el tema que más lo

sostiene.

Page 21: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

21

Como escritor y como intelectual, Fuentes ha plasmado siempre con claridad

sus preocupaciones sociales y políticas, artísticas, antropológicas y literarias.

Sus novelas son una interpretación de nuestro país, buscan la esencia de la

identidad mexicana. Quizá porque para Fuentes, como lo ha escrito, ‘la novela

tiene poder para crear historia’, en cada uno de sus libros confluyen los

destinos personales e históricos, donde surge una nueva dimensión que

permite profundizar en los hechos.

Honorable Consejo Universitario, señor Gobernador, distinguido Doctor

Carlos Fuentes: No quisiera concluir mi intervención sin citar las ideas que

nuestro hoy Doctor Honoris Causa tiene sobre la universidad y que expresa en

su libro En esto creo, cito: ‘Creo en la universidad. La universidad une no

separa. Conoce y reconoce, no ignora ni olvida. En ella se dan cita no sólo lo

que ha sobrevivido, sino lo que está vivo o por nacer en la cultura. Pero para

que la cultura viva, se requiere un espacio crítico donde se trate de entender al

otro no de derrotarlo y mucho menos de exterminarlo: Universidad y

totalitarismo son incompatibles. Para que la cultura viva, son indispensables

espacios universitarios en los que prive la reflexión, la investigación y la

crítica, pues estos son los valladares que debemos oponer a la intolerancia, al

engaño y a la violencia.

En la universidad todos tenemos razón, pero nadie tiene razón a la fuerza y

nadie tiene fuerza de una razón única.

Pero la universidad es un estadio, el superior sin duda, de un proceso

educativo que parte de la escuela primaria y se prolonga hoy en la escuela

permanente, la educación vitalicia –repito- no hay progreso sin conocimiento

y no hay conocimiento sin educación. La universidad está llamada por su

nombre mismo a mediar entre las culturas, desafiando prejuicios, extendiendo

nuestros límites, aumentando nuestra capacidad para dar y recibir, y nuestra

inteligencia para entender lo que nos es ajeno. En la universidad podemos

abrazar la cultura del otro a fin de que los otros puedan abrazar nuestra

propia cultura’.

Por último me voy a permitir referirme nuevamente a nuestro Doctor

Honoris Causa quien al recibir el Premio Miguel de Cervantes en 1987 -uno

de los más prestigiados en lengua española- dijo: ‘México es mi herencia, pero

Page 22: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

22

no mi indiferencia. La cultura que nos da sentido y continuidad a los

mexicanos es algo que yo he querido merecer todos los días, en tensión y no

en reposo. Mi primer pasaporte -el de ciudadano de México-, he debido

ganarlo, no con el pesimismo del silencio sino con el optimismo de la crítica.

No he tenido más armas para hacerlo que las del escritor: la imaginación y el

lenguaje’, es Carlos Fuentes en sus propias palabras.

Imposible describir lo mejor, difícil no expresarle nuestra admiración. A

nombre de la comunidad universitaria, a nombre de todos sus lectores muchas

gracias”.

Acto seguido se concede el uso de la palabra al Lic. Melquíades Morales

Flores, Gobernador Constitucional del Estado de Puebla: “Maestro Carlos

Fuentes; señor Rector de nuestra Benemérita Universidad Autónoma de

Puebla; señores titulares de los Poderes Legislativo y Judicial del Estado; Sari

Bermúdez, Presidenta del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes; Dr.

Pedro Ángel Palou, Secretario de Cultura; señor Secretario General de nuestra

Universidad; señoras y señores: Tener el honor de tomar la palabra el día de

hoy, en el marco de la entrega del Doctorado Honoris Causa de la Benemérita

Universidad Autónoma de Puebla a Carlos Fuentes, me ha permitido por un

lado, releer parte de su obra, que desde muy joven he seguido con especial

atención.

Quizá desde que algo se cimbró en la literatura mexicana al publicarse La

región más transparente, pero también al lado de La muerte de Artemio Cruz,

o de las dos parejas que deambulan por Cholula en Cambio de piel, o en esa

atroz visión apocalíptica que es Cristóbal Nonato, es decir, en una obra

novelística que nos ha imaginado una y otra vez con singular fortuna.

Al margen también de esa recapitulación, me ha permitido repasar las ideas

que, si bien, tal vez él no aceptaría llamar ideario - a pesar del título de credo

de su último libro-, forman un hilo conductor coherente que nos permite desde

las diversas trincheras que nos ocupan, detectar los problemas más añejos y

angustiosos de nuestro país, y vislumbrar algunas de sus soluciones. Fuentes

es, lo digo con certeza, uno de nuestros pensadores más agudos, contundentes

y claros que no es poca virtud.

Page 23: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

23

Ya desde Tiempo mexicano, Carlos Fuentes nos decía, que para descubrir su

identidad, ‘México tiene que saltar con un grito de la orilla de la necesidad a la

orilla de la libertad: libertad política, cultural, personal y económica’. De esa

lucha entre necesidad y libertad de la que nos habla, está hecha su visión de

nuestra transfigurante identidad.

Pero la pregunta que abre la obra de Fuentes es entonces, de una amplitud y

una fuerza que sobrecogen, y si no permítanme, hoy más que nunca, ante la

crisis que vivimos en el campo y en la industria manufacturera avasallada por

la innegable globalización, permítanme, decía, volver a otro párrafo de ese

mismo ensayo de Fuentes y cito: ‘Nuestro drama es que hemos accedido a la

sociedad urbana e industrial, sólo para preguntarnos si el esfuerzo valió la

pena, si el modelo que venimos persiguiendo desde el siglo diecinueve es el

que más nos conviene; si a lo largo del pasado siglo y medio, no hemos

seguido actuando como entes colonizados, copiando acríticamente los

principios materiales de la sociedad capitalista, si no hemos sido capaces de

inventar nuestro propio modelo de desarrollo’ termina la cita.

Estas palabras que ya nos intrigaban en 1971, hoy son de una pertinencia

mayúscula. ‘¿Nos hemos encontrado en alguno de los tiempos mexicanos o

seguimos buscando afanosamente nuestro propio tiempo, al fin eso, nuestro?’

Desde muy temprano también, completaba el diagnóstico, la Reforma y la

Revolución apostaron por educar para llegar al fin y a tiempo, al banquete de

la civilización del que hablaba Alfonso Reyes; pero ambas se equivocaron al

elegir el modelo de educación, el positivista y el de la escuela práctica

Norteamérica, y cito a Fuentes: ‘En ambos casos, en un ensayo de Casa con

dos puertas, se sacrificó la única vía de educación verdadera, el único camino

que enseña a un pueblo a pensar y a elaborar sin dogmas pragmáticos, míticos

o escatológicos, el humanismo crítico o la elaboración crítica de las ciencias

humanas’.

Necesitamos, hoy como ayer un país, que crea e invierta en su democracia -y

no sólo la electoral, sino sobre todo la social-, con metas a largo plazo y con

continuidad histórica que no viva al día -o al sexenio-.

Gracias a la enseñanza de Carlos Fuentes, podemos enfrentarnos a los

problemas radicales de la vida personal y de la convivencia social., formados -

Page 24: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

24

no sólo informados y atiborrados de datos inútiles, la educación no tiene

sentido si no viene aparejada a una mejora económica y social y moral, en el

sentido más amplio del término.

Como él mismo afirma en ese ensayo sobre su maestro Alfonso Reyes - y

las palabras las podemos aplicar a su obra y a su pensamiento, manantiales de

un mismo río- necesitamos con urgencia -porque no lo hemos hallado aún- un

programa de cultura política que enriquezca la inteligencia pública, a fin de

que la opinión pueda escoger entre hombres y metas. O más aún, alentar el

ascenso de la voluntad del pueblo al pleno ejercicio de la responsabilidad

ciudadana. Y dice Fuentes: ‘Pleno ejercicio político, intelectual, económico,

en la fábrica, el sindicato, la universidad, la redacción del periódico, el centro

de investigaciones, los partidos, las organizaciones del campo, los municipios,

los parlamentos’ termino la cita.

Pero los cambios culturales, señores, lo sabemos son mucho más lentos que

los cambios económicos. En ese excepcional libro misceláneo que es Los

cinco soles de México, memoria de un milenio Carlos Fuentes sigue

preocupado y ocupado de este país que no tiene un comienzo sino un origen.

Y allí vuelve a la carga: en medio de la globalización corremos el riesgo de lo

que se mundialice sea la pobreza, con más de dos mil millones de personas en

el mundo en este año, y vuelve a plantearnos soluciones que no deben venir de

fuera, sino de dentro. Y la clave sigue siendo, como entonces y siempre, la

educación.

Hoy, al acompañarlo en este merecido homenaje que significa el Doctorado

Honoris Causa que le entrega la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla

–mi Universidad- nos complace darle la bienvenida a un territorio que no es

ajeno al diagnóstico que usted ha realizado continuo para el país y para

América Latina. Hace ya cuatrocientos setenta y dos años un sueño se hizo

realidad, y Puebla nació próspera y fértil como el campo circundado por cinco

torres de su Escudo de Armas. Hemos decidido que vuelva a ser un sueño, una

utopía realizable, eso es justamente, un patrimonio histórico, el legado que los

mayores dejan a sus descendientes, con nuestra enorme riqueza cultural.

Queremos entrar al nuevo milenio fortalecidos, esa utopía que no puede

crecer sin la unión, ya tiene aquí en Puebla, una tierra donde fecundar. Aquí en

Page 25: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

25

este territorio barroco que usted ha descrito en Terra Nostra y en Cambio de

piel, nos sentimos especialmente complacidos en recibirlo. Aquí en Puebla

estamos empeñados también en buscar soluciones locales a los problemas

globales, volviendo central al capital humano, a través de la cultura, del

conocimiento, de la educación en escuelas, es cierto. Pero también en el

campo, en las fábricas, en los talleres, en las clínicas, en los centros de salud,

en todas partes, estamos empeñados a pensar en las soluciones de Puebla a

largo plazo y en diseñar colectivamente una serie de políticas públicas.

Eso nos permitirá, como usted mismo dijo ante los Senadores al recibir la

Medalla Belisario Domínguez, y cito: ‘Ahorro, inversión, atracción de

capitales productivos, liberación de la mujer, protección del medio ambiente,

fortalecimiento de la empresa privada productiva, del Estado regulador y de

las organizaciones de la sociedad civil, incluyendo las organizaciones obreras

y agrarias que le den el techo protector suficiente para su desarrollo a las

mayorías desposeídas; legalidad; tolerancia; respeto; experiencia y destino.

Tal vez así, entre todos, inspirados por pensamientos diáfanos como el suyo,

podamos cambiar miseria por igualdad de oportunidades, desigualdad por

equidad, marginación por desarrollo. Tal vez, así entre todos, podamos al fin

dar el salto de la orilla de la necesidad a la orilla de la libertad. Muchas

felicidades Carlos Fuentes”.

A continuación el Dr. Enrique Doger Guerrero procede a hacer la entrega de

la Medalla del Grado de Doctor Honoris Causa al escritor Carlos Fuentes, y

corresponde al Lic. Melquíades Morales Flores entregar el Pergamino

correspondiente.

Acto seguido se concede el uso de la palabra el homenajeado, Carlos

Fuentes, quien se dirige a los presentes con las siguientes palabras: “Señor

Rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, don Enrique

Doger Guerrero; señor Gobernador Constitucional del Estado de Puebla, don

Melquíades Morales Flores; señora Sari Bermúdez, Presidenta del

CONACULTA; dignas autoridades del Estado de Puebla; señoras y señores:

El honor de ser recibido en este claustro honor en sí, se multiplica porque

ocurre en la primera gran ciudad novo hispana, trazada, nada menos que por

Fray Toribio de Benavente el Motolinía que hermana las culturas indígena e --

Page 26: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

26

hispánica de México, porque a Puebla pertenece don Juan de Palafox y

Mendoza, organizador de los Estatutos de la Universidad de México y en

palabras de don Alfonso Reyes, poeta olvidado por la magnitud del apóstol y

la rectitud del gobernante. Porque preside esta Casa de Estudios, un

intelectual, el Rector Doger Guerrero, que afirma los valores indispensables de

la indispensable educación pública laica, cuya divisa debe ser respeto para

todos, mordazas para nadie; y porque me recibe en este corazón de México

que es Puebla, con palabras generosísimas y propositivas el Gobernador

Morales Flores. Porque me presenta uno de los más brillantes novelistas

jóvenes de México, Pedro Ángel Palou. Y por la muy generosa semblanza que

me ha hecho María Teresa Colchero, que parece conocer mi obra mucho

mejor que yo. Y, finalmente, porque esta ceremonia reúne a muchos amigos

míos, tantos que me tardaría una hora en irlos enumerando uno por uno.

No en balde nos dice la Biblia que un amigo fiel es la medicina de la vida,

es también el espejo fiel de la identidad, pues si el gran enigma de la

existencia es que cada uno de nosotros, nuestro yo, se define por la ignorancia

de lo que somos, unión de cuerpo y alma, esta soledad del yo sólo se

comprende y acepta así a misma cuando entra en contacto con los otros,

mediante la amistad, el amor, la sociedad. El yo con sus atributos singulares

pasa, de esta manera, a ser el yo social que se organiza con los demás en

familia, como unidad, Estado, nación. Pero en cada caso, apenas constituye su

ser con los demás, el yo social se vuelve inseparable del yo cultural.

La manera de estar con los demás, crea las culturas y las culturas preceden a

todas las formas de organización política. Las culturas son nuestros más

antiguos cuerpos de adhesión y de identificación, y de sus inevitables heridas

en un mundo sujeto al azar y a la necesidad, previenen las respuestas que

llamamos sociedad-Estado-nación.

La identidad de México y de la América llamada Latina, surge del enorme

esfuerzo de conciliación entre las culturas de las cuales provenimos:

indígenas, europeas, africanas y al cabo esencialmente mestizas. Sí, poseemos

la memoria y la imaginación de nosotros mismos. La memoria y la

imaginación del Anahuac mexicano y del Tahuantinsuyo peruano, del nuevo

mundo de Américo Vespucio y del orbe indiano de Bartolomé de las Casas, de

Page 27: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

27

la Raza Cósmica de José Vasconcelos, el extremo occidente de Alan Ruquieu,

la América sin adjetivos de Simón Bolívar y la América Latina, que fue el

nombre que ‘pegó’ desde el siglo XX. Bien, somos indo-afro-ibero América.

Sí, quiero decir que adquirir una identidad es tan importante como obtener

un nombre, es un acto de bautismo, pero una vez adquirida la identidad, surge

el peligro del chauvinismo, considerar la cultura propia como superior a las

demás. El peligro de la xenofobia, el odio hacia quienes no comparten nuestra

identidad al grado de experimentar la necesidad de exterminar al extraño.

Añádase el peligro del aislamiento, proteger la cultura propia de influencias

foráneas, lo cual sólo asegura que la cultura nacional, perecerá como una

planta sin agua, o demostrará su debilidad incapaz de asimilar y transformar lo

ajeno en parte de lo propio, doy un ejemplo, nuestros trabajadores migratorios,

¡tantos, tantos provenientes de Puebla! Y que los trabajadores migratorios no

son sólo fuerza indispensable para la economía norteamericana, que sin ellos

se detendría abruptamente en centenares de rubros. Son además los

mediadores de las culturas de la América del Norte, son el ‘otro’ que se

propone como el ‘semejante’, merecen toda la protección del respeto que a su

esfuerzo y condición les corresponden. Son nuestros trabajadores migratorios,

los primeros ciudadanos del siglo XXI los que nos formulan la siguiente

pregunta ¿qué sigue al camino escarpado y vigoroso que nos lleva a la

identidad nacional a fin de fortalecerla trascendiéndola? La respuesta, a mi

entender, sí existe una palabra más parecida que opuesta a la identidad, y esa

palabra es la ‘diversidad’.

En Latinoamérica sabemos quienes somos, un mexicano o una mexicana, un

brasileño una brasileña saben quienes son, no creo que este sea ya el

problema, como lo fue en el pasado de Domingo Sarmiento en Argentina o

Samuel Ramos en México. La cuestión actualmente, a diversos niveles, es

movernos de la identidad adquirida a la diversidad por adquirir. Estamos en el

cruce de caminos, parece que en términos generales hemos superado los

tiempos de las brutales dictaduras militares en Latinoamérica. Y en su

mayoría, nuestras naciones se rigen demográficamente y mayoritariamente

nuestros ciudadanos creen en la democracia, pero no todos tienen fe en estos

gobiernos democráticos ¿por qué? Simplemente porque los beneficios que ----

Page 28: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

28

acostumbramos a atribuir a la democracia no están a la vista: la salud, la

educación, el techo, el trabajo, una vida mejor, la esperanza. Y ciertamente los

índices con la salvedad de algunas áreas más luminosas que otras, sólo revelan

regresión en casi todos los frentes y en casi todas las naciones de

Latinoamérica.

Los males que visiblemente nos aquejan -solamente en nuestro país, el 52%

de la población vive en la pobreza- sólo pueden iniciar el camino de la

coincidencia entre democracia y bienestar, dándole a la democracia algo más

que una estrecha definición política, reduciéndola en ocasiones –como ha

señalado el señor Gobernador Morales Flores- a un evento indispensable, pero

meramente electoral. Pues si la democracia da legitimidad de origen, también

debe dar legitimidad de ejercicio.

Democracia significa Estado de Derecho, crecimiento económico y justicia

distributiva, en ese orden o simultáneamente, ustedes dirán. Pero también

significa junto con el pluralismo político y la cultura de la legalidad, el respeto

debido a la diversidad sexual, religiosa y cultural. Significa cuidar al anciano,

significa cobertura universal de salud, significa educación vitalicia, significa

derechos de la mujer. Significa combate a la corrupción, no guerras

encendidas cada seis años y apagadas en espera de la siguiente tanda de

castigos sexenales, sino control y fiscalización permanentes. Mecanismos de

la vigilancia constante que incidan en los delitos no prescritos del pasado con

la autoridad que otorga el juicio a los visibles delitos del presente.

Significa reforzar las medidas de seguridad personal y colectiva. Considero

un verdadero drama para México que la pérdida de la seguridad coincida con

el avance de la democracia. Y me pregunto: ¿Es ajena la inseguridad a la

desigualdad? ¿Es ajena a la pérdida de expectativas? ¿Se ha convertido la

delincuencia en el único camino de ascenso social en México? ¿Podemos

sostener, por cuanto tiempo, la democracia sin seguridad y con pobreza?

¿Podemos caer en la tentación autoritaria, que es desde Moctezuma, la

tradición política más arraigada en México? ¿Podemos fortalecer a nuestra

democracia niña, nuestra preciosa, milagrosa y frágil forma de convivencia en

la libertad? Mi contestación es positiva, sí podemos, y uso el plural colectivo

porque la viabilidad democrática de México dependerá del esfuerzo de todos.

Page 29: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

29

En democracia el Ejecutivo deja de ser autoritario, pero debe ganar

autoridad. Dejemos atrás nuestra antiquísima delegación de poderes

providenciales al Ejecutivo, pero exijamos mayor y mejor ejercicio de la

autoridad presidencial. Confirmemos el ejercicio efectivo de la división de

poderes, confiemos en que el legislativo sabrá distinguir entre intereses

partidistas e intereses nacionales, manteniendo su integridad ideológica sin

sacrificar su indispensable contribución al proyecto nacional de más

crecimiento, con más igualdad, dentro de un marco jurídico a su vez más

confiable. Confiemos en que el Poder Judicial sea el garante de la recta

administración de la justicia y ejerza su competencia para inutilizar los actos

de autoridad contrarios a las leyes, contribuyendo a crear una cultura de la

legalidad y de la transparencia. Construyamos esa calidad institucional a la

que se refiere ayer Jorge Castañeda en el periódico El País, o sea, la

correspondencia superior entre la realidad y la ley.

Confiemos en que nuestra vida partidista no se convierta en una lluvia de

confetis coloridos sino que sin detrimento de sus convicciones, más allá de sus

filiaciones carismáticas y en beneficio de sus luchas electorales, una a todos

los Partidos su función solicializadora, su indispensable tarea de mediación

entre la ciudadanía y los poderes y la unión de ambos; ciudadanía y poderes en

propuestas concretas, no de simple oposición sino de auténtica contribución.

Dos formaciones partidistas se perfilan claramente en la actualidad

democrática mundial: el centro derecha y el centro izquierda, la democracia

cristiana y la social democracia. Mi esperanza es que la vida partidista de

México y Latinoamérica acabe por identificarse en estas dos grandes

corrientes sin demérito de las formaciones particulares que representan

aspectos de la sociedad civil, que no se sientan suficientemente representados

en las asociaciones mayoritarias; esos suelen ser grupos más cercanos a las

problemáticas de la sociedad civil, los derechos de mujeres, ancianos,

preferencias sexuales, medio ambiente, etc. Pero la totalidad de la

organización política, Estados, Partidos y Asociaciones, tienen hoy como base

a la sociedad civil entera y sus vertientes económicas para salir de la pobreza,

que sigue siendo el vergonzoso pecado original y el lastre permanente de

nuestros países.

Page 30: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

30

En claves de prosperidad, periferias marginadas, brechas crecientes ¿qué

hacemos con los pobres? Se pregunta Julieta Campos en un libro fundamental

y su respuesta se resume en la necesidad de auspiciar un crecimiento desde

abajo, fortaleciendo a las comunidades locales, organizando el micro crédito y

fomentando la vivienda, la salud y la educación, en beneficio, como lo fue, el

nuevo trato de Roosvelt en los Estados Unidos durante la depresión de los

años 30, en beneficio de las propias clases empresariales que requieren una

población educada, trabajadora y con poder adquisitivo para prosperar en

grande y a largo término en beneficio del país.

La pobreza no crea mercado, resume Carlos Slim, para quien fortalecer el

mercado significa fortalecer a las mayorías, incorporar a la población

marginada a la modernidad, atender al sector interno de la economía y

aumentar en consecuencia la demanda interna, asegurando mayor empleo y

mayor recaudación fiscal. Todo esto significa la democracia en su sentido más

lato, si cumplimos estos objetivos habremos dado respuesta a una persistente y

angustiosa pregunta de las sociedades latinoamericanas ¿por qué teniendo una

continuidad cultural tan vigorosa e ininterrumpida, tenemos una política tan

fracturada y una economía tan frágil? ¿No somos capaces de trasladar el vigor

de la cultura a la vida económica y social? De ahí que la defensa, el

acrecentamiento y el entendimiento de los valores de la cultura, sea tan

importante para la salud económica y política de la nación. La cultura es el

espejo de lo mejor que podemos ser, de lo mucho que podemos dar, por ello y

nada mejor que proclamarlo desde esta Universidad, debemos multiplicar las

oportunidades para enseñar y practicar las artes que son y seguirán siendo la

fundación, así como el testimonio, el termómetro, la prueba de resistencia y la

esperanza de avanzar de la sociedad en su conjunto.

La mitad de la población de América Latina -200 ó 250 millones de

habitantes – tienen sólo 20 años o menos, no habrá propuesta viable, política,

económica o cultural que pase por alto este hecho tan sencillo como complejo.

El nuestro es un continente de jóvenes, y no podemos contestar pregunta

alguna del orden cultural y político sin preguntarles a los jóvenes y

preguntarnos a nosotros mismos ¿dónde se haya el centro ciudadano en

sociedades como las nuestras, caracterizadas por contrastes tan violentos de ---

Page 31: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

31

educación y riqueza? ¿Podremos colmar el abismo de la esperanza en

sociedades con ritmos de desarrollo tan esporádicos y sobresaltados? ¿Qué

valor debemos atribuir, que importancia colectiva otorgar a las emergentes

culturas urbanas de las juventudes latinoamericanas? ¿No tenemos otra cosa

que legarles sino modelos vacíos de entretenimiento, consumo, ambición,

dinero y belleza, desprovistos de todo contenido moral? ¿Entenderemos el

rechazo de millones de jóvenes de esta oferta de la banalidad? Pero al cabo,

¿Son estas preguntas privativas de la juventud latinoamericana? O las

formulan así mismo miles y acaso millones de jóvenes que están reaccionando

ante un mundo que no sienten suyo, pero para el cual buscan afanosamente

respuestas. Un mundo donde la más rápida difusión informativa jamás

conocida coexiste con un verdadero alud desinformativo. Un mundo donde se

celebre el libre comercio, pero donde se practica cínicamente el

proteccionismo más subsidiado. Un mundo donde el libre movimiento de las

cosas se celebra, pero donde el libre movimiento de los trabajadores se

persigue. Un mundo donde el 20 por ciento de la población consume el 86 por

ciento de la producción. Un mundo donde 800 mil millones de dólares anuales

se gastan en armamentos, pero no se cuentan con los 6 mil millones necesarios

para sentar a todos los niños del mundo enfrente de un pizarrón. Un mundo

donde un solo día de gastos armamentistas bastaría para inmunizar a todos los

niños del mundo contra la polio y contar con las medicinas necesarias para

combatir la tuberculosis, la malaria, los males venéreos. Un solo día sin

armamentos, un solo día. Un mundo donde lo recordó hace pocos años el

presidente Bill Clinton a la asamblea general de la ONU, la mitad de la

población del mundo vive con menos de dos dólares diarios, y donde cada año

cuarenta millones de seres humanos mueren de hambre. Un mundo donde la

necesidad de un orden internacional fundado en derecho es suplantado por la

prevalencia de un solo estado hegemónico fundado en la fuerza ‘y

desvirtuando de un plumazo’, cito a Bernardo Sepúlveda: ‘la construcción de

normas e instituciones jurídicas mundiales’.

Los latinoamericanos, portadores de una espléndida cultura, ciudadanos de

una economía y una política frágiles aún, en comparación con la fuerza de

nuestra civilización, salimos en este inicio de siglo y de milenio al encuentro--

Page 32: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

32

con el resto de la humanidad y descubrimos los lazos que nos unen, los

valores que compartimos y las obligaciones que debemos asumir. En otras

palabras, el conocimiento, el descubrimiento del propio yo contiene la

obligación de descubrir tanto el nosotros propio como el nosotros ajeno. Esto

somos, esto compartimos. Estamos en el mundo, compartimos el mundo. Pero

si existe un mundo creado por la humanidad, también existe una humanidad

creada por el mundo.

¿Cómo nos instalamos en ambos mundos, el que creamos y el que nos crea?

Es este un desafío permanente de la vida que se convierte en asunto neurálgico

de la cultura, toda vez, que la manera como nos ubicamos en el mundo,

significa que modificamos nuestro entorno y debemos comunicar la

experiencia de esa modificación inevitable, equiparable así al hecho de vivir

en el mundo.

El más grande poeta dramático de la lengua española, Calderón de la Barca,

lo dijo sucintamente:

‘Hombres que se salís al suelo

por una cuna de hielo y por un sepulcro entráis,

ved como representáis’

En efecto, ¿cómo representamos? Yo propondría la siguiente respuesta:

Creando un mundo contiguo al mundo. Un universo alado del que conocemos

¿por qué? Porque el mundo tal y como es no basta, no nos basta y no se basta.

Requiere un enorme esfuerzo para seguir siendo. Requiere un supremo acto de

creación paralela. Nada reniega de este deber de vivir en el mundo para

crearlo tanto como la engañosa teoría del fin de la historia, cuyo propósito es

mecernos hasta adormecernos a fin de hacernos creer que no tenemos nada

más que decir o hacer sino aceptar el statu quo, añadirle nada a la nada y

conformarnos con el beatífico estado conyugal entre el capitalismo y la

democracia. Pero dado que el capitalismo no siempre se lleva bien con la

democracia – el caso de China – y dado que las múltiples formas de

asociación no lucrativa de la sociedad civil, nos señalan que el capitalismo no

le es siempre indispensable a la democracia, debemos sospechar que los

teóricos del fin de la historia, no están tratando de ‘enterrar’ a la historia sino--

Page 33: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

33

de ‘vendernos’ otra historia. Una historia ajustada a lo que C. Wright Mills,

llamó una ‘sociedad de alegres robots’. En la que según el sociólogo Neil

Postman ‘sólo nos queda divertirnos hasta la muerte’. La creación cultural es,

en este sentido, la forma necesariamente revulsiva, chocante a veces,

escandalosa en otras, de prevenirnos contra la diversión hasta la muerte.

En un mundo perfecto el decir sería idéntico al hacer, puesto que no es así,

vivimos nuestras vidas como seres problemáticos, afirmando y trascendiendo

también nuestros conflictos mediante nuestras facultades creativas,

lingüísticas, mentales, corporales, pero siempre imaginativas. Pues la

imaginación es la mediadora entre el sentido y la percepción del mundo. La

imaginación es el nombre del conocimiento en arte y el arte nos indica que

debemos no sólo conocer al mundo sino enseguida imaginarlo. ¿Qué mundo

debemos imaginar hoy? En el alma misma de nuestra cultura iberoamericana,

el cronista peruano Garcilazo de la Vega, el Inca, hijo de madre indígena y

conquistador español, dijo: ‘mundo sólo hay uno’ Semejante afirmación de la

unidad humana no podía excluir en nuestras tierras la diversidad de un

continente que se ha formado entretejiendo culturas muy diversas, en verdad,

la medida de nuestra unidad como seres humanos depende de nuestra

capacidad para admitir la diversidad de los valores humanos. El problema

estriba en que tanto la unidad como la diversidad de los valores, ocurre en la

historia, y la historia, nuestra inclusa historia – repito – se genera

constantemente como un problema cargado de peligros y de oportunidades.

El peligro de la historia consiste en verla como una simple colección de

hechos olvidando que es, sobre todo, un horizonte de posibilidades. ¡Claro que

la historia puede ser dolorosa! Pero aún más dolorosa sería la ausencia de

historia. Nuestros actos en el presente le devuelven la vida al pasado porque

recordamos, le dan vida al futuro porque deseamos. Me pregunto si hay un

solo acto de la cultura que no rememore y desee simultáneamente, sabiduría

antigua, la ha convocado Palou citando a San Agustín.

De manera que todo acto cultural ocurre acaso en ese doble terreno del

olvido y el recuerdo de la vida, reteniendo y reproduciendo, imaginando y

deseando simultáneamente la compleja totalidad de la existencia. Cierto, en un

modo ideal el decir sería idéntico al hacer, la voz se correspondería -------------

Page 34: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

34

exactamente con el acto. Como no es así, puesto que todos nuestros lenguajes

corporales, políticos, artísticos, son objeto de manipulación y engaño

constantes, la creación cultural al darle voz a las realidades alternas al lado del

mundo; la cultura en este sentido modifica el entorno, a veces de maneras

mínimas, a veces con enormes consecuencias pero siempre como una

afirmación. La verdad es inseparable de la multiplicidad del ser.

Y el cuadro auroral del cubismo, un desnudo desciende la escalera de

Duchamp, y en la luminosa noche de México, un perro le ladra a las estrellas

en Tamayo. Una multitud es masacrada por la tropa zarista en los escalones

de Odessa, de Eisenstein y un niño muerto es arrojado a un basurero de la

barriada mexicana, en Buñuel. Fernando Botero ocupa el espacio mediante la

presencia masiva y José Luis Cuevas lo ocupa mediante la más misteriosa

ausencia. Anton Wevern y Mario Lavista, eliminan el centro tonal de la

música liberándonos para crear nuestra propia red sonora. Martha Graham y el

grupo mexicano de danza contemporánea ‘Delfus’ revelan en el baile, las

emociones más internas mediante los movimientos más externos. El trato de

Atonin Artaud nos pide transformar el gesto en evento. ¿Hace otra cosa el

solitario noctámbulo teatral mexicano Antonio Salinas? Heissenberg nos

indica que la presencia del observador introduce la indeterminación en un

sistema físico, así lo demuestra narrativamente Jorge Volpi en En busca de

Klingsor. La arquitectura de Luis Barragán así como la de Frank Guerra, nos

permite ver la diferencia entre la tierra, lo que es, y el mundo, lo que puede

ser. Virginia Woolf nos pide sincronizar los 60 ó 70 tiempos diversos que

laten simultáneamente en todo sistema humano normal, tal y como lo hace

Jorge Luis Borges. En tanto que William Faulkner nos pide recordar que todo

es presente ¿entiendes? El presente empezó hace diez mil años, cosa que en

cien años dice también Gabriel García Márquez. Eugenia León canta desde el

corazón para unir todos los siglos de la voz mexicana, igual que la anciana

chamán indígena María Sabina, entona de noche, bajo un incendio de estrellas,

yo soy la luna, yo soy el ave, yo soy el barro, yo soy la aurora, yo soy el agua

que corre, yo soy la montaña que atiende, yo soy la mujer, la mujer, la mujer.

Todos estos, señoras y señores son reclamos de nuestra imaginación que

para siempre transforman al mundo porque no se contentan con reproducir o --

Page 35: ACTA DEL 12 DE FEBRERO DE 2003 · 2 de Diego Rivera, Rufino Tamayo, después José Luis Cuevas, vieron la luz las importantes novelas Al filo del agua de Agustín Yánez y Pedro Páramo

35

reflejar la realidad, crean realidad y al crearla disuelven la vieja polémica entre

cultura nacionalista y cultura cosmopolita. La realidad de la cultura une sin

disolver las aportaciones nacionales, y las hermana con la vasta y amenazada

continuidad de la civilización que juntos hemos creado todos.

Señor Rector, señor Gobernador, señora Presidenta, señores Embajadores,

autoridades, señoras y señores: He querido esta tarde, desde el claustro noble y

generoso de esta Universidad poblana, evocar una constelación de valores, que

son nuestros, creados por nosotros y que nos obligan a defenderlos en un

mundo hostil y peligroso. No he invocado aquí una sola creación, un solo

creador que pretenda encarnar la virtud o la verdad absolutas. También en la

vida política, así como en la vida internacional, la virtud del pluralismo, el

matiz y la afirmación de los valores de la existencia debe oponerse al

maniqueísmo frío y destructivo que dice: ‘Sólo yo soy dueño de la verdad;

sólo yo encarno el bien, en consecuencia tengo derecho a designar primero y

externar enseguida al mal por mí señalado’.

La universidad nos enseña que toda civilización es portadora de valores y

ninguna es objeto de exterminio. Las civilizaciones no chocan, las

civilizaciones se mezclan, diversifican y enriquecen al mundo.

No, no asistimos al fin de la historia, la historia no terminará mientras un

solo ser humano no haya dado presencia a lo no escrito, lo no cantado, lo no

danzado, lo no filmado, lo no dicho, lo no amado, lo no recordado. ¡No!, la

historia no ha terminado porque nosotros los hombres, las mujeres, los niños,

de un Planeta de seis mil millones de seres no hemos dicho nuestra última

palabra; que sin embargo, es mi última palabra. Muchas gracias”.

Acto seguido y en uso de la palabra el Mtro. Guillermo Nares Rodríguez, en

su carácter de Secretario del Consejo Universitario, da por concluida esta

sesión y cerrada la presente acta siendo las catorce horas con diez minutos del

día doce de febrero del año dos mil tres , y a nombre del máximo órgano de

gobierno y del señor Rector, agradece la presencia del “señor Gobernador del

Estado; del homenajeado, el Doctor Carlos Fuentes; de los titulares de los

Poderes Legislativo y Judicial; de la Presidenta de CONACULTA; del Dr.

Ángel Palou; a los medios de comunicación y a todas y cada una de las

personalidades que nos honran el día de hoy con su presencia. Muchas

gracias”. Para constancia. DOY FE. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -