Post on 24-Jan-2018
Universidad Autónoma De Chiapas
Facultad de Medicina Humana C-II
Dr. Manuel Velasco Suárez.
Módulo 1
Competencia
Anatomía I
Docente
Dr. Martha Castillejos Torres
Alumno
Federico Alejandro Ochoa Trujillo
SUPERFICIE INTERNA DE LA
PARED ANTEROLATERAL
DEL ABDOMEN.
La superficie interna
(posterior) de la pared
anterolateral del abdomen
esta cubierta por la fascia
transversal, una cantidad
variable de grasa
extraperitonial y el
peritoneo parietal.
La parte infraumbilical de esta
superficie presenta cinco pliegues
umbilicales peritoneales que se
dirigen hacia el ombligo, uno en el
plano medio y dos a cada lado: Fascia
Transversalis
InternoExterno
Oblicuo e
xte
rno
Oblicuo inte
rno
Tra
nsv
ers
o
Fascia Transversalis
Peritoneo
parietal.
-EL PLIEGUE
UMBILICAL
MEDIO: Se
extiende desde el
vértice de la vejiga
urinaria hasta el
ombligo y cubre el
ligamento umbilical
medio, un resto
fibroso del uraco
que unía el vértice
de la vejiga fetal al
ombligo.
Ombligo
-DOS PLIEGUES
UMBILICALES
MEDIALES,
laterales al pliegue
umbilical medio, que
cubren los
ligamentos
umbilicales
mediales, formados
por las porciones
obliteradas de las
arterias umbilicales.
-DOS PLIEGUES
UMBILICALES
LATERALES,
laterales a los
pliegues umbilicales
mediales, que
cubren los vasos
epigástricos
inferiores y, por lo
tanto, sangran si se
seccionan.
Las depresiones
laterales a los
pliegues umbilicales
son las fosas
peritoneales, que son
posibles zonas de
hernias. Las hernias
se clasifican en
función a la fosa en
que se localizan. Las
fosas poco profundas
situadas entre los
pliegues umbilicales
son:
-Las fosas
supravesicales, entre los
pliegues umbilicales
medio y mediales,
formadas cuando el
peritoneo se refleja
desde la pared anterior
del abdomen sobre la
vejiga urinaria. El nivel
de las fosas
supravesicales asciende
o desciende de acuerdo
con el llenado o vaciado
de la vejiga.
-Las fosas inguinales
mediales, situadas
entre los pliegues
umbilicales mediales
y laterales, suelen
denominarse
triángulos inguinales (
triángulos de
hesselbach), y es
donde pueden
producirse hernias
inguinales directas,
menos habituales.
-Las fosas inguinales
laterales, laterales a
los pliegues
umbilicales laterales,
incluyen los anillos
inguinales profundos y
en ellas puede
producirse el tipo mas
frecuente de hernia
de la pared inferior
del abdomen, la
hernia inguinal
indirecta
La porción supraumbilical de
la superficie interna de la
pared abdominal anterior
presenta una reflexión
peritoneal orientada
sagitalmente, el ligamento
falciforme, que se extiende
entre la pared abdominal
anterior y el hígado. Circunda
el ligamento redondo del
hígado y las venas
paraumbilicales en su borde
inferior libre. El ligamento
redondo es un resto fibroso de
la vena umbilical, que iba
desde el ombligo al hígado
durante la vida embrionaria.
Ligamento redondo
REGION
INGUINAL
Región Inguinal.La región inguinal, o ingle,
se extiende entre EIAS y
el tubérculo del pubis. Es
una zona de importancia
anatómica y clínica:
anatómicamente, porque
hay estructuras que
entran y salen de la
cavidad abdominal, y
desde un punto de vista
clínico porque las vías de
entrada y salida son
zonas de posible
herniación.
Aunque los testículos se
localizan en el perine después
del nacimiento, la gonoda
masculina se forma
originalmente en el abdomen.
Su reubicación fuera del
abdomen, en el perine, a través
del conducto inguinal, explica
muchas de las características
estructurales de la región.
Tradicionalmente, el testículo y
el escroto suelen diseccionarse
y estudiarse en relación con la
pared anterior del abdomen y la
región inguinal.
LIGAMENTO INGUINAL Y
TRACTO ILIOPÚBICO
Muchas articulaciones que
poseen un amplio rango de
movimientos se asocian a
bandas fibrosas engrosadas,
o retináculos,
que fijan estructuras al
esqueleto durante las distintas
posiciones que adopta la
articulación El ligamento
inguinal y el tracto iliopúbico,
que se extienden desde la
EIAS hasta el tubérculo del
pubis, constituyen un
retináculo bilaminar anterior
(flexor) de la articulación
coxal.
Ligamento Inguinal
Tracto Iliopubico.
El retináculo se extiende sobre
el espacio subinguinal, a
través del cual pasan los
flexores de la cadera y las
estructuras vasculonerviosas
de la mayor parte del miembro
inferior.
Estas bandas fibrosas son la
porción engrosada más
inferolateral de la aponeurosis
del oblicuo externo del
abdomen y el
borde inferior engrosado de la
fascia transversal. Son unos
de los principales puntos de
referencia de la región.
El ligamento inguinal
es una densa banda
que forma la parte más
inferior de la
aponeurosis del
oblicuo externo.
Aunque la mayoría de
las fibras del extremo
medial del ligamento
inguinal se insertan en
el tubérculo del pubis,
algunas tienen otros
recorridos.
Oblicuo
Externo
Ligamento inguinal
• Algunas de las fibras
más profundas pasan
posteriormente y se unen
a la rama superior del
pubis, lateralmente al
tubérculo del pubis,
constituyendo el
ligamento lacunar (de
Gimbernat) arqueado, que
forma el límite medial del
espacio subinguinal. Las
fibras más laterales se
continúan a lo largo del
pecten del pubis como
ligamento pectíneo (de
Cooper).
Ligamento LacunarLigamento Pectineo
• Algunas de las fibras
más superiores se
abren hacia arriba,
sobrepasando el
tubérculo del pubis y
cruzando la línea alba
para mezclarse con
las fibras inferiores de
la aponeurosis del
oblicuo externo del
abdomen
contralateral. Estas
fibras forman el
ligamento inguinal
reflejo.
Ligamento reflejo
El tracto iliopúbico se
observa en el lugar
del ligamento
inguinal cuando se
inspecciona la región
inguinal desde su
cara interna
(posterior), como
ocurre durante una
laparoscopia.
Tracto Iliopubico
Refuerza la pared
posterior y el suelo del
conducto inguinal
cuando cruza por
encima de las
estructuras que
atraviesan el espacio
subinguinal.
El ligamento
inguinal y el tracto
iliopúbico se
extienden sobre
una zona
congénitamente
débil de la pared
abdominal, en la
región inguinal o
ingle, denominada
orificio
miopectíneo
(Fruchaud, 1956).
Orificio Miopectineo.
Esta zona débil,
formada en relación
a estructuras que
atraviesan la pared
corporal, es el lugar
de aparición de
hernias inguinales
directas e indirectas
y femorales.
El tracto
iliopúbico es el
borde inferior
engrosado de la
fascia transversal
y se presenta
como una banda
fibrosa que
discurre paralela
y posterior
(profunda) al
ligamento
inguinal.
CONDUCTO INGUINAL
La formación del
conducto inguinal se
relaciona con el descenso
de los testículos durante el
desarrollo fetal. En los
adultos, el conducto
inguinal es un paso
oblicuo, de unos 4 cm de
largo, dirigido
inferomedialmente a través
de la porción inferior de la
pared anterolateral del
abdomen. Se sitúa
paralelo y superior a la
mitad medial del ligamento
inguinal .
Las principales estructuras que ocupan el conducto inguinal son el
cordón espermático en el hombre y el ligamento redondo del útero en la
mujer. Se trata de estructuras funcional y evolutivamente diferenciadas
que se encuentran en una misma localización.
El conducto
inguinal también
contiene, en
ambos sexos,
vasos sanguíneos
y linfáticos, y el
nervio ilioinguinal.
El conducto
inguinal está
abierto en ambos
extremos:
• El anillo inguinal
profundo (interno) es
la entrada al conducto
inguinal. Se encuentra
en situación superior a
la mitad del ligamento
inguinal y lateral a la
arteria epigástrica
inferior .
Es el principio de una
evaginación de la fascia
transversal que forma
una abertura que
recuerda la entrada de
una cueva
Arteria Gástrica Inferior
Anillo inguinal Profundo
Anillo Inguinal Profundo
A través de esta abertura
pasan el conducto
deferente extraperitoneal y
los vasos testiculares en el
hombre (el ligamento
redondo del útero en la
mujer) para entrar en el
conducto inguinal.
La fascia transversal se
prolonga dentro del
conducto, formando la
cubierta más interior (fascia
interna) de las estructuras
que atraviesan el conducto.
Conducto DeferenteVasos Testiculares
• El anillo inguinal
superficial (externo) es la
salida por donde el cordón
espermático en el hombre
(ligamento redondo del
útero en la mujer) emerge
del conducto inguinal .
El anillo superficial es una
abertura semejante a una
hendidura entre las fibras
diagonales y paralelas de la
aponeurosis del oblicuo
externo del abdomen, justo
superolateral al tubérculo
del pubis.
Las partes de la
aponeurosis situadas lateral
y medialmente al anillo
superficial, que forman sus
bordes, son los pilares.
Anillos Inguinales
Superficiales
Tubérculo del Pubis.
El pilar lateral se inserta en el
tubérculo del pubis y el pilar
medial en la cresta del pubis.
Fibras de la hoja superficial de
la fascia de revestimiento
(profunda) sobre el músculo
oblicuo externo y su
aponeurosis, que discurren
perpendiculares a las fibras de
la aponeurosis, pasan de un
pilar al otro a través de la parte
superolateral del anillo. Estas
fibras intercrurales ayudan a
impedir que los pilares se
alejen uno de otro (es decir,
evitan que la «hendidura» de la
aponeurosis se ensanche).
Pilar lateral.
Normalmente, el conducto
inguinal está colapsado
anteroposteriormente
sobre las estructuras que
lo atraviesan. Entre sus
dos aberturas (anillos), el
conducto inguinal tiene
dos paredes (anterior y
posterior), así como un
techo y un suelo.El
conducto inguinal tiene
dos paredes (anterior y
posterior), techo y suelo
• Pared anterior:
formada por la
aponeurosis del
oblicuo externo
del abdomen a lo
largo de todo el
conducto; la
porción lateral
está reforzada
por fibras del
oblicuo interno
del abdomen.
• Pared posterior:
formada por la fascia
transversal; la porción
medial está reforzada
por inserciones púbicas
de las aponeurosis del
oblicuo interno y del
transverso del abdomen
que a menudo se
fusionan, en grado
variable, en un tendón
común, la hoz inguinal
(tendón conjunto), y por
el ligamento inguinal
reflejo.
Pared
Posterior
•Techo:
formado lateralmente
por la fascia
transversal,
centralmente por los
arcos
musculoaponeuróticos
de los músculos
oblicuo interno y
transverso del
abdomen, y
medialmente por el
pilar medial de la
aponeurosis del
oblicuo externo del
abdomen.
• Suelo:
formado
lateralmente por
el tracto
iliopúbico,
centralmente
por el surco del
ligamento
inguinal
replegado, y
medialmente por
el ligamento
Lacunar.
Ligamento Inguinal
El ligamento
inguinal y el tracto
iliopúbico, que
cubren el orificio
miopectíneo ,
definen los límites
inferiores
del conducto
inguinal y sus
aberturas.
El triángulo inguinal separa
estas formaciones de las
estructuras de la vaina
femoral (vasos femorales y
conducto femoral) que
atraviesan la porción medial
del espacio subinguinal.
La mayoría de las hernias en la
región de la ingle en el hombre
pasan superiormente al tracto
iliopúbico (hernias inguinales),
mientras que en la mujer la
mayoría pasan inferiormente
(hernias femorales).
Debido a su relativa debilidad, en
muchas reparaciones de hernias
se recubre el orificio miopectíneo
con una malla protésica situada
en el espacio retroinguinal
extraperitoneal («espacio de
Bogros»).
Hombres
Mujeres
DESARROLLO
DEL CONDUCTO
INGUINAL
Los testículos se
desarrollan en el
tejido conectivo
extraperitoneal de
la región lumbar
superior de la pared
posterior del
abdomen
El gubernáculo masculino es
un tracto fibroso que
conecta el testículo primitivo
con la pared anterolateral
del abdomen en el punto
donde se localizará el anillo
profundo del conducto
inguinal.
Un divertículo peritoneal, el
proceso vaginal, atraviesa el
conducto inguinal en
desarrollo, transportando
láminas musculares y
fasciales de la pared
anterolateral del abdomen al
entrar en el escroto
primitivo.
Hacia la semana 12, el testículo está en la pelvis y hacia la semana 28
(7.o mes) se encuentra cerca del anillo inguinal profundo en formación.
El testículo
empieza a
atravesar el
conducto inguinal
durante la semana
28, y tarda en torno
a 3 días en
cruzarlo.
Aproximadamente
4 semanas
después, el
testículo entra en el
escroto .
A medida que el testículo, su conducto (el conducto deferente) y sus vasos y nervios
se desplazan, se rodean de extensiones musculofasciales de la pared anterolateral del
abdomen, lo que explica la presencia de sus derivados en el escroto adulto: las fascias
espermáticas interna y externa, y el músculo cremáster
Normalmente,
el tallo del
proceso vaginal
degenera; sin
embargo, su
porción sacular
distal forma la
túnica vaginal,
la vaina serosa
del testículo y
el epidídimo
(Moore et al.,
2012).
Los ovarios también se
desarrollan en la región
lumbar superior de la
pared posterior del
abdomen y se
desplazan hasta la
pared lateral de la
pelvis .El proceso
vaginal del peritoneo
atraviesa la fascia
transversal a nivel del
anillo inguinal profundo,
formando el conducto
inguinal como en el
varón, y protruye en el
labio mayor en
desarrollo.
2 meses.
El gubernáculo femenino, un
cordón fibroso que conecta el
ovario y el útero primitivo con el
labio mayor en desarrollo, está
representado en la vida posnatal
por el ligamento propio del
ovario, entre el ovario y el útero,
y el ligamento redondo del
útero, entre el útero y el labio
mayor. Debido a las inserciones
de los ligamentos propios de los
ovarios al útero, los ovarios no se
desplazan hasta la región
inguinal; no obstante, el
ligamento redondo pasa a través
del conducto inguinal y se fija al
tejido subcutáneo del labio mayor.
Excepto en su porción más inferior, que se convierte en un saco
seroso que envuelve al testículo, la túnica vaginal, el proceso vaginal
se oblitera hacia el 6.o mes de desarrollo fetal. El conducto inguinal
femenino es más estrecho que el del varón, y el de los lactantes de
ambos sexos es más corto y mucho menos oblicuo que el de los
adultos. En los lactantes, los anillos inguinales superficiales se
sitúan casi directamente anteriores a los anillos inguinales
profundos.
Conducto inguinal
y aumento de la
presión
intraabdominal.
En el adulto, los
anillos inguinales
profundo y
superficial no se
superponen debido
a la trayectoria
oblicua del
conducto inguinal.
En consecuencia, el aumento de la presión intraabdominal presiona la
pared posterior del conducto contra la pared anterior, con lo que
disminuye la posibilidad de herniación hasta que las presiones superan
el efecto de resistencia de este mecanismo.
La contracción
simultánea del
oblicuo externo del
abdomen también
aproxima la pared
anterior del
conducto a la pared
posterior, y aumenta
la tensión en los
pilares lateral y
medial, que resisten
la dilatación del
anillo inguinal
superficial.
La contracción de los
músculos que forman
la parte lateral de los
arcos de los músculos
oblicuo interno y
transverso del
abdomen hace que el
techo del conducto
descienda, con el
consiguiente
estrechamiento del
conducto.
CORDON ESPERMATICO, ESCROTO
Y TESTICULOS.
CORDÓN ESPERMÁTICO
El cordón espermático contiene
estructuras que se dirigen hacia el
testículo y que provienen de él, y
suspende el testículo en el escroto.
Empieza en el anillo inguinal
profundo, lateral a los vasos
epigástricos inferiores, pasa a
través del conducto inguinal, sale al
nivel del anillo inguinal superficial y
termina en el escroto, en el borde
posterior del testículo. El cordón
espermático está rodeado por
cubiertas fasciales derivadas de la
pared anterolateral del abdomen
durante el desarrollo prenatal. Las
cubiertas del cordón espermático
son:
• La fascia espermática interna: derivada de la fascia transversal.
• La fascia cremastérica: procedente de la fascia de las caras superficial y profunda del
músculo oblicuo interno del abdomen.
• La fascia espermática externa: derivada de la aponeurosis del oblicuo externo del
abdomen y su fascia de revestimiento.
La fascia cremastérica contiene haces
del músculo cremáster, el cual está
formado por los fascículos más
inferiores del músculo oblicuo interno
del abdomen que surgen del ligamento
inguinal. El músculo cremáster eleva
eltestículo de manera refleja dentro del
escroto, en particular en respuesta al
frío. En un ambiente cálido, como en
un baño caliente, el cremáster se relaja
y el testículo desciende profundamente
dentro del escroto. Ambas respuestas
tienen lugar en un intento de regular la
temperatura del testículo para la
espermatogénesis (formación de
espermatozoides), que requiere una
temperatura constante de
aproximadamente 1 °C por debajo de
la temperatura corporal central, o
durante la actividad sexual como
respuesta protectora.
El cremáster actúa en
conjunción con el músculo
dartos, un músculo liso del
tejido subcutáneo carente
de grasa del escroto (túnica
dartos), que se inserta en la
piel. El dartos ayuda a la
elevación testicular al
producir la contracción de
la piel del escroto en
respuesta a esos mismos
estímulos. El cremáster
está inervado por el ramo
genital del nervio
genitofemoral (L1, L2), un
derivado del plexo lumbar.
El cremáster es un músculo estriado, con inervación somática, mientras que el dartos
es un músculo liso que recibe inervación autónoma. El ligamento redondo de la mujer,
aunque está menos desarrollado y a menudo no se distingue, recibe contribuciones
similares de las capas de la pared abdominal cuando atraviesa el conducto.
Los componentes del cordón
espermático son
• El conducto deferente, un tubo
muscular con una longitud de
aproximadamente 45 cm que conduce a
los espermatozoides
desde el epidídimo al conducto
eyaculador.
• La arteria testicular, que se origina en la
aorta e irriga el testículo y el epidídimo.
• La arteria del conducto deferente, que
se origina en la arteria vesical inferior.
• La arteria cremastérica, que se origina
en la arteria epigástrica inferior.
• El plexo venoso pampiniforme, una red
formada por hasta 12 venas que
convergen superiormente como venas
testiculares derecha e izquierda.
• Fibras nerviosas simpáticas situadas
sobre las arterias, y fibras nerviosas
simpáticas y parasimpáticas que discurren
sobre
el conducto deferente.
• El ramo genital del nervio genitofemoral,
que inerva el músculo cremáster.
Vasos linfáticos que drenan el testículo y las
estructuras íntimamente relacionadas hacia
los nódulos linfáticos lumbares.
• El vestigio del proceso vaginal, que
puede observarse como un tracto fibroso en
la porción anterior del cordón espermático
que se extiende entre el peritoneo abdominal
y la túnica vaginal; puede no detectarse.
Como el ligamento redondo no es una
formación homóloga al cordón espermático,
no contiene unas estructuras equiparables.
Únicamente incluye vestigios de la porción
baja del gubernáculo del ovario y el proceso
vaginal.
ESCROTO
El escroto es un saco cutáneo
formado por dos capas: piel muy
pigmentada y la túnica dartos,
estrechamente relacionada con ella,
una capa de fascia sin grasa que
incluye fibras de músculo liso
(músculo dartos) que confieren su
aspecto rugoso (arrugado) al
escroto. Puesto que el músculo
dartos se fija a la piel, su contracción
hace que el escroto se arrugue
cuando hace frío, lo que engruesa la
capa tegumentaria, reduce la
superficie escrotal y ayuda al
cremáster a mantener los testículos
más cerca del cuerpo, y todo ello
disminuye la pérdida de calor.
El escroto está dividido internamente en dos compartimentos, derecho e
izquierdo, por una continuación de la túnica dartos, el tabique escrotal. El
tabique está señalado externamente por el rafe escrotal una estría
cutánea que marca la línea de fusión de las prominencias labioescrotales
embrionarias.
La túnica dartos superficial carece de grasa y se continúa anteriormente
con la capa membranosa de tejido subcutáneo del abdomen (fascia de
Scarpa) y posteriormente con la capa membranosa de tejido subcutáneo
del periné (fascia de Colles)
El desarrollo del escroto
guarda una estrecha relación
con la formación de los
conductos inguinales. El
escroto se desarrolla a partir
de las prominencias
labioescrotales, dos
evaginaciones de la pared
abdominal que se fusionan
para formar una bolsa cutánea
colgante. En fases posteriores
del período fetal, los testículos
y los cordones espermáticos
entran en el escroto.
La irrigación arterial del escroto
procede de:
• Las ramas escrotales
posteriores de la arteria perineal,
una rama de la arteria pudenda
interna.
• Las ramas escrotales
anteriores de la arteria pudenda
externa profunda, una rama de la
arteria femoral.
• La arteria cremastérica, una
rama de la arteria epigástrica
inferior.
Las venas escrotales acompañan a
las arterias. Los vasos linfáticos del
escroto drenan en los nódulos
linfáticos inguinales
superficiales.
Los nervios del escroto
incluyen ramos del plexo
lumbar para la cara anterior y
ramos del plexo sacro para las
caras posterior e inferior:
• El ramo genital del nervio
genitofemoral (L1, L2), que
inerva la cara anterolateral.
• Los nervios escrotales
anteriores, ramos del nervio
ilioinguinal (L1), que inervan
la cara anterior.
• Los nervios escrotales
posteriores, ramos del ramo
perineal del nervio pudendo
(S2-S4), que inervan la cara
posterior.
• Los ramos perineales del
nervio cutáneo femoral
posterior (S2, S3), que
inervan la cara
posteroinferior.
TESTÍCULOS
Lo s testículos son las
gónadas masculinas:
glándulas reproductoras
ovoides pares, que
producen espermatozoides
y hormonas, principalmente
testosterona. Los testículos
están suspendidos en el
escroto por los cordones
espermáticos, de forma que
el testículo izquierdo suele
encontrarse suspendido
más abajo que el derecho.
La superficie de cada
testículo está cubierta
por la capa visceral de
la túnica vaginal,
excepto en la zona
donde el testículo se
une al epidídimo y al
cordón espermático.Túnica Vaginal
La túnica vaginal es un saco peritoneal cerrado que rodea parcialmente al testículo,
y que representa la parte distal cerrada del proceso vaginal embrionario. La capa
visceral de la túnica vaginal está íntimamente unida al testículo, al epidídimo y a la
porción inferior del conducto deferente. Entre el cuerpo del epidídimo y la cara
posterolateral de los testículos se encuentra el seno del epidídimo, un receso en
forma de hendidura de la túnica vaginal.
La capa parietal de la túnica vaginal, adyacente a la fascia
espermática interna, es más amplia que la capa visceral y se
extiende superiormente, a una corta distancia, por la porción distal
del cordón espermático. Una pequeña cantidad de líquido en la
cavidad de la túnica vaginal separa las capas visceral y parietal, y
permite que el testículo se mueva libremente en el escroto.
Los testículos tienen una superficie externa fibrosa resistente, la túnica albugínea, que se
engrosa y forma una cresta en su cara posterior interna, el mediastino testicular. Desde esta
cresta interna parten septos fibrosos que se extienden hacia dentro entre lobulillos de túbulos
seminíferos, minúsculos pero largos y muy enrollados, donde se producen los
espermatozoides. Los túbulos seminíferos se unen mediante túbulos seminíferos rectos a la red
testicular, una red de conductos en el mediastino del testículo.
Las largas arterias testiculares se
originan en la cara anterolateral de la
aorta abdominal justo inferiores a las
arterias renales .Discurren
retroperitonealmente (posteriores al
peritoneo) en dirección oblicua,
cruzando sobre los uréteres y la
porción inferior de las arterias ilíacas
externas hasta alcanzar los anillos
inguinales profundos. Entran en los
conductos inguinales a través de los
anillos profundos, atraviesan los
conductos, los abandonan a través
de los anillos superficiales, y entran
en el cordón espermático para irrigar
los testículos. La arteria testicular, o
una de sus ramas, se anastomosa
con la arteria del conducto deferente.
Las venas que emergen del testículo y el
epidídimo forman el plexo venoso
pampiniforme, una red de entre 8 y 12
venas que se sitúan anteriores al
conducto deferente y rodean la arteria
testicular en el cordón espermático. El
plexo pampiniforme forma parte del
sistema termorregulador del testículo
(junto con los músculos cremáster y
dartos), que ayuda a mantener constante
la temperatura de esta glándula. Las
venas del plexo pampiniforme confluyen
superiormente, formando la vena
testicular derecha, que desemboca en
la vena cava inferior (VCI), y la vena
testicular izquierda, que drena en la
vena renal izquierda.
El drenaje linfático del testículo
acompaña a la arteria y la vena
testiculares hasta los nódulos
linfáticos lumbares derechos e
izquierdos (de la vena cava-
aórticos) y los nódulos linfáticos
pre aórticos. Los nervios
autónomos del testículo
proceden del plexo nervioso
testicular situado sobre la
arteria testicular, que contiene
fibras parasimpáticas vagales,
aferentes viscerales y
simpáticas del segmento T10-
T11 de la médula espinal.
EPIDÍDIMOEl epidídimo es una estructura alargada,
situada en la cara posterior del testículo.
Los conductillos eferentes del testículo
transportan, desde la red testicular hacia
el epidídimo, los espermatozoides recién
formados. El epidídimo está formado por
sinuosidades diminutas del conducto del
epidídimo, tan compactadas que tienen
un aspecto macizo .
El conducto se va volviendo
progresivamente más pequeño a medida
que pasa desde la cabeza del epidídimo,
sobre la parte superior del testículo, hasta
su cola. En la cola del epidídimo
empieza el conducto deferente, como una
prolongación del conducto del epidídimo.
Durante el largo recorrido de este
conducto, los espermatozoides se
almacenan y siguen madurando. El
epidídimo está formado por:
• Cabeza: la porción superior
ensanchada, compuesta por
lobulillos formados por los
extremos enrollados de 12 a
14 conductillos eferentes.
• Cuerpo: el conducto sinuoso
del epidídimo.
• Cola: se continúa con el
conducto deferente, que
transporta los
espermatozoides desde el
epidídimo al conducto
eyaculador
para su expulsión a través de
la uretra durante la
eyaculación.
ANATOMÍA DE SUPERFICIE DE LA PARED
ANTEROLATERAL DEL ABDOMEN
El ombligo es un rasgo
evidente de la pared
anterolateral del abdomen
y es el punto de referencia
del plano transumbilical.
Esta excavación fruncida
de la piel del centro de la
pared anterior del
abdomen se encuentra
típicamente al nivel del
disco intervertebral entre
las vértebras L3 y L4. Sin
embargo, su posición varía
con la cantidad de grasa
del tejido subcutáneo. El
ombligo indica el nivel del
dermatoma T10.
Transumbilical
La fosa epigástrica es una
ligera depresión de la región
epigástrica, justo inferior al
proceso xifoides. Esta fosa es
especialmente visible cuando el
sujeto se encuentra en posición
supina, ya que los órganos
abdominales se extienden,
tirando posteriormente de la
pared anterolateral del abdomen
en esta región. El dolor
provocado por la pirosis («ardor
de estómago», debido al reflujo
de ácido gástrico hacia el
esófago) suele percibirse en
esta zona.
Fosa Epigastrica
Los cartílagos
costales 7.o a 10.o
se unen a cada lado
de la fosa
epigástrica; sus
bordes mediales
forman el arco costal.
Aunque la cavidad
abdominal se
extiende más arriba,
el arco costal es la
divisoria entre las
porciones torácica y
abdominal de la
pared corporal.
Cuando una persona se
encuentra en posición
supina, puede observarse
el ascenso y descenso de
la pared abdominal con la
respiración: superiormente
con la inspiración e
inferiormente con la
espiración. Los músculos
rectos del abdomen pueden
palparse y observarse
cuando se solicita a una
persona acostada que
levante la cabeza y los
hombros contra resistencia.
La localización de la línea alba es
visible en individuos delgados gracias
al surco vertical de la piel que hay
sobre ese rafe. Normalmente el surco
es visible debido a que por encima del
ombligo la línea alba tiene
aproximadamente 1 cm de anchura
entre las dos partes del recto del
abdomen. Por debajo del ombligo, la
línea alba no está señalada por un
surco. Algunas mujeres embarazadas,
especialmente aquellas con pelo y
complexión morena, tienen una línea
intensamente pigmentada, la línea
negra, en la piel de la línea media
exterior a la línea alba. Después del
embarazo, el color de esta línea se
atenúa.
Línea Alba
En el extremo inferior
de la línea alba pueden
notarse los bordes
superiores de los
huesos púbicos (cresta
del pubis) y la
articulación
cartilaginosa que los
une (sínfisis del pubis).
El pliegue inguinal es
un surco oblicuo poco
profundo que se
encuentra por encima
del ligamento inguinal
en su recorrido entre la
EIAS y el tubérculo del
pubis.
Sínfisis Del Pubis
La cresta ilíaca ósea, a
nivel de la vértebra L4,
es fácilmente palpable
mientras discurre
posteriormente desde la
EIAS. La cresta del
pubis, los pliegues
inguinales y las crestas
ilíacas definen el límite
inferior de la pared
abdominal anterior,
separándola
centralmente del periné y
lateralmente de los
miembros inferiores
(muslos).
Las líneas semilunares son unas
marcas lineales de la piel,
ligeramente curvas, que se
extienden desde el arco costal
inferior, cerca de los novenos
cartílagos costales hasta los
tubérculos púbicos. Estos surcos
cutáneos semilunares (5-8 cm
desde la línea media) son
clínicamente relevantes debido a
que son paralelos a los bordes
laterales de la vaina de los rectos.
En la piel que se encuentra por
encima de las intersecciones
tendinosas del recto del abdomen
también se aprecian surcos, que
son claramente visibles en
personas con unos rectos bien
desarrollados. Los vientres
entrelazados de los músculos
serrato anterior y oblicuo interno
también son visibles.
La localización del
ligamento inguinal está
indicada por el surco
inguinal, un surco de la piel
paralelo y justo inferior al
ligamento inguinal. El surco
puede visualizarse
fácilmente haciendo que
una persona deje caer la
pierna hacia el suelo
mientras se encuentra en
decúbito sobre la mesa de
exploración. El surco
inguinal marca la división
entre la pared anterolateral
del abdomen y el muslo.