Post on 28-Jun-2015
Pierre Vilar
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UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÖN A DISTANCIA (MADRID)
DEPARTAMENTO DE HISTORIA MEDIAEVAL, MODERNA Y CC. Y TT.HISTORIOGRÁFICAS
CURSO DOCTORADOÚLTIMAS CORRIENTES HISTORIOGRÁFICAS EN LA EDAD MODERNA(1929-2003)
PIERRE VILAR
EL HISTORIADOR Y SU OBRA
Trabajo Monográfico presentado por Don Aitor Pagalday Muñoz.
Y dirigido por la profesora Doctora Dª. María Dolores Ramos Medina.
La profesora El autor
Madrid, a 4 de Junio de 2006
Pierre Vilar
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INTRODUCCIÓN ............................................................................................................... 3
DATOS BIOGRÁFICOS .................................................................................................... 5
LAS ESCUELAS DE PIERRE VILAR ............................................................................. 9
LA ESCUELA MARXISTA ............................................................................................ 9
LA ESCUELA DE ANNALES .................................................................................... 11
ANÁLISIS DE LA OBRA DE PIERRE VILAR .............................................................. 15
EL ANÁLISIS HISTORICO DE PIERRE VILAR ...................................................... 15
LAS TEORÍAS DEL DESARROLLO ECONÓMICO ............................................... 16
LA PRODUCCIÓN, LA PRODUCTIVIDAD Y EL PRECIO.................................... 18
SU OBRA....................................................................................................................... 21
PENSAR HISTÓRICAMENTE ............................................................................... 21
CRECIMIENTO Y DESARROLLO ........................................................................ 27
CONCLUSIONES............................................................................................................. 32
BIBLIOGRAFÍA................................................................................................................. 35
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INTRODUCCIÓN
El presente trabajo sobre Pierre Vilar, hemos decidido abordarlo desde una
perspectiva de su vida tanto personal y biográfica como profesional y de historiador.
La razón por la cual, hemos decidido estudiar a Pierre Vilar es que consideramos
que se trata uno de los historiadores que sin ser español de nacimiento más ha contribuido
a la historiografía española.
Sus trabajos comenzando desde su “rica” tesis sobre Cataluña en la España
moderna, hasta su anteúltima obra “Pensar históricamente”, son amplios tanto en cuanto a
contenido histórico como en cuanto a contenido historiográfico y metodológico de la
historia. Como muestra de ello, en el presente estudio sobre Pierre, analizarmos dos de sus
últimas obras, la anteriormente mencionada “Pensar históricamente” y Crecimiento y
desarrollo”
El trabajo que aquí comenzamos consta de dos grandes partes. La primera de ellas
se centra en los aspectos biográficos de Pierre Vilar, trabajados de forma general sin
pretender en ningun momento profundizar en aspectos íntimos, tan solo trabajar aquellos
aspectos de su vida que tuvieron relación directa con su faceta profesional. La segunda
parte, se centra principalmente en el análisis de su obra. Para ello, primeramente
analizamos las escuelas historicas en las que se puede “enmarcar a Pierre Vilar y tras
ofrecer una visión global de su obra, analizamos con mayor profúndidaz, dos de sus obras
más significativas, “Pensar históricamente” y Crecimiento y desarrollo”.
En cuanto a las fuentes de información que tenemos intención de utilizar, debemos
señalar la abundancia de fuentes variadas existentes que nos dan abundante información
sobre nuestro historiador. El hecho de haber sido un historiador tan prolífico, ha hecho que
muchos otros autores, historiadores, etc. hayan escrito multitud de artículos sobre él, se
hagan abundantes comentarios de su obra en otros libros y hasta que se hayan celebrado
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conferencias con Pierre Vilar como objeto de estudio y debate. Esta abundante bibliografía
nos ha servido por lo tanto, para obtener una visión mas amplia de lo que Pierre Vilar y su
obra ha supuesto para la historia de la historiografía occidental.
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DATOS BIOGRÁFICOS
El historiador Pierre Vilar, nació cerca de Montpellier en el año 1906, en el seno de
una familia de maestros. Se formó en un clima intelectual determinado por la oposición
pacifista a la primera Guerra Mundial y por el “impacto” de la Revolución Rusa. Mientras
fue estudiante de la Universidad de la Sorbona, en los años 20, residió en la l’Ecole
Normale Superieure, donde se relaciono estrechamente con Jean Paul Sastre, Raymond
Aron y Paul Yves Nizan.
Para continuar con su formación, escogió el área metropolitana de Barcelona como
tema de su tesis. Sin embargo, tan pronto como llegó a la ciudad condal, cambió de manera
radical su perspectiva de la realidad catalana. Por aquel entonces, concretamente en el año
1927, Cataluña, al igual que otras regiones peninsulares estaba en plena efervescencia
contra la dictadura de Primo de Rivera. Esta coyuntura socio política, le llevo a Pierre
Vilar a reorientar su tesis hacia el hecho nacional catalán, basando su búsqueda en la
historia.
Será entonces cuando Pierre Vilar comience a desarrollar sus capacidades como
investigador. Comenzará a reconocer el terreno de estudio, se abrirá también a la realidad
de la relación entre dos sectores económicos como lo eran la agricultura y la industria, y
poco a poco irá entrando en contacto con las figuras de su problemática. Pero sin duda
alguna, lo que comenzó a hacer Pierre Vilar, fue impregnarse del ser colectivo catalán, lo
que le sirvió para hacer numerosas amistades que consiguió conservar hasta el día de su
muerte.
Sería la obra de Henri de Mann “Más allá del Marxismo”, la que le hizo
reflexionar sobre la complejidad de la articulación entre la lucha de clases y la lucha
nacional. Esto le hizo comenzar a relacionar dos conceptos claves en su vida, socialismo y
nacionalismo.
La crisis de la década de 1930, le brindará a Pierre Vilar la posibilidad de
confrontar realidades cercanas con las del resto de Europa. Así las cosas, completó su
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primer estudio sobre Barcelona, analizando el terreno y los protagonistas del mismo.
También en esta época, comenzó a colaborar con la escuela de Annales de Lucien Fevre y
Marc Bloch y redactó varios artículos sobre el ferrocarril, las rutas industriales catalanas,
etc.
A la hora de explicar ya desde sus comienzos su afinidad con las tesis marxistas,
hay que señalar que Vilar siempre defendió la teoría de Marx, como vía para la optima
comprensión del contenido histórico.
En 1931 se instaló definitivamente en Barcelona, donde le tocó vivir la
proclamación de la República y el Seis de Octubre. Los acontecimientos acaecidos ese
día, le permitieron ejercitarse en la práctica de historiador, ya que le sirvieron para calibrar
el valor del testimonio inmediato de los protagonistas.
Con esto consiguió someter la opinión de los diferentes testigos y actores de
aquellos acontecimientos a una estricta crítica histórica, y extraer así lo que
verdaderamente resultaba importante para revelar el momento vivido. Un aspecto más, que
también comienza a desarrollar en estos momentos, es el interés por descubrir en los
hechos coyunturales las claves para conocer el funcionamiento de las estructuras, políticas,
sociales y mentales.
El estallido de la Guerra Civil le obligó a él y a su mujer, la archivera Gabrielle
Berrogain, a volver a Francia, donde cincuenta años más tarde redactaría sus reflexiones
sobre las causas del porqué del comienzo de la Guerra Civil española. En este libro,
también, Pierre Vilar demostró su capacidad para sintetizar los grandes problemas
históricos.
Durante la Segunda Guerra Mundial, desempeñó el cargo de oficial del ejército
francés. Durante la ocupación alemana, fue hecho prisionero y fue mandado a un campo de
concentración, donde estuvo preso entre 1940 y 1945. Durante ese quinquenio surgió una
pequeña historia de España, un libro muy leído en España, a pesar de que fue prohibido
por la censura franquista.
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Una vez acabada la Segunda Guerra Mundial, volvió a Barcelona, siendo acogido
por Agustí Durán i Sempere. Esta nueva estancia en España, finalmente fue más breve de
lo que a Vilar le habría gustado ya que el clima que se vivía en España por la incipiente
Guerra Fría, le impidió seguir en el Instituto Francés, teniendo que establecerse
nuevamente en París. Aún y todo, siguió volviendo periódicamente a Barcelona, para
continuar así con su investigación.
Culminó su tesis en 1962, una investigación largamente elaborada desde 1930, y la
tituló Cataluña en la España moderna. Su trabajo se centró principalmente en los
fundamentos económicos de las estructuras nacionales, donde no solo ofrecía una visión
sobre el desarrollo económico catalán, el cual se situaba en los progresos de la agricultura
en el siglo XVIII, sino que ensayaba una extensa interpretación del conjunto del pasado
histórico de Cataluña que estaba llamada a tener, como posteriormente se demostró que
tuvo, una gran influencia entre los medios intelectuales y políticos catalanes.
El impacto de su obra, no se hizo esperar y se tradujo rápidamente al catalán. Se
trata de un trabajo que ha influido poderosamente en numerosas generaciones de
historiadores. Su cercanía traducida en simpatía con Ferrán Soldevilla y las fructíferas
relaciones que mantuvo con Vicens Vives, le convirtieron en un punto de referencia de la
historiografía catalana desde mediados de los años sesenta. A esto contribuyó sin duda
alguna su constante presencia en tierras catalanas, ya que era periódicamente invitado a
hacer cursos y a dar conferencias.
Otro aspecto que facilitó su adopción catalana, fue también el hecho que sus obras
se tradujeran al catalán de forma inmediata, a lo cual hay que unirle que conceptos que
aparecían en ellas fueron usados constantemente por políticos de todas las tendencias. Con
todo ello, y las constantes alusiones de otros historiadores a las obras de Pierre Vilar,
hicieron que su amplia obra quedara como uno de los testimonios más brillantes de la
historiografía catalana.
En lo que a su carrera profesional hace referencia, hay que señalar que sucedió a
Ernest Labrouse como catedrático de historia económica en la Sorbona de París. Con el
tiempo, y como más adelante profundizaremos, Pierre Vilar derivó hacia el marxismo, lo
cual le suministró la base teórica necesaria para poder enmarcar el análisis de las
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estructuras sociales y dar cuerpo así a un programa de historia total, relacionado con lo que
contemporáneamente llevara a cabo la escuela de Annales. A pesar de que su obra pronto
traspaso los limites catalanes, como lo demuestra su preocupación por las cuestiones de
vocabulario histórico y metodología de la historia, el caso catalán siguió siendo su
principal materia de investigación.
Como conclusión podemos señalar que el estudio de la realidad catalana de Vilar,
partió de la empatía de él por el país. Su vinculación personal con Cataluña, en momentos
tan decisivos como fueron la República o la reconstrucción nacional bajo el franquismo,
hicieron de Vilar un ejemplo privilegiado de “historiador dentro de la historia”.
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LAS ESCUELAS DE PIERRE VILAR
A la hora de enmarcar a Pierre Vilar dentro de una u otra escuela historiográfica,
hay que decir que tradicionalmente se le ha “situado” ente la escuela de Annales y la
escuela Marxista.
Al hablar de Pierre Vilar deberíamos, sobre todo hablar, de Historia Total, ese
concepto de historia de origen materialista, pero difundido por Annales.
A nivel general podríamos situarlo por un lado en cuanto a la temática tratada en
sus investigaciones, dentro de la tercera generación de Annales, muy cerca de lo
comúnmente conocido como Historia de la Mentalidades; y por otro lado lo situamos
dentro de la escuela marxista en cuanto a la metodología de la investigación hace
referencia.
LA ESCUELA MARXISTA
Para comprender la metodología de investigación de Pierre Vilar, creemos
conveniente analizar las bases de la escuela Marxista.
El marxismo nunca pretendió ser una filosofía de la historia, ya que tanto Marx
como Engels consideraban que las diferentes filosofías de la historia que se habían
sucedido hasta entonces, buscaban a partir del conocimiento general y a menudo muy
superficial del material histórico, dar una interpretación global de los diversos sucesos de
la historia humana a nivel universal; por lo que la historia concreta, quedaba reducida y
subordinada a las necesidades y contingencias de lo universal, es decir, al marco
interpretativo global.
Marx y Engels, “tan solo” diseñaron una arquitectura conceptual que les permitió
hacer una interpretación coherente del devenir histórico, para poder estudiar las sociedades
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en continuo movimiento1. De hecho los fundadores del marxismo, fueron modificando y
adaptando su teoría a medida que los descubrimientos históricos se iban sucediendo2.
Por ello, podemos afirmar que las generalizaciones a las que arribaban Marx y
Engels eran resultado de un conocimiento al detalle del material histórico y empírico
existente en la época.
Por otro lado, hay que señalar que lo definitivo del materialismo histórico no es su
énfasis en lo económico, sino en la totalidad. La noción de totalidad muestra unas
preocupaciones que van más allá de las consideraciones parceladoras que hoy impregnan
el conocimiento.3
Para Marx, totalidad suponía la comprensión de la sociedad de forma global, y la
concepción metodológica de la totalidad se refería a la ciencia social misma, donde los
aspectos económicos, políticos, sociológicos, culturales, etc. figuraban como facetas de un
mismo problema y ciencia: la ciencia social.
De esto deducimos, que para Marx, lo fundamental era el conocimiento
comprensivo del proceso total4, donde el estudio de cada fenómeno solo podía ser
comprendido en relación con el todo5. Según el propio Pierre Vilar, esta metodología se ve
claramente en la obra “Introducción General a la crítica de la Economía Política, donde
Marx diseccionaba cada categoría central del análisis económico por separado para
encontrar en cada una de ellas lo principal.
Al mismo tiempo las interrelacionaba para descubrir la manera cómo se estructura
y jerarquiza la totalidad social y el papel que dentro de dicha totalidad desempeña los
diversos factores involucrados. Hablando concretamente de la manera cómo en cada forma
o totalidad social existe una producción dominante que sirve para asignar a odas otras su
rango.
1 LUCACKS, George: Historia y conciencia de clase. Sarpe, Madrid, 1984.2 Otro dato más que demuestra que el marxismo no era una filosofía de la historia cerrada.3 Op cit.4 KOFLER, Leo: Historia y dialéctica. Amorrourtu, Buenos Aires, 1973.5 VILAR, Pierre: Marx y la historia, en Historia del Marxismo, tomo 1. Bruguera, Barcelona, 1979.
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Marx empleaba una metáfora muy ilustrativa sobre su concepción de totalidad, al
considerar que en esta se encuentra un factor dominante, la producción, que es como una
iluminación general donde se bañan todos los colores y que modifica las particularidades
de éstos. Es como un éter particular que determina el peso especifico de todas las formas
de existencia que allí toman relieve6.
Hay que señalar por otro lado que el marxismo coloca a la cabeza de las
explicaciones históricas las condiciones materiales7, situando al hombre en sociedad en el
centro de la historia. Este hecho se explica porque según Marx la producción era el
fundamento del orden social y condiciona a la totalidad de los procesos vitales, sociales,
espirituales, que se sustenta en que los hombres primeramente comen antes de dedicarse a
la política la ciencia, el arte, lo cual implica que una parte considerable de las energías que
se invierten en las luchas políticas y religiosas, provienen de la aspiración de lograr bienes
materiales8. La producción es importante puesto que al producir sus medios de vida el
hombre produce indirectamente su propia vida material.
Por ello afirmamos que las relaciones de producción no implican únicamente la
producción de bienes, sino que en un sentido global son relaciones que integran su
actividad vital, y en cuyo logro formulan múltiples exigencias relativas al tiempo de
trabajo, a las condiciones de trabajo, a las formas de cooperación y subordinación sociales;
no interesa solamente el producto bruto, sino también la manera como se obtiene y se lo
distribuye socialmente; siendo por lo tanto la naturaleza de las relaciones que se establecen
entre los hombres lo que define cada época histórica. Esto explica el hecho de que cuando
se producen cambios en esta relación entre los hombres, se producen los cambios en la
historia. Es decir que las acciones de los sujetos conscientes son el verdadero motor de la
historia9.
LA ESCUELA DE ANNALES
6 MARX, Kart y ENGELS, Federico: La revolución española. Ariel, Barcelona, 1970.7 De l cual se deduce el materialismo histórico.8 FLEICHER, Helmut: Marxismo e historia. Monte Avila Editores, Caracas, 1971.9 Esta conclusión explica la celebre frase con la que comienza el Manifiesto Comunista donde se afirma quela conflictividad social es el motor de la sociedad.
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Para muchos, la escuela de Annales, ha sido el movimiento historiográfico más
importante del siglo XX. Pese a que hoy en día exista gente que pretende desacreditar esta
corriente historiográfica, lo cierto es que es justo reconocer la preeminencia de Annales en
cuanto a organización y radicalidad en el combate contra la vieja historia academicista e
historicista hace referencia.
A nivel genereal podemos señalar que la escuela francesa sustituyó la
decimonónica historia política, biográfica y narrativa, por una historia económica, social y
mental, con pretensiones de historia total, propuesta por Marc Bloch y Lucien Febvre
cuando fundaron la revista Annales en 1929. Esta tarea, fue continuada por Fernand
Braudel (entre 1956 y 1968) con un enfoque estructural y economicista, y culminada,
finalmente, por Jacques Le Goff y otros (entre 1969 y 1989) desarrollando la historia de
las mentalidades, posiblemente la aportación más original de la escuela francesa10.
La derrota de Alemania, cuna de la historiografía positivista, en las dos guerras
mundiales creó las condiciones geopolíticas para el triunfo internacional de la nueva
historia francesa, cuya influencia fue fundamental, tanto en su versión "annaliste" como
marxista.
Cabe señalar que se trata de una escuela historiográfica con 60 años de
organización colectiva, creación de instituciones, intervención pública e innovación
permanente. Frente a la tendencia academicista al individualismo pesimista engendrada en
los años 80, hay que recordar que los grandes historiadores del pasado lo fueron también
por representar escuelas o tendencias historiográficas, más incluso, diríamos, que por su
genio individual.
Su apuesta por una historia total, concepto de origen marxista pero difundido por
Annales y la fragmentación de los temas, métodos y escuelas, de los años 80 sucedió una
globalización de la economía y la información, la política y la cultura, a la cual la
historiografía no pudo ser ajena, afectando a los historiadores porque afectaba y sigue
afectando a la historia11.
10 "La Escuela de los Annales y la historia que viene", La historia que se fue, Suplemento cultural del Diariode Sevilla, nº 99, 18 de enero de 200111 Ibid.
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Hay que decir que los años 70 y 80 constituyeron el período de máxima influencia
de la escuela de Annales, tanto nacional como internacionalmente, y no es para nada
casual que dichos años fuesen, simultáneamente, la época de esplendor de la historia de las
mentalidades.
Digo que es el período de máxima influencia nacionalmente porque son los años en
que Annales se consolida como escuela historiográfica hegemónica en Francia, creando
unas instituciones y "conquistando" otras; e internacionalmente, porque no sólo genera
directamente procesos de renovación historiográfica, lo cual es asimismo característico de
los primeros y de los segundos Annales, sino que, durante los terceros Annales, la
influencia internacional de la nouvelle histoire deviene más rica y bidireccional que la
simple promoción de imitadores en otros países.
Annales alimentó y animó, en países de historiografías maduras, líneas de
investigación que no eran un remedio de la historia de las mentalidades, sino orientaciones
de investigación próximas, paralelas, que diseñaban su propio perfil y solían mantener
puntos de vista crítico hacia la historia annaliste de las mentalidades, apoyadas casi
siempre, de forma más o menos directa y explícita, en el materialismo histórico, que
mantuvo y hasta incrementó su influencia académica en el mundo anglosajón al tiempo
que caía en picado en Francia12.
La mayor deficiencia que hemos hallado en la historia francesa de las mentalidades
reside en que su progresión acaba por implicar la desconexión de la historia social y
económica y la despreocupación sobre el carácter global de la investigación histórica, pero
estas carencias quedan en mi opinión en un segundo plano si evaluamos justamente la
aportación que ha supuesto para la historiografía mundial la historia de las mentalidades.13
En la década de los años 80, sobre todo en la primera mitad, constatamos la
coincidencia de la máxima influencia de Annales con las críticas más feroces, desde
12 GONZÁLEZ MÍNGUEZ, César :La contribución de los terceros Annales y la historia de lasmentalidades. 1969-1989, La otra historia: sociedad, cultura y mentalidades. Vitoria, Servicio dePublicaciones de la Univ. del País Vasco/EHU, 1993.13 Ibid.
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diversos ángulos, particularmente desde el materialismo histórico o desde sus cercanías, a
causa, precisamente de estos abandonos de la historia social y global, por parte de la
historia de las mentalidades, en su última fase14.
Con independencia de los posibles aspectos negativos o de las actitudes políticas
personales de Lucien Febvre, Fernand Braudel o Philippe Ariès, debemos justipreciar sus
aportaciones como historiadores, lo contrario sería adoptar una actitud además de
intolerante, acientífica.
Claro está, que no todos los marxismos han permitido tal amplitud de ideas, nos
estamos refiriendo al marxismo abierto de, por ejemplo la filosofía de la praxis de Pierre
Vilar, un marxismo ético donde el hombre ocupa el centro de la preocupación del
historiador, del científico social, del ciudadano.
14 Ibid.
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ANÁLISIS DE LA OBRA DE PIERRE VILAR
La obra de Pierre Vilar tanto por su extensión como por su importancia y
trascendencia para la historiografía, ha sido razón de estudios, charlas, conferencias y
coloquios en multitud de ocasiones.
Nosotros para su análisis, hemos tomado como referencia una conferencia
celebrada en Paris, concretamente en la Universidad de Paris X- Nanterre el 1 de Octubre
de 2004. En ella tomaron parte ilustres investigadores y discípulos de Pierre Vilar, entre
los que destacamos Pablo Luna, Rosa Congost y Aron Cohen.
Las intervenciones principalmente se centraron en la concepción vilariana de una
historia en construcción, principalmente como un modo de pensar las sociedades humanas.
EL ANÁLISIS HISTORICO DE PIERRE VILAR
Pierre Vilar a constamment insisté sur le caractère naissant de la mèthode
d’analyse historique qu’il rèclamait de ses voeux15. A partir de 1973, resumió su método
con una frase: una historia en construcción. La reivindicación del análisis histórico se situó
en la base de su programa de “historia total”, como se puede observar en el trabajo titulado
“Crecimiento económico y análisis histórico” presentado en 1960 en Estocolmo en un
congreso internacional de historia económica.
Esta es posiblemente la mayor diferencia entre su concepción de la historia y la de
los historiadores contemporáneos a él. Desde este punto de vista, la insistencia de Pierre
Vilar en la necesidad de analizar los acontecimientos y los fenómenos históricos, revelan
un estado de alerta permanente contra algunas ideas historiográficas dominantes en las
décadas sesenta, setenta, ochenta y hasta incluso noventa.
15 CONGOST, Rosa: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV Congrés MarxInternational, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre, 01/10/2004).
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Este estado de alerta permanente le da a su obra una fraicheur speciale16, por la
cual resulta complicado enmarcar su obra tan solo dentro de una escuela historiográfica.
Su ponencia presentada en un congreso celebrado en Granada en 1973, y titulado “Historia
del derecho, historia total”, podríamos considerarla como la continuación de la presentada
trece años antes en Estocolmo. Si en la ponencia de 1960, Vilar insistía sobre los peligros
de l’abstractiondans le langage des économistes17, en la de 1973, exponía los problemas
resultantes d’une vision excessivement institutionnaliste dans les études de lois, du droit
et, en général, des phénomèns socio-èconomiques.18
De sus palabras, podemos extraer esta definición de historia total: Constituir la
historia total, es asumir para si las críticas de todos los órdenes sociales19.
Esta definición podría representar perfectamente la síntesis de su método de
análisis histórico, de su concepción de la historia total y de su reivindicación de una
historia en construcción. En la introducción de su libro “Pensar históricamente” que agrupa
algunas de sus principales reflexiones históricas, señala lo siguiente: Una historia en
construcción existe, es posible20. La demostración es la sola ambición de investigar. Por
ello, la sola intención de presentar a Pierre Vilar dentro de una coyuntura historiográfica
concreta, se encuentra en las antípodas de la manera de ver la disciplina histórica y los
métodos de investigación que Vilar plantea a lo largo de su obra.
LAS TEORÍAS DEL DESARROLLO ECONÓMICO
La obra de Pierre Vilar ha estado marcada por las constantes intervenciones en los
principales debates históricos de carácter metodológico. De forma resumida, se pueden
agrupar los trabajos de Pierre Vilar en dos grandes categorías. Por un lado se encuentran
los trabajos de búsqueda empírica, que todo el mundo asocia con las cuestiones teóricas de
16 Ibid.17 Ibid18 Ibid.19 VILAR, Pierre: Crecimiento y desarrollo. Economía e historia. Reflexiones sobre del caso español. Ariel,
Barcelona, 1982.20 VILAR, Pierre: Pensar históricamente. Crítica: Barcelona, 1997.
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su obra21; y por otro lado Vilar ha sido el autor de numerosos textos de carácter crítico y
polémico. Obviamente, el límite entre ambos grupos, no es rígido. Como parece lógico,
existe la argumentación en sus trabajos teóricos y empíricos.
Sin embrago existe un tema transversal dentro de su obra. Es más, Pierre Vilar
consideraba que la historia debía servir de synthese des ciencies sociales22 porque tiene la
capacidad de añadir a cada una de estas ciencias el carácter temporal y posibilitar así su
estudio global. Con este punto de vista, algunos podrían considerar la visión de la historia
de Pierre Vilar como la de una ciencia imperialista que pretendería derrivar al resto de las
ciencias sociales; pero sin embrago, él consiguió reforzar el principio de
interdisciplinaridad entre las ciencias sociales; dándoles especial importancia a la ciencia
económica.
Para Pierre Vilar; la aportación de la economía a la historia habia sido y seguía
siendo fundamental. Sin embargo, consideraba y recordaba que les economistes ont apprix
aux historiens: l’observation des conjoctures longues et courtes, l’analyse des mècanismes
économiques, la valeur des études statistiques23. Así las cosas cuando un economista
analizase los ciclos económicos de larga duración, debería enlazar la economía con los
factores históricos, pero sin llegar a profundizar en ellos. Esto es lo que Vilar denominaba
como la economía retrospectiva, o la New Economic Historiy”.
Los modelos de crecimiento económico, con las fórmulas matemáticas, no
funcionan más que en un estado puro, inexistente. Por ello consideraba que la historia
debía servir de síntesis al resto de las ciencias auxiliares, y no a la inversa. La historia
debía sintetizar todas ellas, la sociología, la política, la economía, etc.
Por todo ello, relacionaba con esta última afirmación, una expresión que sintetizaba
muy bien su manera de ver la historia: una historia en construcción. La historia no debía
ser el estudio empírico de los diferentes acontecimientos, ni la simple argumentación de
una generalización teórica. La historia debía ser la referencia permanente de los
21 HALPERN PEREIRA, Miriam: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV CongrésMarx International, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre, 01/10/2004).22 Ibid.23 Ibid.
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acontecimientos para con la teoría y de la teoría para con la práctica. Vilar se convirtió
con su obra en un agitateur24 especial de la construcción de la historia.
Esta concepción de la ciencia histórica, muy abierta al patrimonio hereditario de
Marx, permitió a Vilar integrar las contribuciones científicas e históricas de su tiempo. A
lo largo de su carrera, Vilar lucho contra el aislamiento de la economía y del
desconocimiento de las contribuciones de la historiografía en los economistas y en los
especialistas sociales. Abogó por la continua investigación y por la integración de los
factores sociales, políticos y mentales en el análisis histórico.
Por ello consideraba que la historia económica no debía estar aislada de la historia
social, de la historia de la cultura, de las mentalidades, de la política. La historia y la
política debían mantener una relación basada en la complementariedad. La historia total,
ese concepto que Pierre Vilar tanto admiraba, debía ser un concepto que todo el mundo
debía tener presente a pesar de que podría parecerles lejano e incluso utópico.
LA PRODUCCIÓN, LA PRODUCTIVIDAD Y EL PRECIO
Producción, productividad y precio son los aspectos y conceptos más interesantes
en la obra de Pierre Vilar. Como cada elemento de análisis histórico que el propuso y
desarrolló, estos tres conceptos que acabamos de mencionar fueron analizados por Pierre
Vilar tanto de forma sincronizada como por separado, como señales, como producto o
como factores.
Para vilar, todo historiador posterior a Marx, debía estudiar algunas nociones de
forma obligada; independientemente de si se consideraba historiador económico o social..
Debía hacerlo por el mero hecho de considerarse historiador.
Marx impulsó el cambio en la producción en el corazón de los cambios de las
sociedades, y es que para él, los cambios en la producción hacía suponer también cambios
de las capacidades humanas
24 Ibid.
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El examen del cambio económico, c’est l’examen du mmouvement historique25. Es
decir que los cambios económicos, originaban cambios históricos. Este tipo de análisis,
permitió ir por delante de las explicaciones políticas sobre el destino de las diferentes
regiones, naciones o imperios y permite también comprender y situar los cambios sociales;
tanto los avances como lo retrocesos.
En la obra de Vilar, como en la de Marx, se afirma que la relación entre los
recursos naturales y la producción, es histórica y no solamente natural, lo que hace que la
ley rendements décroissant26no sea una donación absoluta ni inestable. Con ello, no
pretendía decir que el movimiento de expansión de la producción no fuese unido al avance
técnico, sino que trató de hacer comprender lo que eran los suplementos catastróficos, la
competitividad a diferentes escalas y la reducción voluntaria de la producción en nombre
de la racionalización económica y de una rentabilidad más individual o grupal, que social.
Pero lejos de determinismos y de análisis unilaterales, Vilar recuperó de Marx la
posibilidad de aprovechar un análisis donde todos los aspectos de la vida humana son
abordados.
Es aquí donde se ve que si los avance técnicos y económicos de las sociedades (y el
corazón de la historia), la reacción social, política, psicológica y espiritual podrían ser
también determinantes para contrarrestar las dichas tendencias, es decir para poder
analizarlas.
La elección de Pierre Vilar fue una historia cuantitativa, pero razonada. Una
historia erudita y minuciosa, que se apoyaba en las cifras y en las evidencias empíricas,
pero que lo completaba con una sabia subjetividad27.
Hay que señalar que defendió una historia de los precios y de los salarios, propuso
la discusión sobre la validez de las series construidas y abogó más por la micro-
observación28 que por la macro-observación.
25 LUNA, Pablo. F.: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV Congrés MarxInternational, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre, 01/10/2004).26 Ibid.27 FONTANA Josep: La historia de los hombres, Barcelona, Crítica,2001.28 Gracias a los libros de cuentas y a las estadística de las explotaciones.
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Si el movimiento general de los precios resultaba importante para el análisis de
Vilar, era sobretodo, el movimiento de cada precio lo que realmente resultaba ser lo más
interesante, y no solamente para el estudio de las economías de la antigüedad.
En contraposición a Keynes y a Hamilton, de cuyas obras fue gran conocedor,
Vilar remarcaba la necesidad de protegerse de toda la ilusión monoteísta que veía en la
pujanza de la moneda la fuente del progreso económico. Toda explosión de precios (y de
las consecuente ganancias), no deberían ser automáticamente identificados con el
crecimiento y menos aún con el desarrollo económico.
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SU OBRA
Para el análisis de las obras concretas de Pierre Vilar, hemos decidido centrarnos en
dos de ellas. El criterio que hemos seguido para la elección de estas dos obras, han sido
principalmente aspectos metodológicos y aspectos historiográficos. La razón por la cual no
hemos elegido su tesis para nuestro comentario, es que analizando su amplia obra, hemos
llegado a la conclusión de que a lo largo de ella, tal y como hemos comentado al analizar
los aspectos generales de su obra, los elementos metodológicos e historiográficos han sido
más importantes que los aspectos empíricos y de investigación.
PENSAR HISTÓRICAMENTE
El libro Pensar Históricamente, fue la anteúltima obra de Pierre Vilar en vida. A
nivel general podemos decir que se trata de una obra que gira entorno a un conjunto de
reflexiones y recuerdos basados en su itinerario profesional y personal a lo largo del siglo
XX.
Para llevar a cabo esta obra, Vilar utilizó como fuente primaría principalmente sus
recuerdos, eso si, sometiéndolos a la crítica y la verificación que estaban a su alcance. Sin
embargo, lo que aparentemente podría parecer una biografía más, llena de recuerdos
inconclusos y sin relación entre ellos, esta obra son una serie de recuerdos y reflexiones
relacionados entre si en base a su significado y su contenido pensados históricamente.
El libro se encuentra dividido en dos grandes partes. La primero de ellas, titulado
“Lo común y lo sagrado”, es la conclusión de un proyecto de obra anterior. La segunda
parte consta de cinco capítulos, ordenados cronológicamente29.
El primero de ellos abarca su infancia y su adolescencia, una época alejada de toda
influencia revolucionaria. El segundo, abarca la época de su paso por la Escuela Superior,
y su aprendizaje del oficio de historiador. El tercero de ellos, se centra en su estancia en
29 VILAR, Pierre. Pensar históricamente. Crítica: Barcelona, 1997.
Pierre Vilar
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España entre 1930 y 1936 y su relación directa con el Marxismo. La cuarta etapa, se centra
en hablar de la situación que se vivía en vísperas de la segunda guerra mundial. El quinto
punto, su paso por el cautiverio alemán en el campo de concentración30.
Tenemos la sensación de que Pierre Vilar intenta transmitir gracias a este libro, un
método para encarar la realidad cotidiana. Indispensable para el oficio de historiador que
se impone. Vilar desea que hasta donde le sea posible cada uno de nosotros debería
practicar la reflexión histórica, cuando pensemos en los acontecimientos de nuestras
propias vidas.
En este sentido, podríamos agregar que el empeño del historiador Pierre Vilar es
también una empresa eminentemente ciudadana, que recomienda no aceptar lo que parece
o nos es dado como inevitable y rechazar la reproducción de lo que la experiencia histórica
señala como deplorable.
El primero de los capítulos, tal y como hemos señalado previamente, se titula “Lo
común y lo sagrado”. En este primer punto, Vilar reconstituye gracias a sus recuerdos la
coyuntura mental e intelectual, especialmente francesa, de la víspera de la Primera Guerra
Mundial. En este sentido, insiste de manera particular en la transferencia que se opera
durante esos años de la noción de lo sagrado. Esta noción, que era frecuentemente
imputada a las monarquías antes de 1914, encuentra un nuevo destinatario en la patria y en
la nación contemporánea, favorecida además por un relativo retroceso de la religión a la
esfera de lo privado. Por ello, señala que la idea republicana frente al derecho divino es
aún minoritaria31.
La comprensión de tal coyuntura es clave, en la víspera de la Gran Guerra. Sobre
todo en caso de movilización general, cuando el estado aparece revestido de la
representación del grupo, en el contexto de la guerra. En dichas circunstancias, el temor de
la sociedad y el grupo sacralizados, es más grande que el temor físico. El temor de la
sociedad, podemos decir, que suele ser más fuerte que la razón laica, por lo que se deduce
que la creencia patriótica es más fuerte que cualquier otra cosa.
30 Ibid.31 Ibid.
Pierre Vilar
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Vilar concluye con este primer capítulo proponiendo las bases de lo que podría ser
un protocolo de acuerdo para el trabajo entre historiadores y sociólogos, que permitiese
abrir una vía en la sociología diferenciada de dichos grupos, tanto en el espacio como en el
tiempo.
La segunda parte del libro, nos hemos referido a esta previamente, se compone de
recuerdos organizados en cinco grandes puntos32.
El primero de ellos, “Una infancia y adolescencia en el contexto de la Gran
Guerra”, comienza presentándonos a un Vilar, hijo de maestros, en el seno de una familia
del sur de Francia. Su infancia, según nos relata, estuvo marcada por la Guerra Mundial y
sus consecuencias, lo que supuso que su educación primaria transcurriese entre profesores
partidarios y opositores del nacionalismo y el pacifismo. Al igual que muchos chicos de su
edad, Vilar se sintió entonces atraído por las causas antimilitaristas.
Para él, ni el comunismo ni la revolución bolchevique ejercieron sobre el ninguna
influencia en aquel primer momento. Confiesa en el libro, que deseaba convertirse en
profesor universitario y que para ello, quería ingresar en la Escuela Normal Superior de
París. Lo cual terminó por conseguirlo33.
El segundo capítulo, titulado “La Escuela Normal Superior y su aprendizaje del
oficio de historiador”, se centra principalmente en las reflexiones al respecto de su estancia
en dicha escuela, las características de la misma y su funcionamiento.
De sus palabras se refleja que ante las posibilidades de acceder a los mundos
parisinos, intelectuales y de relación que la Escuela ofrecía, Vilar prefirió permanecer al
margen. De esto deducimos que su estancia en la ENS se centro principalmente en
observar y aprender. Sin embargo también aprovechó para analizar los cambios que
experimentaba la coyuntura mental e intelectual de determinados personajes de su
alrededor, Sartre y Nizan entre otros. Los contactos que entablo, no se limitaron tan solo a
32 Ibid.33 Ibid.
Pierre Vilar
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la gente de izquierdas, también se relacionó con cristianos, entre ellos con Henri Irene
Marrou con quien preparó el agregation (concurso francés de acceso a la enseñanza)34.
A pesar de que se inscribió en un grupo de estudios socialistas, Vilar nunca se
sintió atraído por la actividad política en general.
Hacia al final de este punto, critica en cierta manera la indiferencia que mostraban
los intelectuales de la Escuela ante ciertos problemas que comenzaban a vislumbrarse en el
horizonte (fascismo, antisemitismo...).
El tercer capítulo, se titula “Descubrimientos españoles y reencuentro con el
marxismo”, el cual lo comienza situándose en la Barcelona de 1927, donde descubrió el
hecho catalán. La vitalidad de la idea catalán como motor colectivo sorprende al joven
intelectual que llega sin ningún a priori. Serán el encuentro y la acogida calurosa de
diversas personalidades catalanas y catalanistas los que brindan el cuadro a este
descubrimiento.
Ante esta situación que se le plantea, el talante de Vilar no es el dar lecciones, todo
lo contrario, trata de contagiarse lo más rápidamente posible del hecho y espíritu catalán
para comenzar a elaborar su tesis.
Según señala, de esos momentos lo que más tiempo le lleva es buscar las
relaciones entre nacionalismo y socialismo, para lo cual la obra de Henri de Mann “Mas
allá del marxismo” le permite reflexionar sobre la articulación entre la lucha de clases y la
lucha nacional.
La crisis de los años 30, le permitió confrontar sus reflexiones generales con el
análisis concreto de la realidad tanto en España como en resto de Europa. Según repite una
y otra vez, no es en el marxismo ni por él, que conseguía comprender la complejidad de la
realidad social. Pero sin embargo si que matiza que fue su propio encuentro con la
realidad, lo que le hizo medir la grandeza del pensamiento de Marx.
34 Ibid.
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Será en el año 1934, cuando los acontecimientos acaecidos en Barcelona, le
permitieron ejercitarse en una práctica de historiador calibrando el valor del testimonio
inmediato de los protagonistas.
Por ello, deducimos que su paso por España, fue un periodo formativo
fundamental.
El siguiente capítulo lo tituló “En la víspera de la Segunda Guerra Mundial”, en
esta época como consecuencia de la Guerra Civil española, Vilar tuvo que cambiar su
metodología de trabajo, y de hacer un trabajo de campo tuvo que pasar a centrarse y
limitarse al trabajo bibliográfico, donde descubre que Marx fue también un historiador
sobre España.
En cuanto a este periodo, Vilar destaca tres aspectos que llamaron especialmente su
atención.
Por un lado las diferentes expectativas de la gente ante los cambios que se estaban
produciendo en la sociedad a las puertas de la Segunda Guerra Mundial. Estas expectativas
abarcaban desde el miedo contrarrevolucionario hasta los cálculos maquiavélicos de varias
personas de su alrededor de los beneficios esperados.
Por otro lado, la actitud tan hostil de las autoridades francesas y hasta de los
propios campesinos de la Cataluña francesa hacia los emigrantes españoles. Tan solo el
carácter masivo de dicho exilio reveló al conjunto de la opinión pública francesa la
verdadera naturaleza del drama español. La solidaridad francesa para con la España
republicana, siguió siendo una causa eminentemente de izquierda y popular.
Por último, la aparición de algunos directores de conciencia en círculos parisinos,
que tratando de defender la religión, obviaron y hasta negaron situaciones tan escandalosas
como fue el propio bombardeo de Gernika.
Durante ese periodo, señala, los gobiernos europeos, atemorizados por todo
movimiento que de lejos o de cerca defendiese la idea del cambio revolucionario,
Pierre Vilar
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prefirieron organizar cualquier tipo de compromiso, a cualquier precio, con las potencias
del Eje, especialmente con la Alemania nazi.
El último capítulo, titulado “Cinco años de cautividad”, analiza su paso por el
campo de concentración nazi.
La guerra y el cautiverio le proporcionaron a Vilar otros momentos especiales para
su reflexión histórica. Sus convicciones pudieron confirmarse y enriquecerse. Pero las
consecuencias del conflicto fueron terribles. La lucha de clases y la lucha de grupos, dice
Vilar, desarrollaron sus contradicciones hasta las últimas consecuencias, alcanzando
ribetes dramáticos.
El historiador evoca su captura, en junio de 1940, por una columna del ejército
nazi: la humillación de la derrota y el descubrimiento de una de las Alemanias, vulgar y
militarista, que había propulsado a Hitler al poder; el racismo primitivo de los oficiales
nazis, pero también la solidaridad de clase que se establece rápidamente entre los militares
de los dos ejércitos contendientes.
Los largos paseos a pie de las columnas de prisioneros le dan la oportunidad de
verificar los primeros resultados de la derrota y de fijar en su espíritu algunos cuadros
sobrecogedores: cadáveres de soldados negros con uniforme francés, símbolo del
colonialismo, con la cabeza perforada y destrozada por una bala, símbolo del racismo nazi
Una de las cuestiones en las que frecuentemente pudo reflexionar, aunque sin llegar
a resolver todas sus interrogantes, se relaciona con las responsabilidades colectivas frente a
los actos perpetrados por los dirigentes políticos y militares. Si la nación es seguramente
responsable de su Estado en periodo de paz, qué puede decirse y deducirse de dicha
relación en periodo de guerra. Vilar piensa, por ejemplo, en la responsabilidad de los
habitantes que viven cerca o alrededor de los campos de internamiento y, más
generalmente, se interroga sobre nuestra responsabilidad colectiva ante lo que permitimos
que se haga, muchas veces en nuestro nombre.
Pierre Vilar
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Es todo el problema planteado por la categoría "pueblo" (y su responsabilidad
colectiva), que Vilar planteará nuevamente en sus conclusiones, al lado de otros problemas
derivados del vocabulario utilizado.
En cuanto a las conclusiones, tenemos que señalar que Pierre Vilar aprovecha este
momento para sugerir que no sólo el historiador sino también el ciudadano de la calle
deberían reflexionar sobre las palabras que se emplean, evitando especialmente la trampa
que consiste en identificar la palabra con la solución del problema planteado.
Por otro lado matiza que se le debe prestar una atención particular al uso que dan
los grupos (clases, medios sociales, asociaciones temporales, etc.) a dichos términos,
poniendo fecha y ubicando en el espacio los más precisamente posible. Una práctica
igualmente indispensable cuando se habla de imaginarios más o menos comunes y
psicologías nacionales, de solidaridades y antipatías colectivas y de la conciencia que se
tiene del mundo en que se vive.
CRECIMIENTO Y DESARROLLO
La obra “Crecimiento y desarrollo (Economía e historia, Reflexiones sobre el caso
español), es una recopilación de artículos publicados por Pierre Vilar desde 1950 hasta
1064. Estos artículos tienen como eje común la temática: la historia económica española.
El orden en el que se presentan estos, no es cronológico, sino que están
identificados en función de la etapa o estadio económico que aborda: crecimiento,
desarrollo, declive, crisis o progreso.
A nivel general, podemos decir que el libro consta de tres grandes partes.
La primera parte comienza con el estudio que en 1960 presentó en la conferencia
de Historia Económica celebrada en Estocolmo y que previamente (en otro apartado de
este trabajo) hemos hecho referencia. Este primer artículo, titulado Crecimiento económico
Pierre Vilar
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y análisis histórico” comienza abordando una serie de problemas que comentamos a
continuación.
El primero de los puntos nos sitúa en la visión que tanto los más ilustres
economistas como los historiadores han tenido a la hora de abordar los problemas
originados por el crecimiento.
En este primer punto también, Vilar trata de mostrar mediante el análisis de
diferentes soluciones propuestas por economistas e historiadores que por un lado los
lugares y los tiempos de intenso desarrollo material han sido favorables para un
acercamiento entre el pensamiento histórico y el pensamiento económico. Por otro lado
también podemos destacar, que en cuanto a las reflexiones sobre el crecimiento, también
los lugares y los tiempos anteriormente mencionados fueron favorables. Sin embargo para
los sistemas económicos y sociales donde se haya alcanzado un punto de equilibrio, y el
estancamiento sea posible, los elementos señalados previamente no lo son.
Según señala nuestro autor, el actual acercamiento entre economistas e
historiadores, así como el renovado prestigio de Marx, después de tantos años de
investigaciones, están en estrecha relación con el formidable dinamismo de nuestro último
decenio35.
En cuanto al estudio del pasado, señala que el problema consiste en estudiar un
crecimiento de grupo. Para ello, precisa que habría que usar la metodología de los dos
estadios, mediante la cual primeramente habría que dedicarse a la observación exhaustiva
de los datos y posteriormente a la interpretación de cada fenómeno que se debería
considerar resultante de todos los demás y poder así pasar también a ser considerado como
causa eventual de uno de ellos.
Así las cosas, si el grupo que se estudia, ha crecido a costa de otro, esta
metodología mostrara que uno solo entre los factores del crecimiento estará en pugna
35 VILAR, Pierre: Crecimiento y desarrollo. Economía e historia. Reflexiones sobre del caso español. Ariel,Barcelona, 1982.
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victoriosa con la ley de rendimientos decrecientes, con la existencia de límites biológicos y
con las contradicciones destructoras36 que vienen a equipararse con el progreso técnico.
La segunda parte del libro reúne diversos ensayos sobre las coyunturas de
crecimiento y desarrollo, haciendo especial referencia a dos casos españoles del siglo
XVIII el primero37 y del siglo XVI el segundo38.
Uno de los primeros ensayos es una critica a las tesis del profesor E. J. Hamilton,
que en otras ocasiones tan venerado ha sido por el propio Pierre Vilar.39 DE hecho, sus
propuestas de mejora van principalmente encaminadas a señalar que algunas de las
conclusiones a las que llego el profesor Hamilton en su obra War and prices, eran
demasiado simplistas40.
El segundo ensayo se centra principalmente en analizar la gran cantidad de
elementos que hay que analizar antes de afirmar que una afluencia de moneda produce
beneficios efectivos y una coyuntura de verdadero desarrollo41. Para ello, se apoyan en
Marx, Cantillon o Smith.
Por otro lado, los siguientes ensayos referidos a los casos barceloneses y
castellanos, se centran en analizar el crecimiento económico y las crisis generales.
Si nos centramos en primer lugar en comentar el auge económico catalán del siglo
XVIII, hay que señalar que según Vilar no es partidario de relacionar de forma directa
movimiento de pecios y movimiento de salarios. En este punto, Vilar manifiesta mediante
sus afirmaciones que está en desacuerdo con las tesis de Hamilton. Este desacuerdo se
centra principalmente en tres puntos.
En primer lugar, Vilar considera que inflación no tiene porque ser la mejor fuente
del crecimiento económico; en segundo lugar, que la disminución de los salarios es
36 Ibid.37 Transformaciones económicas, impulso urbano y movimiento de los salarios: la Barcelona del siglo XVIII.38 El tiempo del Quijote.39 El hecho que en este articulo critique a Hamilton no tiene porque querer decir que esté en desacuerdo consus tesis o con su metodología de estudio, simplemente que Vilar tiene otra.40 Op cit.41 Op cit.
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indispensable para un esfuerzo de equipamiento42; y en tercer lugar, que en la España del
siglo XVIII, la formación del capital no fue de origen interno, como afirma Vilar que
señala Hamilton, sino que fue originada por una acumulación de capitales de origen
colonial.
El siguiente capítulo, referido también a Cataluña pero en el siglo XV, se centra en
analizar las principales causas de la crisis. Este análisis, lo hace estudiando todos los
signos43. Este capitulo, lo relaciona con el de la crisis castellana del siglo XVII, señalando
como históricamente los enfrentamientos entre Cataluña y Castilla (España), han sido
principalmente provocados por los diferentes ritmos sociales que tenían cada uno de ellos.
Es decir que en vez de recurrir a las razones simplistas de enfrentamiento
nacionalista entre una comunidad y la otra, realiza un profundo análisis de las estructuras
sociales de cada una de las dos comunidades llegando a la conclusión anteriormente
señalada; es decir que los diferentes ritmos sociales o las diferentes etapas en las que se
encuentran ambas sociedades son las causas reales de estos enfrentamientos tradicionales.
Los últimos ensayos dejan de ser tan prácticos y cercanos a la realidad histórica,
para pasar al plano teórico.
Estos ensayos se centran en llevar a cabo una defensa de la ciencia histórica contra
la crítica epistemológica de Aron, de la sociología alemana y de las ciencias humanas en
general contra la afirmación de Sartre porque las reduce a un no saber.44
Cabe destacar la crítica que hace a Colin Clark y W. W. Rostov por el inapropiado
uso que han hecho de la historia cuantitativa y la estadística retrospectiva, ya que el uso
mecanicista que han hecho de ellas, ha hecho que se hayan relacionado acontecimientos o
momentáneas coyunturas económicas, con las mismas consecuencias en tiempos históricos
distintos, como si la relación entre acontecimiento y consecuencia fuese automática.
42 Op cit.43 Op cit.44 Op cit.
Pierre Vilar
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Por último, termina señalando como el progreso, que no es solo crecimiento,
debería ser una conquista de la historia, analizando todos los factores que la ciencia y la
consciencia del hombre pudiera analizar.
Pierre Vilar
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CONCLUSIONES
A modo de conclusión podemos comenzar por señalar que no cabe ni la más
mínima duda de la importancia de Pierre Vilar para la historiografía occidental del pasado
siglo.
Podríamos definir a Vilar como un observador atento a las diferentes épocas que le
toco vivir, a los medios sociales en los que le toco evolucionar y a los acontecimientos de
los que fue testigo. Además, a lo largo de su vida, estuvo animado de una curiosidad y
simpatía por la creatividad e inteligencia del ser humano, por su renaciente capacidad para
vencer y sobrepasar las dificultades.
Pensaba que cada hombre, cada ciudadano, tenía la capacidad y debía sentir la
necesidad de practicar la reflexión histórica, y que por medio de ella, cada uno de nosotros
podría ocupar su puesto en la vida pública, descartando los errores anteriormente
cometidos y evitando las negligencias y tragedias del pasado. Es decir, que quería disponer
al alcance de todos las lecciones del pasado.
Como toda persona comprometida con el entorno, el historiador Pierre Vilar, no fue
avaro en simpatía con el compromiso político. Su interés por los movimientos populares y
progresistas, tanto en Francia como en España, le llevaron a plantearse los problemas de
fondo relacionados con las estructuras fundamentales de la sociedad, la economía y los
factores de cambio45.
Un dato más que significativo, es que según se desprende de la multitud de
artículos redactados entorno a él, tanto los historiadores franceses como los españoles le
consideran como propio46. Es decir que tanto los de un lado de los Pirineos como los del
otro lado, lo toman como compatriota, señal inequívoca de su importancia historiográfica.
Lógicamente esto solo se entiende al analizar su carrera, porque el hecho de que naciese al
sur de Francia y comenzara a formarse allí, en ningún momento fue excusa para que
45 VILAR, Pierre: Iniciación al vocabulario del análisis histórico. Crítica, Barcelona, 1980.46 VILAR, Pierre. Pensar históricamente. Crítica: Barcelona, 1997
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cuando se puso a estudiar los “casos” españoles, y el catalán en particular, se integrara de
manera espléndida en la realidad contemporánea que le toco vivir y que quiso estudiar47.
Por otro lado, cabe decir que el hecho de que para algunos se enmarque dentro de la
escuela marxista48 por sus continuas referencias al materialismo histórico, no es argumento
suficiente apara algunos historiadores; y prefieren “situarlo” dentro de la escuela de
Annales y concretamente dentro de la tercera generación: La historia de las Mentalidades;
por sus continuas alusiones y la continua búsqueda de la “historia total”.
Su visión tan particular de la historia, donde cada aspecto, ya fuese material o
espiritual de la actividad creadora del hombre encontraba su lugar, le sirvió para ser
admirado por varias generaciones de historiadores.
Su historia, era una ciencia viva y al mismo tiempo razonada, era tanto critica como
constructiva, era una historia trabajada y elaborada con metodología.
Esto nos sirve de referencia para hacernos una idea real de la amplitud y magnitud
real de la obra de Pierre Vilar.
Sin embargo, y a pesar de que ha habido gente que le haya querido encasillar en
ello, no fue nunca ni un filósofo ni un pensador. En ningún momento se desprende de sus
palabras, actos, obras, etc. que buscara edificar una interpretación universal de la historia
del mundo, ni concebir un esquema o estructura filosófica para interpretar la historia. Es
decir que su práctica y su concepción de la historia se encontraron siempre alejadas de
toda voluntad de encerrar la realidad de un cuadro conceptual y mental elaborado “a
priori”49.
En relación con esto último, podemos descartar también las opinión de encasillar a
Vilar como un ideólogo; pero sin embargo si que podemos afirmar que su más constante
fidelidad fue al saber histórico y la comprensión activa de su tiempo y épocas, lo que se
resume en la formula “pensar históricamente”.
47 CONGOST, Rosa: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV Congrés MarxInternational, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre, 01/10/2004).48 El marxismo no fue para él un conjunto conceptual estático, ni recetas, ni esquemas, fraseología dereemplazo al análisis. Fue ante todo una teoría la de las sociedades en estado de cambio continuo.49 FONTANA Josep: La historia de los hombres, Barcelona, Crítica,2001.
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En definitiva, Pierre Vilar no se contento con proclamar la necesidad de una
historia total, sino que empezó a crearla desde el terreno mismo de la investigación,
poniendo en aplicación ideas y principios. Esto es, probando la vitalidad de la teoría
histórica marxista para entender el pasado e intentar conocer el presente.
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BIBLIOGRAFÍA
FLEICHER, Helmut: Marxismo e historia. Monte Avila Editores, Caracas, 1971.
"La Escuela de los Annales y la historia que viene", La historia que se fue,
Suplemento cultural del Diario de Sevilla, nº 99, 18 de enero de 2001
FONTANA Josep: La historia de los hombres, Barcelona, Crítica,2001.
GONZÁLEZ MÍNGUEZ, César :La contribución de los terceros Annales y la
historia de las mentalidades. 1969-1989, La otra historia: sociedad, cultura y
mentalidades. Vitoria, Servicio de Publicaciones de la Univ. del País
Vasco/EHU, 1993.
KOFLER, Leo: Historia y dialéctica. Amorrourtu, Buenos Aires, 1973.
LUCACKS, George: Historia y conciencia de clase. Sarpe, Madrid, 1984.
MARX, Karl y ENGELS, Federico: La revolución española. Ariel, Barcelona, 1970.
VILAR, Pierre: Marx y la historia, en Historia del Marxismo, tomo 1. Bruguera,
Barcelona, 1979.
VILAR, Pierre: Iniciación al vocabulario del análisis histórico. Crítica, Barcelona, 1980.
VILAR, Pierre: Crecimiento y desarrollo. Economía e historia. Reflexiones sobre del caso
español. Ariel, Barcelona, 1982.
VILAR, Pierre: Pensar históricamente. Crítica: Barcelona, 1997.
VILAR, Pierre: Memoria, historia e historiadores. Universidad de Granada/Universidad
de Valencia, Grana, 2004.
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CONFERENCIAS
CONGOST, Rosa: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV Congrés
Marx International, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre,
01/10/2004).
HALPERN PEREIRA, Miriam: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction,
(IV Congrés Marx International, Section Histoire, Universite ParisX-
nanterre, 01/10/2004).
LUNA, Pablo. F.: en Atelier Pierre Vilar, pour une histoire en construction, (IV Congrés
Marx International, Section Histoire, Universite ParisX-nanterre,
01/10/2004).