100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
Transcript of 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
1/6
De la unidad de la obra de arte y la completacin del ser humano.
El mandato de la esttica clsica en el arte contemporneo.
Mirsa Acevedo Molina
El hombre vive de una manera muy rara,
cuando es joven vive como si no fuera a morir y
cuando es viejo muere como si no hubiese vivido
El fin de la obra y el mandato de unidad.
Hay en Aristteles una idea central en su Potica, que es la de unidad de la obra en
torno a un fin. Este fin que es el objeto de la produccin artstica, es para l la mimesis,
caracterstica sustancial que unira a todas las artes ficcionales, mientras qu es lo que
se imita, con qu elementos o instrumentos y cmo, seran aquellos aspectos variables
que diferenciaran a unas de otras artes imitativas.
Aunque es importante sealar que respecto del objeto, la poesa y las artes plsticas1
estaran ligadas, pues en ambos casos este sera la accin humana, yo me quiero referir
aqu a otro aspecto aglutinador entre ambas disciplinas, el que se relaciona con el deber
serde totalidad y de unidad de toda obra, tanto en el sentido de causa final, de
completacin y adecuacin a su ser, como en el sentido prctico de coherencia entre las
partes y el todo -de consistencia-, y a la persistencia de este mandato a travs de la
historia del arte y de las ideas estticas.
En esta idea de unidad necesaria a toda obra, que se da primero en Aristteles hablando
de la potica como techn, y luego en Horacio hablando de la potica como ars, hay una
dimensin prctica que mencionan2
y una dimensin metafsica no explcita. La
dimensin prctica se relaciona con la coherencia entre las partes y el todo, y esta
nocin de todo conlleva una dimensin metafsica: la causa final. La obra, dice
Aristteles, busca producir un efecto de conmiseracin y temor en el pblico, y para ello
debe adecuar sus instrumentos, su ritmo, los caracteres de los personajes, en definitiva,
1Aquellas que se distinguen de la poesa por el medio utilizado para imitar: colores y figuras.
2 Elaboracin de procedimientos adecuados a los fines, los que se pueden ensear.
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
2/6
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
3/6
posmoderno de aceptacin de las diferencias y de la sensacin de inestabilidad y de
incertidumbre4. Hay una escala de valoracin dominante, de bueno a malo, de lindo a
feo, de alta cultura a baja, y una esttica derivada de ello. Un ejemplo de ello es la
creacin de productos destinados a cada tipo de pblico dependiendo del lugar que
supuestamente cada uno ocupa, siendo los colores fuertes, lo sobrecargado y lo
estridente, lo que se destina al mercado flaite (expresamente ocupo el trmino con sus
connotaciones despectivas), mientras los colores pastel, lo equilibrado, lo light, el arte
no figurativo, estn destinados a las clases altas, entre tanto los intelectuales -gente fina,
aunque no rica-, en ese esquema, en vez de beige, visten de negro, salvo que sean
artistas, en cuyo caso est aceptado un poco de hipismo folk de buena factura. Las
vanguardias mismas, en pleno siglo XX dijeron menos es ms, rechazaron el
ilusionismo y el adorno, y dirigieron su trabajo hacia las esencias5.
El ser y el conocer
Con esta idea regreso al centro de lo que me ha motivado a desarrollar este ensayo: los
aspectos formales de la Potica en Aristteles estn unidos a su concepcin metafsica,
tal como lo estn en Platn y en los filsofos modernos. Platn no tiene una Potica,
pero s habla de la retrica en el Fedro, y se refiere al arte y la poesa en varias obras, en
especial en El Banquete y el Hipias Mayor. Su inters es declaradamente metafsico,
indicando explcitamente que busca la idea de belleza, a la que coloca separada del
mbito del hacer, pero asociada al mbito del conocer. Cuando habla de la belleza, parte
desde el arte y desde las cosas, pero rpidamente esta belleza en los seres queda
subordinada la verdadera belleza, que es el ser, y ese ser se debe conocer. Esa
experiencia de conocer el ser, es una experiencia esttica: la belleza del pensar, dira
Plotino, la mxima adecuacin del ser humano a su propia alma, que participa de lo
divino. El hombre que conoce es para este filsofo neoplatnico, ms completo, es ms
el mismo, es ms humano, es ms bello, porque para amar la belleza, hay que participar
de ella.
4 Es que justamente en pocas de incertidumbre el ser humano se aferra a las que tiene, busca dar sentido
a la vida, intenta vincularse con el mundo? Ms adelante veremos un caso en que esto se da as, en plena
Edad Media.5Ahora que lo pienso, es por eso es que considero rupturista el barroquismo como estilo de vida!
Tambin es contestatario entonces un poco de nylon en la ropa y la mesa de formalita.
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
4/6
Para los pensadores espiritualistas, la bsqueda de la belleza y el conocimiento da
humanidad al humano, la belleza de conocer la belleza-verdad que hay detrs de las
cosas. Uno encuentra algo de su propia alma en el alma de las cosas del mundo y esa
constatacin da tanto placer como el placer de la mmesis y el conocimiento en
Aristteles. Desde ese punto de vista, ambas tendencias no estn tan alejadas. En ambos
casos seguimos en el mbito del placer del conocimiento y del reconocimiento de uno
mismo en lo que conoce del otro. Si este reconocimiento lo es de una idea universal,
anterior a uno mismo, en el caso de la filosofa platnica y sus seguidores, o de
reconocimiento de la misma humanidad en el resto de los humanos, el reconocimiento
de lo que las cosas son, para los aristotlicos, no cambia el hecho de que la bsqueda
que se ha planteado aqu, es la del ser, que est aqu en cada cosa, o ms all enEl Ser
supremo, pero siempre se trata del ser.
Para tener un conocimiento significativo (nico tipo de conocimiento verdadero), dicen
muchas teoras pedaggicas actuales, este tiene que tener relacin con los
conocimientos previos, y debe haber algn grado de apropiacin del mismo por parte
del sujeto que conoce, mediante mecanismos que implican en gran medida,
identificacin: el reconocimiento en el otro. Mientras conozco me reconozco en el otro,
y mientras ello ocurre, me convierto un poco en el otro, me transformo, soy un nuevo
yo. Y el amor no cumple el mismo proceso, tan ligado al conocimiento como lo ve
Platn?: conocer, reconocer-se, hasta completarse y aqu el mito de las dos mitades,
del Banquete. La bsqueda de la completacin del ser humano a travs del amor, del
conocimiento, de su relacin con el mundo y consigo mismo. Es que el ser humano no
est completo nunca, tiende hacia, pero no es? Lo que est claro es que buscamos la
permanencia en el cambio y que nuestra conciencia no nos permite tener una idea de
algo, hasta que ese algo ya fue, que buscamos la repeticin de la experiencia irrepetible
y como no lo logramos armamos categoras universales, para poder predicar algo acerca
de esas experiencias particulares.
Buscando tanta cosa que se nos escapa, cmo no entender que se nos escape el ser a
nuestra inteligibilidad? As la mejor manera de morir es mientras lo andamos buscando,
con conciencia de la bsqueda, eso es lo que nos permitira vivir sabiendo que vamos a
morir y morir sabiendo que hemos vivido, como predicaba Buda.
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
5/6
Arte y realidad-arte como lenguaje.
La experiencia esttica est ligada entonces a la bsqueda de completacin del sujeto
que la vive. En el otro polo est la obra y su exigencia de ser completo, nico y por
tanto, coherente y cohesionado. La obra de arte ha tenido durante muchos siglos, la
exigencia de ser lo que nuestra conciencia humana le impone, nuestra necesidad de
ordenar el mundo para comprenderlo se ve reflejada en nuestras creaciones. El arte es
desde este punto de vista, reordenamiento del mundo, imposicin de categoras, incluso
en sus productos ms deconstructivos.
Arte no mimtico
All radica la base de uno de los problemas bsicos planteados por el arte del siglo XX,
el de qu es el arte y cul es el mundo del arte. Si el arte es un lenguaje y vive en su
mundo propio, hay que descubrir sus leyes internas, sus elementos -como Aristteles- y
no valorarlo en torno a su verdad referencial -alejndose de Aristteles. Cules son los
lmites entre arte y realidad es el problema planteado por lo menos desde Cezane en
adelante, desarticulando los mecanismos de referencialidad, desde las diferentes
prcticas e investigaciones de los propios artistas, hasta llegar al radical ready made,
que trae la realidad al arte. A partir del gesto duchampiano es el artista el que decide,
el que demarca la realidad.
Heidegger presta el piso terico para este gesto, planteando que el arte y la verdad
coinciden en el acto de desocultar al ente que est en el arte. En el arte acontece la
verdad, por lo tanto no es referencial, no atestigua un mundo exterior, resolviendo desde
esta formulacin, el problema platnico del simulacro, del engao del simulacro al
liquidar de golpe a la mimesis como criterio de verdad de la obra. Ni en el sentido
platnico ni en el aristotlico, el arte es adecuacin, sino simplemente presentacin.
Dice Vicente Huidobro en su conocido poema:
Por qu cantis la rosa, oh Poetas!
Hacedla florecer en el poema;
-
7/30/2019 100222686 de La Unidad de La Obra de Arte y La Completacion Del Ser Humano
6/6
Slo para nosotros
Viven todas las cosas bajo el Sol.
El Poeta es un pequeo Dios (Arte Potica)
En estos versos el arte es antes de la realidad, la realidad es para el arte. El artista es
constructor de realidad, gracias a l lo inerte se hace vivo, hay alma en lo creado. No es
necesario cantar ni a la naturaleza, ni a la belleza, ni al amor, ni a la poesa misma, se
puede cantar cualquier cosa y las cosas dependern de ese canto, de la potica misma
surgen la belleza, el amor y la vida. La obra no es mmesis aqu, sino creacin absoluta,
estamos en el reino de la libertad del autor. Otro giro hacia el sujeto, otro que como en
el gesto duchampiano coloca en el artista el pronunciamiento del ser, no solamente del
arte, sino ahora tambin, de la realidad. La realidad est aqu en construccin por los
seres humanos.
Sin embargo, Huidobro sigue pretendiendo, como Aristteles, inducir la recepcin:
y el alma del oyente quede temblando, se sigue preocupando de la trada artista,
obra, receptor. Dios cambia de lugar, ahora habita en el poeta, pero sigue existiendo. En
estas condiciones como en la potica de Horacio, hay preceptiva: Inventa mundos
nuevos y cuida tu palabra;/ El adjetivo, cuando no da vida, mata. Es la misma
condicin que impone Horacio: dar vida a la obra, un sentido, no poner nada que sea
ajeno alfin interno de ella, que est supeditado en ltima instancia al fin exterior, al
efecto (causa final?). No ha salido, por tanto del mandato de unidad, Duchamp
tampoco, aunque diga que el espectador no le interesa, ya que pretende remover,
provocar, el gesto suyo est dirigido a sustituir el acto creativo desde el Dios cristiano,
hacia el artista y mucho ms pedestremente, desde los crticos al artista. Quiere que el
poder retorne al artista, pero no se opone al poder, no le da el poder a el receptor, quiere
que la libertad radique en el artista, no que est en todas partes para que el pblico sea
co-constructor de la obra. El que s se coloca en esa posicin, es Benjamin (1934), l s
quiere que al modo del teatro de Brecht, sea el pueblo el coautor, quiere socializar los
medios de produccin, es decir la palabra. As s la obra estara abierta, habra espacio
para la ambigedad de la recepcin. Sin embargo, Benjamin no es artista, sino crtico.