Post on 29-Sep-2018
� En esta ocasión, queridos amigos líderes de GPS les presentamos este material
basado en el bosquejo de la prédica de cierre de la serie Sincronizados. La serie trata acerca de cómo traer sanidad a la forma de relacionarnos con otras personas, sanando nuestros deseos más profundos. Si bien, la úlBma expresión de las relaciones interpersonales es el matrimonio, la serie no está orientada únicamente a ellos, sino a todo Bpo de relación entre dos personas de diferente sexo. Ya hemos plaBcado en los temas previos, acerca de la necesidad de reconocer que todo comienza en el corazón, la importancia de conocer el corazón masculino para podernos sincronizar con él, conocer el corazón femenino para cuidarlo y sincronizarnos también. Además estudiamos acerca de lo fácil que es tomar una idenBdad ajena a la nuestra para proteger nuestras heridas: el falso yo. De como cuando el diablo nos lanza una duda, provoca una herida y de esa cuenta hacemos acuerdos con él, lo que nos lleva a vivir ese falso yo. También aprendimos cuan importante es reconocer que nosotros podemos traer ciclos de alegría o destrucción a nuestras familias. Para completar el tema tan valioso de Sincronizar nuestros corazones profundizaremos en el tema de perdonarnos poder sincronizarnos. A conBnuación te presentamos dos opciones para profundizar en el tema con tu GPS: • Trabajar algunas preguntas y agregar experiencias personales para enriquecer
el bosquejo original de esta prédica. Y de esa manera enfaBzar en la importancia de limpiar nuestro corazón de toda falta de perdón para sincronizar nuestros corazones con personas de otro sexo.
• Realizar los ejercicios al final del bosquejo para abarcar nuevos espectros del tema.
#SINCRONIZADOS PERDONARME PARA PODER
SINCRONIZARME
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PERDONARME PARA PODER SINCRONIZARME Es imposible sincronizar mi corazón con otros si no me he perdonado a mi mismo. No puedo vivir el mandamiento de amar a Dios y amar a otros si no me estoy amando a mi mismo primero. PARA PODER PERDONARME NECESITO:
1. ENTENDER QUE MI HISTORIA NO ES MI DESTINO “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo alcanzado ya; pero una cosa sí hago: me olvido ciertamente de lo que ha quedado atrás, y me ex?endo hacia lo que está adelante”. Filipenses 3:13 RVC 2. SOLTAR EL PASADO PARA PODER RECIBIR LO QUE DIOS ME TIENE EN EL FUTURO “Pero yo, que soy tu Dios, borraré todos tus pecados y no me acordaré más de todas tus rebeldías”. Isaías 43:25 TLA “Seré misericordioso con sus injus?cias, y nunca más me acordaré de sus pecados ni de sus iniquidades”. Hebreos 8.12 RVC
3. RECIBIR EL PERDON DE DIOS Y NO TRATAR DE GANÁRMELO “Sin embargo, fueron nuestras debilidades las que él cargó; fueron nuestros dolores los que lo agobiaron.[a] Y pensamos que sus dificultades eran un cas?go de Dios; ¡un cas?go por sus propios pecados! Pero él fue traspasado por nuestras rebeliones y aplastado por nuestros pecados. Fue golpeado para que nosotros estuviéramos en paz; fue azotado para que pudiéramos ser sanados”. Isaias 53:4-‐5 NTV
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EJERCICIOS PARA REALIZAR CON TU GPS: • Te invitamos a que tomemos la historia de José y sus hermanos (Gén.
Capítulos 37, 39 al 45). • La historia nos describe como los hermanos de José lo dan en venta a unos
mercaderes, ellos lo venden a PoBfar, quien asisba al faraón. La esposa de PoBfar lo trata de seducir pero José resiste, por lo que es acusado injustamente y apresado. José da fruto en la cárcel como un buen encargado de los presos y luego es llamado a revelar los sueños de Faraón. Al describir que habría de venir Bempo de escasez en Egipto, Faraón lo pone como el administrador de los recursos que hablarían de colectar por siete años de abundancia para los siete de escasez que vendrían. Al final de este proceso los hermanos de José se reencuentran con él pero no le reconocen, a deferencia del joven administrador de Faraón. José hace unos juegos para acorralarlos y luego se descubre delante de ellos, esto les dice:
“Por favor, acérquense, les dijo. Entonces ellos se acercaron, y él volvió a decirles: Soy José, su hermano, a quien ustedes vendieron como esclavo en Egipto. Pero no se inquieten ni se enojen con ustedes mismos por haberme vendido. Fue Dios quien me envió a este lugar antes que ustedes, a fin de
preservarles la vida. Dios me hizo llegar antes que ustedes para salvarles la vida a ustedes y a sus familias, y preservar la vida de muchos más”. (Génesis
45:4-‐5, 7 NTV)
• José les perdonó, pero también les invita a perdonarse a si mismos. Esto traería libertad a todos, pero realmente no hubo un perdón genuino. Por eso, cuando muere Jacob, el padre de José y sus hermanos, ellos piensan que ahora si se vengaría. Los siguientes versículos lo denotan. Pero también revelan el corazón de José e invita a disfrutar del perdón a sus hermanos:
“Después de haber enterrado a Jacob, José regresó a Egipto junto con sus hermanos y todos los que lo habían acompañado al enJerro de su padre. Pero ahora que su padre
había muerto, los hermanos de José tuvieron temor, y se decían: «Ahora José mostrará su enojo y se vengará por todo el mal que le hicimos». Entonces enviaron a José un mensaje que decía: «Antes de morir, tu padre nos mandó que te dijéramos: “Por favor, perdona a tus hermanos por el gran mal que te hicieron, por el pecado de
haberte tratado con tanta crueldad”. Por eso nosotros, los siervos del Dios de tu
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padre, te suplicamos que perdones nuestro pecado». Cuando José recibió el mensaje, perdió el control y se echó a llorar. Entonces sus hermanos llegaron, y se arrojaron al suelo delante de José y dijeron: —Mira, ¡somos tus esclavos!
Pero José les respondió: —No me tengan miedo. ¿Acaso soy Dios para casJgarlos? Ustedes se propusieron hacerme mal, pero Dios dispuso todo para bien. Él me puso en este cargo para que yo pudiera salvar la vida de muchas personas. No, no tengan miedo. Yo seguiré cuidando de ustedes y de sus hijos.
Así que hablándoles con ternura y bondad, los reconfortó”. (Génesis 50:14-‐21 NTV)
• Cuando nos perdonamos a nosotros mismos podemos empezar una
relación sin prejuicios o estorbos en nuestro corazón. Lo cual nos permite conectarnos de una mejor forma entre si. Con personas del mismo o de diferente sexo.
• Invita a tus amigos en el grupo a meditar en estas preguntas: A. ¿Hay cosas en nuestro corazón que necesitan nuestra atención el día de
hoy, relacionadas al perdón? B. ¿Habrán reacciones, ac\tudes, señalamientos, crí\cas o hipersensibilidades
ajenas que nos hayan provocado algún malestar o herida? C. Así como en el caso de los hermanos de José, hubo circunstancias que los
siguieron todo el \empo. De hecho, estando ante José mismo (aunque sin reconocerle aún), abrieron su corazón y se percibía el dolor y cargo de consciencia guardados que aún tenían.
D. ¿Será que tenemos relaciones hoy que están afectadas por las cosas que hemos acumulado en nuestro corazón y que nos impiden tener relaciones libres del pasado?
E. Invitamos a que puedas contar alguna anécdota en relación a la falta de perdón en una relación interpersonal y el desgaste que produce. Además de el distanciamiento, la desincronización y la aparición de "falsos yo" en medio de ella.
Ahora medita con tus amigos en esta cita:
“Pero si confesamos nuestros pecados a Dios, él es fiel y justo para perdonarnos nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad”. (1 Juan 1:9 NTV)
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Él es congruente con lo que ha promeBdo, y si nosotros pedimos perdón Él nos lo concede. Además nos da libertad y sanidad de corazón al pronunciar nuestra confesión. • Cuando pedimos perdón, cuando confesamos lo que guardamos en nuestro
corazón, hay libertad, y sanidad de corazón. • ¿Será que necesitamos abrir nuestro corazón en relación a algo que
estemos viviendo en nuestras vidas que afecte nuestras relaciones? • ¿Necesitamos pedir perdón o perdonar a alguien?
Por el contrario, sean amables unos con otros, sean de buen corazón, y perdónense unos a otros, tal como Dios los ha perdonado a ustedes por medio
de Cristo. (Efesios 4:32 NTV)
Para cerrar este Bempo de tu GPS te invitamos a meditar en esta cita tan rica y completa, la cual trae verdadera libertad. Nos habla de lo que Jesús hizo por nosotros: Sin embargo, fueron nuestras debilidades las que él cargó; fueron nuestros
dolores los que lo agobiaron.[a] Y pensamos que sus dificultades eran un cas\go de Dios; ¡un cas\go por sus propios pecados! Pero él fue traspasado por
nuestras rebeliones y aplastado por nuestros pecados. Fue golpeado para que nosotros estuviéramos en paz; fue azotado para que pudiéramos ser sanados.
ISAIAS 53:4-‐5 NTV Jesús trajo libertad a nuestras vidas. Necesitamos más de nuestro Señor todos los días para que nuestro interior cambie y con él, la forma en que nos relacionamos en el exterior con otras personas. • Invita a tus amigos a pedir perdón de corazón al Señor por las cosas
retenidas, por las heridas sin tratar, por limitar nuestras relaciones con otras personas a causa de la falta de perdón o por no decidir perdonar.
• Ora por ellos. • Pide que Él selle sus vidas con Su presencia y paz. Con libertad, Su perdón y
sanidad. • Nuestras relaciones interpersonales serán restauradas, si nuestro corazón
se transforma.
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