Ciclo de charlas "Ciudades y escritores europeos del siglo XIX". III. El París de Víctor Hugo

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CICLO DE CHARLAS “CIUDADES Y ESCRITORES

EUROPEOS DEL SIGLO XIX”

Carmen Cabrejas Almena Museo del Romanticismo

El París de Victor Hugo

Victor Hugo, 1876 Étienne Carjat

(Biblioteca Nacional de Francia)

Victor Hugo Nacido en Besanzón en 1802, el menor de una familia acomodada de tres hijos. Por la profesión militar de su padre, su infancia se divide entre París, Nápoles y Madrid (donde se trasladaron en plena Guerra de Independencia). En 1813, se instala definitivamente en París con su madre, que se separa de su padre.

Con 13 años, comienza a componer sus primeros versos, de forma autodidacta. Concurre a varios concursos de la Academia francesa, recibiendo un premio en 1819. Animado por este éxito, abandona los estudios, fundando un periódico con sus hermanos y editando sus primeros poemarios, alcanzando un éxito de crítica y público sin precedentes con apenas 20 años.

En 1822 contrae matrimonio con Adèle Foucher, con quien tendrá cinco hijos. Continúa publicando sus poesías y practicando el teatro y la novela, convirtiéndose en un referente del Romanticismo. Forma parte de un círculo de artistas vinculado a este movimiento, como Liszt, Delacroix o Berlioz.

Desde la década de 1840 participará activamente en política, primero con un talante más conservador y posteriormente más liberal. Su enfrentamiento con Napoleón III le llevará al exilio entre 1852 y 1870. Al regresar a París, se convertirá en una de las figuras emblemáticas de la Tercera República francesa, al tiempo que continuará con su actividad como escritor.

Fallece en 1885, siendo enterrado en el Panteón de París, que recuperaba así su función como monumento funerario.

La obra de Victor Hugo Victor Hugo fue un escritor muy prolífico y su obra destaca por la abundancia

y variedad de géneros cultivados:

- Poesía: lírica (Odas y baladas, Las contemplaciones), épica (La leyenda de los siglos), política (Los castigos).

- Novela: Nuestra Señora de París, Los miserables.

- Teatro: Cromwell, Hernani, Ruy Blas. - Crónicas de viajes: El Rin, o la edición póstuma de varios cuadernos de sus

viajes (Cosas vistas, Alpes y Pirineos, Francia y Bélgica). - Discursos políticos: muchos de ellos recopilados en Actos y palabras.

- Otros: Correspondencia (recopilada de forma póstuma), Guía de París.

“El conjunto de mi obra será un día un todo indivisible (…)

Un libro múltiple que resume un siglo”

Carta a Jules Hetzel, 1859

Friedrich von Martens, Panorama de París, 1846

Salón de la Bilbioteca del Arsenal, restaurado por el World Monuments Fund

Siendo muy joven, Victor Hugo entró a formar parte de un importante círculo artístico y literario que congregaba a los principales representantes de la moderna tendencia del

Romanticismo (el salón “Él Cenáculo”, congregado en torno al escritor Charles Nodier en la Biblioteca del Arsenal). Él mismo se convirtió en uno de los agitadores fundamentales de este movimiento, con el prefacio de su obra Cromwell (1827) y el estreno de su obra

teatral Hernani (1830).

Victor Hugo y el Romanticismo en París

Tony Johannot Velada de artistas

(Biblioteca Nacional de Francia)

Salón literario en la casa de Victor Hugo, ca.1875. (Fuente: Whiteimages/Leemage)

Casa Museo de Victor Hugo: vista del Salón Rojo, donde celebraba sus veladas literarias

Jean-Jacques Grandville Los románticos desmelenados en la primera

representación de Hernani “Si la obra hubiera tenido seis actos hubiésemos caído todos asfixiados”

Benjamin Roubaud El gran camino de la posteridad

(Casa Museo de Balzac)

“En el ejército romántico como en el ejército que combatió en Italia todo el mundo era joven.

La mayor parte de los soldados no habían alcanzado la mayoría de edad, y el mayor del grupo era el general en jefe, que tenía veintiocho años. Esa era la

edad de Bonaparte y de Victor Hugo en esa fecha”

Théophile Gautier

Augustus Pugin “Salle Ventadour”, de Paris and its environs, 1831

Juliette Drouet como la princesa Negroni en la obra Lucrecia Borgia, ca. 1833

(Biblioteca Nacional de Francia)

Alfred Le Petit, El justiciero, L. Mouchot, Entrada de Victor Hugo en París el 5 de septiembre de 1870

“París es el centro mismo de la humanidad. París es la ciudad sagrada. Los que atacan París atacan en masa a toda la humanidad.

París es la capital de la civilización, que no es un reino, ni un imperio, es toda la raza humana en su pasado y su futuro”

Discurso tras la vuelta del exilio, 5 de septiembre de 1870

Nuestra Señora de París Con una primera versión publicada en 1831, y ligeramente ampliada en 1832, Nuestra Señora de París se convirtió en el mayor éxito de Victor Hugo, una de las obras más importantes del Romanticismo y una de las novelas más famosas de todos los tiempos.

A través de unos personajes inolvidables (Quasimodo, Esmeralda, Frollo) y un estilo sencillo y eficaz, la obra explora una gran variedad de temas complejos (la distinción de clases, el determinismo, la lucha entre el bien y el mal, el paso del tiempo, el amor), cobrando especial importancia la reflexión sobre la arquitectura medieval, de la que la catedral parisina se convierte en símbolo.

“Vista de la catedral de Notre Dame”, de Paris et les parisiens au XIXe siècle: moeurs, arts et monuments, 1865 (Biblioteca del Museo del Romanticismo)

“Todavía hoy la iglesia de Nuestra Señora de París continúa siendo un sublime y majestuoso monumento, pero por majestuoso que se haya conservado con el

tiempo, no puede uno por menos de indignarse ante las degradaciones y mutilaciones de todo tipo que los hombres y el paso de los años han infligido a este

venerable monumento”

Nuestra Señora de París, 1831-32

“Ha llegado el momento en el que ya no es posible para nadie permanecer en silencio. Hace falta que un clamor universal apele a la Nueva Francia a proteger a la antigua. Todo tipo de profanación, daño y destrucción amenazan lo poco que queda de los magníficos monumentos de la Edad Media, donde está la

huella de las viejas glorias nacionales, y que están unidos tanto a la memoria de reyes como a la tradición del pueblo”

“Guerra a los demoledores, 1825-1832”, 1832

“En espera de los monumentos nuevos, conservemos los antiguos. Inspiremos a

la nación, si ello es posible, el amor por la arquitectura nacional. Ese es, el autor lo declara, uno de los objetivos principales de este libro; ese es uno de los

objetivos principales de su vida.

Quizá ‘Nuestra Señora de París’ haya abierto realmente algunas perspectivas sobre el arte de la Edad Media, sobre ese arte maravilloso hasta el momento

desconocido por unos y, lo que es todavía peor, mal apreciado por otros. Pero el autor se encuentra muy lejos de considerar finalizada la tarea que se ha

impuesto de forma voluntaria. (…) Defenderá tan incansablemente nuestros edificios históricos como encarnizadamente los atacan los iconoclastas (…) Llega a ser una vergüenza para nosotros, hombres inteligentes que los vemos actuar y nos limitamos a abuchearlos. Y no nos referimos aquí solo a lo que sucede en

provincias, sino a lo que se hace en París, en nuestra puerta, bajo nuestras ventanas, en la gran ciudad, en la ciudad letrada, en la capital de la prensa, de

la palabra, del pensamiento”

“Nota a la segunda edición”, Nuestra Señora de París, 1832

Frontispicios de las ediciones ilustradas de 1836 (editor: Renduel) y 1844 (editor: Perrotin)

Imágenes de la edición de Nuestra Señora de París de 1877 (editor: Hugues) y de Victor Hugo et son temps de 1881 (editor: Baorbou)

Eugène Viollet-Le-Duc Estudios de Notre Dame de París, del Diccionario razonado de arquitectura francesa del siglo XI al XVI, 1856

Charles Meryon, “Le stryge”, en Aguafuertes sobre París, 1853 Charles Nègre, El vampiro, 1853

Algunas imágenes producidas por la Mission Héliographique Arriba: Henri Le Secq, imágenes de las catedrales de Amiens, Chartres y Reims (1852) Abajo: Édouard Baldus, Arco de triunfo de Orange (1851); Gustave Le Gray, Catedral de Angulema (1851) (National Gallery of Scotland; Metropolitan Museum of Art; Musée d’Orsay)

Charles Nègre La cathedral de Notre Dame, 1853

El ángel de la Resurrección en el tejado de Notre Dame, 1853 (The J. Paul Getty Museum)

Ilustración del capítulo “París a vista de pájaro” de la edición de 1844 de Nuestra Señora de París

“Hemos intentado reparar para el lector esta admirable iglesia de Nuestra Señora de París y hemos expuesto someramente la mayor parte de las bellezas que tenía en el siglo XV y que hoy le faltan: pero hemos omitido la principal; el panorama que sobre

París se tenía entonces desde lo alto de sus torres”

Nuestra Señora de París, 1832

La Île de la Cité desde Notre-Dame, 1855

La rue Lafayette, abierta en 1824, y ampliada en 1849, 1859 y 1862 Fuente: http://urban-networks.blogspot.com.es/

El viejo y el nuevo París Victor Hugo es considerado uno de los autores que

mejor describe el “Viejo París”, la ciudad tradicional a punto de desaparecer por las reformas urbanas que se suceden en el siglo XIX. Esa sensación se acentúa por la nostalgia con la que el autor describe la ciudad en varias de sus obras, creadas durante su exilio de casi

veinte años.

“Muchos años han pasado ya desde que el autor de este libro, que se ve obligado, a regañadientes, a hablar de sí

mismo, estaba en París. Desde entonces, París se ha transformado. Una nueva ciudad ha surgido, que para él

es en cierto sentido desconocida.

No es necesario para él decir que ama París; París es la ciudad natal de su corazón. A través de demoliciones y reconstrucciones, el París de su juventud, el París que

religiosamente atesora en su memoria, se ha convertido en un París de antaño.

Permitidle hablar de ese París como si todavía existiera”

Los miserables, 1862

Durante el Primer Imperio, Napoleón sueña con convertir París en la ciudad “más bella que pudiera existir”. Para ello, crea el cargo de Prefecto del Sena, que será el encargado del desarrollo urbanístico de la ciudad durante todo el siglo XIX.

Durante el mandato de Napoleón se acometen importantes infraestructuras públicas (nuevos cementerios, puentes, muelles) e intervenciones urbanísticas. La más destacada, la creación de la rue Rivolí y la reforma del complejo del Louvre y las Tullerías, con la creación del arco del triunfo del Carrusel.

Sin embargo, este periodo supone el inicio de un modelo de intervención agresivo sobre el viejo París, que tanto denunció Victor Hugo, y que continuaría a lo largo del siglo.

Transformaciones urbanas durante el Primer Imperio

(1804-1814)

Louis-Pierre Baltard Arco del triunfo del Carrusel, ca. 1808-1815

(Musée Carnavalet, París)

Charles Fichot París moderno. Las Tullerías, el Louvre y la rue de Rivoli, vistas desde el Jardín de las Tullerías, 1850

(Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos)

Vista actual de la Galerie Vivienne, pasaje comercial abierto en 1823

Durante la Restauración borbónica bajo la monarquía de Luis XVIII, se continúa la modernización de las infraestructuras (alcantarillado, pavimentación) y la creación de edificios públicos de ocio (teatros y pasajes comerciales fundamentalmente).

El impulso de reforma de la ciudad no fue tan marcado como en el periodo anterior, pero destaca la parcelación de la periferia para la creación de nuevos barrios (como la Nouvelle Athénes, Batignolles o La Poissonière, donde se inicia la construcción de la que será una de las vías fundamentales del nuevo París, la rue Lafayette).

Transformaciones urbanas durante la Restauración

(1814-1830)

George Michael Los molinos de Montmartre, ca. 1820 (Metropolitan Museum of Art, Nueva York)

Transformaciones urbanas durante la Monarquía de

Julio (1830-1848)

En este periodo, durante la prefectura del conde de Rambuteau, se vuelve a las grandes obras de infraestructura urbana: la apertura de grandes avenidas (rue d’Antin, rue de Soufflout, rue de Rambuteau) anticipa las iniciativas posteriores de Haussmann.

Es el momento además de la construcción de las grandes líneas ferroviarias que comunican el interior de París con los suburbios y pueblos de los alrededores, y de las estaciones como núcleos urbanos imprescindibles.

Una de las reformas más sorprendentes es la construcción de una nueva muralla por iniciativa del primer ministro Adolphe Thiers.

Charles Rivière Detalle de Gare du Nord, ca. 1864 (Grand Palais, París)

Coche a vapor y ferrocarril, ca. 1840 (Grand Palais, París)

“Una estación de ferrocarril, dondequiera que se sitúe, produce la muerte de un arrabal y da nacimiento a una ciudad. Parece que alrededor de esos grandes centros

del movimiento de los pueblos, al rodar de esas poderosas maquinas, al soplo de esos monstruosos caballos de la civilización, que comen carbón y vomitan fuego, la tierra,

llena de gérmenes, tiembla y se abre para absorber las antiguas moradas de los hombres y dejar salir las modernas. Las casas viejas se hunden y surgen las nuevas”

Los miserables, 1862

París, sus fortificaciones y sus suburbios, mapa de 1850 (Yale University Map Collection)

Transformaciones urbanas durante el Segundo Imperio (1848-1871)

La gran reforma de París se produce durante el Imperio de Napoleón III bajo la prefectura del barón Haussmann. Se produce la reforma administrativa de la ciudad, que pasa de 12 distritos a 20 a través de la anexión de los suburbios que habían quedado dentro de la muralla de Thiers. Además, se llevan a cabo grandes intervenciones que modifican la ciudad para siempre, convirtiéndola en modelo de urbanismo para todo el mundo:

- Apertura de grandes bulevares - Revalorización de los monumentos

como foco de perspectiva en esas grandes avenidas

- Desarrollo de importantes zonas verdes

- Aparición de un nuevo modelo arquitectónico

- Remodelación de la Île de la Cité Adolphe Yvon

Haussmann presenta al Emperador el plan de anexión de los suburbios, 1865 (Musée Carnavalet, París)

J.N. Henriot, A. Bes, F. Dubreuil, Mapa de París dividido en 20 distritos, 1863 (Fuente: Wikipedia-Geographicus Rare Antique Maps)

Bulevares que parten de la plaza Charles de Gaulle (antes, plaza de l’Étoile o de la Estrella)

Nadar El fotógrafo en un globo, ca. 1865

El Arco del Triunfo y los grandes bulevares desde un globo, 1868 (Caisse Nationale des Monuments Historiques et des Sites, París)

Nadar El fotógrafo con su esposa Ernestine

en un globo, ca. 1865 (National Gallery of Art,

Washington)

Vista de edificio en el Boulevard Haussman / Rue Auber Vista de los edificios de la Rue Eugen Sue / Rue Simart Fuente: http://urban-networks.blogspot.com.es/

Comparación de la Île de la Cité antes y después de las reformas de Haussmann

Charles Marville Rue des Marmousets, Île de la Cité, 1865

Rue des Ursins, 1865 (State Library Victoria)

Émile Bayard, Cosette barriendo, para la primera edición de Los Miserables en 1862

Los miserables Publicada en 1862, durante su exilio, Los miserables se convierte rápidamente en una de las obras más emblemáticas del autor. Ambientada en el París de la década de 1830, Hugo describe en este texto el viejo París de sus recuerdos, incluyendo algunos lugares pintorescos (como el elefante de la Bastilla o las alcantarillas, que se convierten en la época en foco de interés turístico). Su contenido social y su descripción de los ambientes marginales ejemplifican la preocupación del autor por la situación de los más desfavorecidos, acercándose al movimiento realista que estaba en auge en ese momento.

Jean-Antoine Alavoine, Último proyecto del elefante de la Bastilla, 1809-1810 (Museo del Louvre, París)

“Hace veinte años se veía aún en la plaza de la Bastilla un extraño monumento, el esqueleto grandioso de una idea de Napoleón. Era un elefante de cuarenta pies de alto, construido de madera y mampostería. Era sombrío, enigmático e inmenso. Un fantasma misterioso y poderoso, visible de pie al lado del espectro invisible de la Bastilla. Pocos extranjeros lo visitaban, ningún transeúnte lo miraba. Se estaba cayendo a pedazos (…)

¡Oh, utilidad increíble de lo inútil! Aquel monumento desmesurado que había contenido un pensamiento del emperador, se convirtió en la casa de un pilluelo. (…)” Los miserables, 1862

Augustus Pugin “Elefante de la Bastilla”, de Paris and its environs,

1810 (State Library of Victoria)

Émile Bayard Valjean carga a Marius por las alcantarillas, 1862

“París tiene debajo de sí otro París. Un París de alcantarillas; con sus calles, encrucijadas, plazas, callejuelas sin salida; con sus arterias y su circulación, llenas de fango. La historia de las ciudades se refleja en sus cloacas. La de París ha sido algo formidable. Ha sido sepulcro, ha sido asilo. El crimen, la inteligencia, la protesta social, la libertad de conciencia, el pensamiento, el robo, todo lo que las leyes humanas persiguen, se ha ocultado en ese hoyo. Hasta ha sido sucursal de la Corte de los Milagros. (…) La construcción de la cloaca de París no ha sido una obra insignificante. Los últimos diez siglos han trabajado en ella sin poder terminarla como tampoco han podido terminar París. La cloaca sigue paso a paso el desarrollo de París” Los miserables, 1862

Nadar, Primera serie de fotografías sobre las alcantarillas de París, 1861 (Caisse Nationale des Monuments Historiques et des Sites, París)

Nadar Primera serie de fotografías sobre las catacumbas de París, 1861

(The J. Paul Getty Museum)

“Ruta por las alcantarillas de París”, Reportaje de 1869 publicado entre otros

medios por el London Illustrated News

Charles Nègre El pequeño hurgador de basura, 1851 (Musée d’Orsay)

“El ser humano sometido a la necesidad extrema es conducido hasta el límite de sus recursos, y al infortunio para todos los que transitan por este camino.

Trabajo y salario, comida y cobijo, coraje y voluntad, para ellos todo está perdido. La luz del día se funde con la sombra y la oscuridad entra en sus corazones; y en medio de esta oscuridad el hombre se aprovecha de la debilidad de las mujeres y los niños y los fuerza a la ignominia. Luego de esto cabe todo el horror. La desesperación encerrada entre unas endebles paredes da cabida al vicio y al crimen...

Parecen totalmente depravados, corruptos, viles y odiosos; pero es muy raro que aquellos que hayan llegado tan bajo no hayan sido degradados en el proceso, además, llega un punto en que los desafortunados y los infames son agrupados, fusionados en un único mundo fatídico.

Ellos son "Los Miserables", los parias, los desamparados” Los miserables, 1862

Charles Nègre Deshollinadores en marcha, 1851

(Musée Carnavalet, París)

Honoré Daumier La lavandera, ca. 1863

(Musée d’Orsay, París)

“Mientras exista, a consecuencia de las leyes y de las costumbres, una condena social que, en plena civilización, cree artificialmente infiernos en la tierra, y enturbie

con una fatalidad humana el destino, que es divino (…) mientras haya ignorancia y

miseria sobre la tierra, los libros como este no podrán ser inútiles.”

Prefacio a Los miserables, 1862

Honoré Daumier, El levantamiento, 1860 (The Phillips Collection, Washington)

Cortejo fúnebre de Victor Hugo, 1 de junio de 1885

Muerte de Victor Hugo Durante sus últimos años de vida, Victor Hugo fue una figura capital de la Tercera

República, al mismo tiempo que una referencia fundamental en el mundo de la literatura. Por ello, su muerte el 22 de mayo de 1885 fue todo un acontecimiento en París. Su

funeral de Estado, celebrado el 1 de junio, congregó a millones de personas.

Catafalco en el Arco del Triunfo, 31 de mayo de 1885

Jean Paul Sinibaldi, Funeral de Victor Hugo en el Panteón

Nadar, Victor Hugo en su lecho de muerte, 1885 (Casa museo de Victor Hugo, París)

Victor Hugo, Recuerdo, 1864 (Casa museo de Victor Hugo, París)

RECURSOS DE INTERNET

• Página web de la Casa Museo de Victor Hugo en París

• Audios del ciclo de conferencias dedicadas al París del siglo XIX por el Comit´d’Histoire de la Ville de Paris (en francés)

• Selección de imágenes de la publicación “Paris et les parisiens au XIX siècle: moeurs, arts et monuments” de la Biblioteca del Museo del Romanticismo

• Paris guide par les principaux écrivains et artists de la France, 1867, con introducción de Victor Hugo

Bibliografía

• BRUSON, J.M., Théâtres romantiques à Paris: collections du Musée Carnavalet, Musée de la vie romantique, 2012.

• CALVELO, J., Paris, capitale du relief: une photographie de la ville au quotidien en 1860, Éditions de l’Amateur, 2010.

• HEILBRUN, F., Charles Nègre: photogrpahe 1820-1880, Ministère de la Culture et de la Communication, 1980

• KENNEL, S., Charles Marville: Photographer of Paris, Metropolitan Museum of Art, 2013.

• Le peuple de Paris au XIX siècle: des guinguettes aux barricades, Musée Carnavalet, 2011..

• SEIGEL, J.E., Bohemian Paris: culture, politics and the boundaries of bourgeois life, 1830-1930, Johns Hopkins University Press, 1999.

Puedes encontrar todas las presentaciones de nuestros ciclos de charlas en:

www.slideshare.net/MRomanticismo

También puedes informarte sobre nuevas charlas y actividades en:

http://museoromanticismo.mcu.es/

¡Gracias!