25 de agosto de 1648 Calasanz ingresa al

cielo…Hoy lo recordamos como el Santo de los niños… declarado por la Iglesia

como el patrono de las Escuelas Populares Cristianas del mundo

Novena: ¿de dónde surge prepararnos así?

La idea de la Novena proviene del Nuevo Testamento, cuando María y los Apóstoles, 40 días

después de la Resurrección de Jesús, permanecieron en oración por nueve días

consecutivos. Ellos oraron con un solo corazón y perseveraron en la oración, esperando la venida del Espíritu Santo que les había sido prometido (Hch 2,1).

Desde entonces, las Novenas se han vuelto una práctica frecuente en la tradición de la Iglesia.

Contemplar es mirar con detenimiento… Dejando que lo que contemplamos nos

hable hoy.

En esta novena vamos a contemplar

el cuadro que recuerda uno de los milagros realizados

por Calasanz…

Espíritu Santo, Tú que eres viento: llévame donde quieras; Tú que eres brisa: déjame respirar lo nuevo;

Tú que eres fuerza: levántame del suelo; Tú que eres vida: dame pasión por la vida;Tú que eres luz: ilumíname con tus rayos;

Tú que eres libertad: hazme realmente libre; Tú que eres agua viva: sacia mi sed;

Tú que eres Dios, regálame la gracia de saber mirar más allá de las apariencias.

Tú que eres respuesta: dame fuerza para decir sí

al Padre, al Hijo

y a ti, Espíritu Santo.

Rezamos juntos:

‘’El P. José de Calasanz está en Frascati. Es por la mañana y los niños ya han entrado en la escuela (como nosotros ahora).

De pronto, aparece en el Colegio una mujer que llora desconsoladamente y pregunta por el P. José.

El milagro:

Tiene en sus brazos a su hijo que acaba de morir... y lo había matado ella misma, sin querer, ahogándolo por la noche mientras dormía a su lado. La madre está enloquecida de dolor.

El P. José la hace pasar a la Capilla y, como siempre que tenía una dificultad, manda llamar a todos los alumnos a la Capilla para rezar.

Él sabe muy bien la fuerza intercesora que tiene la oración de los pequeños y de los jóvenes.

¡Niños y jóvenes en oración! Para presentar al Padre las necesidades del mundo, para acercar al Corazón de Cristo las alegrías y las esperanzas, las angustias y temores de todos los hombres.

Allí hay un cuadro de la Virgen de la

que Calasanz es muy devoto. Todos se arrodillan ante la Madre de Dios…

Y piden con fervor, como tantas veces lo había

hecho con el Padre José, que se produzca el milagro.

Comienzan a rezar una

Salve el niño muerto recobra

la vida.

¡Milagro! , grita fuera de sí la madre.

Milagro de la Virgen y de la oración de los niños, contesta el

humilde y santo Padre José.’’

Dijimos que contemplar es mirar con detenimiento… Dejando que lo que contemplamos nos

hable hoy.

Contemplemos todo el cuadro que

recuerda el milagro…

Es que en el Milagro de Frascati se

encuentra una síntesis muy honda en que podemos encontrar reflejados la obra

educativa de Calasanz.

En el niño muerto que Calasanz, en sus manos,

eleva a María está condensada…:

toda la muerte que trae a la infancia la esclavitud

de la ignorancia y el pecado.

Ese niño encarna la situación de tantos miles de niños y jóvenes que, desde los más tiernos

años, sufren heridas de muerte.

Silencios… soledades… dolores… incapacidad de escuchar a quienes nos necesitan… dificultad de

ver el dolor ajeno.

Cuántas veces sentimos que éste problema está acabando con mis fuerzas…

Cuántas veces nos sentimos sumidos en la muerte de la falta de alegría y de la falta de esperanza.

Y ¿por qué no pensar que cada uno de nosotros es el elevado en las manos de

Calasanz?

Y es en las manos de Calasanz donde la

infancia y la juventud muertas, reciben la Vida del Niño de

Belén, por la poderosa intercesión

de la Virgen

y la Virgen le muestra al niño que debemos

encarnar con su presencia y ayuda: porque todos estamos llamados a parecernos a Jesús.

Calasanz presenta el niño

muerto que podemos ser cada uno de nosotros… (imaginate en sus

brazos).

Pero hoy, en este momento, vamos a ponernos en el lugar de Calasanz…

y vamos a pedir por otros… Y como ocurrió en las Bodas de Caná, vamos a hacer que Jesús, en respuesta a un pedido de su Madre, realice los milagros que necesitamos en nuestro

mundo… Por todos los que sufren y no encuentran

consuelo. Especialmente ponemos ante la mirada maternal de María el corazón sufriente de todos los que se sienten solos, abandonados y tristes. Que el consuelo de la Madre, les regale la alegría del Espíritu. Oremos.

Respondemos: MIRA A LA MADRE DE TU HIJO Y ESCÚCHANOS.

Por alguien de mi familia… pidamos aquella gracia que creamos que necesite.

Respondemos: MIRA A LA MADRE DE TU HIJO Y ESCÚCHANOS.

Por un compañero del colegio que sepamos que está pasando por un mal momento, para que pueda sentir la mano protectora de Jesús que lo sostiene.Respondemos: MIRA A LA MADRE DE TU HIJO Y ESCÚCHANOS.

Concluimos este primer día de la novena rezando juntos:

Padre Mío, Calasanz

Mi maestro, luz y guía.

Mírame desde la gloria y bendíceme

En este día.

Alcánzame del Eterno, inteligencia y piedad

Y un entero rendimiento a su santa Voluntad.