Post on 23-Jan-2018
Emociones y disciplina: charla para padres
Dr. Esteban Laso Ortiz
Www.psicologiaenpositivo.com
¿Qué es disciplina?
3
Dos acepciones
1. Sumisión a las reglas (azote de penitente)
2. Doctrina o ciencia
4
Disciplina:
Discere (discernir): separar con el cedazo la harina del salvado
5
Disciplina:
Discere (discernir): separar con el cedazo la harina del salvado
Ina: pertenecer
6
Disciplina:
Enseñar a una persona a nuestro cargo (discípulo) a diferenciar lo bueno de lo malo
En resumen, los momentos de disciplina deben entenderse como ocasiones de aprendizaje, no
de castigo o sometimiento
7
Disciplina:
Enseñar a una persona a nuestro cargo (discípulo) a diferenciar lo bueno de lo malo
En resumen, los momentos de disciplina deben entenderse como ocasiones de aprendizaje, no
de castigo o sometimiento
8
Disciplina:
Y ¿qué es lo que debe aprender el niño y enseñarle el padre/madre?
En la superficie, a resolver adecuadamente el problema o conflicto interpersonal en curso
En el fondo, y mucho más importante, a reconocer y regular sus emociones, y a hacerse cargo progresivamente de sus
necesidades subyacentes
9
Disciplina:
Por ende, cada situación disciplinaria es una oportunidad para que el niño aprenda a
consolarse y aceptarse a sí mismo,
A través del ejemplo del padre/madre, que hace y aprende exactamente eso al mismo
tiempo que enseña al niño.
Emociones y necesidades básicas
11
Los seres humanos tenemos dos necesidades relacionales básicas e ineludibles:
Sentirnos queridos,Sentirnos respetados.
12
Una emoción es simplemente una respuesta a una necesidad insatisfecha.
Cuando no nos sentimos queridos, nos entristecemos.
Cuando no respetados, nos enfadamos.Cuando ambas cosas persisten, nos
desesperamos.
13
Cuanto más imperiosa e insatisfecha la necesidad, más intensa la emoción.
Por tanto, controlar, acallar o ignorar la emoción sólo consigue intensificarla porque su necesidad subyacente permanece insatisfecha.
Berrinches y necesidades emocionales
15
Un berrinche es una manifestación de una o ambas necesidades insatisfechas.
En ese caso, castigar al niño sólo exacerba aún más su necesidad, añadiéndole miedo o
vergüenza a la tristeza o el enfado…
Aumentando la probabilidad de futuros berrinches y de diversas patologías o
problemas.
16
En realidad, un berrinche es una ocasión para que el niño aprenda a identificar y regular su
emoción, y hacerse cargo de su necesidad de fondo.
La condición indispensable para esto es que el padre/madre también lo sepa hacer consigo
mismo. El niño internaliza el ejemplo del padre, no lo que éste le dice.
17
Obviamente, un niño que no se siente suficientemente querido (padres distantes,
ausentes, críticos) o suficientemente respetado (padres autoritarios o violentos) tenderá a la
indisciplina.O lo que es peor, a la hiper-disciplina (o sea, al
auto-maltrato).
18
En definitiva, los problemas recurrentes de disciplina tienen siempre el mismo trasfondo:
una de las dos necesidades (o ambas) no está siendo satisfecha, lo que conduce a un reclamo
desesperado y desencaminado del niño/adolescente, lo que suscita una respuesta desesperada e impulsiva de los padres, lo que
empeora las necesidades de ambos…Un círculo vicioso.
Cómo disciplinar positivamente
20
Disciplinar positivamente consiste en criar hijxs saludables, competentes, solidarios y fuertes.
Esto requiere tres niveles de relación, en orden progresivo; si no se da el inferior, el superior no
funciona.
21
22
23
24
Una pequeña tarea
26
Antes de reaccionar de cualquier manera ante una conducta de tu hijo/a, pregúntate tres
cosas:
¿Qué tipo de relación quiero tener con mi hija/o durante nuestras vidas?
¿Qué mensaje quiero dar a mi hijo/a, no con mis palabras sino con mis actos?
¿Cómo debo responder ahora a esto para que avancemos hacia esa relación?
27
Primera pregunta
¿Qué tipo de relación quiero tener con mi hija/o durante nuestras vidas?
Pregúntatelo de verdad, de fondo. Imagina con lujo de detalles esa relación: cómo quieres
sentirte con tu hijo/a, cómo quieres que él/ella se sienta contigo… Hazla real en tu mente.
28
Segunda pregunta
¿Qué mensaje quiero dar a mi hijo/a, no con mis palabras sino con mis actos?
Ponte en su piel y mírate desde sus ojos. ¿Qué mensaje le estás transmitiendo (no con tus
palabras sino con tus actos)? ¿Es coherente con la relación que quieres sostener con
él/ella?
29
Tercera pregunta
¿Cómo debo responder ahora a esto para que avancemos hacia esa relación?
Desde esa sensación de la relación que quieres tener con él/ella, respóndele.
No respondas a menos que sea desde esa vivencia.