¿CUÁL ES EL RESULTADO DE TUS PENSAMIENTOS?

PENSAMIENTO: Potencia o facultad de imaginar, considerar, discurrir,

reflexionar o examinar. (R.A.E.)

CONOCIMIENTO: Noción y ciencia. (R.A.E.)

HEREJÍA: Sentencia errónea y pertinaz en contra de los principios

ciertos de la fe, de la ciencia, del arte, de una persona o de un animal.

(R.A.E.)

SUSTRATO: Estrato que subyace a otro y sobre el cual puede influir:

Terreno, asiento, sustancia, influencia. (R.A.E.)

El pensamiento es creado, guardado y suscitado por su creador. No es

materia de generación espontánea, no es un inóculo alienígena, ni un

dardo del Adversario.

Existen sustratos emocionales negativos que permiten que las sentencias

o pensamientos erróneos aniden, surjan y atormenten.

Algunos de ellos:

1. EL REMORDIMIENTO: Lo que pude haber hecho, pero no lo

hice (negligencia)

2. LA CULPABILIDAD: Lo que no debí haber hecho, pero lo hice

(imprudencia)

3. LA DESCALIFICACIÓN: Lo que hice, pero mal hecho

(impericia)

4. EL DOGMATISMO: Mi incapacidad de cuestionar mis propios

pensamientos, a favor del cambio, en aras de una mejor calidad de

vida para mí y para mis semejantes (rigidez)

La actitud (manifestación de la disposición del ánimo, R.A.E.) hace que

los pensamientos sean legibles, permitiendo elaborar predicciones,

proyecciones y estimaciones… Los demás no adivinan… ¡Me leen!

Los sustratos son determinantes en relación con los pensamientos y

éstos, en relación con la actitud.

Por un lado:

¿Qué fue lo que la astuta serpiente pudo leer en la actitud de los

habitantes de Gan Eden, permitiéndole hacerles un puntual y específico

planteamiento y lograr, exactamente, lo que, de antemano, había

predicho, proyectado y estimado?

Por el otro:

¿Qué fue lo que Hasatán no encontró para leer en la actitud de Yeshúa,

viéndose obligado a hacer un planteamiento sórdido, absurdo y al azar,

sin lograr, como era de esperar, absolutamente nada de lo que

pretendía?

El operar como centro de acopio de información, conocimiento,

doctrinas, filosofías, etc., etc., etc., puede producir erudición y, por qué

no, hasta insuflación de la soberbia y de la egolatría, pero no sabiduría.

En el planeta Tierra, las sabiduría es la esencia de aquél que, por estar

venciendo (estatizando, neutralizando, desintegrando y desalojando) sus

sustratos negativos, no se lastima a sí mismo, ni a los demás… ¡Es la

buena sombra del buen árbol!

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