Música: Franz Schubert. Piano Trío D.929 Andante con moto

ROJOROJO

“A la Pintura” (1948)Rafael Alberti

1Soy el primer color de la mañana

y el último del día.

2Lucho en el verde de la fruta y venzo.

3Lo mismo que mis otros hermanos, sometido

-Giotto- al rigor del éxtasis geométrico.

4Pleno rubor redondo en la manzana.

5Me llamo excitación, cólera, rabia,

estallido del día de la ira.

6Me violento y subo

Hasta de pronto reventar en sangre.

7Coágulo cuando ya

Casi mi ser solidifico en negro.

8Rojo en el labio y menosen las pequeñas cumbres

donde gustosamenteVenus ganando pierde las batallas.

9Soy el infierno –Brueghel,

Bosch- y el nocturno espantoen los ojos insomnes de los niños.

10Pluma en las alas de Luzbel, ardiendo.

11El rojo recortado

-Flandes- hasta llegar-Rubens- al derramado de la orgía.

12Vago en ciertos desnudos,

en ciertas formas diluido en nieve.

13Rojo para el descanso de los hombros

y la espalda de Venus-Giorgione- dormida.

14Me levanto hasta el solio de la púrpura

Y desciendo esparcido -¡ oh Greco !- en pliegues.

15El púrpura a través de los cristales

-copa, vaso, botella-calientes de los vinos.

16Ven, amarillo. Quiero ser naranja,

cadmio lustroso esférico entre el verde.

17¿ En la rosa ? Diverso, pero único.

18Pierdo el sentido en rosa,

hasta desvanecerme en casi blanco.

19Canto en la lengua, tiño

con un húmedo rosa las palabras.

20Un rosa con escarcha, de Velázquez.

21Otro -Goya- con aire diluido.

22Me vertí en rosa –Renoir- y puse

un nuevo nombre –Renoir- al mío.

23La niña rosa -¡ oh sueño !- de Rosales.

24Bajé hasta el rosa rosa de Picasso.

25Rojo, contra el azul, de una bandera.

26A veces desafino hasta la sima

del mas profundo rojo insoportable.

27Mas me calman las tierras, el sentirme

de sus hondas umbrías penetrado.

28Rojo de la bravura en las arenas

rojo español redondo de las plazas.

29Rojo como el relámpago

espiral de una alegre revolera.

30Como el clavel que estalla en los ceñidos

marfiles de unos senos apretados.

31Como el grana fugaz de una amapola.

32Bañado por el mar y trabajado

por su garganta azul, florezco y subo fino ramo encendido de corales.

33Pensad que ando perdido en la más mínima,

humilde violeta.

FIN

Pilar M. E

Octubre 2009